Universidad Técnica de Manabí.

Facultad de Ciencias Sociales y Humanísticas.

Escuela de Psicología.
Marco Navarrete Fernández.
Psicología de la Atención Primaria.
Análisis acerca de la relación existente entre la Psicología y la Salud.
Cuando hablamos acerca de la percepción de la salud en el siglo pasado tendremos una
idea un poco anticuada y limitada de que conlleva estar sano, una idea que consistiría en
la ausencia de anormalidades en relación a nuestro organismo, esto ha tenido un cambio
progresivo a medida que los años pasan tomando recientemente una perspectiva
biopsicosocial.
Podríamos definir a la salud de la forma clásica y que se masificó generalmente como
“la ausencia de una enfermedad”. Dando un concepto más preciso podemos entender a
la salud como la integración del bienestar físico, mental, emocional y social más allá de
la ausencia de la enfermedad. Una vez entendido que es la salud entraríamos a definir a
la Psicología como ciencia que estudia los procesos mentales y la conducta observable
del ser humano en relación con el medio físico y social que le rodea.
A la Psicología de la Salud entonces podemos definirla como una disciplina que se
especializa en la aplicación de los conceptos, técnicas, teorías propias de la Psicología
en razón de evaluar, diagnosticar, prevenir y explicar los trastornos mentales o cualquier
comportamiento que amerite relevancia en los procesos tanto de salud como de
enfermedad.
Ahora entorno a la relación entre la ciencia Psicológica y la salud, en la actualidad
existe multitud de evidencia que afirma que nuestra conducta, nuestro comportamiento
y nuestras relaciones sociales influencian profundamente nuestra salud.
Hábitos como el fumar o beber bebidas alcohólicas son una de las mayores causas de
muertes y enfermedades en los países de occidente. De esta misma forma los estados
mentales pueden tener repercusiones en nuestra salud, nuestros sentimientos y
emociones pueden alterar nuestro bienestar físico, el ser apoyado o amado puede
resultar en una gran ayuda en situaciones estresantes.
La tasa de morbilidad en los tiempos modernos ha cambiado considerablemente
respecto al siglo pasado, antes las enfermedades como la neumonía resultaban
catastróficas para las personas. Ahora las mayores causas de muerte a nivel global están
relacionadas al cáncer o a los ataques fulminantes, enfermedades que en parte tienen
que ver con la conducta o el estilo de vida que lleve la persona, esta es una de las tantas
razones por las que la conducta debe ser tomada en cuenta de forma decisiva pues tiene
una influencia mayor de la que hubiésemos creído en tiempos pasados sobre la forma en
la que llevamos nuestras vidas pudiendo ser en ciertos caso decisiva.
Las conductas pueden ser decisivas llevando hábitos sanos que conlleven a una mayor
longevidad como dormir el tiempo necesario, mantener el peso corporal adecuado o
practicar ejercicio regular, llevando hábitos saludables podemos decir con casi total
seguridad que las personas podrán gozar de salud en su organismo a lo largo de su vida.
Así mismo, la Psicología puede estudiar las repercusiones de la enfermedad a nivel
cognitivo y emocional, desde los dolores crónicos hasta el cáncer.
Como conclusión podemos decir que cada vez está más clara la relación entre la
conducta, la salud y la enfermedad. Los psicólogos de la salud podrán evaluar conductas
de riesgo, creación de programas de promoción de la salud y de prevención que en el
largo plazo podrían determinar el rumbo de los hábitos que vuelvan o no a una persona
saludable.