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UNIVERSIDAD POPULAR AUTÓNOMA DE VERACRUZ

DIRECCIÓN DE EDUCACIÓN SUPERIOR DESARROLLO ACADÉMICO

FACULTAD DE PSICOPEDAGOGÍA

«TEORÍA CURRICULAR»

CUATRIMESTRE: PSP 5º cuatrimestre

APRENDIENTE: Gallegos Nazariega Jacqueline

ASESOR SOLIDARIO: LE. LORENA VEGA LIMÓN

20/01/2022
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Paradigmas curriculares

Las teorías expuestas en torno al currículum han propiciado el establecimiento de

paradigmas curriculares dentro de los cuales se destacan los siguientes:

El paradigma tecnológico.

Refleja un modelo de intervención basado en la lógica de los medios-fines representaba la

ortodoxia científica enmarcada en el positivismo y aspiraba a convertir la elaboración del

currículum en una cuestión de racionalidad.

El paradigma interpretativo-fenomenológico.

Este paradigma asume el currículum como proceso y en él vamos a detenernos por la

implicación que tiene en el enfoque de competencias que estamos proponiendo. El origen de

este nuevo paradigma se entronca con un acercamiento eminentemente práctico del mismo,

sin desestimar el conocimiento científico disponible. Esta propuesta presenta la novedad de

asumir cada tema de la ciencia no en términos de la conducta del estudiante, ni de las

operaciones subjetivas requeridas para su comprensión, sino en términos de su contenido

conceptual, procedimientos y criterios claves para su construcción, que se derivan de la

estructura misma del conocimiento seleccionado, para procesar con los estudiantes bajo la

forma de un interrogante o problema por solucionar.

Dentro de esta propuesta se destaca Stenhouse, el cual aludía al Análisis en los procesos

científico-culturales como experiencias óptimas de racionalidad. En esta perspectiva el

currículum es un curso de acción que desarrolla el profesor con sus estudiantes, una pauta viva

de ordenamiento de la práctica de la enseñanza (Stehouse, 1988) En esta concepción la

flexibilidad se convierte en un rasgo esencial. Además de la perspectiva de Stenhouse y

Bruner, centrada en el desarrollo y apropiación de las estructuras del conocimiento disciplinar,

está la más centrada en operaciones y herramientas lógicas del pensamiento, de inspiración

piagetana. Ahora bien, el currículum por procesos no sólo responde a lo planteado

anteriormente, sino que está abierto a la influencia sociohistórica y cultural de la comunidad y


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del país en el que se inscribe el programa educativo (Flórez Ochoa, 2005; 287). En este caso el

currículum está inspirado en modelos pedagógicos sociales, por lo que la concepción curricular

pone énfasis en proporcionar contenidos y valores para que los alumnos se formen en medio

de la sociedad y ayuden a la reconstrucción social de la misma; en esta visión toman relieve

los procesos de autonomía, autorregulación, etc (Flórez Ochoa R., 2005).Debemos concluir

señalando que aludir a procesos no es negar toda clase de estructuración, sino contribuir a

contrarrestar la rigidez, el determinismo taxonómico y trabajar en pos de rebasar el

desempeño rutinario para arribar a mayores niveles de autonomía, siempre teniendo en cuenta

que no se aprende solamente para fortalecer un conocimiento escolar, que se demuestre en

exámenes, sino que el aprendizaje de la escuela se acerque lo más posible al dinamismo de la

vida.

El paradigma sociocrítico.

Este paradigma arrastra muchos presupuestos del anterior, añadiéndole los planteamientos

de Habermas y la llamada Nueva Sociología o Sociología Crítica (Popkewitz, Apple. Giroux,

etc). Tratan de introducir nuevas dimensiones derivadas de la perspectiva histórica, política y

social al currículum, es decir, al análisis ideológico y teórico de la propia práctica como

referentes del mismo. Señala María Luisa Sevillano que “Sin restar un ápice de importancia a la

efervescencia producida y actual en esta última fase, sobre todo en lo relativo a la concepción

de identidades plurales. También hemos de anotar una cierta preocupación que se está

produciendo sobre este particular, puesto que debajo de los "ropajes posmodernistas", a veces

borrosos y permisivos, pueden acogerse múltiples posturas, entre otras algunas tradicionales

y neoliberales. (Sevillano García M.L;2005; 132).

El paradigma postcrítico

En opinión de los postcrítícos el currículum puede contemplarse desde las siguientes

perspectivas:

Visión humanista, tradicional, conservadora.


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Visión tecnicista, utilitarista, economicista.

Visión crítica, neomarxista, basada en el análisis.

Visión postestructuralista, crítica, neomarxista

Ellos entienden el currículum como una práctica significativa, una práctica productiva, una

relación social, una relación de poder y una práctica que produce identidades sociales.

El paradigma emergente postmoderno.

Pretende responder a los problemas del mundo posmoderno y por la situación de la teoría y

la práctica del mundo actual. Es una teoría no uniforme preocupada por definir el mundo

postmoderno y ver qué currículo le corresponde.Una visión cósmica global del mundo

postmoderno, la naturaleza de los sistemas abiertos, la estructura de la complejidad y la idea

del cambio transformador frente al acumulativo serían algunas de sus características (Sevillano

G,M.L;133).
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Referencias

Tomado del libro EL PROCESO CURRICULAR POR COMPETENCIAS. De Magalys Ruiz

Iglesias. Editorial Trillas. 2009

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