El Alfa y La Ninfa Lib 1españ9l

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Sinopsis
Adelie estaba acostumbrada a permanecer en las sombras y vivir una vida

normal en su manada. Pero todo cambia cuando su pareja, el Alfa, la rechaza y
necesita encontrar una nueva manada para vivir.
Encuentra un nuevo hogar en la manada Alpha Kairos.
Kairos, un lobo conocido por su crueldad y mal genio, termina siendo el

compañero de segunda oportunidad de Adelie. Pero, ¿serán capaces de hacer
que las cosas funcionen? Como el miedo de Kairos al pasado le impide abrirse,
y Adelie está a punto de descubrir que tiene poderes con los que nunca soñó.
Clasificación de edad: 16+
Libro electrónico Producido por: Galatea Books y

SBD https://t.me/GalateaLivros
Resumen del libro

Libro 1
Libro 2 - No publicado
resumen
1. Adelia Murrell
2. Cairo García
3. Unirse a un nuevo paquete 4. Reglas
Alpha 5. Hablar con Helen 6. Boot
Camps 7. Prepararse para la Ceremonia
8. La Ceremonia
9. Castigo alfa 10. El

primer ataque 11. Paquete
de curación
12. La profecía de Adelie
13. El secreto de
Alpha 14. Entrenando a
Adelie 15. Rosas 16.
Cena con Alpha 17. El
verdadero yo de Adelie 18. Los
dos compañeros de Adelie 19. Los
verdaderos sentimientos de Kairos 20. El
entrenamiento de Adelie
21. Adelia y Hans
22. Elige
23. El mito de Aldred 24. La

marca 25. La traición de
Jasmine 26. Vuelve a mentir
27. Los cambios de Adelie

28. El regreso de Raphael
29. Los vampiros

30. Maestro de los vampiros
31. De camino a la casa de Aldred
32. ¡Ataque!
33. ¡Hola Aldred!
34. Decir adiós 35.
Muerte 36. Deseo
de muerte 37. Kairos
y Adelie 38. Epílogo
Capítulo 1
ADELIE MURRELL
ADELIA
Mi madre siempre me enseñó a ser discreto. Esconderme bajo mi enorme

capa negra que cubría la mitad de mi cara tanto como fuera posible, y mirar
hacia arriba lo menos posible.
Siempre obedezca las reglas y no sea imprudente, nunca responda,
no hacer amigos. Y por último, mantén mi secreto a salvo.
Y todo esto fue para no llamar la atención.
Si la gente supiera lo que soy, representaría un peligro para mí y para
la gente que me rodea y me obligaría a hacer cosas horribles.
Las personas que me buscan quieren usarme como arma de guerra y

crear más seres como yo. Potentes máquinas de combate. Al menos eso
es lo que ella siempre decía.
La función de la capa era principalmente porque mi madre decía que mi
belleza era peligrosa para mí, que otras personas podrían intentar usarla.
La gente juzga a los demás por su apariencia, si me vieran, instantáneamente
querrían acercarse.
Las ninfas suelen nacer con caras muy amables y acogedoras. También
son muy bonitos, al menos eso dicen todos los libros que he leído. Mi madre
también me dijo que estoy dotado de los dones más preciados, pero de qué
sirve vivir mi vida en las sombras, eso no fue un regalo, fue una maldición.
Mi vida fue una tragedia.
soy una ninfa Una ninfa es un espíritu protector de la naturaleza.

Mi objetivo es proteger los bosques y las plantas de mi manada, la manada
Silver Moon. Cada luna llena salgo a hacer un ritual, agradeciendo a la
Madre Naturaleza por sus regalos para con nosotros. necesito mantener
mi bosque limpio y vivo mientras estoy en este lugar. No porque mi madre me haya
enseñado, sino porque eso es lo que hacen las ninfas, está en nuestra naturaleza, lo
hacemos inconscientemente.
Nadie sabía que yo era una ninfa, solo mi madre y mi padre.
Las ninfas se llevan bien con los hombres lobo, pero necesitaba mantenerlo en secreto
para que hubiera menos posibilidades de ser capturada, razón por la cual mi madre
también lo mantuvo en secreto. No me importaba mucho que me hicieran daño. Me
importaba que hicieran daño a los demás.
Nunca he conocido a otras ninfas además de mi madre. ella era la mitad

lobo, ninfa mitad agua. Es importante enfatizar aquí la palabra 'era'...
Mi madre murió cuando fuimos atacados en nuestra antigua manada, la manada
Sombraluna. Ella murió por mi culpa, protegiéndome. Un guerrero se asustó de mí y
trató de matarme. En cambio, él
delicado.
Mi padre siempre ha dejado claro que mi madre no es responsable de su muerte y

sigue diciendo que no fue culpa mía. Pero nunca puedo quitarme la culpa. Mi madre
era una ninfa y las ninfas son tan indulgentes que estaba en su naturaleza no culparme.
Tengo tres partes para mí. En primer lugar, soy una ninfa del bosque. En segundo
lugar, una pequeña parte es un lobo. Esta parte es tan pequeña que ni siquiera puedo
transformarme. Tengo un lobo en mi alma, pero no en mi cuerpo.
Me entristece pensar que mi loba, Madeline, no tiene forma de loba. Ella ha dejado
en claro innumerables veces que esto está en línea con su forma de vida. Si pudiera
hacer algo para darle una forma de lobo, lo haría.
La tercera parte de mí es de mi padre. No veo a mi padre a menudo porque su

trabajo requiere viajar mucho. Lo encuentro solo cuando alguien a mi alrededor muere.
Mi padre es la Muerte.
Tu trabajo es recoger las almas de los cadáveres. Almacena estas almas en un
recipiente de vidrio y coloca cada una de acuerdo con su árbol genealógico y color de
alma. Si una persona ha sido mala en su vida, su alma es negra; si era buena, es
blanca. Pero en la vida no sólo existe el
bueno o malo. Hay principalmente cientos de tonos de gris.

La muerte tiene dos formas.
Su primera forma es un esqueleto con una capa negra. El que todo el
mundo conoce en los libros. Su segunda forma es similar a la humana. Se
parece a cualquier otra persona normal.
Nadie puede ver a la Muerte en un día básicamente normal, pero como
soy su hija, puedo verlo cuando está cerca. Siempre se me acerca cuando
está cerca y me pregunta cómo estoy. Sé que él realmente me ama.
Mi madre fue una excepción, y ella también pudo ver la Muerte, mi padre
y mi madre no sabían cómo era posible. Pero eso fue lo que los enamoró. La
muerte es inmortal y finalmente encontró a alguien que pudiera verlo.
Finalmente encontró el amor.
Otras personas vieron la muerte cuando estaban muriendo. para siempre
gente, mi padre ofrece un deseo de muerte.
El deseo de muerte es un deseo que la Muerte cumple a petición de una
persona moribunda. Mi padre me dio el deseo la última vez que lo vi, ya que
puedo verlo, puedo usar el deseo siempre que esté cerca.
El deseo de muerte puede hacer casi cualquier cosa excepto hacerte

inmortal o traerte de vuelta a la vida. Me dijeron que usara el deseo sabiamente
porque aunque soy un hijo de la Muerte, solo tengo uno.
De mi padre heredé poderes de magia negra.
Estos poderes me hacen invencible, pero mi madre me prohibió usarlos.
Me dijo que usara mis poderes solo cuando hubiera gente de confianza
alrededor, pero eso nunca sucedió. Lo único que me dejó usar fue el poder
curativo. Puedo curar heridas en humanos, pero para hacerlo debo sentir el
mismo dolor que siente la persona herida. Los árboles y las plantas enfermas
no me hacen sentir dolor al sanar. Todavía no sé hasta dónde llega mi poder
curativo.
La parte loba de mí es la que me hizo tener una pareja. Y fue este tipo el
que me rompió por completo y todavía me está lastimando, causándome un
dolor horrible hasta el día de hoy.
Los miembros de la manada Sombraluna siempre me evitaban porque
Pensaban que era raro, no hablaba mucho, siempre usaba capas y pensaban
que era débil porque no podía transformarme. Pensé que todo cambiaría
cuando encontré a mi compañero y en mi decimoctavo cumpleaños encontré a
mi compañero, Alpha Hans.
Estaba parado frente a mi casa. El olor más increíble llenó mi nariz y el
hombre más hermoso estaba frente a mí. Mi parte de lobo se volvió loca en mi
cabeza, corriendo de un lado a otro.
¡Amigo! ¡Amigo! Mi loba Madeline cantó mientras mi madre colocaba sus

manos sobre mis hombros detrás de mí. Ella debe haber sabido lo que estaba
pasando, era mi cumpleaños y sabía que esto iba a pasar.
“Alpha Hans…” dije con incredulidad, levantando mi cabeza hacia él.
¿Cómo puedo ser tu pareja? Tal vez estoy soñando.

Él también es una de las personas que me insultó, pero estaba lista para
perdonarlo, después de todo él sería mi compañero, no es como si pudiera
luchar contra el vínculo. Él fue hecho para mí. y solo para mi
“Tenemos que hablar, Adelie. Vayamos a un lugar más tranquilo —dijo y
comenzó a caminar hacia el bosque, sin siquiera mirar para asegurarse de que
lo seguía, pero lo hice.
Tampoco quería hablar con mi pareja por primera vez frente a mi madre. Le
di una última mirada a mi mamá y sonreí como un loco. Ella siempre hablaba
de lo feliz que era con mi padre y yo también quería ese tipo de amor.
Caminamos por el claro del bosque, él no dijo nada en todo el tiempo. Pero
estaba tan feliz como podía estar, mi pareja estaba aquí, conmigo. Decían que
un compañero es aquel que te amará incluso después de la muerte. Ni siquiera
la muerte puede intervenir entre los lazos de la pareja.
Alpha Hans se volvió hacia mí, pero no con la expresión que esperaba.
Quería que corriera hacia mí, me tomara en sus brazos, pero su mirada parecía
fría, como si yo fuera cualquier otro miembro de la manada o incluso menos.
“No puedo tenerte como mi compañera, Adelie. Lo siento, eres débil y ni

siquiera estás en forma de lobo. que tipo de luna
¿usted sería? Me escupió esas palabras con disgusto, y envió miles de agujas afiladas
a través de mi pecho.
Él continuó. “Eres odiado en esta manada. Y la manada necesita a alguien a
quien puedan admirar y tú no eres uno de ellos. “Mi corazón se rompió en un millón
de pedazos. ¿No fue doloroso para él decir esas palabras?
“¿Qué?” Pregunté, sin creer lo que estaba escuchando, “Puedo cambiar a Alpha.
Y cae de rodillas. “Puedo ser lo que quieras que sea, lo prometo”, grité.
Por supuesto que no podía cambiar, pero lo necesitaba. No podía dejar a mi

compañero, el que estaba hecho para mí, para comprenderme, para amarme, sin
importar nada.
“Yo, Alpha Hans Lightwood, te rechazo, Adelie Murrell, como mi compañera y
Luna de la Manada Sombraluna.” Cuando dijo esas palabras mi visión se nubló por
un segundo.
Mi corazón se sentía como si se hubiera roto, todo lo que sentía era dolor. Fue el dolor más
horrible que jamás haya sentido.
- ¡No! Grité de ira, tristeza y decepción. Y yo no podía controlar mis poderes.
Humo negro salió de las yemas de mis dedos, lo que hizo que Alpha Hans retrocediera
aterrorizado y otros lobos se me acercaron desde diferentes rincones.
Uno se abalanzó directamente hacia mí, pero lo noqueé con una ráfaga de humo
negro. Nunca supe que podía hacer esto. El lobo aulló y los demás retrocedieron
asustados. Yo también estaba asustado, asustado de lo que podría hacer.
Mi madre corrió hacia mí. - ¡Mami! Grité mientras ella estaba

en poder de Alpha Hans.
Actuó como si pudiera lastimar a mi propia madre.
- ¡Correr! "¿Eso era todo lo que iba a decir?" Siempre he sido obediente a
mi madre. Pero esta vez me tomó un tiempo entender. Iban a hacerle daño.
- ¡Corre Adelia!
Todavía estaba parado en el mismo lugar, pero Alpha Hans se acercó para verme
dejar a mi madre. Caminó lentamente y levantó los brazos en señal de rendición, su
expresión casi culpable.
- ¡Fenómeno! dijo un guerrero a mi lado. Todavía estaba en su forma

humana y me arrojó un cuchillo, pero algo impidió que el cuchillo me
golpeara. Mi madre había bloqueado el cuchillo cuando saltó frente a mí. El
cuchillo estaba en su pecho cuando cayó al suelo.
Vi a la Muerte frente a mí. ¡No! Eso significa que se ha ido. No te la

lleves. Casi le rogué como si pudiera hacer algo.
Mi padre me miró — ¡Corre! gritó, haciendo temblar el suelo, nadie más

lo vio excepto mi mamá y yo, nunca me había gritado en toda mi vida.
Dejé caer una bomba de humo que me mantuvo protegido, no pensé en

hacerlo, simplemente sucedió.
Corrí, corrí hasta que me fallaron los pies y estaba seguro de que había
dejado el suelo Sombraluna. Corrí como un cobarde. Mi madre me protegió
pero simplemente la dejé morir, ni siquiera le dije adiós, ella era la única
para mí y ahora se ha ido.
Ha pasado un año y sigo en el Silver Moon Pack. Alpha Archibald me
llevó a su manada en el momento en que me encontró vagando por su
bosque.
Es el alfa más amable que he conocido. Ninguno de los miembros de su
manada me llamó raro o débil por no convertirme en un lobo, solo me
miraron por mi capucha negra.
Incluso Alpha Archibald sin saber quién era yo. Cuando preguntó por mi
compañero, le dije que estaba muerto. Eso fue más fácil que admitir que
había sido rechazado.
Me da tanta vergüenza que mi propia pareja, la que estaba destinada a
compartir la vida, me haya rechazado. Si no soy lo suficientemente bueno
para él, no soy lo suficientemente bueno para nadie.
Hoy era luna llena y necesitaba agradecer a la madre naturaleza. Ya
estaba oscuro y me aseguré de que mis compañeros de cuarto estuvieran
dormidos. Vivía en una de las casas de carga con hombres lobo que no
tenían pareja.
Hice una poción con algunas plantas del bosque y la puse en sus
bebidas para ayudarlos a dormir mejor. No podían saber que yo era
salir y además, no les dolía nada, siempre se preguntaban por qué dormían
tan profundamente en las noches de luna llena.
Salí de la empacadora con mi larga capa negra con capucha y mi

vestido blanco hasta los tobillos. Siempre usé vestidos largos, mi madre
siempre los usó y quería seguir usándolos en su honor.
Mi madre solía decir que los vestidos largos y hermosos eran
característicos de las ninfas. El estilo de las ninfas era más medieval que
moderno. Traté de usar ropa normal, pero siempre me sentía fuera de lugar.
Todos estaban dormidos y nadie estaba fuera de las empacadoras
porque nadie se iba en ese momento. Los guardias estaban patrullando las
fronteras de nuestra manada y yo no iría tan lejos de todos modos, he
podido escabullirme durante aproximadamente un año, nunca me han
atrapado.
Caminé por el bosque hasta mi lugar ritual habitual. Cuando llegué, me
quité la capa. Y dejé que mi cabello castaño cayera por mi espalda.
Siempre me propuse lucir aún más bonita en las noches de luna llena para
que la Madre Naturaleza supiera que era digna de ser una ninfa.
Me senté al lado de un árbol enorme rodeado de flores moradas. Este
era el árbol más grande de todos, era poderoso en su espíritu y había visto
muchas cosas.
Aprendí mucho con solo escucharla a ella y a otros árboles, son los
que me hicieron entender mis deberes como ninfa del bosque. Podían
hablar conmigo y me enseñaron a cuidar de todos.
Cerré los ojos y agradecí todo lo que me rodeaba. Me encargué de
preguntar a los árboles si pasaba algo fuera de lo normal, no solo me
hablaban de su bienestar, sino también de quién estaba entrando al
bosque, hoy solo era alguien cercano a nuestro territorio.
Como dije gracias, mi cuerpo comenzó a llenarse de energía desde las

raíces.
Siempre he cuidado el bosque para que no haya árboles tristes y
plantas débiles. Ese era mi propósito. Yo era un sirviente de los bienes del
bosque.
Me sentí como si hubiera nacido de nuevo. Las lunas llenas fueron la razón por la cual
que estaba dispuesto a vivir. no tenia a nadie mas en mi vida,

excepto la naturaleza.
Me preguntaba acerca de mi compañero Hans, él nunca se fue de mi

mente. Quería hacer algo para detener este dolor, pero no podía y realmente
no quería que desapareciera.
Incluso si lo único que queda de mi compañero es el dolor, todavía lo
quiero. Incluso si sentía el dolor insoportable de él marcando y apareándose
con otro lobo. El dolor me recuerda algo que casi tuve.
Caminé por el bosque finalmente libre de mi capa. Respiré el aire fresco
con la cabeza en alto. Giré y dejé que el viento soplara a través de mi cabello.
El bosque era mi lugar favorito, mi fantasía favorita de felicidad.
Cuando finalmente llegó el momento de partir, agarré mi pesada capa,

pero mientras lo hacía, escuché pasos que venían hacia mí.
Instantáneamente, miré hacia arriba para ver a la persona caminando.
Era un hombre, era grande y podías ver sus músculos incluso a través de
toda la ropa que vestía.
Era un hombre lobo y no ser musculoso sería extraño dado que todos los
lobos entrenaban normalmente.
Su cabello era castaño oscuro, rizado y lo suficientemente largo como
para casi llegar a sus ojos, era más largo en la parte superior y más corto en
los lados, y estaba peinado hacia el lado derecho. Sus ojos eran perfectamente
color avellana, incluso olvidé mi capa.
Me di la vuelta y me puse la capa y la capucha y bajé la cara, sabía que
me vio lo suficiente porque hicimos contacto visual directo.
Algo andaba mal con él, algo en él era diferente, extraño pero atractivo,
su presencia parecía tranquila pero tan extraña.
Lo escuché acercarse y lo olí. Era una delicada mezcla de pino con
bergamota y un poco de menta, nunca había olido eso antes, pero solo un
aroma me hizo sentir así. Y fue entonces cuando dejé que mi lobo me hablara.
¡Compañero!
Capítulo 2
KAIROS GARCÍA
KAIRÓS
Mi lobo me estaba hablando. Para otros hombres lobo, eso no sería

extraño. Mi lobo Kye me estaba hablando por primera vez en dos
años.
Mi lobo estaba enojado conmigo y probablemente continuó. Yo

tampoco me perdoné, yo era la razón por la que me estaba dando el
tratamiento silencioso. Lo lastimé de la peor manera conocida por otros
lobos. Le quité a mi pareja.
Hoy mi lobo decidió hablar, no respondió ninguna de mis preguntas
y ni siquiera me reconoció.
Ni siquiera tenía sentido. Siguió divagando, no podía entender qué,
pero me alegraba de que estuviera diciendo algo. Incluso cuando
estaba en mi forma de lobo, no me había hablado antes.
Estaba sentado en mi oficina cuando mi Beta Raphael entró con un

solo golpe. Raphael fue el único al que se le permitió entrar en mi
oficina sin mi consentimiento. Antes de la tragedia de hace dos años
era mi amigo más cercano, pero ahora no era digno de tener un amigo,
era mejor no estar con nadie.
— ¡Alfa! Recibí un mensaje de la manada Sombraluna.
- ¿Qué es? “No recibimos mensajes con mucha frecuencia debido
a la reputación de nuestra manada.
“Su Alfa y sus mejores guerreros quieren venir y entrenar aquí.
Esto era algo nuevo, nadie más quería venir aquí voluntariamente,
antes había decenas de mensajes de otras manadas.
Ahora han escuchado miles de historias sobre mí y mi manada.
Éramos una maldita manada ahora, y pocas personas fuera de la mía
manada sabía exactamente lo que pasó para que nos llamaran así y nadie
puede hablar de esa noche.
Pensé por un segundo levantarme de mi silla de cuero y caminar hacia una
ventana que estaba detrás de mi silla. "¿De qué nos servirá?" Pregunté, mirando
hacia abajo a las empacadoras en la distancia.
No viví con el resto de la manada. Vivía solo en mi enorme casa. Incluso mi

hermana Fala no vivía conmigo. Quería que viviera aquí conmigo, pero ella
pensó que era demasiado deprimente, así que de buena gana vivió en la
empacadora.
Ella dijo que este lugar ha perdido toda su gloria y gracia. Y estaba lejos de
todas las otras casas, tal vez por eso me gustaba tanto. Me encantaba estar
aislado.
Me gustaría estar solo tanto como sea posible, ahora más que
nunca.
Mirando desde arriba, vi a algunas personas caminando. Mi manada, la
Manada de los Caminantes Nocturnos, una vez tuvo más de dos mil miembros,
ahora solo había ciento ochenta y uno, sin contar a los niños.
Tenemos muchos hijos porque la mayoría de ellos perdieron a sus padres

en una pelea mientras estábamos protegidos, y el resto son solo recuerdos de
hombres lobo fallecidos.
Todo esto fue mi culpa. Los miembros de mi manada estaban ciegos si no
vieron que era mi culpa, podría haberlo detenido antes, pero estaba cegado por
el amor. Nunca podré perdonarme a mí mismo por lo que hice.
Por lo menos, gané aún más respeto después de esa noche que causó todo
esto, y lo odié. Tantas personas fueron asesinadas, muchas perdieron a sus
seres queridos. Y todavía me elogiaron.
“Alpha Hans dice que nos dará una paga justa. Mi Beta explicó. “Alfa,
nuestros guerreros son probablemente los más fuertes que existen, otras
manadas nos temen. Esto les permitirá saber que somos dignos de confianza,
incluso útiles.
Mi Beta continuó. “Queremos expandir nuestra banda tanto como sea
posible. Alpha, los miembros de la manada merecen esto, ser vistos como
algo más que prisioneros.

'¿Es eso lo que piensas?' ¿Qué son los presos? - me dije mas a mi mismo
mismo.
Raphael se rió detrás de mí. — Las historias nunca paran, nos tienen
tanto miedo que usan cualquier excusa para odiarnos.
Mi Beta era inteligente, pero también pensaba que éramos amigos,
qué estúpido. Ha estado conmigo desde que recibí mi título Alpha por
primera vez. Hasta el día de hoy me pregunto por qué no me temía.
"¿Nos tienen miedo?" Pregunté, pero mi Beta pareció dejar escapar
un suspiro confuso. “Nunca tuvieron miedo de nuestra manada, así han
sido los últimos dos años.
“Alfa, no saben lo que pasó. todos tienen uno
historia diferente a la de esa noche. Eres un mito para todos.
No quería pensar en esa historia.
Todo lo que tenía que hacer era hacer lo que fuera mejor para mi
manada: avisarle a Alpha Hans que estoy de acuerdo y le enviaré un
mensaje de texto con las fechas en que pueden venir y entrenar.
Mi Beta asintió con satisfacción y salió de la oficina.
Era casi medianoche, pero mi lobo seguía paseando. Algo le estaba

pasando. Tal vez perdió la cabeza por no hablar durante tanto tiempo.
¿Qué es? Le pregunté.

¡Correr! Vamos a correr. Profundo en el bosque. Hay este lugar.
Un árbol enorme. Luna llena. Está aquí. ¡Ahora! Vamos ahora...
Estaba actuando raro, pero al menos me estaba respondiendo. Lo
menos que podía hacer era hacer lo que estaba diciendo. Tal vez me
hablaría completamente de nuevo.
Dejé todo mi trabajo a un lado e hice lo que dijo mi lobo. Tomé una
bolsa para llevar mi ropa conmigo. No sabía hasta dónde me llevaría mi
lobo, pero no importaba, lo mínimo que podía hacer por él era esto.
Al entrar en el bosque, me quité la ropa y la puse toda en mi bolsa y

cambié a mi forma de lobo negro como ámbar negro y agarré la bolsa con
los dientes.
Dejé que Kye tomara el control total. Corría como un

Loco. Estábamos lejos de nuestra manada ahora.
Kye se acercaba al territorio de las manadas vecinas.
Desacelerar. Estamos fuera de nuestra manada, le dije, recuperando el control.
Tenemos que ir allí, dijo.

¿Por qué? Yo respondi.
¿No puedes sentirlo? El dice.
Existía esta peculiar atracción hacia nuestra manada vecina, pero
solo en una dirección.
No sabía qué era, posiblemente podría estar yendo hacia mi muerte, incluso
si supiera que esta manada era amistosa e inofensiva.
Me puse la ropa y mis pies caminaron por su propia cuenta. Este bosque
era muy hermoso y limpio. Como si no hubiera ramas ni hojas en el suelo. No
se parecía en nada al bosque de mi manada. Incluso podrías imaginar que
alguien estaba cuidando este bosque. Mantener este bosque limpio debe ser
un trabajo duro, ¿cómo lo hacen? ¿Cómo tienen tiempo?
Mientras caminaba hacia el territorio de la manada vecina, noté que un olor

dulce se hacía más fuerte. Era el aroma fresco de los lirios mezclado con
sándalo, era fuerte pero suave y tranquilo al mismo tiempo.
Fue embriagador. Yo estaba mareado. Eso fue raro. Un sentimiento familiar
y olvidado hace mucho tiempo se apoderó de mí. ¿Qué era? Conocía ese
sentimiento, pero ¿de dónde?
Mi lobo estaba callado ahora, como si esperara mi próximo
movimiento. No me detuve, ya no era mi lobo tirando de mí, era yo.
Y entonces una chica apareció en mi vista. No, no es una niña.
Una mujer joven. Caminaba entre los árboles y daba vueltas como si fuera libre
por primera vez en mucho tiempo.
Llevaba un vestido blanco suelto que complementaba cada curva de su
frágil cuerpo. Parecía tan ligera como una pluma, casi flotaba.
Su belleza era como ninguna otra, era un tesoro hecho a mano.

Su cabello oscuro brillaba a la luz de la luna mientras se deslizaba por su espalda.

Mis pies siguieron caminando hacia ella y luego tomó un
tela del suelo, fue entonces cuando me vio y me miró a los ojos.
Sus ojos eran perfectos, una mezcla de plata y verde bosque, sus labios eran
carnosos y carnosos, y su piel se veía suave como la porcelana, sin defectos ni
marcas.
Era la representación más precisa de una diosa. Era perfecta, angelical.
Rompió el contacto visual y colocó la tela que había recogido en el suelo, era
una capa. Se cubrió la cabeza con una capucha, pero aun así seguí caminando
hacia ella.
Algo me hizo parar. ¡compañero! Mi lobo dijo sin aliento.
compañero de vida? ¡No, eso no puede ser!
Se volvió hacia mí pero se miraba los pies, no podía ver
su rostro.
Ella era mi segunda oportunidad. Volví a mirar a la luna.

¿Por qué Diosa de la Luna? ¿Por qué castigaste a esta mujer con un
compañero como yo? No puedo tratarte como la compañera que te mereces. No
podía permitirme sentir eso de nuevo, por el bien de mi manada.
Pero ahora que la conocí, no podría estar sin ella y ella sin mí. Nunca sería un
compañero digno para ella, ni lo intentaré. Lamenté a la diosa de la luna por no ser
una compañera digna.
Estará lo suficientemente cerca para que no perdamos la cabeza, pero no
dejaré que se acerque a mi corazón. No podía dejar que la historia se repitiera.
- ¿Cual es tu nombre? Yo le pregunte a ella.

“Mi nombre es Adelie Murrell.
Su voz era angelical y dulce, hablaba con gracia y elegancia y,

aunque estaba mirando hacia abajo, su postura era perfecta.
“Soy el Alfa de la manada Nightwalker Kairos García.
Mi declaración casi hizo que me mirara, pero incluso bajo esa capucha no
podía verla. Ella debe saber quién era yo. Me pregunto
qué versión de la historia escuchó.

"¿Vendrás a mi manada?" Yo le pregunte a ella.
Dudó por un segundo, supongo. Si eso es lo que debo hacer.
Esparto.
“Dígale a su Alfa que lo recogeré mañana, empacará sus cosas y estará

listo a las 5 p. m. Te escoltaré personalmente hasta mi manada —dije en un
tono exigente. Y sin mirar atrás, volví a mi mochila.
Mi lobo no dijo nada. Estaba loco por no abrazarla. Yo no pude. Pero

tampoco podía rechazarla, eso nos mataría a ella ya mí.
Pocos hombres lobo sobrevivieron al rechazo, y si lo hicieron, la mayoría
enloqueció.
El rechazo es el crimen más salvaje que existe.
Regresé a mi casa e inmediatamente volví mi mente a la Beta.
¡Te necesito ahora en mi oficina!
No respondió, pero sabía que lo entendía. Perturbé tu sueño, pero no
podía esperar hasta mañana.
Beta entró en mi oficina—Alfa. ¿Qué pasa a esta hora de la noche? “Me
había pedido que arreglara su chaqueta. Supongo que se lo puso porque
tenía prisa.
Me recliné en mi silla y dije: "Fui a correr..." y me detuve a mitad de la
oración.
El Beta frunció el ceño — ¿Qué? ¿Había vampiros? ¿Ladrones?
Negué con la cabeza rápidamente.
"No... conocí... conocí a una mujer joven allí", dije y esperé su reacción.
“Una mujer que resultó ser mi segunda oportunidad, mi pareja.
Sonrió, "Qué maravillosas noticias", exclamó, pero pronto cambió.

su reacción cuando me vio mirando al suelo.
“Pero… ¿no eres feliz, Alfa? ¿Porque eso?
“Si tan solo supiera que la diosa de la luna estaba pensando en darme
una segunda oportunidad. Le habría rogado que no lo hiciera —dije,
golpeando la mesa con el puño. Hizo que mi Beta estuviera en algún lugar
entre enojado y triste.
“Pero la manada… merecen tener una Luna. - el dice. y esto es

una de las razones por las que no podía simplemente dejarla ir.
Sí. Y es por eso que ella está aquí mañana. — Me mantuve lo más
inexpresivo posible.
"¿Va a venir porque es Luna y no porque sea tu pareja?" preguntó,
confundido.
"¡Ella no será mi compañera!" exclamé.
"Tú no la quieres, pero ¿vendrá de todos modos?" Se rió burlonamente.
“No puedes luchar contra el vínculo de pareja.
- ¡Yo puedo! Y lo haré —dije levantando la voz. - Y yo

Lo haré con todas mis fuerzas. No volverá a cegarme.
“Alfa, dale una oportunidad, date una oportunidad”, dijo.
¿Cómo podría decir eso después de lo que le pasó a la anterior Luna?
“Ella no será como… ella. Necesitas...
Lo interrumpí. "Es suficiente Beta. Por la mañana, avisa al pack de tu
llegada!
“Alfa, estás siendo injusto, daría cualquier cosa por tener una pareja,
como todos los lobos sin relaciones,” me medio gritó, cerrando la puerta
detrás de él.
Será como cualquier otro miembro de la manada que viva bajo el
mismo techo que yo. El vínculo de pareja no tendrá ningún poder sobre
mí...
Capítulo 3
INGRESO DE UN NUEVO PAQUETE
ADELIA
Esperé hasta el amanecer para contarle a Alpha Archibald sobre mi partida.
No tuve el corazón para ir a decírselo en medio de la noche y perturbar su

sueño y el de Luna. Probablemente estaría enojado conmigo deambulando solo
por el bosque por la noche. Tampoco era muy elegante.
Para otros puede parecer superficial y mezquino, mi madre siempre me
enseñó a ser elegante y con gracia, siempre sentí que ella era de una era
diferente. Si tan solo pudieran saber que yo era el sirviente del bosque, eso es
todo lo que siempre quise, que la gente supiera lo que soy para poder tener paz.
Mi compañero. Alfa Kairós. He oído historias sobre él. Historias horribles,

crueles y malvadas. Ninguna de las historias que escuché tenía mucho sentido,
pero ¿a quién le creería y cuál de las historias? Hay historias de que mató a la
mayor parte de su manada por aburrimiento y el resto se mantiene hasta el
día de hoy. Algunos dicen que en realidad es el diablo caminando sobre la
tierra. Algunos dicen que maldijo a los miembros de su manada.
Me preguntó si iría con él. Tenía miedo de decir que no porque nunca hay
humo donde no hay fuego, no sabía de lo que era capaz. Pero ahora él era mi
compañero, si no lo era, nos mataría lentamente a los dos.
No sobreviviré a otro rechazo, tuve que hacer todo lo posible para evitar
que me rechazara. Una vez que conoces a tu cónyuge, no hay vida sin ellos.
Pero si no era lo suficientemente bueno para Alpha Hans, ¿quién dijo que sería
lo suficientemente bueno para él?
Me quedé despierto toda la noche, esperando impacientemente para hablar.
con Alfa. Ahora estaba parado en el campo de entrenamiento y esperando a Alpha

Archibald, no pasó mucho tiempo para que me notara. Mi capa llamó mucho la
atención, aunque la mayoría de la gente estaba acostumbrada.
Creo que esta vez lo que más llamó la atención fue tener a una mujer en un
campo de entrenamiento. Las mujeres no podían entrenar, ni siquiera estar aquí,
pero aquí estaba yo porque no es que pueda esperar.
“Solo hay una manada como nuestros vecinos. ¿Quién es él? “Estaba preparado
para lo peor. Sabía que él sabía que era alguien del Night Walker Pack.
"Y alguien de la manada Nightwalker", le dije.

al principio, tratando de leer su reacción, pero solo tenía curiosidad.
- ¿Quién? ¿Omega? “Le dije que mi compañero anterior era un omega, tendría
sentido si tuviera un omega como segunda oportunidad. Nunca soñé que tendría otra
pareja, así que nunca pensé dos veces en mi mentira.
"No. El Alfa", dije con la voz más tranquila que pude.

Se aclaró la garganta tratando de no parecer molesto por esto. - Estoy
entendiendo.
Enderezó su postura, “Kairos, creo que ese es tu nombre, ¿verdad? “Solo lo

saludé con la mano, me resultó difícil creer que no estaba seguro de su nombre,
todos conocían al cruel Alpha Kairos.
- ¿Qué te dijo? preguntó, tratando de obtener más información sobre mi pareja.
Se decía que Alpha Kairos no había sido visto desde esa horrible noche cuando la
mayor parte de su manada
murió.
“Dijo que estará aquí en persona a las cinco para llevarme a su manada.
“¿Y estás de acuerdo con eso? "El estaba confundido.
Forcé una sonrisa en respuesta a su confusión. “Por supuesto, él es mi

compañero. — Los compañeros no podían hacerse daño físicamente, yo creía que
eso era cierto. Pero... una vez también pensé que los compañeros no podían
rechazarse entre sí.
Era mi compañero y estaba hecho para amarme. Aunque es un monstruo,

yo era su pareja y podía ayudarlo a ser bueno.
Si me lleva a su manada eso significa que me quiere como su compañero, ¿por
qué otra razón haría eso?
- OK. Gracias por avisarme”, dijo Alpha y volvió a entrenar.
Ya había empacado todas mis cosas. La mayoría eran solo vestidos y
algunos libros. Eran libros de brujería, pero había recetas de pociones útiles.
Solo las brujas podían hacer que las pociones funcionaran, y no sabía por qué
me las arreglaba para hacer eso. Yo no era una bruja de ninguna manera o
forma. Siempre pensé que era por mi padre.
Hoy decidí usar mi vestido verde bosque, era hasta los tobillos con cuello en
V y mangas de malla. Fue hermoso y fluido. Me trencé el cabello en una trenza
lateral gruesa y le agregué algunas flores, quería lucir bonita para mi pareja.
Incluso si uso mi capa, creo que mi compañero me hará quitarme la capucha en
alguna parte.
momento.
Esperé con impaciencia hasta las 5 de la tarde. Mi Alfa también estaba
impaciente. Podía verlo frente a la empacadora, caminando de un lado a otro
con las manos detrás de la espalda. Algunos guardias incluso fueron llamados
para estar aquí. No creo que nadie supiera de lo que era capaz Alpha Kairos.
A las cinco en punto, un auto apareció por la ventana, un viejo Ford Mustang
modelo negro. El Beta de mi manada ha sido enviado a recoger mis maletas.
Salí de la casa y miré hacia arriba para ver a Alpha Kairos saliendo de su auto,
estaba solo y pensé que traería a alguien con él. Era peligroso para los alfas
viajar solos, los alfas nunca viajaban solos. Por otro lado, éramos manadas
vecinas, y el camino no era largo, el auto era mayormente necesario para llevar
mis cosas. Si pudiera cambiar, podría correr a tu manada en segundos. Él no
sabía que no podía cambiar, tendría que decírmelo en algún momento.
No lo miré mucho, pero ni siquiera se dio cuenta cuando yo estaba mirando.
Alpha Kairos estaba vestido completamente de negro, y su abrigo negro no

ayudó a disminuir su apariencia aterradora y misteriosa.
Se acercó a Alpha Archibald. - Encantada de conocerte. ¿Supongo que Adelie

te lo contó? preguntó y Archibald asintió. Ambos se dieron la mano como
cualquiera.
“¿Puedo tener una palabra contigo por un segundo? Archibald le preguntó a
Kairos. Por una fracción de segundo, Kairos me miró y luego se alejó con
Archibald.
Un guardia estaba a punto de seguir a los Alphas, pero Alpha Archibald lo
detuvo con un rápido movimiento de su mano.
KAIRÓS
"¿De qué querías hablar conmigo?" “Pregunté cuándo Archibald nos llevó a un
lugar donde no había nadie alrededor.
“Adelie”, respondió. Por supuesto, estaba tomando a uno de los miembros de
su manada. Probablemente pensó que iba a matarla, como al resto de mi manada.
- ¿Qué tiene ella?

“Adelie es una chica extraña.
¿extraño? Esto puede significar muchas cosas. Sabía que no era una loba
normal. No lo parecía, era mucho más bonita y mucho más elegante.
La escuché decir solo unas pocas palabras, pero nunca había escuchado a
nadie hablar así. Parecía tan tranquila y su voz era tan reconfortante.
Y volvió a ponerse la capa, ¿por qué? Ya había visto que era hermosa, así
que ¿por qué esconderse?
“Ella apareció en mi territorio hace un año, se había escapado de su manada”,
dijo.
- ¿Por qué lo hizo?
"Con el debido respeto, creo que será mejor que te lo diga ella misma".
Bastante justo, pensé.

“Ella siempre se destacó, su lobo es muy débil por alguna razón,
ella no puede cambiar, pero creo que hay más que eso”, dijo Alpha Archibald.
"¿Crees que está escondiendo algo?" Pregunté, curiosa.

Archibaldo asintió. “Por alguna razón, ella siempre usaba su capa, no sé
nada de su pasado, pero no creo que sea un hombre lobo normal.
— ¿Vampiro? ¿Bruja? “Le pregunté si tal vez tenía una pista.

Sacudió la cabeza.
- No sé. Pero lo que digo es que ella es amable y generosa, siempre pone
a todos primero y siempre es muy amable y educada.
Escuché con la mayor atención posible.

“¡Tienes que protegerla! Archibaldo dijo. “Puede parecer fuerte, pero es
frágil, si cambias de opinión sobre ella, la traerá de vuelta aquí y a ningún otro
lugar.
Con eso, se acercó a mí. “Incluso si es dentro de un día o diez años, tráela
de vuelta aquí. Aunque solo fuera por un año, ella era la omega más útil aquí.
Si la dejas, será una gran Luna —dijo y regresó sin siquiera esperar una
respuesta.
Regresé a donde estaban sus maletas, las recogí y las puse en el asiento
trasero de mi auto.
Archibald se acercó a Adelie y le tomó las manos. “Cuídate, Adelie, puedes
llamar cuando quieras. Siempre eres bienvenido aquí. “Nadie trató de ocultar
el hecho de que pensaron que te iba a lastimar.
Adelie lo soltó y se volvió hacia mí cuando abrí la puerta principal.

coche para poder entrar.
Encendí el motor y comencé a conducir, esto iba a tomar un tiempo, si
estuviéramos en nuestra forma de lobo sería mucho más rápido llegar a mi
manada.
Estábamos en este auto y su olor estaba en todas partes. "¿Por qué
siempre usas tu sudadera con capucha?" — le pregunté, ya no aguantaba más
este misterio.
"Soy así", fue todo lo que dijo, pero no era una razón.
suficientemente bueno.
- Tómalo. — demandé un poco duramente.

"Es mejor si me quedo con él, Alfa", dijo, casi tartamudeando.
- Tómalo. Ella no dudó ni un segundo más. se quitó la capucha,

pero no me atrevía a mirarla. Si miraba, podría llamar.
Fui directo al grano. "¿Qué pasó con tu pareja original?"
- Murió. Era un omega en mi manada anterior. "¿Cómo puede tener un

compañero omega y alfa?" Si hay una segunda oportunidad de lobo, es
siempre el mismo nivel. Algo andaba mal.
“¿Por qué te escapaste? - Yo pregunté.
Ella no respondió de inmediato. “El dolor, los recuerdos de él eran
insoportables.
ADELIA
No fue una mentira total. Me dolió, pero no es por eso que corrí, fue porque
mi mamá y mi papá me dijeron que corriera. Si no me hubieran hecho huir,
probablemente yo también estaría muerto.
- ¿Aún duele? preguntó, y casi me hizo pensar que tal vez le importaba.
“No.” “Una vez que tu compañero está muerto, el vínculo se rompe. Mi

vínculo no se rompió porque él estaba muy vivo. Todavía lo sentía. Todavía
sentía un dolor horrible cuando pensaba en él.
Solo Kairos podía quitarle el dolor.
“¿Por qué no puedes cambiar de forma? - Creo que alfa
Archibald le dijo más de lo que pensaba. ¿Qué respondo? “Así soy
yo”, fue la respuesta más fácil. - ¿Es débil? preguntó no como
un insulto sino más como una declaración. Asentí en acuerdo. Pero me
dolió un poco escuchar que mi propio compañero me llamó débil.
"Eso es bueno", dijo en voz baja. Pero, ¿por qué eso sería bueno?
No hizo más preguntas. Así que asumí que era mi momento de preguntar.
"¿Qué le pasó a tu compañero?" pregunté lentamente. ¿Qué pasa si no se me
permite hacer preguntas? Pero esa parecía la pregunta apropiada, ya que él me
hizo la misma pregunta.
No quiero que me cuestiones. dijo pesadamente mientras agarraba su
volante. Debo haberlo cabreado, tenía la mandíbula apretada y las manos casi
rojas por la fuerza contra el volante.
“Alpha Archibald cree que estás escondiendo algo. Sobre lo que eres...
¿Él dijo? ¿Cuándo le di algo que pensar en mí?

Así que mi mentira no fue tan sutil como pensaba.
"¿Qué estás escondiendo? ¿Quién es Adelie Murrell? preguntó, tratando de
mantener su ira a raya.
Tragué el enorme nudo en mi garganta tomándome tiempo para responder.
“Un hombre lobo,” dije. Soy un hombre lobo y eso era todo lo que todos
necesitaban saber sobre mí. Eso es lo que todos pensaban de mi madre y eso
es lo que todos pensarán de mí.
Soltó una risa amarga. "Solo un hombre lobo...
No volvió a hablar.
Kairos se detuvo en una casa enorme. Era gris y parecía muy antiguo,
vintage. No era viejo en el mal sentido. Pero en el buen sentido. Parecía
demoníaco, pero también Kairos.
Kairos no se bajó del auto. Me miró con sus ojos marrones y habló. “Puedes
hacer una pregunta.
Una pregunta, eso significaba que no se me permitía hacer más preguntas.
Solo una oportunidad. ¿Qué puedo pedir? ¿Sobre tu pareja?

¿Su familia? ¿El paquete? ¿Sobre él?
"¿Eres tan malo como te cuentan estas historias?" - Yo pregunté.

Esa era la respuesta que más quería escuchar y lo que más importaba.
"No…" dijo, pero se detuvo "Soy mucho peor que eso" dijo con sinceridad,
con una sonrisa en sus labios que hizo que mi estómago cayera al suelo.
Capítulo 4
REGLAS ALFA
ADELIA
Estaba a punto de ponerme la capucha, pero Alpha Kairos me detuvo.

— Nunca vuelva a colocar la capota.
No me miró, pero parecía exigente. Usó su voz Alfa conmigo. Así que
fue una orden. Ahora era mi Alfa y ahora debo obedecer sus reglas.
Alpha Archibald me dijo una vez que mantuviera el capó bajado, pero
nunca fue un requisito. Y además. Alpha Kairos es mi compañero, y haré
cualquier cosa para ser un buen compañero.
Se bajó del auto y yo hice lo mismo. Aquí solo había una persona.
Irradiaba poder, pero no tan grande como Alpha Kairos. Debe ser Beta.
Se acercó y se inclinó ante mí. - ¡Mi luna! — exclamó y levantó la vista.

¿Realmente sería Luna? Yo no podía ser Luna. soy muy debil
¿Cómo podría ser Luna para la manada? Estaba vinculado con un

segundo alfa. ¿Por qué la diosa de la luna pensó que yo era digno de ser
Luna? Una manada de lobos necesitaba a alguien que fuera verdaderamente
un lobo para liderar, y yo no lo era.
“Soy el Beta de esta manada, Raphael,” se presentó. Tenía una cara
redonda con una espesa barba.
Era muy grande, en el buen sentido, alto y musculoso, pero incluso más
pequeño que Alpha Kairos. "Estoy tan contenta de conocerte. Déjame decirte
que eres muy hermosa, mi Luna. Tu belleza no tiene paralelo”, dijo, sonriendo
seductoramente, lo que me hizo sentir un poco incómodo.
Respondí con una amplia sonrisa. - Gracias Raphael, eres muy

amable, pero prefiero a Adelie no... Luna. “No me sentía como Luna,
sentía que no merecía que me llamaran así.
"Como desees, mi reina", dijo y tomó mi mano y la besó. Todavía lo
estaba haciendo, coqueteando, y empezaba a sentirme muy mal por
dejarlo hacer eso. Me puse rígido un poco y creo que Alpha se dio
cuenta.
—¡Rafael! Esto es suficiente. Alfa Kairos gruñó. pero todo
Beta solo sonrió y se alejó.
Algo me dice que fue todo seductor a propósito para cabrear al Alfa.
“Toma sus maletas mientras le muestro su habitación y establezco
algunas reglas”, dijo.
Incluso Raphael pareció confundido por una fracción de segundo,
pero había recibido una orden del Alfa y no había forma de evitarlo, así
que simplemente se puso a trabajar.
No dijo nada, así que lo seguí. Toda la casa olía a él. Estaba claro
que había pasado mucho tiempo aquí, oliendo tan fuerte. La casa
parecía oscura no por la iluminación, sino por la atmósfera. Era como si
las paredes clamaran por un poco de luz, un poco de aire fresco. La
casa se veía limpia, pero algo me decía que nadie la cuidaba.
Lo que me rompió el corazón fue que muchas plantas que estaban expuestas en
las paredes se estaban muriendo. Se sentía como si hubiera pasado un tiempo desde
que alguien se había ocupado de ellos. ¿Era realmente tan difícil regar un par de
veces a la semana?
Alpha me llevó arriba, era una casa demasiado grande para vivir
solo, tal vez él no vivía solo. No escuché ningún otro sonido más que
nuestros pasos, ¿alguna vez se sintió solo aquí? Debe ser muy solitario
aquí, tal vez más solitario de lo que se dio cuenta. Giró a la derecha y
siguió caminando.
Alpha me abrió la puerta de una de las muchas habitaciones por las
que pasamos y al entrar vi una cama tamaño king, un armario,
estanterías y una mesa junto a la ventana. Y un espejo, tenía un aspecto
oscuro, todo se veía caro y limpio, pero oscuro y triste.
"Te vas a quedar aquí", dijo con severidad. “Y ahora es el momento
de hablar sobre las reglas que debes seguir. Se acercó a la ventana.
con las manos cruzadas frente a él y mirando hacia otro lado. Estaba de
espaldas a mí.
Cuando mi madre dijo que mi belleza haría que la gente me amara, no
mencionó que mi propia pareja es la que evitaría mi dicha belleza. Si yo fuera
tan hermosa como ella dijo que era, asumo que al menos me miraría de vez en
cuando. Toda madre veía a su hija hermosa, así que creo que eso es lo que ella
vio en mí, amor maternal.
Ni siquiera me atrevía a acercarme a él, sin importar cuánto quisiera

Madeline.
“Mi habitación está en el ala izquierda de la casa, y no puedes ir allí, de
hecho ni siquiera vas al ala izquierda, no hay razón para que estés allí de todos
modos. “Mencionaste eso como la primera regla.
Me trajo aquí, pero no quería ser mi compañero. Yo era solo un espacio

vacío, un objeto obligatorio que él no quería pero sin el cual no podía vivir. Era
como su droga, no me quería, pero me necesitaba para su cordura.
“Te mantendrás fuera de mi camino tanto como sea posible. “Me dolió, pero
siguió hablando como si nada. Creo que ya planeó todo. Estaré tan cerca como
sea necesario para que mantenga la cordura.
¿Incluso sintió el dolor que yo estaba sintiendo en este momento? Mi corazón

exprimido. Espero que no sienta mi dolor, no quiero lastimarlo.
“No tienes permitido preguntarme o hablarme sin una razón válida. Significa
algo que es importante para la seguridad de alguien. No quiero ninguna
conversación sin sentido. “Yo no era nada para él. Tal vez fue tan cruel como
cuentan estas historias.
Y nunca me toques, de ninguna manera. No quiero que hagas esto. Un
enorme nudo se formó en la parte posterior de mi garganta. Quería llorar, gritar.
Mi lobo aulló en mi mente de dolor. Ella no tendrá pareja.
“Serás la Luna de esta manada, pero no tendrás el deber de

para cumplir “Solo un título vacío.
- Póngase cómodo. Te presentaré mi paquete más tarde. - Él
dijo y se giró para irse sin siquiera mirarme.

El hogar no es un lugar, es una persona. Entonces, ¿alguna vez tendré un hogar?
Cuando se fue y Raphael trajo mi equipaje, empaqué todas mis cosas,
colgué mis vestidos y puse mis libros en un armario. Los volví a colocar para
que no fuera fácil de ver, el Alfa ya esperaba que yo fuera más que un
hombre lobo.
Si viera mis libros, pensaría que soy una bruja. No me gustaba esta
habitación, se sentía oscura y fría. Voy a necesitar algunas plantas aquí. A
veces me resultaba difícil respirar si no había plantas vivas a mi alrededor.
Escuché un golpe al otro lado de la puerta. me levante de la silla

donde estaba sentado, alisé mi vestido. - Entre. - yo dije.
Era Raphael, “Luna… Adelie, el alfa te está esperando allí
a continuación para presentarla a la manada. Baja cuando estés listo.
"Estoy lista", le dije y él me miró de arriba abajo como si buscara las
palabras adecuadas.
“¿Vas a usar esto? me preguntó con una ceja levantada.
Miré mi abrigo largo. "Sí... ¿qué pasa?"

mal con eso? - Yo pregunté.
“Oh, nada, solo tal vez un poco exagerado. dijo, pero se alejó de la puerta
para dejarme salir. Debió haber visto el corte en mi abrigo que mostraba mi
vestido debajo.
En mi última manada, nadie vestía así tampoco, todas las demás mujeres
usualmente usaban pantalones, y aunque usaran vestidos, no eran como los
míos, pero no era como si me vieran completamente en un vestido debido a
mi Saco.
Mis vestidos eran largos, no demasiado largos para tocar el suelo. tenido
detalles delicados y pequeños, muy... fluidos, suaves, ligeros.
Bajé las escaleras y Alpha me dio solo una mirada. “Quítate el abrigo,
hace calor”, dijo y comenzó a caminar afuera. Hice lo mismo con Beta a mi
lado mientras me quitaba el abrigo, corriendo para mantener el ritmo de
Alpha.
No estaba acostumbrado a estar sin mi abrigo, me sentía expuesto.
mientras agarraba mi abrigo a mi lado, pero Beta me lo quitó y se lo pasó a un

guardia, diciéndole que lo llevara a casa.
La caminata a la empacadora no fue larga, pero cuando nos acercamos a
un lugar lleno de gente frente a una casa que parecía más una mansión. Alfa
vino a mi lado y beta dio un paso atrás. Alpha me miró de arriba abajo, no había
visto mi vestido antes porque tenía mucha prisa.
“No necesitabas vestirte tan bien,” afirmó.

“No me vestí.
"¿Siempre te vistes así?"
Me dolió un poco, pero aun así asentí.
La gente empezó a fijarse en nosotros y todo el mundo empezó a mirarnos.
“Todo el mundo está mirando. Dije antes de pensar. No se me permitía

hablar con el Alfa innecesariamente.
Inmediatamente miré hacia abajo y negué con la cabeza.
No me gustaba que todos me miraran, no estaba acostumbrada a tanta
atención, siempre me decían que me quedara en las sombras. Mucha gente no
sabía cómo me veía, pero ahora estaba expuesto.
Alpha subió por primera vez a un escenario. Me fui con Beta. Levanté la vista
y vi a todas las personas que ahora miraban a Alpha, esta manada parecía aún
más pequeña de lo que imaginaba.
Es difícil imaginar que este fue una vez el paquete más grande del mundo.
Pero había una cantidad sorprendente de niños, ¿tenían padres?
“La Diosa de la Luna nos ha dado a todos una segunda oportunidad, una
nueva Luna”, anunció. “Déjame presentarte a tu Luna, Adelie Murrell. Dijo y me
hizo un gesto para que subiera al escenario. Ni siquiera me dio su mano para
sostener.
Los miembros de la manada comenzaron a vitorear.
¡Su manada lo amaba! Pero todas las historias eran horribles. Por qué
¿Su manada lo amaba tanto?
Alpha agitó su mano hacia la multitud y retrocedió. No supe lo que eso

significaba hasta que todos empezaron a hablar unos de otros.
"Luna, estamos tan felices de tenerte", dijo una anciana con los ojos
llorosos. “Esta manada necesita una Luna fuerte para levantarnos.
Yo era cualquier cosa menos fuerte. Mi madre siempre decía que si

mostraba mis poderes, traería peligro. No quería ser una Luna que daña a
su manada.
"Luna, te creemos", dijo un hombre, abrazando a un niño más pequeño
con orgullo. Incluso el gran hombre mostró lágrimas de orgullo.
Mi cabeza estaba empezando a dar vueltas. No merezco esto. Tales

elogios de todos.
"Tan hermoso", exclamó uno, juntando las manos.
Mis manos estaban sudando. Mi respiración se aceleró. Mi madre
siempre decía que mi belleza es peligrosa. Que la gente intentará usarlo.
Y pensar que estaba a salvo...
“No veo la hora de ver al lobo de Luna”, dijo un niño.
Mi lobo. Nunca tuve una forma de lobo, ellos no podían ver eso. Yo era un
bicho raro, así me llamaba mi primera manada por no ser un lobo.
"¿Cómo conociste a nuestro Alfa?"
Miré de un lado a otro, mis manos estaban inquietas.

“Mami, ¿por qué lleva ese vestido raro? No tiene
un baile hoy”, preguntó un niño, pero una mujer la hizo callar.
- ¿Quienes son tus padres? “Nunca pueden saberlo.
Estoy seguro de que mis venas estaban empezando a salirse de mi
frente.
"Luna, ¿de qué familia vienes?" ¿Qué paquete?
"¿Cuántos años tienes Luna?" Te ves muy joven”, un rasgo de ninfa. Mi
madre decía que las ninfas siempre se veían jóvenes, hermosas.
"¿Qué piensas de este paquete?"

"¿Qué pasó con tu pareja original?" - Lo que ellos
¿Qué pensarían si se enteraran de que me rechazó?
El rechazo fue la mayor vergüenza que hubo. Ellos sabrán que hay algo
mal conmigo tan pronto como se enteran del rechazo.
Todas estas preguntas. Nunca seré capaz de responderles honestamente. No
pude soportarlo más. Corrí entre la multitud y me detuve afuera de espaldas a ellos.
La gente susurraba detrás de mí. Abracé mi propio cuerpo con

mis manos. Estaba en pánico, pero traté de no mostrarlo demasiado.
- ¡Muchachos! Alpha gruñó y el susurro se detuvo. "Luna Adelie, no puede
cambiar. La Diosa de la Luna no le dio forma de lobo, pero tiene un lobo en su alma.
Él continuó.
“Tu Luna necesitará algo de tiempo para adaptarse, no la molestes con más
preguntas. Ahora todos vuelvan a lo que estaban haciendo”, exclamó y la gente se
alejó. Me dedicaron unas últimas miradas.
Me di la vuelta, pero una chica estaba parada allí mirándome directamente.

Tenía cabello oscuro y rizado y ojos marrones, al igual que el Alfa. Parecía
enfadada, intimidante. Llevaba una chaqueta de cuero y pantalones negros con
bolas pesadas.
Ella se acercó a mí. Su andar me hizo retroceder.
- ¡Él habla! Alfa gruñó como si fuera una advertencia.
“Está bien, hermano. Dijo, sin quitarme los ojos de encima. Eran hermanos.
“No le haré nada porque claramente no puede valerse por sí misma, nuestra nueva
Luna es débil. Solo espero que no lleve a este grupo al completo fracaso.
Ella ya me odiaba. ¿Toda la manada pensó eso de mí? Si la familia de Alpha

me odiaba tanto, ¿cómo podría Alpha aceptarme?
- Él habla. ¡Detener! dijo Alpha, agarrándola de la mano y llevándola lejos.
Mírala. Ella es débil. Probablemente por eso Kairos ni siquiera la quiere. “Ella
me escupió. Mis ojos se llenaron de lágrimas. Me dolía el corazón.
Alpha se detuvo y me miró, por un segundo sus ojos mostraron dolor y

arrepentimiento y luego al segundo siguiente no mostró ninguna emoción, miré
hacia abajo con mis ojos ahora rojos.
y mares
Sabía que era verdad. No quería creerlo, pero cuando tu hermana
Dije que no podía escapar...
Capítulo 5
HABLANDO CON HELENA
KAIRÓS
Arrastré a Fala fuera de la vista de la gente.

"¿Qué estás haciendo Fala?" Le pregunté con toda la rabia que tenía. ¿Por
qué siempre jugaba con mis nervios? “¿Por qué no puedes mostrar algo de
respeto? Ella es tu Luna — ¿Respeto? ¿A ella?
¿Cómo puedo cuando no la quieres tú mismo? Dejó escapar una risa amarga
y de repente me quedé congelado en el lugar. ¿Dije alguna mentira? preguntó,
liberándose de mi agarre.
Fala era mi hermana menor con seis años de diferencia, ella
tenía dieciséis años, pero todavía se comportaba como una adolescente rebelde.
Sé que tenía razón acerca de que yo no quería a Adelie. No la quería,

nunca pedí una segunda oportunidad, no merecía una segunda oportunidad.
Quería pensar que la Diosa de la Luna cometió un error, pero sabía que nunca
se equivocaba.
No podía negar que el vínculo de pareja era fuerte. Sentí cada dolor en tu
corazón. Dolía que yo fuera la causa.
De alguna manera, detrás de mi culpa, cuando me enfoqué, sentí que ella
siempre estaba en constante dolor. Le dolía el corazón y de alguna manera
tuve la sensación de que no era por mí.
Incluso ahora mi corazón estaba apretado. Es bastante irónico que todavía

tuviera un corazón incluso cuando estaba lastimando a mi propia alma gemela.
Estaba demasiado cansado de los exabruptos de Fala, ella siempre haría

algo para enojarme hasta el límite.
¿Por qué no puedes ser como Rafael? Él la adora, por lo que parece que
todos los demás también piensan que es una especie de héroe.
“Era cierto que la manada la elogió como ninguna otra.

"Sí, antes también pensaron eso sobre Luna", me escupió.
“Ella es tu Luna. Recuerda eso —dije y luego caminé de regreso a mi

casa.
Adelia estará allí. Quiero estar cerca de ella. Tocarla de todas las
formas posibles. Pero no puedo. Sería mucho más fácil si ella me rechazara.
Si ella sobrevivía a la muerte de su compañero, estaba seguro de que

viviría después de rechazarme, si ella me rechazaba, estaría al borde de
la muerte mientras ella vivía su vida feliz.
Nunca podría rechazarlo. El rechazo fue lo más enfermizo y cruel
que conocí. ¿Cómo podría alguien rechazar su destino?
No esperaba que hiciera eso, porque pude ver que era buena, con un
buen corazón. Simplemente no sé cuánto podría sufrir antes de
confrontarme.
Por supuesto que Adelie sería una gran Luna, pero no podía darle tanto
poder. Hice eso una vez y ahora estaba pagando por ese error al mirar mi
mochila grande que ahora era pequeña y estaba llena de horribles
recuerdos.
ADELIE
Beta me acompañó a casa. No dijo mucho, debe entender cómo me sentía.
Hice el ridículo frente a toda la manada e incluso la hermana de mi
compañero dijo que Alpha Kairos no me quiere.
Volvía a soñar con un lugar donde pudiera existir, donde mi corazón

latiera lentamente, mi cuerpo fuera amado, donde fuera comprendida.
¿Existió siquiera?
Ahora estaba en esta casa grande, sin ninguna fuente de contacto con
otras personas. Me he acostumbrado a estar solo, nunca me han permitido
hacer amigos, 'cuanta menos gente me rodee, menos me van a lastimar'.
Solo lo entendí completamente cuando murió mi madre. juré no hacerlo

acercarse a nadie. Y estaba manteniendo esa promesa. Con un compañero

como el mío, no será difícil.
Recordando las plantas muriendo, me acerqué a las que estaban en los
estantes de las paredes. Deberían haber sido verdes y vivos, pero eran
amarillos y las hojas estaban secas, pidiendo un poco de agua fresca.
Necesitaba salvarlos, yo era una ninfa del bosque y no había nada ni
nadie que pudiera detenerlo. Ahora yo era el espíritu de la naturaleza que
tenía que atender a la Manada de Caminantes Nocturnos, sus bosques y
plantas.
Nací para proteger la naturaleza que me rodea y aunque sea lo único
que pueda volverme loco, lo haré con todo mi corazón y mi alma.
Después de algunas vueltas en el primer piso, encontré una cocina.

Probablemente era lo suficientemente grande para cinco chefs a la vez.
Agarré un recipiente que estaba más cerca de mí y lo llené con agua del
grifo.
Estuve corriendo un rato e hizo caer unas gotas al suelo, pero no miré
atrás. yo tenia una mision Si este era el lugar donde iba a vivir, necesitaba
hacer que la Madre Naturaleza se sintiera orgullosa de cómo serví a la
naturaleza.
En total, había cinco plantas en los estantes. Los regué a todos y
coloqué el cuenco a mis pies. Pasé ligeramente mis dedos sobre las hojas
y la planta comenzó a crecer y al instante se volvió verde. Volvían a respirar,
estaban vivos.
No pude evitar sonreír. Me encantaba tener el poder curativo. Si había
alguna razón para estar agradecido por mis poderes otorgados, era esta.
Estaba en mi naturaleza de ninfa ayudar a los demás y las plantas no eran
una excepción.
Las plantas estaban vivas ahora y era como si casi todo el lugar se
hubiera despertado, podía hacer que este lugar volviera a vivir. Por
supuesto… si Alpha me lo permite, algunos rosales frente a la casa la
harían más acogedora, las rosas rojas frente a una pared gris oscuro se
verían geniales.
Me desperté de mis pensamientos cuando escuché pasos detrás de mí
y me encogí cuando vi a Alpha Kairos parado allí. él había hecho un
regla para que me saliera de tu camino, pero no escuché. Estaba en tu camino,

pero todavía no me atrevía a moverme. No podía mover mis pies, estaba
congelado en mi lugar.
Alpha miró las plantas, frunció el ceño y luego me miró a mí.
- ¿Que hiciste? me preguntó, apretando la mandíbula con fuerza.
“Yo los regué, Alfa. — Le expliqué que no sabía si estaba permitido.

Mi doncella hace esto. No podía creerlo, porque parecía sospechoso, pero
lo evitó. - Mañana. Habrá una ceremonia de bienvenida para la manada
Nightwalkers con Luna.
Su mirada se fijó en mí, pero hice todo lo posible para no mirarlo a los ojos.
Mi loba Madeline hizo esto aún más difícil. Habló con la voz más amarga que
pudo, casi sonaba forzado.
Había una persona en esta casa que podía dármelo, pero ¿a qué
costo...
— La ceremonia comenzará a las 22 horas. Enviaré algunas mujeres Omega
para que te ayuden a prepararte. Cuando estés listo, me encontrarás aquí.
¿entiéndeme? preguntó más fuerte la última parte. Intentó sonar duro, pero no
parecía natural sino forzado.
Negué con la cabeza. — Sí, Alfa. Con eso, se alejó rápidamente.
¿Cómo podría ser su Luna si él ni siquiera me quería? Tal vez era mi mente
jugando conmigo, pero sentía que mi corazón dolía más con cada segundo de
estar aquí. Si esto sigue pasando, no sé cuánto tiempo pueda durar.
Como soy Luna, no hay forma segura de escapar de esta manada. Como
soy Luna, estoy ligada a esta manada con mi mente, corazón y alma.
Empecé a preguntarme acerca de la ceremonia. En mi vieja mochila.

Alpha Archibald me contó una vez sobre las ceremonias de bienvenida de Luna,
me contó algunos ejemplos de tradiciones en torno a las manadas. Lo recuerdo
mencionando el paquete de Walkers de
Noche, lo mencionó mucho, creo, porque era una manada vecina.

Una vez que se le da la bienvenida a Luna a la manada, siempre hay una
carrera con un grupo de "elegidos" de Alpha, que pueden ser familiares,
amigos o los escalones más altos.
No pude cambiar. Ni siquiera era tan rápido como un humano, o tan fuerte
como cualquiera. Esa recepción tendrá que ser diferente como todo sobre mí.
Todavía no sabía qué pensaba la manada sobre el hecho de que no puedo
cambiar.
Nací para sobresalir, no en el buen sentido, pero nunca podría cambiar
eso. Por el bien de la manada, trataré de ser lo más normal posible y guardaré
mis secretos hasta el día de mi muerte, y si es necesario, incluso después de
eso. Si proteger a la manada es lo último que haré, moriré con honor
haciéndolo.
Incluso si Alpha dijera que no tendría deberes como Luna, seguiría siendo
responsable de su seguridad. Si supiera la amenaza que soy. El peligro que
podría traer.
Mi corazón dolía más que nunca ahora. Tenía dos compañeros y ninguno
de ellos me quería.
Estaba a punto de ir a mi habitación cuando la puerta principal se abrió.
Una mujer entró por la puerta. Era gordita y eso la hacía caminar erráticamente,
usaba faldas que le llegaban más abajo de las rodillas, su cabello era castaño
pero en algunos lugares estaba desteñido a gris.
Sus cejas se veían hundidas y sus labios levemente fruncidos, en su

mejilla derecha había una gran verruga. En sus manos había una canasta y
otras tres bolsas, parecía estar esforzándose mucho.
“Déjame ayudarte,” dije con una sonrisa en mi rostro, extendiendo mis

manos para agarrar algunas de las bolsas. Pero la mujer retrocedió y sacudió
la cabeza con fuerza.
"No", dijo con dureza, y comenzó a alejarse a toda prisa, todas las bolsas
golpeando sus piernas.
La seguí. "No me importa ayudar", exclamé, pero incluso cuando llegamos
a la cocina, ella no me respondió.
Colocó las bolsas y la canasta en el mostrador de la cocina y comenzó a

acomodar todo en los estantes y todavía parecía tener prisa mientras murmuraba
algo en voz baja. Parecía confundida.
Todavía quería ayudar porque parecía que nadie más vendría a hacerlo, así
que tomé algo de una de las bolsas, pero ni siquiera tuve tiempo de mirar cuando
me lo arrebataron de las manos.
Me rendí y me senté junto al mostrador. - ¿Cual es tu nombre? Yo le pregunte
a ella.
"Helen", sorprendentemente me respondió con la misma
amargura, pero era un comienzo.
— ¿Eres cocinero? - Le pregunté, pero no obtuve respuesta, era
obviamente ella era cocinera, yo solo estaba tratando de ayudar.
"Si te estoy molestando, ¿puedo irme?" “Lo dije más como una pregunta que
como una afirmación.
Me levanté para irme cuando una tabla de cortar con un cuchillo y zanahorias
fue lanzada violentamente frente a mí. “Corta”, dijo y me dio la espalda para
encontrar algo en el armario.
Me hizo sonreír y pensar que realmente sería útil. No puedo hacer nada. Toda
mi vida he sido omega en la manada.
Siempre me dijeron que cocinara y limpiara.
Terminé cortando algunas zanahorias, cebollas, papas y algunos
verduras para la sopa que estaba preparando Helen.
Ahora me doy cuenta de que no le había dicho mi nombre. “Mi nombre es
Adelie,” dije.
"Sirvo a Luna y Alpha", dijo. supongo que ella era
hablando de mí, para que ella supiera quién era yo.
“Helena, ¿puedo preguntarte algo? Dije, pero ella no respondió, solo siguió
deambulando por la cocina. Ella era una locura ambulante. Hacía mucho ruido y
estaba desordenado.
“Eres miembro de la manada y me preguntaba si podrías responder algunas
de mis preguntas.
Tal vez en mi mente parecía una buena pregunta, pero iba a preguntarle de
todos modos, ¿qué le pasó realmente a ella?
este grupo hace dos años?
Por primera vez se detuvo y realmente me miró, deteniéndose por completo

por primera vez. Su mirada ahora estaba llena de lo que parecía ira. La irrité.
No deberíamos hablar del pasado. Se acercó a mí y me tomó de la mano,

tirando de mí y acompañándome fuera de la cocina. - Usted sale. “Estaba furiosa
conmigo.
“Lo siento, yo… solo,” comencé a hablar, pero fue inútil. Me dejó y volvió a
hacer la sopa.
Si fuera a ser un miembro oficial de esta manada. E incluso Luna.
Necesitaba saber sobre lo que pasó. Me gustaría saber.
La próxima vez que me encuentre con alguien intentaré preguntarle de
nuevo, tal vez Helen solo estaba de mal humor. Necesitaba saber si Alpha era
tan malo como todos decían.
Pasaron algunas horas y Helen trajo la cena a mi habitación.
Pensé que al menos comería en un comedor. Pero me quedé solo comiendo en
mi mesa junto a la ventana.
La vista era maravillosa, pero no podía compensar la soledad que sentía.
KAIRÓS
Estaba cenando en mi comedor, sentado al final de la mesa larga que se

suponía tenía capacidad para veinte personas. Helen encendió una vela, era la
única fuente de luz aquí.
Siempre me ha gustado cenar con poca luz. Normalmente, cuando las luces
estaban encendidas, se sentía como si alguien más debería estar aquí.
Hoy, incluso con una vela, parecía que faltaba algo. Sabía lo que me estaba
perdiendo al mirar la silla vacía a mi lado donde se sentaba mi pareja original,
Mia.
Pero no era a Mia a quien extrañaba... Era la sensación de algo que me
hacía sentir completa.
Alguien que me entienda, alguien que fue hecho para mí y sólo

para mí. Alguien a quien pudiera llamar mío.
Capítulo 6
CAMPOS DE ENTRENAMIENTO
ADELIA
Por la mañana, me sirvieron el desayuno en mi habitación. Creo que esta será

mi nueva rutina, comer sola en mi habitación.
¿Era tan terrible que Alpha Kairos ni siquiera podía soportar comer en la
misma habitación conmigo? Siempre he estado solo. Ni siquiera tuve un amigo.
Por supuesto, mi loba Madeline estaba lejos de serlo. Ella pensó que
nuestro compañero era la persona más maravillosa sobre la tierra. El problema
es que no sabía de quién estaba hablando. Todavía sentía a Alpha Hans.
Tenía dos compañeros, los podía sentir a ambos en mi corazón y solo una
marca en el cuello le quitaría el dolor a uno de ellos. Por el momento, solo
puedo soñar.
Después del desayuno, bajé las escaleras llevando mi bandeja conmigo. Al
entrar en la cocina vacía, Helen no estaba a la vista. Lavé los platos y después
de varios intentos de abrir los armarios encontré un lugar para ponerlos.
Hoy llevaba un top blanco con tirantes finos y una falda larga de punto gris.
Todo estaba rematado con una cinta gris alrededor de mi cintura, la cual estaba
atada a mi lado izquierdo.
Poco convencional De hecho, podría hacer algo diferente con mi cabello
porque ya no tenía que usar mi capa todo el tiempo... Hoy simplemente me
solté el cabello y me puse una corona de flores amarillas. No recojo flores
nuevas cada vez que necesito accesorios nuevos.
Tengo esta corona desde hace varios años, pero parece que acaba de salir
del jardín. Hice un hechizo de uno de mis libros de brujas. Este tiempo inverso
para las plantas, se volvieron inmortales. estos tipos
de hechizos que solo podía hacer en relación con las plantas y los árboles.
Caminé hacia la puerta exterior, echando un vistazo a las plantas que estaban
en los estantes, les estaba yendo bien por decir lo menos.
Empujé la puerta y la luz brillante me cegó los ojos por una fracción de
segundo. Respiré hondo y estaba a punto de adentrarme en lo desconocido
cuando una voz joven habló. "Buenos días mi Luna.
Era un poco más alto que yo, pero mucho más fuerte. Tenía rastas en el
cabello, pero estaban bien apretadas en una cola de caballo, hasta ahora pensé
que no me gustaban las rastas.
“Buenos días para ti también”, dije. "¿No hay entrenamiento en la mañana?"
Le pregunté. En mis dos viejas bandas había.
“Sí, está sucediendo ahora. ¿Por qué le preguntas a Luna? - Tu

La voz era muy masculina.
“Simplemente no entiendo por qué no estás allí. “Probablemente sonó mucho

más grosero de lo que debería.
“Lo siento Luna, asumí que Alpha te habló de mí. Fui asignado para protegerte
dondequiera que vayas”, dijo e inclinó un poco la cabeza.
No necesito un guardia. - No necesito uno

escolta. Nunca he tenido uno y no lo necesito ahora.
"Luna, fue una orden del Alfa", dijo, sonando lo más respetuoso posible.
“¿Por qué debería necesitar un guardia?

“Los vampiros a menudo invaden nuestros bosques. Alpha solo se asegura
de que estés a salvo. "¿Eso significaba que le importaba?"
“Digamos que viene un vampiro por mí. Escuchó atentamente. "¿Vas a saltar
frente a mí y dentro de los colmillos de un vampiro?" Pregunté, ocultando mi
diversión.
—¡Claro, Luna! “Lo hizo sonar tan fuerte y orgulloso.
No pude ocultar la risa. “Bueno, mi caballero de brillante armadura. ¿Cual es
tu nombre?
ES
Se rascó la nuca. — Soy Natán.

— Bueno, Natán. Mi nombre es Adelie y prefiero que me llames así.
La sonrisa iluminó su rostro. “Como desees, Adelie, al menos cuando Alpha

no está cerca.
"¿Te importaría mostrarme los alrededores?" Le pregunté. Ya
que él estaba aquí, no me importaría pelear por tener un guardia.
- De ninguna manera. Será aún mejor ahora, ya que no hay nadie alrededor.
Bueno, solo los niños.
¿Qué quiso decir con alguien? ¿Dónde estaban todas las mujeres?
Empezó a caminar y yo lo seguí.
Pero, ¿y las mujeres? ¿Dónde están?
Nathan frunció el ceño.

“Adelie, tú misma lo dijiste, todos están entrenando.
'¿Qué están haciendo las mujeres allí?'
“Entrenamiento también.
Esa fue una pregunta tonta de mi parte.
"Bueno, entonces... ¿no debería estar entrenando yo también?" Yo pregunté.
“Adelie, estoy al tanto de tu situación y no creo que este entrenamiento sea

adecuado para ti.
- ¿Por qué no sería?
Nathan pareció evitar mi mirada. - El entrenamiento es muy
avanzado, eso es todo. “Estaba tratando de decir que yo era débil.
“Bueno, todavía quiero ir allí de todos modos. Para ver… qué tan avanzado
está”, exclamé y Nathan cambió ligeramente la dirección de su caminar. Tal
vez solo quería ver a Alpha.
En mis dos paquetes anteriores, las mujeres no podían entrenar. Por lo
general, cuidaban a los niños o hacían algún otro trabajo de manada.
"Nathan, ¿por qué están entrenando las mujeres?" Pregunté y él asintió en

comprensión.
“Han pasado dos años. Alpha dio la orden de que las mujeres también
necesitaban saber cómo protegerse y defender a los demás. Cuando
comenzaron, nos sorprendió lo fuertes que pueden ser”, explicó.
Por supuesto que las mujeres son duras. Mi madre era la persona más
fuerte que he conocido.
¿Pero Alpha no creía que yo también necesitaba protegerme? El guardia
no siempre puede estar a mi lado.
- Dos años. Todo el mundo sigue hablando de esa noche hace dos años.
¿Qué sucedió? “Supliqué la última parte. Estaba cansado de no saber.
“Lo siento Adelie, pero no puedo hablar de esto. Estoy seguro de que
cuando llegue el momento, Alpha te lo explicará todo. De hecho, no fue solo
una noche, fueron semanas las que lentamente llevaron a esto.
¿Qué pudo haber pasado tan horrible para destruir a una banda tan
numerosa? Tal vez Alpha Kairos tenga la culpa... tal vez no.
— Natan. Lo miré a los ojos y él asintió. —
¿Crees que Alpha Kairos es un buen hombre? - Yo pregunté.
Se volvió hacia mí con una mirada ofendida en su rostro. "Con todo respeto,
Luna", exclamó, usando mi título. “Alpha Kairos es el líder más grande de
todos, es el Alfa más considerado, fuerte y amable que existe.
Esta vez habló enojado y siguió caminando. Para mí, él era cualquier cosa
menos bondadoso. Si era tan bueno, debería entender la importancia de una
pareja.
Lo alcancé medio corriendo, ya que ahora iba más rápido.
"Pero... pero las historias sobre él..."
Natán se rió. “Otras manadas no saben lo que hizo por nuestra seguridad,
nadie podría hacer eso, me suicidaría primero antes de hacer lo que hizo.
Ese fue un argumento serio para hacer.

“Eso…” no sabía de qué otra forma llamarlo, “¿él lo hizo, ayuda cómo?
¿Valió la pena? ¿Cuál fue el costo de la misma? “Estuve buscando cada pieza
del rompecabezas para tratar de averiguar qué pasó.
“No crees que sea bueno”, afirmó. “Y eso te vuelve estúpido.
Lo cabreé, incluso sus puños estaban apretados. “Alfa nos liberó, y ahora
estamos a salvo. ¿Cómo no creer que es bueno?
Empecé a tartamudear, pero él siguió hablando. “La Diosa de la Luna

pensó que era lo suficientemente digno como para tener una segunda
oportunidad, y ahora te tiene a ti. ¿Qué más pruebas necesitas?
Estaba a punto de discutir sobre cómo él ni siquiera me quiere como
compañero cuando percibí ese maldito olor... compañero!
Estábamos en un enorme campo de entrenamiento. Todos estaban
entrenando. Las mujeres estaban todas en ropa de gimnasia.
Nadie estaba descansando. Algunos estaban levantando pesas, algunos
estirando, algunos luchando.
Seguí siguiendo a Nathan de cerca, como si pudiera esconderme detrás
de él. Parecía que se estaba acercando al Alfa.
Otros me miraban de arriba abajo. A juzgar por mi elección de ropa.
Alpha Kairos estaba luchando contra un hombre de su tamaño. Y lo

estaba haciendo muy bien, bloqueando cada golpe. Mientras nos
acercábamos, una gran ráfaga de viento sopló detrás de mí. Esto hizo que el
Alfa perdiera el foco y lo golpearon en la cara.
Todos a su alrededor estaban perturbados por esto, el hombre que
luchaba contra Alpha se quedó quieto, como si tuviera miedo de sí mismo.
¿Cuál es el problema? Sucede en las peleas todo el tiempo, supongo...
"Alfa, ¿está todo bien?" una mujer le preguntó. ¿Por qué lo hizo? Alpha
no se vio afectado por el golpe, su mirada solo estaba enfocada en el suelo.
No dijo nada, inclinó su cabeza ligeramente hacia mí.

Mirándome de arriba abajo. No parecía enojado porque yo estaba aquí,
parecía… derrotado.
La mujer notó la inclinación de su cabeza y me miró, sonriendo y
alejándose riendo con algunas otras mujeres. No creo que ella notara la
expresión de su rostro.
Todos volvieron a lo que estaban haciendo, excepto el hombre que Alpha

Estaba peleando. Fue a una especie de carrera de obstáculos.
"Alfa, ¿cómo va el entrenamiento?" preguntó Natán.
"Lo estamos intentando", dijo Alpha.
Nathan dio un paso atrás para dejar que Alpha tuviera una vista completa de mí.
“Luna quería conocer el territorio. Pensé que estaba bien.” Parecía inseguro.
"Solo asegúrate de no perderla de vista", Alpha

advirtió y Nathan asintió.
Alfa se volvió hacia mí. — Adelia. ¿Tiene alguna pregunta sobre el

¿paquete? - Él me preguntó. Podría cuestionar esta vez.
"No sobre la manada…" dije en voz baja.
'¿Sobre qué entonces?'

"No necesito una escolta, sin ofender a Nathan, pero
Puedo protegerme si es necesario —dije, mirándola a los ojos.
Cuando estoy enojado y en peligro, mis poderes toman el control, simplemente no
sé cómo controlarlos.
Alfa dejó escapar una risa irónica. "Ni siquiera podrías lastimar
incluso una mosca
"No tendría que hacerlo", respondí. Esta no fue la respuesta más sabia.
Dio unos pasos hacia mí.
- Muéstreme. Haz cualquier cosa que me ayude a pensar que incluso puedes
protegerte de un humano.
No pude mostrarle nada, no sé cómo mostrar mis poderes de inmediato, e incluso
si lo hiciera, es un secreto.
"Entonces, ¿por qué no me entrenas?" “Fue una pregunta audaz de mi parte.
“No hay nada que pueda enseñarte para que te protejas de los vampiros o incluso
de otros hombres lobo.
No respondí y no hice nada. Él tampoco, simplemente dio media vuelta y se fue.
No estaba demasiado ofendido por tener un guardia porque soy débil, solo
necesitaba estar solo. Necesito ir al bosque solo. Yo necesito
ver cosas a mi alrededor.

La mayoría de las casas estaban vacías. Me quedé con Nathan todo el día, él
no mostró mucha simpatía por mí. Ya eran las 7 de la tarde y Nathan habló.
— Recibí un enlace mental de la Beta. Tienes que ir a vestirte, dos Omegas
ya te están esperando. Dijo y comenzamos a caminar hacia la casa del Alfa.
Llegamos a la entrada — Adelie. Aquí os dejo. Alpha te acompañará a la

ceremonia. Oh, ¿qué haré sin mi caballero de brillante armadura? - I
dijo con una sonrisa divertida.
Nathan sonrió con cariño. - Mi luna. Siempre estaré contigo cuando lo

necesites, no te preocupes”, dijo y se fue.
"Gracias, Nathan", grité cuando se fue.
Miré la casa. Era eso. yo seré Luna. Estaré atado a este paquete.
Capítulo 7
PREPARACIÓN PARA LA ACERIMONIA
ADELIA
Entré y escuché conversaciones en la sala, eran voces de mujeres, supuse que

eran los Omegas quienes debían ayudarme en la preparación.
Seguí el sonido de la conversación y encontré a dos mujeres sentadas en
un sofá. Eran gemelos. Con piel de porcelana blanca. Incluso tenían el mismo
peinado, largos rizos rubios que eran más anchos que largos.
Y el mismo vestido corto de verano, con una sola diferencia, fue

rojo y uno verde.
Entré en la sala de estar y me apoyé contra el marco de la puerta. Estaban

tan absortos en su conversación que ni siquiera me vieron de pie.
“Sabes que no es como si me fuera a dejar ir”, dijo el de rojo.
“Maya él es, tu compañero, no puede separarte de él, y dudo que tu

compañero venga a esta manada”, dijo el vestido de verde.
Pero Maeve. Mamá está enferma y no puedo dejarla sola con James, con
su condición nunca más podrás salir de casa —dijo Maya preocupada. "Siempre
has estado conmigo, no sé si puedo existir sin ti".
“Puedo cuidar de la madre. Y estarías cometiendo un terrible error al dejar a

tu pareja por mí. Y decidiré qué hacer con James —dijo Maeve.
Ella cruzó su corazón. “En el nombre de la Diosa de la Luna, amo a mi

madre, pero no tiene mucho tiempo. Puedes quedarte hasta que muera.
"Si decido ir con mi compañero, me quedaré aquí todo el tiempo que pueda".
ella lo ha hecho, pero ¿qué pasa con el Alfa? Dijo maya.
Maeve asintió mientras Maya continuaba. “Nadie ha conseguido un

compañero externo, no desde ese día. ¿Y cómo voy a explicar mis andanzas
en la manada vecina?
"Nuestro Alfa lo entenderá", dijo Maeve con confianza, habló
con mucho cariño de su parte.
Maya dejó escapar un profundo suspiro. “Tengo miedo de decírselo a

Alpha.
"Chicas, creo que escuché su conversación", dije y
dos me miraron con terror en los ojos.
Ambos se pusieron de pie rápidamente y me hicieron una reverencia.
"Luna, lo sentimos.
“Creo que deberías ir con tu pareja”, dije y Maya levantó las cejas hacia
mí. "Si no es un secreto, ¿quién es James?"
Las chicas se miraron. "Es nuestro medio hermano, es muy

enfermo y necesita a alguien con él todo el tiempo”, dijo Maya.
"Puedo tratar de hablar con Alpha para que le consiga un cuidador a
James", todavía no estoy seguro de cómo puedo hablar con él normalmente,
y haré todo lo que esté a mi alcance para ayudar a su familia". Los ojos de
Maya se iluminaron y ella nos miró a mí ya Maeve...
Maeve no parecía tan feliz. “Ahh, Luna, es genial, pero no tengo dinero
para un cuidador. Miró al suelo.
“Está bien, estoy seguro de que Alpha entenderá y ayudará a pagar a tu
cuidador, primero tendré que hablar con él. “Espero que lo entienda.
—Luna. ¿Realmente harías esto? Maya preguntó con incredulidad.

- Seguro. Es lo menos que puedo hacer. Ustedes dos merecen ser felices.
"Gracias Luna, gracias", dijo Maya llorando, mientras que Maeve no
mostraba ninguna emoción.
"Mañana quiero conocer a tu madre, ¿está bien?" Dije y Maya asintió.
Fuertes pasos entraron en la sala de estar. Era Beta Rafael. El golpea

aplaudir.
"Omegas, Luna va a llegar tarde si no empiezas a prepararla ahora", dijo
bruscamente, pero las chicas ni siquiera se movieron, creo que ya estaban
acostumbradas. Beta se fue y probablemente subió a la oficina de Alpha.
Miré a las dos chicas que esperaban mi pedido. “Preparémonos,” dije

suavemente y los llevé a mi habitación.
Entré en la habitación y vi que alguien había estado aquí. Había un vestido
cuidadosamente colocado en mi cama. Pensé que tendría que ponerme uno de
mis vestidos, pero era más bonito que todo lo que tenía.
Era un vestido plateado brillante, las mangas que terminaban en los codos, y
el pecho era de encaje, de cerca el encaje estaba compuesto por flores con
enredaderas. En la cintura había una cinta roja atada por la espalda que llegaba
a mis rodillas.
"Esto es hermoso", dije en voz baja.
- Realmente es. Te va a quedar increíble, Luna”, dijo Maya.
exclamó Maeve. “Por supuesto, Alpha sabe increíble.
Cambié mi mirada del vestido a Maeve. "¿Alfa eligió esto?" - Yo pregunté.
“Sí, trajimos varios otros vestidos aquí, pero Alpha los odiaba a todos, así
que compró uno él mismo. Ella explicó.
Eso sonó dulce de su parte, tal vez le importaba. O era solo mi mente
engañándome. Él era el Alfa. Solo quería que yo estuviera a su lado, quizás por
el respeto de los demás.
—Luna. ¿Esta todo bien? Maya me preguntó, notando mi
mirar por la ventana.
Salí del trance. “Sí y… por favor llámame Adelie. Yo les dije.
Maeve y Maya se miraron. “Luna… no podemos. Son

Omegas, eso sería faltarle el respeto a nuestro Alfa”, dijo Maeve.
Al menos cuando no hay nadie alrededor. - Lo entendí
si me llamaran por mi nombre, sonaría una falta de respeto.
Maya sonrió mientras Maeve permanecía inexpresiva y luego
comenzó la preparación.
Las chicas me hicieron una trenza en el cabello, pero dejaron algunos mechones
envueltos alrededor de mi rostro, se colocaron unas pequeñas hojas plateadas en
mis trenzas. Me maquillaron tan bien que casi no podía decir si tenía maquillaje en
la cara.
Cuando me puse el vestido y me acerqué al espejo, me vi de una manera que

nunca antes había notado. A decir verdad, pensaba que era hermosa, tal vez era
narcisismo pensar eso, pero antes nunca sentí que mi madre tenía razón al decirme
que era hermosa.
Aunque mis zapatos se veían extremadamente delicados con tacones de metal
floreados, me sentí como Cenicienta caminando sobre las nubes. ¿Cómo pueden
ser tan cómodos los tacones...
“Adelie, te ves realmente hermosa”, exclamó Maya, con los ojos brillantes de
alegría.
— Sí. Luna. te ves hermosa”, dijo Maeve usando mi título.
“Bueno, chicas… ustedes fueron las que hicieron todo esto,” me reí de eso.
“No podemos hacer milagros, no podemos cambiar a alguien de feo a hermoso,
ya tienes una belleza, simplemente no es nada brillante”, dijo Maya y comenzó a
limpiar la mesa donde estaban todos los maquillajes y accesorios.
Empecé a ayudar a quitar los pendientes de la mesa, pero Maeve me detuvo y

me los arrebató de las manos.
— Ya son las 9 de la noche. Alpha te está esperando abajo”, dijo, sacándome
rápidamente de mi habitación antes de cerrar la puerta dejándome sola.
No tenía otra opción, así que bajé lentamente las escaleras y ya vi a Alpha y
Beta parados de espaldas a mí y vistiendo sus esmóquines.
Traté de ser lo más silencioso posible para no llamar demasiado la atención, no

fue difícil ya que los escalones estaban cubiertos con alfombra.
En el último escalón, mi talón golpeó el suelo de piedra. Alpha y Beta
inmediatamente me miraron. Escuché a Beta suspirar, pero no pude prestar atención.
Todo sucedió en cámara lenta, Alpha me miró directamente a los ojos.

Ni siquiera miró mi vestido, su boca estaba un poco abierta, ni siquiera miró
toda mi apariencia, pero me miraba como si yo fuera la luna misma,
esperaba que esto no fuera un sueño.
La voz de Beta me despertó de mi trance. "Luna Adelie, te ves como

una verdadera diosa, no creo que haya visto tanta belleza como tú, este
grupo tiene la bendición de leer una hermosa Luna como tú, eres perfecta
y...
Beta fue interrumpida por la voz del Alfa. “Es suficiente Rafael.
Miré hacia abajo a mis pies mientras mi confianza se hundía dentro de
mí, en realidad me sentía hermosa por primera vez, pero eso era todo lo
que el Alfa odiaba.
E ingenuamente pensé que en realidad vio algo en mí...
KAIRÓS
Adelie miró hacia abajo y apareció un nudo en mi garganta. ¿Estaba

sintiendo su dolor otra vez o era mi culpa por hacerla sentir menos hermosa
de lo que realmente es?
No quise que ese comentario sonara tan duro. No quería que él la
llamara hermosa así. Me imaginé lujuria en sus ojos mientras miraba a
Adelie, odiaba que hablara de ella así, quería ser yo quien dijera esas
cosas. Pero no sé como.
No puedo dejarla entrar. De todos modos, ella será mía.

la muerte, la deje entrar o no.
Incluso esta mañana en el entrenamiento. Por primera vez en mucho
tiempo, dejé que mi oponente me golpeara. Y todo porque el viento sopló
mucho del aroma de Adelie en mi dirección.
¿Y si ella entra? Podría volver a ser tan egoísta y pensar en mi propio
bien, solo para avergonzarme de lo que hice más tarde.
Raphael me dio unas palmaditas en el hombro, haciéndome un gesto
para que le dijera algo a Adelie. "Es hora de irnos", dije en lugar de lo que dijo.
quería que dijera.

Miré a Raphael una vez y su mirada estaba decepcionada. Él
quería que la aceptara, estaba seguro de que no sería como Mia.
Salí y Raphael y Adelie me siguieron, caminando uno al lado del otro. Mi
loba estaba enojada conmigo por dejar que Raphael caminara tan cerca de ella,
pero no es como si tuviera derecho a decir algo al respecto.
¿Qué voy a hacer? Agárrala por la cintura y tómala en mis brazos y
etiquétala para mostrarle a todos que la reclamo y que ella no es otra que yo.
Yo quería. Era todo lo que pensaba últimamente.

"¿Estás disfrutando de la manada hasta ahora?" Rafael le preguntó a Adelie.
¿Y si odiaba estar aquí? Tal vez se dio cuenta de que este es un grupo débil y
que necesita huir para estar en un lugar mejor..." "Es agradable. Me gusta.” Dijo
con voz suave, su oración sintiéndose un poco inconclusa.
Raphael no preguntó más, así que me impuse en nuestro vínculo. No

parecía tan segura, hazla hablar.
Raphael se aclaró la garganta muy fuerte detrás de mí.
Lo conozco desde hace mucho tiempo y sabía que estaba mirando
yo enojado —No pareces tan segura —le dijo—.
Le tomó un tiempo responder: “Me gusta este paquete.
Yo solo… —¿Solo qué? Querer irse. Me odia.
“Tengo muchas ganas de ver el bosque”, dijo.
- ¿Bosque? Rafael preguntó irónicamente. ¿Es eso?
Ruego a Dios que no vaya allí...
"Ni siquiera puedes cambiar, ¿por qué estás tan ansioso por ver el bosque?"
- le preguntó. Dios, maldito Rafael.
Me preguntó qué quería escuchar, pero no me gustó que él
mencionó que ella no puede transformarse. Por su propio bien.
"Yo... todavía, todavía puedo disfrutar de la naturaleza", dijo.
respondió, pero parecía que era algo más que disfrutarlo.
Nos acercábamos al sitio de la ceremonia, pero un niño
estaba en mi camino.
“Cassidy, ¿por qué estás aquí? Le pregunté enojado.
porque cada uno necesitaba estar en su lugar.
Cassidy tenía trece años y tenía el pelo largo y rojo. Pero lo que la hizo
destacar fue la marca de nacimiento roja en su mejilla derecha, que iba desde
el rabillo del ojo hasta la barbilla.
Aunque parecía que estaba llorando, no tenía tiempo para lidiar con eso
ahora. Tendría que hablar con ella más tarde. No creo que Adelie quiera
retrasar la ceremonia.
Cuando Mia tuvo su ceremonia, fue de lo único que habló e hizo todo lo que
estuvo a su alcance para apresurar la ceremonia. En ese momento, me pareció
una gran y deliciosa idea que ella quisiera gobernar esta manada conmigo, pero
cometí el error de darle demasiado poder.
— Cassidy. Hablaremos de eso más tarde. No tengo tiempo ahora. Dije y
limpié su mejilla acuosa. Ahora vuelve a la ceremonia.
Me saludó con la mano y estaba a punto de irse, pero miró hacia atrás y
se quedó donde estaba. Miré hacia atrás y era Adelie acercándose a Cassidy,
ella ni siquiera me miró. Caminé un poco hacia un lado para no estorbar.
ADELIA
—Luna. Cassidy bajó la cabeza hacia mí, pero tomé su barbilla con mi mano y
la levanté para mirarme a los ojos.
"¿Por qué una chica tan dulce está tan triste?" Pregunté con voz
preocupada. No podía dejarla ir así, claramente algo le pasó. Ahora ni siquiera
me importaba si Alpha lo aprobaba o no.
Cassidy volvió a mirarlo. Quería tu aprobación para hablar conmigo. Pero

yo era Luna, o después de unos momentos lo sería. ¿Le dejó claro al grupo
que solo sería un título vacío?
Alpha se paró detrás de mí y miré hacia atrás para ver si lo permitiría, para
mi sorpresa asintió.
“Luna… no es gran cosa. Superaré esto, solo necesito despejarme

la cabeza”, resopló.
“Háblame, niña”, le dije en voz baja buscando su contacto visual,
pero ella seguía mirando a todos lados menos a mí.
—Luna. Tenemos que irnos”, dijo Beta, lo que hizo que Cassidy se
estremeciera un poco. Supongo que es omega, pero eso no es más que
una categoría vacía.
Tan rápido como habló Beta, lo silencié, pero todavía no lo miré,
este fue uno de mis movimientos más audaces aquí.
“Adelante”, alenté a Cassidy y finalmente abrió.
“Esas chicas… se rieron de mí, no solo esta vez. Siempre dicen que
soy un error de la naturaleza y que siempre destacará la parte fea de un
lobo. Algunas lágrimas comenzaron a formarse en mis ojos.
"Mírame", le dije, y ella me miró. “Creo que eres una pieza magnífica,
y eres hermosa en todos los sentidos. Fuiste hecho para sobresalir.
Dije, pero no pareció hacerla más feliz. "Es fácil para ti Luna, dices eso
porque te destacas por tu belleza y no por una fea marca de
nacimiento", dijo de nuevo mirando hacia abajo.
“No lo sabes, pero mi madre siempre me hizo usar una capa para
cubrirme la cara. No sé por qué lo hizo, siempre pensé que era
demasiado horrible para que alguien me mirara.
Me reí un poco y continué.
“Ahora sé que todo esto se debe a que la gente siempre juzga la
apariencia primero, siempre ha sido así… pero debes salir y demostrarles
a todos que eres hermosa en todos los sentidos y más que solo en tu
apariencia. Todavía no entienden, pero lo harán.
Sus ojos se iluminaron cuando le hablé. - Tu eres linda,
recuerda esto, no importa lo que digan, eres hermosa. ¿OK?
"Está bien", sollozó ella.
Me incliné un poco más cerca y le susurré al oído. "Si hace alguna
diferencia, puedes decir que Luna dijo que eres hermosa".
“Un cumplido de Luna siempre fue un gran gesto.

Ella me miró sonriendo. "Gracias," se giró para regresar.
para la ceremonia en curso.
Y ahora tenía que enfrentar las consecuencias de hablar sin permiso.
Me volteé hacia Alpha, “Lo siento por ser tan irresponsable y hablar
fuera de línea,” dije sin mirarlo a los ojos y caminé al lado de Beta como
si ese fuera mi lugar.
Alpha murmuró algo por lo bajo y continuó acercándose a la
ceremonia mientras Beta se reía a carcajadas: "Oh, qué giro, ella es
realmente buena", dijo, pero no tenía idea de lo que estaba hablando.
Capítulo 8
LA CEREMONIA
ADELIA
Habíamos llegado a un lugar detrás de cortinas de raso rojo, ahora solo éramos
Alpha y yo, escuché conversaciones del otro lado. Estaba nervioso, pero Alpha
estaba tan tranquilo y firme, con las manos detrás de la espalda.
"¿Sabes cómo funcionan estas ceremonias?" Alpha me preguntó mientras
las luces se atenuaban ligeramente de nuestro lado, preparándose para que nos
fuéramos.
Me acaba de preguntar ahora. Realmente tendría más sentido si hubiera
preguntado antes, pero había esperado el último segundo para preguntar, ¿y si
no lo sabía?
— Sí Alfa. Yo se. Mientras hablaba, mi voz salió temblorosa.
Sentía como si todo mi cuerpo estuviera hecho de hielo y empezaba a formarse
sudor frío.
Sentí la mirada del Alfa sobre mí. "Va a estar bien", dijo, pero
lo hizo sonar más como una pregunta.
De repente, la conversación en la sala de ceremonias se detuvo y alguien subió
al escenario con pasos pesados.
“¡Les presento a Alfa Kairos García y Adelie Murrell!
La gente comenzó a vitorear cuando se abrió el telón y la luz brillante me
cegó por un segundo. El pasillo se veía mejor de lo que podría haber imaginado.
Tenía techos altos y ventanas de vidrio con acentos rojos en las paredes.
La gente estaba de pie aplaudiendo cerca de sillas de madera, todos con

cintas rojas atadas, el mismo rojo que estaba alrededor de mi cintura.
Alpha levantó la mano y la multitud se quedó en silencio. Todos se inclinaron.

"Paquete Nightwalker", Alpha habló con una voz que
no había oído antes. Era alto y claro, incluso resonando en el pasillo.

Hablaba con tanta fuerza que podía partir a cualquiera por la mitad.
“Estamos todos reunidos aquí para dar la bienvenida a nuestra Luna”,
dijo y la multitud volvió a enloquecer con vítores y silbidos.
Creo que estaba en una especie de trance. Todo sucedió tan rápido.
Alpha se volvió hacia mí e instintivamente yo hice lo mismo. Mi rostro
debe haber lucido asustado como un cachorro perdido, sabía qué esperar,
pero todavía se sentía como si todo fuera un sueño.
Alpha me miró directamente a los ojos, como si fuera la primera vez:
Adelie Murrell, ¿juras ser digna de Luna para la manada de Night Walker
y unirte a esto?
"S... sí", dije con miedo, mi voz se apagó.
Volviendo a mirar a Alpha, su mirada seguía firme, pero esperó a que
yo hablara. Negué con la cabeza y con confianza dije de nuevo: “Sí.
Esta vez, incluso mi voz resonó. Alpha me saludó con la mano y vi

orgullo en sus ojos. Juré unirme a la manada.
"¿Juras ser un digno protector y líder?"
- Yo juro. “Juro hacer todo lo que esté a mi alcance para ser digno
como protector y líder, juro proteger esta manada, aunque sea lo último
que haga.
Juro sacrificarme para mantener a esta manada a salvo.
“Juras ser valiente, amable, fuerte y justo con la manada de
¿Caminantes nocturnos?
“Sí.” “Juro ser valiente por la seguridad, amable con la gente, fuerte
en espíritu y justo con la igualdad.
Desde una de las sillas de enfrente, un anciano se acercó a nosotros
con una daga en ambas manos. Alpha tomó la daga de él y regresó a su
asiento.
Todavía estábamos uno frente al otro. Me miró a los ojos y luego
deslizó la daga en su palma derecha y una línea roja comenzó a formarse.
En un movimiento rápido, giró la daga que sostenía la hoja,

haciendo un gesto de que era mi turno.
Tomé la daga de él y cuando un pequeño dolor agudo comenzó en la palma

de mi mano derecha, tomó la daga y se la dio al guardia que estaba esperando
para tomarla.
Alpha primero colocó su mano izquierda justo encima de mi codo, como si
me estuviera sosteniendo. Sentí su toque, incluso a través del material de
encaje, era como si no hubiera nada allí.
Me estaba localizando por primera vez, su toque era como una sensación
de ardor, incluso un pequeño toque me mareaba y mis rodillas casi se
debilitaban, y entonces entendí que no solo me estaba abrazando. Me sostenía
con fuerza mientras yo apoyaba mi peso sobre él. Me estaba sujetando para
que no me cayera.
Me tendió la mano derecha y yo hice lo mismo. Nuestra sangre se reunió
como un choque a través de los cortes en nuestras manos. Él era el que me
sostenía con su mano izquierda sobre mi codo y su derecha en la mía.
La voz de Beta fue lo que me despertó. — ¡Alfa Kairos y Luna Adelie!

Una vez más, todos aplaudieron ahora con lágrimas en los ojos. Yo era
Luna ahora. Lo único que mi madre me enseñó a ser todos estos años, a ser
invisible, se ha ido.
Ahora necesitaba mantener mi secreto a salvo más que nunca, de lo
contrario, este paquete podría ser destruido por aquellos que me están buscando.
Alfa se liberó. Para asegurarse de que no me caía al suelo, una mujer

apareció a mi lado y me entregó un paño blanco para el corte en mi mano.
Sin pensarlo mucho, mi corte sanó, pero antes de que nadie se diera cuenta,
envolví la tela alrededor de mi palma. Pensaron que era débil y así será.
“El Elegido del Alfa. Prepárate para la carrera”, dijo Beta mientras Alpha me
alejaba del escenario. Así que habrá una carrera. ¿Qué espera Alfa de mí?
¿Caminaré tras ellos?
“La carrera… cómo…” Empecé a hablar nerviosa, pero me interrumpió.
"No corramos, simplemente liberémoslos", explicó.

mientras ambos nos adentrábamos en el bosque. Sentí un tirón hacia él, como
si eso fuera todo lo que importaba.
Tan pronto como estuve fuera del borde del bosque, me quité los delicados
zapatos y los dejé junto a uno de los árboles. Alpha se dio cuenta, pero no dijo
nada.
Supongo que parecía que no sería cómodo estar en un bosque con tacones
altos, pero era para poder estar más cerca de la naturaleza. No me sentía tan
fuerte estando lejos del bosque por más de un día.
El bosque era de un verde intenso. Aquí había muchos árboles y algunas

plantas que mi manada anterior no tenía. No estaba del todo limpio, había
ramas alrededor y algunos árboles caídos.
La multitud de personas ya estaba esperando en uno de los espacios sin
árboles. Estaba soñando despierto, pensando en lo que podía hacer con él,
pero aun así mantuve mi ritmo montando a Alpha y finalmente estábamos
parados frente a su pueblo elegido para una carrera.
“Luna”, habló Alpha a mi lado en voz alta y clara, “tienes que elegir al líder
de la carrera. “Él quería que yo eligiera, había algunas personas que ni siquiera
conocía aquí. Si elijo a la persona equivocada, ¿se enfadará? ¿O decepcionado?
Reconocí a Beta Raphael, mi guardia Nathan y la hermana de Alpha Fala.

Había varias otras personas que solo vi unas pocas veces.
Todo el mundo me miraba, esperando mi palabra. "Habla", dije y sus ojos
se abrieron como platos, incluso Alpha me miró.
De todos los que conocía por su nombre, ella era la menos conocida para
mí, y sabía que yo no le agradaba en absoluto, ni siquiera como Luna o la pareja
de su hermano. No la elegí para tener tu gratitud, la elegí porque tenía sangre
Alfa en ella, nació para ser líder.
"Cambio", exigió Alpha y las mujeres fueron a un lado del bosque y los
hombres al otro para quitarse la ropa.
Después de unos momentos, siete lobos grandes salieron con Fala al frente,
su lobo era completamente negro y sus ojos brillaban, su lobo era hermoso de
color marrón oscuro.
Alpha caminó hacia un lado fuera de su camino y lo seguí, sentí que

todo lo que estaba haciendo era seguir a Alpha. Los lobos llegaron
corriendo y Alpha se volvió hacia mí, deteniéndome a mitad de camino.
- ¿Porque ella? No hará que ella te respete de repente. No puedes
sobornarla para que te respete. Parecía enojado porque la había elegido.
Miré hacia el suelo.—No lo hice por querer su respeto —expliqué—.
- ¿Entonces porque? - Le preguntó.

"Ella es de sangre Alfa, puedo sentir que es fuerte", dije. “Lo siento,
pero pensé que sería justo para ella.
Alfa dejó escapar un suspiro. - Es justo. Lo siento —se disculpó.
Realmente lo sentía, no esperaba que Alpha Kairos se arrepintiera de nada
de lo que hizo o dijo.
“Debo mostrarte algo”, dijo y nuevamente lo seguí. No quería dejar el
bosque, pero estoy seguro de que volveré aquí pronto. Necesito cuidar
este bosque ahora.
Entramos en una especie de santuario. Parecía pequeño desde el
exterior, pero importante, e incluso dos guardias estaban parados frente a
él. Cuando Alpha entró, encendió la luz y la vista de docenas de armas
estaba frente a mí.
Caminé un poco más adentro del lugar, ya no estaba detrás del Alfa.
Todos ellos estaban siendo exhibidos dentro de vitrinas de vidrio. Esta no
era una sala de armas ordinaria. Estas armas parecían más lujosas.
“Mi abuelo pasó su vida recolectando armas que pueden matar a todas
las criaturas míticas”, explicó. “Nunca he visto ni la mitad de las criaturas
para las que tengo armas.
Pasé unas espadas que tenían rayas doradas. Una era una daga de
madera, para vampiros, supongo. Luego había una exhibición con una
espada de plata y al lado había una flor de acónito seca.
“¿Por qué quieres esto aquí? Pregunté, sin mirar a Alpha. ¿Por qué
querría alguien un arma que pudiera matarlos? por supuesto el
Los hombres lobo no eran inmortales y cualquier otra espada podría matarlos,
pero cuando era de plata, la muerte era instantánea.
“Esta colección no es para matar o proteger”, explicó. Lo miré y estaba
apoyado en uno de los estuches de espadas que se veían iguales pero eran
ligeramente diferentes.
Me atrajeron esas espadas, sentí que eran únicas. — Esta colección es
para el conocimiento de qué criaturas hay, si hay un arma para matarlo,
también habrá alguien con quien matarlo.
Sus palabras eran como sonidos apagados. Esas espadas a las que
estaba cerca, fui hacia ellas, todas tenían algún tipo de poción líquida dentro
de ellas. Había cinco en total, todos iguales pero ligeramente diferentes.
'¿Para qué es eso?' Le pregunté.
“Ninfas,” dijo y mi corazón se apretó. — Para ninfas celestiales, terrestres,
acuáticas, subterráneas, del bosque y de la naturaleza.
“El último era verde con mango marrón, dentro tenía un líquido verde que
volaba por la hoja.
Tragué un nudo que se había formado en mi garganta. - Tu ya
¿Conociste a una... una ninfa? Le pregunté.
“No, no conozco a nadie que lo haga. Tal vez ya están extintos, o
simplemente son buenos para esconderse”, sabía.
Mi madre fue asesinada con una hoja normal porque no era una ninfa de
agua llena, pero también era una loba. Lo mismo va para mí, puedo ser
asesinado como cualquier otro ser humano.
“Adelie,” pronunció mi nombre. “Quiero darte un regalo.
¿Cómo estás comenzando tu viaje a la Luna? Pero no sé qué.” Caminó por la
habitación y pasó todas las armas. “Es por eso que necesitas decir lo que
quieres como regalo. Puede ser cualquier cosa, incluso una pregunta personal
si lo desea.
Eso es todo lo que quiero, aprender más sobre él, cualquier pequeña
información podría tranquilizarme. Pero eso no era lo que importaba ahora.
Empujé el pensamiento de las preguntas fuera de mi cabeza "Está bien. Pero
mi regalo requeriría dos partes.
Se volvió hacia mí. - Estoy escuchando.
— Las gemelas Omega, Maya y Maeve, su madre y medio hermano son
enfermo. Se dice que la madre no tiene mucho tiempo, pero el hermano James
necesita cuidados permanentes para él. Si pudieras, me gustaría que pagaras
por su cuidador.
Alpha se quedó en silencio durante mucho tiempo. “Si me hubieran hablado
de lo que ha estado pasando, no necesitarían que tú hablaras por ellos.
“Las chicas los estaban cuidando bien, pero Maya encontró un compañero
y eso dejaría sola a Maeve, ya que el compañero de Maia es de fuera de la
manada.
Alfa me interrumpió. “Fuera de la manada, ¿qué estaba haciendo ella ahí
fuera? “Alfa estaba enojado.
“Y esta es mi segunda parte del presente, por favor sean comprensivos con
ella. Tiene miedo de hablar contigo. Por favor.
Alfa, eso es todo lo que quiero.
Dejó escapar un pesado suspiro. “Qué petición tan extraña. ¿Por qué no te
pidió algo? preguntó mirándome.
“Y para mí, mi mente estará tranquila. Y ayudar a los demás... es el
Yo sí,” expliqué.
Alpha dio unos pasos hacia mí. — Adelia. ¿Eres algo más que un hombre
lobo? “Él me preguntó y ahora me doy cuenta de que solo me trajo aquí para
demostrar que, sea lo que sea, puede lastimarme.
Mi corazón latía con locura. “No,” dije, mi voz segura y alta.
"No te creo", afirmó, pero dio unos pasos más hacia mí y ahora estábamos
a solo unos centímetros de distancia.
Llevó su mano a mi mejilla y me estremecí por el efecto que tuvo en mí. “Te
ves tan bien, pero no puedo dejar que vuelvas a hacer eso, ni a mí ni a la
manada.
¿Qué otra vez? ¿Estaba hablando de la Luna anterior? Me miraba, pero no
directamente a mí. Era como si estuviera mirando a través de mí. “No te he
dicho esto antes, pero pareces un ángel.
Y entonces sus ojos cambiaron. me miraba con una

expresión nunca lo había visto antes. Sus ojos me estaban absorbiendo.
No parecía enojado, sino más bien triste. Y luego me atrajo hacia sus labios.
Me estaba besando y en ese momento todo lo demás se había ido. Éramos
solo él y yo. Me hizo sentir como si pudiera ser yo, contándole todos mis
secretos más profundos.
Ahora sabía cómo se veían esas chispas parlantes. Cuando me abrazó, me
sentí como si nunca antes hubiera estado solo. Él era todo para mí. Yo quería
ser suya y él mía. Pero supe que eso nunca sucedería cuando se alejó, luciendo
furioso, y salió corriendo del santuario.
Le gritó a uno de los guardias: “Escóltenla de regreso a mi casa.
Mi loba aulló en agonía, lo necesitaba cerca.

"Luna, ¿estás lista para ir?" me preguntó un guardia. Y solo negué con la
cabeza y me fui mientras las lágrimas brotaban de mis ojos y mis dos
compañeros sacudían mi cuerpo por dentro.
Nunca antes me había sentido tan frágil, se sentía como si mi corazón se

hubiera convertido en vidrio y mis dos compañeros se lo arrojaran, apenas
capaces de sostenerlo. Pero, ¿y si uno de ellos se cae? ¿Cuál me hará romper?
Ahora deseo que los cazadores que me buscan me encuentren y me lleven.

Pero fue solo mi madre quien me detuvo, pasó su vida protegiéndome y no
podía tirarlo a la basura.
Capítulo 9
CASTIGO ALFA
ADELIA
A la mañana siguiente, me había acostumbrado al dolor de cabeza. Era

como si cada vez que me lastimaba, la herida no sanaba, solo seguía
creciendo.
Mientras bajaba las escaleras, comencé a pensar que había cometido
un error al bajar porque había gente aquí. Tres hombres de pie frente a
Alpha Kairos.
"Oh... ¿y quién es este?" dijo un hombre calvo mirándome con un
acento extraño.
De repente sentí la necesidad de ponerme el abrigo y taparme, de
hacerme invisible.
Alpha no dijo nada, así que continué hacia abajo. quería volver a subir
pero ya me han visto y sería extraño hacerlo.
“Creí que vivías solo Kairos. ¿Es esto algún tipo de entretenimiento
para ti? Es muy bonita —habló otro hombre.
Pensó que yo era una especie de prostituta.
"Ella es Luna de la manada Nightwalker", dijo Alpha.
en un tono molesto mientras sus puños estaban apretados.
“Mis más sinceras disculpas, Luna. dijo el hombre y caminó hacia mí
para besarme la mano, pero retiré mi mano antes de que sus labios la
tocaran.
El hombre se enderezó. “Vine aquí con mis hermanos, a buscar a
alguien”, dijo, no todos parecían hermanos. El segundo tenía el cabello
rubio decolorado y el tercero era pelirrojo, pero no hablaba mucho, era
aún más distante que los demás.
Mi corazón dio un vuelco cuando habló de buscar a alguien — ¿A
quién… estás buscando? Le pregunté al hombre que todavía estaba
en frente de mí.
"¿No te lo dijo Kairos?" Volvió a mirar a Alpha y luego a mí. “Alguien poderoso,
una criatura con poderes extraordinarios. Alpha King nos envió a buscarlo. Y tráelo
para... hablar con él.
No parecía tan seguro de qué decir, pero Alpha King era bueno y no lastimaría
a nadie, incluso con poderes. Alpha King era el gobernante de todas las manadas.
Él era quien mantenía la paz alrededor de todos ellos.
– ¿Qué tipo de poderes? Le pregunté.

“No lo sabemos, pero es el hijo de la Muerte y una ninfa.
Mantuve mi expresión lo más seria posible, me estaban buscando. No tenía
grandes poderes o tal vez los tenía, pero no sabía cómo usarlos. "¿Tal vez viste
algo sospechoso?" - Le preguntó.
Negué con la cabeza.

- Muy bien. Alpha Kairos, tenemos que irnos. La búsqueda no se detendrá hasta
que lo encontremos vivo o muerto. Hasta nuestra próxima reunión”, dijo el hombre y
se fue con los dos siguiéndolo. Alpha Kairos parecía tan enojado como siempre.
Él estaba allí, así que me arriesgué. — ¿Qué dice el Rey Alfa?

querrías con... esto? Pregunté, refiriéndose a mí mismo como 'esto'.
Mantuvo la mirada apartada.
"Están mintiendo. No es el Rey Alfa quien está buscando esto, solo un despistado
les creería. Trabajan para alguien que solo tiene las peores intenciones. Para
destruir. Si esta criatura es tan poderosa como dicen, está buscando una manera de
tomar el control del Rey Alfa y todo lo demás más allá del mundo humano.
Finalmente me miró y miró mi vestido largo que llevaba puesto. "Necesito enviar
un mensaje a Alpha King", dijo y se fue a su oficina.
Necesitaba ver a la madre de Maya y Maeve. Salí y Nathan estaba de pie en la

puerta.“Adelie, buenos días”, me saludó.
“Buenos días, mi caballero de brillante armadura. — Cuando dije
su sonrisa se iluminó, pero rápidamente la ocultó entonces. “Quiero ir a donde

viven Maya y Maeve”, le dije.
-Adelie estas segura? Son omegas”, cuestionó.
“Sí, llévame allí.
La familia de Maya y Maeve vivía en una pequeña casa al lado de la
empacadora. Si la familia era numerosa, por lo general vivían en su propia casa.
En la casa de carga vivían en su mayoría lobos sin pareja.
"Tenga la amabilidad de esperarme aquí", le dije a Nathan mientras asentía

y tocaba la puerta de madera.
Un momento después, la puerta se abrió y Maya estaba allí. —Luna. Tu estas
aquí. Parecía sorprendida, pero parecía feliz.
"Dije que vendría, ¿no?" Quería conocer a tu madre.
"Sí, pero no esperaba que vinieras,
por favor entre”, me dijo.
Entré a una casita acogedora, olía a fresco, y vi algunas plantas cerca de
las ventanas. Maya entró en la habitación de la derecha y yo hice lo mismo.
—¡Maeve! Adela está aquí. “Me di cuenta de que no usó mi título de Luna
porque Nathan no estaba cerca. Maeve me miró y se levantó del sofá donde
estaba sentada junto a un chico en silla de ruedas. "Mi Luna", me saludó Maeve.
"Este es James", dijo Maeve y lo rodeó con el brazo. Iba en una de esas sillas
de ruedas que tenían control remoto para poder controlarla con el movimiento
de una mano, me seguía con la mirada.
"Puede que tenga una discapacidad, pero puedo hablar por mí mismo", dijo
James, mirando a Maeve con irritación. “Encantado de conocerte, Luna,” dijo,
mirando a través de su cabello castaño.
"Me alegro de conocerte también, y por favor llámame
Adelie —dije. Él asintió y me sonrió.
“Gracias Adela.
Maya habló a mi lado. - ¿Te gustaría una taza de té?
“Oh no, gracias. No quiero molestarte demasiado, solo quiero conocer a
tu madre.
“Nunca serás una molestia para nosotros. Le mostraré su habitación —dijo Maya
mientras subíamos las pequeñas escaleras. La primera habitación a la derecha era
la suya.
Estaba durmiendo en su cama, vestida con un camisón blanco y una gruesa
manta de lana sobre ella. - ¿Cual es el nombre de ella? Pregunté, acercándome aún
más.
"María", dijo Maya en voz baja.
"¿Puedes dejarnos a María ya mí solos?" pregunté y ella asintió, cerrando la
puerta detrás de ella.
Me senté en una silla que estaba al lado de su cama. María no se movió y sus
ojos estaban cerrados.
Solo un ligero suspiro salió de ella. Con cada respiración se sentía como
Otra arruga estaba creciendo en su rostro.
Tomé su mano y enfoqué toda mi atención en ella, traté de intercambiar nuestras
energías, pero no funcionó, no pude encontrar su debilidad. Ella se estaba muriendo
lentamente de vejez.
En la esquina de la habitación apareció una persona. Muerte. Llevaba su habitual
abrigo negro y una bufanda gris.
- ¿Cuanto tiempo? Le pregunté.
Mi padre se me acercó. "Mañana a las 8:32", dijo y
puso su mano en mi hombro.
- ¿Cómo estás? Me preguntó y me levanté y me alejé.

Me acerqué a él y lo abracé con fuerza, apoyando la cabeza en su pecho.
“¿Me estabas mirando? Le pregunté. La muerte tenía la 'visión' y podía ver las
acciones de cada persona. Tuvo la visión para poder ver si una persona es digna de
un deseo de muerte o no.
"Siempre tengo curiosidad por saber lo que estás haciendo, mi amor", rompió el
abrazo. “Estás triste aquí por ser Luna y también por tu pareja.
"Estaré bien", dijo. “Eso es lo mejor que tengo. Vivir en una pequeña banda que
muchos temen me esconderá de los que me buscan. Solo quería tener a alguien
para mí. Alpha Kairos no me quiere.
“Él tiene sus razones para comportarse de esta manera. Tenga fe

en él”, dijo y se acercó a la ventana. "Meredith", dijo el nombre de mi

madre. “Ella nunca te protegió de quien sea que te esté buscando ahora”,
dijo. Quería preguntar, pero ya se había ido.
Si no es de ellos, entonces ¿de quién?

Poco después, bajé las escaleras, donde Maya me estaba esperando.
Ella me dio una sonrisa débil.
"Hablé con Alpha ayer y consiguió un cuidador y le advertí sobre ti y le
pedí que fuera comprensivo", dije.
- Gracias. Gracias Adelie”, dijo Maya entre lágrimas y me abrazó con
fuerza.
Por el resto del día, Nathan permaneció a mi lado mientras caminaba
alrededor de la manada. El crepúsculo comenzaba a formarse en el cielo
nocturno.
Necesitaba encontrar una manera de ir solo al bosque.
Así que volví a casa y me despedí de Nathan. — Gracias Nathan, me voy
a mi habitación. Hasta mañana.
Estaré aquí si cambias de opinión. “De ninguna manera iba a pasar por
la puerta principal, Nathan estaba allí y cuando Nathan fue a su casa, los
guardias vendrán y harán el turno de noche.
Todavía tenía que esperar a que Helen me trajera la cena, no.
porque tenía hambre, sino porque ella vería si me iba.
Cuando terminé de cenar y bajé los platos, me acerqué a la ventana.
Lo abrí y miré hacia abajo, era bastante alto, pero había un árbol creciendo
al lado.
Estaba un poco lejos de alcanzar con algo más que mis dedos.
Toqué un extremo de la rama y planté algunas más para que fuera más
fácil bajar allí. “Gracias”, le agradecí al árbol.
Bajé con cuidado del árbol y cuando mis pies tocaron el suelo,
finalmente me sentí libre. No había nadie alrededor, pero aun así caminé
con tanto cuidado como pude, mirando a ambos lados y mirando hacia
atrás de vez en cuando.
Finalmente, llegué al bosque y ahora era mi momento de trabajar.
Caminé durante mucho tiempo hasta que encontré un gran árbol. estuvo bien
grande, el más grande que pude encontrar aquí. Extendí mi mano hacia ella
y la apoyé sobre la áspera corteza de madera.
- ¿Como estas mi corazon? Hablé en mi cabeza y sentí la
árbol rompiendo sus ramas como si alguien fuera a romperle los huesos.
Unos ojos aparecieron en ella, e hizo un ruido que me hizo entender que
nadie le había hablado en mucho tiempo. El árbol ahora parecía más
humano, seguía siendo un árbol, pero tenía algo que me parecía un cuerpo.
'El bosque está sano, nada que curar'. explicó en voz baja y gruesa.
'Pero alguien que no pertenece aquí ha vagado por los bosques. Los
vampiros estaban aquí. No deseaban el bien.
Los vampiros tenían prohibido estar aquí. "Y en cuanto a los guardias
que patrullan la frontera, ¿están al tanto?" 'No.' Necesitaba advertir al Alfa
sobre esto. 'Gracias', le dije al árbol y volvió a verse como un árbol normal.
Me arrodillé y absorbí la energía. Puse mis manos en el suelo y todas las

ramas que habían caído de los árboles desaparecieron en el suelo.
El bosque ahora se veía limpio, ni una sola hoja estaba en el suelo. Quería
quedarme aquí más tiempo, pero necesitaba hablar con el Alfa.
Volví y pensé en lo furioso que estaría Alpha al saber que había actuado
a sus espaldas. Necesitaba pensar primero en la seguridad de la manada,
estaba lista para tomar cualquier castigo que hubiera para mí si eso
significaba el bienestar de la manada.
Estaba pensando en todas las opciones sobre cómo podría explicarle
esto a Alpha. Estaba saliendo del bosque y mi cabeza estaba baja mientras
pensaba.
— ¡Adelia! Alfa me llamó enojado.
Miré hacia arriba y me hizo detenerme en el camino. Alpha estaba furioso

y como que corrió hacia mí.
"¿Qué estabas haciendo allí solo?" ¿Por qué no piensas con la cabeza?
Es peligroso. ¿Y si los guardias no podían luchar contra un vampiro y él
había entrado? ¿Crees que te perdonaría la vida? - Él gritó. Esperé para
explicarme.
Era ahora o nunca, si no lo decía ahora, solo empeoraría la situación,
que alguien invada el territorio es un asunto urgente. "Vi a un vampiro allí", dije
en voz baja. No podría decir que ese árbol me dijo eso. Esa mentira era la única
opción.
- ¿Qué? ¿Estabas solo en el bosque con un vampiro? gritó una vez más,
sus venas saliendo de su cabeza.
“Él… él no me vio, él… él solo estaba caminando. expliqué tartamudeando.
Me tomó del codo y caminó hacia la casa a un paso rápido que me tenía
medio corriendo a su lado.
Esta vez no había ningún sentimiento especial en su toque, porque era ira,
estaba respirando con dificultad.
Cuando finalmente llegamos a casa, Nathan estaba allí y estaba
sorprendido de verme.
"Yo... yo..." comenzó a hablar en estado de shock, pero Alpha fue más
rápido, fue directo hacia él dejándome atrás.
"Nathan, ella estaba sola allí con un vampiro", le gritó Alpha.
él. “Serás castigado por esto.
¡No! No puedo dejar que esto suceda. La culpa fue mía. Corrí hacia el Alfa
y tiré de su brazo mientras se giraba y me lanzaba una mirada de enfado.
“No fue su culpa. Castigame. te engañé Por favor, le supliqué.
"Luna..." Nathan comenzó a hablar, pero Alpha levantó la mano, haciéndole

un gesto para que se callara.
"¿Quieres que te castigue?" - Él me preguntó.
“Si perdona a Nathan, entonces sí. Él no tiene la culpa. Pensó que estaba
en mi habitación —expliqué.
Alfa pensó por un segundo. "Nathan, eres libre de irte", dijo.
Nathan me miró pero no se atrevió a decir nada frente a Alpha.
Alfa se giró para mirarme. No se te permitirá irte durante una semana. Y

luego solo saldrá cuando consigas uno más
guárdalo para ti —dijo, tomándome por el codo otra vez, y empujándome

adentro.
Cuando entramos, subió las escaleras dejándome sola.
¿Una semana? Nunca he estado fuera del bosque por tanto tiempo. Me
volveré loco.
Capítulo 10
EL PRIMER ATAQUE
ADELIA
Hace tres días que estoy encerrado aquí.

Estaba tratando de ser fuerte el mayor tiempo posible, pero mis instintos
luchaban todo el tiempo. Mi piel se estaba poniendo más pálida por hora y mis
venas en mis muñecas estaban abultadas de color verde oscuro.
Ya no podía comer nada. Me sentía débil, pero tenía la sensación de que

si quisiera, podría derribar todos estos muros. Mi loba Madeline se había ido
por completo, me necesitaba, pero yo no tenía fuerzas suficientes.
Necesitaba la naturaleza conmigo ahora, no podré seguir así por mucho

más tiempo.
KAIRÓS
Estaba haciendo esto para protegerte. No quiero que salga lastimada, es

débil, ¿en qué estaba pensando al escabullirse sola en el bosque?
Mi Beta estaba sentado en mi oficina. - No puedes bloquear

en mi casa. Ella no es una niña humana”, dijo Raphael.
- ¿Que quieres que haga? ¿Encerrarla en una celda? “Me burlé de él.
Rafael se rió. “¿Qué quiero que hagas? ¿Alguna vez se te ha pasado por
la cabeza que tal vez solo está actuando de esta manera porque no hay nadie
para ella aquí?
- ¿Qué quieres decir? Le pregunté mientras me sentaba en el
mi silla.
“Ella está aquí sola, no tiene familia ni amigos. Pero lo que es más
importante, la estás rechazando —dijo Raphael, la última parte en un susurro.
- ¿De qué estás hablando? Yo nunca lo rechazaría. Eso es lo más cruel

que un lobo puede hacerle a otro —dije con los dientes apretados.
“Dices eso, pero no te das cuenta de cuánto la estás lastimando. Él se
levantó.
"No creo que sea un hombre lobo normal", dije como si
algún tipo de disculpa y Raphael se congeló en el lugar pensando en algo.
“Yo tampoco lo creo, pero eso no debería importar. No todo el mundo es
destructivo cuando tiene poder.
Se aclaró la garganta. “Voy a hablar con los guardias sobre la situación de
los vampiros, y la manada Sombraluna vendrá a entrenar la próxima semana,
así que prepárate. Raphael se fue, cerrando la puerta detrás de él.
Adelia. No podía dejar de pensar en ella, incluso cuando estaba debajo de

mis sábanas pensaba en ella. Ella era mi compañera, pero estoy tan asustada,
¿y si ella es como Mia, una criatura malvada hambrienta de poder?
Cuando la besé, fue como si todo estuviera finalmente en su lugar. La

necesitaba cerca, lo más cerca posible. Ha demostrado que le importa esta
manada. Ayudó a Cassidy, Maya y Maeve. Pero, ¿y si es solo para mostrar?
Mia hizo lo mismo, me hizo creer que era buena, pero luego se asustó.
No podía dejar de pensar en el peor de los casos, ¿y si ella es la que

buscan esos bastardos?
No podía ser, decían que es hija de la Muerte y una ninfa, mientras que
Adelie es un hombre lobo. Es débil, pero sigue siendo un hombre lobo.
No pude dormir en toda la noche, tenía una sensación extraña en el

estómago. Hoy dormí un poco más tarde porque me sentía muy débil.
Algo andaba mal, pero no podía imaginar qué. hasta mi

Kye Wolf estaba en un estado mental débil. Me tomó un tiempo cuando me

estaba preparando para el día. Incluso después de una hora de arreglarme,
no me sentía mejor.
Y luego un golpe vino de la puerta de mi dormitorio. Esto fue inusual.
No podía ser Beta, siempre me llamaba mentalmente antes.
- Entre. Dije fuerte y claro, poniéndome de pie.
Era Helen, pero estaba jadeando, es un desastre ambulante, pero incluso
con todas las carreras que hace todos los días, nunca respiraba tan fuerte.
Helen me miró recuperando el aliento. "Alfa", dijo y,

finalmente, fue detenida. No era normal que ella fuera así.
— ¿Qué es Helena? Yo le pregunte a ella.
"Algo anda mal con Luna", dijo. Sin dudarlo, dejé mi
habitación como un huracán.
- ¿Dónde está ella? - grité ya caminando hacia el ala derecha.
“En su habitación”, dijo Helen detrás de mí mientras desaparecía debido
a mi velocidad.
¡Por favor, mantente bien! me dije a mí mismo.
Abrí su habitación y ella estaba acostada en el suelo de la habitación, con la espalda
para mi. Me acerque a ella y puse mi mano en su hombro.
Respiraba, pero con gran dificultad. Tan suavemente como pude, la giré
para que me mirara, pero jadeé por la sorpresa.
¡Llama al médico de la manada a mi casa ahora! Le dije a Raphael y luego

apagué mi mente. No quería que me cuestionara.
Adelie tenía los ojos abiertos, pero no parpadeaba, ella

simplemente miraba donde lo giraba.
Lo que me hizo jadear fueron las venas verdes que comenzaban en las
esquinas exteriores de sus ojos hasta llegar a sus sienes. Su piel era de un
blanco pálido, sus labios estaban resecos. No podía ocultar la culpa que
estaba dentro de mí.
Todo esto fue mi culpa, lo hice.
La levanté, estaba fría contra mi pecho. Puse su cuerpo frío en la cama. Y

noté que parpadeó una vez.
— ¡Adelia! ¡Adela, por favor! - Yo grité. No puedo perderlo. - ¡Quédate bien,
por favor!
Le toqué la cara y la mano para intentar obtener algún tipo de reacción, pero
no hubo nada. Escuché una voz detrás de mí pero no pude.
me concentrar.
De repente, unas manos me estaban apartando. Fue Rafael. El doctor vino
al lado de Adelie. No lo solté al principio, pero era muy débil. ¿Cómo puedo ser
fuerte cuando ella es así?
esperar. Te necesito Adela.
Raphael y yo nos sentamos fuera de la habitación mientras el doctor estaba
con ella. - ¿Cuanto tiempo? Hablé solo, pero Raphael respondió.
"Dale un descanso.
Esperé y esperé hasta que se abrió la puerta, me puse de pie y empujé al
doctor un poco lejos del marco de la puerta, corriendo para ver a Adelie.
Al verla, me detuve en seco. - ¿Qué? "Tartamudeé, ella estaba

de la misma manera que lo dejé, mirando en una dirección.
“Alfa, no sé qué le pasó”, dijo el médico.
- ¿Cómo no sabe? - Grité. “Tú sanas a la gente, tú los sanas.
Ahora arréglalo. — Tomé al doctor por el cuello — ¡Resuélvelo!
Rafael me empujó lejos de él.
“Alfa, ella no está respondiendo a ninguno de los medicamentos que le estoy
dando. Está viva, pero…” El doctor siguió hablando, pero no lo dejé terminar.
“No hay pero,” gruñí. Va a descansar. Es sólo un momento de debilidad.

“Traté de calmarme, pero fue una mentira que me dije a mí mismo.
Gemí de frustración. "Raphael", grité y él dio un paso justo a mi lado.
“Contacta con Jasmine Barnes,” dije lo más rápido posible.

amargamente como pude, sin siquiera forzar el odio contra ella.

Una vez me dijo que mis padres merecían ser asesinados y por
Que nunca podré perdonarla.
Murieron protegiéndome en una pelea contra las brujas, pude leer que se
salvaron de alguna manera. Si tan solo hubiera entrenado más. En ese
momento estaba muy débil y nunca me lo perdonaré.
“Alfa, es una bruja”, me dijo Raphael.
“Haz lo que te digo y tráela aquí lo antes posible. “Ella es una bruja, pero
también puede ver más allá de todos sus hechizos, puede ver más allá de lo
que está en el papel. Tal vez ella podría ayudar.
Inmediatamente Raphael se puso manos a la obra y empezó a conducir

hacia ella. Ella vivía entre humanos normales, todas las brujas lo hacían. No
tenían manadas como nosotros los hombres lobo.
Estaba tan débil que ni siquiera podía pararme al lado de Adelie. Me dolía
más mirarla que pensar que lo había hecho.
Durante las próximas horas, me senté en mi oficina constantemente mirando
algunos papeles, tratando de distraerme, pero no funcionó. La puerta de mi
oficina se abrió. Era mi guardia Nathan.
“Alfa, alguien nos está atacando”, dijo, y ambos salimos corriendo.
Cuando mis pies tocaron el suelo, me detuve un poco, era la primera vez
que salía hoy. La hierba bajo mis pies se sentía rígida y seca.
Pero llovió durante la noche, pensé. No debería ser así.
“Alfa,” Nathan me sacó de mi trance y me apresuré a la pelea.
Al ver al primer lobo desconocido corriendo hacia mí, me moví, rasgando
mi ropa y también a Nathan. Cuidó a este lobo mientras yo corría por el territorio
de la manada.
Mis ojos se abrieron, pero no dudé en derribar al lobo frente a mí. Le mordí
el cuello y él aulló de dolor.
No lo maté, solo lo lastimé lo suficiente como para que no hiciera nada más
que llorar de dolor. Dudé en matar porque aún no había visto toda la situación.
Pero ahora vi.
Mi manada estaba luchando contra hombres lobo desconocidos. Había

muchos gritos de mi manada.
¿De dónde vienen ellos? Mi manada no tenía nada que ofrecer, éramos pequeños.
¿Que quieren ellos?
Tenían muchos atacantes. Mi mochila era muy pequeña. Vi a algunos de mis
lobos tirados en el suelo heridos y me hizo hervir la sangre. Ahora solo podía ver rojo.
Ataqué a un lobo tras otro, pero aun así no fue suficiente, ellos
simplemente siguieron viniendo y mi manada disminuyó.
Entonces una bala me dio en el hombro. Al principio no me dolió, pero luego ardió
como el fuego. Fue una bala de plata. Seguí luchando hasta que no pude más y el
dolor en mi hombro era insoportable.
Inhalé el aroma de algo familiar. ¡No!
Miré hacia atrás y era Adelie quien estaba parada allí mirándonos pelear contra un
mira asustado Ella fijó sus ojos en mí.
¡Correr! Intenté decírselo, pero estaba en mi forma de lobo. Adelie miraba a su

alrededor con lágrimas en los ojos.
Entonces algo explotó de ella como si ella misma no lo hubiera esperado. Humo
negro se elevó de sus dedos y dio vueltas a su alrededor. Todos se dieron cuenta y
detuvieron la pelea.
Adelie ahora parecía más fuerte y más poderosa mientras
se acercó al epicentro de la pelea.
“¡Aléjate de mi manada! Ya no tenía la misma voz dulce y gentil. Su voz era ahora
un gruñido profundo y lobuno.
Noté que todos miraban con miedo, no solo los atacantes sino también mi manada.
Incluso yo estaba asustado.
Adelie caminó un poco más y cayó de rodillas. Pon tus manos

en el suelo y levantó la cabeza con ira.
Algo empezó a temblar bajo mis pies. Todos cambiaron de lugar sin saber lo que
estaba por venir. Pero luego, mil vides comenzaron a crecer del suelo y con rapidez
envolvieron a todos los lobos atacantes.
Intentaron correr y liberarse, pero las enredaderas se sentían fuertes.

Ninguno de los lobos de los Night Walkers quedó atrapado. Simplemente parecían
asustados.
Vi a Adelie levantarse y el humo desapareció de ella, pero las enredaderas

permanecieron sobre los atacantes. No estaban muertos, solo atrapados.
Miró hacia abajo a sus pies y dejó escapar un fuerte grito.
Sentí otro dolor agudo en mi hombro y mi visión se oscureció.
Capítulo 11
PAQUETE DE SANACIÓN ADELIE
Levanté la cabeza y vi que el lobo de Alpha estaba siendo llevado por dos
hombres.
Estaba herido, sentí el dolor en el hombro derecho y fue mi culpa.
Miré a todas las personas, me estaban mirando, notando cada uno de

mis movimientos. Quería correr detrás de Alpha, pero vio lo que podía
hacer, querría que me fuera. Muchos miembros de la manada resultaron
heridos.
Siempre pensé que mi madre me protegía de las personas que venían
a mí, pero protegió al mundo de mí. Tenía el poder de destruirlo todo.
“Llevad a todos al hospital de la manada”, gritó un hombre a los demás

mientras cargaba a un anciano en su hombro.
Necesitaba ayudar. Puedo ayudar. Puedo tratar de arreglarlo tanto
como pueda antes de que me echen de este paquete.
Los guardias que resultaron ilesos llevaron a los atacantes, supongo, a
prisión.
Vi a un anciano con barba y canas. Era el médico de la manada. Corrí
hacia él. - Yo quiero ayudar. Por favor, déjame ayudarte —supliqué.
Se volvió hacia mí. “No tienes que pedirme nada. Alpha está herido y
su segundo al mando, Beta, está fuera de la ciudad. Estás a cargo. Luna.
“Pero… no puedo estar a cargo. Lo hice…. era mío

¡culpa!”, grité. “Vinieron por mí, no por la manada.
El médico miró a su alrededor. “Resolveremos esto más tarde.
- ¿Puedo ayudar? pregunté de nuevo.
"Tú… no…" Tartamudeó, frustrado.
— Claro.
Empezó a caminar hacia el hospital y yo lo seguí.
El hospital tenía muchas camas en fila, ahora estaban llenas de
gente llorando de dolor, y los sanos ayudando a otros.
Un adolescente corrió al médico. “Doctor, sígame”, dijo el niño corriendo. El
médico no perdió el tiempo y corrió tras él.
“Tres personas fueron alcanzadas por balas de plata”, explicó el niño. “Alfa,
el pequeño Jack y la hermana Betas, Riley.
Abrió una puerta blanca. Allí los vi, tres personas descansando en
camas cubiertas con sábanas blancas.
Una era una mujer joven que estaba despierta pero gritaba de dolor,
un niño pequeño con los ojos cerrados. Y el Alfa, sentí tu dolor.
"Solo hay dos antídotos de plata", exclamó el niño.
- ¿QUÉ? gritó el doctor, pero luego caminó hacia Jack y Riley. “Dale el
antídoto a Alpha y Jack.” Ni siquiera miró la situación del Alpha.
Riley seguía gritando. Quería ayudar al Alfa, pero necesitaba pensar

racionalmente. - ¡No! - Grité. “Eso no está bien,” dije.
— ¿Luna? ¿Sugieres que elijamos dárselo a Riley? preguntó el chico.
“Sí,” dije, tragando un nudo que sentía en mi garganta. “Dale el antídoto

Alfa. "Cuando dije eso, ambos me lanzaron una mirada desagradable. "Juramos
proteger al Alfa", exclamó el doctor con furia.
"Y también has jurado proteger al resto de la manada", dije con confianza.
“Alfa es el más fuerte de toda la manada. No darle un antídoto a Riley la matará.
Alpha sufrirá un dolor horrible, pero sobrevivirá.
Mi corazón se apretó al pensar que el Alfa estaba sufriendo. El médico
vaciló.
“Estoy diciendo esto como tu Luna. Es una orden -dije en
un tono que no creía tener. Era mi voz de Luna.
Le dio al niño un antídoto y se quedó con uno. Los dos inyectaron el

antídoto y de inmediato fueron a sacar la bala.
Fui al Alpha y tomé las pinzas como vi que hizo el doctor. Puse mi mano en
su pecho y creo que me lo imaginé cuando lo vi estremecerse bajo mi toque,
pero aun así mantuve mi mano allí.
Necesitaba hacer esto rápido. Tomé un último respiro y coloqué las pinzas
en su herida, cuando vi la bala, la saqué. Era pequeña, pero una bala de plata
aún más pequeña podría matar a un hombre lobo.
Una gran cantidad de sangre brotó de su herida.
- ¡Luna! ¿Qué estás…? El doctor empezó a hablar y me apartó, pero me
regresé con fuerza y puse mi mano sobre su herida.
Sentí un dolor terrible en el hombro que me hizo derramar una lágrima.

No me había imaginado que tuviera tanto dolor.
Una pequeña luz escapó de mi mano y cuando la levanté, solo quedaba
una cicatriz, como si tuviera uno o dos días.
—Luna. Ayude a aliviar el dolor de estos dos”, dijo el niño mientras el
médico se paraba con una expresión perpleja.
Caminé sobre ellos mientras me agarraba a los lados de las camas porque
mi cabeza daba vueltas por tanto dolor, pero aun así los curé a ambos.
No deberían tener demasiado dolor cuando se despierten, pero Alpha lo

tendrá, cuando se despierte necesitaré algunas sesiones de curación más
hasta que esté realmente curado.
Luego fui a los otros heridos. Había unas pocas docenas, y todos me vieron
curarlos. Nunca había sentido tanto dolor, me dolía cada parte del cuerpo.
Aguanté tan fuerte como pude, pero no pude evitar las lágrimas que
brotaban de mis ojos. Caminé con movimientos rígidos.
- Gracias. Luna”, escuché decirme a Fala cuando terminé de curarle la

pierna mordida. No respondí ni le sonreí. Yo no podía.
Solo tenía suficiente energía para sanar e incluso eso fue

forzado. Hablar se sentía demasiado agotador y una pérdida de energía.

Después de unas horas todos fueron atendidos, la mayoría fue a
casa para descansar de todo, algunos se quedaron en el hospital.
Estuve en una habitación con Alpha, lo trasladaron a una habitación
destinada a un paciente. Me senté en una silla al lado de su cama.
Little Jack y Riley ya se habían despertado, pero aún estaban bajo el cuidado
de los médicos en el hospital.
Ya estaba oscuro. Miré el reflejo en la ventana. Y me encontré con los ojos
rojos y las venas verdes saliendo de mis sienes. Mi vestido verde estaba
manchado de tierra y sangre.
Necesitaba esperar a que Alpha se despertara, solo entonces pensaría en
mí e iría al bosque para recuperar algo de energía. Ni siquiera sabía cómo iba
a llegar allí, mis pies estaban entumecidos.
Miré a Alpha, parecía estar durmiendo plácidamente. Sus rizos castaños
estaban húmedos por todo el sudor, pero aún pensaba que era el hombre más
guapo que había visto en mi vida.
Entonces su pecho se movió hacia arriba y hacia abajo en un movimiento
rápido. Y finalmente escuché un fuerte gruñido proveniente de su cama, incluso
el doctor lo escuchó porque entró a la habitación.
Volvió a gruñir y un guardia entró aquí, era Nathan, tenía
Logró pelear sin recibir un rasguño.
Alpha abrió los ojos y apretó la mandíbula, estaba conteniendo el dolor. -
¿Por qué duele tanto? preguntó con voz ronca, apretando los dientes.
- Plata. No te dimos un antídoto”, explicó.

Alpha frunció el ceño y se enojó un poco. - ¿Por qué? preguntó, mirando al
doctor con enojo.
"Uh... bueno... yo", tartamudeó, pero luego hablé desde mi silla.
porque no me podía mover.
"Le dije que no hiciera esto", le dije con los ojos entrecerrados. Alpha me
devolvió la mirada.
"No hubo suficiente para los tres heridos que se lastimaron con plata", dije,
tratando de mantener la cabeza erguida. “Habrían muerto sin el antídoto. lo
siento tu estas
en tanto dolor, es mi culpa.

Alpha no dijo nada pero mantuvo sus ojos en mí. “¿Por qué…?” Trató de
hablarme, pero el doctor lo interrumpió.
—Luna. Alfa ahora está despierto. ¿Qué podemos hacer para ayudarla?
- Preguntó.
"Si me dejas ir al bosque Alpha", dije débilmente.
- ¿Bosque? - Le preguntó.
¿Había alguna razón todavía para esconderse? Alpha ha visto lo que
puedo hacer, ahora solo tengo que esperar hasta que tome su decisión de
dejarme permanecer en esta manada. De lo contrario. Alpha Archibald dijo
que siempre puedo volver con él.
"Soy una ninfa del bosque", dijo y Alpha levantó la cabeza ligeramente.
“Todo lo que sabes de mí es mentira. “Me dolió decir tantas palabras.
— Natan. "Alfa gritó". "Llévala al bosque y luego de vuelta a mi casa",

exigió.
Nathan asintió y se acercó a mí. "Luna, eres
capaz de caminar? preguntó, pero negué con la cabeza.
Nathan me recogió y me llevó al bosque. Estaba muy cansada, así que
apoyé la cabeza en su pecho.
Llegamos a un lugar con muchos árboles y Nathan me bajó. Me senté de
rodillas y puse ambas manos en la tierra.
Tomé unas cuantas respiraciones profundas y sentí la energía latiendo desde las raíces
de los árboles y entrando en mi cuerpo.
Tomé toda la energía que pude, el dolor seguía siendo horrible e iba a
durar un tiempo. Esta ganancia de energía me dio la fuerza para lidiar con la
agonía que sentía.
Me levanté y me acerqué a un lugar donde vi crecer un poco de acónito.
Nathan me siguió y me observó mientras recogía algunas flores de caña de
lobo púrpura. Los lobos comunes pueden sufrir quemaduras graves y, si se
inyectan, pueden matar.
Nathan me acompañó de vuelta a casa. “Gracias Nathan,” dije desde la
distancia. Inmediatamente después de tener las flores en mis manos,
Nathan estaba caminando muy lejos.

Entré a la casa lentamente, las luces eran tenues y Alpha estaba
sentado en el sofá cerca de la chimenea. “Ven aquí”, me dijo.
"Alfa, ¿puedo hacerte un poco de té primero?" Me miró, pero sus ojos se
centraron en las flores.
- ¿Con eso? - Pedido.

Miré el acónito. "No te dolerá, tienen un solo
beneficio. Yo prometo.
Alpha asintió y volvió su mirada a la chimenea.
Espero una larga conversación con Alpha y muchas preguntas sobre mí.
No me enfadaría si me obligara a dejar esta manada. Soy una amenaza aquí.
Capítulo 12
LA PROFECÍA DE ADELIE
KAIRÓS
Esperé a Adelie frente a la chimenea. Cuando entró en la casa, se veía mejor

que antes, pero aún se veía cansada y enferma.
Escuché pasos venir, era Adelie y en sus manos había una taza. Vi el vapor
caliente ascender.
Puso la taza en la mesa frente a mí. Pude ver algunos pétalos morados
nadando en el té.
Una vez me quemé con una flor de acónito. No es algo que quiera repetir,
pero el médico dijo que Adelie ayudó a todos los heridos. Me pregunto si ella
les dio este té a todos.
"Solo quitará parte del dolor, pero al menos es
algo”, dijo ella. Me acomodé al lado del sofá.
“Siéntate”, le dije e inmediatamente ella siguió mi orden, o tal vez estaba
demasiado cansada para discutir.
Por un rato hubo silencio entre nosotros, solo se escuchaba el fuego
crepitando en la madera. Tomé la taza y derramé el líquido por mi garganta.
No tenía ningún sabor en particular, tampoco parecía aliviar el dolor.

en nada. La ayuda del té fue tan débil como para ser imperceptible.
“El médico dijo que ayudaste a los demás”, dije. - Él no
dijiste lo que hiciste Dijo que necesitaba verlo yo mismo.
Adelie se movió en su silla. “Puedo mostrarte si me dejas. Puedo aliviar un
poco tu dolor —dijo, señalando mi dolorido hombro.
Todo lo que necesitaba ahora era que el dolor desapareciera. No recuerdo

haber sentido nunca tanto dolor físico. el dolor en mi hombro
hizo que me doliera todo el cuerpo.

Entiendo que Adelie hizo lo correcto al dar ambos antídotos, no muchos
podían elegir a alguien más con quien vivir a cambio del dolor de una pareja.
Tal vez Adelie no sentía un vínculo tan fuerte entre nosotros. Pero ¿cómo
podría no hacerlo?
Me giré un poco para mirar a Adelie. Se acercó un poco más y respiró
hondo.
Adelie extendió la mano y comenzó a desabotonar mi camisa.
Se sentía como si nunca antes hubiéramos estado tan cerca, era como si el
beso que compartimos ya no estuviera en mi memoria y necesitaba algún tipo
de repetición. Quería repetir esto.
Adelie me quitó la blusa del hombro derecho con la suavidad de una pluma,
como si pensara que me rompería con su toque. Y probablemente lo haría.
Puso su mano sobre mi herida e incluso la ligera fuerza que ella

usarlo dolió y me hizo sonreír un poco.
“Lo siento,” dijo ella. Mi herida palpitó bajo tu toque y mi
el corazón se le aceleró como loco, estaba demasiado cerca.
Adelie cerró los ojos y algo sucedió. Como si me tiraran de una cuerda
desde dentro, sentí que el dolor desaparecía. Mi herida se iluminaba y cada
segundo sentía menos dolor.
Miré a Adelie y las lágrimas rodaron por su rostro.
Inmediatamente aparté su palma de mi herida y sus ojos se abrieron cuando
accidentalmente acerqué todo su cuerpo al mío.
Eso me gustó, podía olerla completamente. Ese fresco aroma a lirio. Quería
estar así de cerca, pero parecía más asustada que cómoda, así que solté su
mano.
- ¿No ayudó? Debería haber ayudado... yo..." siguió hablando, pero la
interrumpí.
"Ayudó, pero... estabas llorando..."
“Lo siento si eso te molestó. No lloraré más”, explicó secándose las
lágrimas. "Estoy un poco cansado de todo el
cura y... y duele y... Déjame hacerlo de nuevo. Yo puedo...

Trató de agarrar mi moretón, pero detuve su oración a mitad de oración,
agarrando su muñeca.
"¿Absorbes el dolor que otros sienten?" Pregunté y ella asintió. "¿Sientes
el mismo dolor que estoy sintiendo ahora?" Ella asintió de nuevo.
Jamás le desearía ese dolor. Solo pensando que ella era

sentir lo mismo me dolió aún más.
- ¿Cuánto dura? Yo le pregunte a ella.
“Hasta que sane la herida. No los tengo en la piel, pero siento
dolor para los que curo. explicó, todavía bajo mis manos.
"Curaste a toda la manada de Adelie", dije, tragando el nudo en mi
garganta, ella debe estar con un dolor horrible en este momento. "¿Cómo
puedes verte tan bien con todo lo que estás sintiendo?" “No se veía como
normalmente lo estaba, pero si tuviera tanto dolor, me la imagino
enloqueciendo de agonía en este momento.
Adelia se encogió de hombros. “Eso es lo que hago… si me dejas. Me
tendió la mano una vez más y la atraje hacia mí, sin importarme su
incomodidad.
“No dejaré que sientas dolor por mí. Lo superaré. Ustedes
ya hecho mucho. Nunca te dejaría sufrir si pudiera evitarlo.
Sostuve su mano derecha en su lugar y sostuve su cintura con mi mano
izquierda, se sentía demasiado bien para ser real. Sentí lo tensa que estaba
bajo mi toque. Su respiración se aceleró.
Si había algo que pudiera detener mi dolor en este momento, era ella,
pero sabía que ella tenía un dolor mucho peor que el mío, así que la dejé ir y
me volví hacia el fuego.
Adelie se puso de pie en un rápido movimiento. - si me quieres
lejos de la manada..." dijo y yo rodé los ojos hacia ella.
“¿Por qué querría que te fueras? - Yo pregunté. ¿Cómo podía decir eso?
- Fue culpa mía. Atacaron porque me querían”, dijo.

“Pero también nos ayudaste.
“Alfa, soy una amenaza para esta manada. pueden atacar

de nuevo.
Me levanté y grité. - ¡No! “Te necesito aquí…” Solté sin pensar.

Perderé la cabeza sin ella.
Parecía sorprendida, pero aún sin lágrimas. "No me necesitas", dijo
con una risa amarga. "Si me necesitaras, me encantaría..." Se detuvo
a mitad de la frase y se tapó la boca con la mano.
No necesitaba continuar, sabía lo que quería decir. Yo había sido
todo menos un compañero para ella. Yo fui diseñado para amarla a ella
y ella a mí.
"Lo siento", grité. Ni siquiera podía soportar mi coraje con este dolor.
“Quiero amarte de todas las formas posibles, pero no puedo bajar la
guardia.
Me alejé. Hice la cosa más cobarde y me fui antes de ver tu
cara de nuevo.
ADELIA
Entendí lo que quiso decir cuando dijo que me necesitaba.

Cuando los compañeros se separan, se vuelven locos. Solo quería que
me necesitara de una manera diferente, quería que me amara de una
manera que no fuera obligatoria.
Al día siguiente, el dolor había mejorado un poco, pero todavía me
dolía como loco. Era muy temprano y bajé antes de que Helen me
trajera el desayuno. No tenía hambre y no quería que Helen caminara
arriba y abajo sin motivo alguno.
Desde lo alto de mis escaleras, noté que había gente abajo y me di la vuelta.
para volver. No quería interrumpir nada. Pero ya se había visto.
“Luna Adelie”, me llamó Beta. Finalmente había regresado, no sabía
dónde había estado todo el día.
No tenía otra opción, así que me di la vuelta. - Déjala ir. Ya no lo
necesita”, le dijo Alpha a Beta.
"Oh, pero me gustaría conocerte", la mujer parada frente a él.
Alfa habló. Tenía treinta y tantos años, creo, pero era hermosa.
Su cabello era castaño dorado y sus ojos dorados combinaban perfectamente.

Ella era muy linda. Llevaba una falda negra hasta la rodilla con una blusa azul
oscuro y tacones muy modestos.
“Ven aquí, niña”, me dijo, dando unos pasos hacia adelante.
Volví a mirar a Alpha, pero él ni siquiera me miró a mí, así que bajé las escaleras.
Me paré frente a ella. "¿Puedes darme tu mano, querida?" preguntó y puse

mis palmas en sus manos. Estaban sorprendentemente fríos.
Ella me miró y mientras tomaba mis manos, sus ojos cambiaron de color a lo
largo del espectro del arcoíris. No sentí nada, pero esto había estado sucediendo
durante mucho tiempo y saqué mis manos de las suyas.
Ella me sonrió, una sonrisa muy cálida. — Hija de la Muerte y la Ninfa. dijo
mientras miraba a Alpha. Nunca me preguntó quién era yo después del ataque.
“Eres el famoso mito de la poderosa criatura mística. “Nunca supe que era un mito.
- ¿Mito? Yo le pregunte a ella.

“Te has estado escondiendo muy bien todo este tiempo. Empecé a perder la
esperanza de que existieras”, explicó. “Conocí a tu padre un par de veces.
Fruncí el ceño. Dijo que solo yo puedo verlo.

— Como?
“Mi nombre es Jasmin Barnes, soy algo para lo que no tienen nombre. Tengo
poderes de bruja y tengo una visión de cosas que nadie más puede ver. Me
identifico como una bruja, pero eso no es todo lo que soy. Ella explicó. “He estado
visitando el otro mundo durante muchas décadas.
¿Demasiadas décadas? ¿Era ella inmortal? Ella continuó hablando.
“Amar a tu padre no debería ser posible, pero él conocía a tu madre. Y

encuentro fascinante lo humana que puede ser la Muerte, después de todo. Y
espero que tengas la misma pasión por el amor que ellos.
Nunca conocí el amor de un hombre, no sabía mucho sobre la pasión o el
amor. Pero recordé cuánto se amaban mis padres, a pesar de que mi padre
siempre estaba fuera.
Sabía que lo quería y tal vez en algún lugar lo haya para mí, tal vez en otra
vida o tal vez en esta vida, pero si es en esta está bien escondido.
“Tu único amor verdadero se ha ido. Por mi culpa, -

Prácticamente grité la última parte.
Jasmin puso su mano en mi mejilla. Él te tiene a ti. Eres su amor y tu deber
es mantener viva a tu descendencia para que tenga un amor infinito”, dijo.
Evité la mirada de Alpha. La sola idea de tener hijos con él parecía imposible.
Ha dejado claro que solo estaré aquí por el bien de su cordura.
No me dejaste ver hasta el final. ¿Yo puedo? preguntó, tomando mi mano,

pero la aparté.
"¿Que más quieres ver? Yo pregunté.
- Estás con dolor. Necesito saber qué es”, dijo, pero Alpha interfirió.
"Ella curó a todos en la manada ayer", dijo.

Jasmin levantó su dedo para silenciar a Alpha.
“Lo he visto, un dolor agonizante que ha estado sintiendo. Eres una gran
sanadora, Adelie —me elogió—, pero eso no es lo que me preocupa. Sé lo
fuerte que eres, pero serías más fuerte si tu corazón no tuviera tanto dolor.
Ella continuó.
“Déjame ver qué hace que te duela el corazón. “Ella dijo, pero yo sabía lo
que era. Era Alfa Hans. Me dolía el corazón porque estaba tan lejos y porque
Alpha Kairos estaba cerca, pero no me quería.
—Preferiría que no lo vieras —dije—.
- Puedo ayudar. Sentí que era en parte por Kairos, pero hay alguien más
por quien te duele el corazón,” dijo y algo cambió en la mirada del Alfa.
- ¿Quién? me preguntó, apretando la mandíbula.

Negué con la cabeza. “Hay cosas que preferiría no contarle a nadie.
'¿Hay alguien más?' Alfa preguntó de nuevo. Si no me equivoco, parecía triste.
Negué con la cabeza. - No.

“Muy bien, puedes tener tus secretos Adelie. Pero tú tienes
diecinueve años y necesita comenzar a entrenar de inmediato”, dijo.
— Para que?
“Para que puedas dominar y ser más fuerte con tus poderes. dijo y se volvió
hacia el Alfa.
“Ya que creo que no me dejarás quedarme aquí, necesito que ella venga
conmigo a Londres a mi santuario por un año para entrenar. Oh... pero, por supuesto,
ustedes, los hombres lobo, tienen esta cosa de vincularse.
Bueno, entonces supongo que me quedaré aquí por un tiempo.
Estaba molestando al Alfa a propósito, podía ver la tensión entre ellos. No
ambos por parte de Jasmin, pero por su parte, era obvio que la odiaba.
"Ella no va a entrenar", exclamó, aclarándose la garganta.
- ¿Por qué? ¿Vas a quitarle su poder porque no me quieres cerca?
preguntó Jazmín.
- ¡No! Alfa gritó. “Ella no va a entrenar en absoluto. ¡Y punto!
“No puedes quitarte tu poder de Kairos,” dijo con furia.

Alfa se volvió hacia Jasmin. “Puedo y lo haré”, dijo amargamente. “Es tu
naturaleza”, dijo ella. “Está en la profecía.
— ¿Profecía? ¿Qué profecía? Yo le pregunte a ella. No sabía de ninguna
profecía que me preocupara.
Jazmín me miró. - Oh cariño. Has estado ciego durante demasiado tiempo”, dijo.
“Cuando lo mejor se interpone entre la muerte y el agua, la paz quedará encerrada
entre la naturaleza y la sed de sangre.
¿Qué? Quería preguntar, pero Alpha fue más rápido.
¿Cómo puedes estar seguro de que es ella? - El dice. “Es mi
deber encontrar lo mejor, y nunca he estado tan seguro. Pero la elección es
suya”, dijo Jasmin. “Adelie puede elegir venir conmigo y la convertiré en la Mejor.
Alpha y Jasmin me miraron esperando mi respuesta.

Cuando no dije nada, Alpha me tomó por el codo y me llevó a la sala

de música, ya que era la sala con puertas más cercana.
Capítulo 13
EL SECRETO ALFA DE ADELIE
Esta no era una gran sala de música. Tenía un techo alto y en el medio había un
piano de cola, eso es todo.
“No irás con ella ni entrenarás con ella”, dijo Alpha.
- ¿Porque no? Le pregunté, tratando de sonar lo más calmado posible.
“¿Estás pensando seriamente en ello? - Le preguntó.

"No se trata de irme, prefiero quedarme aquí que irme a cualquier lado,
puedes dejar que se quede.
- ¡No! ¿Usted no entiende? dijo con furia.
- ¿Entender qué? Pregunté, confundido.

“No quiero que entrenes para volverte más fuerte, más poderoso.
Dijo, estabilizando su respiración.
- ¿Por qué? Pregunté, molesto. Los compañeros de equipo deben apoyarse
mutuamente y hacer que quieran ser más fuertes. Los compañeros deben volverse
más fuertes.
Sentí una repentina necesidad de responderle. Lo quería ahora principalmente

porque él no. Nunca sentí que quisiera ser algo más de lo que era, pero Jasmin dijo
que podía serlo.
Sentí el dolor que estaba sintiendo por toda la curación. Si fuera más fuerte,
podría ayudar más, si fuera más fuerte, no tendría que temer más, podría proteger a
la manada ya mí mismo. Mi madre me protegió toda mi vida.
Ahora era mi momento de protegerme incluso si iba en contra de ella.

cuando me dijiste que no usara mis poderes.
“Quiero ser más fuerte, quiero poder protegerme a mí mismo y a los demás,
quiero vivir sin miedo”, le dije. Mantuve mi voz fuerte y firme.
“¡Puedo protegerte! Dijo como si nos estuviéramos desafiando con la voz

más intimidante.
- Tu no puedes. Sabes que no puedes. nadie puede excepto yo
igual —dije y di unos pasos más cerca de él.
“Voy a entrenar y no hay nada ni nadie que pueda impedirme hacerlo. Dije
y estaba a punto de darme la vuelta para irme cuando me agarró la mano y me
detuvo.
“¿Quieres saber qué le pasó a Luna antes? preguntó, lo que me confundió,
era la primera vez que la mencionaba.
Él continuó. “Ella quería poder, al igual que tú, no era un hombre lobo
normal, obtuvo su poder a través de la magia oscura. Su voz sonaba venenosa,
estaba hablando de su pareja original con tanto odio. Mi confianza se había ido
ahora.
"¿Quieres saber qué pasó al final?" preguntó, pero no quise responder, no
sabía si quería escuchar. “La maté”, dijo y de repente mis rodillas se debilitaron.
Esto no puede ser cierto.
Los compañeros no pueden salir lastimados.
“Yo… yo… no te creo,” dije.
Alpha me soltó y me tambaleé un poco hacia atrás, pero aún mantuve el
equilibrio. —¡Rafael! - Él gritó.
Rafael entró corriendo en la habitación mirando a su alrededor. - Lo que él
empezado.
“¿Maté a mi compañero? le preguntó a la Beta.
Rafael parecía confundido. - No fue...
- ¿Sí o no? gritó y sentí su gruñido bajo mis pies. Su cabeza ahora estaba
roja de rabia.
Miré a Raphael, él no me miró a los ojos, pero
giró levemente su cabeza hacia mi lado. "Sí", dijo.
¿Cómo puede alguien matar a su pareja? Que cruel tienes que ser
¿para hacer eso? ¿Cuán malvado y malvado tiene que ser uno?
Alpha caminó hacia mí y yo seguí caminando hacia atrás.
“La estrangulé con mis propias manos”, dijo en voz baja.
Era como si pudiera imaginar sus manos en mi cuello. Si alguien puede

matar a su pareja, los vuelve despiadados. Alpha Kairos no tiene corazón.
Ahora estoy seguro.
Aproveché la oportunidad y salí corriendo de la habitación, pasé junto a
Jasmin y salí. Yo corrí. Corrí hacia el bosque. El único lugar que siempre será
mi hogar.
Corrí, tal como lo hice cuando escapé de Alpha Hans cuando su miembro
de la manada mató a mi madre.
Me senté al lado de un lago que estaba en medio del bosque. Yo pensé
en Alfa Hans, no mató a mi madre, pero me rechazó.
Lo amaba con todo mi corazón. Si estuviera aquí y quisiera llevarme de
regreso, iría con él, era mi compañero.
Alpha Kairos, me lastimó como nadie más, mató a su compañero y aún lo
amaba. ¿Por qué? ¿Por qué amo a este monstruo?
Lloré y luego sentí una mano en mi hombro. Era Jazmín.

“No conoces la historia completa”, dijo Jasmin.
- ¿Sobre qué? - Yo pregunté.
“Mia era su nombre”, dijo y se sentó a mi lado. Él era
hablando de la Luna anterior.
“Ella se involucró con el tipo equivocado de magia. Cuando era oficialmente
Luna de esta manada, le dio la espalda a toda la manada ya Kairos”. Jasmin
miró hacia adelante, respiró hondo y continuó.
“Ella quería tomar el lugar del Rey Alfa y comenzó con esta manada. Se
volvió loca y mató a dos mil personas, solo unas doscientas que sobrevivieron
están en esta manada. Kairos no tiene otra opción.
Mató a su propia mitad, la destinada a él para salvar su manada. Es por eso

que todos en este paquete lo aman. Jasmin siguió hablando.
“Él se culpa a sí mismo por eso, piensa que estaba ciego en el amor y juró
que nunca dejaría que eso volviera a suceder. No creo que él alguna vez pensó
que merecía una segunda oportunidad, un segundo compañero —explicó, mis
lágrimas ahora secas.
“La diosa de la luna les da una segunda oportunidad si cree que se la

merecen. Kairos ha perdido a muchos, y esta manada tiene el Alfa más fuerte
de todos. Espero que te deje entrar algún día —terminó, y se alejó.
Alpha temía que yo fuera como Mia, realmente pensó que lastimaría a otros.
Alfa se ha roto. Andaba por ahí con una falta que no era suya.
Pasé todo el día en el bosque pensando y soñando y si Alpha Hans no me

hubiera rechazado. O si Mia nunca hubiera atacado. O si yo fuera un hombre
lobo normal.
De vez en cuando aparecían unos cuantos guardias detrás de los árboles, y
no los obligué. Creo que Alpha quería saber si ya me había escapado. No sé si
quería verme o no.
Pero sabía que no desaparecería. Si Alpha decide volver a amar,
estare aqui. Alpha Kairos era el más grande de todos los Alphas y el más fuerte.
Cuando el cielo se oscureció, regresé a casa, necesitaba ver al Alfa. Y por
suerte para mí, Beta estaba adelante. "Adelie, por fin", dijo, aplaudiendo. “Pensé
que ibas a dormir en el bosque.
— ¿Dónde está el Alfa? Le pregunté exigente. Él quedó
sorprendida al principio, el tono que estaba usando.
Está en su habitación. Puedo llamarte”, dijo.
No. No le digas nada. ¿Dónde está tu habitación? - Yo pregunté.
Raphael a mi alrededor siempre había sido hablador y seductor, pero ahora
se estaba comportando de manera muy profesional, sé que tenía deberes que
cumplir, pero Alpha no siempre puede detenerme.
"Alfa no quería que fueras al ala izquierda", explicó.
¿Dónde está su habitación? Pregunté de nuevo, esta vez mi voz era más
fuerte.
Rafael cambió de mirada. “Adelie, por tu bien, se va a enojar y ya está
furioso por todo.
“Por tu bien, te ordeno que me lo digas. Soy tu luna.
Él asintió derrotado. “La puerta grande y más lejana, no te perderás”, dijo.
- Gracias Rafael. Diré que no lo escuché de ti. “Lo pasé.
“Ten cuidado”, gritó detrás de mí.

Subí las escaleras. Nunca había estado en esta parte de la casa, el ala
izquierda era la parte a la que no tenía permitido ir, pero ahora caminaba
por el pasillo como si fuera normal.
Había muchas habitaciones aquí, muchas de hecho, pero seguí caminando hasta
que llegué a las grandes puertas. Me detuve frente a ellos. No cuestioné si necesitaba
llamar a la puerta o regresar.
Sabía que necesitaba estar aquí. Alpha tendrá que escucharme. Si él
realmente quería que me quedara, esta sería tu oportunidad de decirlo.
Jasmin dijo que mis poderes son asombrosos. No me hizo tener hambre
de poder, pero me dio más confianza. Si no fuera por el dolor curativo que
todavía sentía, estaba pensando que podría mover montañas en este
momento.
Toqué puertas. "Adelante", dijo después de un rato. Parecía irritado.
Abrí la puerta y Alpha ya me estaba mirando, su expresión estaba sorprendida

de verme allí.
No dijo nada, solo siguió mirándome. Cerré la puerta detrás de mí. -
¿Donde estabas? preguntó como si no lo supiera.
"Creo que fuiste tú quien envió a esos guardias", dije y crucé la habitación.
Apretó la mandíbula. “Eran espías. horribles espías

como puedes ver ahora.
"Podría haber escapado", le dije y él observó cada uno de mis
movimientos. Dijiste que me necesitabas aquí, pero no viniste por mí. Su
rostro se suavizó un poco. Quería que supiera que lo quería.
"¿Querías que fuera detrás de ti?" - Le preguntó.

“Quería un simple acto de cuidado. Entonces sabría que no has
cambiado de opinión acerca de quererme aquí. Enviar a alguien para que
me espíe no es muy... amable —dije—.
"¡Solo en un bosque conmigo!" Dijo mientras escuchaba atentamente. "¿No

tendrías miedo de que te matara?" - Le preguntó. “Hice eso una vez con mi
compañero. ¿Por qué no lo haría de nuevo? “Él mismo creía que era un
monstruo. Mi ritmo cardíaco aumentó.
“Lo hiciste porque no tenías otra opción. ¡Usted es un buen hombre! Dije
rogándole que me creyera. Mis ojos estaban llorosos de nuevo, pero aparté las
lágrimas.
Alpha se rió amargamente y caminó hacia su escritorio y, en un rápido

movimiento, agarró una botella de ron de su escritorio y la arrojó a la pared del
dormitorio, rompiéndola en pedazos. Me estremecí y dejé escapar un grito bajo.
- Yo no soy bueno. ¿No ves que no quería una segunda oportunidad?
Una vez más, mi corazón se rompió. ¿Por qué estaba yo aquí si él no me
quería? ¿Por qué estaba tratando de entender? Si hay algo opuesto a las
mariposas, es este sentimiento que estaba sintiendo. Me pesaba.
No me importaba si Alpha me veía llorar. Dejo que mis lágrimas fluyan. No

me estaba mirando, pero algo en su postura me dijo que era consciente de mis
lágrimas.
Tomé una respiración profunda y traté de alejar el nudo en mi garganta.
"Rechazame", dije y dejé escapar un suspiro entrecortado.
Alfa se giró para mirarme. - Qué dijo él. el parecía estar
mirando mi alma. Su boca estaba ligeramente abierta.
“Rechazadme ahora y liberaos de mí”, dije.
Alpha dio unos pasos más cerca. “Adelie, esto nos va a matar. - el dice.
“No estamos acoplados y no estoy marcado, así que eso es bueno. Forcé
una risa. "Eres fuerte, estoy seguro de que estarás bien y yo...
Lo lograré de alguna manera", le expliqué. Estaba lista para el rechazo. De
alguna manera lo superaré, al menos eso es lo que esperaba.
“Adelie, nunca podría hacer eso. Te necesito —dijo y vi una lágrima escapar
de sus ojos. Dio un paso más cerca, pero caminé hacia atrás y eso lo detuvo.
Negué con la cabeza. "¿Por qué me lastimas?"

¿mucho? pregunté, llorando.
"Adelie…" comenzó, pero salí corriendo de su habitación y entré
en la mía que se sentía tan fría y solitaria.
Capítulo 14
ENTRENAMIENTO ADELIE
ADELIA
Estaba esperando mi desayuno como siempre. Helen siempre lo traía como

un reloj a las 8 en punto.
Escuché un golpe. "Adelante", le dije. Era Helen, solo
no había ninguna bandeja en sus manos como de costumbre.
"El desayuno está listo abajo, únete a Alpha y Jasmin", dijo y se fue.
¿Unirse a Alpha y Jasmin? ¿Alfa me quería allí? ¿Se sintió mal por lo de
ayer? No noté a Jasmin ayer. Pensé que Alpha la había enviado lejos.
No perdí el tiempo. No quería que Alpha se enfadara por el retraso,

Sé que el entrenamiento empieza a las 8:30 y que no querría llegar tarde.
KAIRÓS
Me estaba matando, la sensación de haber lastimado a Adelie, voy a tratar de ser

bueno con ella, voy a tratar de ser su pareja. Simplemente no sabía cómo.
Estábamos esperando a Adelie. Jasmin seguía hablando de tonterías que
no me importaban. "¿Escuché que otra manada viene en unos días para
entrenar?" - Ella preguntó.
"Sí", respondí rápidamente. No me gusta Jazmín. Las cosas que dijo
sobre mis padres. Me dijo que merecían morir porque ayudaron a Mia con su
plan de destrucción.
No sé cómo pudieron hacerlo o por qué lo hicieron a mis espaldas, pero
no merecían morir. Eran mi familia, ahora mi única familia era Fala.
En cuanto al pack que viene, supongo que no han oído hablar de Adelie,
porque de lo contrario me cuestionarían al respecto.
Oí que alguien se acercaba, era Adelie otra vez con uno de sus vestidos largos.
Me gustaban sus vestidos y cuando descubrí que es una ninfa todo lo que hacía
empezó a tener mucho más sentido.
Las ninfas son amables, consideradas, educadas y su objetivo es proteger el
medio ambiente. Dondequiera que leía o veía ninfas, siempre vestían vestidos
largos y sueltos, era para mostrar su lado femenino y su belleza.
Las ninfas son preciosas y Adelie era la prueba viviente de ello. "Buenos días
Alpha, Jasmin", dijo, mirándonos a los dos. Adelie se veía mucho mejor que ayer.
Se veía más saludable y su energía parecía estar alta.
“Por favor, tome asiento”, dije desde mi lugar al final de la mesa y señalé el
asiento a mi lado y de cara al lado de Jasmin. Ella sonrió un poco y se sentó.
Caminaba como en un día cualquiera, mientras que a mí me costaba

levantarme del dolor. Era mucho más soportable ahora, pero aún así el dolor era
como ningún otro.
“Te ves hermosa hoy, Adelie”, dijo Jasmin y recibió una cálida sonrisa a
cambio. Quería ser yo quien la hiciera sonreír así, pero no sabía cómo. ¿Cómo
puedo hacer esto? ¿Me odiaba?
Espero que no.
“Pero tendrás que cambiarte a algo más cómodo, Helen traerá ropa de
entrenamiento a tu habitación. Dijo Jasmin y Adelie la miró sorprendida.
- ¿Capacitación? Ella lo interrogó.

“Por supuesto, debemos comenzar lo antes posible”, exclamó Jasmin.
Sentí la necesidad de decir algo. “Es decir, si te sientes bien, con el dolor
curativo”, le dije, pero antes de que pudiera responder, Jasmin lo hizo.
“Por supuesto que ella está bien. Ella es fuerte y esperar no hará que el dolor
desaparezca más rápido, y el entrenamiento tampoco debería empeorar el dolor. —
Apreté la mandíbula.
“Te agradecería que no hablaras si ellos no te hablaran a ti,” dije exigente.
Jasmin tomó el té y tomó un pequeño sorbo, tomándose su tiempo, pero sé

ella tenía algo que decir, siempre lo había tenido.
"Tu tono alfa no significa nada para mí", dijo, pero la dejé ir.
de lado. En cambio, miré a Adelie en busca de una respuesta.
“Estoy bien, Alfa. El dolor sigue aquí, pero Jasmin tiene razón, es mejor si
voy a entrenar”, dijo tratando de evitar mi mirada y luego miró a Jasmin, “Pero,
¿quién me va a entrenar? No tienes ropa deportiva. “Adelie dijo eso porque
Jasmin vestía un traje pantalón verde esmeralda.
Jasmin se rió de ella como si hubiera dicho la cosa más divertida. “Cariño,
te entrenaré, pero no hay nada que pueda mostrarte, tendrás que hacerlo todo
tú misma. Adelie miró su plato, pero pude ver su sonrisa, tenía muchas ganas
de entrenar.
Recuerdo mi primer entrenamiento, la sensación de dolor en mis huesos
fue lo que me mantuvo en marcha y me empujó a mis límites. Me entrené para
ser el mejor Alfa que existe, pero aun así fracasé, como Alfa y compañero.
Miré a mi lado y me gustó que Adelie estuviera aquí. En realidad me

encantaba, pero no podía quitarme la culpa, la lastimé y no sabía cómo
solucionarlo. Ni siquiera había tocado mi comida cuando salí del comedor.
Fui directamente al campo de entrenamiento y no me sorprendió cuando

no había nadie más que Nathan. Siempre entrenó más duro que nadie, fue
uno de mis mejores luchadores. "Alfa, llegas temprano", dijo.
“Sí, pero creo que es mejor si entreno más ligero hoy”, dije porque mi
herida todavía me dolía y entrenar duro no me iba a ayudar.
"Ahh ya veo, así que no tengo un oponente hoy", dijo Nathan y soltó una
carcajada. - Por lo menos. Alpha, sería mejor que te fueras hoy, por tu propio
bien, vete a casa y descansa”, dijo.
No se equivocó, no tenía fuerzas ni ganas de entrenar hoy.

"Lo haría, pero Luna Adelie está entrenando hoy", dije y Nathan me miró.
"¿Con Jasmin Barnes?" Preguntó y yo asentí.

"¿Quieres verla en acción?" - Le preguntó.
"Quiero ver lo que ella puede hacer", le dije. Principalmente quería ver de qué
era capaz, creía que era buena en el fondo, pero aún quería saber.
"Nathan", lo llamé. "¿Qué dice la manada sobre sus habilidades?"
“Solo cosas buenas, Alpha. No te preocupes. Ella se fue

la impresión de que te preocupas por nosotros, y eso es todo lo que importa.
Así que siempre era yo quien la cuestionaba...
Ya eran las 8:40 am, todos estaban entrenando, pero aún no había señales de
Adelie. Espero que Jasmin no haya cambiado el lugar de entrenamiento, le ordené
que lo hiciera con el resto de nosotros aquí.
Caminé un poco y vi que finalmente se acercaban, Jasmin se veía igual pero
Adelie era diferente y eso me aceleraba la respiración.
Su cabello estaba en una trenza con algunos mechones sueltos. ¿Está por ahí?
vestía pantalones negros ajustados y una chaqueta de cuero negra.
Podía ver cada curva de Adelie, estaba completamente cubierta, pero sentí que
estaba expuesta a todas las demás miradas. Incluso usaba botas negras. Ahora
parecía una guerrera, no la chica frágil que había conocido en el bosque.
No se acercaron a mí ni a los demás, así que me acerqué a ellos. “Jasmin,

Adelie,” las saludé.
“Alfa, qué placer”, exclamó Jasmin burlándose de mí. “Pero tenemos poco
tiempo, así que será mejor que nos pongamos a trabajar”, dijo y se volvió hacia
Adelie.
Ella me miró, pero luego se dio la vuelta. Decidí dar un paso atrás y mirar desde
lejos.
ADELIA
No me gustaba esta ropa, pero Jasmin dijo que para sentirme como un
guerrero, necesito lucir como uno, y que a veces está bien sentirse
incómodo en una piel diferente.
El problema era que no quería ser un guerrero... Solo quería proteger
a todos.
Alpha no entrenó hoy, creo que es por la lesión. O simplemente me
estaba vigilando. Me sentía diferente por él ahora, no estoy seguro de
cómo, pero diferente después de que le pedí que me rechazara.
“Adelie, quiero que me muestres lo que puedes hacer”, dijo y cruzó los
brazos frente a ella esperando mi acción.
Pero no fue así como funcionó.
- Yo no sé como. ¿Y qué quieres ver? - Yo pregunté.
Jasmin regresó a donde estaba Alpha. "No sé lo que puedes hacer",
dijo.
“P…pero dijiste que me entrenarías,” estaba confundido.
“Estoy aquí para abrir tu mente al poder, no hay nadie como tú, por
eso necesito que me lo muestres. “Ella se quedó allí como si yo fuera a
descubrir una nueva América ahora.
“Esa es la cosa más estúpida que he escuchado. ¿Cómo puedes
pedirle que haga algo cuando tú mismo no tienes idea de qué? Alfa le
preguntó.
“Bueno, lo siento, pero no es como si viera un descendiente entre la
Muerte y una ninfa todos los días. Es por eso que necesito ver aunque
sea una pequeña cosa de la que es capaz”, dijo irritada y se volvió hacia
Alpha.
Otros estaban empezando a prestar atención porque estaban
discutiendo en voz alta.
“Ella no sabe cómo. ¿Porque tú no entiendes? – dijo Alfa enojado.
Jasmin bajó las cejas. - ¡No! Usted no entiende nada

porque solo eres un hombre lobo indigno. ella dijo y Alpha se puso rojo.
"¿Crees que soy un hombre lobo indigno?" - Le preguntó

con furia, pero parecía que Jasmin no se vio afectado por su voz.
- ¡No! No solo tú. Creo que cada hombre lobo es una especie de
criatura que no hace mucho por nadie —dijo con una media sonrisa.
"Está bien, ustedes dos pueden…" Traté de hablar, pero Alpha me interrumpió.
“Adelie también es un hombre lobo. - Dijo gritando. "¿También crees que ella es
indigna?" “Parecía que Alpha iba a explotar en cualquier segundo.
Me acerqué a ellos. "No lo creo..." Traté de hablar de nuevo, pero Jasmin siguió
adelante, sin siquiera verme allí.
"Ella es apenas un hombre lobo y apenas humana, por lo que sé lo que es mejor
para ella y cómo debe hacer las cosas", argumentó Jasmin.
Me paré entre ellos, pero los dos caminaron a mi alrededor.

No sabes lo que es mejor para ella. Si hay algo que ella necesita para entrenar,
no creo que seas apto para ser su entrenador”, dijo.
Esto hizo que Jasmin lanzara un puñado de insultos y Alpha hizo lo mismo. I
Tenía que detenerlos de alguna manera. Mi mente estaba corriendo.
Miré a mi alrededor y vi que todos miraban en esta dirección, todos excepto
Alpha y Jasmin, quienes estaban ocupados apuntándose con el dedo y gritando.
Traté de pensar en una manera de detenerlos y luego tuve una visión del sótano,
mientras escuchaba voces en la distancia.
Había raíces floreciendo con niebla blanca, se movían juntas, chocando para
crear algo grande. Mientras se movían, las hojas crecían en las raíces. Mi visión se
detuvo, pero seguían discutiendo.
Sentí un hormigueo en mis pies y el poder atravesándome. Levanté mi pierna

derecha y la golpeé con fuerza en el suelo. Escuché la tierra romperse detrás de mí.
Escuché suspiros a mi alrededor, miré a Alpha, tenía la boca

abrió y desvió su mirada de mí a lo que fuera que estaba detrás de mí

mientras Jasmin sonreía.
Lentamente me di la vuelta, mi corazón se detuvo. Había una criatura
viva y en movimiento frente a mí. Era una figura de tamaño humano con
raíces verdes y enredaderas. Tenía agujeros huecos para los ojos y una
boca abierta.
Creé esto. Me lo imaginé levantando el brazo y lo hizo, siguió mi
mente, era mi mente en forma física. Le hice caminar unos pasos.
Y luego lo imaginé volviendo al suelo y lentamente se hundió en el

suelo.
Capítulo 15
ROSAS
ADELIA
Me volví hacia Alpha y Jasmin.

"Eso fue..." Alpha comenzó a hablar, pero Jasmin terminó con un
orgullosa sonrisa “Exactamente lo que quería que hicieras.
Por un segundo, mis ojos se encontraron con los de Alpha, no se
veía enojado o feliz. Parecía preocupado, tal vez vio cómo consumía
energía, o tal vez estaba preocupado de que yo pudiera hacer esto.
Beta se acercó a mí y se volvió hacia la gran multitud que me rodeaba.
“No hay nada que ver aquí, vuelve a lo que estabas haciendo.
Al principio dudaron, pero cuando Beta los fulminó con la mirada,
volvieron a donde estaban antes.
“Ahora, dime ¿cómo lo hiciste? Jasmin caminó hasta el lugar donde
desapareció la criatura. Miró a su alrededor, observando cada marca en
el césped, pero parecía que nunca había nada allí.
Sentí como si toda mi energía se hubiera ido a esa criatura, y mi dolor
por la curación aumentó. “Yo… yo tuve… una visión,” espeté, y mi cabeza
empezó a dar vueltas con cada palabra.
“Ahh, una visión. Creo que tiene algo que ver con la telequinesis.
Quiero que lo intentes de nuevo, lo mismo. Trate de imaginar, trate de
recrear el mismo sentimiento que tuvo mientras sucedía”, dijo y dio un
paso atrás para mirar.
Solo asentí con la cabeza y obligué a todo en mí a no hacerlo.
caer. No me rendiría, si ella dijera que lo hiciera, lo haré.
-Adelie, ¿estás bien? “Escuché a Alpha detrás de mí, me levanté.
mi mano para indicarle que no venga a mí.
Cerré los ojos y traté de ver la visión de nuevo. Estaba borroso, pero vi las
raíces creciendo juntas. Miles de viñas unidas, yo era igual a él, él respiraba como
yo, su corazón era igual al mío.
Se movió bajo tierra, pero fue como si mi corazón se detuviera por una
fracción de segundo y caí al suelo, todavía despierto pero exhausto. Podía oler a
Alpha a mi lado mientras caía.
Sostuvo mi rostro entre sus manos. — Adelia. Adelia, respira. Mantente
despierto”, dijo en voz baja.
- ¿Qué puedo hacer? le preguntó enojado a Jasmin, quien
estaba a mi lado ahora también.
Es una ninfa. Llévala a su elemento, la hierba aquí no será suficiente, necesita
raíces de árboles fuertes —dijo y detrás de un borrón vi que estaba señalando el
bosque.
El bosque. Ella estaba tirando de mí, con cada centímetro de mí. Mi cuerpo
rogaba estar allí.
Alfa no perdió el tiempo, me tomó en sus brazos y lo toqué.
mi cabeza descansando donde su corazón latía inestablemente.
"Tenemos que ir a algún lugar donde haya árboles viejos, que es donde está
la mayor parte de la energía", dijo Jasmin, pero Alpha se volvió hacia ella.
“Iré solo con ella, tú quédate aquí. Dijo, advirtiéndola y
eso pareció callarla. No la escuché siguiéndonos.
Entramos en el bosque y Alpha siguió caminando.
Cuando sentí que yo era el centro de energía. “Aquí”, alcancé a decir

emocionado.
Alpha me bajó con la suavidad habitual, cerré los ojos y tomé su mano para
que estuviera a mi lado.
No tuve que hacer nada, la energía encontró su camino por sí misma. I
Sentí que el dolor se hacía más ligero. Me sentí renovada. Joven de nuevo.
Abrí los ojos y vi las copas de los árboles tocando el sol que estaba
llegar a mi cara.
Sentí la mano de Alpha en la mía y luego lo miré. Evitó mi mirada.
Me cargó hasta aquí todo el camino, a pesar de que estaba

herido. Levanté la mano y toqué su hombro donde estaba la herida,

me miró mientras hablaba. “Déjame curarte”, le pedí.
Quería curarlo, en mi mente sentía el dolor que sentía mi pareja.

La plata hace mucho daño a un hombre lobo. Ojalá nunca hubiera
conocido tanto dolor.
Alpha tomó mi mano de su hombro y la colocó sobre sus suaves
labios, como una pluma ligera, besó mi piel, “Siento haberte lastimado.
dijo, pero algo me impedía perdonarlo.
Las ninfas siempre perdonan, pero mi corazón no mostró simpatía
por sus penas. Lo amaba con todo mi corazón, pero nunca nadie me
lastimó tanto.
Aparté la mano y me levanté del suelo. Me volví hacia él. "Déjame
curarte", le dije, pero él negó con la cabeza.
“Necesitamos regresar, el entrenamiento fue suficiente por hoy,
incluso la cura no te hará ningún bien. Estuvo a punto de darse la
vuelta y alejarse, pero esta vez era yo quien sostenía su brazo, no lo
jaló, solo me miró fijamente.
“Estás sufriendo y curar es lo que hago,” dije. "¿De qué sirven mis
poderes si no puedo salvar a nadie del dolor?" ¿Por qué no
aprovecharás esta oportunidad?
Si no te doliera, lo haría.
"¿No entiendes que fui hecho para esto?" no me hará daño
por mucho que te haga daño. Estoy acostumbrado al dolor ahora.
“Y no entiendes la culpa que cargo por haberte lastimado tanto
como lo hice, no puedo lastimarte más”, dijo y se apartó de mi mano. -
Vamos a volver. “Lo seguí, como siempre lo hacía.
Regresamos al campo de entrenamiento y Alpha se acercó a

Jasmin. "Finalmente, ¿listo para continuar?" “Ella me lo dijo, pero
Alpha habló primero.
“Y suficiente por un día”, dijo y me tomó de la mano, llevándome
de regreso a la casa. Me estaba tirando demasiado rápido para mi
gusto. Me alejé de él con ira esta vez.
"No voy a huir", le dije cuando ahora estaba detrás de mí.

Estaba a punto de entrar, pero me detuve para mirar el espacio vacío frente
a la casa, debajo de las ventanas. “Alfa,” dije, llamando su atención, pero no
parecía necesario ya que me estaba mirando.
“Kairós”, dijo. “Llámame Kairos, no Alpha, somos iguales. “Nunca lo llamé

Kairos.
Me aclaré la garganta, “Kairos. Creo que este lugar se verá mucho mejor
con algunas plantas al frente. Tal vez rosas, sería menos lúgubre.
Alfa asintió. “Llamaré a Omegas para hacer eso.

¿Quieres ayudarlos? - Preguntó.
Sonreí en respuesta. - Me gustaría esto.
“Arreglaré esto”, dijo y caminó hacia donde estaba la empacadora.
Al entrar a la casa me dirigí a mi habitación para cambiarme esta incómoda

ropa por algo más fluido y de apariencia delicada, me puse mi vestido de seda.
Después de algunas horas. Beta me llamó para plantar. No perdí el tiempo

y casi salgo corriendo.
Beta Raphael y Maeve me saludaron afuera. "Luna, Maeve vendrá a ti".
ayudar. Si necesitas algo, solo llámame”, dijo.
“Gracias Raphael,” dije con una amplia sonrisa y se alejó, dejándonos a los
dos. Maeve ya estaba recogiendo las plantas y colocándolas en los agujeros
que ya existían frente a la pared gris.
"¿Empezaste sin mí?" Le pregunté, ella retrocedió un poco.
"Lo siento Luna, ¿los quieres en diferentes lugares?" - Ella preguntó. Maeve
parecía un poco enfadada, pero siempre lo hacía.
Su rostro siempre tenía una expresión como si estuviera enojada con alguien.
"Oh no, solo quería ayudar, parece que lo has hecho todo", le dije.
Dije y tomé las plantas restantes de la caja en la que estaban.
Maeve no dijo mucho más, no dijo nada, así que necesitaba
romper este silencio. — ¿Cómo está Maya? Yo le pregunte a ella.
"Bien. Ella es feliz allí", dijo con un poco de amargura.

mientras arregla las plantas.
"¿Estas feliz aqui? Yo pregunté. Maeve respiró hondo con irritación.
"Con todo respeto Luna, mi felicidad no te concierne a ti", dijo y se

puso de pie. “Esto va a tardar un tiempo en crecer”, dijo, pero antes de
alejarme puse mi mano al lado de una planta para que estuviera lo
suficientemente cerca para sentir la raíz.
Cerré los ojos e imaginé rosas floreciendo bajo el sol abrasador.
Mi sangre corría a través de mí tan rápido como si el tiempo avanzara.
Abrí los ojos y a mi lado había un gran rosal con flores blancas.
Maeve pareció sorprendida y, como si se hubiera dado cuenta,

finalmente habló. “¿Sabes lo que pasó hace dos años? me preguntó de
la nada.
Negué con la cabeza”, me dijo Jasmin.
Maeve fijó su mirada en el suelo. - Todos en la manada están hablando
sobre ti y tus poderes”, dijo, era natural que todos hablaran.
No estaba enojado por eso, solo espero que puedan aceptarme.
"Buen material", dijo rápidamente y luego me miró. Se humedeció los
labios y se pasó una mano por el pelo.
Mi pareja fue asesinada por Mia. Trató de sonar confiada, pero vi su
lucha. Dicen que cuando muere tu compañero, casi mueres con él, mis
compañeros no murieron y no sé qué tan fuerte es ese dolor, pero con
todo el dolor que me han dado, solo puedo imaginar.
“Fue golpeado con un cuchillo en la garganta. Si hubieras estado

allí, ¿podrías haberlo curado? preguntó con una mirada que nunca
había visto antes. Era una mirada llena de tristeza y esperanza, ella
esperaba que se salvara.
Me acerqué a Maeve. No quería mentirle. “Mi madre una vez me
hizo curar a una mujer que fue mordida por una serpiente.
venenosa.
“Ella era una humana normal, sin conocimiento de la
nuestro mundo. Tenía sólo veintiocho años. Traté de salvarla, pero no pude por
alguna razón. Cuando mi padre la persiguió, dijo que había llegado su momento.
“Este era su destino, estaba destinada a morir por una mordedura de serpiente.
No siempre puedo curar a todos, ojalá pudiera, pero el destino tiene un cruel sentido
del humor. - Expliqué. “No sé si podrías haber curado a tu compañera Maeve. Pero
algo me dice que si yo no hubiera estado ahí, hubiera sido la cruel forma de jugar
del destino.
Ella estaba mirando sus pies. - ¿Dónde está él ahora? Qué
¿Después de la muerte? ¿Es el cielo y el infierno como todos pensamos?
- No sé. La muerte nunca me lo dijo, él dice que es lo único de lo que la gente
no está segura, e incluso cuando alguien piensa que tiene todas las respuestas, lo
que viene después de la muerte es algo que solo pueden imaginar. El único
verdadero extraño.
Los ojos de Maeve estaban llorosos, pero los apartó mirándome. "Cuando
conociste a mi madre..." comenzó, pero para que yo entendiera no tenía que
terminar.
“Ella vivió una larga vida. Y nada dura para siempre, incluso las cálidas manos
de tus seres queridos. Incluso los recuerdos tienden a desdibujarse con el tiempo.
Yo continué. “No obligues a esos malos recuerdos a quedarse, déjalos ir,

cuando te sientes solo a altas horas de la noche, recordarás todos los recuerdos
que necesitas sobre lo que solía ser tan maravilloso, pero no todos los días. Vive
ahora con las maravillas que tienes ahora.
Maeve corrió hacia mí y me abrazó con fuerza. incluso las lágrimas de

se me escaparon los ojos.
Porque todo el mundo está un poco roto por dentro.
Capítulo 16
CENA CON ALFA

ADELIA
Como siempre. Alpha pasó la mayor parte del día en su oficina.

Alpha parecía estar mejorando conmigo, pero yo no estaba listo para
ir allí y preguntarle si necesitaba ayuda. Mis sentimientos hacia él han
cambiado en los últimos días.
No puedo entender cómo, pero era diferente. Nunca había sentido
algo así, tan extraño. No sé lo que estoy sintiendo. Era como si mi
corazón estuviera en dos lugares y tiempos diferentes.
Empezaba a hacerse tarde cuando miré por la ventana de mi
dormitorio. Estaba esperando que la cena estuviera lista y me ofrecí a
ayudar a Helen a cocinar, pero ella se negó.
Helen anunció que Alpha quería cenar conmigo. Sin embargo, no
mencionó a Jasmin. Quizá esté empezando a ser algo normal que
cenemos juntos. Realmente espero eso.
Cuando llegó el momento, bajé y Alpha ya me estaba esperando. La
única fuente de luz eran unas pocas velas sobre la mesa larga.
No estaba demasiado oscuro, solo lo suficiente para estar cómodo.
Jasmin no estaba aquí, ni siquiera había un plato para ella.
Creo que Alpha me sintió venir, se giró hacia mí y se levantó de su
silla. —Adelie —dijo—. - Por favor sientese. Hizo un gesto para sentarse
a su lado. Su expresión era suave y cálida o tal vez las luces solo
engañaban mi vista, o tal vez mi corazón.
Fui a mi asiento y, sentándome, pregunté: "¿Dónde está Jasmin?"

Está fuera de la ciudad, pero prometió estar en el entrenamiento
mañana. No creo que la necesites allí, lo estás haciendo muy bien por
tu cuenta”, elogió.
“Gracias,” dije.
No había mucho de qué hablar mientras comíamos, solo hablaba Kairos.
Si Kairos no hablaba, yo tampoco.
“Algunos hombres lobo vendrán mañana a entrenar. Estarán aquí por la
noche y se quedarán durante una semana”, dijo. No fue como si cambiara
nada para mí, pero fue bueno que al menos me lo hiciera saber.
'¿Quieres algo de música?' - le preguntó. la musica seria
mejor solución para romper este incómodo silencio entre nosotros.
“Me gustaría eso”, respondí. Me encantaría tener algo de ruido a nuestro
alrededor.
Kairos se levantó y caminó hacia el lado de la habitación donde había un
pequeña mesa, con lo que parecía ser una radio.
Pasó algunas temporadas mientras se decidía por una canción lenta
que cantaba un vocalista. Era hermoso y encajaba perfectamente en el
entorno de poca luz.
Se sentó y continuamos nuestra comida durante algún tiempo, cuando
Kairós habló de nuevo.
“Te ves hermosa Adelie”, dijo de la nada. Llevaba uno de mis vestidos
habituales, no era elegante ni nada que elogiar.
“Gracias,” dije. Después de confrontar a Kairos el otro día, dije todo lo

que tenía que decir y ahora no sabía qué decir o cómo actuar con él.
Ya no sentía la necesidad de obedecerle. O cualquiera para ser exactos.

Iba en contra de lo que mi madre me enseñó, pero en mi corazón sentí que
era lo correcto.
Cuando terminamos la comida. Helen vino y tomó las bandejas vacías.
“Háblame de ti, Adelie”, preguntó emocionado. “Sobre lo que más amas

en el mundo, sobre tus sueños, familia”, dijo con un brillo en los ojos. Era
como un niño inocente.
Lo miré y sonreí, el tipo de sonrisa que era casi de dolor. '¿Sobre mi
familia?' Mi risa amarga quedó atrapada en mi garganta. "¿Desde cuándo
te preocupas por mi familia?"
Nunca te importó nada de lo que hice o lo que hice. “Inmediatamente me

arrepentí de lo que dije.
Kairos miró su plato. "Siempre me ha importado", dijo en voz baja, "Estoy
tratando de enmendar lo que te hice a nosotros, pero si nunca me vuelves a
perdonar, está bien", dijo y vi que su cuello se movía. mientras tragaba el nudo
en la garganta.
Mi estómago se revuelve, lo ha estado intentando, pero no estoy haciendo
nada por él. Realmente lo sentía y lo intentaba.
— Mi madre era ninfa del agua y hombre lobo, ella lo era todo para mí, me
enseñó todo lo que sé, me enseñó a vivir en las sombras, obedecer las reglas y
hablar poco para vivir normalmente pero ella murió protegiéndome, eso es
porque corrí de mi primer paquete,” dije y Kairos observó cada uno de mis
movimientos.
“¿Por qué ella necesitaba protegerte? preguntó, pero ¿cuánto podía decirle?
"Si ella no hubiera estado allí en ese momento, estaría muerto", le dije y
Kairos se movió en su asiento.
– ¿Qué paquete era? preguntó, pero no pude decírselo.
Dudo que Alpha Hans quiera decirles a todos quién era su compañero, pero no
puedo arriesgarme. Kairos cree que está muerto, y así es como debe quedarse.
Negué con la cabeza y lo miré con la cabeza ligeramente inclinada, “No

puedo. Y no importa
Kairos apretó la mandíbula, pero no preguntó más.
“En cuanto a mi padre, no lo veo a menudo. Cuando alguien a mi alrededor
muere, viene a visitarme, es el mejor padre que podría pedir, pero no hay nadie
para verlo excepto yo. De hecho, no hay manera de probar que no estoy
mintiendo.
"Cuando… cuando María murió…" no necesitaba terminar.
- Él estaba aqui. Hablamos un poco.
'¿Él sabe de mí?' Tosió, diciendo eso.
“Sí, él me cuida.
"No le gusto mucho, ¿eh...?" - El dice. “Claro, ¿qué más te puede gustar?
Dijo, mirando hacia abajo mientras se recostaba en la silla.
silla. Apoyó un brazo en el soporte y el otro tocó levemente su barbilla.
"¿Y por qué te preocupas por eso?" pregunté, sonriendo.

"Bueno, sería un poco inconveniente pedirle a tu padre tu mano en
matrimonio", dijo, sonriendo. Y de hecho me reí, por primera vez me reí
con él. Este fue el sentimiento más saludable que podría pedir, yo solo con
mi pareja, cuando la luz está justo en el centro de nosotros y con música
lenta sonando a nuestro alrededor.
"Sí, la desventaja es que es posible que no le gustes y no que no
puedas verlo en absoluto", me río de nuevo, salió tan naturalmente, como
si hubiera estado haciendo esto toda mi vida con él, como si Lo conocí
toda mi vida. Jugando con él toda mi vida.
Mi risa se detuvo y volví a la realidad y recordé lo que mi padre había

dicho cuando vino a buscar a María. "A mi padre le gustas mucho", le dije.
No usó esas palabras, pero estaba bastante seguro de que no lo odiaba.
- ¿Le gusta? "El estaba confundido.

Negué con la cabeza.—Dijo que no perdiera mi fe en ti.
Dijo eso cuando le hablé de ti, pero él ya lo sabía.
Kairos se inclinó más cerca de mí. No habló hasta que encontró mis
ojos con los suyos. “Hablaba en serio,” dijo Kairos gentilmente.
Fruncí el ceño. "Adelie Murrell, ¿quieres casarte conmigo?" preguntó y

mis labios se abrieron. No escuché más música a nuestro alrededor, solo
el latido de mi corazón en mis tímpanos.
No lo sabía, pero él seguía siendo mi Alfa, había puesto reglas para mí.
Debería obedecerte. "Si es necesario, entonces sí", respondí con fuerza.
No estaba lista para casarme con él.
“No, no, no,” Kairos rechazó y tomó mis manos entre las suyas. “No
quiero que digas que sí porque es necesario, quiero que digas que sí
porque quieres”, dijo, frotando sus pulgares sobre mis manos.
No sabía qué decir. Ni como decirlo, porque se a lo que me refiero
'no', pero te hará daño. En mi corazón, quería decir que sí, pero no sabía
lo que me deparaba el futuro. La profecía. No sé cuánto cambiarán las
cosas después de eso.
Miré a Kairos mientras esperaba mi respuesta, estaba cerca de mí,
más cerca que de costumbre.
Saqué mis manos de las suyas y él se sorprendió. Mis manos
encontraron un lugar en su cuello en una fracción de segundo y lo besé.
No necesitó tiempo para responderme, era natural. Nos movemos en
sincronía.
Se sentía como lo más normal para nosotros, el beso fue lento y era
todo lo que necesitaba. No era apasionado o lujurioso. Sentí tu amor en
nuestro beso. Era simple pero muy especial.
Sus manos finalmente encontraron un lugar en mi cintura, pero me
aparté de mi silla.
Kairos también se levantó. "Eso significa…" comenzó a decir
felizmente, pero necesitaba interrumpirlo para no aumentar sus
esperanzas demasiado.
"Significa no. Eso significa que no estoy listo ahora mismo. Significa
que no sé cuándo estaré listo, si es que alguna vez lo estaré. Significa
no ahora, pero tal vez algún día —expliqué con mi voz apresurada.
Yo continué. “Ni siquiera puedo averiguar sobre mí y esa cosa de la
profecía. No sé mucho al respecto, pero hasta que sepa más sobre mi
propósito en esa profecía, es un no positivo. - Yo dije.
Kairos dio un paso atrás, miró hacia abajo, pero cuando volvió a
mirarme, estaba sonriendo dulcemente. “Algún día”, lo escuché suspirar.
Le devolví la sonrisa y ahora, era perfecta. Nuestra 'cosa' parecía

perfectamente imperfecta. Perfectamente extraño.
Capítulo 17
ADELIE ES EL VERDADERO YO
ADELIA
Nunca me importó mucho cómo terminaría mi día, pero tal vez hoy
necesitaba prepararme.
El desayuno volvió a ser como la gente normal, todos juntos en la
mesa. Jasmin también estaba aquí con su elegante traje pantalón otra
vez. Ahora era azul como el cielo, no como el cielo dulce, sino como el
cielo sin nubes blancas, cielo con actitud.
Miré al lado de Kairos y él al mío, intercambiamos sonrisas. No me
había sentido tan bien en mucho tiempo, tan descuidado. Olvidé la
sensación de no importarme demasiado. Cuando solo éramos mi madre
y yo, a veces podía darme el lujo de ser descuidado, así que cuando
ella murió, nunca más me sentí así.
Después del desayuno todos caminamos juntos al entrenamiento,
Kairos también tenía su equipo de entrenamiento, se sentía mucho
mejor ahora. Desearía que me dejara curarlo por completo.
Cuando llegamos al lugar, Kairos se unió a los otros hombres lobo

y yo me puse del lado de Jasmin. “Probemos algo diferente hoy”, dijo.
"¿No necesito mejorar lo que hice ayer?" Me desmayé. - Estaba

confundido.
Jasmin apartó la mirada de mí por primera vez. “Oh, sé que puedes
hacer esto. Necesitas probar algo más ahora”, dijo, pero estaba
actuando raro, era como si tuviera menos confianza que ayer. Quizás
tenía algo que ver con su negocio en la ciudad.
"¿Estás bien Jasmin?" Le pregunté y me tiró un

mirada curiosa, pero pronto la escondió.

“Claro, ahora quiero que pienses en crear algo de la nada”, dijo. — Intenta
visualizar cómo se siente crear algo no a partir de plantas o árboles, sino de ti.
De tu verdadero lado dominante, el lado de la ninfa”, explicó. Parecía bastante
fácil.
Jasmin dio un paso atrás y me miró. Cerré los ojos y traté de concentrarme.
¿Lo que soy? Una ninfa del bosque y las plantas. Me imaginé el bosque verde
de este paquete.
Miré la flor blanca a mis pies y luego de vuelta al bosque, pero ya no era lo
mismo. Las sombras negras estaban por todas partes. La luz desapareció. Eso
no estaba bien. Lo intenté de nuevo.
¿Cuál es mi propósito como ninfa? Era para servir a la naturaleza. Me
imaginé el bosque de nuevo y un árbol creciendo al toque de mi mano. Miré mi
mano y salió humo negro de ella.
Sentí un torbellino en mi mente y una suave brisa me envolvió, escuché
miles de voces, gritos de personas. Abrí los ojos y alrededor había miles de
siluetas de sombras negras.
Todos caminaban de un lugar a otro. Estaban hablando, pero no enojados,
solo sollozando.
¿Lo que estaba ocurriendo? Cerré los ojos de nuevo e imaginé que se
habían ido, el ruido cesó. Abrí los ojos y se habían ido. Vi a Jasmin sorprendida
con la boca abierta.
"Yo... te dije que echaras un vistazo a tu lado dominante de ninfa", dijo,
todavía aturdida.
"Sí, pero... pero la oscuridad... vino naturalmente..." dije. No
no era nada que hubiera visto antes.
- ¿Esta todo bien? “Era Kairos a mi lado. — Vi lo que
Sucedió.
Sacudí mis hombros hacia arriba y hacia abajo, sin saber qué era.
Jasmin se llevó las manos a la cabeza y cerró los ojos. Empezó a hablar
sola y siguió hablando un rato, sobre lo que hice, lo que ella vio. Hice contacto
visual con Kairos, estaba tan curioso como yo.
"¿Crees que eres una ninfa?" — preguntó ahora mirándolo.

yo y acercándose.
"Sí", me sorprendió que estuviera esperando una respuesta.
“Puedes controlar la naturaleza”, dijo. "Esas sombras son naturales para ti,
¿no las controlaste?" - Ella preguntó.
Separé mis labios. — ¿Jazmín?
- ¡Respuesta! exigió.
Alpha quería interferir, pero lo detuve. “No hagas esto”, le dije.
“No puedo dejar que te hable así”, dijo, pero Jasmin se interpuso.
“Por favor contesta”, gritó.

— Pensé en mi lado de ninfa, pero… era como si no hubiera cierre.
Algo sacó lo mejor de él —expliqué lo mejor que pude—.
Jasmin respiró hondo y se mordió el labio inferior mientras pensaba. - Ustedes
sí... Tal vez tu lado dominante no sea una ninfa, nunca lo fue...
Me reí de ella, me negué a creerlo. “Soy una ninfa Jasmin, como
mi madre fue, ella me enseñó a ser una ninfa digna.
Traté de convencerla. “Jasmin dime que soy una ninfa. “Le pregunté, rogándole
que lo dijera. Estaba empezando a perder la fe, esas sombras, las sentía en mí.
"Eres una ninfa, solo que... no tanto como pensabas", dijo.

"Toda mi vida he sido una ninfa y me vas a decir que no lo soy
¿Quién creo que soy? ¿Qué soy entonces? - Yo pregunté.
“Tu lado dominante proviene de tu padre”, dijo Jasmin.
“Pero… ¿en qué me convierte eso? — pregunté, nunca me he entrenado para
esto, siempre me han dicho que soy una ninfa, que la naturaleza está en mi sangre.
"Ángel de la muerte..." dijo con calma. “Al igual que tu padre, es por eso que
tienes poderes para controlar la naturaleza de la misma manera.
Sigues siendo una ninfa y siempre lo serás, al igual que eres un hombre lobo.
La voz de Jasmin se volvió más dulce y cariñosa. “Esas fueron las almas
perdidas que viste. Te eligieron a ti y se quedaron para que les dieras la paz y se
los entregaras a la Muerte para que pudiera
ponerlos donde pertenecen. Están vagando por esta tierra sin rumbo fijo y
sufriendo por la vida pasada. “Tenía oscuridad en mí.
Siempre he sido una copia de mi padre. Vi todas las señales, pero nunca
creí que pudiera ser algo más que una ninfa. Pero mi madre... ¿por qué no
me lo dijo? ¿Estaba tratando de protegerme de mi lado oscuro?
No sabía qué decirle. Soy un ángel de la muerte. He visto almas perdidas

antes que escaparon de mi padre o las que nunca estuvieron allí, las que se
quedaron atrás.
Los absorbí sin siquiera saberlo. Fueron miles de almas las que absorbí
En mi vida entera. Han estado conmigo todo este tiempo.
Necesitaba a mi padre conmigo. Ahora mismo. Necesitaba que me
hablara.
— Jazmín. ¿Hay alguna forma de contactar a mi padre? Yo le pregunte
a ella.
Jasmin tartamudeó, lo cual era extraño de su parte porque siempre tenía
tanta gracia y siempre sabía qué decir. “N… no.
Estuve de acuerdo. "Está bien", dije mirando hacia abajo. “Estoy cansada,
creo que necesito descansar,” dije y por suerte Jasmin no discutió.
Kairos caminaba a mi lado — Adelie...

Me volví hacia él - Estoy bien. Necesito estar solo, por favor—
Dije y caminé hacia mi casa.
Me senté en el piso frío en el medio de mi habitación. Toda mi vida he
vivido sin conocer mi verdadero yo. Yo no sé más. No sé nada, he estado
viviendo en una ilusión, en una mentira. Dejé que mis lágrimas rodaran por
el suelo. Esta habitación se sentía más oscura de lo que solía ser. Pero yo
era parte de esa oscuridad.
Siempre admiré lo que hacía mi padre. Pensé que era tan fuerte al ver
morir a tantas personas en sus manos y luego decidir qué hacer con sus
almas. Siempre quise ser como él, tan fuerte como él.
Pero ahora... soy como él, una copia de él. No pensé que fuera un
trabajo heroico, tomar almas. Pero eso es lo que soy, simplemente no tengo
otra opción, me eligen a mí. ¿Por qué tengo miedo de ser como mi padre?
Escuché un golpe en mi puerta y rápidamente me levanté del piso. “Sí.”

Grité, pero no estaba de frente al visitante, tomé aire y sentí a Kairos.
"¿Qué quieres Kairós?" Pregunté con calma.

- Estás sufriendo. Puedo sentirlo”, dijo.
Me llevé las manos al corazón y sentí como si estuviera metido en una
pequeña caja de mármol. Por supuesto que sintió mi dolor, somos
compañeros.
"Déjame quedarme aquí y ayudarte", dijo en voz baja y tranquila.
"Estaré bien", le dije, todavía sobre mi espalda.

“Sé que te vas a quedar, pero quiero ayudar. No deberías estar solo.
Háblame Adela. No puedo aliviar el dolor, pero puedo estar aquí para
escucharte. “Estaba equivocado, podía aliviar el dolor, simplemente estando
aquí, abrazándome.
“Quiero estar solo, por favor. "Quería que se quedara, pero
mi cerebro me dijo lo contrario.
Esperó un rato, esperando que yo cambiara de opinión.

Cuando no lo hice, me dejó.
¿Por qué lo alejé cuando más lo necesitaba?
Capítulo 18
LAS DOS COMPAÑERAS DE ADELIE
ADELIA
Pasé mi día en el interior. Enfurruñado, pensando en todo. Soy un ángel de la

muerte. Sirvo al otro mundo. Estas almas perdidas se han quedado conmigo
para que puedan ser salvadas, y ese será mi propósito, salvarlas.
Pero también soy una ninfa. Voy a hacer que estos dos mundos trabajen
para mí. No puedo olvidar la naturaleza dentro de mí.
Caminando hacia mi espejo, ahora estaba usando uno de mis vestidos
largos. Era un sencillo vestido de encaje gris con mangas cortas y sueltas.
Mi cabello estaba tirado hacia un lado y con una flor colocada arriba
de mi oído Como siempre le gustó a mi madre, flores en el pelo.
Tantas preguntas ardían en mi mente acerca de mi existencia. Tantas
preguntas apretando mi corazón. Cuando se trataba de mi corazón, siempre se
trataba de mis compañeros.
Me sentí mal por tener que mentir sobre la muerte de mi pareja original.
Kairos ahora estaba tratando de ser un buen compañero.
Pero no ayudé en absoluto, ¿por qué me contuve? Él podría amarme como
deberían hacerlo sus compañeros y yo podría amarlo a él también.
¿Fue Alpha Hans el que me hizo dudar? Sé que Alpha Hans marcó y se
apareó con otro lobo, todavía puedo sentir el dolor que me causó. Todavía me
duele, porque yo podría ser el que marcó si fuera lo suficientemente bueno para
él. Rechazo.
Estoy tan avergonzado de ser tan indigno, que mi propio compañero no me
quería. Solo tienes una segunda oportunidad con los compañeros, no una
tercera o cuarta. ¿Qué pasa si Kairos solo me quiere porque soy su única
oportunidad? Y si no me quiere como yo quiero
que me quiere?
Más temprano, Helen me llevó el almuerzo a mi habitación porque me
negué a bajar. La comida aún estaba intacta en mi mesa. Mi ventana
estaba abierta y escuché que entraban autos. Miré afuera y había tres
autos y dos autobuses pequeños.
Recordé que vendría una manada a entrenar. El entrenamiento de
Night Walkers Pack fue intenso, por decir lo menos.
Cada mujer está entrenando como lo haría cualquier hombre. Para cuando
terminan, están sudando locamente y respirando con dificultad.
Los autos se detuvieron, pero Madeline me estaba haciendo sentir rara.
Ella estaba aullando. Algo andaba mal, necesitaba ver quién estaba en
esos autos, pero de repente escuché un golpe en mi puerta.
“Adelante”, dije y Kairos entró.
— Adelia. Te ves hermosa —dijo y se detuvo a mitad de camino
sonriéndome. Le devolví su sonrisa incómoda. Madeline estaba sintiendo
algo.
“La manada está aquí. Creo que sería mejor para ellos saber el
Luna de esta manada”, dijo y yo asentí.
Siempre fui la Luna de este grupo. ¿Y qué hay de malo en eso?
Nada, absolutamente nada, solo quería por primera vez ser tu pareja. Ni
una sola vez me llamó su compañero.
Alpha se acercó para tomar el mío. No dudé y lo tomé.
Su mano era suave y cálida. Nunca nos habíamos tomado de la mano así
antes, se sentía íntimo, muy íntimo, me hizo sonrojar como una niña.
Caminamos de la mano por el pasillo y bajamos las escaleras, con
cada paso Madeline intentaba decir algo, pero era difícil entenderla. ¿Por
qué Kairos la estaba dejando así? Hemos estado más cerca antes, pero
ella no actuó así.
Bajamos las escaleras. Yo estaba casi detrás de él, pero todavía
sosteniendo su mano. Me estaba mirando los pies para no quedar atrapada
en mi vestido. Kairos estaba corriendo un poco, pero no era nada
desagradable, así que no dijo nada.
“Bienvenidos al Night Walker Pack”, dijo Kairos emocionado mientras
descendíamos el último escalón. Miré hacia arriba
y mis ojos se posaron en un hombre que nos daba la espalda.

Mientras Kairos hablaba, se dio la vuelta, pero no estaba mirando a Kairos.
Me miraba con la boca ligeramente abierta.
Madeline se quedó sin palabras y mi corazón se detuvo. Morí un poco
por la vista frente a mí. Nunca en un millón de años pensé que lo volvería
a encontrar, él era Alpha Hans y me estaba mirando.
Nuestros ojos estaban cerrados. Miró mi mano entrelazada con la de Kairos.
Rápidamente aparté mi mano de él e inmediatamente me arrepentí

cuando miré a Kairos. Me miraba en estado de shock, su rostro estaba
pálido, parecía muerto. ¿Se dio cuenta de que Alpha Hans es mi pareja
original?
"Adelie..." Alpha Hans habló con incertidumbre. "Eres... tú", dijo con
una media sonrisa. - ¡Compañero! Él suspiró. Si Kairos no sabía hasta
entonces que él era mi compañero, lo sabía ahora.
Miré a mi alrededor, Jasmin, Beta y Helen también estaban aquí con
aspecto sorprendido y observando mi próximo movimiento. Detrás de
Alpha Hans había otros dos hombres.
Todos me miraban. Miré a Kairós. Estaba mirando hacia abajo, pero
todavía vi la mirada triste en su rostro.
Yo no sabía qué hacer. Si pudiera tirarme al suelo y desaparecer, lo
haría. Necesitaba un diccionario para explicar con palabras cómo me
sentía. Sentí culpa dentro de mí porque le mentí a Kairos.
Miré de un lado a otro a Kairos y Alpha Hans. Tenía a mis dos

compañeros justo en frente de mí. Los hombres lobo son especies
asombrosas que tienen una verdadera pareja a la que amar para toda la
vida... Yo tuve dos.
Miré a Kairós. Sintió mi mirada y miró hacia arriba.
"Lo siento", susurré en voz baja, pero sé que me escuchó, sentí
lágrimas corriendo por mi rostro.
“Adelie…” Alpha Hans habló de nuevo y trató de acercarse, pero Kairos
emitió un gran gruñido. Alpha Hans retrocedió. Miró hacia abajo: “Alpha
Kairos, ¿tú y ella…? “Intentó preguntarle a mi pareja.
"Amigo", gruñó. “Adelie es mi pareja. —

Esta era la primera vez que me llamaba su compañero.
Los dos se miraban, la tensión podía ser
cortado con un cuchillo, me alegré de que Beta Raphael interviniera.
"Creo que sería mejor si hablamos solos", dijo, interponiéndose
entre ellos. Dijo 'nosotros', pero no fue eso lo que dijo. “Adelie, Alpha
Kairos, Alpha Hans, por favor, vamos a la biblioteca.
Me sorprendió que Kairos no discutiera con esto, sino que nos
mostró el camino. Kairos entró a la biblioteca y también Alpha Hans,
esperé a Raphael.
"Estaré aquí si las cosas se salen de control", dijo, tomando su lugar
fuera de la puerta de la biblioteca. Negué con la cabeza, no había
ninguna razón para que Raphael estuviera allí. Era nuestro negocio. Si
no hubiera mentido sobre mi pareja, esta conversación no estaría
sucediendo.
Cuando la puerta se cerró detrás de mí, Kairos se me acercó.
- ¡Mentiste! Dijo en un tono irritado, pero pronto lo reemplazó con una
súplica.
"Eres un mentiroso", dijo y me partió el corazón.
Sé que tenía razón, le mentí en todo. ¿Y valió la pena?
"Lo siento", grité.
“¿Por qué dijiste que tu pareja original murió? preguntó mientras
trataba de evitar su mirada crítica. “Dijiste que no había nadie más…”
Tenía todo el derecho de estar enojado conmigo, y eso me hizo sentir
aún más culpable, lo hice, es solo mi culpa.
¿Por qué tendría que decirte algo? Ella no te debe nada.

Ni siquiera la marcaste”, dijo Alpha Hans a la defensiva. ¿Por qué me
defendía?
Kairos se acercó a él y eso hizo que Alpha Hans se estremeciera
de miedo, pero trató de actuar como si no le molestara que Kairos
estuviera furioso. "¡Estás en mi territorio, respétalo!" Kairos dijo antes
de volverse hacia mí.
Ya no había razón para mentir, ya pensaba que yo era un
mentiroso. “Porque estoy avergonzado de no ser lo suficientemente bueno

para él, estaba dispuesto a hacer cualquier cosa para ser un compañero
digno para ti.
Yo continué. "Y mentir fue más fácil que admitir que no era lo
suficientemente bueno para la única persona que debería amarme cuando
nadie más que mis padres", le expliqué mientras lloraba como nunca antes.
antes.
Kairos buscó mis ojos. '¿No es suficiente?' - Pedido.
Intenté responder, pero no pude. Mis palabras se atascaron.

Alfa Hans interrumpió. “La rechacé”, dijo y nuestros ojos se abrieron como platos.
fundar. “Fue lo más cruel que he hecho, y lo he lamentado desde entonces.
Vi tristeza en sus ojos, realmente lo sentía. “Si pudiera volver atrás en el
tiempo, lo haría. Si pudieras perdonarme, te amaría como debería en primer
lugar. – Dijo mirándome, con Kairos escuchando.
Lo miré, pero ya no estaba enojado, estaba

de nuevo mirando hacia abajo. Me tragué todas mis lágrimas.
“Sentí el dolor cuando marcaste y te apareaste con otro lobo,” dije con
amargura. “Siento el dolor que me causas todos los días”, dijo.
“Reconozco a Adelie, fui tan egoísta y busqué otra Luna para mi manada,
traté de olvidarte. Poco después encontró a su pareja y yo no podía estar con
ella, ni quería estar nunca con ella.
dijo, caminando unos pasos más cerca. “Eras tú a quien siempre quise”,
explicó.
Miré a Kairos, su mirada aún fija en el suelo. Se veía miserable desde
donde yo estaba. “Encontré a mi pareja de segunda oportunidad. dijo Alfa
Hans.
“Soy tu pareja original Adelie, por favor perdona mis pecados, aún no te
ha marcado, tienes una opción,” explicó acercándose, pero caminé hacia
atrás y él se detuvo.
Hubo un silencio entre nosotros, pero luego Kairos
gritó: “¡Raphael! gritó y entró. “Llama a Jasmin aquí. — Kairós
exigió y Raphael no perdió el tiempo.

Había una atmósfera incómoda entre nosotros y estaba agradecido cuando
Jasmin entró. - ¿En que puedo ayudar? preguntó, observando la escena frente
a ella. Todos teníamos la forma de un triángulo.
“Adelie,” Kairos me habló e inmediatamente miré hacia arriba.
"¿Le das tu mano a Jasmin?" - Le preguntó.
Quise preguntar, pero no me atreví. no queria que se quedara
enojado conmigo. Estuve de acuerdo.
“Usa la visión que tienes y dime a quién ama más”, le dijo Kairos a Jasmin
y me quedé boquiabierto. No sabía a quién amaba más.
El me miró. “Si es Hans, te dejaré ir, si no, no puedo perderte”, dijo.
Jasmin no preguntó ni perdió el tiempo, tomó mi mano entre las suyas y vi

el arcoíris en sus ojos, estaba corriendo por mi mente. Lo sentí cuando ella
sacó los pensamientos de mí, lo único que estaba destinado solo para mí.
Sus ojos volvieron a la normalidad y soltó mi mano. jazmín miró

para El Cairo y Alfa Hans.
“Solo veo tu mente, no puedo sentir lo que siente tu corazón.
La mente y el corazón están vinculados de alguna manera y no puede haber
mucha diferencia entre lo que siente el corazón y lo que piensa la mente,
pero…” Ella me miró. “Según su mente, los ama a ambos por igual, solo que
su corazón tiene uno. Adelie es la única que sabe quién es. Kairós me miró.
— ¿Adelia? “Quería saber, saber a quién amaba tan profundamente en mi

corazón. No sabía a quién amaba. Por supuesto que no puedo tener ambos.
Podría decir cualquier nombre ahora y podría cambiar todo mi futuro. Fue
mi elección, necesitaba elegir un nombre. Mi corazón no me decía nada, y
Madeline tampoco, ella tampoco lo sabía.
Negué con la cabeza. "No lo sé", dije mientras se me escapaban algunas

lágrimas. ¿Fueron esas lágrimas porque estaba dolida o porque estaba
lastimando a mis dos compañeros con mi indecisión?
- Por favor...! comenzó Kairós. Pensé que me iba a pedir que lo

eligiera, pero en vez de eso dije. "Averígualo tan pronto como puedas",
y salió de la biblioteca. Me quedé aquí con Alpha Hans y Jasmin.
Yo tampoco podría quedarme aquí. Todavía no estaba listo para
hablar con Alpha Hans, sé que lo necesitaré en algún momento, pero
no ahora.
Capítulo 19
LOS VERDADEROS SENTIMIENTOS DE

KAIRÓS
KAIRÓS
No podía soportar estar en la misma habitación con ellos, me fui. Los dejé
quedarse allí juntos. Hans era el compañero original de Adelie.
Este tipo de vínculo es el más fuerte conocido por los hombres lobo.
Comparado con eso, no soy nada.
Pero, ¿cómo podría ser más digno de mí cuando rechazó a Adelie?
¿Cómo podía hacerle algo tan cruel?
Ella mintió porque temía no ser lo suficientemente buena para mí tampoco.
De hecho, soy yo quien no merece tu amor. ¿Cómo podía amarme tanto como
él?
Ella nos ama por igual. Si ama tanto a Hans, ¿qué más puedo ofrecerle?
Adelie tendrá que tomar una decisión y, cuando la haya hecho, Hans
desaparecerá de mi territorio.
Pero no sé si ella irá con él. Si ella decide ir con él, ni siquiera intentaré
hacerle cambiar de opinión. No importa cuán desgarrador sea esto, quiero que
ella sea feliz.
Todo ese dolor que Adelie estaba y está sintiendo en su corazón fue por
culpa de Hans. Si la hubiera marcado, no habría sentido dolor. Si no hubiera sido
tan estúpido y no la hubiera amado desde el primer día, ahora sería mía. ¿Ya lo
he perdido?
Estaba en mi oficina cuando Raphael entró sin llamar. “No puedes dejar que
se quede aquí”, exclamó.
- ¿Y porque no? Pregunté en un tono tranquilo. ¿Cómo podía estar tan
tranquilo cuando la mujer a la que se suponía que amaba podía irse en cualquier
momento?
Todos esos mitos sobre mí de que no tengo corazón y no siento empatía ni

simpatía, claro que sí, a veces creo que lo siento más que nadie. Es justo lo
que tengo que hacer, me obligué a borrar todo. Soy el Alfa de esta manada, no
puedo dejar que las emociones se apoderen de mí. Incluso si duele como el
infierno.
“Alpha Hans es el compañero de Adelie. ¿Crees que no te llevará lejos si
puede? “Estaba frustrado conmigo. Siempre se quedaba cuando yo estaba
cerrado.
- Es tu elección. Siempre lo ha sido —dije, recostándome en mi silla. “Yo
amé una vez. Era un completo desastre, pero aún así me encantó. Adelie tiene
derecho a ser feliz ya amar. Incluso si no soy yo. Ella necesita ser feliz.
Rafael se acercó a mi mesa. - Tú la amas. Él asintió y me miró directamente

a los ojos. “Lucha por ella, si se va con Hans, sabrás que luchaste por ella. De
lo contrario, te arrepentirás por el resto de tu vida. “Nada de lo que dijo fue
mentira.
- ¿Qué hago? Yo pregunté. “Solo puedo esperar hasta que ella tome su
decisión.
“Díselo”, dijo alto y claro. “Dile cuánto la amas. Ve ahora y díselo, haz que
escuche a su corazón. Hazlo por ti y por la manada”, dijo.
- ¿El paquete? - cuestioné.

Rafael asintió. “La manada no podría pedir una Luna mejor. Ahora ve con
ella, está en el bosque, la sentirás. dijo y me levanté de mi silla.
la necesitaba Necesito decirle que la amo y la necesito. Yo creo que es

verdad. Nunca sabes lo que tienes hasta que lo pierdes.
Excepto que siempre supe lo afortunado que soy de leerla como pareja, nunca
pensé que la perdería así.
El cielo comenzaba a oscurecerse. No perdí el tiempo y corrí hacia el
bosque. No podía dejarla escapar sin intentarlo.
Estaba en el bosque y dejé que Kye controlara mis sentidos. Necesitaba
encontrarla. Ella no estaba lejos. Después de caminar un rato, la encontré en
un lago.
Sostenía el vestido en una mano para que no se mojara. Con la otra

mano, arrojó una corona de flores al agua.
No hice un solo sonido, no quería molestarla.
Todo esto de la ninfa era muy nuevo para mí, y muy peculiar por decir
lo menos. Aunque su lado dominante no era una ninfa como dijo Jasmin,
ella es una ninfa en su corazón. ¡Yo sé eso!
Me incliné hacia adelante y Adelie volvió la cabeza hacia mí, no lo
suficiente como para tener una vista completa, pero por el rabillo del ojo
debería haberme visto.
No estaba enojada ni nada, tenía una sonrisa simple y cálida. Observó
cómo la corona flotaba en el viento, pero luego se dio la vuelta y salió del
agua. "Es para mi madre", dijo, observando sus pasos. “No sé si me
escucha o no, tal vez solo soy un estúpido creyente. Pero siempre
deseé que estuviera aquí y poder hablar con ella.
Ella continuó. “En el peor de los casos, solo estoy hablando con el vacío, en el
mejor de los casos… ella está ahí escuchando.
Ella se rió. “Qué triste es esperar cualquier cosa en la vida. El amor que
tan desesperadamente buscamos. La comodidad y el bienestar de nuestros
seres queridos.
Ella salió del agua, pero permaneció en la orilla del lago. “Nada de lo
que esperamos dura. Y ese es el infinito cruel de esta vida terrible que
estamos viviendo. Esperando y soñando con algo más allá de la monotonía,
la desolación.
Adelie me dio la espalda y observó cómo se alejaban nadando el lago
y la corona.
“Solía vivir en la manada Sombraluna. Cuando cumplí dieciocho años,
una mañana abrí la puerta principal de mi casa y allí estaba Alpha Hans
Una atracción de pareja por la que los hombres lobo viven y mueren. La
sensación de que él es el único para mí, para siempre.
Hablaba de él como si fuera el sol para ella. Tu único deseo verdadero.
“En ese mismo momento me rechazó, me dijo que no sería una buena
Luna. Me acerqué un poco más a ella. — Perdí la
control y me salian esos malditos humos negros. Los guardias se

asustaron y trataron de matarme, pero mi mamá corrió frente a mí y la
hoja la golpeó en el pecho que era para mí.
Ella habló con tanta calma y calma. “Me culpo todos los días y, a
pesar de lo que dice mi padre, todavía sé firmemente que fue mi culpa,
no pude guardarme mis poderes, por eso ella está muerta. Ella siempre
me enseñó a esconderme de todos para que no se enteraran de mí.
Ella podría estar viva ahora mismo.
"Si Hans no te hubiera rechazado..." comencé pero me detuve
inmediatamente. ¿Qué estaba haciendo? Tratando de usar la muerte
de tu madre para hacerme parecer más apropiado como tu compañero.
¿Qué tan egoísta puedo ser?
“No fue su culpa”, lo defendió ella en un tono duro y fuerte. — No lo
culpo, ese día vi su culpa y lástima por mí, él no quería que eso pasara.
Por supuesto que dolió, pero la muerte de mi madre no fue su culpa.
Ella respiró hondo. “De todos modos, ¿por qué viniste aquí?
Supongo que tienes una razón en lugar de simplemente dar un paseo
por aquí —dijo mientras miraba el viento bailar en las ondas de su
cabello.
- Hablar contigo. - Yo dije.
- ¿Sobre qué? ella respondió de vuelta.

Me las arreglé para reír en realidad. “Sabes, lo que nos hace
similares es la culpa que sentimos cuando todos nos dicen que no es
culpa nuestra.
Caminé tan cerca de ella que si estaba frente a mí, estaría
demasiado cerca para que me concentrara. — Amaba a mi compañera
Mia como a ninguna otra, ella me hacía sentir el amor que ni siquiera
sabía que existía, ella era mi sol y mi luna. Sólo la vi a ella y a ninguna otra.
Ignoré cada defecto y mancha que tenía, la oscuridad dentro de ella
se sentía tan ligera. Estaba cegado por el amor y vi lo que estaba
haciendo demasiado tarde. Me amaba, sé que lo hacía, pero amaba
más el poder. Con su ayuda, destruí esta banda.
“No fue tu culpa, Kairos,” me dijo, mirándome de reojo.
“Todo el mundo me sigue diciendo eso, pero… pero si yo viera

más que amor nada de esto pasaría. Desde ese día juré no volver
a cegarme de amor. No amar en absoluto. Y luego te encontré.
Yo continué. “Hiciste esto imposible para mí. Temía los

sentimientos que tenía por ti, traté de alejarlos para no repetir mis
errores. - Yo dije.
Se cruzó de brazos frente a ella mientras yo hablaba. “Parece
un poco tarde para darme cuenta de que mis sentimientos, o tú, no
eran mi debilidad, eran mi fuerza. Mis sentimientos por ti nunca
fueron mi ceguera, fue mi visión. Eres todo para mí, siempre lo
serás.
Cerré los ojos y respiré hondo. “Creo que lo que estoy tratando
de decir es… te amo Adelie,” dije y busqué una reacción de ella.
"Tal vez sea un poco tarde...
“¿Sabes lo que me hizo el rechazo? preguntó, pero no esperó
una respuesta. “Me dolió como nunca antes. Fue la experiencia más
dolorosa de mi vida”, gritó.
Escuché en su voz que estaba llorando — Pero… — ¿Pero qué?
“Pero de alguna manera te las arreglaste para lastimarme más…”
Mi corazón se apretó ante sus palabras. “Me rechazaste sin siquiera
darte cuenta”, dijo.
Adelie se dio la vuelta y caminó hacia la empacadora. Se detuvo
a mitad de camino y me miró. “Si te sirve de algo, lo siento por
mentirte sobre todo,” dijo y siguió caminando, la observé hasta que
se fue. Ella se fue. Espero solo por ahora.
Capítulo 20
EL ENTRENAMIENTO DE ADELIE
ADELIA
El desayuno fue más tranquilo de lo habitual. Es gracioso.

Cuando finalmente Kairos y yo comenzamos a llevarnos bien. Alfa Hans
apareció. Nunca esperé volver a encontrarme con él. Qué mundo tan pequeño.
— Adelia. Necesito saber cuándo vas a decidirte por tu pareja. Fue

Jasmin quien preguntó. Este no era un tema sobre el que pudieras charlar.
Estaba siendo insensible al preguntar esto frente a Kairos, aunque él no lo
demostró. Tengo la sensación de que mi indecisión lo está lastimando mucho
más que a mí.
No pude evitar darle a Jasmin una mirada desagradable. Luego dejó caer
la tostada y se limpió la comisura de la boca con el dedo índice con un
movimiento glamoroso. "Tu corazón está preocupado si recibes la marca que
tu hombre lobo necesita tan desesperadamente..." dijo poniendo los ojos en
blanco.
A Jasmin no le gustaban los hombres lobo en absoluto, los odiaba y ni
siquiera trató de ocultarlo. Odiaba la idea de tener un compañero. “Serías
mucho más fuerte. Y la cosa puede suceder más rápido”, dijo.
- ¿Que cosa? - cuestioné.

Jasmin se movió un poco. "La profecía..." dijo ella. “Si aprendes más
rápido, podría suceder antes. Ya no parecía tan atrevida. Ella estaba
escondiendo algo...
“Tu corazón, debe tener uno en él. Entonces, ¿quién es? - ella preguntó,
cambiando el tema de la profecía.
Todavía no podía decirlo, sabía a quién amaba más. Cuando vi
Alpha Hans y después de procesarlo todo después de una noche, mi visión

se aclaró y supe quién era, siempre lo supe. Pero necesitaba tiempo.
Decidí no decirle nada. ¿Por qué molestarme...

"Está bien, entonces... te estaré esperando", dijo Jasmin irritada, puso
los ojos en blanco y dejó la mesa.
Ella se fue y me giré hacia Kairos. “Yo… ya sé mi decisión. Siempre lo
supe, solo necesito un poco de tiempo. - Yo dije. Todavía necesitaba hablar
con Alpha Hans. ¿Y si tu palabra me hizo cambiar de opinión?
— ¿Será a mi favor? - le preguntó. No quería responder todavía.
"¿O ya me lo dejaste claro ayer?" preguntó enojado, se levantó enojado de
su silla y salió de la casa.
Estaba enojado y tenía razón porque le mentí en todo desde el primer día.
Dije que me había lastimado más que nada y era verdad...
Miré el reloj y era hora de volver a entrenar. Afuera encontré a Nathan y

me acompañó al campo de entrenamiento.
Jasmin ya estaba esperando con impaciencia.
Miré hacia atrás y vi que todos los luchadores de la manada Sombraluna
también entrenaban. Kairos fue quien les exigió qué hacer, miré a mi
alrededor y mis ojos encontraron a Alpha Hans.
Estaba siguiendo todas las órdenes dadas. Debió sentir que yo estaba
mirando y me devolvió la mirada sonriéndome. Era una sonrisa tan dulce que
no pude evitar devolverla. Por supuesto que Kairos nos atrapó intercambiando
miradas y tuve que apartar la mirada.
“Tierra a Adelie. No tenemos todo el día”, dijo Jasmin mientras Nathan
caminaba hacia su entrenamiento. “Así que hoy quiero que hagas algo un
poco diferente. Recogió una bolsa de tela del suelo y con mucho cuidado
sacó una caja cuadrada de metal. Parecía muy común.
- ¿Qué es? Yo le pregunte a ella.

“Solo hubo una persona que logró abrirlo y ya no está.
En un siglo esta caja no ha sido abierta ni una sola vez”, explicó.
No había líneas, nada que mostrara que se podía abrir. “La persona que logró
abrirlo era como tú. Era un ángel de la muerte con sangre de ninfa”, dijo.
“¿Qué tiene eso de especial? - Yo pregunté.

Jasmin estaba perdida en sus pensamientos. “Es solo… un misterio y tal vez
puedas abrirlo. Solo recógelo e intenta hacer algo con él”, dijo y me entregó la caja.
Jasmin miró hacia otro lado un poco, pero examiné la caja. Lo sostuve con
ambas manos y cerré los ojos. La otra persona era en parte Muerte y ninfa, así que
si usaba los dos combinados, tal vez podría funcionar.
Traté de concentrarme. Mi mente vagaba por mis viejos recuerdos.
“Estoy haciendo esto para protegerte, cariño. Estos poderes que tienes son
mucho más de lo que piensas.
“Nunca le confíes a nadie tus poderes, y nunca dejes que otros sepan de tus
habilidades. Tienes que seguir escondiéndote.
“Lamento que tengas que vivir así, pero es la única forma que conozco de
protegerte de un mundo cruel”, dijo mi mamá mientras me abrazaba.
Ese día me regaló mi primera capa. yo solo tenia ocho

años.
Mi visión atravesó todos mis recuerdos, pero solo

deteniéndose en algunos específicos.
“Eres una ninfa Adelia, tu propósito es proteger la naturaleza”,
dijo mi mamá mientras caminábamos por el bosque en luna llena.
Los recuerdos seguían llegando.
Sé amable, Adelie. La bondad trae amor y alegría.
Entonces, una escena se formó frente a mí. No era un recuerdo.
Vi a mi madre vestida de blanco mientras se bañaba en el agua. Parecía real pero
tenía magia mientras flotaba en nubes azules.
Ella se acercó a mí. "Esa caja contiene Evil Adelie", ella
dijo con su voz haciendo eco alrededor.
Luego se acercó a mí y levantó una llave dorada cubierta de humo negro,

el mismo humo que a veces sale de la punta de mis dedos.
“La elección es tuya”, dijo ella. Mi decisión de dejar salir el mal o no.
Jasmin quería que la abriera, ella ha sido mi maestra ahora, ¿puedo
desobedecerla?
Podría haber tomado la llave. Pero mal. Yo no quiero eso. Negué con la
cabeza hacia ella. Me sonrió con orgullo y se llevó el dedo índice a los labios.
¿Quería que lo mantuviera en secreto?
Ella estaba desapareciendo. ¡No! La quería aquí. ¡La necesitaba!
Traté de alcanzarla, pero después de una fracción de segundo ella se había
ido y yo estaba de vuelta en un campo con el mismo cuadrado de metal en
mis manos.
Miré a Jasmin. - ¿Qué sucedió? - Ella me preguntó.
No pude decirle. “Nada, solo me desmayé,” mentí. Jasmin pareció dejar
escapar un suspiro. Caminó hacia mí y recogió la caja, poniéndola de nuevo
en la bolsa de tela.
"Bueno, entonces, no tengo nada más para ti hoy", dijo. “Tengo un lugar
a donde ir ahora, negocios en la ciudad. Ahora eres libre —dijo y salió
corriendo.
Miré el campo de entrenamiento y la gente vitoreaba mientras estaba de
pie entre la multitud. No me parecería justo si me fuera ahora, aunque
parecía que se estaban divirtiendo, todavía estaban entrenando.
Caminé entre la multitud, pasando personas que amablemente

Déjame pasar. Quería ver qué era tan emocionante.
Finalmente, obtuve la visión que quería, vi a Nathan luchando contra uno
de los mejores guerreros de Shadowmoon, recordé que su nombre es Luke.
Luke lo estaba haciendo mal. Recibió cada golpe, sin bloquear nada, era
difícil contener el dolor pero no luchar. Nathan conectó algunos golpes y
Luke cruzó los brazos frente a él para indicarle a Nathan que se detuviera.
La multitud vitoreó y aplaudió a Nathan.

Nathan se detuvo de inmediato. - ¿Estás bien? preguntó
Lucas. Para mi sorpresa, Luke no estaba enojado, le sonrió a Nathan. "Aprendí

mi error, no soy el mejor", dijo, apretando la mano de Nathan.
Kairos luego habló. “¿Hay alguien más a quien le gustaría desafiar a mi

mejor peleador? preguntó, mirando a todos. Por un segundo, su mirada se
detuvo en mí, pero la ocultó bien.
Nadie dijo nada. - Muy bien. Kairos miró al suelo con las manos detrás de la
espalda. pensando en algo
— ¡Luna Adela! Dijo y mis ojos se abrieron. '¿Cómo fue tu entrenamiento?'
preguntó, sonriendo. Era una tontería preguntar así desde el principio.
"Jasmin tenía que irse, así que terminó temprano", respondí, pasando por
alto este incómodo lugar para conversar.
- ¿Te sientes bien? - Él me preguntó. Estas preguntas se volvieron cada
vez más extrañas. Todos estaban igual de curiosos.
I.
“Por supuesto”, respondí.

Kairos dio unos pasos más cerca. “¿Cómo te sentirías enfrentando a algunos
luchadores a la vez? preguntó en voz baja, pero mi boca casi se abrió.
¿No uno, sino algunos? ¿Que significa eso?

“Pero… no estaba entrenado… no puedo pelear así,” expliqué. No estaba
entrenado para pelear.
Kairós sonrió de nuevo. "Tal vez sería bueno si te dejo usar tu guerrero que
fue creado", dijo, y luego, finalmente, mi sonrisa se hizo tan amplia como pude.
Estaba hablando de mi criatura raíz.
Quería volver a crear a mi guerrero. Quería que peleara, que nos pusiera a
prueba a él ya mí. Estaba tan emocionada que ni siquiera me molesté en
responder. Regresé un poco a donde había un lugar limpio.
Cerré los ojos y lo imaginé parado entre nosotros, vi enredaderas y raíces

creciendo y reuniéndose, doblándose en algunos lugares y aflojándose en otros.
Se hicieron más fuertes y por fin oí romperse la tierra y mi

guerrero se despertó de su sueño. Una criatura enraizada en una
figura humana estaba detrás de mí.
Miré a la multitud. La gente de mi manada parecía orgullosa, pero
la gente de Sombraluna miraba con miedo y asombro. Han oído
hablar de mí, pero supongo que no han visto tal cosa. Me sentía
orgulloso de mí mismo, confiado en la criatura que ahora estaba allí
esperando mi guía.
“¿Sabes lo fuerte que es? Kairos me preguntó y señaló mi

cabeza. "Si lastimamos a la criatura, ¿te lastima a ti también?"
preguntó de nuevo.
"No lo creo, él sigue mis órdenes y mi mente, pero no somos
uno", le expliqué. No me sentía unido físicamente a él. Ahora era mi
sirviente.
“Bien,” exclamó Kairos, girándose para mirar a la multitud.
Alpha Hans señaló con el dedo a dos hombres. — Damián y Adrix.

Ambos dieron un paso adelante y Alpha Hans también.
“Debes haber escuchado lo poderosa que tenemos Luna,” dijo
Kairos, mirando a todos esos luchadores que avanzaban. “Pero
todavía tenemos que descubrir tus habilidades de lucha. Todos
ustedes pelearán con—” Kairos me miró.
Creo que necesitaba tener algún tipo de nombre. Me encogí de
hombros, yo tampoco tenía un nombre para él. —…esta criatura raíz.
"Terminó.
¿Por qué no estás luchando a nuestro lado? Alpha Hans preguntó
mirándonos a Kairos ya mí.
"No sé cómo las heridas de esa criatura afectarán a Adelie, y si
las cosas se salen de control, estaré aquí a su lado", dijo y Alpha
Hans asintió, apretando la mandíbula.
“Los combatientes se preparan, todos los demás retroceden”, dijo Kairos.
y movió su mirada a la criatura detrás de mí.
La criatura se detuvo y Kairos se acercó. Con Kairos parado al lado

él, tenían la misma altura, excepto que la criatura era más ancha.
Todos a nuestro alrededor se estaban preparando y hablando entre ellos.
Aproveché mi oportunidad y caminé hacia Kairos. "¿Eso te asusta?" Le pregunté.
Kairos suspiró. “No lo sé.” Inclinó un poco la cabeza. “¿No escuchaste? Soy
un monstruo, sin corazón y cruel, ¿cómo puede asustarme esto cuando yo
también doy tanto miedo?
“Tú no eres ninguna de esas cosas,” dije. Kairos era bueno, sé que lo era,
había perdido la fe en sí mismo acerca de ser bueno. - Usted es un buen
hombre. Sé que lo eres, y quiero que lo veas también, quiero que ames el
mundo que te rodea.
Kairos rasgó sarcásticamente.
“No soy bueno, te lastimé mucho y me odio por hacerte sufrir como lo hice.
Cuando lo elijas, te prometo que seré bueno, amaré al mundo como debí
haberlo amado hace mucho tiempo”, dijo.
Estaba seguro de que elegiría a Alpha Hans sobre él. Quería ser bueno,
pero ¿por qué querer ser alguien que ya eres? Estaba cegado por no ver lo
bueno que es.
Una pregunta estaba molestando mi mente, ¿realmente tenía miedo de lo
que yo pudiera hacer? ¿Fue por eso que se quedó atrás?
“Te quedaste atrás…” No pude encontrar las palabras correctas.

“Porque pensaste que yo podría—” No pude terminar. ¿Pensó que lastimaría a
alguien como lo hizo Mia?
- ¿Qué? - Le preguntó.
Negué con la cabeza, “No importa.
Kairos se volvió hacia mí. “Me quedé atrás porque estoy preocupado por ti.
No quiero que te lastimes. Por supuesto, me estoy asegurando de que no
pierdas el control”, explicó.
Y continuó. “No tengo miedo de que lastimes a nadie, sé que nunca lo
harías, pero necesito asegurarme de que sea seguro ya que nunca has hecho
eso.
Y eso era todo lo que necesitaba. Él no estaba pensando que yo soy
una amenaza, solo está siendo digno, Alpha, y asegurándose de

que todo suceda de manera segura. Aun así, se pregunta si es
bueno haciendo cosas así.
Kairos pasó junto a mí y habló con los luchadores. - ¿Ustedes
están listos? preguntó y todos estuvieron de acuerdo. Me miró:
“¿Adelie? Asentí también caminando detrás de mi criatura para no
estar en el camino.
Poco después, Kairos se unió a mí. Se volvió y me susurró. “Si
algo sale mal o te duele, avísame, aquí estaré. Le sonreí.
Ya me estaba poniendo nervioso, sentía que me sudaban las palmas de las

manos y mi corazón se aceleraba. Respiré hondo y cerré los ojos.
— ¡Luchadores! Habló alto y claro. - ¡Ahora!
Capítulo 21
ADELIE E HANS
ADELIA
Mis ojos estaban cerrados, pero vi todo lo que estaba pasando.

Esos luchadores no tenían prisa por luchar contra la criatura, intercambiaron
miradas, temerosos de lo desconocido. No iba a atacar primero en absoluto, no
era mi propósito, solo quiero ver qué tan fuerte es, qué tan fuerte puedo hacerlo.
Después de un largo momento, Nathan decidió venir primero. Fue hacia la

criatura y la empujó, haciéndola tropezar hacia atrás, pero no perdió su posición,
no la obligué a hacer nada.
Nathan pateó a la criatura en las costillas. Escuché un sonido de
rotura de raíces. Necesitaba hacer algo, hacer que se defendiera.
La criatura dejó escapar un gruñido extraño y caminó hacia los luchadores. No
quería lastimarlos de ninguna manera, pero necesitaba mostrar algún tipo de
habilidad de lucha.
La criatura fue tras Nathan y trató de agarrarlo, pero Nathan fue lo
suficientemente rápido. Ella fue tras él nuevamente y logró atraparlo, la criatura lo
tiró a un lado y luego al suelo.
Nathan parecía asustado. Creo que fue porque él u otros no sabían cómo
derrotar a esta criatura, no estoy seguro de que yo mismo lo supiera.
Nathan se quedó en el suelo, así que hice que la criatura fuera tras los demás.
Raphael y Damien se lanzaron tras ella. Intentaron derribarlo durante un tiempo,
pero fue en vano. Los dos estaban en el suelo, sin aliento.
Adrix salió de detrás de la criatura y saltó sobre su espalda, un gruñido escapó
de la criatura y Adrix cayó al suelo mientras la criatura giraba en un movimiento
rápido.
Ahora era el turno de Alpha Hans. Corrió hacia la criatura y con un
salto le dio una patada en la cabeza. La criatura estuvo mareada por un segundo,
pero se recuperó poco después. Alpha pateó de nuevo, creo que golpear con los
puños sería demasiado doloroso. Sería como golpear un árbol.
Alpha la pateó de nuevo y Adrix saltó sobre su espalda y trató de derribarla. La
criatura se tambaleó hacia atrás y Raphael la empujó y cayó, golpeando a Adrix en
la espalda. Adrix gimió de dolor, pero logró liberarse de él.
Alpha, Damien y Nathan la sujetaban mientras ella trataba de liberarse del

agarre. “Adrix, Raphael, vengan y abrácenla”, gritó Damien, mientras el sudor le
corría por la cara.
Todos ellos ahora lo sujetaban y era difícil que la criatura se liberara, pero no
perdería esta pelea. Las raíces de la criatura se estaban rompiendo mientras
intentaban aferrarse a ella.
Estaba frustrado con la derrota, y miles de enredaderas crecieron del suelo y
agarraron a los luchadores por los tobillos y las muñecas, no eran enredaderas
fuertes, solo lo suficiente para sostenerlos y liberar a mi criatura.
La criatura estaba libre y se puso de pie mientras los luchadores intentaban
liberarse de las enredaderas.
- ¡Cambio! “Escuché a Kairos gritar a mi lado.
Los luchadores no perdieron el tiempo y pronto cinco lobos se liberaron cuando
las enredaderas se partieron y fueron tras la criatura, esta vez con ira. El lado lobo
se estaba apoderando de ellos y ya no se estaban conteniendo.
Damien y Adrix corrieron hacia la criatura y le mordieron las piernas. La criatura

gritó pero logró patearlos lejos. Tuve cuidado de no patearlos demasiado fuerte,
solo lo suficiente para no causar ningún daño permanente.
Ahora Nathan atacó por la espalda y saltó para morderle el cuello. Alpha atacó
con Raphael mordiendo a la criatura. Con fuerza, los tres fueron empujados.
Luego, nuevamente Damien y Adrix atacaron, pero fue en vano. Este ataque
siguió ocurriendo por un tiempo, pero la criatura tenía pocas raíces rotas. Todos
respiraban cansados.
Escuché a Kairos hablar a mi lado. Abrí los ojos y miré
Kairós. - ¿Qué? - Yo pregunté.

Kairos me miró y los devolvió a donde estaba ocurriendo la pelea. Miré
también y la criatura todavía estaba luchando contra ellos.
No estaba haciendo que lo hiciera ahora, estaba haciendo lo que le dije

antes, pelear pero no lastimarlos, estaba siguiendo mis órdenes con su propia
mente. No necesitaba controlarlo todo el tiempo, él sabía lo que quería.
Un sentimiento desconocido se apoderó de mí. Me sentí fuerte, más fuerte

que de costumbre. Todavía podía pensar y actuar por mi cuenta mientras la
criatura luchaba. Confiaba en mi poder y fuerza. No pude evitar sonreírle al
guerrero que creé.
Toda mi vida soñé con esto, con el poder de ser fuerte. Por mi libertad. No
necesitaba esconderme más. ¡Pelea conmigo!
Quien quiere. ¡Pelea conmigo! Y si puedes vencerme, iré con honor.
Ya no soy la misma persona pequeña, frágil e ingenua.
Soy más que una niña bajo una capa, una niña que vive en las sombras.
— ¡Adelia! Eso es suficiente,” dijo Kairos y lo miré. Parecía preocupado y

tenía la mandíbula apretada. Debe haberme visto sonriendo en la pelea.
Probablemente no parecía tan inocente.
¿Les hice mucho daño? ¿Pensó que disfruté lastimándolos?
Rápidamente cerré los ojos e hice que la criatura se rompiera en pedazos.
y la tierra lo absorbió. Abrí los ojos y la criatura se había ido.
Me invadió la culpa por lo que Kairos podría haber pensado de mí. No soy
como Mía. Miré a Kairós. “Yo no… no fue así,” traté de explicar apresuradamente.
Pero Kairos se me acercó y puso sus manos sobre mis hombros.
- Yo se. Lo siento mucho. Reaccioné de forma exagerada”, dijo ahora con tristeza.
Él confiaba y amaba a Mia y ella lo rompió. Tenía miedo de que yo pudiera
hacerle lo mismo a él.
Me dolía que todavía pensara que yo podía hacer algo como esto. Kairos
se alejó de mí. "Lo siento", dijo de nuevo. Se iba a ir a ver a los luchadores,
pero lo detuve tomándolo de la mano.
"Está bien", le dije, pero no parecía suficiente para él.
"No está bien, prometí ser amable contigo y ni siquiera puedo confiar en ti lo
suficiente como para saber que no harás nada similar a lo que hizo Mia", dijo,
apartando su mano de la mía.
Él continuó. “¿Pero cuál es el punto? Lo estás eligiendo a él. ¿No es? “No
me dejó terminar. “¡Y deberías! Podía tratarla bien, de maneras que yo no podía.
Él es adecuado para ti. No te lastimó tanto y te merece más.
— Kairós. Sentí lágrimas formándose en mis ojos. - ¿Usted no puede ser

serio? Dijiste que me amabas. “¿Habló sobre lo que sentía por mí, cómo podía
renunciar a mí?
Kairos se acercó un poco más y susurró. “Te amo demasiado como para
dejar que te lastimen por mí. Te dejo ir porque te quiero mucho.” Se dio la vuelta
y caminó hacia los luchadores.
Él no se estaba dando por vencido conmigo. Se estaba dando por vencido.
- Buen trabajo. Ustedes hicieron lo mejor que pudieron, pero creo que aquí
sabemos quién es el mejor boxeador aquí”, dijo y me hizo un gesto mientras yo
estaba allí con el corazón roto y el frío.
La gente comenzó a animarme y animarme, incluso los luchadores, pero era
como si solo pudiera escuchar, ver y sentir a dos personas aquí y solo había una
que no podía imaginar mi vida sin él. Ha sido parte de mi vida durante mucho
tiempo, fue el primero que me enseñó lo que es el verdadero dolor.
“Se acabó el entrenamiento. Gracias por hoy”, anunció Kairos.

Estaba en mi asiento cuando Alpha Hans se me acercó.“Adelie”, dijo.
"Alpha Hans", sabía que necesitaría hablar con él en algún momento.

momento.
"Por favor, llámame Hans", dijo y yo asentí. - ¿Podemos conversar? preguntó
con una dulce sonrisa. Madeline saltó de emoción, solo que con una sonrisa.
— Quiero cambiarme después de la práctica. Si vienes después de una hora

a encontrarme, podemos dar un paseo por algún lado —dije.
y la sonrisa de Hans se hizo aún más grande.
- OK. Te encontraré —dijo y medio huyó. No pude evitar sonreír mirando mis pies.
Fui a casa y me cambié mi vestido de punto verde oscuro. Estaba nervioso por
hablar con Hans, aunque ya había tomado mi decisión.
Todavía era extraño como si cualquier cosa que pudiera decir pudiera cambiar mi
elección, pero sé que no hay nada.
Mi mente está determinada, siempre lo ha estado.
Después de una hora, ni un minuto después, Hans estaba en la puerta principal.
Bajé las escaleras para encontrarlo, estaba allí con Kairos. No me gustaba la tensión
que compartían, pero no había nada que pudiera hacer.
Hans notó que me acercaba. "Mi señora", dijo con acento inglés. “Estoy
emocionado de comenzar nuestra caminata. Intentó bromear, pero la tensión en la
habitación lo hacía parecer forzado.
Kairos evitó mi mirada, pero la ignoré. Y asentí a Hans.
Caminamos afuera y estaba hermosamente soleado. Mis rosas en el frente eran

fuertes y saludables. El cielo estaba completamente despejado.
Esto era demasiado bueno para ser verdad.
Continuamos caminando durante un rato en un cómodo silencio hasta que Hans
decidió detenerse en una fuente. No funcionaba, estaba oxidado, pero seguía tan
bonito como siempre. Hans se sentó y yo también, dejando un espacio modesto
entre nosotros.
Hans se movió en su asiento como si estuviera incómodo o quizás nervioso.
“Yo… he querido hablar contigo desde que te vi, Adelie. Hay cosas que debes
saber —dijo y nuestras miradas se encontraron. - Aquel día. Ese día hice lo que más
me arrepiento en mi vida...
Estaba hablando de rechazarme. —A tu madre la mataron —dijo y se me revolvió
el estómago. - Lo siento. Adelie”, dijo mirando hacia abajo. — Nunca quise que eso
pasara, lo castigué por eso pero ya era demasiado tarde, no podía retroceder en el
tiempo.
“Lo sé,” dije. - Que no fue tu culpa. Dije eso y Hans levantó la cabeza.
los ojos.
“Si no te hubiera rechazado…” Trató de decir, pero lo interrumpí.
- ¡Detener! Fue su culpa, es a él a quien culpo —le mentí. Me culpé por eso,
pero él no necesitaba saberlo.
Hans me miró a los ojos y se acercó un poco más. “Si pudieras darme una
oportunidad, Adelie. Una segunda oportunidad, lo haría bien esta vez. Serias mi
reina, mi todo, te adorare toda mi vida. Serías mi luz en la mañana y la luna en la
noche. Habló tan dulcemente. Hans tomó mis manos entre las suyas y las chispas
estaban ahí, la atracción del mate estaba ahí.
“Déjame amarte, Adelie, déjame cuidarte. Fui tan estúpido por dejarte ir y pasaré
el resto de mi vida compensándote”, dijo con esperanza en su mirada. “Me enamoré
completamente de ti. Él continuó. “No hay nadie en el mundo que me haga sentir
como tú. Eres la mujer más increíble que he conocido. Eres amable y hermosa en
todos los sentidos posibles. ¡Quiero amarte Adela! Por favor, déjame amarte —
susurró.
Hans se acercó y tal vez era el cansancio después del entrenamiento o el calor
del sol lo que me mareaba, pero yo también me incliné hasta que nuestros labios se
tocaron. Me estaba besando y yo le devolví el beso. Estaba besando a mi pareja,
como se supone que deben hacer los hombres lobo.
Me alejé y me puse de pie. Estaba respirando pesadamente. “Anunciaré mi

decisión hoy”, dije y me apresuré a regresar a mi casa.
El beso... se sintió mal, pero correcto al mismo tiempo. Tuve el gusto de mis dos
compañeros. ¿Qué tan egoísta puedo ser? Estoy jugando con ambos ahora.
Capítulo 22
ELECCIÓN
ADELIA
Estaba paseando por el patio delantero de la casa.

Estaba enojado conmigo mismo. No puedo ir por ahí besándolos a
ambos cuando no les he dejado clara mi decisión.
Por supuesto que Madeline estaba feliz, se acercó tanto a nuestra
pareja original. Dicen que no hay conexión como la de una pareja
original. Pero tal vez...
Necesitaba aclarar mi cabeza de todo el asunto del mate.
Y fui al pueblo de la pandilla. En el camino, noté que Nathan venía
hacia mí. “Adelie, ¿por qué caminas sola? - le preguntó.
Fruncí el ceño. “Creo que he dejado en claro que soy capaz de
protegerme y he estado solo en el bosque varias veces”, traté de
razonar con él.
Nathan asintió. “Sí, lo sé Adelie, pero Alpha Kairos es quien me
ordenó estar a tu lado. Por supuesto que ya le pregunté si todavía me
necesitas.
- ¿Qué dijo él? Pregunté, escuchando atentamente.
“Obviamente se preocupa por ti. Solo está preocupado por ti.
"Bueno. No debería", dije y en la distancia vi a Maeve sentada en

un banco al lado de la silla de ruedas de James y detrás de James
había un hombre de mediana edad, asumí que era el cuidador.
Yo continué. “No necesitas estar conmigo, si Kairos dice algo, di
que fue mi orden. Dije y continué mi camino hacia ellos. Puede que
pareciera que estaba apurando algo, pero solo estaba tratando de
distraer mi mente lo más rápido que podía.
“Maeve, James”, los saludé y Maeve se puso de pie e inclinó un poco

la cabeza.
—Luna Adelaida. ¿A qué debemos este placer? preguntó James.
“Creo que solo quería ver cómo ustedes dos están lidiando con la
partida de Maya y su madre…” dije.
"Estamos mejor, Adelie", dijo Maeve sonriendo y en realidad usó mi
nombre y no ese estúpido título. “Maya todavía nos llama, está feliz allí.
“Sí, y estoy agradecido por el cuidador que tengo ahora. Maeve no

puede pasarse la vida cuidándome, bueno, al menos mientras esté aquí —
dijo James.
"Bueno, me alegro de haber ayudado", dije y estaba a punto de salir
corriendo y tratar de distraer mi mente cuando habló Maeve. — Adelia.
¿Esta todo bien? Te ves tenso.
- Oh si por supuesto. Maeve —respondí. ¿Qué le diría a ella? Oye,
tengo dos compañeros que me aman y al final de hoy uno de ellos estará
dolido por mi decisión. No puedo cargarla con mis problemas, ¿qué podría
hacer ella si supiera de ellos?
“El entrenamiento fue intenso, eso es todo,” mentí. Resulta que las
mentiras son una gran parte de mi vida ahora, siempre lo han sido, tal vez
tanto que ese es el único propósito para mí.
Maeve se acercó a mí y tomó mi mano para alejarme un poco más de
James y su cuidador. "Adelie", Maeve comenzó a susurrar. “Vi a Jasmin
hoy en el bosque.
“Jasmin tuvo que salir temprano del entrenamiento hoy, tenía que estar
en algún lado. Probablemente solo se dirigía a la ciudad. Y además, ella
no es miembro de la manada, por lo que las reglas de no ir sola al bosque
no se aplican —le expliqué a Maeve, pero ella se veía muy tensa por el
hecho de que ella estaba allí, parecía preocupada. .
“Bueno, ese es el problema. Ella no estaba sola allí. — Empecé a

escuchar con más atención. “Había un hombre allí, no era un hombre lobo
o un vampiro. Lo habría sentido si lo fuera. Le dio algo a Jasmin.
- ¿Lo que era? Traté de actuar como si no me molestara tanto. No debo

preocuparme por eso, la vida personal de Jasmin no me molesta en absoluto.
— Una pequeña botella de algo, parecía una botella de medicina de

vidrio. Maeve jugueteó con sus manos. — No creo que fuera medicina, era
de color rojo brillante, ¿¡qué medicina se parece a esa!?
“Maeve, no estoy seguro de entender lo que quieres decir.
“Creo que algo está pasando con ella. no creo que ella
estar aquí solo para entrenarte.
“Jasmin es una bruja, por supuesto que es diferente a todos los
miembros de la manada. La botella. Podría ser cualquier cosa. “Como dije
que es una bruja, traté de razonar, Jasmin ha sido cualquier cosa menos
un regalo para los demás.
"Lo sé, pero ¿por qué ocultarlo así?" Ella siempre está desapareciendo,
¿sabes a dónde va? No confío en su Adelie, y creo que tú tampoco deberías
hacerlo —dijo Maeve, lo que me hizo enojar—.
No era mi intención enojarme con Maeve, pero Jasmin me está

ayudando. Ella fue la primera que quiso que me hiciera fuerte, ella es la
que me enseña cosas nuevas. Ella cree en mí y en mis poderes.
“Tampoco te gusto mucho al principio. ¿Quién sabe si te gusto ahora?
Le escupí muy fríamente, pero simplemente se fue. “Ella me ha estado
ayudando. No la conoces.
— ¿Y sabes? Maeve me gritó, pero poco después recuperó sus
emociones y ahora estaba tranquila y firme. "Cuando te dé la espalda a ti
ya todos los demás, no digas que no te lo advertí", dijo y caminó hacia
James. No podía quedarme más aquí, claramente no era bienvenido aquí.
Pasé el resto del día en el bosque.
Aparentemente, el bosque es lo único real para mí, lo único que es real.

Estaba oscureciendo demasiado rápido, tuve que regresar. Estaba seguro
de mi decisión, pero hoy me rompería el corazón.
No quiero lastimar a nadie, pero solo trato de mantener esto lo más
lejos posible para protegerlos de la angustia. Es eso
De nada sirve hacer eso si todavía les estoy haciendo daño con esta espera.
Sé lo que quiero, a quién quiero.
Necesitaba levantarme ahora y contarle al mundo mi decisión, pero no
pude. Mi corazón no quería dejar a ninguno de ellos. Estaba siendo tan
egoísta. Amaba más a uno de ellos, pero ambos estaban todavía en mi
corazón.
— Adelia. Kairos está mais zangado e irritado do que o normal, — Eu
ouvi alguém falar e apenas uma voz soou assim, e apenas uma pessoa
estaria chamando Kairos por seu nome porque ela não se importa com seu
título ou qualquer título de lobisomem, ou para lobisomem en general.
"Jazmín, ¿qué haces aquí?" Yo le pregunte a ella. "¿Y por qué está
enojado Kairos?" ¿Sucedió algo?
“Sí, te pasó. Hans también está allí, esperándote, los dos están muy
tensos allí, ni siquiera puedo quedarme allí”, dijo. “Y necesitas decidir para
poder mejorar tus poderes.
"¿Eso es todo lo que te importa?" Le pregunté mientras me sentaba en
el suelo, apoyando mi espalda contra el roble. Mis poderes y esa maldita
profecía fueron las únicas cosas de las que habló.
"Por supuesto que no, eres mi amigo y estás sufriendo", dijo,
arrodillándose a mi lado. De hecho, dijo que soy su amiga. Nunca tuve un
amigo antes. Mi única amiga era mi madre.
- ¿Una amiga? lo repetí
- Seguro. Es la única forma en que tu corazón estará tranquilo es
obteniendo esa marca de tu único compañero —dijo, poniéndose de pie y
ofreciéndome sus manos para levantarme. Tomé sus manos y me puse de
pie, supongo que no había escapatoria. "Terminemos con esto", dijo Jasmin,
dejando escapar un gran suspiro.
Quería que la caminata a la casa fuera más larga, pero como estaba
perdida en mis pensamientos, ni siquiera me di cuenta cuando estábamos a
punto de entrar a la casa. Me quedé atrás y Jasmin se quedó conmigo en la
puerta. “Adelie, no te tortures a ti ni a ellos”, dijo. “No será más fácil si
esperas más. Asentí y Jasmin abrió la puerta.
Kairos y Hans me miraban como si me hubieran estado esperando todo el
día. Estaba un poco sorprendido por su aspecto y
Me congelé en el lugar. Kairos debió haber sentido la incomodidad con él y

Hans mirándome así por primera vez.
Apartó la mirada de mí y caminó un poco más hacia la sala de estar, justo
después de que Hans lo siguiera y yo fuera el último en entrar cuando Jasmin
desapareció detrás de mí.
Los dos estaban frente a mí, excepto que Hans todavía me observaba,
pero Kairos mantenía la mirada baja. La chimenea estaba encendida y
agradecí el sonido de la leña ardiendo que llenaba al menos parte del silencio.
Estuve en silencio durante mucho tiempo, con miedo de cómo empezar.
— Adelia. ¿Quién? Kairos preguntó con impaciencia, aún evitando mis

ojos.
"¿Te dolerá si elijo a alguien más?" Les pregunte.
Hans se rió entre dientes. Lo hará, pero es inevitable. Si Alpha Kairos
quiere que lo elijas tanto como yo quiero que me elijas a mí, eso lo lastimará
a él o a mí. Pero tienes que decírselo a Adelie.
Miré a Kairós. Quería que dijera algo, cualquier cosa. Inclinó la cabeza
hacia mí. “No tengo derecho a que me lastimen si lo eliges a él, ya te he
lastimado lo suficiente. Quiero que seas feliz por fin. Así que adelante. Hizo
un gesto hacia Hans. Estaba tan seguro de que lo elegiría... tan seguro de
que no era él.
Me acerqué a Hans. Noté que Kairos evitaba mirar en nuestra dirección.

Me miró lleno de esperanza y yo era el monstruo que destruiría todas sus
esperanzas. "Te perdono…" dije y Kairos se giró, ya no podía ver su rostro.
Capítulo 23
EL MITO SOBRE ALDRED
KAIRÓS
"Te perdono por todo", dijo, pero no podía mirarla, ella se escapaba así.
Yo no la merecía a ella ni a nadie más, pero ¿él sí? Él la rechazó.

¿Cómo puedes rechazar a un ángel así? ¿Y qué competencia soy yo si Adelie
tiene un compañero original? Tal vez tu culpa de rechazo iguale si él es tu
pareja original...
La única pregunta seguía dando vueltas en mi mente. ¿Debería estar
agradecido de conocerte? O loco que el destino me hizo creer en algo que no
era posible. Mis pensamientos fueron interrumpidos cuando finalmente Hans
habló después de una larga pausa.
- ¿Tú me perdonas? le preguntó emocionado, claro que estaba feliz.
"Sí, pero…" dijo ella y esa sola palabra, 'Pero'. ¿Pero lo que? —No puedo ir
contigo —dijo en voz baja, pero no me atreví a mirar.
El dolor en mi corazón era demasiado fuerte para esperar ahora y aplastarlo de
nuevo.
Tiene que ir con Hans. Ella dijo que yo la lastimé más que nadie, por eso
Hans es mejor para ella, pero tenía miedo de que no la tratara como debería.
Ámala con toda tu alma, mente y corazón. Quiero que ella reciba el amor que
se ha estado perdiendo.
- ¿Por qué? ¿Es por el entrenamiento? Jasmin también es bienvenida a mi

manada. Adelie, si vas conmigo te amaré con todo mi corazón. Te amo, Adelie”,
dijo Hans con voz suplicante.
No podía entender mis emociones ahora. Estaba triste y enojado con Hans
por decir que la ama, pero también enojado conmigo.
incluso por no tratarla bien desde el principio. Y todavía había una pizca de esperanza
de que realmente pudiera quedarse aquí.
“Sé que puedes amarme y yo también te amo…” dijo Adelie, mi corazón se
estaría rompiendo en este momento si no fuera por la vacilación en su voz que hizo
que me interesara más en lo que iba a decir a continuación. "Simplemente no tanto
como te gustaría…" dijo y finalmente la miré, con lágrimas en los ojos.
¿Podría estar peleando con su lobo? Por supuesto que estaría enojada y triste
porque Adelie estaba haciendo que su pareja se fuera. ¿Su lobo pelearía por mí
también? Adelie le estaba diciendo que no lo quiere, pero ¿qué significa eso para mí?
Hans dio un paso atrás. - ¿Que significa eso? “E hizo la pregunta por la que
también tenía curiosidad.
“No puedo estar contigo”, gritó Adelie. “Cuando llegué a esta manada, fue cuando
aprendí lo que es el amor, alejarme contigo me haría dar la espalda a todo lo que
soy ahora y lo que siento. Este es mi lugar, donde pertenezco. Yo te amo. Lo sé,
pero lo amo más. Ella olfateó. - Lo siento mucho.
Ella dijo que lo amaba más... Él. Ella estaba hablando de mí.
Miré a Hans y él asintió. "Me iré". Se alejó, manteniéndose firme, pero sus ojos
decían que no estaba tan firme y tranquilo. Sus ojos estaban ligeramente llorosos,
su mirada estaba casi sin vida. Hans se fue y lo escuché cerrar la puerta, incluso
hizo que Adelie se estremeciera.
Adelie se volvió hacia mí. “Lo amo”, exclamó, mientras las lágrimas corrían por
su rostro. Parecía tan pequeña otra vez, tan frágil y fácil de asustar.
- Yo se. - Yo dije.
“Pero yo te amo más”, dijo ella, no pude evitarlo más, mis pies me llevaban a
Adelie. La atrapé en un fuerte abrazo. Me devolvió el abrazo, pero sé que su corazón
aún no está tranquilo. No será hasta que reciba mi marca. Todavía no está lista para
eso, y no creo que lo esté pronto. No dejaba de llorar y no quería dejarla ir, pero
recibí una llamada mental de Raphael. Un vampiro mató a uno de los miembros de
nuestra manada. Una
niño llamado Devin. ¡Maldición! No quería dejarla, pero esto era serio. Lo acabo
de recuperar y necesito dejarlo ahora.
— ¡Adelia! La llamé y ella apartó la cabeza de mi pecho y se secó las
lágrimas. “Esto es una especie de anticlímax. Hay un problema serio en la
manada, necesito irme, no quiero dejarte ahora, pero necesito irme.
- ¿Que problema? - Ella preguntó.

“Sí, no te preocupes por eso. Usted necesita descansar. - Le dije.
- ¡Dígame! exigió.
"Adelie, ve a descansar un poco, arreglaré esto y te contaré todo, por favor.
¡favor! “Dije que necesitaba descansar ahora.
Era tarde y no quería tenerla despierta hasta la medianoche mientras
limpiábamos. Acerqué suavemente su cabeza hacia mí y besé su frente. "Es
muy importante", le expliqué.
Adelia asintió. "Cuando vuelvas, ven a la
mi cuarto. Quiero saber. ¿OK?
“Por supuesto,” dije y corrí a la empacadora. No puedo dejar que esos
bastardos destruyan mi manada. Vampiros, han sido nuestros enemigos desde
que tengo memoria. Hay un mito sobre esto.
Una vez, hace veinticuatro años, había un poderoso y sabio mago, Aldred,
que provenía de una conocida familia de magos. Los magos eran raros en ese
entonces, por eso era tan popular.
Usó sus hechizos para malas acciones. Era un hombre malhumorado de
unos treinta años, que odiaba a todo el mundo sin razón aparente. Durante
mucho tiempo, sus hechizos fueron un poco dañinos e irritantes. Luego
desapareció durante unos años.
Dicen que se fue al infierno a buscar algo. Volvió más poderoso. Un día
robó algo de los vampiros. Estas brujas vivían entre hombres lobo y trabajaban
juntas, era natural que los vampiros comenzaran a mirar de manera diferente
a las brujas y los hombres lobo que estaban tan cerca de ellos.
Más tarde, resultó que esa cosa robada era un libro antiguo que contenía
rituales malignos sobre la invocación de los muertos, si tomas una
vampiro sin morder y destruir especies de vampiros. eso es lo que mas

los asustó.
Aldred les dijo a los vampiros que los hombres lobo robaron, desde
ese día no se los ha visto entre nosotros. Hasta el día de hoy, los
vampiros siguen buscando ese libro. Se desconoce qué quería Aldred
con ese libro desde que desapareció. Tal vez esté muerto, tal vez
deambulando por el bosque, nadie ha sabido nada de él desde entonces.
Corrí hacia donde estaba la gran multitud, todos rodeando el cuerpo
que yacía en el suelo. El cuerpo estaba sin vida y la marca de
mordedura en su cuello se había vuelto azul oscuro. Devin era uno de
los muchos miembros de la manada que no tenía familia de sangre.
Todo lo que tenía eran sus compañeros de manada.
- ¿Dónde sucedió? Le pregunté a Raphael, quien se acercó a mí.
— En el borde de la manada, los guardias lograron contraatacar.

ellos, pero Devin estaba corriendo en el momento equivocado y el vampiro lo atrapó.
"¿Alguien más resultó herido?" - Yo pregunté.
“No, solo él”, dijo Raphael. '¿Cuál es nuestro plan?'
No tenía ningún plan. “No tengo a Rafael. Yo no sé. Miré a Devin,
a quien ahora se lo llevaban. No puedo permitir que esto vuelva a
suceder, ni siquiera debería haber dejado que sucediera en primer
lugar, estoy fallando mi manada de nuevo. “¿Puedes comunicarte con
el clan de vampiros? Le pregunté a Rafael.
— ¿Clan de vampiros? ¿Qué quieres con eso? preguntó con
incredulidad.
“Necesito que organices una reunión para mí, lo antes posible”, dije
y Raphael respondió de inmediato.
- Yo no voy hacer eso. No hay forma de que pueda hacer nada que
pueda hacerte daño, eres mi Alfa. Encontraremos otra forma de evitar
estos ataques”, dijo nervioso.
"Así es, soy tu Alfa y harás lo que te diga", dijo el
él. Es mi amigo, pero no tiene derecho a desobedecerme.
“Una vez que entras en la guarida de los vampiros, no hay nada
que les impida matarte. Estarás en su territorio...”
podía oírlo más.

“Raphael, necesito hacer algo, no puedo ver cómo asesinan a mi
manada. De nuevo no. No hay otra manera, mi mochila ya es muy
pequeña”, le expliqué.
“Pero somos fuertes”, continuó argumentando.
- ¿Y? Rafael frunció el ceño.
- ¿Y? ¿Lucharemos todo el tiempo? ¿Vivir con miedo de que los
vampiros pudieran atacar en cualquier momento? Yo no quiero eso.
Estoy aquí para manejar esta manada y protegerlos, y si ni siquiera
puedo hacer eso. ¿Qué clase de alfa soy? Dejé escapar un suspiro.
“Así que por favor Raphael haz esto por mí, sé que tienes conexiones
con vampiros que yo no. Quiero una reunión con ellos.
Raphael se suavizó un poco ahora y asintió. “No hay garantía de
que regreses”, dijo.
"Lo sé". Sé que los vampiros no tienen piedad.
- OK. Veré qué puedo hacer", dijo y se alejó de la multitud.
que se iba con Devin.
¿Qué pasa si no vuelvo?
Capítulo 24
LA MARCA
KAIRÓS
Entré a mi casa, todo estaba oscuro y en silencio, ¿qué más puedo

esperar a las 2 am? Subí a la habitación de Adelie. De pie frente a la
puerta de su dormitorio, olí su dulce aroma.
debo entrar? Ella podría estar durmiendo. Le dije que iría a su
habitación cuando volviera. Tal vez sólo un vistazo para ver si está
dormida.
Abrí la puerta y mis ojos tardaron unos segundos en acostumbrarse
a la oscuridad que había allí. El cuerpo tendido en la cama hizo que me
quedara en mi asiento. Ella estaba de espaldas a mí. Llevaba el mismo
vestido que antes.
Ni un solo sonido de ella, no debería perturbar su sueño ahora.
Pero, de nuevo, ni siquiera debería estar durmiendo aquí, debería estar
en mi cama, en mis brazos, así sabría que está a salvo.
Soy un tonto. Extrañaba todas las noches que estuvo aquí, ahora
necesitaba hacerle saber que la adoro. ¿Cómo podría pensar en dejarla
ir en los brazos de otra persona? Ella me pertenecía, sólo a mí. Y yo le
pertenezco por los siglos de los siglos, así debe ser.
Estaba cerrando la puerta en silencio. “Estoy despierta”, escuché a
Adelie hablar en voz baja, pero no se movió ni un centímetro. - ¿Qué
sucedió? ella preguntó al instante.
“Me estoy ocupando de eso”, dije, pero no sé si realmente lo estoy
haciendo. Todavía no tengo ningún plan, ¿cómo puedo convencer al clan
de vampiros o qué puedo ofrecerles?
- ¿Qué sucedió? preguntó de nuevo.
No quería decírselo, ha pasado por muchas cosas últimamente.
Además, ¿qué puede hacer ella para ayudar en esta situación? Yo soy el
Alfa. ¿Debería saber qué hacer y si no lo sé, ella lo sabría?

“No tienes que preocuparte por eso,” dije y ella parecía querer cambiar
de tema. - ¿Te desperté? Le pregunté, acercándome a su cama.
"No." Dijo dulce y dulcemente. - No puedo dormir.

Pero lo quiero tanto, solo para darle un poco de descanso a mi mente, odio
el pensamiento que estoy teniendo. Los pensamientos no son justos ni para
mí ni para ti.
- ¿Qué estás pensando? "Yo le pregunté, ella no lo hizo.
respondió durante algún tiempo. “Puedes decírmelo,” la animé.
No creo que quieras saberlo. Y ya no puedo mentirte.
- Quiero saber. No importa cuán horribles, malos o locos sean tus

pensamientos, quiero conocerte. Háblame, para eso están los acompañantes,
¿no? “Estaba hablando en un susurro, como si alguien más estuviera aquí.
"Estoy pensando en Hans", dijo. Por supuesto que no quería que ella
pensara en él ni por un segundo. Y por supuesto que estaba celoso.
No pude evitar preguntar: "¿Crees que tomaste la decisión equivocada?"

Le pregunté y en un movimiento rápido se sentó y se volvió hacia mí.
- ¡No! Es claro que no. Ella exclamó cuando sus ojos

Encontré el mío.
— Su sueño es tan difícil porque los pensamientos sobre él son opresivos.

¿Por qué me elegiste? Es tu compañero original, seguro que podría darte
amor. “Necesitaba respuestas de ella.
Fui egoísta o tal vez merezco algunas respuestas.
Los ojos de Adelie brillaron incluso en la luz brillante que había en esta
habitación.
“Su amor no me llenó, no sería lo mismo. Me haces sentir cosas que
parecen imposibles de sentir con cualquier otra persona.
Siempre supe mi elección, y lamento haberme hecho esperar tanto. Y lo
siento por mentirte, te lo prometo
no hay nada que no sepas de mí ahora. Hablaba con una voz dulce y
aguda.
Me acerqué a ella sosteniendo su barbilla en mi palma y levantando su
cabeza para mirarme a los ojos. Me di cuenta de que había estado llorando
por un tiempo, sus ojos se veían cansados pero aún hermosos como
siempre.
Me alegré de que estuviera tan oscuro. Casi me hizo sentir más
imprudente que de costumbre. Tomé las manos de Adelie entre las mías y
la saqué de la cama, se tambaleó un poco, perdiendo el equilibrio, pero me
aseguré de mantenerla en su lugar.
Acaricié su mejilla y lentamente deslicé mi mano hacia donde estaba
su corazón. Ningún movimiento de su lado, solo un tembloroso suspiro se
le escapó mientras trataba de calmarse. Su vestido tenía un profundo
escote en V.
No había tela entre mi mano y su piel suave. Apoyé toda la palma de
mi mano allí y sentí que su corazón se aceleraba a una velocidad
antinatural. Lo que mi toque le hizo a su corazón, quería hacérselo a todo
su cuerpo.
Quería que su subconsciente rogara por mi toque, como lo hizo el mío
por su toque. Como si me doliera la mente con visiones de nosotros dos
juntos en formas que todavía se sentían tan mal, pero tan bien. Incluso su
olor me estaba volviendo loca, quería que su olor estuviera en el mío,
quería que nuestros olores chocaran. Quería tu sabor en mi lengua. Todas
las cosas que quería...
Sabía que en su corazón aún había dolor. - ¿Aún duele? Pregunté
sabiendo la respuesta.
El cuello de Adelie se sacudió mientras tragaba el nudo en su garganta.
"Más que nunca", logró decir mientras sus labios temblaban, si mi mano
no estuviera sobre su piel desnuda, podría hablar normalmente, pero me
gustó lo que mi toque le hizo. Lo que solo yo debería poder hacer con tu
cuerpo.
- ¿Por su culpa? – Pregunté todavía. ella estaba sufriendo por
Por Hans, sé que lo era.
"S... sí", tartamudeó. Todavía era tu compañero hasta que puse mi
marca en su cuello. Deslicé mi mano hacia atrás
se levantó y lentamente apartó su cabello que estaba en el camino de

su cuello.
Mi mano permaneció en su hombro mientras mi pulgar frotaba la
piel desnuda de su cuello. Donde imaginé que estaría mi marca. Un
bocado y Hans desaparecería de su corazón.
Un bocado y es mía, así todos sabrán que es mía.
Fue Adelie quien puso sus manos en mi rostro y tiró de mí para

besarme, no necesité tiempo para reaccionar, fue natural, como si el
aire que respiro mis pulmones gritaran por ella, para cuando nos
besamos fue como si no hubiera camino sin él.
Sentí que nuestro beso avanzaba, profundizaba su significado, ya
no era un beso simple y tierno. Aunque los besos de Adelie nunca son
simples. Ese beso fue el beso más poderoso y apasionado que nunca
habíamos compartido antes. Nunca antes me había sentido tan feliz.
La quiero, la necesito.
Mi mano estaba en la cintura de Adelie y la otra enredada en su
largo cabello. La idea de que ella estuviera conmigo así me volvía
loco. Mis manos luchaban conmigo, tratando de alejarse de mi mente
y tener una mente propia.
No pude evitar bajar hasta su cuello. Estábamos respirando
pesadamente ahora mientras dejaba un rastro de besos por su cuello.
La escuché gemir cuando encontré su punto dulce donde su hombro
se encuentra con su cuello. Tu sonido fue la música más dulce para
mis oídos que jamás haya escuchado. "Márcame", dijo sin aliento.
Mi lobo Kye luchó por liberarse. Sentía que aún no podía marcarla,
especialmente conmigo yendo al aquelarre de vampiros, pero a Kye
no le importaba eso. Empujé a Adelie contra la pared, debatiéndome
si marcarla.
Era lo que más deseaba, tenerla, en todos los sentidos. Sentí que
mis manos estaban agarrando su cuerpo con demasiada fuerza, como
si mis besos de repente se volvieran más ásperos, y ella estaba lo
más cerca posible de mí.
"¡Kairos, etiquétame!" Adelie dijo de nuevo esta vez más dominante,
pero aún con una voz lujuriosa. A partir de ahí, mi infierno
Empecé y mis dientes se hundieron en su cuello. Adelie gimió de dolor

mientras clavaba sus uñas en mi espalda, aunque mi camisa sabía que
dejaría marcas.
Cada segundo la sentía perder el control, volverse más ligera. Le
saqué los dientes del cuello y no pasó mucho tiempo antes de que
estuviera inconsciente en mis brazos.
Acosté a Adelie en su cama, echando un vistazo a mi marca en su
piel. Ella me pertenecía, ahora nuestro vínculo solo se haría más fuerte.
No quería irme, y me senté a su lado, era como si el sueño nunca se
hubiera sentido tan fácil antes, mientras mis ojos se cerraban en la
oscuridad.
Capítulo 25
LA TRAICION DE JASMINE
ADELIA
Me desperté con el sol brillando en mis ojos. El sueño en mi cabeza estaba

fuera de este mundo. No creo haber tenido una buena noche de sueño
como esta, olvidando por un segundo dónde estaba.
Recordé ayer, Kairos a mi lado en la oscuridad. El beso que compartimos
tan apasionadamente, el sentimiento que estalló que nunca pensé que fuera
posible sentir, el deseo de que alguien más estuviera lo más cerca posible
y nunca lo soltara.
A pesar de que todo lo que condujo a eso se convirtió en recuerdos, tan
poco importantes y tristes. Y de repente nada más importaba porque solo
uno llevaba mi corazón, ya ni siquiera yo.
Entregué mi corazón a la abundancia total, me entregué a una sola
persona. Dejaría que una persona rompiera mi corazón en un millón de
pedazos si eso es lo que los haría felices. Te dejaría hacer eso.
Era como si todos mis sentimientos hubieran cambiado de la noche a la
mañana. No hubo más dolor, solo el cómodo silencio de saber que alguien
está dispuesto a amarme y cuidarme.
Y finalmente, paz porque solo hay una en mi corazón, porque Hans se
ha ido por completo, no de este mundo, sino de mi corazón y de mi mente.
Solo una pequeña parte seguía allí, recordándole que había existido.
Toqué el lugar donde Kairos me marcó. No fue doloroso, al contrario, en

realidad respondió a mi toque con un cosquilleo agradable. Pensé en Kairos,
la forma en que me besó, quería más, se estaba conteniendo, si la marca
no me hubiera hecho perder el conocimiento, habría perdido completamente
el control conmigo a su lado.
Una vez que completemos el proceso de apareamiento, seremos uno.
Podía continuar con este sueño feliz, pero el entrenamiento de la

mañana estaba comenzando y todavía tenía que asistir al desayuno.
Cambié el vestido por mi equipo de entrenamiento y me trencé el cabello
con algunos mechones. Me acerque al espejo y vi la marca que estaba en
mi cuello. Era visible y de alguna manera diferente de cualquier otra marca
que había visto en otros lobos, tal vez solo me pareció así.
Dejo mi trenza a un lado para cubrir mi marca. No estaba avergonzado

de eso, estaba orgulloso y halagado, tal vez era posible que no quisiera
que todos supieran, o vieran, tal vez solo por ahora. Estaba feliz de usar la
marca Kairos.
Bajé sabiendo que llegaba tarde. Al entrar al comedor, vi a Kairos
apoyado contra una de las paredes y Jasmin estaba sentada en su silla
con los brazos cruzados frente a ella. Era como si el olor de Kairos fuera
más fuerte que antes. Me gustó, porque antes era poco, me daba ganas
de más, pero ahora era perfecto. Me pregunto a qué huelo para él... ¿le
gusta? A él le debería gustar, ¿verdad? Ya que soy tu compañero...
No tuve que decir nada ni hacer ningún sonido porque Kairos ya me

estaba mirando. Miré la mesa y la comida estaba intacta. “No tenían que
esperarme,” les dije a ambos.
- Tenemos mucho tiempo. Dijo Kairos, pero estaba fijando su mirada
en mi trenza que colgaba sobre mi hombro. Levantó la barbilla y apretó la
mandíbula. Traté de no parecer molesto por su comportamiento, pero
pronto lo encontré caminando hacia mí.
Se paró frente a mí y con su mano tiró de mi trenza hacia atrás,
revelando mi marca. “Todos lo sabrán de todos modos. No necesitas
esconderte. Pueden olerme en ti ahora que tienes una marca —dijo y se
movió a mi lado llevándome a la mesa.
Dejé de caminar cuando vi a Jasmin mirándonos sorprendida y un poco confundida.

enojado. Kairos le gruñó. - ¿Qué? ¿Por qué estás tan sorprendido?
Jasmin se levantó de su asiento. - ¡Qué! ¿Cómo puedes etiquetarlo?
¿Estás loco? “Estaba furiosa ahora por una razón desconocida para mí.
Kairos también fue atacado por su explosión, pero pronto se recuperó.

“Ella es mi compañera y no tienes que preocuparte si la marco o no. De hecho,
antes dejaste claro que necesitaba que la marcaran para fortalecerla. Eso es lo
que dijiste, ¿no? Kairos discutió con Jasmin.
No podía entender por qué Jasmin estaba enojada, no podía decidir si debía
marcarme o no. Ahora caminé frente a Kairos y miré a Jasmin.
— ¡Jazmín! No tienes nada que decir al respecto. Desprecias a los hombres

lobo y todo lo demás que tenga que ver con eso. No entenderías toda la
importancia de una marca —expliqué, pero ella me lanzó una sonrisa amarga y
sacudió la cabeza como si estuviera derrotada.
- ¡No! Eso es exactamente lo que entiendo. dijo con calma.
“Como ambos sienten el mismo dolor, sus sentidos son mucho más fuertes
ahora, cómo piensan el uno en el otro, cómo cada uno es su fuerza y todo por
lo que viven”, dijo con cada declaración acercándose un poco más. “Y cuán
enojados estarán el uno sin el otro.
Miró a Kairos que estaba detrás de mí y le dio una
asqueroso. “Eres tan egoísta como ellos piensan. Ella le escupió.
— Jazmín. Le pregunté por la marca. “Defendí a Kairos recordando el ayer.
Quería hacerlo, así que le pedí que me etiquetara. Dudo que me etiquete si no
se lo pido.
“Debería haber dicho que no era una buena idea”, dijo Jasmin.
Volví a mirar a Kairos y él ya me estaba mirando, tenía una mirada de
muerte sobre él. - ¿Por qué? Le pregunté a Kairos, pero no dijo nada, así que
me volví hacia Jasmin.
“Él va al clan de vampiros. Pocos regresan de allí, y considerando el amor
de los vampiros por los hombres lobo, él tampoco lo hará,” explicó Jasmin. “Qué
egoísta de su parte. Te va a hacer más daño ahora que te marcó.
Ella continuó. “Y tú, Adelie, realmente crees que él se preocupa por ti, pero
solo se preocupa por sí mismo”, le espetó a Kairos. Sé que Kairos se preocupa
por mí, no hay nada que pueda hacerme pensar lo contrario. Siento tu amor por
mí. Sé que a él le importa como a mí.
Volví a mirar a Kairos. “Lo siento, Adelie. Me preocupo por ti, yo solo... yo...”
Trató de encontrar las palabras correctas, pero no necesitaba explicar. Le pedí
que me etiquetara. Solo Dios sabe lo difícil que sería para él negarse a
etiquetarme.
“Todavía puedes volver. Es posible. ¿Correcto? Le pregunté mientras se
encogía de hombros. "¿Por qué vas allí?
Le pregunté.
“Soy el Alfa y me preocupo por esta manada más que nada, necesito
protegerlos. Los vampiros mataron a uno de nuestra manada, no puedo permitir
que esto siga pasando. Sé que no debí haberte marcado, lamento haberlo
hecho, pero haré cualquier cosa para volver —casi rogó, pero mi mente estaba
ocupada con otro pensamiento. Algo además de Kairos yendo a asesinos a
sangre fría.
“No hay nada de qué arrepentirse,” dije cambiando rápidamente de tema. -

¿Cuándo pasó eso? Yo pregunté.
“Anoche salí por eso”, explicó, pero las cosas no se estaban alineando
correctamente. ¿Alguien murió? Las muertes ocurren, por supuesto, pero para
mí, las muertes siempre han sido una oportunidad de reencuentro. La terrible
sensación que tengo de este reencuentro tiene precio de muerte.
"¿Estabas en nuestra manada?" Pregunté, confundido.

— Sí. Adelie, ¿qué pasa? preguntó, ya sospechoso.
“Él siempre viene a mí. Nunca perdió la oportunidad de

verme. Nunca —dije, casi llorando. “Él siempre está conmigo.
- ¿Adelia? - Pregunta de El Cairo.
- Mi padre. Él no vino a mí ayer —dije—.
"Probablemente no sea nada", dijo Jasmin rápidamente y la miré.
"Algo anda mal", le dije. "Eres una bruja Jasmin", dije lo obvio. “Dijiste que
puedes visitar el otro mundo, has conocido a mi padre antes.
Jasmin dio un paso atrás. - Yo no puedo. No voy a hacer eso,

ella dijo inmediatamente.
- ¿Porque no? - Yo pregunté. "Dijiste que eras mi amigo..."

“Ahora estaba enojado con ella.
"Porque no es nada, la Muerte probablemente estaba ocupada, así que
no acudió a ti, ya no eres un niño, no lo necesitas todo el tiempo", dijo
Jasmin, levantando la voz pero aún no podía controlarla. respiración
temblorosa. , ella sabía algo, pero se estaba escondiendo.
“¿Por qué no quieres ayudar a Jasmin? Pregunté una vez más, sintiendo
mi voz de Luna en mi garganta. “Ha habido muchos casos donde las brujas
van al otro mundo, no puede ser tan difícil.
Yo continué. “Maldita sea, sé que no es difícil para ti. Mi madre me

enseñó sobre el poder de las brujas. ¿Por qué no puedes ayudarme?
- ¡Porque yo no quiero! Ella como que gritó y escuché a alguien vacilar

en la puerta.
Maeve estaba sorprendida, creo que escuchó mucho más que
eso deberia. "Y... el entrenamiento... comenzó..." dijo ella.
“Estaremos allí pronto, Maeve. ¡Puedes ir! dijo Kairos, y Maeve se fue
sin dudarlo.
"¿La escuchaste? El entrenamiento está comenzando, tenemos que comenzar,
– dijo Jasmin como si nada hubiera pasado.
Negué con la cabeza. "Ni siquiera pienses que voy a entrenar contigo
una vez más".
“No puedes,” dijo Jasmin. "La profecía…" comenzó.
“Si la profecía es tan real como dices. “Ella de alguna manera me hizo
dudar de que hubiera una profecía. “Si está destinado a ser, lo seré.
Yo soy el de esa profecía, no tú —dije.
- ¡Tu me necesitas! - Ella dijo.
- ¿Por qué? Kairos preguntó y yo también tenía curiosidad.
"Si entrenas, te ayudaré con la Muerte", dijo.
instantáneamente. Ella no quería ayudarme antes. ¿Porque ahora?
Le di una sonrisa de lado. “Puedo hacer esto solo. “Jasmin me

engañó, ella sabe acerca de la muerte, pero me está ocultando cosas.
Volví a mirar a Kairos y él estaba mirando hacia abajo, pero yo

Sabía que la sonrisa en sus labios era de orgullo.
Jasmin habló, captando mi atención. "Te arrepentirás de esto. No por
mi culpa, pero te arrepentirás. Jasmin se fue, pero su expresión no era
de enojo, era más triste.
Capítulo 26
MENTIRA DE NUEVO
ADELIA
Jasmin se había ido y solo estábamos Kairos y yo, él estaba detrás de mí pero
sentí su presencia cada vez más cerca. Kairos se detuvo y puso sus manos
sobre mis hombros.
No dije nada y no quería. Mantuve los ojos cerrados porque tenía miedo de
lo que su toque le haría a mi marca, no quería que la tocara accidentalmente. Si
hubiera sido en un ambiente diferente, hubiera querido eso, pero ahora mismo
esa era la menor de mis preocupaciones.
"¿Qué vas a hacer con tu padre?" preguntó en voz baja y apoyó su frente
contra mi cabeza y eso hizo que me inclinara hacia él.
- No sé. “Encontraré la manera, sé que lo haré, pero espero que sea más
temprano que tarde. "¿Qué vas a hacer para no morir?" Pregunté con dureza,
pero me arrepentí de inmediato. "Soy muy…" comencé. Sé que lo hizo por la
manada, pero todavía no quiero perderlo, no ahora, nunca.
"Detente", dejó escapar un suspiro de frustración. No diré que siento haberte

marcado. No me arrepiento. Etiquetarte fue lo mejor que pude imaginar. Pero
diré que lo siento por etiquetarte en el momento en que más puedo lastimarte,
pero necesito hacer esto, Adelie.
Él continuó. "Necesito ir allí. Esta no es la primera vez

ataque de vampiros. Beta vuelve hoy para decir la fecha de la reunión.
Me volví hacia él. - Yo se. Y sé que piensas que es lo correcto. Eres un gran
Alfa, Kairos,” le dije. Creo que nunca le dije eso a la cara. “No quiero que
pienses en mi bienestar en este asunto. Pero debe haber otra manera. ¿Qué
hará tu manada sin ti? Le pregunté.
"Ellos te tendrán", dijo, tomando mis manos entre las suyas.

Las lágrimas se formaron rápidamente en mis ojos. - ¿Qué voy a
hacer? — resoplé.
No dijo nada, ¿cómo podría? Qué se puede decir...
"Iré contigo", le dije. Nunca en mi vida pensé que querría ir directo a
mi muerte. El amor nos hace hacer locuras, que hermosa tragedia. Cuando
estás dispuesto a dejar todo atrás por la persona que amas, todos los que
podrían amarte como familia o amigo de repente parecen pasar a un
segundo plano. ¿Es malo que alguien sea la única prioridad para ti?
¿Por qué dicen: Ama la vida? Porque cuando estás enamorado, ves
las cosas de manera diferente, en formas que no sabías que podías ver,
donde una vez que un extraño se convierte en uno contigo.
Una versión diferente de ti. No te tienen que gustar las mismas cosas. No
tienes que actuar de la misma manera. La otra mitad te completa. La vida
amorosa es un sentido de la vida totalmente diferente.
"Sobre mi cadáver Adelie", dijo y su tono y sus ojos se volvieron fríos.
Su rostro era inexpresivo, completamente blanco, como un cadáver. ¿Era
ese el lado de él que no puedo desobedecer?
Ni siquiera me atreví a parpadear. Sé que no me haría daño, no
necesitaba decir que estoy a salvo con él, lo sentí con todo mi corazón.
Pero hay una línea que no es inteligente cruzar. No importa cuán cerca
seamos o cuán fuerte sea nuestro amor, Kairos sigue siendo mi Alfa.
Mi boca se cerró e incluso mi respiración se detuvo, Kairos debe haber

noté la expresión en mi cara. Dio un paso incómodo hacia atrás.
“Necesito ir al entrenamiento, y puedes unirte a nosotros si quieres”,
dijo Kairos un poco sorprendido. No creo que ni siquiera esperara hablarme
así. Si estuviera en sus zapatos, ¿lo dejaría ir? Por supuesto que no, no
me gustaría que le pasara nada.
“Hoy voy a trabajar sola”, dije y él asintió, dejándome sola sin un beso,
o solo un beso en la mejilla o un abrazo. Simplemente se fue sin siquiera
mirarme a los ojos.
No puedo perderlo. No puedo perder a mi pareja. terminé

para encontrarlo y ya está al borde de la muerte.

Fui a mi lugar de entrenamiento habitual, excepto que Jasmin no estaba aquí
como normalmente lo estaba. En cambio, vi a Maeve, pero ella se paseaba y
divagaba suavemente.
Cuando Maeve me vio, caminó directamente hacia mí. "Oh... gracias a Dios
que estás aquí", dijo y me tomó de la mano para alejarse un poco del
entrenamiento. Miré hacia donde estaba toda la gente y vi a Kairos mirándonos
con desconfianza, pero cambió su mirada.
"¿Qué pasa, Maeve?" Yo le pregunte a ella. - Es algo con

¿Jaime? ¿Maya? - Yo pregunté.
Ella negó con la cabeza y habló rápidamente en un suspiro. — Escuché tu
conversación, no quería escucharla, pero estaba ahí
Y...
—¡Maeve! Traté de calmarla colocando mis manos sobre sus hombros. Sé

que ama a Alpha Kairos como líder. "Sé que es malo, Alpha se va al clan de
vampiros y..."
- ¿Qué? me preguntó, sorprendida. Inmediatamente llevé mi mano a mi boca.
"¿Va a ir al clan de vampiros?" - Ella me preguntó.

Dejé escapar un suspiro. “Pensé que habías oído eso. “No tenía sentido
seguir escondiéndonos. Y sí, se dirige allí, para tratar de detener su sed de
sangre de hombre lobo.
"Oh", dijo ahora, tranquila pero perdida en sus pensamientos.
"¿Querías decir algo, si no fuera por Alpha… por qué?" - cuestioné.
“Oh cierto, ¿Jasmin no te está ayudando? - Ella preguntó.

Negué con la cabeza. "No. No sé lo que está escondiendo y por qué me
prohibió ver a mi padre, pero no creo que esté tratando de lastimarme a mí ni a
nadie más", le expliqué.
— ¡Adelia! Jasmin no es buena, te lo demostró esta vez”, trató de discutir,
pero Jasmin me ayudó a entrenar todo este tiempo. Sé que no me ayudará, pero
espero que tenga una buena razón para hacerlo.
No quería responderle. “No vuelvas a hacer eso… ¿Qué quisiste decir? —

pregunté, cambiando de tema.
"Yo... yo quería ofrecerte un camino, pero Alpha ya está en camino".
por el clan de vampiros y no podemos arriesgarnos a ustedes dos,” dijo ella.
- ¿Ofrecerme qué? ¿Y qué tal ambos? “Estaba intrigado ahora.
"Si quieres ver a la Muerte, los vampiros pueden ayudarte con eso,
guardaron algunos de los hechizos del libro", dijo.
¿El libro que estás buscando? Pregunté y ella asintió. "Por supuesto que
les gustaría algo a cambio, también podría ser tu sangre o sangre alfa", dijo.
“Pensé que tal vez con tus poderes podrías ser más astuto que ellos. Pero
ahora que Alpha también se dirige allí, podría ser más peligroso”, dijo.
A veces la gente tiene que sacrificarse por la seguridad. "Podría ir solo", dije
al instante.
Maeve levantó una ceja hacia mí. “Alfa no te dejará ir. Ningún compañero
dejaría que su otra mitad hiciera eso y él es el Alfa, así que...
“Él no necesita saberlo. Iré delante de él y si hay alguna forma de sobrevivir

hablaré de no volver a tocar a los hombres lobo si no lo hago... Lo siento pero...
Algo malo va a pasar, puedo sentirlo .
Yo continué. “Mi padre siempre estuvo conmigo. Pero ahora es como si ya

no lo sintiera y eso es mucho más que solo querer un padre. Él es la Muerte,
tiene poderes y si hay algo que puede mantenerlo alejado, es más poderoso
que nada.
— Hoy vuelve el Beta, te avisará cuando es la reunión, yo iré el día anterior.
Necesito que me prometas algo, Maeve —dije y me incliné un poco más cerca.
- Cualquier cosa.
“Si no vuelvo, bajo ninguna circunstancia dejes que Alpha me persiga.
Maeve asintió. - Voy a intentarlo.

“Haré lo que sea para mantener este paquete a salvo,” dije.
él dijo.
“No tienes que sacrificarte”, trató de razonar.

“Si esa es la única forma, lo haré. Quiero que le expliques esto a Alpha si
no vuelvo. Y no quiero que nadie lo sepa, Maeve. Ella no dijo nada, solo asintió.
"¡Vamos a entrenar entonces!" Dije, lleno de emoción, tratando de aligerar

el ambiente sombrío, ya tratando de practicar mi cara falsa para poder mentirle
a Kairos.
mentiras. Una vez más, parece que mentir es todo lo que hago en estos
días, y lastimo a todos con mi indecisión. Necesito mentir esta vez, por el bien
de Kairos, necesito mentirle, de lo contrario no me dejará ir allí.
¿Cómo puedo fingir ser feliz? ¿Dónde estaba el límite cuando prometí no
mentir más?
Caminé junto a Kairos, quien estaba informando a dos hombres sobre las
reglas de la pelea. Miré a mi alrededor y todavía había miembros de la manada
de Sombraluna, pero no vi a Hans aquí. Supongo que ya se habrá ido, pero no
me atrevería a preguntarle a Kairos al respecto.
Kairos comenzó su lucha y caminó a mi lado. - Está todo
¿bien? - Le preguntó.
- ¿Si porque? - Yo pregunté.
“Maeve parecía tensa hablando contigo,” explicó, mirándome con sospecha.
“Oh, solo está preocupada por la pelea que tuve con Jasmin,” mentí.
'¿Por qué le importaría?'

Negué con la cabeza y me mordí el labio inferior. "Tal vez ella solo se
preocupa por mí", le dije, pero ¿lo hizo? Si ella quiere ayudar, debe hacerlo,
¿verdad?
— Hm. Él se rió y sonrió. "¿Quieres aprender a pelear?" preguntó, pero no
esperó mi respuesta mientras se paraba frente a mí en una posición firme y
esperaba.
- ¿Qué? Pregunté frunciendo el ceño.

- Avanzar. Lánzame un puñetazo. Dijo y me dejó boquiabierto.
- ¿Porqué yo haría eso? Pregunté, confundido.

Kairos rodó los ojos hacia mí. “Quiero ver qué puedes hacer.
“Sabes lo que puedo hacer. Puedo protegerme. - Expliqué

recordando cómo nadie podía acabar con esa criatura raíz.
“Solo te beneficiará si sabes cómo pelear. Tal vez no siempre haya suficiente
tiempo para que muestres tus poderes. Y eso podría ser bueno para ti.
“Kairos, no te voy a pegar”, argumenté.

- ¡Avanzar! - El dice.
- ¡No! Como que grité y sentí algo hirviendo dentro de mí, una sensación muy
extraña, pero buena.
“Trataré de bloquearla,” dijo en voz alta.
- ¡¿Tratar?! ¡No quiero herirte! - Yo dije. Y comencé a sentir
una sensación irritante en el estómago.
"¡No me harás daño!" Siguió luchando por su palabra.
“¡Tú no sabes eso! "Algo estaba tratando de salir de mí,

Me sentí como algo.
— ¡Adelia! ¡Es parte del entrenamiento! “Él estaba cada vez más enojado
ahora y yo también.
“¡No necesito este entrenamiento! ¡Ahora soy completamente capaz de
protegerme a mí mismo! "¿Se movía la hierba bajo mis pies?" Fue como si mi vista
mejorara y pudiera ver cada pequeña célula.
Sentí algo subir por mi cuerpo haciéndome temblar. Parpadeé y fue como si
me invadiera un delicioso sentido de la naturaleza. Me sentí uno con la naturaleza.
Ahora me sentía más poderoso.
Kairos me miró a los ojos con confusión, pero pronto cambió a su habitual
expresión en blanco.
Era como si estuviera pensando en el siguiente paso a dar y luego
entonces él fue el que me dio un puñetazo.

Capítulo 27
CAMBIOS EN ADELIE
ADELIA
Cogí el puño de Kairos en el aire. Y sentí que no era un golpe ligero en

absoluto, realmente estaba usando la fuerza sobre mí, ¿estaba seguro de
que iba a esquivarlo?
E incluso pronto me di cuenta de que estaba agarrando su muñeca con
tanta fuerza que cuando lo solté, mis huellas dactilares se tiñeron de blanco
en su mano. No me di cuenta de cuánta fuerza estaba usando.
Miré hacia arriba para encontrarme con los ojos de Kairos y él tenía una
sonrisa juguetona a diferencia de mí. No podía sonreír, no sabía lo que me
estaba pasando. Todavía había una sensación de ebullición dentro de mí.
No iba a golpear a Kairos, tenía miedo de lastimarlo.
Unos segundos después, parecía que Kairos no tenía intención de

detener este entrenamiento. Dio dos largos pasos por delante de mí, pero
retrocedí. “Una vez que comienza la pelea, no puedes rendirte”, dijo, pero
nunca quise esta pelea. Kairos no sabía cómo me sentía. Necesitaba sacar
esa fuerza de mí. Esa energía me pareció tóxica.
No quiero pelear. Quería decirlo, pero no podía dejar que ninguna

palabra saliera de mí. Tuve esta horrible necesidad de destruir algo en este
mismo lugar. Negué con la cabeza para hacerle tener algún tipo de pista.
Se sentía como si toda mi cabeza fuera a explotar en cualquier momento
con la tensión en mi cerebro.
“Está bien,” dijo Kairos en un susurro bajo. Pero no fue suficiente para
calmarme. no estuvo bien Quería decirle que algo andaba mal, pero no
pude.
Kairos cargó contra mí con toda su fuerza y peso para
derribar, pero no funcionó para él. Tan pronto como me tocó, lo empujé hacia
adelante y lo hice caer al suelo. Era como si casi pudiera oír el suelo romperse
bajo su peso, lo lancé con tanta fuerza. Me retiré a mi propio espacio. Kairos
me miró y se puso de pie.
Dejar que la energía se fuera así me hizo sentir mejor, pero aun así no fue
suficiente. Kairos estaba dolorido por mi lanzamiento. Podía sentirlo, hizo todo
lo posible por mantener una cara seria para hacerme pensar que estaba bien,
pero no lo estaba. Podía sentir su dolor pulsando a través de mí.
Todavía caminó hacia mí y yo hice lo mismo, pero al revés. No lo quería

cerca en este momento. No quería hacerle daño a él ni a nadie más. La multitud
ahora estaba observando cada uno de mis movimientos.
Seguí negando con la cabeza a Kairos. Acelerando mi ritmo. — Adelia.

¡Detener! – dijo, pero no respondí, necesitaba liberar mi energía.
Así que corrí. Corrí al único lugar donde voy a obtener mi energía. El bosque.
No sabía si Kairos me siguió o no. Me detuve en el lugar que estaba más

lleno de árboles. Caí de rodillas y traté de drenar mi energía pero no funcionó,
necesitaba algo más.
Algo que iba más allá de eso. Sentí que mi corazón estaba a punto de
explotar como una bomba de relojería.
Me desesperé y oré por la Madre Naturaleza. No sé qué estaba pasando o
cómo detenerlo. Sentí a Kairos a mi lado, me agarró en un fuerte abrazo, pero
me liberé de su agarre, causando que tropezara hacia atrás con mi fuerza.
“Adelie”, lo escuché llamarme repetidamente.
Me levanté y corrí hacia uno de los árboles que parecía más estable.
Solo pensando en lo siguiente que haría, mi mente se calmó.
Me paré frente al árbol y con todas mis fuerzas le di un puñetazo. Esperaba
que mi mano fuera destruida por el impacto. En cambio, un borrón de luz explotó
de mi puño y todo en mí se apagó.
Abrí los ojos pero necesitaba algo de tiempo para acostumbrarme a la luz
brillante. De alguna manera me había teletransportado a otro
dimensión. Ya no vestía mi ropa de entrenamiento, sino un vestido de

seda blanca que ondeaba al viento. Sentí mi cabello en mi espalda,
estaba rizado naturalmente. Miré mi puño para ver si me había hecho
algún daño, pero no había nada. Mi mano estaba como si nada hubiera
pasado.
Finalmente miré a mi alrededor y era el mismo lugar en la manada de
Night Walker. Un lago al lado del gran árbol. Era la misma vista, pero todo
parecía más mágico y brillante, este lugar tenía un brillo dorado y una
neblina a mis pies.
Miré el agua cristalina a mis pies y de repente sentí ganas de alcanzar
el agua. Cuando mis dedos rompieron la superficie, despidió pequeñas
chispas eléctricas. Un poco más abajo en el agua, vi que algo se elevaba.
No era algo sino alguien a quien quería ver, una cara familiar para mí.
- ¡Mamá! Grité con incredulidad. ¿Estaba realmente parada frente a mí?
Estaba tan hermosa como siempre en su forma de ninfa completa, su

largo cabello le caía hasta la cintura y lucía bellamente rizado, sus ojos
irradiaban luz y brillo. Ella se acercó a mí y felizmente la atrapé caminando
más adentro del agua.
"Mi hija", dijo en un tono dulce y gentil mientras su voz resonaba. “Ha
llegado tu hora”, dijo sonriendo.
Fruncí el ceño. - ¿Mi tiempo? “Le pregunté, ¿qué quiso decir? ¿Yo
me estoy muriendo? - ¿Tiempo para qué?
“Estás listo para hacer realidad la profecía. Te levantaste de la muerte
y el agua. Tú eres quien traerá la paz a la naturaleza y la sed de sangre”,
dijo, pero aún no sabía qué significaba o cómo hacerlo.
“Hazme sentir orgulloso, haz lo correcto. Ella dijo y soltó mi

manos y comenzó a caminar de regreso al fondo del lago.
Corrí tras ella, pero el agua se sentía más pesada que de costumbre.
- ¿Cuándo? Yo le pregunte a ella. ¿Cuándo debo esperar este tiempo de
profecía?
Me miró por encima del hombro. "Lo sabrás", dijo ella, sonriendo.
'¿Qué pasa con mi padre?' Yo pregunté. Por un segundo, su sonrisa se desvaneció,

pero no tenía una expresión triste. Tus dulces ojos aún
somos lo mismo.
- Tu lo descubrirás. Sé que lo harás”, dijo y su cuerpo desapareció en el agua. Fue

como caer por un precipicio... se cayó y desapareció.
No respondió a mis preguntas como yo quería, pero mi madre me enseñó mucho

sobre el mundo místico. Una vez dijo que no hay muchas criaturas más allá del mundo
humano, porque tienen visión de todo y puede ser peligroso para la persona
equivocada. Sé que mi mamá sabe lo que le pasa a mi papá o más información sobre
la profecía, hay cosas que no me puede decir.
Estaba parado en el agua y las olas comenzaron a golpearme.

Sentí como si una tormenta se estuviera gestando a mi alrededor, instantáneamente
traté de correr hacia tierra, pero el agua me mantenía alejado. Ya no podía correr más,
era demasiado difícil para mí.
El viento se levantó y mi cabello golpeaba mi cara, cada vez era más difícil ver,
mis mejillas comenzaron a hincharse por el fuerte viento que raspaba mi piel como
cuchillas de afeitar.
Mis ojos se dirigieron al gran árbol y el trueno golpeó su copa y provocó que una
enorme rama se partiera, cayendo justo en mi dirección.
Estaba congelado en el lugar, incapaz de correr o moverme ni siquiera una pulgada
de distancia.
Vi todo a mi alrededor girar y luego la rama me golpeó y me hizo caer en aguas
profundas. El agua no tenía fin y me estaba hundiendo. Tenía frío, me sentía como un
cubo de hielo. No fue hasta que me di cuenta de que la luz se había atenuado, que mi
cuerpo se apagó.
de nuevo.
Me sentí como si estuviera acostado sobre algo suave.

Estaba caliente ahora. Incluso con los ojos cerrados, sentí una presencia a mi
lado. Sabía que era Kairos, solo que él tenía ese tipo de olor y solo él hizo que mi
corazón saltara de emoción.
Abrí los ojos y por suerte las luces estaban atenuadas y mis ojos no necesitaron
tiempo para acostumbrarse al resplandor. Miré
a mi alrededor, yo estaba en mi habitación y Kairos me miraba mientras

estaba de pie junto a mi cama. Ahora me sentía mejor, era como volver a
nacer. No había ningún sentimiento en particular que me incomodara.
Finalmente me sentí bien.
— ¿Cuánto tiempo estuve desmayado? — le pregunté a Kairos y
Me levanté a una posición sentada.
- Todo el día. Jasmin te miró pero dijo que estarías bien, dijo que fue
solo una explosión de energía”, explicó Kairos.
"¿Ella todavía está aquí?" Le pregunté.

“Ella nunca se fue. Y ahora me alegro de que no lo haya hecho,
aunque ella es…” Kairos se detuvo por un momento y miró por la ventana
y luego a mí. “Tal como es, es la única que puede ayudarte con cosas así.
Y ayúdame cuando haga cosas estúpidas y la presione para que haga
cosas que conduzcan a eso. dijo él y clavó su mirada.
“No fue tu culpa,” le dije.

— Adelia. No sé cuánto puedes hacer, y sigo pensando que puedo
ayudarte a ser más fuerte y crecer, pero tampoco puedo porque eres muy
diferente en todo lo que haces. Lo siento mucho. Supongo que pensé que
podría entrenarla como todos los demás en esta manada. Dijo, se rió y
continuó. “No puedo entrenar a nadie más fuerte que yo.
Haré todo lo que esté a mi alcance para encontrarte un maestro digno
para que seas el mejor”, dijo y estaba a punto de irse, pero no podía
dejarlo ir ahora.
No culpé a Kairos por nada de lo que pasó, pero lo hizo y solo el
pensar en él queriendo que me fortaleciera hizo que mi lobo aullara.
Rápidamente me levanté de mi cama y corrí hacia Kairos.
Se volvió hacia mí y me puse de puntillas y lo besé sosteniendo su

rostro entre mis manos. Kairos me respondió de inmediato y fui yo quien
se apartó del beso, pero aún estaba a centímetros de él. -Te amo- le dije
mirándolo a los ojos.
"Te amo", me dijo de nuevo y tomó mis manos y

los besó. "¿Te sientes bien ahora?" preguntó y yo asentí. “Así que
te despertaste justo a tiempo. Alpha Hans partirá en cualquier
momento con su manada. ¿Quieres decirle algo? preguntó y sé
qué respuesta quería de mí, pero necesito terminar nuestra
relación con Hans. No tengo muchas ganas de volver a encontrarme
con él, pero necesito estar en paz con él.
Capítulo 28
EL REGRESO DE RAFAEL
ADELIA
Bajé las escaleras todavía un poco curioso de por qué me sentía tan
renovado, Kairos caminaba a mi lado. Podía sentir lo tenso que estaba.
No quería que conociera a Hans, parecía que sería inútil decirle que no
iría con Hans.
Amo a Kairos y él lo sabe, pero aun así lo dije mientras bajábamos
las escaleras cuando comencé a escuchar voces apagadas. “Kairos,
sabes que…” dije, pero no creo que me necesitara para terminar mi
oración.
"Sí", gruñó. - ¡Yo se! Eso no significa que tenga que
como él”, dijo.
"¿Has tenido algún problema con él antes?" Yo pregunté.
"Antes no ocupaba un puesto tan alto para mi compañero", dijo Kairos
y yo iba a decir algo, quería decir algo, pero ¿qué? Ya estábamos abajo
y Kairos me estaba llevando afuera, donde la manada de Sombraluna
estaba cargando sus cosas en los autos.
Incluso vi a Hans mirándome mientras nos acercábamos a él, debió
haber sentido mi presencia. Detuve a Kairos a mitad de camino.
“Tal vez sea mejor si voy solo. Kairos me miró, luego a Hans y luego a
mí.
"Bien," escupió, pero su estallido de celos me hizo sonreírle, no
reaccionó a mi sonrisa, pero su atención captó algo o más bien alguien,
¡Raphael había regresado! Se paró en la entrada, mirando a Kairos
directamente a los ojos. Kairos me miró una vez más y entró, donde los
dos desaparecieron.
Mi curiosidad era tan grande como la de Kairos, pero necesito
dejarlos hablar primero y luego necesito saber.
cuando debo hacer mi carrera...

Traté de pensar en cualquier otra cosa excepto en el clan de vampiros.
Me giré hacia donde estaba Hans y él todavía estaba allí, ahora solo de
pie y mirándome, creo que tuvo la sensación de que estoy aquí para
hablar con él. Caminé lentamente hacia él. "Oye", le dije sin comprender.
"Hola", dijo.
- ¿Ya te vas? Pregunté mientras se apoyaba contra uno de los autos.
"No es saludable para mí, y dudo que estés demasiado ansioso".

verme aquí”, explicó.
- Lo siento mucho. Sentí la necesidad de disculparme porque sabía lo
que se sentía el rechazo, él me hizo eso, pero nunca se lo desearía a
nadie, ni siquiera a él. Sentí que Hans es un buen hombre. Las personas
cambian, incluso si no pueden cambiar sus acciones, pueden cambiar la
forma en que las miran.
Hans negó con la cabeza ante mis palabras. “No tienes nada de qué
disculparte”, dijo.
"Al menos otros miembros de la manada podrían haberse quedado",
traté de razonar.
“Quería hacerlo, pero ellos… ellos no se sienten tan bien contigo ahora
desde que me rechazaste. Pero ellos no entienden todo el asunto, lo
saben, porque les dije, pero todavía piensan que soy inocente. Irónico,
¿no? Intentó bromear, pero su voz transmitía culpa.
“Te admiran, te alaban y aún creen en tus palabras. Eres un buen Alfa
para tu manada —dije, pero él no respondió. “Ya no quiero ser tu enemigo,
pero supongo que ser amigos tampoco es bueno,” me reí y para mi
sorpresa él también.
"Bueno, entonces, sigamos con eso…" Hizo una pausa por un minuto,
pensando. “Sé que estás en algún lugar feliz. Y sabes que estoy por ahí
en alguna parte…”, dijo.
- Feliz. Quería terminar la oración, porque parecía que no lo hizo.
Hans asintió hacia mí. "Espero que algún día", dijo.

dijo, pero ahora fue él quien me dejó allí sola. Espero que la Diosa de la Luna lo
honre con una segunda oportunidad... se lo merece.
Parecía que todos estaban listos para irse y vi a Kairos cambiando
unas palabras con Hans y algunos de los miembros de su manada.
Cuando todos se fueron, no perdí el tiempo y caminé hacia Kairos. —
¿Qué dijo él? - Yo pregunté.
Él frunció el ceño. - ¿Quién? ¿Hans? dijo y negué con la cabeza.
"Raphael", dije y algo en su expresión cambió, su rostro era ilegible. Odiaba

cómo siempre se las arreglaba para hacer eso, era frustrante por mi propio bien.
"No importa", dijo y entró, pero por supuesto lo seguí.

- ¿No importa? Pregunté, burlándome con una risa. No se detuvo ni un
segundo, iba subiendo a su cuarto, al ala izquierda, pero yo lo seguí.
“¿Cómo puede no importar? Regresó para decirte la fecha. Asumo que

acordaron encontrarse contigo, es por eso que estás actuando así,” le hablé sin
aliento mientras lo seguía por el oscuro pasillo. Aceleró el paso a propósito, pero
no tuve problemas para correr tras él.
"¿No merezco saber algún tipo de información?" – pregunté aún sin

respuestas.
"¿Puedes parar? le pregunté con frustración mientras nos acercábamos a la
gran puerta de su habitación. —¡Kairós! Levanté la voz, pero él ni siquiera titubeó.
Kairos abrió la puerta de su habitación lo suficiente para que entrara, no me

quería ahí pero no iba a dejarlo pasar.
Empujé a Kairos fuera del camino, él no esperaba esto, así que fue una tarea
bastante fácil, pero su expresión fue lo que me hizo reconsiderar mi decisión.
Estaba enojado ahora, sé que lo estaba, su mandíbula estaba apretada. "Tienes
que irte", dijo.
Mentiría si dijera que esas palabras no duelen.
- ¿Qué? Pregunté, sorprendida.
"¿Dije o no dije que no te quiero en mi habitación, nunca?" - Él
me escupió. Pensé que nuestros eventos recientes hicieron que esta regla
desapareciera.
Este no era Kairos que conocía, Kairos que amaba. Estaba seguro de
que esto tenía algo que ver con el regreso de Raphael. “Kairos, ¿qué dijo
Rafael? - Yo pregunté.
- ¡Nada! Usted tiene que ir. ¡Ahora! “Me gritó.
— Kairós, ¡detente! No me iré a ningún lado”, justo cuando lo dije, Kairos
se abalanzó hacia mí para tomar mi mano, pero antes de que lo hiciera,
hablé. "¡No te atrevas a tocarme!" Kairos se estremeció ante mis palabras.
Enterró su cara entre sus manos y me miró. "¡Es mejor si te vas!" Por tu
propio bien.
“¿Cómo puede ser esto por mi propio bien? - Yo pregunté.
- ¡Adelie, por favor! Dijo con voz suplicante.
- ¡No! Por favor, dime lo que dijo Raphael y por qué
¿De repente quieres deshacerte de mí? - Yo pregunté.
"Me voy mañana por la noche", dijo.
"Oh", dije sin pensar.
Kairos me dio la espalda. “Como dicen, no muchos regresan. No quiero
lastimarte si muero, sé lo que eso les hace a los compañeros. Así que es
mejor si mantienes tu distancia de mí ahora. No quiero despedidas tontas,
solo regresa a tu habitación y… no sé, prepárate para lo peor”, dijo.
Tendré que irme antes de lo que pensaba. Kairos estaba equivocado,

muy equivocado. Seré yo quien te lastimaría en caso de muerte.
Cuando tu compañero muere, tú mueres con él.
“Pensé que tendríamos más tiempo”, dijo. — Ya he sido bastante egoísta
contigo, nunca debí dejarme perder, necesitaba pensar en ti, pero no lo hice.
Todo lo que hago es lastimarte.
"Todavía puedes volver", le dije, esperando eso. Yo no quiero morir. Le
romperá el corazón, pero ¿qué otra opción tengo?
"Eso espero", dijo, sentándose en el borde de la cama.

"¿Así que tu mejor manera es evitarme?" Le pregunté. ¿Era egoísta

que quisiera pasar mis posibles últimas horas con Kairos? Si es así,
quería estar con él. Poco sabe él que soy egoísta.
Kairos no me respondió. - ¿Que quieres que me vaya? Le pregunté

y él me miró.
'Por supuesto que no, pero ¿cuál es el punto? Me voy, posiblemente
no regrese.
Dijo, pero me acerqué a él y me senté a su lado. - No digas
eso. “No quería pensar en que él no regresaría o que yo no regresaría.
Mi muslo ahora estaba rozando contra Kairos. Todavía estaba en
mi equipo de entrenamiento de antes y ya estaba oscuro, y la
habitación de Kairos estaba llena de luz tenue, la única luz aquí era de
la pequeña lámpara de noche.
Kairos giró su cuerpo hacia mí y colocó un mechón de cabello
suelto detrás de mi oreja. "Nunca te querría lejos de mí", dijo con voz
ronca. “Pero estoy haciendo todo lo que está a mi alcance para que tu
dolor sea más soportable.
"¿Y si estuvieras en mi lugar?" Le pregunté.
“Si estuvieras a punto de ir a la muerte, querría pasar hasta el
último segundo contigo, porque no habría vida sin ti. Sé que eres
mucho más fuerte que yo y lo superarás, sé que lo harás. Dijo y frotó
mi mejilla con su pulgar.
Kairos se alejó de mí, pero ahora lo quería a él y solo a él. Tomé
su rostro entre mis manos y lo besé. —Adelie —dijo, advirtiéndome.
Mi mano izquierda permaneció en su mejilla y mi mano derecha
descansó en su pecho y lentamente se deslizó por su pecho, sentí sus
músculos flexionarse bajo mi toque. “Dime que quieres que me vaya
ahora,” dije y Kairos separó sus labios y me besó fuerte agarrando mis
caderas. Se detuvo y apoyó su frente en la mía.
- Te quiero. Te quiero aquí —dijo y me besó una vez más como si

su vida dependiera de ello. Es como si hubiera esperado toda mi vida
a que él me dijera que me quiere. Kairos movió sus labios a mi cuello
donde estaba su marca.
No pude evitar gemir su nombre en voz alta. Lo sentí sonreír en mi cuello. Era
la descarga de adrenalina que estaba sintiendo, me subí al regazo de Kairos, así
que ahora estaba entre mis piernas. Lo deseaba de todas las formas posibles. Me
acerqué a sus labios y nos besamos sin aliento. Sentí a Kairos mientras se tensaba.
— Adelia. ¿Está seguro? me preguntó, alejándose.

- ¿Tu no quieres? “Yo lo provoqué.
Tal vez eso no era lo más sensato que podía hacer en este momento, pero ya
no había vuelta atrás.
Kairos ni siquiera me respondió, simplemente me empujó a su cama y nos
hicimos compañeros en todas las formas posibles. Él era mío y yo era suya.
Capítulo 29
OSVAMPIROS
ADELIA
Esperé hasta que Kairos se durmió en mi abrazo. Tenía tantas ganas de

quedarme que sentí que mis párpados se cerraban con fuerza, pero ahora
no podía dormir. Será mucho más difícil irse cuando esté despierto.
Me levanté lo más silenciosamente posible, fui a mi habitación a darme

una ducha y me vestí con mi conjunto de entrenamiento. Creo que sería un
outfit más apropiado que cualquiera de mis vestidos.
Deambulé por la casa hasta que estuve afuera. Volví a mirar hacia el
frente de la casa. Por el bien de la Diosa de la Luna, espero que esta no
sea la última vez que vea esta vista. Ahora no tenía ningún plan sobre
cómo llegar al aquelarre de vampiros, pero espero encontrarme con las
amigas brujas que solía tener mi madre.
Necesitaba ver a Maeve ahora mismo, pero tenía que hacerlo rápido,
así que en caso de que Kairos despertara, me iría. Corrí a lo de Maeve y
toqué el timbre, podría haber despertado a toda la casa, pero no podía
esperar.
No hubo respuesta en la puerta durante mucho tiempo, seguí moviendo
los dedos de los pies y golpeando el suelo con el pie. Entonces finalmente
escuché que la puerta se abría y vi a Maeve, quien de hecho acababa de
despertarse, sus ojos apenas se abrieron, su cabello estaba desordenado
por la almohada en la que dormía.
“Me voy ahora.” No esperé una respuesta de ella, solo entregué un
sobre en sus manos. “Dale esto a Kairos a primera hora de la mañana, no
antes. Si lo dejo en algún lugar de la casa, puede verlo más rápido de lo
que debería, en la carta digo que no sabes nada al respecto, en caso de
que Kairos se enoje, no tiene por qué culparte. Todavía necesito encontrar
una manera de llegar allí o dónde está, pero llamé
algunas de las amigas brujas de mi madre, espero que puedan ayudarme —

dije. Los ojos de Maeve ahora estaban completamente despiertos, "Espera
aquí", dijo y se apresuró a entrar, dejándome en el porche delantero, momentos
después salió con una bolsa de tela negra en sus manos. “Sabía que
necesitarías esto. Metió la mano en su bolso y reveló un cristal que brillaba con
luz gris.
- ¿Que es eso? —pregunté cuando ella tomó su mano.

yo y lo tomé en mis manos.
"Él te dirá a dónde ir, si la luz se apaga, estás en el camino equivocado,
camina para que la luz esté siempre radiante, así es como sabes que estás
llegando allí, una vez que llegues al aquelarre de vampiros, el el cristal perderá
tu habilidad. Maeve tomó mis manos entre las suyas. “Estoy seguro de que
volverás, eres fuerte Adelie, no hay mucho que pueda detenerte a ti oa tus
poderes. Si las cosas empeoran, no lo dudes, porque no lo harán. Negué con la
cabeza.
- ¿Que tan lejos vamos? Yo le pregunte a
ella. “Está más cerca de lo que crees”, dijo. “…pero
Raphael tomó demasiado tiempo,” razoné.
“Incluso si Raphael tenía algo de historia con ellos que hizo que se fueran
en buenos términos, eso no significa que no fue necesario convencerlos para
dejar que Alpha se fuera allí. No es fácil tratar con líderes vampiros”, explicó.
"¡Buena suerte, Adela!"
Salí lo más rápido que pude, porque no sé qué tan cerca o qué tan lejos
estaba el clan de vampiros. Seguí el cristal a lo profundo del bosque.
Me di cuenta de que ya ni siquiera miraba alrededor. Solo miré el cristal, porque
era el único plan que tenía en este momento. Por suerte el cristal tenía suficiente
luz e iluminaba mi camino, así que no me tropecé con nada.
No sabía cuánto tiempo había estado caminando, pero me parecieron horas,

mis pies comenzaron a hincharse y sentí que el sol comenzaba a salir. Tenía
frío y podía ver mi aliento en el frío como una niebla.
Después de muchas horas ya no necesitaba el cristal como fuente de luz,
solo como guía porque ya era de mañana. Mantuve mis ojos pegados al cristal,
pero pronto dejó de brillar y ahora
se sentía como una piedra ordinaria en mis manos. ¿Estaba roto? Lo apreté en
mi mano tratando desesperadamente de que funcionara, pero nada. Así que
miré hacia arriba con frustración y descubrí que el cristal no estaba roto, hizo
todo lo que tenía que hacer. Ahora estaba en lo que parecía un viejo castillo,
cubierto de enredaderas y pedazos de musgo. Miré hacia la parte superior del
techo y algunos murciélagos estaban sentados en el borde, mirándome.
KAIRÓS
Me desperté con la horrible luz del sol brillando justo en mis ojos, no había
dormido bien así en mucho tiempo. No recuerdo haber dormido tan bien.
Estaba solo en mi cama king size, Adelie no estaba a la vista, toda su ropa
había desaparecido, podía olerla débilmente en mis sábanas, así que debió
haberse ido por un tiempo.
No perdí tiempo en levantarme y prepararme para el entrenamiento de la

mañana, aunque era más temprano que de costumbre, necesitaba ver a Adelie.
En secreto recé para mí mismo que ella no pensara que lo de anoche fue un
error.
Fui a la habitación de Adelie, pero ella no estaba allí. Bajé las escaleras y
encontré a Helen corriendo hacia lo que parecía ser la cocina y murmurando
algo por lo bajo.
—¡Helena! - Grité.
“El desayuno no está listo,” dijo y siguió caminando donde ya no podía verla,
pero la seguí. Helen era una mujer extraña, pero su cocina era algo maravilloso.
“No, eso no es todo,” dije, deteniéndome en la cocina donde Helen estaba

cortando algo. "¿Has visto a Adelie?" Yo le pregunte a ella.
Helen dejó de cortar y me miró congelada por un segundo, pero luego
respondió sin rodeos. "No", dijo ella.
¿Podría estar caminando por el bosque otra vez? Decidí echar un vistazo
allí, ya que el desayuno no estaría listo pronto. abrió
las puertas de mi casa y me recibió Maeve, ella saltó del piso, parecía que estaba
sentada allí. — ¿Maeve? ¿Qué haces aquí? Yo le pregunte a ella.
- ¡Buenos días, Alfa! - Él dijo. “Luna Adelie quería que te diera esto a primera hora
de la mañana”, dijo y me entregó un sobre blanco con mi
Nombre.
- ¿Qué es? Yo le pregunte a ella. "¿Y por qué no podía dármelo o dejarlo en algún
lugar para mí?"
"No sé Alpha, solo estoy siguiendo órdenes", dijo y estaba a punto de irse.
- Aférrate. — le pregunté y abrí el sobre, ahora comenzaba a sospechar un poco

del porqué de tal acción de Adelie.
Tomé un pedazo de papel que estaba escrito en la parte superior.
¡Querido Cairo!
Lamento tener que hacer esto a tus espaldas, pero sé que tu terquedad nunca me
abandonaría. Recibí un mensaje de que solo aquellos que saben sobre la ausencia de
mi padre serían alguien del clan de vampiros.
Se trata de la muerte de mi padre. Si hay alguien tan fuerte que pueda luchar contra
la Muerte, entonces, poco a poco, se está arruinando por completo. Sé que no tengo
ninguna prueba visible de que mi papá no esté solo de 'vacaciones', pero en mi cabeza
escucho esa vocecita diciéndome que me vaya, y mis instintos nunca antes me habían
fallado.
Por favor, no vengas detrás de mí. Hablaré sobre algún tipo de acuerdo de paz con
ellos, haré todo lo que esté a mi alcance para proteger a nuestra manada.
Recuerda que puedo protegerme. Realmente creo que estoy haciendo lo correcto y
espero que puedas confiar en mí y me dejes pelear esta batalla solo.
PD: Maeve no tiene nada que ver con esto, solo le dije que te diera esta carta tan
pronto como te despertaras.
Por siempre y para siempre tu Adelie
Sentí mi corazón caer al suelo. ¿Cómo pudo hacer esto? Ella no puede ir allí. No
es seguro. Arrugué el papel en mis manos y miré a Maeve. "¿Cuándo te dio esto?" Yo
le pregunte a ella.
“Una noche, tarde, llamó a mi puerta”, le dije. ella ya se fue
hace mucho tiempo, ¿qué tan lejos podría estar? Sabía que aún estaba viva, sentiría
mil cuchillos en mi corazón si ella moría. ¡No!
¡Ella no morirá! Ella es fuerte. mi Adelia.
Hice un vínculo mental con Raphael. 'Prepárate, estamos

'
ir al clan de vampiros. ¡Ahora!
Capítulo 30
MAESTRO DE VAMPIROS
ADELIA
Al llegar aquí, me di cuenta de que no pensaba mucho en lo que iba a

decir o hacer. Tenía una misión, pero no sabía exactamente qué hacer. Lo
único que sabía era que tenía razón. Esto que estaba haciendo era lo
correcto para mí.
No impondría todas las probabilidades en contra de mi camino, estoy
aquí y de alguna manera estoy seguro de que no hay otro lugar en el que
deba estar más que aquí.
Me acerqué a la puerta gigante que conducía a un camino hacia el
castillo. La única vista que tenía era exactamente el portón con barrotes
negros, el resto del piso estaba rodeado por un alto muro de ladrillos. Una
enorme cerradura mantenía unidas las puertas. Me pregunto a quién están
tratando de detener. No es como si alguien pudiera lastimarlos, cuando
todos los temen.
Retrocedí cuando de repente, de la nada, dos hombres atravesaron la
pared y cada uno se detuvo a cada lado de la puerta. Llevaban capas
rojas que cubrían sus rostros en la sombra. Sus figuras eran esbeltas pero
altas.
Sentí mis huesos temblar cuando los dos se me acercaron, no me
atreví a moverme pero traté de mirarlos a la cara. Lo que vi fue solo una
persona, una criatura sin rostro estaba debajo. Ya no podía mirar esa cara,
mantuve mis ojos rectos que estaban al nivel de su pecho ya que eran
mucho más altos que yo.
“¿Cuál es tu propósito aquí? — Un sonido extraño habló a la izquierda.

“Yo… yo… yo soy.” Traté de hablar, pero mi voz era más temblorosa
de lo que pensé que sería. Tragué el enorme nudo en mi garganta y
Volví a hablar, tomando todo mi coraje y confianza. “Me gustaría hablar con
el líder del clan de vampiros.
- ¿Para que? preguntó de nuevo.
“Los vampiros están matando a otros de mi especie. Quiero parar esto —
dije.
De repente, el izquierdo sacó un cuchillo de su bolsillo y el otro un trozo
de tela blanca y sedosa. "Gota de sangre por la visita", dijo el izquierdo y me
entregó el cuchillo. Hice lo mejor que pude para no tocar su piel en el proceso.
Uno de ellos colocó el material blanco más cerca de mí y esperó a que hiciera
un movimiento y goteara sangre sobre esa tela. Inhalé profundamente y
presioné el cuchillo en mi palma hasta que sentí un fuerte pinchazo cuando
mi sangre tocó el frío metal. Devolví el cuchillo al de la izquierda y levanté mi
mano ensangrentada sobre la tela blanca, esperando ver una gota de sangre.
Pero al parecer me equivoqué, el de la derecha me dio la tela para envolverme

la mano.
No necesitaban mi sangre en la tela, sino en el cuchillo que ahora estaban
examinando.
"Nadie está matando a los de tu clase, los de tu clase no deberían ser
asesinados", dijo el de la izquierda.
“Están matando hombres lobo,” discutí con ellos.
"Los hombres lobo son tus sirvientes", dijo y no me dio tiempo.
para discutir Sígueme, hija de la muerte”, dijo y la puerta se abrió.
¿Hija de la muerte? ¿Ya saben quién soy? Los seguí de cerca, mientras
caminábamos más lejos, el aire se sentía más frío y espeso.
El castillo parecía aún más grande desde el interior. Mirando a mi alrededor,
estoy seguro de que no podré escapar solo, espero que no haya necesidad
de hacerlo.
Finalmente entramos a una habitación, pero yo todavía estaba detrás de
ellos y no vi nada ni nadie. “Amo, finalmente está aquí”, dijo el de la izquierda
y se alejó de mi vista, revelando una mesa con cuatro hombres sentados en
términos negros. En el medio, en la silla más grande, estaba una hermosa
joven.
Su rostro era blanco como la porcelana, sus ojos grises como los de un
muerto. Su cabello castaño estaba cuidadosamente colocado
aparte, ella no tenía la sonrisa de vampiro malvado, si no fuera por sus ojos
muertos, parecería casi humana.
"Adelie Murrell, finalmente ha llegado el momento", dijo la mujer con una cálida
sonrisa mientras su acento italiano inundaba, no se veía mala de todos modos, el
hombre a su lado tenía una mirada que podía matar. Se sentía como si estuvieran
juzgando cada uno de mis movimientos. Era extraño que me conociera, ¿por qué
me conocería?
Las mujeres se levantaron y se me acercaron. “No te molestes con ellos, no

nos gustan mucho los visitantes”, dijo. “Mi nombre es Lilith, solo tú puedes llamarme
por mi nombre.
- ¿Por qué? No pude resistir el impulso de preguntarle.
“Eres diferente a todos los demás, serás realmente útil”, dijo.
Dije con una voz tan dulce que casi me pierdo la última parte. -
¿Servicial? Yo le pregunte a ella.
- ¡Seguro! Es hora de cumplir la profecía —dijo, caminando a mi alrededor y
mirándome de arriba abajo. “Bueno, pensé que podríamos encontrarlo por nuestra
cuenta, pero creo que eres el único y estoy feliz de trabajar contigo.
Lancé mi cabeza hacia él. — ¿Profecía? - cuestioné.

“P… pero no es por eso que estoy aquí.
Lilith caminaba delante de mí. “Oh, sé por qué estás aquí.
Pero la profecía es la que cumplirás en el camino para encontrar lo que buscas,
que es tu padre —dijo en un susurro—. “Está escrito en las estrellas que estás listo
para la profecía, trae el libro de Aldred que queremos para el intercambio de paz y
estoy seguro que en el camino encontrarás a tu padre.
Aldred! Escuché un mito sobre él.
Una vez, hace veinticuatro años, había un mago poderoso y sabio, Aldred, que
provenía de una conocida familia de hechiceros. Los magos eran raros entonces y
ahora, por eso era tan popular. Usó sus hechizos para malas acciones.
Era un hombre malhumorado de unos treinta años, y odiaba a todo el mundo

sin razón aparente. Durante mucho tiempo, tus hechizos fueron solo
algo nocivo e irritante. Luego desapareció durante unos años. Dicen que pasó
por el mismísimo infierno buscando algo.
Volvió más poderoso. Un día robó algo de los vampiros.
Estas brujas vivían entre hombres lobo y trabajaban juntas, era natural que los
vampiros comenzaran a mirar de manera diferente a las brujas y hombres lobo
que estaban tan cerca de ellos. Más tarde, descubrieron que esa cosa robada
era un libro antiguo que contenía rituales malvados sobre convocar a los
muertos, convertirse en vampiro sin morder y destruir algunas especies de
vampiros. Eso es lo que más les asustó.
- ¿Qué? “Estaba tan confundido. "Si sabes dónde está el libro... ¿por qué
me necesitas?" pregunté con curiosidad. ¿Cuánto tiempo hace que sabe dónde
está?
“Aldred es fuerte, no tenemos posibilidad de pelear con él, un movimiento
en falso y usará nuestros hechizos contra nosotros, pero tú… tienes grandes
poderes, Adelie. Usalos, usalos a ellos.
“¿Por qué todo este baño de sangre? Yo pregunté. — ¿Por qué matar?
hombres lobo si saben que Aldred está con él? dije furiosamente.
Lilith solo se rió. “¿Cómo puedes ser un niño despistado? Dijo, fijando su
mirada en mí. Era raro que me llamara niña cuando parecía de mi misma edad.
“Aldred trabajó con hombres lobo y algunos todavía trabajan para él. ¿De
dónde crees que obtiene toda su información? Nadie lo vio salir, pero sabe
mucho. Nos ha enviado cartas y está al tanto de todo lo que está pasando.
Quiere que tengamos miedo. Cruzó los brazos frente a ella. “Últimamente ha
estado muy interesado en el Nightwalker Pack. Realmente interesado. No me
sorprendería si esos bastardos están trabajando para él —escupió—.
“No hables así de mi manada. Usé mi voz de Luna con ella y los hombres
en la mesa se pusieron de pie, mostrando sus colmillos.
Lilith se pasó una mano por el cabello y luego hizo un gesto para que se sentara.
"Tráeme el libro, para que no se puedan usar los hechizos y yo
Admitiré mi error”, dijo.
"¿Por qué estás tan seguro de que estos hechizos no se copiarán en otros
lugares?" Yo pregunté.
Lilith se rió. “Cada hechizo escrito de ese libro en cualquier otro lugar arde
en llamas.
"¿Y cómo estás tan seguro de que no estoy trabajando?
junto con mi mochila y escondiendo el libro? “La desafié.
Lilith me sonrió. “Eres bueno y cumplirás el propósito de la profecía, sin
importar si daña a tu manada. Debes traerme el libro, eso significa que pasarás
por el fuego y el hielo para obtenerlo. Ese es tu propósito.
Estoy seguro de que no estás en mi manada. Dónde puedo

encontrar a Aldred? Yo pregunté.
Ve hacia el sur desde aquí. Si quieres verlo, no te lo pierdas, en el lugar
donde el bosque es más oscuro. Es una caminata de dos días por el bosque”,
dijo.
Las puertas se abrieron y de nuevo entró la criatura de antes. “Kairos García
está aquí”, dijo. ¡Él está aquí! Por supuesto que no siguió la orden de mi carta
de no venir a por mí.
"No creo que sea necesario dejarlo entrar, ¿verdad?" Lilith me preguntó y
yo asentí. “Acompaña a Adelie afuera”, le dijo a la criatura y yo la seguí, aún
escuchando los gritos de Lilith. “Espero verte de nuevo, Adelie.
De la misma manera que una criatura me mostró la salida, todavía no tenía

idea de a dónde íbamos. Cuando finalmente salimos, olí a Kairos. Él también
debe haber sentido el mío, porque me miró a través de las barras de metal
negro. Rafael también estuvo aquí.
La criatura me abrió las puertas y corrí a los brazos de Kairos. Kairos enterró
su rostro en mi cuello. "¿Qué voy a hacer contigo Adelie?" Me vas a volver loco
con estas ideas imprudentes tuyas —susurró, sabía que estaba enojado
conmigo pero aún sentía su sonrisa contra mi cuello.
Miré hacia atrás y esas criaturas se habían ido. Sentí a Kairos tomando mi
mano, la cual estaba envuelta en una tela blanca. “No es nada, solo un precio
para entrar”, le expliqué.
- ¿Estás bien? Me preguntó y yo asentí. —Vámonos a casa entonces —dijo,
pero negué con la cabeza ante eso. Kairós
frunció el ceño.
— No puedo, tengo que cumplir mi profecía, me dijo que es hora.
- ¿Está por ahí? preguntó

Kairos "El maestro de los vampiros" dije. “Cuando el mayor resucite de
entre los muertos y del agua, la paz quedará sellada entre la naturaleza y la
sed de sangre. La profecía siempre ha sido sobre la paz de los hombres
lobo con los vampiros. Necesito ir con Aldred, él tiene el libro —expliqué.
- Aldred? Es solo un mito sobre un mago loco”, dijo Kairos.
Negué con la cabeza “No es solo un mito, y tengo la sensación de que
ahora es más poderoso que nunca, si tiene las agallas para amenazar a los
vampiros.
“Bueno, entonces iremos contigo,” dijo Kairos. “Y no quiero oír nada al
respecto, nos vamos y punto. “Es una caminata de dos días hacia el sur a
través del bosque”, dije y traté de razonar. “Te aburrirás caminando
conmigo, en forma de lobo podrías llegar mucho más rápido.
"Nunca me aburro contigo", dijo.

— ¡Alfa! - dijo Rafael. Siento interrumpir, pero creo que será mejor que
llamemos a nuestros guerreros también, para que puedan traer algunas
tiendas de campaña para dormir.
“Sí, haz eso,” dijo Kairos.
“P… pero,” comencé.
— Sin peros, está decidido. Tenemos que estar preparados para lo peor.
Te vigilaré ahora, para que no vuelvas a escapar. - dijo Kairós. “Podemos
emprender nuestro viaje, estoy seguro de que nos encontrarán al anochecer.
Esta no era su lucha, era la mía, pero ahora no puedo dejar a Kairos otra
vez. Sentí crecer el miedo en mí, no tenía miedo de morir, tenía miedo de la
guerra. De las miles de muertes que podrían ocurrir. ¿Qué pasa si no soy lo
suficientemente fuerte para luchar contra Aldred?
Capítulo 31
DE CAMINO A LA CASA DE ALDRED
ADELIA
“Estás terriblemente callado,” dijo Kairos a mi lado.

Caminamos por lo que pareció una eternidad. La oscuridad ya estaba
comenzando.
Miré hacia atrás y vi que Raphael se mantenía bien alejado de
nosotros. No estaba tan seguro de que fuera una buena idea que Kairos
viniera conmigo a buscar a Aldred. No quería ponerlo en peligro a él ni
a nadie más.
“Solo estaba pensando”, respondí, no era solo pensar.
Mi cabeza estaba desordenada, la mayor parte del tiempo no podía
imaginar lo que estaba pensando, era todo y nada al mismo tiempo.
- OK. Si estás pensando, tal vez finalmente puedas decirme lo que

estabas pensando cuando te fuiste sin explicación —dijo, el último trozo
cortando como un cuchillo.
“Dejé una carta”, discutí con él. No fue una desaparición total, y
cómo podría explicarlo, él nunca me hubiera dejado ir.
“Oh claro, excepto que no lo dejaste en ningún lado, hiciste que

Maeve lo hiciera. Y no creas que soy tan estúpido. Soy plenamente
consciente de que Maeve lo sabía todo y probablemente ahora sabe
más que yo. “Kairos estaba enojado y tenía todo el derecho de estar
enojado conmigo.
“Lo siento,” dije con un suspiro.
- ¿Por qué? ¿Por qué tan terco e imprudente? preguntó de nuevo
mirando hacia otro lado, pero me di cuenta de que estaba luchando
consigo mismo para mantener la calma.
"Expliqué todo en la carta, es algo muy poderoso que puedes mantener

La muerte lejos de mí, y el Maestro de los Vampiros lo acaba de confirmar.
Me detuve y miré a Kairos, noté que Raphael aumentaba su velocidad y
tomaba la delantera frente a nosotros. “¡Esta no es tu pelea, Kairos! Todo lo
que está pasando ahora tiene mucho que ver con mi profecía, no puedo dejar
que hagas nada en mi nombre.
Sentí lágrimas formándose en mis ojos. “¿Qué pasa si toda esta matanza
de hombres lobo es solo por fe en esta profecía? No quiero que nadie salga
lastimado, y no importa cuán cursi o cliché pueda sonar, quiero salvar el mundo,
quiero ayudar a los demás.
“Si estoy dotado con estos poderes que tengo, haré todo lo que pueda para
hacer que incluso una parte del mundo sea un lugar mejor.
Dije y me sequé las lágrimas que corrían por mi rostro.
mi rostro
Y continuó. “Si lo llamas terquedad, entonces no tiene fin. Y no hay nada ni

nadie que pueda cambiar eso. - ¿Es eso lo que tu quieres? preguntó mirándome
a los ojos, pero la pregunta no me quedó clara. “¿Luchar contra lo peligroso
para salvar a otros, incluso si eso significa lastimar a quienes se preocupan por
ti, te aman? “No podía mentirle.
Sé que lo estaba lastimando irse así, pero me habría lastimado mucho si lo

hubiera hecho, y sé que lo haría. Porque Kairos sabe lo que es correcto por lo
general, pero no ahora, porque sé que estoy justo donde se supone que debo
estar, incluso si él no lo cree así.
“Por supuesto, nunca intencionalmente, pero si ese es el precio a pagar,
entonces sí”, dije en voz alta y con confianza.
Para mi sorpresa, Kairos no estaba enojado ni triste, se acercó a mí y tomó
mis manos entre las suyas. Kairos colocó mis manos en sus labios y los besó.
“Entonces hagamos esto juntos.
Hagamos nuestra parte para salvar el mundo”, dijo.
"Nunca solo", terminé su declaración y él se rió entre dientes al repetir.
"Nunca solo. No pude resistir el impulso y lo abracé con fuerza.
Sentí su corazón latir donde descansaba mi cabeza. me desperté de

mi ensoñación cuando escuché fuertes golpes, como una multitud corriendo.

“Están aquí,” dijo Kairos y miró en la dirección donde estaba el ruido. Era nuestra
manada, lobos con enormes bolsas a la espalda.
- ¡Oye! – gritó Raphael delante de nosotros – ¡He encontrado un buen claro
aquí! - Él dijo.
Kairo me miró y luego volvió a mirar a la manada. “Acomodémonos aquí,
construyamos tiendas de campaña y preparemos algo de comida, saldremos
muy temprano en la mañana. Todavía hay un largo camino por recorrer.
Cuando todos se acomodaron, ya estaba oscuro, estábamos sentados
alrededor de un fuego que había hecho Kairos. No todos en la manada estaban
aquí, por supuesto, alguien tenía que quedarse y cuidar a los niños.
Solo desearía que no hubiera sido Maeve, desearía que ella estuviera aquí.
Siempre pensé que Jasmin era mi mejor amiga, no creo haber tenido una amiga
así y no sabía lo que significaba tener una amiga, ¿Era Maeve mi amiga?
Todos a mi alrededor hablaban entre sí y Kairos estaba a mi lado con su

brazo alrededor de mí. "¿A dónde fue Jasmin?"
— Le pregunté, porque no la he visto desde que me ayudó cuando estaba
entrenando con Kairos.
“No sé, ella no quería irse cuando le dije, me rogó que me quedara, hasta
lloró”, explicó Kairos. ¿Ella lloró? Jasmin parecía ser la persona que nunca llora.
“Así que me amenazó con que te harías daño si se iba y que la dejaría
quedarse”, dijo.
"Nunca me dijiste eso", le dije.
“Sí, bueno, si puedo hacer algo para protegerla, lo haré, les dije a mis
guardias que la vigilaran en todo momento, ella ni siquiera protestó. No importa
por qué actúa así, parece que tiene miedo de algo que la está esperando fuera
del territorio de la manada.
Él continuó. “Pero por extraño que parezca, se fue esta mañana, no sé cómo
se las arregló para hacer eso sin que los guardias se dieran cuenta.
"¿Crees que ella está en problemas?" Yo pregunté.

Kairos se encogió de hombros. "No lo sé, pero estoy seguro de que si

ella está bien, ella estará bien. — Kairós fue interrumpido.
“Oye Luna”, gritó un hombre frente a mí y todos dejaron de hablar. “Nos
sentimos honrados de ayudarte con tu profecía, y sea lo que sea, lucharemos
por ti”, dijo, sonriéndome.
Algunos otros estuvieron de acuerdo con él y me sonrieron, antes de que todos
continuaran con lo que estaban haciendo antes.
“¿Qué pasa si los decepciono, Kairos? dije y el me miro, senti que mis ojos
comenzaban a lagrimear.
“Vamos a dar un paseo”, dijo y tomó mi mano, tirando de mí hacia el tronco
de madera en el que estábamos sentados. Caminamos por el bosque, estaba
oscuro, pero al menos Kairos tenía una especie de linterna con él.
Paramos en un lugar donde había un montón de rocas gigantes.

“Siéntate”, dijo Kairos e hice lo que me dijo, luego colocó la linterna en el
piso lejos de nosotros para que hubiera suficiente luz para ver las caras de los
demás. - ¿Qué es? - Él me preguntó.
“No puedo dejar que mueran por mí,” dije. "¿Y si Aldred ya está esperando
con un ejército?" Podría estar preparado para eso.
“Nuestra manada tiene los luchadores más fuertes que hay y… y tú.
No hay nadie más poderoso que tú”, dijo.
“Tú no sabes eso. Ni siquiera sé si seré capaz de pelear, ¿y si los
decepciono? Deberían respetar a su Luna, ¿y si no puedo hacerlos sentir
orgullosos? - Yo grité. “¡Tengo miedo, Kairos, miedo de que los maten por mi
culpa!
Kairos me jaló en un abrazo. “No vamos a permitir que eso suceda, y nunca
pienses que esta pelea es tu culpa. Aldred quería una guerra, él es el único
responsable de eso”, explicó. No me hizo sentir mejor, pero tampoco sabía si
algo podría hacerme sentir mejor.
"Haré cualquier cosa para protegerlos", dije mientras mi cabeza descansaba

sobre su pecho. "Incluso morir si es necesario", dije y cada palabra era cierta.
Sentí que el pecho de Kairos se elevaba con una respiración pesada.

"Lo sé", dijo y me abrazó aún más fuerte.
Poco después regresamos a nuestra tienda y nos fuimos a dormir, ya
que teníamos que levantarnos temprano, mejor que sea más rápido, por
supuesto que no dormí mucho esa noche. Cuando finalmente salió el sol,
todos se prepararon rápidamente.
Dejamos nuestras cosas ordenadas para poder recogerlas más tarde.
Era lo suficientemente optimista como para que todos estuvieran seguros
de que volveríamos.
- ¿Estás lista? Kairos me preguntó, sonriéndome.
Asentí con la cabeza y todos comenzaron a alejarse, solo unos pocos
cambiaron a formas de lobo, pero todavía estaban alrededor y me seguían.
“Me siento mal porque todos necesitan permanecer en forma humana”, le
dije a Kairos.
"Oh, confía en mí, mira esto como... es un entrenamiento en paciencia",
dijo y se rió. No podía entender su diversión en esta situación.
— Kairós. ¿Usted no tiene miedo? Le pregunté.

Me miró, tomó mi mano y la besó. - Estoy
aterrorizado”, dijo.
Capítulo 32
ATAQUE!
ADELIA
Con cada paso que nos acercábamos notaba como los bosques se
oscurecían, y cuanto más caminábamos más parecía que no íbamos a
ningún lado, nada traicionaba que alguien pudiera vivir aquí o incluso
lejos de aquí.
Ni un solo sonido a nuestro alrededor. En cierto modo, tenía sentido.
Nadie en su sano juicio deambularía por aquí, no había absolutamente
nada. Gran escondite para Aldred, pero cuanto más caminábamos,
tenía la sensación de que nos dirigíamos en la dirección equivocada.
Vi un gran árbol frente a mí, parecía viejo y cientos de lianas lo
ayudaron a trepar, estaba hueco por dentro y seco por fuera. Me detuve
a su lado y todos los demás me esperaban, luciendo confundidos.
Coloqué mi mano en el árbol con mucha suavidad, lo suficiente para
sentirlas contra mi piel. 'Estás cerca' escuché su voz en mi cabeza. La
voz sonaba dolorosa incluso en mi mente. Sentí la sensación de rascado
que tenía.
Mi otra mano encontró un lugar en la corteza del árbol e
inconscientemente atraje mi energía hacia el árbol, logré controlar mi
conversión de energía y le di suficiente para que pudiera recuperarse
un poco porque todavía necesitaba mantener mi energía para Aldred.
Abrí los ojos y noté como el árbol ahora parecía estar derecho y el
color parecía mucho más vivo.
- ¿Esta todo bien? Kairos me preguntó, pero era una pregunta que
todos querían hacer. Todos me miraban.
"Estamos cerca", dije lo mismo que me dijo el árbol. Vi a Kairos
intercambiar miradas con Raphael y luego volverse hacia él.
frente a los otros miembros de la manada y a mí por el rabillo del ojo.

“Como no sabemos lo que nos espera allí, debemos estar preparados y
caminar para pelear en cualquier momento. Kairos volvió su mirada hacia mí.
“Adelie liderará el camino al frente, si es necesario, tendrás que atacar. ¿Serás
capaz de hacer esto? - Él me preguntó.
No sabía si estaba lista para liderar una pelea ahora, pero soy Luna y mi
deber es liderar mi manada, incluso si eso significa una guerra. Todavía
necesitaba estar listo.
"S... sí", mi respuesta salió como un tartamudeo, no tan seguro como quería
que sonara.
- ¿Está seguro? me preguntó de nuevo. Negué con la cabeza.
“Sí.” Necesitaba decir que sí. Todo el mundo cuenta conmigo.

Además, esta es solo mi pelea. Si Kairos confía en mí lo suficiente como para
llevar a esta banda a luchar, debo hacerlo con honor.
Kairos mantuvo su mirada en mí por un rato. - Todo bien entonces.
No estaba seguro de su expresión. Era como si casi no estuviera seguro de

haberme dado la posición correcta. “Los próximos cinco lobos que han estado
luchando durante cuatro años estarán a mi lado, nuestra misión es proteger a
Luna y a los lobos detrás de nosotros. explicó y cinco luchadores mayores se
movieron junto a Kairos, tres hombres y dos mujeres.
“Todos los que tengan menos de cuatro años de experiencia, sígannos.
Se volvió hacia Rafael. “Raphael y Nathan irán atrás. Tu misión es protegerte
por la espalda.
Todos se movieron a sus asientos y Kairos se me acercó. "Puedo seguir
adelante si quieres", se ofreció. Negué con la cabeza hacia él.
- Yo puedo hacer eso. Kairos besó mi frente.

"Si te pasa algo, moriré", dijo y pude
Siento que mi corazón se contrae con estas palabras.
“No digas eso.” Lo miré mientras colocaba un mechón de cabello detrás de
mi oreja. "No es bueno hablar así ante un
pelear.
Los ojos de Kairos se veían vidriosos, sabía que no se permitiría llorar, pero
pude ver que fácilmente podía derramar una lágrima.
“Prométeme que estarás a salvo, solo soy un hombre y si haces algo estúpido e
imprudente, estaré furioso contigo”, se rió entre dientes. Y si te pierdo, no lo lograré,
Adelie. Por favor, mantente a salvo”, dijo y negué con la cabeza.
Vi a Kairos cambiar su mirada a una mirada inexpresiva y en blanco y volverse

hacia los demás. - ¡Lo haremos! - Dijo y todos esperaron a que yo diera el primer
paso.
Eso fue todo, el último camino a la guerra.
'¡Eres única! Nacido para proteger este mundo, sé valiente por los de tu especie.
Llegará el momento en que la valentía será el aspecto principal para proteger a los
demás, no siempre puedes confiar en tus poderes. Cuando pelees, piensa con la
cabeza, no con el poder.
Solo ahora entiendo lo que mi madre quiso decir durante todos estos años, ella
debería haber sabido sobre todo este asunto de la profecía. Ella me preparó para
este momento exacto, y nunca lo supe, no dijo una palabra al respecto.
Caminamos durante unos treinta minutos cuando nos encontramos con un claro
en medio del bosque en el lugar más denso con árboles. Miré hacia arriba y un
castillo gigante estaba frente a mí.
Estaba tranquilo y se sentía muy vacío. ¿Estaba Aldred esperando adentro para
hacer su gran movimiento? Ni siquiera miré hacia atrás, necesitaba asegurarme de
que Kairos pensara que tengo confianza.
Continué caminando hacia la entrada principal cuando de repente una voz desde
arriba nos detuvo a mí ya los demás. Levanté la vista y un hombre de unos cincuenta
años estaba en el porche con un traje rojo brillante. Su cabello estaba liso y peinado
hacia atrás y un cigarro colgaba suelto en su boca. Nos miró con una sonrisa astuta
en su rostro barbudo.
— Aldred. dije suavemente.
"Te he estado esperando, pero qué estúpido de tu parte traer a tus sirvientes
contigo”, dijo mientras se reía.

¡Cómo se atreve a decir que son mis sirvientes! - No son míos
sirvientes, somos una manada! “Los defendí a ellos y a mí mismo.
“Con tantos luchadores no tienes ninguna posibilidad contra mí”, se rió entre
dientes, echando humo.
— ¿Dónde está tu ejército? Le pregunté. Sentí que nada me detenía, con
solo mirarlo vi todo rojo alrededor.
"Tienes que ir con ellos, no creas que son tan estúpidos para
sal de la casa”, dijo.
Sentí que Kairos se me acercaba. “Él conoce sus poderes, no se arriesgará
a perder a sus luchadores con sus habilidades en la naturaleza”. Miré a Kairos
mientras regresaba a su asiento y luego a Aldred.
- ¿Que estas esperando? Ven a luchar y destruye a tus preciosos hombres

lobo”, gritó Aldred. “No habrá pelea si vienes a mí solo, no habrá consecuencias,
tú solo, haremos un trato y te dejaré ir. Nadie saldrá lastimado.
Él continuó. "Seguramente no quieres que nadie salga lastimado, ¿verdad?"

No quieres que todos aquí salgan lastimados por tu culpa. Los dejaré solos. Yo
solo necesito de ti. Se apoyó en la barandilla y me miró directamente a los ojos.
O tal vez solo eres una niña débil y egoísta.
"¿Preferirías ver cómo los matan que sacrificarte?" preguntó, y por supuesto
preferiría ir allí. ¿Realmente estaba considerando esto? Incluso si sabía que me
estaba manipulando ahora, todavía estaba pensando en ello.
'¡No! ¡Te está lavando el cerebro! ' Lancé una mirada a Kairos inmediatamente
y se veía tan atónito como yo.
Encendió mi mente. Ni siquiera sabía que era posible, ¿por qué no funcionó
antes? Por mucho que quisiera resolver esto, no tenía tiempo para eso ahora,
así que volví con Aldred.
"¡Pelearemos! Lo dije alto y claro. “No hay trato que me gustaría hacer
contigo y tus malos caminos. Aldred enderezó su postura y su mirada ya no era
tan burlona. Él
No dijo nada, simplemente desapareció de nuevo en la casa.

Miré hacia atrás y comencé a caminar con todos siguiéndome.
Caminé hacia adelante y sentí temblar el suelo a mi lado. Lo estaba haciendo
de nuevo, creando mi propio guerrero, si él quería una guerra, pondría todo mi
corazón y mi alma en ella. Se levantó del suelo cubierto de enredaderas y
raíces, como si fuera algo mundano, caminó a nuestro lado. Mi energía no
parecía haberse ido, me sentía más fuerte que nunca.
Mi nombre es Adelie Murrell, hija de la ninfa del agua Meredith Murrell y

Death. Soy un guerrero destinado a traer la paz. Nací para esto. Puedo tener
éxito con mi profecía. Acabaré con Aldred.
No dudé un poco y abrí la pesada puerta de madera. Aldred

entendió todo mal
Haremos historia derribándolo. Esta pelea será legendaria. Para eso he
estado entrenando. Para eso me preparó mi madre. Toda mi vida he estado
esperando esto, luchando por ello. Y nadie puede detenerme rompiendo mis
huesos. Todo el mundo sabrá de qué estoy hecho.
Nos paramos en la puerta mirando a nuestros enemigos. No importa el
tamaño del ejército, ¡sé que somos imparables! - ¡¡Ataque!! Grité y los hombres
lobo se movieron, saltando en el aire y chocando contra los enemigos.
Capítulo 33
¡ HOLA ALDRE!
ADELIA
Escuché varios gruñidos a cada lado de mí, algunos hombres lobo todavía se
estaban moviendo y otros ya estaban heridos, afortunadamente no eran nuestros
hombres lobo en la manada.
Nuestros enemigos también eran hombres lobo, eran hombres lobo traidores,
en otras palabras, bandidos, y tenía mucho sentido que estuvieran trabajando
con Aldred.
Los pícaros son lobos que han sido excomulgados de sus manadas por malas
acciones o transgresiones. No tienen otro lugar donde estar, por lo que es casi
natural que estén aquí, siempre están listos para hacer su trabajo sucio por una
pequeña tarifa.
Había demasiados tramposos con los que no podíamos lidiar. Éramos fuertes,
pero ellos seguían viniendo. Mi criatura raíz también estaba luchando contra unos
pocos a la vez, pero no era suficiente. Yo era el único en forma humana, estaba
luchando con toda mi energía que gané en el bosque, pero con un lobo que me
doblaba en tamaño era difícil. No muchos me atacaron de inmediato, me di
cuenta de que se estaban conteniendo para matarme.
'¡Protege a Luna!' Escuché la llamada mental de Kairos, estoy seguro de que

no era para mí, pero creo que todavía no sabe si puedo escucharla o no. Kairos
estaba luchando con una crueldad que nunca había visto en él, no se estaba
conteniendo en absoluto.
Lo he visto matar a cuatro lobos. Nunca hubiera imaginado que pudiera
pelear con tanta saña, estaba peleando como un loco. Sin pensar en nada más
que en derrotar a los demás.
No sabía cuánto podíamos aguantar, éramos fuertes, pero eran demasiados.
Ahora estaba dudando de nuestro poder.
Un lobo me tiró al suelo y ahora estaba encima de mí. Traté de

alejarlo pero me estaba sujetando, no estaba tratando de matarme, por
una fracción de segundo lo miré a los ojos y vi la ira que sentía.
Quería matarme, en lugar de eso, simplemente me estaba alejando

del lugar de la pelea más abajo en la casa. Entonces, de la nada, fue
derribado por Nathan saltando hacia un lado. Lucharon por unos
segundos hasta que Nathan le mordió el cuello y eso hizo que el lobo
gruñera de dolor antes de caer.
Alcancé a ver a Nathan y le susurré un agradecimiento.
Miré a mi alrededor y vi que estábamos en muy mal estado. Nuestros
luchadores luchaban contra tres a la vez. Mi criatura seguía luchando
contra ellos, pero no era suficiente. Casi parecía que no estaban
sufriendo en absoluto.
En lugar de pelear, corrí afuera donde mis pies pudieran tocar el
suelo. Me arrodillé y puse mis manos en el suelo. Hice crecer enredaderas
del suelo, y cuando me levanté y las conduje adentro, rápidamente
corrieron por el suelo de mármol y se enredaron alrededor de los tobillos
de los bandidos.
Las enredaderas seguían saliendo, y aun así algunas lograron
soltarse, fue solo una pequeña ayuda y no duró mucho. Necesitaba
hacer otra criatura raíz o algo así.
Salí corriendo y estaba a punto de hacer otra criatura cuando mi
mente se llenó con la voz de mi madre.
No desperdicies tu energía. Aún no has conocido a Aldred. Me
sorprendió la forma en que sonó su voz, tan clara como si estuviera aquí
a mi lado.
No puedo hacer nada. Si no puedo usar mis poderes, soy un inútil...
si tienen que cuidarme, ahora solo soy una carga. Estaba tratando de
pensar en algo. Detrás de todos los gruñidos de lucha, escuché algo
grande en el bosque. El suelo temblaba, algo estaba en el bosque. Se
hizo más y más fuerte, los golpes venían, las ramas se rompían. Miré en
la dirección de donde venía y pronto decenas de lobos corrieron hacia
mí. Estaban familiarizados.
Se hizo más claro y vi a Maeve conduciendo la manada de Silver Moon a la
lado de Alpha Archibald. Fue tres veces más de lo que vinimos aquí. No
perdieron el tiempo y corrieron a mi lado hacia el castillo. Los seguí adentro
y vi que la pelea avanzaba a nuestro favor.
No había razón para mi ayuda aquí, la única ayuda que podía hacer
ahora era encontrar a Aldred, me arriesgué mientras todos los demás
estaban ocupados y corrí más adentro de la casa hasta que encontré una escalera.
Subí las escaleras y miré a través de las puertas al frente del castillo, el
lado donde vi a Aldred en el porche. Me encontré con puertas que no se
veían ordinarias en su apariencia. Tenía un mango plateado, se aseguró
de que ningún hombre lobo pudiera entrar aquí.
Abrí las puertas y encontré a Aldred parado frente a mí, ya me estaba
esperando. Lo que me sorprendió fue Jasmin de pie junto a él con la
cabeza gacha, se veía tan frágil y pequeña.
— ¿Jazmín? "No pude evitar preocuparme por ella, ¿por qué?
¿ella estuvo aquí? - ¿Qué haces aquí?
Ella no me dio una respuesta, sacudió la cabeza y olió algo debajo de
su nariz.
Aldred fue quien habló. "¿Por qué tienes tanta curiosidad por saber por
qué está ella aquí?" Ella no vale nada, ni siquiera puede hacer lo que le
dije. Y ahora tengo que lidiar con todo esto. ¿Crees que no tengo nada
mejor que hacer que formar este ejército? dijo, dándole a Jasmin una
mirada desagradable.
- ¿Qué? ¿Estaba Jasmin en medio de esto? Le pregunté porque
claramente Jasmin no iba a responder, solo seguía divagando algo en voz
baja.
Aldred dejó escapar una risa amarga. “Oh, niña ingenua.
Se suponía que Jasmin la entrenaría y me la traería. Le prometí el mundo
si lo hacía, en cambio lo arruinó todo, ahora ya llego tarde.
Jasmin era solo una traidora y yo confiaba en ella. kairos tenia razon
Mientras tanto, Jasmin es solo una bruja sucia.
“Pero… pero la profecía… ella me entrenó para la profecía,” dije.
“Ella no la entrenó para la profecía, todo el asunto de la profecía
realmente le convenía pensando en esa mentira, pero no vale nada, ni
siquiera como mentirosa.
Siguió hablando y dio un paso más cerca de mí. “Necesitas cumplir tu

profecía, ¿no? ¿Hacer las paces entre vampiros y hombres lobo? preguntó,
pero no sentí ningún tipo de simpatía al responderle. “Le devolveré el libro
a los vampiros, puedes llevárselo”, dijo, pero sé que no será tan simple.
- ¿Lo que desea a cambio? Le pregunté.

Aldred se rió entre dientes. “Directo al grano, me gusta. Se dio la vuelta
y caminó hacia su escritorio recogiendo la misma caja que Jasmin me había
hecho abrir una vez. “Abierto para mí.
Mi madre me prohibió abrirlo, me dijo que de él saldría el mal.
- ¿Qué tienes ahí? Le pregunté. Mi madre no me dio una respuesta
adecuada a eso.
- Eso no te incumbe. - el dice.
“No lo abriré,” dije.
Aldred me miró con una sonrisa traviesa en su rostro, miró a Jasmin que
ahora había levantado la cabeza y me miraba en estado de shock con los
ojos llorosos. "Estúpido, tan estúpido", divagó.
Aldred me miró. 'Entonces, ¿quizás puedas abrirlo?' Jasmin me dijo que
no podías.
¡Mierda! No debería decir eso. "Bueno, eso lo hace demasiado.
más fácil”, se rió entre dientes, pero su diversión casi me hizo vomitar.
“¿Por qué me necesitas para esto? — le interrogué.
— ¡¡NO ME PREGUNTES, NIÑA!! dijo Aldred con los dientes apretados.
Caminó hacia mí sosteniéndome con fuerza por el cuello de una manera
que me dejaría marcas.
No dudé un poco y lo empujé hacia atrás con fuerza,
haciéndole tropezar, pero permaneció de pie.
"¿Qué te hace pensar que voy a ayudarte y no solo matarte ahora?" Yo
pregunté. ¿Qué tipo de plan tenía? "Gran pregunta, Adelie", dijo, pero al
escuchar mi nombre venir
de tu boca me hizo odiar.
Aldred fue a un armario y lo abrió, revelando no solo algunos
estanterías, pero cámaras de seguridad. Podía ver la lucha allí abajo desde
cuatro ángulos diferentes.
Pero luego otra pantalla era una gran sala llena de lobos. Al lado de las
cámaras, el tiempo corría, cuando llegó a cero, las puertas se abrieron para los
lobos y una manada de ellos salió corriendo antes de que la puerta se cerrara
nuevamente y el tiempo comenzó a disminuir de cinco minutos nuevamente.
En las otras cámaras, vi a los mismos lobos atacando. Había cientos de

ellos esperando para irse. No pude ganar...
Te sorprendería cuántos lobos querrían trabajar para ti.
yo”, soltó una risa enfermiza.
Noté que había una especie de teclado numérico allí. - Como usted
¿Puedes detenerlo?” Le pregunté inmediatamente.
“Tengo un código numérico para eso, abre la caja y me detengo porque
seamos realistas, no pueden ganar esta pelea”, dijo y tenía razón. No había
forma de que pudieran luchar tanto tiempo y vencer a todos y cada uno de ellos.
No tuve más remedio que hacer lo que dijo, no puedo dejarlo ir.
todos mueran conmigo. “Bien, dame la caja”, le dije.
Inmediatamente Jasmin dijo: “¡No! — Mientras se alejaba de Aldred.
Aldred le gritó: “¡Silencio!

"Tiene un ángel de la muerte atrapado dentro, por eso necesitaba el libro de
vampiros, para atraparte allí", gritó Jasmin y Aldred corrió tras ella.
- ¡¡¡SILENCIO!!! le gritó.
“Quiere combinarse con un ángel de la muerte para gobernar el mundo, no
te mantendrá con vida, Adelie”, dijo. Me hizo hechizarte para que no pudieras
contactar con la Muerte y él no podía decírtelo.
De la nada, Aldred le arrojó un cuchillo, que la golpeó de lleno en el

estómago. Jasmin se tambaleó hacia atrás y cayó al suelo. Empecé a correr
tras ella, quería ayudarla, pero Aldred me detuvo — ¡No! - Él gritó. — Abre la
caja y cerraré el sistema y me iré
tú curas a Jasmin.
Aldred se me acercó con una caja en sus manos. “Todo lo que tienes
que hacer es abrirlo”, dijo, y tomé la caja en mis manos.
Eso fue todo... un ángel de la muerte estaba dentro. Aldred se combinaría

con él y se volvería más fuerte que nunca... a menos que...
Capítulo 34
DICIENDO ADIÓS
ADELIA
“Eres un ángel de la muerte. Como tu padre. Es por eso que tienes poderes
para controlar la naturaleza de la misma manera que él. Sigues siendo una
ninfa y siempre lo serás, al igual que eres un hombre lobo.
“Esas eran almas perdidas que viste. Te escogieron y se quedaron
contigo para que les dieras paz y los entregaras a la muerte para que los
pusiera donde les corresponde. Están vagando por esta tierra sin propósito
y con penas de una vida pasada.
Eso es lo que me dijo la propia Jasmin. Aunque Jasmin es una traidora,
siempre me ha dicho la verdad sobre quién soy. ¿Y si esto es algo bueno?
Estas almas me eligieron, están conmigo. ¿Qué pasa si la oscuridad en mí
es una bendición?
Y si logro que hagan algo por mí… La caja estaba en mis manos. Miré
hacia el lado donde estaba la pantalla de seguridad con la pelea en
marcha, vi a algunos de nuestros lobos gravemente heridos, luego miré a
Jasmin que yacía allí en un charco de sangre.
Me miraba, pero ni siquiera intentaba decir nada. Todavía podría salvarla.
Tuve que actuar rápido, cerré los ojos y pensé en la caja. De repente,
vi la caja flotando en mi visión, sentí que tenía la habilidad de abrirla.
Abrirlo ahora parecía tan simple.
Podría abrirlo sin usar ninguna energía. Pero yo no. Si lo siguiente no
funciona, puedo matar a todos aquí. Y extrañamente, prefiero hacer eso
que dejar que Aldred se combine con el ángel de la muerte.
Rápidamente me perdí de vista, pero no abrí los ojos. Si Kairos pudiera
enviarme un enlace mental, tal vez yo podría conectarlo mentalmente.
Llamé a mi loba Madeline y pensé en Kairos.
'Lo siento si lo siguiente que hago no funciona. Te amo.' Me preocupaba

por él y supe que funcionó cuando Kairos respondió.
'Yo te amo.' No me cuestionó, solo dijo lo que necesitaba escuchar.
Ahora tenía un poco más de problemas para concentrarme en mi

tarea, pero hice lo mejor que pude. Me concentré en mi lado dominante y
pensé en esas almas perdidas que están conmigo. De repente, cientos
de voces llenaron mi mente y vi siluetas de cientos de personas corriendo
a mi alrededor.
'¡Ayúdame!' Grité y no pasó ni un segundo cuando se callaron y ni
siquiera tuve que decir qué hacer, estaban en mi mente y sabían lo que
quería.
Abrí los ojos pero mantuve las almas perdidas cerca de mí.
Miré a Aldred, que me miraba con los ojos muy abiertos.
- ¿No funcionó? preguntó como si estuviera decepcionado.
"Necesito emparejarlo con él, ahora se irá de todos modos".
escapar, lo abriré cuando estés listo. “Le mentí.
Aldred no perdió tiempo en prepararse, correr. Tomó un poco de la
poción de su armario y la bebió hasta la última gota, luego tomó una
cuchilla afilada en su mano.
La hoja estaba completamente negra. Se desabotonó la camisa,
dibujando una herida abierta donde debería haber estado su corazón,
atreviéndose a asumir que todavía tenía un corazón.
"Ve", dijo, cerrando los ojos y repitiendo algunas palabras de hechizo.
Si eso no funciona... por el amor de todo lo que tengo, lo siento.

Pensé en mi oscuridad y todo lo que soy, lentamente sentí que algo
irradiaba a mi alrededor, abrí los ojos nuevamente y vi humo negro
arremolinándose a mi alrededor.
Mis palmas irradiaban electricidad y extendí mi mano vacía a Aldred y
todas las almas perdidas fueron transferidas a Aldred. Ya no los sentía
sobre mí. Pero Aldred sí.
Estaba rodando por el suelo gritando de dolor agonizante. Tiré la caja
a un lado y corrí hacia Aldred agarrando la cuchilla que usó para cortar el
lesión. Sin dudarlo, hundí la hoja en su estómago lo suficiente como para

matarlo, pero para mantenerlo con vida por un tiempo. Gritaba y lloraba de dolor.
"Dime el código", exigí.

“Solo mátame pronto”, respondió entre gritos y llantos.
"Dime el código o te haré sufrir este dolor toda tu vida".

la eternidad —dije con toda mi ira.
- ¡No! ¡por favor no! suplicó, agarrando mi mano con horror.
— ¡CÓDIGO! ¡AHORA! Lo dije de nuevo. “50403,

luego presione el símbolo de la llave, luego 110420”, dijo mientras tosía
sangre.
Rápidamente corrí al teclado numérico e ingresé el código, hizo un pitido y
cerré la puerta donde estaban los lobos, las luces se apagaron pero en su lugar
se desató un gran incendio. Miré hacia donde estaba la pelea y el fuego se
expandía en todas direcciones. Sentí la vibración debajo de mí. Necesitaba irme.
Corrí hacia Aldred. - ¿Por qué harías eso? Le grité, pero rápidamente puse
mi mano sobre él y absorbí las almas perdidas, lentamente sus gritos se
extinguieron y quedó allí tendido, indefenso y sangrando. “¿Por qué necesitabas
todo esto? Le pregunté.
Luchó por hablar y tosió más sangre. "¿Cómo crees que me sentí cuando
era el único en mi familia sin poderes de hechicero?" Las lágrimas brotaron de
sus ojos y sonrió.
“Finalmente podría ser alguien”, dijo y me miró una vez más, pero su mirada
se demoró en mí y se detuvo allí. Cerré sus ojos.
"Descansa en paz", le dije y me acerqué a Jasmin, que estaba

viendo sangre, pero también tenía una cuchilla en la mano.
Me puse de rodillas a su lado. "Deja que te ayude. - dije y
Extendí la mano para curarla, pero ella me detuvo.
"No", dijo ella. “Lo siento mucho, Adelie,” gritó.
Incluso yo sentí mis ojos llenarse de lágrimas. “No quiero que mueras.
Traté de razonar con ella y traté nuevamente de llegar a ella, pero

nuevamente me detuvo.
“Si me mantienes con vida, nunca volverás a ver a tu padre, hice un
trato inquebrantable con el diablo. La muerte solo regresará a la tierra
sobre mi cadáver”, dijo. “He vivido una larga vida, he visto dos guerras
mundiales humanas, no puedo sobrevivir a otra guerra ahora. Es mucho.
— ¡Jazmín! — Grité, quería que viviera — ¡Por favor, quédate! —
resoplé.
Ella sacudió su cabeza. “Solo amé una vez en mi vida, hace muchos
años, él era todo lo que tenía, mi sol, mi luna, mi mundo. En mi corazón
solo está él y nada más. Aldred me prometió recuperar mi amor. Haría
mucho más por tenerlo de vuelta. Destruiría mucho más por él.
Sentí que se me encogía el corazón al pensar en lo importante que es

Kairos para mí. “Siento mucho que fueras parte de esto, Adelie”, dijo y me
sonrió entre lágrimas y sangre.
"No sé qué viene después de la muerte, pero espero que lo sepas.
encontrarnos allí —le dije.
Jasmin me dio la sonrisa más dulce que he visto en mi vida. - Yo también.
Cerró los ojos y habló. — El amor es una hermosa tragedia, por más
inocente que parezca, puede destruir cualquier cosa. Sé que tú y Kairos
harían cualquier cosa el uno por el otro. Aférrate a este amor que tienes.
Abrió los ojos de nuevo y miró hacia otro lado mientras una sola lágrima
corría por su mejilla. “Siempre he envidiado a los hombres lobo y sus
compañeros. Vives para una pareja toda tu vida y no hay otro amor como
este.
Ella continuó. “Sabes que él es el indicado en el momento en que lo
ves y de repente todo en la vida comienza a tener sentido. Puedes sentir
su dolor, te vuelves uno con él. Estoy tan celosa de que los hombres lobo
tengan esto —dijo y empujó la hoja en su estómago y me miró. "Toma el
libro del cajón dentro de la mesa", dijo y se sumió en un sueño interminable.
“No…” lloré a su lado, pero necesitaba salir. Me levanté y recogí ese

maldito libro, mi visión estaba borrosa por todas las lágrimas. Salí de la
habitación y corrí escaleras abajo. Había fuego por todos lados, pero todos
parecían estar afuera, así que eso fue bueno.
Excepto que sentí un dolor agudo en el pecho. Tan fuerte que me dejó
sin aliento por el impacto. Oí que alguien me llamaba. Era alguien de mi
manada que no podía imaginar porque tenía mucho dolor. Me levantó y
me llevó afuera mientras yo me aferraba al libro para soportar el dolor.
Sentí que la persona me menospreciaba y me hizo sentir mejor cuando

la energía del suelo me encontró y me llenó como un vaso de agua fría en
un caluroso día de verano.
Todavía sentía el dolor horrible, miré a mi alrededor y encontré a Kairos
acostado. Tenía los ojos cerrados y no se movía. De repente, el dolor se
hizo más fuerte. Estaba cerca de mí, y sin siquiera levantarme, me arrastré
hacia él.
—¡Kairós! KAIROS! - Yo grité. Yacía allí sin vida. Tenía varias heridas,
podía oler la plata en él. Tenía plata en él, sabía que la tenía.
"Yo lo curaré", me dije a mí mismo en pánico. “Haré que el dolor

desaparezca,” dije y puse mis manos temblorosas sobre él. Traté de
absorber el dolor en mí, pero no funcionó. - ¡No! ¡lo haremos! - Yo grité.
Lo intenté de nuevo, pero fue como si mi cura hubiera sido rechazada...
No puede ser... Mi curación siempre funciona. No solo funciona cuando los
heridos están... muertos...
- ¡No! ¡No! ¡No! “Seguí repitiendo. Toqué el rostro de Kairos — Por
favor, despierta… por favor — supliqué…
Capítulo 35
MUERTE
ADELIA
Kairos fue llevado de vuelta todo el camino. Varias personas me han asegurado
que sigue vivo. Pero, ¿cómo podría ser si no podía curarlo?
Estábamos casi en la manada, nos tomó mucho menos tiempo regresar ya

que nos apresurábamos a llevar a Kairos al médico de la manada. Todos estaban
en sus formas de lobo e incluso yo me subí a la espalda de Nathan para llegar a
casa más rápido. Raphael también se puso en contacto con algunos de los otros
médicos de otras manadas que ahora se apresuran a llegar a nuestra manada.
Ahora estábamos en nuestra manada y todos se movieron y recogieron la

ropa que habían dejado aquí. Seguí caminando hacia la casa donde Kairos ya
estaba parado, pero Alpha Archibald me alcanzó. "Está vivo, Adelie", me aseguró.
Negué con la cabeza. "Entonces, ¿por qué no puedo ayudarte?" Dije entre
lágrimas.
“No lo sé, pero tenía un latido del corazón. Respiraba débilmente, pero aún
respiraba”, dijo. “Muchos médicos lo examinarán, lo ayudarán.
Me detuve a mitad de camino y me volví hacia él. "¿Serán capaces de hacer

lo que se supone que debo hacer?" curarlo? Esto es lo que se suponía que
debía hacer y cuando necesitaba hacerlo, no podía.
Alpha Archibald me agarró del brazo cuando se suponía que debía alejarme.
“Necesito ver a Kairos, déjame,” le dije tratando de liberarme pero no tenía
fuerzas para hacerlo. Estaba débil ahora. Y ninguna ganancia de energía de las
plantas podría ayudarme.
"Esto no es tu culpa, Adelie", dijo lo único que
Esperaba que no lo hiciera.

No quería hablar de eso. Si, fue mi culpa porque si hubiera hecho las cosas
más rápido no hubiera pasado, si lo hubiera podido curar ya estaría bien.
No le respondí. ¿Qué podría decirle que

declarar la verdad y aceptar que es mi culpa y solo mía?
“Se pondrá mejor. Sé que lo hará —dijo, pero tuve la horrible sensación de
que no tenía razón esta vez. Odiaba pensar así.
“Probablemente tengas razón,” dije en su lugar. Alpha Archibald soltó mi

brazo y continué caminando hacia mi casa donde los médicos estaban
examinando a Kairos. No lo llevaron al hospital solo porque ya estaba lleno de
miembros de la manada.
Entré por la puerta grande de la casa y la gente estaba esperando en la sala
de estar. Noté a la hermana de Kairos. Habla, mirándome. Se veía tan miserable
como asumo que se veía. Sus ojos estaban rojos con bolsas debajo de ellos.
Caminé directamente hacia ella y la abracé con fuerza. Ella no perdió el

tiempo y me devolvió el abrazo, enterrando su rostro en el hueco de mi cuello.
"Tengo miedo", dijo entre sollozos. “Él es el único que tengo,” dije.
- Va a quedar todo bien. “Qué fácil es para nosotros encontrarnos mintiendo

cuando alguien está sufriendo… Quería creer que él estaría bien.
Pero el dolor en mi corazón era muy fuerte, la debilidad de mi compañero era
por mi angustia.
Decidí subir a la habitación de Kairos. Solté a Fala acariciando su mejilla.
"Voy a comprobar cómo va", le dije y ella asintió.
Cada paso se sentía tan pesado y el frío parecía hacer que mis huesos
temblaran. Escuché voces detrás de la esquina donde estaba la habitación de Kairos.
"No puedes preguntarle eso, si no funciona, la romperás aún más", dijo una
voz de hombre.
"Luna tiene poderes curativos, si no lo intenta, es posible que nunca lo
sepamos y si no lo intenta, él se quedará así, aunque ella podría salvarlo,
excepto que es demasiado tarde para eso", dijo otro. era suficiente saber
lo que necesitaba hacer

Me encontré con eso. "Lo haré... quiero decir, lo intentaré", dije y ambos
me miraron sorprendidos, avergonzados por su conversación sobre mí.
"No hay tiempo, vete ahora", dijo el médico barbudo. Abrió la puerta y
entró corriendo conmigo siguiéndolo. Kairos yacía allí, sin señales de vida.
“Está más herido de lo que pensábamos”, explicó el médico. “Está vivo, pero
esto es tan vivo como puedes ver. Si no puedes hacer nada, se quedará así”,
dijo. Si esto fue lo más vivo que ha estado, ni siquiera está vivo...
Me acerqué a su cama y me senté a su lado para estar frente a él, su

respiración débil hizo que su pecho se elevara. Sin un ojo entrenado, parecería
que ya está muerto. Sentí mis lágrimas fluir como un río. Puse mis manos
sobre su pecho e intenté hacer cualquier cosa para curarlo, pero no pude.
Es como si nunca hubiera hecho esto antes. No pude evitar estallar en

lágrimas. “No puedo”, grité. Momentos después, volví a intentar concentrar
toda mi energía. Traté de darle mi fuerza de energía, pero me rebotó.
"Lo siento Luna", dijo el médico y salió de la habitación.

- Lo siento mucho. Kairos, lo siento,” le dije, agarrando su mano con
fuerza. “Si pudiera hacer algo, te prometo que lo haría, si supiera qué”, le dije,
pero algo se atascó en mi cerebro. Cualquier cosa... haría cualquier cosa...
haría cualquier cosa para salvarlo si supiera qué... Kairos está vivo... está
vivo... no está muerto...
“Vuelvo enseguida,” le dije a Kairos como si pudiera oírme. Salí corriendo

de su habitación, sin siquiera cerrar la puerta detrás de mí.
Pasé corriendo junto a los médicos y me topé con uno: Luna, eso es todo...",
comenzó a hablar.
“Ojalá todo saliera bien”, alcancé a decir y seguí corriendo. Las muchas
personas de abajo me miraban como si estuviera loco. Fui directamente al
hospital de la manada, donde estaban siendo atendidos muchos heridos. En
momentos como este, cuando una pelea es dura, la muerte parece pasar el
rato allí.
Llegué al hospital y ni siquiera tuve que entrar. La muerte ya me estaba

esperando. Corrí hacia él y lo abracé con fuerza. “Te extrañé mucho”, le dije.
"Yo también te extrañé, mi amor", dijo y besó mi

cabeza.
"Te estaba buscando porque…" dije rompiendo el abrazo y estaba a punto

de hablar cuando me interrumpió.
"Sabía que te gustaría conocerme", dijo y yo estaba un poco confundido.
“Escuché sobre Kairos,” dijo, sin expresión. "Y sé lo que estás a punto de
preguntarme", dijo con seriedad.
Nunca lo había visto actuar tan serio conmigo, solo cuando murió mi madre
se volvió así. Sabía que quería usar mi deseo de muerte en Kairos, ¿no? Si hay
algo en lo que me gustaría usar mi deseo, es esto.
“¿Estás enojado porque estoy haciendo esto? le pregunté, casi ofendido.
“Adelie, este deseo ocurre una vez en la vida, algunos ni siquiera lo

consiguen. Eres joven y tienes toda la vida por delante”, dijo. De alguna manera,
él usando mi nombre así en lugar de mi apodo, amor, no sonaba tan mal cuando
continuó explicándolo como si yo fuera una especie de niño pidiendo un poco
de felicidad.
Retrocedí unos pasos. "Esta no es mi ambición porque lo quiero en mi vida",
le dije mientras me observaba con atención. No cambiaré de opinión —dije.
Él asintió hacia mí. “Espero que sepa lo afortunado que es”, dijo, sacando
una pequeña moneda de su bolsillo y entregándomela. - Pida un deseo.
Sostuve la moneda con fuerza en mis manos y cerré los ojos pensando en
Kairos y que todo volviera a la normalidad. “Desearía que Kairos se curara”, dije
y sentí que la moneda desaparecía en el aire, así como así.
como la muerte
Capítulo 36
DESEO DE MUERTE
KAIRÓS
Estaba atrapado en mi propio cuerpo. Escuché a todos hablando, pero ni

siquiera podía abrir los ojos para verlos. No tenía dolor, no sentía nada.
Apenas existía ahora, simplemente acostado aquí y escuchando a todos

hablar. Yo era solo un espacio vacío. Recé para que mis nervios despertaran,
solo quiero sentir algo...
y Adela. Mi Adelie, se está golpeando estúpidamente porque no puede
curarme. Eso fue solo mi culpa. Escuché que estaba llorando, pero no pude
alcanzarla, no pude mirar sus ojos vidriosos y limpiar las lágrimas saladas.
No quiero que viva así hasta que tome mi último aliento.

No quiero que se siente junto a mi cama y llore. Si esta es la vida que viviré,
por favor, Diosa de la Luna, tómame en tus manos amorosas y cuida de Adelie.
Aceptaré mi pérdida por cualquier otro hombre que esté dispuesto a amar a
Adelie de una manera que yo ya no puedo. Alabaré el amor de Adelie por otro
hombre, solo déjala ser feliz.
No la cargues conmigo.
Recuerdo lo que me pasó, ya había salido corriendo del castillo, pensé que
no había lobos aquí y cambié a mi forma humana, mi lobo me pedía que me
cambiara porque era demasiado débil, muchos otros lobos me mordieron por
dentro y de alguna manera el aguijón plateado en mis huesos me estaba
molestando.
Sentí el escozor plateado en mi hombro. De alguna manera tenían plata en

sus colmillos. El último sentimiento real que tuve fue el dolor agonizante
de plata Adelie no pudo curarme porque mi cuerpo ya está muerto. Me estoy

aferrando a mi vida, ni siquiera queriendo.
Ya se sentía como si hubiera estado aquí por la eternidad, se sentía como

años de constante nada. Pero entonces sucedió algo peculiar, era como si
estuviera viviendo en mi sueño.
Estaba en mi habitación, junto a mi cuerpo, mirándome a mí mismo y luego
a mis manos y pies que no podía sentir pero que se movía y veía. Miré hacia la
esquina de mi habitación y no estaba solo. Vi a un hombre con un abrigo negro
apoyado contra mi pared y jugando con una moneda en la mano.
- ¿Quién eres tú? Le pregunté. Levantó la cabeza hacia mí y

cambió su postura a ambos pies.
Arrojó la moneda y me hizo estremecer cuando apenas la atrapó.
Él se rió de mí. “Soy lo único desconocido para todos ustedes. El único misterio
por descubrir. Soy la muerte”, dijo, saliendo de las sombras.
No pude evitar aclarar. "¿El padre de Adelie?" - Yo pregunté.

"Y también es inteligente", se burló de mí la Muerte. "Dime exactamente
qué tienes de especial que hace que mi hija tome una decisión tan audaz a tu
favor". preguntó y se sentó en mi sillón.
– ¿Qué elección? Yo pregunté.

Hizo caso omiso de mi pregunta. '¿Por qué crees que la amas?' me
preguntó, mirando la moneda de diez centavos volar arriba y abajo mientras la
lanzaba.
Me estaba desafiando. “No lo creo.” Le sonreí mientras tomaba la moneda
bruscamente.
La muerte apretó la mandíbula hacia mí, pero logré continuar antes de que
dijera algo. “No creo que la ame, sé que la amo, estoy tan seguro de que la
amo que nada más importa y apostaría el mundo entero a que no hay otro amor
como el mío”, dije.
Yo continué. "Incluso la palabra amor no puede expresar la
Bastante lo que siento por ella, pero si hay algo además de amor, es esto.
Me miró por un segundo — ¿Qué es lo que no te gusta de ella? Me

preguntó, quería verme romper pero no lo hará porque lo que siento por
ella es real.
“Odio que ella no vea lo que yo veo en ella. ¿Cómo es ella realmente?
increíble, qué hermoso, inteligente y fuerte es tu espíritu”, le expliqué.
La muerte apartó la mirada de mí. "Yo diría que tu único defecto es tu
gusto por los hombres", dijo y se puso de pie. "Observé a Adelie y cómo la
trataste antes, eso es lo único que nunca podría perdonarte", dijo e incluso
yo no puedo perdonarme por eso.
"Pero ya sabes como dicen que la muerte perdona... También he visto
el bien que has hecho". Por supuesto que sé que la amas y ella te ama.
Se volvió hacia la ventana y se cruzó de brazos. “A veces concedo los
deseos de la gente, cuando son buenos les doy esa moneda. Yo lo llamo
un deseo de muerte. - El dice. “Por supuesto, dado que normalmente nadie
puede verme, solo puedo dárselo en su lecho de muerte y dejar que pidan
su último deseo. Por supuesto, nadie puede usarlo para salvar su vida”,
explicó y esperó mi respuesta.
¿Así fue? ¿Era mi moneda? Le pregunté.
Se volvió hacia mí y levantó la moneda anterior a la altura de mis ojos.
“¿Lo dices en serio? preguntó y se rió. - No claro que no. Eres un buen
líder para tu manada y haces el bien a los demás, tú también has sufrido
mucho, te mereces un centavo como este, pero este no es tu centavo.
Estaba confundido. "Entonces, ¿de quién es?" Le pregunté.

“Y de Adelie,” explicó, pero ahora yo estaba aún más confundido.
“¿Por qué tienes esto?”, le pregunté.

“Verás, Adelie cumplió su deseo hace algún tiempo. Podía usarlo
cuando quisiera. Y ella lo usó ahora. Para curarte, dijo
¿Qué? ¡No! no puedo irme - ¡No! ¿Puede tener algo en el mundo y lo

usó conmigo? Le pregunté y él asintió.
- Yo no quiero eso. Devuélvelo a ella, no puedo dejarla

Desperdicia tu deseo en mí —dije.

Se acercó a mí. "Ella ya ha hecho su pedido", dijo.
Negué con la cabeza. "Ella se arrepentirá, no soy digno de su deseo", le dije.
“Hijo”, dijo y puso su mano en mi hombro, no podía sentirlo, pero su gesto

era claro. “Una vez pensé que era un monstruo… pero no puedo ser un
monstruo si tengo una hija así. Si alguien como Adelie te ama, lo vales.
Él continuó. “Y recuerda que te mereces su deseo, eres la felicidad que ella

necesita. Estar allí para ella y amarla como se debe. Pensé que era estúpida
por pedir ese deseo, pero ahora entiendo que eres lo único en el mundo que
ella necesita, enorgulléceme y cuídala cuando yo no pueda.
Sentí una lágrima resbalar de mi ojo derecho, una sola gota. La muerte
levantó la moneda, pero aún necesitaba preguntarle algo primero. “Espera,” dije
y él me miró congelado en su lugar. "¿Puedes darme la mano de tu hija en
matrimonio?" Le pregunté y algo cambió en su mirada por primera vez.
“No hay hombre a quien preferiría darle a mi hija que a ti”, dijo y arrojó la
moneda al aire. Vi todo lo que me rodeaba desaparecer poco a poco. Y de
repente... sentí todo mi cuerpo en un estallido de energía.
Capítulo 37
el cairo y adelie
KAIRÓS
Me desperté de inmediato respirando hondo, me levanté sentándome en la

cama y miré alrededor buscándolo, no estaba aquí, ni siquiera una pista de
que estaba aquí.
Me sentí un poco aturdida pero mi energía estaba conmigo, me sentía
fuerte como siempre, me levanté de la cama y fui directamente a mi armario
para agarrar algo que pudiera ponerme rápidamente. Casi me tropiezo un
par de veces mientras me vestía, lo primero que encontré fueron unos
pantalones negros y un suéter blanco.
No perdí el tiempo, necesitaba ver a Adelie. Corrí por los pasillos como
cuando era niño. Llegué a la parte superior de las escaleras y me molestó
la cantidad de personas que había allí.
Raphael, Nathan y algunos miembros mayores de la manada estaban
sentados en el sofá. Helen estaba consolando a Fala. Mi discurso. Bajé
corriendo las escaleras y mis pesados pasos hicieron que todos miraran en
mi dirección.
Escuché a Helen gritar algo entre líneas: '¡Oh, querida diosa de la luna!
Corrí hacia Fala y la tomé en un fuerte abrazo. - Ellos dijeron eso
¡Ibas a morir!”, gritó. “Pensé que te iba a perder.
—Shh. No te dejaré —le dije y mis ojos encontraron al confundido
Raphael que ahora estaba a mi lado. Rompí el abrazo ahora sosteniendo
mi brazo alrededor de Fala.
"Vi a ese lobo acabar contigo", dijo, sin creer que fuera real. “Estabas
casi muerto hace un minuto. Los médicos dijeron que no podían hacer nada,
su cuerpo estaba paralizado. ¿Como eso es posible? - Le preguntó.
“Adelie me salvó,” dije.

Rafael negó con la cabeza.—Pero cuando trató de curarte, no funcionó.

¿Cómo diablos te curó?
Le sonreí. "Alguien la ayudó", dije y traté de mirar en
atrás, pero ella no estaba a la vista.
“Está en el hospital, ayudando a otras personas”, me dijo Fala. Besé su frente
y salí corriendo de la casa. Quería verte. necesitaba verla.
Corrí al hospital, sentí que nada me había pasado.

Estaba lleno de energía y todo lo que tenía que hacer era encontrarla y decirle
todo lo que quiero que sepa, porque nunca sabré cuándo será mi último día con
ella.
Entré corriendo y las cabezas de todos se volvieron hacia mí en estado de
shock. ¡Imposible! dijo un médico en voz baja. El doctor echó un vistazo — ¿Qué
estás mirando? Todavía hay luchadores que necesitan ayuda”, le dije rápidamente
y volví corriendo a lo que estaba haciendo. En momentos como estos, los médicos
siempre estaban de mal humor y malhumorados cuando algo no salía según lo
planeado, y no podía culparlos cuando tenían tanto trabajo que hacer. Aquí había
mucha gente de mi manada y de Alpha Archibald, muchos de nosotros resultamos
heridos, algunos incluso muertos. Recuerdo cuando estaba peleando, vi los
cuerpos de algunos de nuestros miembros en el suelo, sin vida.
No impondríamos nuestras derrotas, luchamos con honor y orgullo. A nuestros

luchadores les estaba yendo muy bien y estoy orgulloso de ellos. Y aquellos que
perdimos serán considerados para siempre los mejores luchadores.
Busqué a Adelie, pero no la encontré, sentí que estaba aquí.
Seguí caminando hasta que la vi sentada en el borde de una cama junto a un
luchador acostado, de espaldas a mí. Caminé hacia un lado para poder ver lo
que estaba haciendo.
El luchador tenía una gran marca de mordedura en el vientre y gruñía de
dolor, la plata era lo que causaba dolor, esos cabrones estaban peleando sucio.
Adelie colocó sus manos sobre sus heridas, tan suavemente como siempre. Vi
sus ojos cerrarse y su cabeza levantarse un poco.
Algún tiempo después, sus gritos de dolor desaparecieron, pero el

La mejilla de Adelie ahora estaba cubierta de lágrimas. Salió de su

trance y se secó las lágrimas. -Luna, muchas gracias- dijo ahora
sonriendo. - ¿Te dolió? le preguntó a ella. - ¿La cura?
Adelie le dedicó una dulce sonrisa. “Sí… pero estoy cansada.
— Kairós. ¿Puedes pasar esa taza? Me habló y me señaló un
vaso de plástico con un líquido verde. Ni siquiera sabía que ella sabía
que yo estaba aquí, hace ni una hora estaba llorando a mi lado y
ahora me habla como si nada.
Le pasé la copa. “Gracias”, dijo, pero ni siquiera me miró, sino que

dejó la taza en la mesita junto a la cama donde estaba el luchador.
“Bébelo cuando te sientas lo suficientemente bien como para ponerte
de pie, sabe muy raro y si estás débil no podrás tragarlo.
- ¿Qué es? - Le preguntó.

"Confía en mí, no quieres saber", le sonrió.
"Dime", bromeó con ella y sonrió, y no me gustó cómo la estaba
molestando y hablando tan seductoramente con ella cuando Adelie
estaba actuando tan fríamente.
Adelia negó con la cabeza. “Hará que te recuperes mejor”, dijo y
caminó hacia el médico más cercano, sin siquiera mirarme, pero aun
así la seguí.
Adelie no tuvo la oportunidad de hablar cuando el médico comenzó.
"Hiciste un trabajo increíble Luna... nadie está en una situación crítica
en este momento, creo que deberías cuidarte un poco", dijo y sus ojos
se posaron en mí. “Da un paseo con Alpha por el bosque para
recuperar tu energía”, dijo y le sonrió.
“¿Tal vez pueda hacer algo aquí? No soy tan mala”, dijo.
¿No quería estar a solas conmigo?
“No seas tonto y vete”, dijo.
"Creo que…" comenzó ella. Sabía que quería discutir, así que la
tomé de la mano y la llevé afuera. - ¿Qué estás haciendo? preguntó
con frustración.
"Necesitas recuperar tu energía", le dije, por eso.
Seguimos caminando en silencio durante un rato. Cuando llegamos al

bosque, la solté, caminó más adentro, pero esta vez no la seguí.
Finalmente cuando volvió no me dio ningún tipo de mirada, parecía

más despierta ahora y eso estaba bien pero me estaba evitando. Siguió
caminando, pero corrí hacia ella y la agarré de la mano, deteniéndola.
“Adelie,” traté de llamar su atención.
- ¿Qué? “Ella me escupió. Era como si estuviera enfadada conmigo...
¿Se arrepentía de haberme salvado alguna vez?
- ¿Estás enojado? Yo le pregunte a ella.
"No, yo solo... no te entiendo", dijo mirándola a los ojos.
pies, pero levanté su barbilla para mirarme a los ojos.
"¿Te arrepientes de haberme salvado?" — Le pregunté, pero ella
respondió de inmediato.
- ¡No! — Ella dijo — ¡Claro que no!
- ¿Entonces que? “Si tuvieras
otra opción, no estarías aquí”, dijo y en esa última parte escuché ese
horrible chasquido en su voz que la gente suele tener antes de empezar
a llorar, excepto que Adelie no lloró, era fuerte. “No querías pelear, te
negaste a usar mi deseo. ¿Por qué no fui suficiente para que dejaras tu
orgullo a un lado?
Negué con la cabeza. —No fue orgullo —dije—, simplemente no sé

por qué desperdiciarlo conmigo cuando puedes hacer cualquier cosa en
el mundo con ese deseo.
“Tú eres mi mundo”, dijo y me abrazó con fuerza. "Pensé que te iba a
perder", gritó en mi pecho. “Y no me gusta cuando actúas como si no
fueras lo suficientemente bueno porque lo eres todo para mí y quiero que
sepas que haré cualquier cosa por ti porque sé que tú harías lo mismo”,
dijo.
No podría estar más de acuerdo con ella. Si ella rehusara mi deseo,
Yo estaría igual de enojado con ella.
— ¿Adelia? — Llamé su atención y levantó la cabeza hacia mí, rompí
un poco el abrazo, pero aún sostenía sus manos entre las suyas.
mi. “Supongo que obtuviste esa información de tu padre”, asintió. "¿Dijo

algo más de lo que le dije?" Pregunté y ella pensó por un momento y luego
negó con la cabeza. "Bien", le sonreí, pero eso solo la confundió más.
Solté sus manos y di un paso atrás.—Sabes que tengo la bendición de

tu padre —dije—.
- ¿Qué bendición? - Ella preguntó.
“No tengo un anillo en este momento, pero no creo que pueda esperar”,
dije y me arrodillé. - ¿Quieres casarte conmigo?
Capítulo 38
EPÍLOGO
Dos meses despues
ADELIA
"¡No llegaremos tarde!" Maeve discutió conmigo mientras colocaba el clip azul
en mi corona trenzada.
Fala también estaba aquí enfocándose en su vestido verde azulado porque
le quedaba un poco grande, pero se las arregló para quitárselo a la perfección,
sin un ojo entrenado nadie notará que está sujetado.
“Sí y además”, dijo alisándose el vestido y volviéndose hacia mí, “las mujeres
necesitan llegar tarde.
Rodé los ojos hacia ella. “Si no me casara en cinco minutos, eso sería
comprensible.
Ella se acercó a mí. "Oh, no seas tonto, dudo que alguien se enfade porque
llegas un poco tarde, es tu día", se rió entre dientes. "Me encantaría ver la cara
de mi hermano cuando llegues tarde, ¡apuesto a que comenzará a preocuparse
si lo abandonas!" Ahora incluso Maeve se unió a su risa y me puse de pie
mientras gritaba mi nombre.
- ¡No he terminado todavía! - Ella dijo.
“Suena bien,” dije. “Tenemos que irnos ahora.

“Pero no perfecto. Ahora siéntate me ordenó y me senté.
Siguió arreglándome el cabello durante otros diez minutos y luego finalmente
comenzamos a caminar hacia el centro de la manada. Kairos se impacientó y
me llamó a través de su mente.
'¿Pies fríos o simplemente elegantemente tarde?' preguntó y me hizo sonreír.
¿Tienes miedo de dejarlo en el altar? Yo lo provoqué.

'Si haces eso, te prometo que te perseguiré hasta el fin del mundo', dijo
con toda seriedad.
"Estoy intrigado, ¿tal vez debería probar esto?"
“Te espero en el altar, seré el único de esmoquin negro.
“Estaré de blanco,” dije, excluyéndolo porque ya estábamos aquí.
Todo bellamente decorado con flores y enredaderas, se sentía como un

sueño, casi no reconocía este lugar. Archibald se acercó a mí. - ¿Listo? me
preguntó y me ofreció su mano.
Nuestra manada se ha aliado con la manada de Archibald. Kairos ahora
está entrenando a ambas manadas y también se está entrenando a las
mujeres de la manada de Archibald. Los miembros de la manada de Archibald
están entrenando más duro y durante más tiempo que los miembros de
nuestra manada, pero poco a poco están aprendiendo el cruel entrenamiento de Kairos.
El mes pasado, me acerqué a Archibald y pensé que era mejor que me
acompañara al altar.
***
Adelie caminó por el pasillo sin dejar la mirada de Kairos, él la miró como
si fuera la primera vez que usaba un vestido blanco vaporoso, se veía igual
que la primera vez que Kairos la vio.
No podía quitarse de la cabeza la idea de que ella lo había hecho a propósito.
Cuando Adelie sonrió, supo que era a propósito.
Por eso se amaban, ambos notaban las pequeñas cosas y bromeaban
entre ellos al respecto.
Sí, a veces se peleaban por las cosas más pequeñas y se enojaban el uno
con el otro, pero siempre supieron que eso no los separaría. Esto solo
fortaleció su amor y les hizo darse cuenta de que no tienen que actuar de la
misma manera, creer las mismas cosas. Ellos completan.
Adelie le devolvió la vida a la manada de Night Walker, le devolvió la vida
a Kairos. Kairos no tenía ninguna esperanza para él antes
para encontrar a la ninfa en medio del bosque. Parecía tan pequeña y frágil en ese
entonces, él quería protegerla y ser su caballero de brillante armadura. Poco sabía
él que ella no necesita a nadie para protegerla.
Pero él todavía está siempre ahí para ella.
Adelie nunca creyó en una segunda oportunidad para ella, nunca creyó en una
vida libre. Vivía en las sombras porque entonces era pequeña, pero ahora es más
fuerte que nunca.
Él es una hermosa tormenta y ella es como la lluvia después. Él es como un
trueno, pero ella tiene relámpagos en las venas. Él es lógico, pero ella es mística.
Él desafiará, pero ella inspirará. Hacen que la oscuridad del otro sea menos oscura.
Su amor es una hermosa aventura.
Por el resto de sus vidas se van a la cama diciendo solo tres palabras el uno al
otro...
Continúa en el Libro 2…
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Los lobos del milenio
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Los Lobos del Milenio – Bianca Alejandra
Sienna es una mujer lobo de diecinueve años que guarda un secreto: es

virgen. La única virgen de la manada. Está decidida a superar la Niebla
de este año sin ceder a sus impulsos primarios, pero cuando conoce a
Aiden, el alfa, se olvida de su autocontrol.
Secuestrada por un Alfa - Annie Whipple
Belle ni siquiera sabe que existen los hombres lobo. En un avión a

París, conoce a Alpha Grayson, quien afirma que ella le pertenece.
El posesivo Alpha marca a Belle y la lleva a su suite, donde trata
desesperadamente de luchar contra la pasión que crece dentro de
ella. ¿Belle sucumbirá a sus deseos o podrá contenerse?
Arrebatado por un Alfa - Chloe Taylor
Cuando la joven fugitiva Quinn es mordida por un lobo en el

bosque, descubre un mundo que nunca conoció: un mundo de
hombres lobo. Ahora Quinn debe adaptarse a su nueva vida en
Shadow of the Moon Pack, bajo la guía de un seductor alfa.
Mi alfa me odia - Natchan93
Cuando la joven fugitiva Quinn es mordida por un lobo en el

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Lyla va al corazón de Mississippi con la débil esperanza de encontrar a

su pareja. Encontrar una cita es algo raro y, sinceramente, Lyla estaría
feliz con su amor de la infancia.
A medida que comienza la temporada bajo la luna llena, Lyla sigue un
aullido escalofriante para encontrar a su verdadero compañero:
Sebastián, el Royal Alpha. ¿Lyla aceptará su destino como parte del
Royal Pack o elegirá a su primer amor?
Infinito – Mikayla S
El compañero de Lux es todo lo que puede pensar desde el primer día

que lo olió. Ella trata de imaginar cómo se ve, a qué sabe... pero sabe
que incluso sus sueños más salvajes no le hacen justicia. Desde el
amanecer hasta el atardecer, el compañero de Lux siempre está ahí,
acechando en las sombras pero fuera de su alcance. Ni siquiera sabe
de qué especie es. Todo lo que sabe es su nombre: Soren

El Alfa y La Ninfa Lib 1españ9l

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Adelie estaba acostumbrada a permanecer en las sombras y vivir una vida

Kairos, un lobo conocido por su crueldad y mal genio, termina siendo el

Clasificación de edad: 16+

Libro electrónico Producido por: Galatea Books y

Resumen del libro

9. Castigo alfa 10. El

23. El mito de Aldred 24. La

27. Los cambios de Adelie

29. Los vampiros

Mi madre siempre me enseñó a ser discreto. Esconderme bajo mi enorme

Las personas que me buscan quieren usarme como arma de guerra y

soy una ninfa Una ninfa es un espíritu protector de la naturaleza.

Nunca he conocido a otras ninfas además de mi madre. ella era la mitad

Mi padre siempre ha dejado claro que mi madre no es responsable de su muerte y

La tercera parte de mí es de mi padre. No veo a mi padre a menudo porque su

bueno o malo. Hay principalmente cientos de tonos de gris.

El deseo de muerte puede hacer casi cualquier cosa excepto hacerte

¡Amigo! ¡Amigo! Mi loba Madeline cantó mientras mi madre colocaba sus

¿Cómo puedo ser tu pareja? Tal vez estoy soñando.

“No puedo tenerte como mi compañera, Adelie. Lo siento, eres débil y ni

Por supuesto que no podía cambiar, pero lo necesitaba. No podía dejar a mi

Mi madre corrió hacia mí. - ¡Mami! Grité mientras ella estaba

- ¡Fenómeno! dijo un guerrero a mi lado. Todavía estaba en su forma

Vi a la Muerte frente a mí. ¡No! Eso significa que se ha ido. No te la

Mi padre me miró — ¡Corre! gritó, haciendo temblar el suelo, nadie más

Dejé caer una bomba de humo que me mantuvo protegido, no pensé en

Salí de la empacadora con mi larga capa negra con capucha y mi

Como dije gracias, mi cuerpo comenzó a llenarse de energía desde las

que estaba dispuesto a vivir. no tenia a nadie mas en mi vida,

Me preguntaba acerca de mi compañero Hans, él nunca se fue de mi

Cuando finalmente llegó el momento de partir, agarré mi pesada capa,

Mi lobo me estaba hablando. Para otros hombres lobo, eso no sería

Mi lobo estaba enojado conmigo y probablemente continuó. Yo

Estaba sentado en mi oficina cuando mi Beta Raphael entró con un

No viví con el resto de la manada. Vivía solo en mi enorme casa. Incluso mi

Tenemos muchos hijos porque la mayoría de ellos perdieron a sus padres

algo más que prisioneros.

Era casi medianoche, pero mi lobo seguía paseando. Algo le estaba

¿Qué es? Le pregunté.

Al entrar en el bosque, me quité la ropa y la puse toda en mi bolsa y

Dejé que Kye tomara el control total. Corría como un

Tenemos que ir allí, dijo.

Mientras caminaba hacia el territorio de la manada vecina, noté que un olor

Su belleza era como ninguna otra, era un tesoro hecho a mano.

Su cabello oscuro brillaba a la luz de la luna mientras se deslizaba por su espalda.

Ella era mi segunda oportunidad. Volví a mirar a la luna.

- ¿Cual es tu nombre? Yo le pregunte a ella.

Su voz era angelical y dulce, hablaba con gracia y elegancia y,

qué versión de la historia escuchó.

“Dígale a su Alfa que lo recogeré mañana, empacará sus cosas y estará

Mi lobo no dijo nada. Estaba loco por no abrazarla. Yo no pude. Pero

Sonrió, "Qué maravillosas noticias", exclamó, pero pronto cambió.

“Pero la manada… merecen tener una Luna. - el dice. y esto es

- ¡Yo puedo! Y lo haré —dije levantando la voz. - Y yo

Esperé hasta el amanecer para contarle a Alpha Archibald sobre mi partida.

No tuve el corazón para ir a decírselo en medio de la noche y perturbar su

Mi compañero. Alfa Kairós. He oído historias sobre él. Historias horribles,

con Alfa. Ahora estaba parado en el campo de entrenamiento y esperando a Alpha

"Y alguien de la manada Nightwalker", le dije.

"No. El Alfa", dije con la voz más tranquila que pude.

Enderezó su postura, “Kairos, creo que ese es tu nombre, ¿verdad? “Solo lo