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42 LOS PARTIDOS POPULISTAS DE DERECHA! MEINDERT FENNEMA. 1. Introduccién. 2. La derecha radical como extrema derecha. 2.1. \deologia fascista. 2.1.1 Nacionalismo étnico, 2.1.2. Antimaterialismo, 2.1.3. Contra la democracia, 2.1.4, Teoria de la conspiracién, 3. La derecha radical como radicalismo politico. 4. La derecha radical ‘como populismo. 5. Los votantes. 5.1. La hipétesis de la desintegracién social. 5.2, La hi- pétesis de la competencia étnica. 6. Hay algtin futuro para la derecha radical? 6.1. Popu- lismo de derechas. 7. Bibliografia. 1, Introduccién Desde principios de la década de 1980 los partidos antiinmigracién han tenido un éxi- to creciente en las elecciones nacionales y europeas. Algunos de estos partidos, como el Mo- vimiento Social Italiano-Alleanza Nazionale (MsI-AN)? fundado en 1946, el Front National francés (1972), el belga Viaams Blok (1978) y el holandés Centrumpartij (1980), han emer- gido de grupisculos neofascistas, Este origen fija la tesis de continuidad implicita en el con cepto de extrema derecha. Pero no todos los partidos que se muestran contrarios a la inmi- gracién son descendientes de clubes y camarillas neofascistas. El partido aleman Republika- ner, por ejemplo, fue fundado por miembros de la Unién Social-Cristiana (csu). El Partido Liberal Austriaco (FPO) se desarroll6 a partir de la Verband der Unabhdngigen (Asociacion de Independientes) fundada en 1949 por dos periodistas liberales que querian marcar las dis- tancias respecto a los Lager socialistas y catélicos. Otros partidos antiinmigracién, como el danés Fremskridtspartiet (Partido del Progreso), fundado en 1972, y el sueco Ny Demokrati (Nueva Democracia), fundado en 1991, estan basados en sentimientos contrarios a los im- puestos y a las instituciones. La mayorfa de sus lideres no tienen relacién alguna con grupos © tradiciones fascistas. La Lega italiana expresa principalmente sentimientos regionalistas. Que estos partidos conformen la «extrema derecha» no constituye una evidencia. La conti 1. Algunos parrafos de este capitulo se basan notablemente en un articulo publicado en 1997: algunas cuestiones conceptuales y problemas de comparacién de partidos antiinmigracién en Europa occidental. Party Po- litics, 3: 473-492. Agradecemos a los editores de Party Politics por dar permiso a la reimpresién de partes de ese articulo. Ademés, doy gracias a Ed. Van Thijn por sus comentarios criticos a la primera version de este trabajo. 2. EL MSi-DN fue rebautizado como Alianza Nacional en 1994 en un intento de“entrar en el gobierno con Forza Italia, el partido de Silvio Berlusconi. 226 RETOS PARA LA DEMOCRACIA EN EL SIGLO XXI nuidad histérica con los movimientos de extrema derecha de entreguerras no siempre es cla- ra. Casi la nica actitud que tienen en comin es el resentimiento hacia los inmigrantes y ha- cia la politica inmigratoria de sus gobiernos. La nueva familia de partidos de derecha radical en Europa occidental tiene tres aspec- tos diferentes que caracterizan la identidad politica de sus miembros. El primero es su des- cendencia real o supuesta del movimiento fascista de preguerra. Llamaremos a esos partidos que rememoran y celebran sus raices en el pasado fascista «extrema derecha». El segundo aspecto de la derecha radical contempordnea es el desprecio hacia los inmigrantes y el re- sentimiento hacia la politica inmigratoria de sus gobiernos. Llamamos a los partidos que tie- nen este segundo aspecto como Unica caracteristica importante «racistas», El tercer aspecto de la nueva familia politica de la derecha radical es que algunos de esos partidos celebran la virtud y la inteligencia del hombre comin y pretenden representar a das gesundenes Volk- sempfinden. A los partidos que se caracterizan por este tiitimo aspecto les llamaremos «po- pulistas» o partidos;«de protestan, Los tres rasgos pueden observarse como aspectos relacio- nados: los partidos de extrema derecha son también racistas y populistas; y los partidos ra- cistas son también populistas. Pero no al revés: los partidos racistas no tienen por qué celebrar un pasado fascista; los partidos populistas no tienen por qué necesariamente expre- sar resentimiento hacia los inmigrantes. Las categorias «extrema derecha», «racista» y «po- pulista» también se solapan. Por ello es dificil distinguirlas nitidamente. Cada uno de los tres rasgos de la derecha radical nos lleva a una explicacién diferen- te de su auge. Si consideramos a la derecha radical principalmente como una forma de neofascismo, su éxito puede ser explicado a través de una especie de teoria de la resurrec- cién. Los viejos partidos fascistas fueron suprimidos por algin tiempo pero el mal no ha sido extraido de raiz y surgen ramas, Su resurreccién se produce por la falta de vigilancia antifascista, Esta explicacién se encuentra a menudo en circulos de extrema izquierda radi- cal, Si, por otro lado, se ve a la derecha radical contempordnea principalmente como parti dos antiinmigracién, entonces su causa més profunda parece radicar en las grandes olas mi- gratorias que se produjeron en Europa occidental durante las tltimas tres décadas del siglo xx. De este modo, estos partidos funcionan —segiin muchos observadores conserva- dores— como un «primer aviso» del descontento popular respecto a las politicas de inmi- gracién y a los acuerdos internacionales sobre refugiados politicos. Segiin algunos analistas progresistas, estos partidos hacen uso de sentimientos de alienacién politica para hacer de los inmigrantes sus victimas propiciatorias. Esta perspectiva de izquierda que equipara par- tidos antiinmigracién con partidos racistas est relacionada con la tercera de las perspecti- vas sobre los partidos de la nueva derecha radical como partidos populistas, Segiin esta ter- cera visin la raiz principal de estos partidos tiene que encontrarse en las formas tecnocré- ticas del gobierno contempordneo, en el déficit democratico que sufren los paises de la Union Europea a causa de la concentracién de los centros de decisién en los niveles de la UE sin una transferencia concomitante de control democratico, y en otras formas de glo- balizacién que han transferido el poder politico de los parlamentos nacionales a organiza- ciones internacionales reguladoras, Las reacciones del Estado al auge de la derecha radical dependen en gran medida de las perspectivas que se acaban de exponer. A la vez, la eleccién de la perspectiva que las ins- tituciones politicas tomen depende de la identidad y estrategia de los partidos a los que se enfrentan, Si los partidos son vistos principalmente como neofascistas la solucién viene a me- nudo por despertar el sentimiento antifascista entre la poblacién y por aplicar Ia legislacién antifascista de posguerra —como hemos visto en Alemania—. Sin embargo, los partidos neofascistas pueden ser aceptados como actores legitimos en la arena politica mientras las LOS PARTIDOS POPULISTAS DE DERECHA 227 autoridades legales consideren que no sobrepasan los limites del procedimiento democritico —como se ha visto en Italia y en Austria—. Si dichos partidos, por otro lado, son considerados principalmente como partidos an- tiinmigracién, los gobiernos pueden confiar en la legislacién antirracista para frenar a estos partidos o también pueden crear un «cordén sanitario» —como se ha hecho en Flandes y en Francia—. Los gobiernos también pueden intentar restringir la inmigracién a través de la aprobacién de leyes antiinmigratorias. Con frecuencia se observa una combinacién de las dos estrategias, Gran Bretafia y Holanda son los paises donde esta combinacién de repre- sién y adopcién de parte de las propuestas de politica antiinmigratoria ha sido aplicada con mas éxito. Finalmente, si los partidos son principalmente vistos como populistas en respuesta a la naturaleza tecnocratica del gobierno contemporaneo, al déficit democratico de la integracién europea y a otras formas de globalizacién, la reaccién es mayoritariamente la de intentar con- vencer a la ciudadania de que algo se esta haciendo respecto al déficit democratico en Eu- ropa a), de que las protestas populistas son peligrosos callejones sin salida 6), y tratar de me- jorar el proceso democratico en el ambito local —donde el reto populista tiende a ser mucho mas fuerte c). Vamos a tratar aquellos aspectos que determinan que un partido de derecha radical sea considerado principalmente como «extrema derecha», como «racista», o bien como «populista». 2. La derecha radical como extrema derecha Estamos de acuerdo con Klaus von Beyme (1988) en que el concepto «extrema dere- cha» est conectado con la teoria del totalitarismo en la cual se equipara fascismo con co- munismo. Este armazén conceptual es bastante consistente si seguimos a Ernst Nolte (1984) en limitar el concepto de fascismo a un periodo histérico especifico, con un inicio alrededor de 1920 y un final en 1945. La etiqueta «fascista», entonces, est reservada al Movimiento Nacional Fascista en Italia, al National Sozialistische Deutsche Arbeiterpartei (NsDAP) ale- man, al Partido Austro-Fascista liderado por Dollfuss y, como minimo segiin Ernst Nolte, al movimiento francés Action Francaise, Algunos autores también incluirian a la Falange Es- paffola, Los historiadores son bastante reticentes a usar el término «fascismo» para movi- mientos o regimenes que estin fuera de este periodo 0 lugar especificos. Entre algunos cien- tificos sociales también existe cierta desconfianza a la hora de etiquetar a los partidos poli- ticos contempordneos como neofascistas. Para ysar el término «neofascismo» refiriéndonos a los partidos antiinmigracién, como hacen Cheles ef al. (1991), necesitamos claramente un concepto genérico de «fascismo». Llamaremos a este concepto genérico «extrema derecha para coincidir con el presente uso de dicho término. Un partido fascista es un partido de extrema derecha en un periodo especifico con una especifica organizacién de partido basada en el Fiihrerprinzip, esto es, hacer de un fuerte li- derazgo un principio de partido. Segin Sternhell (1976), deberiamos decir que el fascismo no sélo se define por su ideologia sino también por sus prdcticas. De este modo, la violencia de los militantes fascistas conforma un corolario de la doctrina fascista, la cual definiremos mas adelante. Los partidos fascistas demandan un compromiso total por parte de sus miembros; el fascismo dirigente demanda una activa participacién del pueblo. Es esta participacién so- cial y politica obligatoria lo que define su cardcter fofalitario, Pero nosotros nos proponemos definir el término «extrema derecha» como un concepto que se refiere s6lo a la ideologia y

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