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REFORMA SANITARIA
EN LA DÉCADA DE LOS 80
Juan Carlos Duro Martínez
PSICOLOGÍA Y REFORMA SANITARIA
EN LA DÉCADA DE LOS 80
2
Juan Carlos Duro Martínez
Índice
Presentación ............................................................................................ 5
Prólogo . ...................................................................................................7
Introducción............................................................................................13
El contexto político y profesional.....................................................14
La psiquiatría ‘antipsiquiátrica’ (1971-1983)...........................................14
El interés social por la psicología, la salud y la salud mental................. 19
El cambio desde la oposición socialista (1979-1982)........................ 21
El debate sanitario en el PSOE..............................................................21
Una Proposición No de Ley sobre Servicios de Psiquiatría (1981)........ 22
I Jornadas socialistas de salud mental (1981)........................................22
Sectores políticos enfrentados en el Gobierno.......................................23
Proyecto de Atención Primaria de Salud del Insalud (1983)................... 25
El cambio psiquiátrico...........................................................................26
Jornadas Internacionales sobre Planificación en Salud Mental y 272
Reforma Psiquiátrica...............................................................................27
La Comisión Ministerial para la Reforma Psiquiátrica (1983-1985)........ 28
La Asociación Española de Neuropsiquiatría (1983-1990)..................... 32
La Reforma Psiquiátrica en Madrid (1981-1990).................................... 38
El ‘consenso’ con la psiquiatría biologicista............................................48
La Asociación Madrileña de Salud Mental..............................................49
Jornadas sobre psicoterapia en instituciones públicas (1988)............... 49
El discurso de los psicólogos profesionales. .................................50
Apoyo a los Centros de Promoción de la Salud.....................................50
Primer Seminario Internacional de Psicología de la Salud (1984).......... 53
I Congreso del COP (1984).....................................................................54
Los psicólogos en la política sanitaria....................................................58
Criterios Generales para la Ley de Bases de Sanidad (1983)................ 62
Sobre el Documento de la Comisión Ministerial para la
Reforma Psiquiátrica...............................................................................65
Conferencia Europea de Educación para la Salud (1987)...................... 68
Presentación
Corría el año 1976, yo era entonces un alumno de primero de psicología en una universidad
convulsionada por la situación política y las huelgas de los profesores no numerarios. Un grupo
de compañeros decidimos hacer un trabajo sobre el tratamiento de la enfermedad mental en el
Hospital de Leganés, que por entonces iniciaba el proceso de reforma psiquiátrica en Madrid.
Las entrevistas que realizamos a los psiquiatras fue nuestro primer contacto con este movi-
miento. Aún recuerdo el impacto y la admiración que nos produjeron sus palabras.
Como todo movimiento de reforma social tenía algunos planteamientos cercanos a la uto-
pía, como no puede ser de otra manera, y hoy treinta y cinco años después, se ha alcanzado
muchos objetivos y se han puesto en marcha dispositivos como los Centros de Rehabilitación
Psicosocial (CRPS) y los Centros de Rehabilitación Laboral (CRL) que facilitan la integración de
los pacientes en la sociedad. Pero aún faltan muchos otros por alcanzar, y la crisis económica
se ha cebado con especial crudeza en los recursos de Salud Mental. España está muy debajo
de la media de la OCDE en las tasas de profesionales de Salud Mental por habitante, la inte-
gración de los Centros de Salud Mental en los hospitales coarta la perspectiva comunitaria, la
coordinación sociosanitaria no pasa de experiencias pilotos… y mientras, las incidencias de los
trastornos mentales es mayor que nunca, las bajas laborales por motivos psicológicos son la
segunda en frecuencia, los suicidios han aumentado considerablemente,…
Por todo ello, es especialmente oportuno la publicación de esta monografía, escrita además
por un testigo muy cercano de la reforma.
La labor de recopilación y conceptualización realizada por Juan Carlos Duro ha sido excep-
cional, dando una amplia perspectiva del movimiento, y centrándose en la labor de los psicó-
logos que a pesar de ser una profesión aún incipiente en España, supieron desempeñar una
función primordial. Estoy seguro que en estas páginas encontraremos aliento para emprender
nuevos caminos en el abordaje de los trastornos mentales porque “qué dirían los dioses si de-
tenemos nuestro paso con lo poco que hemos avanzado” (Lluís Llach).
Prólogo
Retornos de lo vivo lejano es una de las obras poéticas de Rafael Alberti en el exilio, la
huella de lo vivido que guarda su memoria. Retornos de lo vivo lejano es también la Mono-
grafía Profesional Psicología y Reforma Sanitaria en la década de los 80 que nos ofrece
Juan Carlos Duro, la huella que nos trae la memoria emocionada de “lo vivo lejano”. Es
tiempo lejano porque los que lo hemos vivido y compartido con él sus avatares en primera
persona nos hemos hecho ya mayores. Pero es también retorno de un tiempo que sigue
vivo, porque muchos de aquellos sucesos que retornan en la memoria histórica de la Mono-
grafía son ya parte inseparable de nuestras vidas, de nuestra íntima biografía histórica, de
ese río de la vida personal y profesional en el que seguimos navegando, porque muchos de
los proyectos, ilusiones, incluso utopías, entonces abrigados, siguen vivos, aunque también
hemos de reconocer que algunos se nos han perdido no se sabe dónde, otros nos han sido
arrebatados y otros han sucumbido a la desilusión y al desencanto. El retorno de lo vivo le-
jano que nos trae la Monografía es en todo caso una estupenda oportunidad para desvelar
y reafirmar el sentido de lo que sigue vivo y un incentivo para revivir ilusiones y utopías que
se nos habían olvidado.
Dice mucho y bueno de Juan Carlos el hecho de que haya sido él mismo quien nos pide
el prólogo, a sabiendas de que en aquel tiempo lejano, aún compartiendo el mismo empeño
por situar a la psicología en las coordenadas de la vida social y profesional, lo hacíamos,
a veces, desde posiciones y ángulos diferentes. Es en cualquier caso un privilegio para
nosotros prologar esta Monografía. Es un excelente documento que con seguridad cual-
quier colega interesado en la historia de su profesión disfrutará de su lectura, además de
encontrarla útil por ajustarse con rigor a los hechos que acontecieron. Su autor es garantía
de lo que decimos al reunir tres cualidades difíciles de encontrar: la de ser testigo directo
y comprometido de los acontecimientos que se detallan en esta monografía, la de ser un
observador minucioso y la de ser también un excelente y documentado relator. Gracias por
este regalo que nos ofreces a miles de psicólogos ávidos por la historia de nuestra profe-
sión y por los avatares del contexto social y político que condicionaron en gran medida la
práctica y el desarrollo en nuestro país de esta apasionante disciplina y profesión que es la
Psicología, y su lugar en el contexto de las transformaciones sociales, políticas y profesio-
nales que afectaron entonces al sistema de salud.
Es tal el detalle con el que el autor nos cuenta la movilización crítica de una buena parte
de la psiquiatría, las controversias entre los diferentes grupos, las diatribas entre los críticos
y los oficialistas, entre los “hospitalarios” y los “comunitarios”, que nos parece que lo esta-
mos viendo, que lo lejano “parece que fue ayer”.
Junto con los planteamientos críticos de la práctica profesional e institucional, y aún an-
tes de los momentos más álgidos de la reforma psiquiátrica y sanitaria, venía ya desde la
década anterior señalándose, no tanto en el campo de la psiquiatría como en el de algunos
psicólogos, la revisión crítica del propio modelo psicopatológico y del binomio “salud men-
tal-enfermedad mental”, una revisión inspirada en buena parte en El mito de la enfermedad
mental y La fabricación de la locura, de Thomas Szasz y, en el ámbito de la psicología, en A
psychological approach to abnormal behavior, de Ullman y Krasner. En el reciente libro ‘Los
problemas psicológicos no son enfermedades. Una crítica radical de la psicopatología’, no-
sotros mismos hemos querido hacer vivo de nuevo lo lejano de aquella revisión crítica que
entonces emergía, que inspiraba una cierta conciencia crítica en quienes protagonizaban
de manera más directa la reforma psiquiátrica y sanitaria, que suscitaba la necesidad de un
cambio de paradigma y de abrir la perspectiva psiquiátrica y biomédica de los problemas de
salud mental hacia otras disciplinas, como la psicología, y hacia el trabajo interdisciplinar, y
que iba a seguir siendo hasta hoy un tema de viva controversia.
La emergencia de esta nueva visión dio lugar incluso a un cierto activismo docente de
la mano de psicólogos en materia de Promoción y Educación para la Salud, de trabajo en
equipo, de intervención comunitaria y psicosocial dirigido a enfermeras, médicos y respon-
sables de centros de salud en un gran número de Comunidades Autónomas. Era una mane-
ra de contribuir a la reforma sanitaria con matices nuevos y diferentes de los que entonces
tenía la reforma psiquiátrica. La relevancia especial que tenía la perspectiva de la salud
pública nos desvelaba la importancia que las condiciones de vida y los comportamientos
y estilos de vida tienen en la nueva morbimortalidad y en los propios problemas de salud
mental. Esta perspectiva nos confrontaba entonces como ahora con la falta de equidad y
con la desigualdad en salud, dos asuntos que tendrían a partir de entonces un protagonis-
Dentro de este enfoque, la OMS promovía en 1977 una Conferencia Mundial de la Salud
con el objetivo estratégico Salud para Todos, y en 1978 la Declaración de Alma Ata subra-
yaba el papel clave que la atención primaria debe tener en el seno del sistema de salud y
del sistema socioeconómico para la protección y la promoción de la salud. Entre el conjunto
de actividades que comprende la atención primaria de salud, destaca la Promoción de la
Salud y la Educación para la Salud, dos ámbitos en los que la psicología iba a tener un pa-
pel importante a lo largo de esos años. En este contexto, se va configurando una práctica
y una disciplina en el ámbito de la Psicología: la Psicología de la Salud, a la que también
se dedica un amplio espacio en la Monografía. Para muchos psicólogos de entonces, en-
tre los que nos contamos, la Psicología de la Salud constituía un campo de intervención
no vinculado a la tradicional “salud mental”, y mucho menos a la psicopatología, en el que
los métodos y técnicas de la Psicología podían hacer aportaciones útiles en relación con
los comportamientos y estilos de vida asociados con los fenómenos de salud-enfermedad
(obesidad, asma bronquial, cáncer, salud buco-dental, diabetes, enfermedades cardiovas-
culares,…). Es una práctica que amplifica el potencial de la Psicología y de los psicólogos si
bien no desempeña un papel relevante en la reforma sanitaria durante esta década. Desa-
rrollos posteriores en el ámbito académico y en algunas experiencias acotadas en el ámbito
hospitalario irán configurando definitivamente este campo.
contraste crítico y alternativo al modelo psicopatológico que era por entonces hegemónico.
Por otra parte, muchas de las experiencias que se platearon en algunos CPS a la luz de
ese modelo pretendían ser experiencias sustentadas en lo que entendíamos que era más
propio y genuino de los paradigmas básicos de la Psicología.
Por último, la Monografía pone también sobre la mesa, en nuestra opinión, un debate que
estaba entonces abierto y que sigue abierto, el nivel específico de análisis, de comprensión
y de intervención de los problemas psicológicos que afligen a tantas personas y que vienen
siendo velados históricamente por el modelo psicopatológico que les secuestra su radical
significación psicológica al considerarlos como enfermedades o desequilibrios bioquímicos.
Como recordar es volver a vivir, revivamos con esta Monografía tiempos, hechos e ilu-
siones del pasado para seguir trazando la senda que ha de recorrer la psicología y los psi-
cólogos en la sociedad y en el sistema de salud del presente y del futuro.