Concepto

El agua es el principal componente corporal. Es así como el 70% del peso total de un adulto
corresponde al agua. Por eso el organismo requiere unos dos litros diarios de líquidos para
mantenerla en los niveles normales. Y señales fisiológicas, como la sed, ayudan a estimular la
ingesta de líquidos. Las bebidas, además de ser una necesidad para la buena salud y la vida,
son la respuesta al deseo de los consumidores, quienes buscan opciones nutritivas,
refrescantes, naturales, estimulantes y saludables (Elizabeth Naranjo Gómez, 2015)

Un producto líquido potable convencional que se comercializa para transmitir los ingredientes
del producto con un supuesto beneficio para la salud. Aunque una bebida funcional puede
comercializarse como una panacea o una sustancia que mejora el rendimiento, para 2020 no
existen pruebas científicas de ningún efecto específico en la salud de dichas bebidas o de su
reglamentación uniforme a nivel internacional. (María Rosaría; Bevilacqua, 2014, P. 1192-
1206)

Tipos de bebidas funcionales

BEBIDAS LÁCTEAS Y VEGETALES

En la industria de lácteos se ha desarrollado bebidas funcionales que ayudan controlar peso,

desarrollar masa muscular, reducir grasa corporal, combatir caries, entre otros beneficios.
Estos son fabricados a base de leche, pero con mayor aporte nutricional gracias a los
probióticos de sus componentes.

La industria de la hortofructicultura de donde derivan bebidas de almendras, linaza, maíz,

granos y muchos otros. Debido a sus ingredientes 100% naturales provenientes de los
vegetales, su posicionamiento en el mercado es al que mayor proyección se le vislumbra.

BEBIDAS DEPORTIVAS Y ENERGÉTICAS

En el ámbito deportivo lleva al consumidor a pasearse entre proteínas aisladas de soja, de

huevos, fibra y otros ingredientes. Estos permiten recuperar la pérdida energética a través del
aporte de carbohidratos, y a prevenir la deshidratación.

Por su parte, las bebidas energéticas también aportan energía a partir de los carbohidratos,
pero a diferencia de las deportivas, no previenen la deshidratación. Generalmente, contienen
cafeína, taurina, vitaminas, creatinina y cantidades mínimas de aminoácidos.

NÉCTARES, JUGOS Y MIXES DE FRUTAS

Las bebidas funcionales más populares son los jugos, néctares y mix de frutas, sean en estado
líquido o en polvo. Los jugos están enriquecidos con prebióticos destinados a nutrir e incluso a
coadyuvar a beneficiar en aspectos definidos:

Neutralizar la acidez.

Promover el efecto diurético y digestivo.

Controlar el estrés.

Depurar.

Desintoxicar.

Mejorar la función intestinal.

En el néctar podemos hallar antioxidantes, y una mayor concentración de frutas. Asimismo, los
mixes de frutas. Dependiendo de los ingredientes, sus efectos pueden ser realmente
beneficiosos. Si son de los que contienen aminoácidos, mix vitamínicos, sulfatos y otros

TÉS

Los tés funcionales son referentes cuando se trata del consumo sano de bebidas. Son múltiples
las opciones y funcionalidades gracias a sus antioxidantes. También son combinados con otras
bebidas y hierbas, con el objetivo de potenciar sus beneficios. Algunos de los más conocidos
son:

Negros, verdes y blancos: Todos contienen L-teanina, lo que proporciona un aumento de la

energía.

Manzanilla: Relacionada con la apigenina flavonoide que disminuye el nerviosismo y

somnolencia.

Menta: Tranquilizante digestivo. Contiene vitaminas del complejo B, potasio, calcio.

MALTAS Y GASEOSAS

Las maltas y las bebidas gaseosas también se encuentran entre los tipos de bebidas
funcionales existentes en el mercado. La malta forma parte de la preparación de una bebida
alcohólica antes de ser fermentada; rica en vitaminas de A, B y E. contiene hierro, potasio, zinc,
magnesio, hierro y minerales.

Como la malta, contiene: vitaminas A, todas las del complejo B. Además, vitaminas C, D, E, K,
biotina, ácido fólico. Zinc, fósforo, magnesio, potasio, hierro y otros minerales.

AGUAS MEJORADAS: UNO DE LOS TIPOS DE BEBIDAS FUNCIONALES

El agua mejorada se volvió en la gran apuesta de bebidas funcionales saludables de las grandes
industrias de alimentos. Con ellas tenemos la oportunidad de consumir el vital líquido de una
forma más deliciosa y variada. Estas deliciosas aguas generalmente vienen mejoradas con
magnesio, potasio, zinc y otros minerales.