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LA MODELACIÓN Y SU APLICACIÓN EN NIVEL SECUNDARIA

Jorge Alexander Cifuentes Ramírez

Escuela Normal Superior de Yucatán “Profesor Antonio Betancourt Pérez”

Licenciatura en Enseñanza y Aprendizaje de las Matemáticas

Enero 2022
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Introducción

Vivimos en una sociedad dinámica que requiere cambios constantes, los cuales no son

específicos en un ámbito, es decir, podemos apreciarlos en economía, salud, política e incluso

educación. En lo nacional y local, el proceso enseñanza – aprendizaje ha evolucionado durante el

tiempo y lo seguirá haciendo; es evidente que en política educativa han surgido modificaciones

que sin lugar a duda son favorables para las necesidades sociales actuales; por ejemplo, el

considerar una educación inclusiva.

Haciendo énfasis en la enseñanza de las matemáticas, es importante mencionar que “En

medio de las continuas transformaciones, no basta tener conocimiento específico sobre un asunto

y ejercer su mera transmisión. Es fundamental, cada día, obtener nuevos conocimientos y

habilidades en la aplicación y socialización de ellos”. (Biembengut y Hein, 2004, p. 106). De

esta manera la labor del docente debe atender de forma holística diferentes aspectos que

coadyuven al estudiante a un desarrollo integral, además que puedan poner en práctica sus

conocimientos, habilidades, actitudes y valores, es decir, que los alumnos puedan ser

competentes en las diferentes áreas en las que se desenvuelven.

En ese sentido, en matemáticas, uno de los medios para lograr la movilización de saberes,

conocimientos, prácticas, actitudes y valores, es la modelación matemática, la cual se entiende

como “Un proceso involucrado en la obtención de un modelo matemático. Un modelo

matemático de un fenómeno o situación problema es un conjunto de símbolos y relaciones

matemáticas que representa, de alguna manera, el fenómeno en cuestión”. (Biembengut y Hein,

2004, p. 106). Es una realidad que lograr un vínculo entre el conocimiento teórico y práctico que

puede decantar en un aprendizaje significativo, más si éste está relacionado con el contexto de un

estudiante; es ahí donde la modelación matemática adquiere factibilidad como metodología para
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favorecer la formación, en virtud de que de ser implementada con éxito podría contribuir al

desarrollo de habilidades que generalmente en una escuela, con un método de enseñanza

“tradicional” no se contemplaría. Biembengunt y Hein (2004) afirman que son algunos aspectos

que se propician al realizar la modelación:

 Integración de las matemáticas con otras áreas del conocimiento.

 Interés por las matemáticas frente a su aplicabilidad.

 Mejoría de la aprehensión de los conceptos matemáticos.

 Capacidad para leer, interpretar, formular y resolver situaciones-problema.

 Estimular la creatividad en la formulación y resolución de problemas.

 Habilidad en el uso de la tecnología (calculadora gráfica y computadoras).

 Capacidad para actuar en grupo.

 Orientación para la realización de la investigación.

 Capacidad para la redacción de esa investigación. (p. 108).

En el presente trabajo se desarrollarán algunas evidencias, así como un análisis reflexivo y

argumentativo acerca de por qué es realmente útil la modelación en la educación,

específicamente referido a la enseñanza – aprendizaje de la asignatura de matemáticas en nivel

secundaria. Como premisa, se tiene la idea de que los estudiantes se encuentran atraídos toda vez

que existe una actividad distinta al tradicional “realizar ejercicios y problemas”, entonces

tomando como base esa idea, la introducción de actividades que pongan en práctica sus

competencias resulta en un estímulo para la participación de los alumnos, al mismo tiempo que

se está trabajando en un ambiente de aprendizaje idóneo para el desarrollo de la secuencia

didáctica.
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La modelación y su aplicación en nivel secundaria

La primera evidencia a desarrollar, se trabajó durante una jornada de prácticas, se pretendía

demostrar la relación entre las fórmulas del prisma cuadrangular y la pirámide cuadrangular;

también se perseguía el mismo objetivo con el cilindro y el cono. En un primer momento, lo

importante era el dominio aritmético de la fórmula y la construcción de cuerpos geométricos, sin

entrar en detalles específicos con respecto a su relación; sin embargo, fue a través de una

pregunta incluida en un cuestionario que orientó a los estudiantes a pensar por qué las fórmulas

de los cuerpos ya mencionados eran prácticamente idénticas a excepción que se tenía una

división entre el número 3, y por qué debería ser ese número, y no otro distinto.

En el momento en el que se les solicitó a los estudiantes argumentar acerca de este hecho, es

decir, por qué creían que las fórmula era la misma pero dividida entre tres, fue evidente que no

todos sabían cuál era la razón de este hecho, porque en los ejercicios realizados, los resultados

eran distintos (dado que los cuerpos tenían datos diferentes), por tal razón para los alumnos no

había una relación entre las fórmulas, por lo que era necesario visualizar la situación tanto

matemáticamente, como físicamente.

La situación didáctica giraba en torno a las siguientes características:

Eje: Forma, Espacio y Medida

Tema: Magnitudes y Medidas

Aprendizaje esperado: Calcula el volumen de prismas rectos cuya base sea un triángulo o un

cuadrilátero, desarrollando y aplicando fórmulas.


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A pesar de haber realizado una explicación relativa al porqué las fórmulas de estos cuerpos

geométricos son similares, aún no quedaba completamente claro para todos, así que fue

necesario llevar a cabo una demostración que pusiera en evidencia el hecho de que estos cuerpos

conservan una relación en virtud de que el que está dividido por 3, es una tercera parte del

original. Durante el desarrollo de la construcción de cuerpos geométricos (físicos), se tomó la

oportunidad de demostrar esta situación, para ello, a los estudiantes se les solicitó algunos

materiales: Cartulina para la elaboración de los cuerpos; una bolsa de arroz.

Era importante que todos pudieran ubicar correctamente tanto las fórmulas como los cuerpos

que se iban a analizar:

Ilustración 1. Prisma y pirámide


cuadrangular; Cilindro y cono.

Una vez en el aula, se procedió a la construcción de un cilindro y un cono con las

características necesarias, es decir, misma altura y misma base; posteriormente, se les solicitó a

los estudiantes verter arroz en el cono e irlo depositando en el cilindro, de esta manera se

pretendía dejar claro que el contenido (volumen) del cono podía caber 3 veces en la capacidad

del cilindro. Al poder observar la cantidad de veces que el arroz entraba en el cilindro, entonces

se procedió a la utilización de las fórmulas matemáticas para el cálculo de volumen de estos

cuerpos (ambos tenían radio de 3cm y altura de 10cm), una vez obtenidos los resultados era

evidente que tanto de forma física como matemática, el contenido del cono conservaba una

relación de tercera parte con respecto al cilindro.


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Ilustración 2. Proceso de actividad

Es una realidad que el análisis de la relación de ambas fórmulas podía llevarse a cabo

simplemente con un cálculo matemático que demostrara que en efecto existe esa relación; pero,

para los estudiantes el hecho de realizar una actividad distinta es sin duda una oportunidad en la

que se sienten atraídos por lo que se va a realizar, resultando en una mejor atención a la clase

mientras adquieren un conocimiento que sin lugar les será de utilidad en su vida académica.

Probablemente, si sólo se hubiera realizado una demostración matemática, el conocimiento

perduraría menos tiempo, ahora, al haber realizado todo un proceso, al igual que una

comprobación numérica, es más factible que el estudiante no sólo haya visualizado la relación,

sino que la haya comprendido en su totalidad. Es de esta forma en la cual como docentes es

trascendente el hecho de que el estudiante pueda visualizar realmente lo que sucede en los

cálculos que realiza en las clases, es decir, que pueda modelar la situación con datos que

comienzan escritos en un papel y terminan siendo un objeto manipulable que comprueba lo que

han calculado.

Por otra parte, ahora se revisará una situación que involucra la modelación, pero esta ha sido

extraída de un libro de texto para segundo año de secundaria. La secuencia se desarrolla bajo las

siguientes características:
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Eje: Número, Álgebra y Variación

Tema: Multiplicación y división

Aprendizaje esperado: Resuelve problemas de multiplicación y división con fracciones y

decimales positivos.

Ilustración 3.Actividad de libro (Santillana 2° grado)


Bajo el argumento “Cualquier representación de la situación a través de las matemáticas se

considera un modelo matemático” (Barbosa, 2003) se puede inferir que lo que presenta el libro a

través del planteamiento de un problema que realmente se observa en la cotidianidad, es un

medio para llegar al conocimiento del estudiante desde la aplicación de sus saberes previos, es

decir, esta actividad se plantea previo al desarrollo del tema, con el objetivo de que el estudiante

agote sus recursos que pudieran dar solución a la problemática; con la guía del profesor es

posible hacer de esta actividad un aprendizaje realmente significativo en virtud de que además de

realizar lo solicitado sería factible llevar a la realidad los procesos implementados para la

actividad, quizás no exactamente en la misma situación, pero sí elaborar una situación que
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involucre el mismo razonamiento. Ahora bien, al ser una actividad que realizaría todo un grupo,

es viable la socialización de los procedimientos realizados, lo cual, podría ampliar el panorama

para solucionar problemas en aquellos estudiantes que no se encuentran familiarizados con este

tipo de planteamientos, de esta forma se estaría brindando la oportunidad de pasar de un listado

de ejercicios que pretendan desarrollar los contenidos a una situación modelada en la que el

alumno debe resolver un problema con sus saberes para llegar a una conclusión y posteriormente

afianzar el conocimiento o los resultados por medio de la intervención del docente.

En efecto, el hecho de tener una situación como la que se trabajó en el libro de texto, es

trascendente, en virtud de que más allá de pretender que los alumnos resuelvan, lo que la

actividad requiere es pensamiento crítico y razonamiento para que a partir de operaciones

aritméticas se puedan alcanzar los objetivos, además, no es muy lejano de la realidad que una

persona se encuentre en las circunstancias desarrolladas por la actividad del libro, entonces,

podría significar un ayuda importante para los estudiantes en la solución de problemas en las que

realmente se encuentren involucrados.

Conclusión

En ambos casos presentados es evidente cómo el empleo de estrategias como la modelación

puede satisfacer el ambiente de aprendizaje de un aula, permitiéndome mejor interacción e

incluso aprendizajes significativos. Si bien es verdad que la modelación trae consigo beneficios

que podrían contribuir a una formación integral de estudiante, es una realidad que en ocasiones

las disposiciones del alumnado para participar es el factor principal por el cual no se llegan a

alcanzar los objetivos planteados; de igual forma, en matemáticas existen temas que son

susceptibles a llevar a cabo un modelo que los estudiantes puedan manipular, pero también es

posible que el tema que se desarrolla no sea tan fácil llevarlo a una situación modelada y en la
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actualidad el hecho de realizar sesiones de clase sincrónicas, pero a distancia no permite al

docente, ni a los alumnos poder tener un verdadero contacto con una situación en la que se

emplee la modelación, es verdad que no es imposible, pero desde luego es más complejo

alcanzar tal objetivo considerando las circunstancias del contexto. Personalmente, la modelación

me ha permitido iniciar un tema nuevo con una perspectiva distinta que en muchas ocasiones

moviliza a los estudiantes para encontrar una solución, sin necesidad de haber comentado el

tema. Entonces, se infiere que en efecto el empleo de modelos para el proceso enseñanza –

aprendizaje es una buena estrategia para alcanzar los aprendizajes esperados, a pesar de ellos, y

como en cualquier otra estrategia de aprendizaje, hay que prever diversos factores que puedan

afectar el empleo de un proceso como el que presentó en este trabajo. Es determinante tratar de

evolucionar en educación y la única manera de hacerlo es atreviéndose a cambiar.

Referencias

Barbosa, J. (31 de diciembre de 2003). What is Mathematical Modelling. Obtenido de

ResearchGate:

https://www.researchgate.net/publication/286426598_What_is_Mathematical_Modelling

Biembengut, M. S., & Hein, N. (agosto de 2004). Modelación matemáticas y los desafíos para

enseñar matemática. Obtenido de revista Educación Matemática: http://www.revista-

educacion-matematica.org.mx/descargas/vol16/vol16-2/vol16-2-6.pdf

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