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Level of reading competence in adults with Intellectual and Developmental Disabilities in texts with different lexical and semantic complexity View project
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REFLEXIONES
JOSÉ A. LEÓN1
RESUMEN
PALABRAS CLAVE
ABSTRACT
1
Este escrito corresponde a un extracto de la conferencia impartida por el Dr. José A. León de la Uni-
versidad Autónoma de Madrid en el COP de Madrid el pasado 12 de febrero de 2004.
on reading concerns the whole life span. On the basis of this new conception, this paper exa-
mines reading comprehension and literacy at various levels and types of knowledge. Additio-
nal questions are raised concerning the role of psychologists within this new approach.
KEY WORDS
otras que miden el grado con el que los estu- ral. Este antiguo problema se podría resumir
diantes dominan sus respectivos currículos en cómo los alumnos a pesar de que saben
(e.g., el estudio TIMSS, INCE, 1997), para leer, no comprenden lo que leen o, cómo a
finalizar en estos últimos años en actividades pesar de que dedican tiempo y esfuerzo a
dirigidas a evaluar cómo las personas somos desarrollar tareas escolares, no consiguen
capaces de aplicar conocimientos y destrezas adquirir nuevos conocimientos de manera
ya adquiridas a situaciones «más abiertas», eficiente. La base de esta cuestión es enorme-
más cotidianas y aptas para la vida (véase a mente compleja ya que alude a múltiples fac-
este respecto el informe PISA, INCE, 2003). tores que afectan a todo el sistema educativo.
Uno suele preguntarse cómo, al igual que
Actualmente, tanto la concepción existe un momento (aunque extraordinaria-
lectora como su evaluación, se han ampliado mente escueto en nuestra vida académica) en
hasta tal punto que hoy constituyen lo que se el que dedicamos todos nuestros recursos al
denomina como la «cultura lectora», como aprendizaje de la lectura y escritura, no exista
una habilidad básica sobre la que se desarro- otro igual en el que se instruya eficazmente
lla toda una actividad cultural, mediante la sobre cómo esos mismos mecanismos de la
cual las personas nos desenvolvemos y apli- lectura y escritura permitan acceder, com-
camos nuestros conocimientos y estrategias prender y aprender nuevos conocimientos,
lectoras en múltiples contextos de la vida dia- para extraer con éxito el contenido de cual-
ria de manera más o menos eficiente. La lec- quier fuente de información.
tura ya no se identifica tanto con la decodifi-
cación del material escrito y su comprensión Hace ya algún tiempo que apuntá-
literal o con aquella habilidad simplista de bamos alguna referencia en esta misma
leer y escribir per se, sino como sinónimo de dirección refiriéndonos a la lectura de la
una comprensión profunda, de saber utilizar prensa (véase León, 1996) o a la incidencia
y reflexionar sobre lo que se lee en base a de las nuevas tecnologías en el aprendizaje
alcanzar los objetivos y metas propuestos por (Vizcarro y León, 1998). En estos estudios
el lector, ampliar sus conocimientos e, inclu- se analizaban dos factores estrechamente
so, ser socialmente más participativo. Esta relacionados. Por un lado y como es bien
perspectiva de la lectura es la que asumire- sabido, la cultura icónica ha proliferado de
mos aquí y que identificamos como compe- manera exponencial en los últimos años y
tencia lectora. con ella, también crecen hábitos de ocio
alternativos como los videojuegos, Internet o
la televisión en detrimento de la lectura. Por
PUNTO DE PARTIDA otro, que la incidencia de estos factores cul-
turales de carácter icónico están afectando a
Esta estrecha relación entre lectura otros de carácter cognitivo y cuyo déficit
y comprensión nos plantea cuestiones acerca produce efectos tales como un esfuerzo des-
de cómo abordar un viejo problema aún no medido al leer o una incapacidad de concen-
resuelto y que atañe muy especialmente al tración. Este hecho puede estar incidiendo
ámbito académico, aunque también al labo- (aunque creemos que sólo en parte) en la
acceden a secundaria. Así seguiríamos en la que, en los últimos años, este problema
cadena educativa descendente hasta dar con adquiere una nueva cara con la llegada masi-
los «verdaderos» culpables: Los profesores va de nuevos alumnos cuyo problema, más
del primer curso de Primaria. Ellos son los que asociarse a una disfunción, es más bien la
que, a juicios de los demás profesores, tienen de integrase a una cultura y educación a la
la responsabilidad de enseñar todas estas que inicialmente no pertenecen como conse-
herramientas básicas de la lectura, sin reparar cuencia de una emigración obligada. En otros
en que tales estrategias básicas no son sufi- muchos casos, el problema viene de la propia
cientes para alcanzar un nivel de competencia desmotivación del alumno como consecuen-
adecuado y que su implicación, la implica- cia de un desajuste en el contexto donde se
ción de cada docente, resulta esencial para produce y de las demandas que se le solicitan.
ese largo y duro proceso de adquisición de
una competencia lectora eficiente. La con- Actualmente la lectura, lejos de esta
cepción educativa que se desprende de estos concepción educativa y psicológica que aca-
comentarios acerca de la lectura y de la bamos de señalar, se identifica como un pro-
forma en que se adquiere se asemeja a la ceso enormemente complejo, en el que entran
forma en que cargamos un nuevo programa en juego un importante grupos o niveles de
en nuestro ordenador. En otras palabras, la representación, tipos de conocimiento, estra-
lectura se asume como una actividad mera- tegias, motivación, planes de escritura,...), y
mente instrumental, que se «instala» de una que afecta a todo el ciclo vital. Es más, el
vez y para siempre en el primer curso de pri- proceso de lectura no se acaba nunca pues
maria y que, una vez instalada, debería fun- continua desarrollándose a lo largo de la
cionar de manera correcta en cualquier con- vida. Este proceso de lectura se complica aún
texto o situación. más pues también implica una amplia activi-
dad interactiva, ya sea entre la información
Excepto en contadísimos casos, la entrante y la disponible, ya sea entre los dis-
concepción más extendida que tienen los psi- tintos niveles de procesamiento (desde los
cólogos esta muy pareja a esta perspectiva más superficiales como el acceso léxico a
educativa. La lectura suele identificarse con otros que conllevan la actividad semántica y
el lenguaje y su desarrollo (adquisición lecto- significativa), ya sea entre los distintos tipos
ra), y sus desarreglos suelen asociarse a una de conocimiento y entre los distintos tipos de
disfunción o dificultad producida por causa comprensión. Todo para conseguir el valor
orgánica u conductual (e.g., dislexias). Se mas preciado de la lectura. Comprender lo
busca así una causa clínica que afecta a los que se lee y extraer así el significado.
niveles iniciales del desarrollo de la lectura,
en su fase de adquisición. Aunque es cierto
que puede ser uno de los problemas reales, su UNA CONCEPCIÓN ALTERNATIVA
repercusión y su representación resulta insig- DE LA LECTURA
nificante si la comparamos con todo el proce-
so de adquisición de la lectura. Esta concep- De manera general, las teorías y
ción queda aún más desplazada si admitimos modelos psicológicos más actuales tratan de
xiva, la información del texto con el resto de historia, a introducirnos dentro de su piel y
su conocimiento. Este nuevo conocimiento compartir sus sentimientos y emociones, sus
resultante es lo que denominamos modelo éxitos y fracasos. Este hecho se produce muy
mental que, en una situación ideal, resulta tempranamente, constituyendo un tipo de
aplicable a nuevas situaciones en las que el comprensión esencial en niños de corta edad.
lector puede resolver problemas no anticipa-
dos. Durante todo este proceso, el control de B) Comprensión orientada a una
la comprensión de las palabras y oraciones, la meta: Como también ocurre en el caso ante-
detección de problemas de comprensión y de rior, estos tipos de comprensión se nutren de
las acciones para resolverlos, se convierten un conocimiento social y cultural compartido
también en otros elementos indispensables sobre sentimientos y acciones humanas. En
que, denominados genéricamente conciencia ambos casos se trata de una comprensión de
metacognitiva, también forman parte de la los otros que se corresponde con la posición
estrategia de lectura. Esta estrategia metacog- defendida por Tomasello (1999), en la que
nitiva es de tal importancia que hace que el cada individuo puede imaginar por sí mismo
profesor o escritor interesado en mejorar e introducirse «en el zapato mental» del otro.
dichas estrategias en sus alumnos o lectores, Pero en este caso puede comprenderse la
deba conocerlas previamente. conducta humana del otro en términos de
motivos, propósitos e intenciones. Y esta
comprensión puede argumentarse en térmi-
TIPOS DE CONOCIMIENTOS nos de una explicación funcional y también
Y TIPOS DE COMPRENSIÓN causal. Los cuentos, fábulas, narraciones,
artículos de prensa y algunos textos disconti-
Cuando se habla de comprensión se nuos (e.g. campañas de sensibilización
suele aludir a una categoría única, a un con- social) suelen ser los tipos de textos que
cepto singular que encierra todas sus posibles generan este tipo de comprensión.
acepciones. Algo similar ocurre con el cono-
cimiento o con el texto. Pero en realidad C) Comprensión simbólica y con-
comprensión, texto y conocimiento son tér- ceptual: La comprensión también se relacio-
minos que engloban múltiples tipos. De los na con el lenguaje y sus significados, con la
tipos de comprensión posibles hemos optado estructura, organización y estilo del discurso
por seleccionar aquellos que están relaciona- oral y escrito, y también con otros símbolos
dos con la lectura y con los diferentes tipos que, como los religiosos o ideológicos, con-
de texto. Resaltamos los siguientes: dicionan la comprensión final de lo leído.
Implica, por tanto, todo tipo de conocimiento
A) Comprensión empática: Somos y teorías previas (conocimiento del discurso,
capaces de entender los sentimientos y emo- teorías implícitas e intuitivas, sesgos ideoló-
ciones de los otros, lo que conlleva una vida gicos, religiosos, deportivos,...), afectando
mental e intencional. Tanto es así, que esta también a todos los niveles del lenguaje
comprensión nos lleva irremediablemente a (léxico, gramática, conceptos, metáforas,
identificarnos con algún personaje de una moraleja,...). En relación con el discurso
escrito, este conocimiento implica una sensi- de analogías, como también induce el uso de
bilidad hacia su estructura, hacia los géneros un razonamiento lógico, analítico, objetivo,
del texto e incluso en aspectos más pragmáti- deductivo, simbólico y espacial. Los ensayos,
cos (e.g. estilo de escritura, objetivo del textos académicos, libros de textos y algunos
escritor, el uso de la ironía, el humor, del textos discontinuos (tablas, gráficos, mapas
sentido crítico,...). Por ello, puede decirse conceptuales, diagramas de flujo,..) son bue-
que este tipo de comprensión se genera ante nos ejemplos de los tipos de texto que facili-
cualquier tipo de texto, incluyendo también tan este tipo de comprensión.
los diálogos.
F) Comprensión metacognitiva: El
D) Comprensión episódica y espa- lector también conoce directamente su grado
cial: Este tipo de comprensión se relaciona de comprensión, lo que adquiere un valor
tanto con la información espacial descrita funcional, pues con esta información el indi-
semánticamente en el texto como con los viduo sabe a cada instante si el estudio de un
diferentes tipos de expresión gráfica explici- fenómeno requiere mayor o menor número
tada (fotos, dibujos, diagramas, esquemas, de recursos o grado de esfuerzo cognitivo.
tablas, mapas,...). Implica un tipo de conoci- Ello implica un metaconocimiento, aunque
miento sobre el mundo que demanda, ade- pueda haber situaciones en que este conoci-
más, de una orientación espacial y simbólica. miento no ocurra necesariamente. Por ejem-
Las partes descriptivas y espaciales de los plo, suele suceder que una persona tenga la
textos, las imágenes incluidas en textos conti- experiencia subjetiva de comprender, cuando
nuos como prácticamente todos los textos ésta, en realidad, no se alcance desde un
discontinuos (e.g., chistes, cómics, tablas, punto de vista informativo. Hay estudios que
diagramas, dibujos, mapas,...), inducen este han constatado la impresión de personas que
tipo de comprensión. dicen comprender perfectamente un texto en
el que, de hecho, hay dos cláusulas contradic-
E) Comprensión científica: En este torias (e.g., Glenberg, Wilkinson y Epstein,
tipo de comprensión prima la dimensión cog- 1982), o un supuesto físico que contiene una
nitiva. En ella, las explicaciones poseen un o más inconsistencias (Otero y Kintsch,
fuerte contenido causal y un importante 1992). Se trata, según estos autores, de una
grado de abstracción, basándose en teorías ilusión cognitiva, esto es, de una compren-
científicas bien construidas y hechos bien sión fenomenológica. Pero la comprensión (o
articulados que resultan coherentes. Implica incomprensión) metacognitiva va acompaña-
también opiniones con el fin de convencer, da de sentimientos. Así, existen sentimientos
persuadir o hacer creer, aspectos que ya se de confusión, de frustración o, incluso, de
trataron ampliamente en el capítulo segundo anticipación cuando nos enfrentamos a algo
de este libro, como fue el conocimiento que no comprendemos, o de satisfacción y
explícito. Teorías, modelos científicos o el confianza cuando tenemos la sensación de
conocimiento relativo a muchos dominios haber comprendido una información determi-
específicos pertenecen a este grupo. Este tipo nada. Este conocimiento se adquiere como
de comprensión promueve un buen número fruto de la información autobiográfica acu-
mulada acerca de nuestras propias cognicio- dir e influir, y relacionar lo que leen los
nes, sobre la forma de orientarla y sobre el alumnos con su propio conocimiento y expe-
control que se tiene de las mismas. Se produ- riencias.
ce con todo tipo de textos.
Vista de esta manera, la competen-
cia lectora a la que nos referimos aplica y uti-
CONCEPCIÓN DE COMPETENCIA liza el conocimiento disponible de manera
LECTORA muy versátil y eficiente en un amplio rango
de contextos que se extienden más allá de lo
Si a la comprensión se le atribuye la educativo. Esta competencia debe permitir
propiedad de dotar de coherencia a lo leído o desarrollar diferentes tipos de tareas de lectu-
de construir un nivel determinado de repre- ra, tales como la formación de una compren-
sentación mental, a la competencia lectora se sión amplia y general de lo que se lee, recu-
le vincula con el conjunto de habilidades perar información específica, generar una
básicas y conocimientos que se requieren interpretación o una reflexión sobre el conte-
para ser eficiente en la vida diaria. De esta nido, o sobre la forma del texto.
manera, la competencia lectora eficiente
depende de la habilidad para decodificar tex-
tos, para comprender el significado de las LA IMPLICACIÓN DE UN PUZZLE
palabras o la propia estructura gramatical INTERACTIVO DE LA LECTURA
donde se sostiene para obtener, al menos, un
nivel superficial básico. Pero, de igual mane- La lectura, vista desde nuestro
ra, esta competencia eficiente también depen- punto de vista, se produce como consecuen-
de de la habilidad para leer entre líneas, de cia de una comprensión significativa y se rea-
reconocer los propósitos o la intención del liza a través de una competencia efectiva. En
texto, de identificar los recursos que ha utili- estos términos, la lectura se concibe hoy
zado el escritor para expresar la información como un proceso mental complejo e interac-
o interpretar el significado de las estructuras tivo, a través del cual el lector construye acti-
y características específicas del texto, como vamente una representación del significado,
es el género. Esta competencia, por tanto, poniendo en relación las ideas contenidas en
abarca tanto la habilidad para comprender e el texto con sus conocimientos previos y con
interpretar una amplia variedad de tipos de su propia actividad reflexiva (León, 1996,
texto como establecer las relaciones con el 1999, 2003). La comprensión final del texto
contexto en que aparecen. El lector debe ser viene entonces producida por la conjunción
también capaz de establecer una cadena de de, al menos, tres factores. De un lado, las
razonamiento, comparar y contrastar infor- características del material escrito, expresa-
mación del texto, diseñar inferencias, identi- das no sólo en los diferentes niveles lingüísti-
ficar y comprender la ironía, la metáfora y el cos, sino también por su contenido y su
humor, detectar matices y sutilezas del len- estructura. Así, en este lugar podríamos
guaje, reconocer las diversas maneras en que situar todo lo que dependiese del texto y del
los textos pueden ser elaborados para persua- escritor para optimizar su comunicación
(véase figura 1). Dentro de este apartado se que utiliza para extraer dicha información del
introducirían aquellas técnicas que resultasen texto. Este apartado incluiría las estrategias
útiles para resaltar la estructura del texto, que el lector aplica al enfrentarse a la lectura
simplificar su contenido o mejorar su organi- del pasaje. Esta destreza del lector no es algo
zación. Todo ello redundaría en una mejor que se adquiera espontáneamente, sino que se
activación de los conocimientos previos del asienta con la práctica, en la que paulatina-
lector, a la vez que permitiría la construcción mente se van automatizando los procesos
de la macroestructura del mismo. Por otro superficiales y ello va a permitir una mayor
lado, se sitúan las características del lector, dedicación de los recursos cognitivos a la
sus conocimientos y los procesos mentales tarea de comprensión. Esta habilidad, lejos
que debe realizar para generar un nivel de de ser un proceso cerrado, continúa desarro-
representación mental lo más rico y coheren- llándose en la edad adulta con la adquisición
te posible, así como las habilidades lectoras progresiva de nuevos conocimientos.
CONTEXTO
-PERS ONAL
-PU BLIC O
-EDUC A C I N
-O C U PAC IONAL
C O MPETE N CIA
ACT IVIDA D ES
hipótesis y, en la medida en que se produzca texto. Así, en el caso del lector competente,
esta última, el sentido se modifica. También las estrategias están encaminadas a generar o
las teorías más recientes sobre los procesos activar el conocimiento que posee el sujeto,
de inferencias que realizamos los lectores que tal conocimiento sea el adecuado y que
enfatizan este carácter activo del proceso de sea capaz de hacer un uso estratégico de
lectura (e.g., Graesser, Singer y Trabasso, dicho conocimiento.
1994; León, 1999, 2003; León, Peñalba y
Escudero, 2002). La presencia de estos tipos de estra-
tegias se muestra también en trabajos recien-
Desde hace ya algún tiempo, un tes (León, 1991; León y Carretero, 1995;
importante número de investigaciones se ha León y Peñalba, 2002; Montanero y León,
orientado a analizar y clasificar diferentes 2002). Los resultados obtenidos en estos
estrategias que los lectores competentes y no estudios indican que las diferencias esencia-
tan competentes desarrollan ante la lectura y les entre las respuestas emitidas por los adul-
la comprensión de un texto. Estos estudios tos expertos y alumnos de bachillerato apare-
han detectado el uso de distintas estrategias cen en la calidad de las respuestas, siendo las
en todos los niveles educativos. Así, por un del experto más selectivas respecto a la
lado, se han identificado estrategias propias macroestructura del texto, mejor organizadas
de los lectores competentes y que han sido desde el punto de vista de la estructura origi-
denominadas de diferentes formas tales como nal del pasaje y más ricas en elaboraciones e
estrategias organizativas (Just y Carpenter, inferencias explicativas.
1987), de comprensión (Spring, 1985), signi-
ficativa (Loman y Mayer, 1983), asimilativa También el conocimiento implícito
(Mayer, 1985), de conocimiento (Green, sobre la estructura del texto se revela como
1995) estructural (Meyer, 1984) o estrategia uno de los factores claves responsables de
cualitativa (León,1991). Por otro, el lector esta superioridad. El lector maduro parece
inmaduro presenta otros tipos de estrategias, utilizar hábilmente este conocimiento, tanto
como la estrategia mecánica (Loman y en la representación de la nueva información
Mayer, 1983), cuantitativa (León, 1991), en como en la recuperación de la misma, hacién-
lista por defecto (Meyer, 1984) ó ante tareas dose más resistente el recuerdo con el paso
de resumen, la estrategia suprimir y copiar del tiempo. Estos resultados coinciden con
propuesta por Brown, Day y Jones (1983). otros estudios similares. Así, por ejemplo,
Ambos grupos de estrategias difieren en la cuando la tarea consiste en solicitar a los lec-
forma en que los lectores generan una repre- tores que procesen palabras con múltiples
sentación mental de los significados textuales significados, los lectores más hábiles suelen
y, especialmente, en la comprensión organi- ejecutar la tarea, esto es, detectan más rápida-
zativa en la que está estructurado el texto. mente el significado correcto de la palabra en
Estos análisis de estrategias sugieren que los el contexto frente a los lectores menos efi-
buenos lectores se muestran más activos que cientes. Esto se debe, al menos en parte, a
los lectores con pobre capacidad de compren- que los buenos lectores suprimen más eficaz-
sión cuando procesan la información del mente los significados irrelevantes.
capaz de integrar diferentes tipos de conoci- Just, M.A. y Carpenter, P.A. (1987).
miento (semántico junto con gráficos e imá- The psychology of reading and language
genes), o de saber expresar lo leído adecuán- comprehension. Newton, MA: Allyn and
dolo al lenguaje y al nivel de conocimientos Bacon.
que posee el lector. Sólo así seremos capaces
de innovar y adecuar el papel del psicólogo a León, J.A. (1991). Intervención en
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