Dialogar de arquitectura de Colombia desea mencionar “arquitectura
construida en el territorio colombiano”. Allí no hubo arquitectura propiamente esa, el espacio habitable lo ofertó la topografía misma. Con esta frase inicia la lectura y realmente captó de inmediato mi atención, porque Colombia, como todo tiene un pasado, tiene un principio, en donde las personas tuvieron que usar de su conocimiento para adaptar este terreno a sus necesidades, por esa razón Colombia significa dialogar de los hechos construidos en los límites recientes de la región nacional cuya delimitación es subjetivamente vigente. Las fronteras recientes de Colombia definen las fronteras de un territorio en el cual se han sucedido los acontecimientos que conforman la historia del territorio. Una descripción fácil del espacio geográfico de Colombia viabiliza ver una clara separación en 2 monumentales segmentos por una curva imaginaria que sigue el borde oriental de la Cordillera Oriental, a partir de los parámetros con Venezuela, al norte, hasta inmediaciones de la frontera con Ecuador, al sur como nos dice el texto. De ellos el más extenso, el valle del flujo de agua Magdalena uno de los más emblemáticos, crea la incisión más fuerte constituyéndose en un eje vertical de continuidad sur-norte casi ininterrumpida. Al principio del siglo XVI, se marcó por el arribo de los colonizadores de Europa y por su siguiente ocupación de la región. En dicho año se inicia el lapso conocido en arquitectura con el nombre de “republicano”, el cual concluye, además hipotéticamente, cerca de 1930 una vez que se inicia un último lapso, el “moderno”, que se extiende hasta el presente. Lo cual procede de un lapso se funde en el siguiente en unos umbrales de transición y frecuentemente no desaparece puesto que pervive en las tradiciones de las civilizaciones reconocidas. Es de gran importancia sabes que las influencias que llegaban del exterior eran sumamente importantes a la hora de habla de la arquitectura, puesto que estos traían consigo nuevas visiones y conocimiento que ya se había realizado en otras partes y de ese modo llevarlas a cabo en el territorio Colombia, por eso la arquitectura colombiana estuvo influenciada desde un principio. Un paso muy importante al que se llegó fue la modernización, este realmente fue de gran impacto cultural ocurrido en Colombia, el cual también estuvo acompañado de otros conocimientos de ocupación territorial caracterizados por la extensión de nuevos focos urbanos en los denominados “territorios nacionales”. Ha sido además el lapso de la “urbanización” de la región, entendida como el crecimiento poblacional que vive en los centros. Esta nueva conquista de la región por la modernización se fue convertido en pasado todo lo anterior que empezó aquel otro presente, en el cual aún se está y que lleva apenas algo bastante más de sesenta años de realidad. Tiempo que parece poco, pero, durante todo ese lapso se llevaron a cabo muchas obras que e incluso hoy en día siguen preservadas, porque ya hacer parte del patrimonio colombiano. En la arquitectura colombiana los grupos indígena también jugaron un papel muy importante, ya que estos prácticamente dieron el primer paso y asentamiento en la región. De la arquitectura construida por los conjuntos nativos existentes en el instante de la llegada de los españoles han quedado pocos vestigios materiales rescatados, entre ellos los ya mencionados de San Agustín, Tierradentro, Pueblito y Metrópoli Perdida. Las descripciones de los poblados muiscas en la Sabana de Bogotá otorgan cuenta de una lógica especial de asentamiento territorial y de creación de casas. Hay, además, otros vestigios de asentamientos y casas que apenas se rescatan por medio del estudio arqueológica y proporcionan cuenta parcial de las propiedades de las casas que los ocuparon. Realmente esto es muy deplorable, porque muchas veces los españoles llegaron simplemente a saquear todos esos tesoros que poseían nuestros grupos, por eso destrozaban todas las construcciones arquitectónicas, aún que actualmente aún haya, muchas de estas no esta en buen estado, e incluso los mismos colombianos les dio por ir y buscar a ver que encontraban de valor para llevarse. Eso es no tener sentido de pertenencia con tu país. La modernidad transformó por completo los métodos de habitar y de hacer metrópoli y arquitectura en Colombia. La fundación de la Sociedad De Colombia de Arquitectos y de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá, en 1934 y 1936 respectivamente, marcaron el principio de un desplazamiento modernizador que hacia 1950 ya estaba en una primera etapa de consolidación. Desde dicha década la arquitectura actualizada de Colombia se expandió y diversificó y de eso quedaron ejemplos notables en fundamentalmente todos los campos de actividad en Colombia: casa, enseñanza, salud, recreación, enseñanza y cultura, negocio e industria. Es desde 1950 una vez que la modernización se adoptó en Colombia como señal de avance y confort. En las casas se emplearon las novedosas técnicas constructivas del concreto, el acero y el vidrio, combinadas con espacios y maneras ordenados funcionalmente y concebidos estéticamente. A esto último se sumó el objetivo de cambio tecnológico como apoyo imprescindible para la ejecución de las ideas modernas. La utilización del metal y del vidrio y de las novedosas técnicas en instalaciones eléctricas, hidráulicas y sanitarias se incorporó en este cambio, con la consiguiente aparición y extensión de industrias productoras de materiales y artefactos. Las técnicas artesanales clásicos no desaparecieron; por otro lado, se sumaron a las novedosas técnicas en una simbiosis que ha perdurado en la era.