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ESPACIO DE COLOR Y FORMATOS DE

IMAGEN FOTOGRÁFICA

Rango dinámico

En primer lugar vamos a definir el concepto de rango dinámico, que no es


un concepto exclusivo de la Fotografía, pero en el ámbito que nos ocupa
puede definirse como la cantidad de niveles de luminosidad que nuestra
cámara es capaz de registrar con detalle en una sola toma.  
 
Se podría decir que describe el rango de tonos en la escena que estás
fotografiando. Una escena con un alto rango dinámico tendrá una gran
diferencia de brillo entre las zonas más oscuras y las más brillantes. Los
fotógrafos a menudo hablan del “contraste”.

Los fabricantes de cámaras también hablan del “rango dinámico” de sus


sensores. En este caso, se trata de la capacidad del sensor de captar los
máximos tonos posibles.

En este punto hay que distinguir entre rango dinámico de la escena y rango
dinámico de la cámara. El primero se refiere a la diferencia de luminosidad
existente en el entorno que queremos fotografiar y depende de cómo se
distribuye la luz en él, el segundo es la capacidad de nuestra máquina para
registrar a la vez el detalle en las sombras y en las luces. Como te imaginas,
los problemas aparecen cuando el RD de la escena es mayor que el RD de
la cámara con la que pretendemos fotografiarla.

Espacio de color

El espectro de color hace referencia a la capacidad de nuestra vista de captar


y reconocer la información cromática. En el caso del ojo humano, este es
mucho mayor que el que puede darnos cualquier pantalla. Por ello, para
tener una referencia del espectro de color que es capaz de reconocer nuestro
monitor, existen varias normas. Las más populares son sRGB IEC61966-
2.1 y Adobe RGB 1998.
sRGB fue definido por las empresas Hewlett Packard y Microsoft
pensando sobre todo en las fotografías que se visualizan por Internet, ya
que asume un promedio del espectro de color que suelen reconocer los
monitores, con la salvedad de aquellos de gama alta que lo superan.

AdobeRGB está especialmente indicado para la edición de fotografías e


imágenes de alta calidad y para su posterior conversión a CMYK. CMYK
es ni más ni menos que el modelo de gestión de color utilizado por la
mayoría de imprentas. Por ello, AdobeRGB parece más apropiado para
gestionar fotografías que van a ser impresas para publicaciones,
exposiciones, etc.

Se podría inferir que si AdobeRGB abarca más espectro de color será más
adecuado. Sin embargo hay que tener en cuenta más factores. Uno de ellos
es el equipo que utilizamos para revelar nuestras fotos.
Un monitor de gama media, o cualquier monitor de portátil sólo es capaz
de reconocer el espacio sRGB. Si utilizamos esos monitores junto con un
perfil AdobeRGB para nuestras fotos, estaríamos viendo una
representación incompleta de la imagen, ya que parte del color quedará
alejado de lo que nuestro monitor es capaz de mostrarnos. Entre otras
cosas, perderíamos fiabilidad en los colores graduados, por ejemplo, los
cielos, o la piel.
Por tanto, con sRGB veremos menos espectro de color, pero lo que
veremos en el monitor será más fiel a la realidad.

Si disponemos de buenos monitores capaces de representar más gama de


color del espectro visible podemos trabajar con Adobe RGB pero despúes si
lo vamos a publicar en internet sería conveniente pasarlo a sRGB, pues los
servicios web de publicación de fotografías dan por hecho que trabajamos
en sRGB.

Por supuesto, si el destino de nuestras fotografías es ser impresas, es


conveniente trabajar en todo momento en Adobe RGB, y al final convertir
la fotografía al espacio de color específico de la impresora a la que vaya
destinado nuestro archivo. Si imprimimos en un laboratorio fotográfico,
deberemos pedirles el perfil de color de la impresora destino, para realizar la
conversión final en nuestro programa de tratamiento fotográfico.
FORMATOS DE IMAGEN

RAW

No es propiamente un formato de archivo, sino un término genérico que


designa los diversos formatos utilizados para almacenar los datos brutos
capturados por el sensor de una cámara digital. Es un negativo digital, es la
imagen sin procesar y sin comprimir, se puede realizar un mayor nivel de
ajustes que en el formato comprimido. Ocupa mayor espacio en
almacenamiento que el JPEG.

Cada fabricante ha desarrollado un formato de archivo propio para el modo


de captura RAW. Canon usa su formato CRW, y Nikon usa el formato
NEF. Como ninguno de ellos es un formato de imagen estándar, se
necesita convertir los archivos en el ordenador con un programa que se
suministra con la cámara para poder editar la imagen.

El archivo RAW contiene los datos en bruto de los píxeles adquiridos, sin
que se produzca en la cámara el procesamiento de la imagen postcaptura.

Luego, en el ordenador, se pueden compensar muchas deficiencias


mediante el procesado posterior de los datos (revelado digital): es posible
variar la compensación de la exposición, el balance de blancos, la
temperatura de color, etc. Una vez concluidos los ajustes de la imagen en el
ordenador, la imagen se graba en formato TIFF o JPEG, que se puede
abrir con la inmensa mayoría de programas.

El formato RAW tiene las siguientes características:

• Las imágenes se registran en la tarjeta de memoria sin revelar. El


archivo RAW, no se puede imprimir ni visualizar directamente
• Permite un control total sobre el proceso de revelado de la imagen,
pudiendo ajustarse a posteriori gran número de parámetros como el
balance de blancos o la nitidez. Al mismo tiempo, implica una carga
de trabajo adicional
• Las imágenes tienen una profundidad de color de 12 ó 14 bits, lo que
permite producir fotografías de 16 bits por canal
• El tamaño del archivo es grande, por lo que la cámara tarda más
tiempo en grabar las imágenes y caben menos en la tarjeta de
memoria
TIFF

Es un formato que se ha convertido en un estándar para almacenar imágenes


optimizadas y de alta calidad. Cuenta con una gran compatibilidad entre las
diversas plataformas (MAC, Windows, Linux...) La mayoría de programas de
edición de imágenes lo reconoce sin problemas. En este formato es posible
guardar imágenes digitales de alta calidad sin perder ninguna de sus
características: posibilidad de guardar capas, etc.
Los archivos TIFF se pueden comprimir con una rutina de compresión llamada
LZW que apenas deteriora la calidad, pero que tampoco consigue un gran ahorro
de espacio. Esta rutina se basa en la detección de secuencias de píxeles del
mismo color y se reduce el tamaño total del código. El archivo
no perderá calidad aunque se abra y se vuelva a guardar.

Las principales características del formato TIF son las siguientes:

• Se utiliza para editar y realizar ajustes finos en imágenes ya reveladas


• Las imágenes pueden tener una profundidad de color de 8 ó 16 bits
por canal
• Permite la utilización de técnicas de compresión para reducir el
tamaño del archivo. Lo más habitual es utilizar algoritmos de
compresión sin pérdidas, aunque las versiones más recientes admiten
también algoritmos con pérdidas semejantes al JPEG
• Los archivos son muy grandes, (aunque algo más pequeños que el
formato PSD debido a la compresión de datos) pues además de la
imagen pueden contener otra información como canales o capas

PSD

Es el formato en el que se guardan por defecto las imágenes en Photoshop;


admite hasta 48 bits de color y permite guardar las imágenes con todas sus
capas, canales alfa, etc. Puede haber dificultades de compatibilidad para
usar este formato con otros programas.

El formato PSD es un formato de trabajo que se utiliza durante el revelado


y pos procesado de imágenes, pero no es adecuado para la publicación y
distribución de las versiones finales de nuestras fotografías.

Las principales características del formato PSD son las siguientes:

• Se utiliza para editar y realizar ajustes finos en imágenes ya reveladas


• Las imágenes pueden tener una profundidad de color de 8 ó 16 bits
por canal
• No utiliza técnicas de compresión para reducir el tamaño del archivo
• Los archivos son muy grandes pues además de la imagen pueden
contener otra información como canales o capas

JPEG
(Joint Photographic Experts Group)

La práctica totalidad de cámaras digitales almacenan imágenes en este


formato y a veces trabajan con él en exclusiva. Es un archivo con pérdida de
calidad, por lo que no es en absoluto recomendable como archivo maestro,
pero se ha impuesto por su extraordinaria capacidad de compresión,
pudiendo comprimirse una imagen hasta la décima parte de su tamaño sin
que el ojo sea capaz de apreciarlo
Y en la compresión siempre se produce un deterioro en la calidad de la
imagen apreciable en forma de degradados suaves.
Si las imágenes se vuelven a abrir y guardar, el nuevo archivo se comprime
más y la calidad se resiente. En los programas se puede controlar la
compresión en una escala del 1 al 10 o del 1 al 100 en los mejores
programas, (entrando en las opciones de la ventana «Guardar como»). Los
ajustes más altos eliminan menos información y mantienen mayor calidad,
pero los porcentajes de compresión no son tan espectaculares.

Las principales características del formato JPEG son:

• El revelado de las imágenes lo realiza la propia cámara, registrándose


en la tarjeta de memoria las fotografías ya reveladas y listas para
usarse
• Proporciona inmediatez y no aumenta la carga de trabajo. Muchos
fotógrafos no tienen el tiempo o la voluntad para revelar las imágenes
de forma manual
• Las imágenes tienen una profundidad de color de 8 bits por canal
• Utiliza un algoritmo de compresión con pérdidas para reducir el
tamaño de los archivos. Esto significa que al descomprimir o
visualizar la imagen no se obtiene exactamente la misma imagen de
la que se partía antes de la compresión
• Para muchas aplicaciones la calidad de imagen es más que suficiente
(fotografía social, fotoperiodismo, etc.)
• Los archivos son pequeños y, por lo tanto, caben más en la tarjeta de
memoria (o en los discos en los que se archivan) y son más fáciles de
transmitir
• Las cámaras son más rápidas cuando trabajan en formato JPEG, ya
que emplean menos tiempo en grabar la imagen en la tarjeta de
memoria

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