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UNIVERSIDAD ANDRÉS BELLO

Facultad de Ingeniería

Escuela de Geología

PELIGRO GEOLÓGICO ASOCIADO A INUNDACIONES EN LA


CUENCA DEL RÍO ACONCAGUA, COMUNA DE LA CALERA,
REGIÓN DE VALPARAÍSO, CHILE

Tesis para optar al Título de Geóloga

María José Cabrera Olivares

Profesor Guía:

Iván de la Cruz Vargas Cordero

Profesor Co-guía:

Paula Escobar Loyola

Viña del Mar, Chile, 2018


RESUMEN

El peligro de inundación fluvial es común, reiterativo y catastrófico a lo largo de Chile y


el mundo y sus efectos pueden generar grandes daños a la población. En el contexto
mundial la sequía, la desertificación, la deforestación y el cambio climático son factores
que pueden magnificar los daños.

Se ha seleccionado la zona de estudio ubicada en la Comuna de La Calera, Región de


Valparaíso, debido a tener en su registro histórico episodios de inundación a lo largo de
los años, siendo la última en 1987 dejando a cientos de personas damnificadas y aisladas
debido a que por las intensas lluvias, el puente 19 de Junio fue arrasado por la fuerza del
agua. Dicho esto esta investigación ha requerido de evaluar y zonificar las áreas
susceptibles de inundación y por sobre todo establecer la recurrencia de grandes
inundaciones. Se han realizado diversos estudios y análisis sedimentológicos,
geomorfológicos, asociaciones climáticas, vinculaciones municipales con mapas de
peligro y finalmente asociaciones de caudales máximos, que junto a los resultados de
caudales de verificación se ha estimado que para un periodo de retorno de 100 años la
zona de estudio se vería bajo amenaza de peligro de inundación debido a la intensas
precipitaciones superiores a 100 mm en 24 horas, con un caudal superior a los 1800
m3/seg. en la Cuenca del Río Aconcagua, sector de La Calera. Por último, se han
reconocido relaciones entre las características geomorfológicas, sedimentológicas,
antrópicas y la estimación de caudal que permite inferir que una eventual inundación en
la zona podría magnificar sus efectos.
ABSTRACT

Along Chile and worldwide the flooding danger is common and catastrophic and its
effects can generate huge damages in the population. In the worldwide context the water
drought, desertification, deforestation and global warming are factors that can increase
the damages.

The study area located in Calera, Valparaíso, was selected for having flood records, the
last one was registered during the year 1987 leaving hundreds of people affected and
isolated due to intense precipitations, in which the bridge of “19 de Junio” was
devastated by the strength water. This research aims to evaluate and zoning susceptible
areas of floodings and to calculate the huge event recurrences.

The research includes sedimentological, geomorphological, climatic and maximum river


flow analyses. Results allow us to estimate a verification river flow for recurrence
interval equal to 100 years. Thus, flooding danger it is probable, in which the rainfall
forecasts would be >100 mm observed during 24 hours with a flow equal to 1800 m /s.
3

Finally, relationships between geomorphology, sedimentology and anthropic features


besides our flow estimate for a recurrence interval equal to 100 years can magnify the
effects of an eventual flooding.



AGRADECIMIENTOS

Espero que la lista de personas a quien darle mis más eternas gracias, no se alargue
demasiado, pero aquí vamos:

De forma muy especial a mis profesores guías Iván Vargas, Paula Escobar y a Pedro
Santis que participó en la primera parte de este trabajo. Gracias por tomar mi tema y
apoyarme durante todo este año, con la mejor disposición siempre. A Lucía, por ser
maravillosa persona y por acompañarnos a terreno.

A mis amigas por ser maravillosas: María Francisca por darme apoyo moral jaja cuando
cual de las dos estaba peor, te agradezco mucho por todos estos años acogiéndome en tu
familia y por tu hermosa amistad te quiero mucho!!

A Gabriela por preguntarme siempre ¿Jose cómo vas? Si vas alcanzar yo sé”, preguntas
como esas son signos de preocupación, gracias por todo, te quiero un montón!

A Josefa que las últimas semanas éramos la ultimas en cerrar la u, dándonos apoyo todos
los días! A todas muchas gracias las tengo en mi corazón.

A Mey Basáez, que participó desde el primer momento y me ayudo en cada cosa que se
escapaba de mis talentos en confección de mapas, esquemas, etc., siempre con la mejor
disposición, Gracias a ti quedo todo bello!

A Ximena Toledo, por siempre facilitar un espacio para trabajar en la universidad y con
la mejor sonrisa aunque estuviera llena de trabajo

A Pablo por apoyarme siempre, desde cosas tan simples como ir a buscarme cuando
salía muy tarde de la u, hasta ayudarme con la tesis, cuando se que tu tiempo es muy
poco y sencillamente por sopórtame así como soy.

A Ximena Moncada, por entregarme su computador cuando el mío decidió morir en el


último mes de trabajo, gracias tía xime!

A ti papá por acompañarme a terreno.

A mis abuelos que durante toda la carrera los vi muy poco, gracias por entenderme.

A mi prima Ignacia que siempre puedo contar con ella para todo.

A ti mamá por siempre por confiar en mi y por cuidar siempre de nuestra familia.

ÍNDICE

1. INTRODUCCIÓN 10
1.1 Antecedentes 12
1.2 Objetivos Generales 14
1.3 Objetivos Específicos 14
1.4 Hipótesis de Trabajo 15
1.5 Limitaciones 15
2. MARCO GEOGRÁFICO 15
2.1 Ubicación y Accesos 15
2.2 Flora terrestre 16
2.3 Fauna acuática 16
2.4 Clima 16
2.4.1 Clima Templado Mediterráneo con estación seca prolongada 16
2.4.2 Clima Frío de Altura 17
3. METODOLOGÍA DE TRABAJO 17
3.1 Trabajo de pre-terreno 18
3.2 Trabajo de terreno 18
3.3 Trabajo de post-terreno 19
4. MARCO TEÓRICO 21
4.1 Inundaciones y llanuras de inundación 21
4.2 Causas de Inundación 23
4.3 Riesgo y Peligro Geológico 23
4.4 Distribución Areal de precipitaciones 24
4.5 Tiempo de Concentración 24
4.5 Caudales de Diseño y Coeficiente de Rugosidad de Manning 25
4.6 Periodos de Retorno 26
4.6.1 Distribución de Gumbel 26
4.6.2 Probabilidad de Excedencia y Periodo de retorno 27
4.7 Caudales Máximos 27
4.7.1 Método Racional 28
4.7.2 Método Verni King Modificado 29
4.8 Caudal de Verificación 30
5. MARCO GEOLÓGICO REGIONAL 31


5.1 Formación Quebrada del Pobre (Jurásico Inferior; Sinemuriano) 31
5.2 Formación Ajial (Jurásico Medio; Aalaniense) 32
5.3 Formación Cerro Calera (Jurásico Medio; Aalaniense – Bajociense) 32
5.5 Formación Lo Prado (Cretácico Inferior; Valanginiense - Berriasiano) 33
6. MARCO GEOLÓGICO LOCAL 33
5.1 Sedimentos Cuaternarios No Consolidados Qel, Qac, Qg 33
6. RESULTADOS 35
6.1 Análisis Sedimentario y Estratigráfico 35
6.2 Análisis Geomorfológico 39
6.3 Análisis y Estimación de Precipitaciones Futuras 43
6.3.1 Determinación del Coeficiente de Rugosidad de Manning 43
6.3.2 Estimación de precipitaciones futuras 46
6.3.3 Periodos de Retorno 47
6.3.4 Tiempo de Concentración 49
6.3.5 Estimacion de Caudales Máximos 50
6.3.6 Caudal de Verificación 52
7. DISCUSIÓN 56
7.1 Asociación de la Sedimentología y Estratigrafía 56
7.2 Variación extensional de la Llanura de inundación 60
7.2.1 Control Litológico 60
7.2.2 Control Estructural 60
7.3 Impacto de la urbanización en zonas suceptibles de Inundación 61
7.4 Asociación de las predicciones de ENOS con la estimación de precipitaciones
futuras 63
7.5 Vinculación de Mapa de Peligro con Plan Regulador Municipal 65
7.6 Asociación de Caudales 67
8. CONCLUSIONES 68
REFERENCIAS 71
ANEXOS 73



ÍNDICE DE FIGURAS

Figura 1. Mapa de Ubicación general de la Cuenca del Río Aconcagua, La Calera, Chile
(Mapa de Elaboración propia, Google Earth, 2018). ................................................................... 11
Figura 2. Área preseleccionada de estudio, en parte de la cuenca del Río Aconcagua,
entre la comuna de Artificio y La Calera (Mapa de Elaboración propia, Google Earth,
2018) ............................................................................................................................................................ 11
Figura 3. Información Hídrica de la Cuenca del Río Aconcagua, Fichas Temáticas
Dirección General de Aguas. ............................................................................................................. 13
Figura 4. Fotografía del Diario Apsi Extra, 20 de Junio de 1987. Puente 19 de Junio
cortado por las intensas lluvias (Apsi, 1987). ................................................................................ 14
Figura 5. Montos de Precipitaciones Medias Mensuales registradas en Estación
Pluviométrica de Resguardo Los Patos, ubicada a 65 km al NE de la zona de estudio, en
la Comuna de Putaendo (Dirección General de Aguas, 2004). ............................................... 17
Figura 6. Estaciones Meteorológicas correspondientes a la Cuenca Hidrográfica del Río
Aconcagua (Mapa de Elaboración propia, Google Earth, 2018). ............................................ 20
Figura 7. Mapa del Valle del Aconcagua. Extracto Carta Geológica Quillota-Portillo,
Rivano 1996, SERNAGEOMIN. ....................................................................................................... 31
Figura 8. Fotografía y respectivo perfil esquemático de Columna 1. ................................... 36
Figura 9. Fotografía y respectivo perfil esquemático de Columna 2. ................................... 37
Figura 10. Fotografía y respectivo perfil esquemático de Columna 2. ................................ 39
Figura 11. Mapa Geomorfológico del Valle del Aconcagua. .................................................. 40
Figura 12. Mapa de ubicación espacial de los perfiles topográficos A-A`, B-B`, C-C`,
D-D`, E-E`, F-F`. ..................................................................................................................................... 40
Figura 13. Perfiles de la llanura de inundación, designados como A-A`, B-B`, C-C`, D-
D`, E-E`, F-F`. ........................................................................................................................................... 42
Figura 14. Perfil de elevación de 1,4 km de extensión, donde se ha medido el CRM.
........................................................................................................................................................................ 43
Figura 15. A-B: Río Clark Fork at St. Regis, Montana, EEUU, con n= 0,028. C: Río
Aconcagua vista W. D: Río Aconcagua vista NW. ..................................................................... 44


Figura 16. A-B: Salt River Below Stewart Mountain Dam, Arizona con n= 0,032. C-D:
Vista Sur. E: Vista Oeste. F: Vista Sur. ............................................................................................ 45
Figura 17. A-B: Moyie River at Eastport, Idaho con n= 0,038. C-D: Río Aconcagua
Vista SE. ..................................................................................................................................................... 46
Figura 18. Figura 18. Estaciones Meteorológicas correspondientes a la Cuenca
Hidrográfica del Río Aconcagua (Google Earth, 2018). ............................................................ 47
Figura 19. Coeficientes de Rugosidad de Manning para cauces naturales. ................. 52
Figura 20. Transecta 1 sobre el puente de camino Internacional (ubicación de este
puente en mapa geomorfológico). .................................................................................................. 53
Figura 21. Dimensiones de los pilares y estructuras de los puentes de camino
internacional, La Calera. ...................................................................................................................... 53
Figura 22. Transecta 2, paralela al puente 19 de Junio, La Calera (ubicación de este
puente en mapa geomorfológico). .................................................................................................. 54
Figura 23. Dimensiones de los Pilares y estructuras de la Transecta 2. ....................... 55
Figura 24. Esquema representativo de la Columna Estratigráfica 3 (Anexo 3), donde la
flecha superior indica la dirección del flujo y la flecha inferior indica la imbricación de
los clastos. .................................................................................................................................................. 57
Figura 25. Columnas Estratigráficas correlacionadas desde la base de los depósitos
fluviales. ...................................................................................................................................................... 58
Figura 26. Ilustración comparativa entre suelos arenosos, y arcillosos y el volumen
entre poros según tamaño de grano. .................................................................................................. 59
Figura 27. Evolución de un sistema fluvial con la llegada del asentamiento humano y
las respectivas consecuencias en caso de inundación. ................................................................. 62
Figura 28. Hidrograma de respuesta hidrológica de una cuenca no urbanizada y una
cuenca urbanizada. .................................................................................................................................. 63
Figura 29. Proyecciones del fenómeno ENOS para el año 2050 y 2250. ........................... 64
Figura 30. Mapa de Peligro de Inundaciones y Remociones en Masa, junto al Plan
Regulador de la Comuna de La Calera. ............................................................................................ 67
ÍNDICE DE TABLAS

Tabla 1. Datos sedimentológicos de los depósitos fluviales de la Columna Estratigráfica


1. .................................................................................................................................................................... 35
Tabla 2. Datos sedimentológicos de los depósitos fluviales de la Columna Estratigráfica
2. .................................................................................................................................................................... 37
Tabla 3. Datos sedimentológicos de los depósitos fluviales de la Columna Estratigráfica
3. .................................................................................................................................................................... 38
Tabla 4. Precipitaciones de diseño para periodos de retorno de 10, 25, 50 y 100 años,
para cada estación. ................................................................................................................................... 49
Tabla 5. Datos y tiempo de concentración de la Cuenca del Río Aconcagua ................ 50
Tabla 6. . Datos y caudal máximo del Método Racional de la cuenca del Río
Aconcagua para cada periodo de retorno de 10, 25, 50 y 100 años. ............................... 50
Tabla 7. Datos y caudal máximo con el Método Verni-King Modificado de la cuenca
del Río Aconcagua para cada periodo de retorno de 10,25, 50 y 100 años .................. 51
Tabla 8. Comparación de caudales máximos según Método Racional y Verni-King
Modificado. ................................................................................................................................................ 51
Tabla 9. Datos y resultado de Caudal de verificación para la Transecta 1. ................... 54
Tabla 10. Datos y resultado de Caudal de verificación para la Transecta 2 ................. 55
Tabla 11. Comparación de Caudales ................................................................................................ 68
1. INTRODUCCIÓN

Las inundaciones corresponden al resultado y/o consecuencia de un aumento en el


volumen de un cuerpo de agua, ya sea de origen fluvial, lacustre, costero, marino y son
parte natural de la geosfera, sin embargo, la urbanización y la carencia de la
planificación urbana ha llevado a la humanidad a encontrarse en zonas de peligro por
inundación reiteradas veces a lo largo del tiempo.

El Cambio Ambiental Global acelera estos procesos naturales, degrada el sistema


terrestre, y genera episodios más intensos de precipitación (Duarte et al., 2006); que
sumado a la construcción de caminos, obras hidráulicas y agricultura alteran el régimen
de caudal de muchos ríos (Chu et al., 2010; Banasik & Pham, 2010; Olang & Furst,
2011). Por tales motivos se proyecta un aumento de las inundaciones (IPCC, 2007; Eissa
& Zaqui, 2011) y de los costos asociados, en las próximas décadas (Octavio Rojas
2015).

El proceso natural se transforma en un evento peligroso cuando el ser humano ocupa las
zonas inundables desconociendo la función natural de éstas áreas, transformando el
fenómeno en una amenaza para el asentamiento humano instalado. El nivel de peligro
dependerá de la ubicación del asentamiento con respecto al cauce y del intervalo de
recurrencia o tasa de retorno (T), entendido como el tiempo promedio entre eventos que
igualan o exceden una magnitud determinada (Aparicio, 1989; OEA, 1993; Walsh et al.,
1994; Chow et al., 1994; Keller & Blodgett, 2007).

Chile no ha estado exento de eventos de esta naturaleza, trayendo como impacto


inmediato no sólo la destrucción de asentamientos rurales y urbanos, sino que también
han cobrado la vida de muchas personas dejando un importante saldo de individuos
damnificados. En este contexto de potencial peligro, se ha seleccionado la zona de
estudio (Figura 1), la cual se encuentra en la Comuna de La Calera, Región de
Valparaíso. El área comprende parte de la cuenca del Río Aconcagua (Figura 2) la cual
presenta una alta probabilidad de ocurrencia de un evento de inundación, que podría
afectar a las comunidades emplazadas en zonas aledañas al río, dado que la urbanización
impediría que en momentos de crecida el río pueda ocupar las llanuras de inundación de
forma natural, debido a que las casas construidas sobre el suelo de sedimentos fluviales,

10
obstaculizan y dificultan la infiltración de las aguas, provocando mayor escorrentía a
través de las construcciones antrópicas.

Figura 1. Mapa de Ubicación general de la Cuenca del Río Aconcagua, La Calera, Chile (Mapa de
Elaboración propia, Google Earth, 2018).

Figura 2. Área preseleccionada de estudio, en parte de la cuenca del Río Aconcagua, entre la
comuna de Artificio y La Calera (Mapa de Elaboración propia, Google Earth, 2018)

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1.1 Antecedentes
En el período 1960-1991 se registran 16 inundaciones catastróficas en Chile re-
lacionadas con eventos pluviométricos; el 63% afecta la zona central; lugar donde se
concentra un 73% de la población nacional (INE, 2012). Diversos estudios (Mariangel,
1990; Smith y Romero, 2009; CIREN, 2010; Rojas et al., 2013) demuestran que en esta
área ocurren cambios ambientales profundos en los últimos 30 años, los que también se
vinculan con una alta recurrencia de eventos fluviales (González, 1987; Mardones y
Vidal, 2001; Romero y Mendonça, 2009). En las últimas dos décadas (1990-2010),
nuevas zonas han sido dañadas por inundaciones asociadas principalmente al
vaciamiento de lagos glaciares (Dussaillant et al., 2010; Carrión, 2010).

La gran cuenca exorreica del río Aconcagua nace en la Cordillera de Los Andes y
desemboca al mar, en el océano Pacifico, en la bahía de Concón, en la zona central de
Chile. Exactamente se encuentra ubicada entre los paralelos 32° 20’ y 33° 07’ de la
latitud sur y entre los meridianos 71° 31’ y 70° 00’ de la longitud oeste (Figura 3). Tiene
una extensión cubierta aproximada de 7.337 Km2. El río Aconcagua, se forma al juntarse
los ríos Juncal y Blanco (Departamento de Administración de Recursos Hídricos, 2004).

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Figura 3. Información Hídrica de la Cuenca del Río Aconcagua, Fichas Temáticas 
Dirección
General de Aguas.

Dentro del registro histórico, existe evidencia de que la última gran inundación en esta
zona fue en Junio de 1987, donde aconteció un periodo de intensas lluvias de tal
magnitud que el puente 19 de Junio, el cual une la ciudad de La Calera con Artificio fue
arrasado por el agua (Figura 4). El evento de catástrofe dejó cientos de personas
damnificadas y hogares destruidos por el agua.

Hoy existe un potencial peligro por inundación en la misma zona, los años de sequía en
la región han dejado ver que no hay problema alguno por asentarse en las llanuras de

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inundación o dedicarse a la agricultura en el cauce que hoy no lleva más que un pequeño
canal (Apsi, 1987).

Figura 4. Fotografía del Diario Apsi Extra, 20 de Junio de 1987. Puente 19 de Junio cortado por las
intensas lluvias (Apsi, 1987).

La problemática de esta investigación será enfrentada con una metodología que se apega
bastante a las herramientas de sensores remotos, el uso de SIG, antecedentes
meteorológicos e hidrológicos disponibles en la Dirección General de Aguas y Análisis
sedimentológico. En el capítulo de Metodología serán detallados estos procedimientos.

1.2 Objetivos Generales


Evaluar y zonificar áreas con peligro de inundaciones en parte de la cuenca hidrográfica
del Río Aconcagua, entre el sector Artificio-La Calera, y poder establecer la recurrencia
de grandes inundaciones.

1.3 Objetivos Específicos


1. Identificar depósitos asociados a inundaciones a través de un análisis
sedimentológico para determinar procesos de infiltración.
2. Estimar los caudales máximos a partir de lo cálculos de las precipitaciones
futuras a través del estudio de las máximas precipitaciones de los últimos 20 años
para identificar y dimensionar la próxima inundación.

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3. Zonificar posibles áreas de desborde de caudal en periodos de intensas lluvias.

1.4 Hipótesis de Trabajo


En la comuna de La Calera existe un alto peligro geológico asociado a inundaciones en
la cuenca del Río Aconcagua, el cual es magnificado a causa del asentamiento de la
población en las llanuras de inundación, tal como sucedió en el invierno de 1987, donde
aconteció un periodo de intensas lluvias, donde solo la precipitación mensual para Julio
de ese año fue de 525.9 mm medida en la estación pluviométrica Estero Rabuco
(Dirección General de Aguas, 2018), fue tal la magnitud que el puente 19 de Junio, el
cual une la ciudad de La Calera con Artificio fue arrasado por el agua, por lo tanto, en
tiempos de crecidas por intensas precipitaciones existe un potencial peligro de
inundación para las comunidades que se encuentran viviendo actualmente en la zona
adyacente a la cuenca del río Aconcagua.

1.5 Limitaciones

Las limitaciones de esta investigación se presentan precisamente en la base de datos


dispuesta por la Direccion General de Agua (DGA) en cuanto a la cantidad de datos de
las estaciones Fluviométricas y Metereológicas, ya que de existir mayor cantidad de
datos las estimaciones de esta investigación podrían ser más exactas y probablemnte
incrementarse las estimaciones.

2. MARCO GEOGRÁFICO

2.1 Ubicación y Accesos


El área de estudio se ubica en la comuna de La Calera, Provincia de Quillota, Región de
Valparaíso, en las coordenadas 19H 293158,95 E/ 6371239,84 S; 19H 293118,88
E/6370260,17 S; 19H 295418,75 E/ 6371096,92 S; 19H 295358,97 E/ 6370127,80 S
(Figura 1) a aproximadamente 53 km de la ciudad de Viña del Mar. La comuna de La
Calera, se encuentra adyacente al sector seleccionado de la cuenca del Río Aconcagua.
Para acceder a La Calera, desde Viña del Mar, se toma la Ruta 60, por 50 minutos y
luego continuar por el desvío de la Autopista Los Andes.

15
2.2 Flora terrestre
La flora terrestre de la cuenca, se caracteriza por la presencia de Matorral Esclerófilo
Andino presente en la zona alta del río Aconcagua. Matorral Espinoso de las serranías y
Bosque esclerófilo costero, en el valle y desembocadura del río respectivamente. La
flora acuática de la cuenca, se caracteriza por la presencia de Algas de la Familia
Cloróficeae Myriophyllum sp
otamogeton sp
azolla sp Cladophora sp Jussiaea sp
Ceratophyllum sp. (Dirección General de Aguas, 2004).

2.3 Fauna acuática


Las taxas macroinvertebradas más comunes que se encuentran en la cuenca del río
Aconcagua son Crustáceos, Insectos, Anélidos y Platelmintos.

2.4 Clima
Los climas que se distinguen en la cuenca del Río Aconcagua corresponden a: Templado
de tipo Mediterráneo con estación seca prolongada y Frío de altura en la Cordillera de
los Andes.

2.4.1 Clima Templado Mediterráneo con estación seca prolongada

Se desarrolla prácticamente en toda la cuenca del río Aconcagua. Su característica


principal es la presencia de una estación seca prolongada y un invierno bien marcado
con temperaturas extremas que llegan a cero grados. Los Andes registra una temperatura
media anual de 15.2ºC pero los contrastes térmicos son fuertes. En verano las máximas
alcanzan valores superiores a 27ºC durante el día.

Los montos de precipitación media anual registrados en el sector costero de la cuenca


alcanzan valores aproximados de 395 mm/año y temperaturas de 14.5ºC. Por efectos del
relieve, en el sector centro de la cuenca, se presentan áreas de mayor sequedad y montos
menores de precipitación (261 mm/año). En sectores más elevados, las precipitaciones
aumentan alcanzando valores medios anuales de 467 mm y temperaturas medias anuales
de 14.1ºC (Estación Vilcuya).

16
2.4.2 Clima Frío de Altura

El Clima Frío de Altura, se localiza en la Cordillera de los Andes por sobre los 3.000
metros de altura. Las bajas temperaturas y las precipitaciones sólidas, caracterizan este
tipo climático, permitiendo la acumulación de nieve y campos de hielo de tipo
permanentes en cumbres y quebradas de la alta Cordillera. En general, para ambos tipos
climáticos, los valores registrados de precipitación, son mayores durante las temporadas
invernales especialmente durante los meses de Junio, Julio y Agosto (Figura 5)
(Dirección General de Aguas, 2004).

Figura 5. Montos de Precipitaciones Medias Mensuales registradas en Estación Pluviométrica de


Resguardo Los Patos, ubicada a 65 km al NE de la zona de estudio, en la Comuna de Putaendo
(Dirección General de Aguas, 2004).

3. METODOLOGÍA DE TRABAJO

La metodología de esta investigación incluye tres etapas: 3.1 Trabajo de pre-terreno, 3.2
Trabajo de terreno y 3.3 Trabajo de post-terreno.

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3.1 Trabajo de pre-terreno


El trabajo de pre-terreno incluye un estudio bibliográfico que incorpora revisión y
comprensión conceptual de lo que significa e implica el estudio del Peligro Geológico
asociado a Inundaciones. Además se estudiarán diversas metodologías usadas en
contexto de peligro por inundación. Se analizará el contexto geológico de la región
considerando las morfologías principales, depósitos y posibles fallas. Por último se
elaborará un mapa geomorfológico preliminar a partir de imágenes satelitales y cartas
topográficas.

3.2 Trabajo de terreno


El trabajo de terreno consistirá en la identificación de depósitos relacionados a
inundaciones a través de la elaboración de columnas estratigráficas y perfiles
longitudinales in situ al cauce del río con el principal objetivo de observar de forma
explícita el orden y disposición de los depósitos fluviales.

El análisis sedimentológico permitirá determinar el tamaño de grano, selección, grado de


esfericidad y redondez. Se han considerado las propiedades de los clastos, ya que, estos
reflejan la historia del ambiente de proveniencia y de la roca; se estudiará la relación
entre los clastos, los tipos y la orientación en la que se encuentran. Esta clase de
información también permitirá tener una idea preliminar de la capacidad de infiltración
que el suelo del cauce tiene.

Se realizarán transectas paralelas a infraestructuras como puentes de la zona de estudio,


tomando las dimensiones de estos y posteriormente esquematizarlos.

La determinación del Coeficiente de Rugosidad de Manning (CRM) ha sido obtenido a


través de una comparación entre fotografías de ríos con el CRM ya establecido por el
USGS (U.S. Geological Survey), dicho esto, se recorrerá la zona de estudio buscando
cuál de estas fotografías presenta más semejanzas con el área de estudio, en diversos
puntos, puesto que el CRM, varía a lo largo de un mismo río. Los coeficientes se
encuentran en la página oficial del sitio web

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(https://wwwrcamnl.wr.usgs.gov/sws/fieldmethods/Indirects/nvalues/) con 22 ríos con


sus respectivas fuentes de información, de esta forma cada vez que se asignaba un río de
la fuente U.S. Geological Survey, a un determinado punto a lo largo del Río Aconcagua,
este tomaba el valor n del río con el cual ha sido comparado.

3.3 Trabajo de post-terreno


El trabajo de post terreno incluirá: a) Análisis sedimentológico y estratigráfico, b)
Análisis Geomorfológico, c) Estimación de precipitaciones futuras, d) Estimación de
caudales máximos futuros.

Análisis sedimentológico y estratigráfico: consiste en la recopilación y


materialización esquemática de los depósitos del río, es decir analizar las mediciones de
terreno, para poder conceptualizar los tamaños el grano, y en general la sedimentología
de la zona de estudio y así posteriormente interpretar en el Capítulo 7 de Discusiones.

Análisis Geomorfológico: consiste en la recopilación de las observaciones medidas en


terreno, respecto de las geoformas del sistema fluvial, como cauce, llanura de
inundación, terrazas, barras, patrones de drenaje y formas del lecho y así posteriormente
interpretar en el Capítulo 7 de Discusiones.

Estimación de precipitaciones futuras: para estimar las precipitaciones futuras se


define primero la cuenca aportante, y luego se consideran las mediciones de las
estaciones pluviométricas que se encuentren en ella (río arriba de la zona de estudio). Se
recopilan las Precipitaciones Máximas Anuales en 24 horas, a partir de los Reportes
Meteorológicos disponibles en Información Oficial Hidrometeorológica y de Calidad de
Aguas en Línea de la Dirección General de Aguas. Con dicha información se obtendrán
estimaciones de las precipitaciones futuras de cada estación, para ciertos periodos de
retorno, considerando que las frecuencias de las precipitaciones pasadas se mantienen en
el tiempo. Existen 25 estaciones meteorológicas en la cuenca hidrográfica del Río
Aconcagua (Figura 6) de las cuales 7 han sido seleccionadas por cercanía a la zona de
estudio y por presentar una correlación con la estación más representativa (Estero
Rabuco) de las precipitaciones que caen sobre la cuenca aportante.

19
El coeficiente de correlación más aceptado, que para esta investigación el criterio ha
sido sobre 0,75, descartando así las estaciones que presenten un valor inferior a este.
Las estaciones seleccionadas son: Estero Rabuco, Catemu, Río Aconcagua en San
Felipe, San Felipe, Río Aconcagua en Chacabuquito, Vilcuya, y Riecillos.

Figura 6. Estaciones Meteorológicas correspondientes a la Cuenca Hidrográfica del Río Aconcagua


(Mapa de Elaboración propia, Google Earth, 2018).

De las estaciones seleccionadas se extrae información de Precipitaciones Máximas


Anuales en 24 horas a partir del año 2000, esto debido a la falta de datos de años
anteriores, posteriormente se tabulan y ordenan los datos en Microsoft Excel, donde se
analizan las frecuencias de las precipitaciones máximas diarias por año con el método de
distribución de Gumbel (Ponce, 1989), la cual es utilizada para modelar la distribución
del máximo (o el mínimo), calculando de esta forma valores extremos. Los resultados de

20



este método permiten calcular la precipitación máxima en 24 horas con periodos de


retorno de 10, 25, 50 y 100 años.

Estimación de caudales máximos: para saber el volumen precipitado en tales eventos


extremos en la cuenca aportante, se hacen mapas de isoyetas para los diferentes periodos
de retorno, mediante herramientas de interpolación de datos y análisis espacial en el
software ArcGis. Luego se convierten las isoyetas que son polilíneas a polígonos y se
realiza el procedimiento indicado en la sección 4.3 del Marco Teórico, utilizando
herramientas de calcula el área entre dos isoyetas, y se les asigna el valor promedio
entre las dos isoyetas que lo limitan.

Mediante uso de ArcGIS, se calculará el volumen precipitado en tales eventos extremos


mediante mapas de isoyetas, el tiempo de concentración y se utilizarán algunos de los
métodos definidos por la DGA para estimar el caudal del río durante esos eventos
extremos. Esta información se contrastará con los caudales de diseño en las zonas
críticas a inundarse como los puentes existentes en La Calera, los cuales han sido
estimados mediante perfiles transversales y el coeficiente de rugosidad de Manning.

4. MARCO TEÓRICO

Para el marco teórico de esta investigación se requieren de conceptos claves que


enmarcan la hipótesis de trabajo tales como: inundaciones, llanura de inundación y sus
causas, riesgo, peligro, vulnerabilidad, tiempo de concentración, caudales de diseño,
coeficiente de Rugosidad de Manning. Estos conceptos son claves para estimar el caudal
de diseño y los periodos de retorno.

4.1 Inundaciones y llanuras de inundación


Existen amenazas de origen hidrológico como lo son las inundaciones, las crecidas
repentinas y los aludes torrenciales (conocidos también como flujos de detritos o barro).
Las crecidas repentinas se refieren al paso de gran cantidad de agua en periodos de
tiempo muy cortos y a grandes velocidades, mientras que las inundaciones son
cantidades de agua fuera de su cauce natural, que se producen en tiempos relativamente

21



más largos. "Aludes torrenciales" se refiere al transporte de sedimentos (tierra, bloques,


escombros) en gran concentración. Todos estos son fenómenos ampliamente
relacionados puesto que, por ejemplo, las inundaciones se producen a partir de una cierta
intensidad de crecida.

En función de la velocidad del escurrimiento y de la velocidad con la cual se producen


las variaciones de nivel de las aguas, los fenómenos hidrológicos pueden clasificarse en:
ascensionales y torrenciales, lentos y repentinos, estáticos y dinámicos.

Los procesos ascensionales o inundaciones ocurren por lo general en las partes medias y
bajas de las cuencas y son producidas por lluvias fuertes o continuas que sobrepasan la
capacidad de absorción de los suelos y por la insuficiente capacidad de descarga de las
quebradas, riachuelos y ríos (represamiento). Se manifiestan por la elevación paulatina
del nivel de agua. Se producen especialmente en zonas de baja pendiente (<2%), a
orillas de lagos, lagunas, etc. Dan oportunidad para que las comunidades asentadas en
las riveras de los ríos o lagos puedan trasladarse a lugares más seguros, hasta que los
niveles del agua vuelvan a la normalidad, sin embargo causan daños o desplomes por
remojamiento de cimientos o sobresaturación de bases (Instrumentos de apoyo para el
análisis y gestión de los riesgos naturales dirigida al especialista en análisis de Riesgos
Naturales, 2002).

Las llanuras de inundación corresponden a un espacio de terreno llano colindante con un


río, principalmente con sus tramos inferiores y constituido por aluviones depositados por
el río. Se origina por la migración de la franja de meandros aguas abajo; ensanchando
por lo tanto el valle, cuyas laderas pueden llegar a separarse algunos kilómetros. En
épocas de inundación, cuando el río rebosa sus orillas se depositan sedimentos a lo largo
de éstas y en el mismo canal. (Llanura de inundación superficie de inundación, 2012).

Debido a su naturaleza siempre cambiante, las llanuras de inundación y otras áreas


inundables deben ser examinadas para precisar la manera en que pueden afectar al
desarrollo de las comunidades. Este capítulo presenta una visión general de los
conceptos importantes relacionados con las evaluaciones del peligro de inundaciones y

22



explora el uso de datos de percepción remota de satélites para complementar las técnicas
tradicionales de evaluación.

4.2 Causas de Inundación


Según el factor detonante se identifican 5 tipos principales de inundaciones asociadas a:
procesos volcánicos, procesos nivo-glaciares, deslizamientos, intervenciones antrópicas
y precipitaciones; estas últimas causan el 71% de las inundaciones en el período de
1574-2012 (Rojas O, 2014).

Los factores desencadenantes de inundaciones fluviales pueden estar relacionados con


diversas causas tales como: precipitaciones persistentes, lluvias intensas de corta
duración, fusión de nieve y hielo, descarga de aguas represadas por glaciares, procesos
de remoción en masa, rotura de embalses e infraestructura hidráulica y crecidas
asociadas a erupciones volcánicas (Ollero, 1997; Adhikari et al., 2010).
Para el caso de esta investigación las inundaciones son del tipo fluvial, las cuales, son un
proceso natural por el cual el flujo desborda los límites de un cauce (Tockner et al.,
2010). Este proceso deviene peligroso cuando el hombre ocupa zonas inundables,
transformando el fenómeno en una amenaza para los asentamientos humanos (Keller &
Blodgett, 2007). Al materializarse la amenaza, produce catástrofes o desastres,
iniciándose el conflicto entre los sistemas natural y social (Merz et al., 2010; Rojas y
Martínez, 2011).

4.3 Riesgo y Peligro Geológico


Lo anteriormente descrito indica que las amenazas de origen hidrológico conllevan
peligro, riesgo geológico y vulnerabilidad que afectan a las comunidades perjudicadas.
El peligro geológico corresponde a un evento físico, potencialmente perjudicial,
fenómeno y/o actividad humana que podría causar la muerte o lesiones, daños
materiales, interrupción de la actividad social y económica o degradación ambiental. El
peligro puede ser individual, combinado o secuencial en su origen y efectos.
(Sernageomin, 2015). El riesgo geológico corresponde a la probabilidad de
consecuencias perjudiciales o pérdidas esperadas (muertes, lesiones, daño a la
propiedad, medios de subsistencia, interrupción de actividad económica o deterioro del

23



ambiente), resultado de interacciones entre amenazas naturales o antropogénicas y


condiciones de vulnerabilidad. (Sernageomin, 2015). La vulnerabilidad, según Cannon
(1994), es una condición de la población o de los individuos en función de sus
características económicas y sociales en las que se desarrolla, además de su localización
geográfica, lo cual los hace más o menos susceptibles a ser afectados por un fenómeno
natural. En el caso de esta investigación, la población se encuentra adyacente al cauce
del río, lo que hace a sectores de la comuna de La Calera altamente vulnerables. Riesgo
= Peligro (Amenaza) * Vulnerabilidad. El riesgo es más concreto mientras que el peligro
es genérico.

4.4 Distribución Areal de precipitaciones


Se usa el Método de trazado de Isoyetas. Se denomina isoyeta a la línea que une los
puntos con igual precipitación. El procedimiento a seguir es el siguiente: a) Usando los
datos de las estaciones pluviométricas dentro o cercanas a la cuenca, mediante
interpolación, se trazan las isoyetas sobre la cuenca, b) se asigna al área encerrada por
dos isoyetas la media aritmética de éstas, c) se multiplica el área calculada y la
precipitación asignada obteniendo el volumen de agua caída. La suma en toda la cuenca
da el volumen total precipitado, d) la precipitación media de la cuenca es el volumen
total precipitado dividido por el área de la cuenca.

4.5 Tiempo de Concentración


El tiempo de concentración es el tiempo que tarda una gota de lluvia que ingresa a la
parte más distal de la cuenca en pasar por su punto de salida. Su determinación define
las duraciones de las precipitaciones de diseño. El tiempo de concentración depende de
las características geomorfológicas de la cuenca y está relacionado con la velocidad del
flujo a través de la pendiente media de la cuenca (Santis Sepúlveda, 2015).

El tiempo de concentración puede calcularse mediante ecuaciones empíricas definidas


por diversos autores, dentro de las que se encuentran:

24



1. Método de Kirpich
𝑳𝟎,𝟕𝟕
𝒕𝒄 = 𝟎, 𝟎𝟏𝟗𝟒𝟕 ∗ 𝟎,𝟑𝟖𝟓
𝑺

2. Método de Témez
𝟎,𝟕𝟓
𝑳∗
𝑻𝒄 = 𝟎, 𝟑 ∗
𝑺𝟎,𝟐𝟓
𝑶

3. Método de California Culverts Practice

𝟎,𝟑𝟖𝟓
𝑳𝟑
𝒕𝒄 = 𝟎, 𝟎𝟏𝟗𝟓 ∗
𝑯

Dónde:
tC: tiempo de concentración en minutos
TC: tiempo de concentración en horas
L: longitud del cauce principal en m
L*: longitud del cauce principal en km
S: pendiente promedio de la cuenca en m/m
SO: diferencias de cotas sobre L en porcentaje
H: diferencia entre cota máxima y mínima de la cuenca.

4.5 Caudales de Diseño y Coeficiente de Rugosidad de Manning

Para el diseño de un sistema de recolección y evacuación de aguas lluvias se debe


estimar el caudal de diseño.

El coeficiente de Rugosidad de Manning es un factor que considera otras variables,


asociadas a irregularidades presentes en el cauce que pudiesen afectar el caudal de

25



diseño y para ello, se utiliza el método de Cowan (Chow, 1983) donde se propone la
siguiente ecuación: n = m (n0+n1+n2+n3+n4) (Santis Sepúlveda, 2015).

Dónde:

n0: Valor de n para un canal recto, uniforme, prismático y con rugosidad homogénea.

n1: Corrección por irregularidades del perímetro mojado a lo largo del tramo estudiado.

n2: Corrección por variación de forma y de dimensiones de las secciones.

n3: Corrección por obstrucciones: troncos, rocas, etc.

n4: Corrección por presencia de vegetación.

m: Factor que mide la frecuencia de meandros o curvas

4.6 Periodos de Retorno

El estudio de las precipitaciones máximas es necesario en múltiples aplicaciones. Así en


hidrología para la estimación de avenidas es necesario conocer el valor de la máxima
precipitación probable registrada para un determinado período de retorno. El "período de
retorno o de recurrencia" (T) es el intervalo medio expresado en años en el que un valor
extremo, para este caso un evento de precipitaciones durante 24 horas, alcanza o supera
al valor "x", al menos una sola vez (Elías y Ruiz, 1979).

4.6.1 Distribución de Gumbel

La distribución de Gumbel, una variante de la distribución de valor extremo, es muy


popular en la hidrología para modelar eventos extremos que no se adecuan a la
distribución normal, su distribución acumulada se muestra en la siguiente función:
𝑭 𝒙 =𝓮−𝓮−𝒅 𝒙−𝒖

F(X) es la probabilidad de que un evento de lluvia sea menor o igual que x mm. Lo que
significa que la probabilidad de que ocurra un evento extremo sobre x mm es de 1-F(X),
despejando x tenemos:

26



𝐥𝐧 (− 𝐥𝐧 𝑭 𝒙
𝒙=𝒖−
𝒅
d y u son parámetros modelables según características de los datos con los que se
trabajan, como la media y la desviación estándar:
𝒖 = 𝒙 − 𝟎, 𝟒𝟓𝟎𝟎𝟒𝟕 ∗ 𝑺
𝟏
= 𝟎, 𝟕𝟕𝟗𝟔𝟗𝟔 ∗ 𝑺
𝒅
En esta expresión, 𝒙 es la media y S la desviación estándar de los datos.

4.6.2 Probabilidad de Excedencia y Periodo de retorno

Para definir la probabilidad presente en un evento extremo se requiere conocer dos


conceptos, que son el periodo de retorno y la probabilidad de excedencia:
Período de Retorno: se define como el tiempo que transcurre entre dos sucesos iguales.
Sea ese tiempo, T. Por ejemplo: El periodo de retorno para un terremoto de 9,5 grados
escala de Richter es de 350 años.
Probabilidad de Excedencia: es la probabilidad de que ocurra un evento con periodo de
retorno T.
𝑷 𝟏
𝒆𝒙𝒄𝒆𝒅𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂!𝑷 𝒙 !
𝑻

Con esto, sabiendo que la probabilidad de que ocurra un evento extremo sobre X mm es
de (1 – F(X)), se puede definir la probabilidad, asociada a un periodo de retorno T, de
que ocurra un evento extremo como:
𝟏
𝟏−𝑭 𝑿 =
𝑻
Con esto, se puede despejar F(X) y obtener un valor de evento extremo de x mm
asociado a un periodo de retorno de T años.

4.7 Caudales Máximos


Los caudales máximos para distintos periodos de retorno se determinarán mediante
relaciones indirectas del tipo precipitación-escorrentía.

27



4.7.1 Método Racional

Se utilizará el método racional, para verificar el comportamiento de cada cuenca donde


se emplaza el proyecto, frente a eventos pluviométricos extremos a diferentes períodos
de retorno, según la siguiente fórmula:
𝑪 ∗ 𝑰𝑻𝒕𝒄 ∗ 𝑨
𝑸=
𝟑, 𝟔
Dónde:
Q = caudal en m3/seg.
C = Coeficiente de escorrentía o fracción de la precipitación que escurre
superficialmente, que se estimó según tabla propuesta por el Manual de Carreteras
Volumen 3, el cual entrega recomendaciones para determinar el coeficiente de
escorrentía para distintos periodos de retorno, de acuerdo a las características de la
cuenca analizada.
ITtc = Intensidad de lluvia con período de retorno "T" y una duración "tc", expresada en
mm/hora.
A: Área aportante de la subcuenca en km2.
La intensidad máxima de la lluvia se obtiene de la relación Grunsky según la siguiente
expresión:

𝑷𝑻𝟐𝟒 𝟐𝟒
𝑰𝒕𝒄 = ∗
𝟐𝟒 𝒕𝒄

Dónde:
Itc = Intensidad media máxima para el periodo (mm/hr).
PT24 = Precipitación máxima en 24 horas para el periodo de retorno de T.
tC = Tiempo de concentración (hr).

Siguiendo la metodología indicada en el “Manual de cálculo de crecidas y caudales


mínimos en cuencas sin información pluviométricas” (DGA, 1995), usamos la siguiente
ecuación para calcular:

28



𝟏 𝑪 𝑻
𝑸= (𝑪 𝑻 = 𝟏𝟎 𝒂ñ𝒐𝒔 ∗ ∗ 𝑨𝑷 ∗ 𝑰𝑻𝒕𝒄
𝟑, 𝟔 𝑪 𝑻 = 𝟏𝟎 𝒂ñ𝒐𝒔

Dónde:
Q: Caudal máximo dado el periodo de retorno en m3/s.
C(T=10 años) : Coeficiente de escorrentía asociado a la Fórmula Racional para un
periodo de retorno de 10 años variable según la ubicación geográfica.
C(T)/C(T=10 años) : Factor de Frecuencia que depende de la ubicación geográfica y del
periodo de retorno.
Ap : área pluvial en Km2.
ITtc: Intensidad de lluvia con período de retorno "T" y una duración "tc", expresada en
mm/hora.

4.7.2 Método Verni King Modificado

Como las cuencas son de una amplia extensión, se usará además el método de Verni y
King Modificado, que funciona para cuencas entre 20 y 10000 Km2. La fórmula es la
siguiente (DGA, 1995):
𝑸 = 𝑪 𝑻 ∗ 𝟎, 𝟎𝟎𝟔𝟏𝟖 ∗ 𝑷𝟏,𝟐𝟒 𝟎,𝟖𝟖
𝟐𝟒 ∗ 𝑨𝒑

Dónde:
Q: Caudal máximo en m3/s dado un periodo de retorno T.
C(T) : Coeficiente empírico para un periodo de retorno de T años. Se calcula
multiplicando el coeficiente empírico para un periodo de retorno de 10 años (0.027 para
la III Región) por un factor de frecuencia que varía según la ubicación geográfica de la
cuenca y el periodo de retorno a usar.
Ap : área pluvial en Km2.
P : Precipitación diaria máxima asociada a un periodo de retorno de T años.

29



4.8 Caudal de Verificación


Una vez definidas las características para cada transecta realizada dentro del cauce, se
realizará una verificación en cada una de ellas, para verificar que el cauce tenga la
capacidad de contener una crecida centenaria, para eso, se usará la Fórmula de Manning
(Chow, 1983) usada para el sistema internacional de unidades, la cual consiste en lo
siguiente:

𝟓
𝑨𝟑 𝑺
𝑸= 𝟐

𝒏
𝑷𝟑

Dónde:
A: Área de la sección transversal mojada en m2.
P: Perímetro de la sección transversal mojado en m.
S: Pendiente del curso en m/m.
n: Coeficiente de rugosidad de Manning.
Q: Caudal de diseño en m3/s.

30



5. MARCO GEOLÓGICO REGIONAL

El marco geológico regional de esta investigación consta de las Formaciones que se


encuentran cercanas al área de estudio del Río Aconcagua (Figura 7). A continuación se
describen las Formaciones Quebrada del Pobre, Ajial, Cerro Calera, Horqueta, y Lo
Prado.


Figura 7. Mapa del Valle del Aconcagua. Extracto Carta Geológica Quillota-Portillo, Rivano 1996,
SERNAGEOMIN.

5.1 Formación Quebrada del Pobre (Jurásico Inferior; Sinemuriano)


Se ubica en la Cordillera de la Costa a la altura de Petorca en la Región de Valparaíso.
Al norte de la región es discordante sobre rocas volcánicas del Triásico mientras que al
norte del río Aconcagua es discordante con basamento paleozoico. Se presenta como
unidad sedimentaria marina, con areniscas, conglomerados e intercalaciones de
limonitas, calizas e ignimbritas. Por su contenido fósil (ammonites, corales y
pelecípodos) se le asigna una edad Sinemuriano. De acuerdo con litología y contenido
fosilífero se interpreta una depositación en plataforma en un ambiente litoral a sublitoral.

31



La existencia de una zona continental al oeste, en la parte superior de la unidad, es


sugerida debido a las intercalaciones de ignimbritas (Vergara et al. 1995).

5.2 Formación Ajial (Jurásico Medio; Aalaniense)


Se encuentra en la Cordillera de la Costa desde la altura de Petorca hasta bajo el río
Aconcagua en la Región de Valparaíso. Subyace de manera concordante con la
Formación Cerro Calera, mientras que al Norte esta unidad desaparece pasando
directamente a la Formación Horqueta, y yace concordante a la Formación Quebrada
del Pobre. Esta Formación consiste en una secuencia inferior de lavas ácidas y una
secuencia superior de depósitos piroclásticos de caída e ignimbritas, intercaladas con
rocas sedimentarias y calizas hacia el Este. Respecto a la geoquímica, las lavas
basálticas tienen tendencia calcoalcalina y presentan bajo contenido en HREE y un alto
contenido de Rb, K, Ba y Th. Los diversos fósiles (corales, equinodermos, pelecípodos y
amonitas) indican una edad Aalaniense. Hacia el norte de la Formación en su parte
superior se evidencian areniscas rojizas similares a las de la Formación Cerro Calera.
Debido a la geoquímica se interpreta que esta formación representa un arco (Vergara et
al. 1995).

5.3 Formación Cerro Calera (Jurásico Medio; Aalaniense – Bajociense)

Aflora en una franja NS desde La Calera hasta el sur de Olmué. Sobreyace de manera
concordante a la Formación Ajial y subyace también concordantemente a la Formación
Horqueta. Se define como una unidad marina sedimentaria compuesta de
conglomerados, areniscas y limolitas con intercalaciones de calizas principalmente
oolíticas (Figura 7). Se ha determinado una edad Aaleniense-Bajociense en base a su
contenido fosilífero (ammonites) (Thomas 1958; Covacevich y Piracés, 1976; Rivano et
al., 1993). Su litología y fauna indican condiciones litorales a sublitorales (Vergara et
al.1995).

5.4 Formación Horqueta (Jurásico Medio - Cretácico Inferior)

Aflora en una franja elongada NS desde el sector de la mina el Soldado hasta unos 20
km al norte de Curacaví. Se apoya concordantemente sobre la Formación Cerro Calera y
subyace en probable discordancia al miembro inferior de la Formación Lo Prado

32



(Piracés, 1976). Se define como una unidad volcánica y volcanoclástica continental,


compuesta por una parte inferior de lavas ácidas y básicas con intercalaciones de
areniscas, areniscas conglomerádicas y conglomerados (Vergara et al. 1995). La edad de
esta Formación solo se ha establecido por su posición estratigráfica, entre el Jurásico
Medio y el Cretácico Inferior ( Rivano et al., 1993).

5.5 Formación Lo Prado (Cretácico Inferior; Valanginiense - Berriasiano)


Aflora de manera NS en la Cordillera de la Costa en la V región y región Metropolitana.
Se separa de las unidades Jurásicas y del basamento Paleozoico occidental por
discordancia (Carter, 1963; Corvalán y Dávila, 1964) y hacia el este está en contacto
concordante con la Formación Veta Negra. Se divide en un miembro inferior
sedimentario marino el cual consiste en una secuencia marina de grauvacas, limonitas y
calizas (Figura 7) y un miembro superior compuesto de rocas sedimentarias
alternadamente marinas y continentales con intercalaciones volcánicas de química
bimodal (ignimbritas ácidas y lavas básicas subordinadas). La fauna fósil está compuesta
principalmente por ammonites y algunos pelecípodos que definen una edad
Valanginiense al Berriasiano.

6. MARCO GEOLÓGICO LOCAL

El marco geológico local de esta investigación se enfoca principalmente en depósitos


fluviales, coluviales y aluviales correspondientes a los depósitos propios del río (Figura
7) y donde se encuentran las poblaciones más cercanas a la llanura de inundación.

5.1 Sedimentos Cuaternarios No Consolidados Qel, Qac, Qg


Como depósitos No Consolidados se reconocen y diferencian en las Hojas Quillota y
Portillo los sedimentos eólicos y litorales recientes (Qel) , los sedimentos aluviales y
coluviales (Qac) y los sedimentos fluvioglaciales y glaciales (Qg) , asignados en general
al Cuaternario Superior o Reciente.

Los sedimentos aluviales, coluviales y depósitos de relleno de valles (Qac) están


relacionados a los cursos de agua actuales y tiene su expresión más importante en la
Hoya del río Aconcagua, en la mitad sur del área están formados por acumulaciones de

33



gravas y ripios, regular a mal estratificados, y por arenas y limos, con buena
estratificación, se trata en la mayoría de los casos de sedimentos efímeros, especialmente
los depósitos de valle y algunos conos de eyección (Qac(a)), los que suelen evolucionar
año a año, de acuerdo con la abundancia e intensidad de las precipitaciones.

Los depósitos de colapso gravitacional (Qac(b)) corresponden a deslizamientos en masa


de grandes proporciones, actualmente estabilizados y colonizados por vegetación en la
mayoría de los casos; los principales se ubican a lo largo de la Megafalla Pocuro
(derrumbes de Conchuca, Alicahue, Los Patos y Campos de Ahumada), otros, de
dimensiones más modestas aparecen en La Olla (Río Rocín) Salto del Soldado y
Juncalillo (por el camino 
Internacional a Mendoza) el derrumbe de Juncalillo, que
taponó y dio origen a la Laguna del Inca, ha sido erróneamente figurado en el mapa
como un depósito morrénico correspondiendo en realidad a un derrumbe. Estos
depósitos se habrían generado probablemente por colapso gravitacional debido a
movimientos sísmicos, llama la atención su ubicación preferencial a lo largo de la traza
de la Megafalla de Pocuro la que durante estos sismos pudo haber constituido una zona
de inestabilidad; igualmente llama la atención la relación espacial entre estos derrumbes
y las terrazas del borde oriental de la cuenca de San Felipe-Los Andes (Qt).

Los depósitos glaciales y fluvioglaciales exponen sólo en la parte oriental del área, Hoja
Portillo, generalmente estas acumulaciones se presentan en zonas fronterizas y asociadas
a formas de erosión glacial; estas son especialmente notorias en el curso superior del río
Colorado y en los nacientes del río Juncal y esteros Navarro y San José; También en el
límite norte de la Hoja se pueden apreciar en el sector del paso Los Teatinos importantes
acumulaciones morrénicas, las que están compuestas por abundante material clástico
grueso, anguloso, incluido en una matriz arenosa; es común encontrar asociados a estos
depósitos lóbulos glacio-nivales recientes. Se han incluido en estos últimos depósitos
mencionados morrenas de glaciares actuales como el del Juncal y morrenas de glaciares
de roca como el que se observa en el río Blanco (Rivano, 1996).

34



6. RESULTADOS

Los resultados se detallan en subcapítulos e incluye: 6.1 Análisis sedimentario y


estratigráfico. 6.2 Análisis geomorfológico. 6.3 Análisis de estimación de
precipitaciones futuras.

6.1 Análisis Sedimentario y Estratigráfico


El sistema fluvial del Río Aconcagua contiene sedimento acumulado dentro de los
canales y en las llanuras de inundación. La zona de estudio presenta depósitos de canal,
los cuales están compuestos generalmente de material grueso, además de sedimentos
tamaño limo, los clastos tamaño grava van desde los 2 a los 30 cm, este material incluye
gravas, troncos, y fango parcialmente consolidado que ha sido erosionado de las paredes
y algunas barras del canal. A continuación se tienen tres columnas representativas del
área de estudio. El mapa de ubicación para estas columnas se encuentra en la Figura 11.
La Columna Estratigráfica 1 (Anexo 1), descrita de base a techo (donde base es 1 y
techo es 2 (Tabla 1). El primer estrato tiene un espesor de 70 cm aproximadamente y
granulometría tamaño grava, sus clastos varían desde 2 a 20 cm, con forma redondeada
y baja esfericidad, de moderada selección, clasto soportado con clastos del tipo lavas
andesíticas e intrusivos. El segundo estrato de 50 cm de espesor aproximado, está
caracterizado con una granulometría tamaño limo, su forma es redondeada con alta
esfericidad, muy buena selección, textura matriz soportada y presenta abundates raíces
(Figura 8).
Tabla 1. Datos sedimentológicos de los depósitos fluviales de la Columna Estratigráfica 1.

Tamaño de los
Forma, Esfericidad y
Nº de individuos o
Redondez de los Selección Empaquetamiento Composición
estratos Granulometría
individuos
(mm)

Clastos de
Grava Redondeado y baja Moderadamente andesíticas y
1 Clasto soportado
(2 a 63) esfericidad seleccionado rodados intrusivos
(granitoides)

Limo Redondeado y alta Muy bien


2 Matriz soportada
(0,002 a 0,063) esfericidad seleccionado

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Figura 8. Fotografía y respectivo perfil esquemático de Columna 1.

La Columna Estratigráfica 2 (Anexo 2), descrita de base a techo, donde la base es 1 y


techo es 4 (Tabla 2). El primer estrato tiene un espesor de 15 cm aproximadamente y
granulometría limo con clastos tamaño grava, los cuales miden 15 cm en su extremo más
largo, con forma redondeada y de baja esfericidad, pobremente seleccionado, matriz
soportada, la composición de los clastos tamaño grava es de lavas andesíticas y rodados
de intrusivos (granitoides). El segundo estrato tiene un espesor de 50 cm
aproximadamente, granulometría tgrava, con clastos de 25 cm a 2 cm, con forma
redondeada y de baja esfericidad, selección moderada, clasto soportado y sus clastos son
en general de composición andesítica e intrusivos (granitoides). El tercer estrato tiene un
espesor de 10 cm aproximadamente, granulometría tamaño limo con clastos tamaño
grava o bolones de 5 a 10 cm de forma redondeada y baja esfericidad, selección
moderada, matriz soportada y sus clastos tamaño grava son de composición de lavas
andesíticas y rodados intrusivos. El cuarto estrato tiene un espesor de 78 cm
aproximadamente, granulometría grava con forma redondeada y de baja esfericidad,
pobremente seleccionado, clasto soportado y la composición de los clastos es de lavas
andesíticas y rodados intrusivos (granitoides), presenta raíces y una fina capa
cementante de color gris (Figura 9).

36



Tabla 2. Datos sedimentológicos de los depósitos fluviales de la Columna Estratigráfica 2.

Tamaño de los
Forma, Esfericidad y
Nº de individuos o
Redondez de los Selección Empaquetamiento Composición
estratos Granulometría
individuos
(mm)

Limo
Redondeado y baja Pobremente
1 (0,002 a 0,063) Matriz Soportada
esfericidad Seleccionado
con bolones

Clastos de lavas
Grava Redondeado y alta Moderadamente
2 Clasto soportado andesíticas y rodados
(2 a 63) esfericidad seleccionado
intrusivos (granitoides)

Limo
Muy redondeado y baja Moderadamente
3 (0,002 a 0,063) Matriz soportada
esfericidad seleccionado
con bolones

Clastos de lavas
Grava Redondeado y baja Pobremente
4 Clasto soportado andesíticas y rodados
(2 a 63) esfericidad seleccionado
intrusivos (granitoides)


Figura 9. Fotografía y respectivo perfil esquemático de Columna 2.

La Columna Estratigráfica 3 (Anexo 3), descrita de base a techo, donde base es 1 y techo
es 3 (Tabla 3). El primer estrato tiene un espesor de 20 cm aproximadamente y
granulometría tamaño grava, sus clastos varían desde 2 a 20 cm, con forma redondeada

37



y baja esfericidad, de moderada selección, clasto soportado y sus clastos en general son
lavas andesíticas y rodados intrusivos. El segundo estrato tiene un espesor de 28 cm
aproximadamente, la granulometría es tamaño limo, su forma es redondeada y de alta
esfericidad, de buena selección, matriz soportada, además de presencia de raíces. El
tercer estrato tiene un espesor de 32 cm aproximadamente, granulometría tamaño grava,
sus clastos son redondeados y de baja esfericidad, pobremente seleccionado, clasto
soportado, su composición es de clastos de andesíticas y rodados intrusivos
(granitoides), por encima de este último estrato, hay una fina capa de suelo y raíces, de
material muy fino (Figura 10).

Tabla 3. Datos sedimentológicos de los depósitos fluviales de la Columna Estratigráfica 3.

Tamaño de los
Forma, Esfericidad y
Nº de individuos o
Redondez de los Selección Empaquetamiento Composición
estratos Granulometría
individuos
(mm)

Clastos de
Grava Redondeado y baja Pobremente andesíticas y
1 Clasto soportado
(2 a 63) esfericidad Seleccionado rodados intrusivos
(granitoides)

Limo Redondeado y alta


2 Bien seleccionado Matriz soportada
(0,002 a 0,063) esfericidad

Clastos de
Grava Muy redondeado y baja Moderadamente andesíticas y
3 Clasto soportado
(2 a 63) esfericidad seleccionado rodados intrusivos
(granitoides)

38




Figura 10. Fotografía y respectivo perfil esquemático de Columna 2.

6.2 Análisis Geomorfológico


La Geomorfología de la zona se describe a partir de la confección de un mapa
geomorfológico (Figura 11), el cual muestra la extensa llanura de inundación en color
anaranjado, los colores rosados, azules y amarillo representan el cauce del río, donde se
observa abundante vegetación, el cuerpo principal de agua superficial, barras
longitudinales y laterales respectivamente, en verde oscuro se muestran cordones
montañosos, correspondiente a Formación Cerro Calera y Formación Lo Prado. Además
se identifican las rutas de carretera y los puentes que unen la comuna de la Calera con
Artificio e Hijuelas. Se muestran también los puntos donde se ha medido el CRM y los
puntos donde se han realizado las Columnas Estratigráficas 1, 2 y 3.
La llanura de inundación en el polígono de estudio tiene un área de 2.394.660 m2 y una
distribución de E-W, considerando su ancho desde el término del cauce hasta el primer
afloramiento de la Formación Cerro Calera. Las barras longitudinales abarcan un área
entre 1.057 m2 y 41.670m2 y las barras laterales tienen un área entre 4.100 m2 y 23.630
m2 .

39




Figura 11. Mapa Geomorfológico del Valle del Aconcagua.


Figura 12. Mapa de ubicación espacial de los perfiles topográficos A-A`, B-B`, C-C`, D-D`, E-E`, F-F`.

40



A continuación se describen y presentan perfiles topográficos transversales a lo largo de


la cuenca del Río Aconcagua (Figura 12). Se observa que en los cambios de pendiente,
se encuentran las Formaciones Lo Prado, Ajial y Cerro Calera.

El perfil topográfico A-A’ (Figura 13), se ubica a aproximadamente 4 km al SE, de la


zona de estudio, se observa que la llanura de inundación tiene un ancho de 2,55 km,
quitando el ancho del cauce (0,45 km en ese punto). Se observa que el domino NE con
2,06 km, en ese punto es mucho más extenso que la parte occidental que tiene 0,69 km
de ancho. Los puntos más altos corresponden a la Formación Cerro Calera y Lo Prado al
SW y NE respectivamente.

El perfil topográfico B-B´(Figura 13), se ubica a 0,8 metros al SE de la zona de estudio,


en el se observa que la llanura de inundación tiene una extensión de 3,1 km, quitando el
ancho del cauce (0,23 km en ese punto). Se observa el dominio NE con 3,23 km, es
mucho más extenso que la zona occidental, la cual tiene una extensión mucho inferior
con 0,029 km, esto debido a que en esta zona el canal se encuentra muy próximo a la
Formación Cerro Calera, la cual en el Perfil B-B corresponde el cambio de pendiente del
sector SW y al NE, se encuentra la Formación Lo Prado, con el miembro inferior Las
Pataguas.

El perfil topográfico C-C´(Figura 13), se encuentra dentro de la zona de estudio, en el se


observa que la llanura de inundación tiene una extensión de 4,2 km, quitando el ancho
del cauce (0,14 km en ese punto). Se observa que el dominio del Norte, con 2,34 km es
más bien de similar en extensión entre el sector Sur de la zona de estudio en es punto, la
cual tiene una extensión de 2,02 km.

El perfil topográfico D-D´(Figura 13), se ubica a 1,28 km al SW de la zona de estudio,


en el se observa que la llanura de inundación tiene una extensión de 3,26 km, quitando el
ancho del cauce (0,14 km en ese punto). Se observa que el dominio SE tiene una
extensión de 2,7 km, mientras que el dominio NW tiene una extensión de 0,7 km.

41



El perfil topográfico E-E´ (Figura 13) se ubica a 3 km al W de la zona de estudio, en el


se observa que la llanura de inundación tiene una extensión de 3,1 km, quitando el ancho
del cauce (0,37 en ese punto). Se observa que el dominio SE tiene una extensión de 2,8
km, mientras que el dominio NW tiene una extensión de 0,16 km.

El perfil topográfico F-F´ (Figura 13), se ubica a 7,6 km al sur de la zona de estudio, en
el se observa que la llanura de inundación tiene una extensión de 5,25 km, quitando el
ancho del cauce (0,77 en ese punto). Se observa que el dominio Este tiene una extensión
de 5,11 km, mientras que el dominio Oeste tiene una extensión de 0,15 km.


Figura 13. Perfiles de la llanura de inundación, designados como A-A`, B-B`, C-C`, D-D`, E-E`, F-F`.

42



6.3 Análisis y Estimación de Precipitaciones Futuras

6.3.1 Determinación del Coeficiente de Rugosidad de Manning

La determinación del CRM (la ubicación de donde se midieron los CRM, se muestra en
la Figura 11, correspondiente al Mapa Geomorfológico) se realizó a través de un análisis
comparativo utilizando imágenes de diferentes ríos de EE.UU, cuyo CRM ha sido
calculado previamente y múltiples veces. Los resultados permiten reconocer 3 valores de
CRM que corresponden, a los valores de los ríos Clark Fork at St. Regis, Montana con
n= 0,028 (Figura 15); Salt River Below Stewart Mountain Dam, Arizona con n= 0,032
(Figura 16); Moyie River at Eastport, Idaho con n= 0,038 (Figura 17). La distribución de
estos valores aumentan de E-W. Los valores del CRM aumentan mientras disminuye la
altitud del cauce del río (Figura 14).

Figura 14. Perfil de elevación de 1,4 km de extensión, donde se ha medido el CRM.

Las semejanzas existentes entre el Río Clark Fork at St. Regis, Montana, EEUU y el Río
Aconcagua (Figura 15) en las áreas identificadas son principalmente que el cauce
presenta una pendiente uniforme, los depósitos fluviales se presentan en los bordes del
cauce, al igual que la vegetación, es abundante en los bordes, este CRM se ha obtenido
en dos puntos distintos CRM 1, como muestra la Figura 14, en un perfil de elevación,
estas dos zonas se caracterizan por tener el agua dispersa y con abundante caudal, esto se
presume debido a que va más encajonado que en los otros dos sectores (Figura 15).

43




Figura 15. A-B: Río Clark Fork at St. Regis, Montana, EEUU, con n= 0,028. C: Río Aconcagua vista W. D:
Río Aconcagua vista NW.

Las semejanzas existentes entre el Salt River Below Stewart Mountain Dam, Arizona
Río Clark Fork at St. Regis, Montana, EEUU y el Río Aconcagua en las áreas
identificadas (Figura 16) son principalmente que el cauce presenta una pendiente
uniforme, bastante plana, uniforme y homogénea, el volumen de agua disminuye
considerablemente respecto de la zona más oriental, ya que, se encuentra canalizada a
través de un pequeño surco, debido a esto los depósitos tamaño grava se encuentran
descubiertos. Bajo estas similitudes entre ambos ríos se atribuye para este punto del Río
Aconcagua un valor de n= 0,032.

44




Figura 16. A-B: Salt River Below Stewart Mountain Dam, Arizona con n= 0,032. C-D: Vista Sur. E: Vista
Oeste. F: Vista Sur.

Las semejanzas observadas entre Moyie River at Eastport, Idaho, EEUU y el Río
Aconcagua (Figura 17), en la áreas identificadas, son principalmente los depósitos
tamaño grava en los bordes del río, pero ausentes como barras longitudinales en la parte
central del río, también presenta un volumen de agua intermedio respecto de las otras
dos mediciones de CRM, menor que la medición más oriental, pero de mayor volumen
que la medición en la parte más occidental, la vegetación también ha sido un indicador
semejante, ya que árboles y arbustos se encuentran en los bordes del cauce. Bajo estas
similitudes entre ambos ríos se atribuye para este punto del Río Aconcagua un valor de
n= 0,038.

45




Figura 17. A-B: Moyie River at Eastport, Idaho con n= 0,038. C-D: Río Aconcagua Vista SE.

6.3.2 Estimación de precipitaciones futuras

La Cuenca Hidrográfica del Aconcagua cuenta con 26 (Figura 18) estaciones con
información de Precipitaciones Máximas anuales en 24 horas, de ellas se han
seleccionado 7, las cuales corresponden a Estero Rabuco, Catemu, Río Aconcagua en
San Felipe, San Felipe, Río Aconcagua en Chacabuquito, Vilcuya, y Riecillos, la
selección de estas estaciones ha sido bajo el criterio de aguas arriba y en función de las
disponibilidad de datos de la Dirección General de Aguas.

46



Figura 18. Figura 18. Estaciones Meteorológicas correspondientes a la Cuenca Hidrográfica del Río
Aconcagua (Google Earth, 2018).

6.3.3 Periodos de Retorno

La Tabla 4 contiene los datos de los periodos de retorno de precipitación máxima en 24


horas para 10, 25, 50 y 100 años. Para la estación Estero Rabuco, se estiman 99 mm en
24 horas para un periodo de retorno de 10 años, 119 mm en 24 horas para un periodo de
retorno de 25 años, 134 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 50 años y 149
mm en 24 horas para un periodo de retorno de 100 años.

Para la estación Catemu se estiman 72 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 10


años, 87 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 25 años, 99 mm en 24 horas para
un periodo de retorno de 50 años, 110 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 100
años.

Para la estación Río Aconcagua en San Felipe se estiman 60 mm en 24 horas para un


periodo de retorno de 10 años, 74 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 25
años, 84 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 50 años, 95 mm en 24 horas para
un periodo de retorno de 100 años.

47



Para la estación San Felipe se estiman 66 mm en 24 horas para un periodo de retorno de


10 años, 80 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 25 años, 90 mm en 24 horas
para un periodo de retorno de 50 años, 101 mm en 24 horas para un periodo de retorno
de 100 años.

Para la estación Río Aconcagua en Chacabuquito se estiman 61 mm en 24 horas para un


periodo de retorno de 10 años, 70 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 25
años, 77 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 50 años, 83 mm en 24 horas para
un periodo de retorno de 100 años.

Para la estación Vilcuya se estiman 76 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 10


años, 89 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 25 años, 99 mm en 24 horas para
un periodo de retorno de 50 años, 109 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 100
años.

Para la estación Riecillos se estiman 121 mm en 24 horas para un periodo de retorno de


10 años, 148 mm en 24 horas para un periodo de retorno de 25 años, 167 mm en 24
horas para un periodo de retorno de 50 años, 187 mm en 24 horas para un periodo de
retorno de 100 años.

48



Tabla 4. Precipitaciones de diseño para periodos de retorno de 10, 25, 50 y 100 años, para cada estación.

ESTACIÓN UTM UTM ALTITUD PR 10 PR 25 PR 50 PR 100


ESTE NORTE msnm mm/24hrs mm/24hrs mm/24hrs mm/24hrs

ESTERO RABUCO 301556 6362964 300 99 119 134 149

CATEMU 318021 6373877 440 72 87 99 110

RÍO 337335 6374251 650 60 74 84 95


ACONCAGUA EN
SAN FELIPE

SAN FELIPE 340094 6374545 640 66 80 90 101

RÍO 358752 6364286 950 61 70 77 83


ACONCAGUA EN
CHACABUQUITO

VILCUYA 362293 6363236 1100 76 89 99 109

RIECILLOS 373110 6356480 1290 121 148 167 187

6.3.4 Tiempo de Concentración

El tiempo de concentración se ha calculado según los tres métodos descritos el Capítulo


4. Marco Teórico, Sección 4.4 Tiempo de Concentración. En la Tabla 5 se muestran los
datos área pluvial, longitud del cauce principal en metros y kilómetros y la pendiente
promedio de la cuenca, resultando Tc1, Tc2 y Tc3 los respectivos tiempos de
concentración de los métodos Kirpich, Témez y California Culverts Practice, dispuestos
en horas. Finalmente el Tc, corresponde al tiempo de concentración promedio de la
cuenca y la desviación estándar de los mismo datos.

49



Tabla 5. Datos y tiempo de concentración de la Cuenca del Río Aconcagua

ÁREA LONGITUD LONGITUD PENDIENTE Tc1 Tc2 Tc3 TC DESVIACIÓN


(km2) (m) (km) (m/m) (horas) (horas) (horas) SELECCIONADO ESTÁNDAR
(horas) (horas)

5.848 143.232,4 143,2 222,2 0,37 10,25 12,02 7,54 6,27

6.3.5 Estimacion de Caudales Máximos

Los resultado del Método Racional se exponen en la Tabla 6, donde para cada perido de
retrono de 10, 25, 50 y 100 años se asocia un Coeficiente de Escurriemiento, el cual
tiene un valor de 0,080 definido por la DGA en el Manual de Calculo de Crecidas y
Caudales Minimos en Cuencas sin Información Fluviometrica, segun su ubicación
Geográfica, en este caso la Región de Valparaiso. El Coeficiente de Frecuencia se
obtiene a partir de valores tabulados por la DGA en el mismo manual mencionado
anteriormente, el cual también depende de la ubicación geográfica de la cuenca asociado
a los respectivos periodos de retorno, la intensidad ha sido calculada mediante el
método de trazado de isoyetas, para finalmente obtener el caudal máximo.

Tabla 6. . Datos y caudal máximo del Método Racional de la cuenca del Río Aconcagua para cada
periodo de retorno de 10, 25, 50 y 100 años.

PERIODO DE COEFICIENTE DE COEFICIENTE INTENSIDAD ÁREA CAUDAL


2
RETORNO ESCURRIMIENTO DE (mm/hr) (km ) MÁXIMO
(años) FRECUENCIA (m3/s)

10 0,080 1,00 6,14 5.848 797

25 0,080 1,22 7,69 5.848 1.219

50 0,080 1,38 7,81 5.848 1.400

100 0,080 1,59 8,23 5.848 1.700

Los resultado del Método Verni-King Modificado se exponen en la Tabla 7, donde para
cada perido de retorno de 10, 25, 50 y 100 años se asocia un Coeficiente Empirico, el

50



cual tiene un valor de 0,290 tabulado en el Manual de Calculo de Crecidas y Caudales


Minimos en Cuencas sin Información Fluviometrica, asocaido segun la ubicacion
geografica de la cuenca. El Coeficiente de Frecuencia es el mismo utilizado para el
Método Racional. La precipitación máxima en 24 horas se obtiene mediante el método
de trazado de isoyetas, para finalmente obtener el caudal máximo.

Tabla 7. Datos y caudal máximo con el Método Verni-King Modificado de la cuenca del Río Aconcagua
para cada periodo de retorno de 10,25, 50 y 100 años

PERIODO DE COEFICIENTE COEFICIENTE PRECIPITACIÓN ÁREA CAUDAL


2
RETORNO EMPÍRICO DE MÁXIMA EN 24 (km ) MÁXIMO
(años) FRECUENCIA HORAS (mm) (m3/s)

10 0,290 1,00 82 5.848 884

25 0,290 1,22 103 5.848 1.170

50 0,290 1,38 105 5.848 1.192

100 0,290 1,59 110 5.848 1.271

En la Tabla 8 se muestran los valores obtenidos a través de ambos métodos, donde para
el Método Verni-King Modificado para el periodo de retorno 10 años ha sido superior
que método racional y para los otros periodos (25, 50 y 100 años) de retorno el Método
Racional es superior.
Tabla 8. Comparación de caudales máximos según Método Racional y Verni-King Modificado.

PERIODO DE RETORNO CAUDAL MÁXIMO MÉTODO CAUDAL MÁXIMO MÉTODO


(años) RACIONAL VERNI Y KING MODIFICADO
3
(m /s) (m3/s)

10 797 884

25 1.219 1.170

50 1.400 1.192

100 1.700 1.271

51



6.3.6 Caudal de Verificación

Para el dato del coeficiente de rugosidad de Manning, se utulizara la Figura 20, donde,
se tienen valores para cauces naturales (Oliveras, 2016) con abundate vegetacion y
arboles de tronco grueso. Se usará el valor de 0,20 para corrientes máximos de zonas
arboreas en ambas transectas.

Figura 19. Coeficientes de Rugosidad de Manning para cauces naturales.

52



En la Figura 20 se muestra la Transecta 1 paralela al Puente de Camino Internacional en


la Comuna de La Calera, el cual tiene una altura de 7 metros aproximadamente y 250
metro de ancho sobre el cauce del Río Aconcagua. En la Figura 21 se muestra un
esquema de las dimensiones del puente con el fin de obtener área y perímetro y en efecto
el caudal de verificación para conocer con qué caudal dicho puente se vería sobrepasado
en caso de inundación.

Figura 20. Transecta 1 sobre el puente de camino Internacional (ubicación de este puente en mapa
geomorfológico).

Figura 21. Dimensiones de los pilares y estructuras de los puentes de camino internacional, La Calera.

53



En la Tabla 9, se muestran los valores obtenidos a través del Caudal de verificación, con
un valor de 15.419 (m3/s). Lo que significa que se requiere de un caudal superior o igual
a este para que sobrepase el puente de Camino Internacional.
Tabla 9. Datos y resultado de Caudal de verificación para la Transecta 1.

ÁREA DE LA PERÍMETRO DE PENDIENTE DEL COEFICIENTE DE CAUDAL


SECCIÓN LA SECCIÓN CURSO RUGOSIDAD DE
(m3/s)
TRANSVERSAL TRANSVERSAL MANNING
m/m
MOJADA EN m2 MOJADO EN m

1681 577 0,57 0,2 12.944

En la Figura 22 se muestra la Transecta 2 paralela al Puente 19 de Junio, La Calera, el


cual tiene una altura aproximada de 5,5 metros y 280 metros de ancho sobre el cauce del
Río Aconcagua. En la Figura 23 se muestran las dimensiones de los pilares del puente.

Figura 22. Transecta 2, paralela al puente 19 de Junio, La Calera (ubicación de este puente en mapa
geomorfológico).

54



Figura 23. Dimensiones de los Pilares y estructuras de la Transecta 2.

En la Tabla 10, se muestran los valores obtenidos a través del Caudal de verificación,
con un valor de 1.890 (m3/s). Lo que significa que se requiere de un caudal superior o
igual a este para que sobrepase el puente 19 de Junio.

Tabla 10. Datos y resultado de Caudal de verificación para la Transecta 2

ÁREA DE LA PERÍMETRO DE PENDIENTE DEL COEFICIENTE DE CAUDAL


SECCIÓN LA SECCIÓN CURSO RUGOSIDAD DE
(m3/s)
TRANSVERSAL TRANSVERSAL MANNING
m/m
MOJADA EN m2 MOJADO EN m

530 556 0,75 0,2 1.890

55



7. DISCUSIÓN

7.1 Asociación de la Sedimentología y Estratigrafía

El tamaño de grano y las estructuras sedimentarias en los depósitos del canal del río
están determinadas por suministro de detritus, el gradiente del río, la descarga total y las
variaciones estacionales del flujo. La estratigrafía de la cuenca del Río Aconcagua en la
Comuna de La Calera, es bastante extrema, respecto de los tamaños de grano, ya que
existe una clara diferenciación de los estratos por su granulometría. Se identifican
intercalaciones evidentes de depósitos fluviales de tamaño grava y limo. Los depósitos
de tamaño grava indicarían eventos de alta energía que el río puede mover o transportar
durante los períodos de máxima competencia de las corrientes, mientras que los
depósitos de tamaño limo se asociarían a procesos de estaciones del río donde la energía
ha disminuido considerablemente, como eventos de sequía o donde el o los brazos del
río han cambiado su dirección o simplemente han disminuido su caudal, dando origen a
la formación de horizontes de suelo de tamaño fino clasificado como limo.
En la columna 3 (Anexo 3), se observa imbricación de ciertos granos, lo cual
corresponde al orden de los guijarros o bloques en un sedimento, de forma que sus ejes
mayores se coloquen aproximadamente paralelos y formando un cierto ángulo con la
horizontal que apunta en la dirección de la corriente o flujo que los depositó , como se
muestra en la Figura 24.

Estos clastos poseen un eje de longitud mayor a los otros dos (es decir, están alargados
en una cierta dirección). Cuando la corriente pierde fuerza y los deposita en el fondo
estos clastos se colocan en la posición hidrodinámicamente más estable, de no ser así la
corriente los voltearía (Navarro, 2011).

56




Figura 24. Esquema representativo de la Columna Estratigráfica 3 (Anexo 3), donde la flecha superior indica
la dirección del flujo y la flecha inferior indica la imbricación de los clastos.

57




Figura 25. Columnas Estratigráficas correlacionadas desde la base de los depósitos fluviales.

Según la correlación de las Columnas estratigráficas (Figura 25), se evidencia que el


techo de las columnas, no es el mismo para todas, lo que indica que la distribución de los
depósitos del río no es homogénea, lo que será un factor diferenciador respecto de la
infiltración del agua debido al tamaño del grano, ya que, la textura del suelo determina la
cantidad de agua que el suelo puede contener bajo distintas condiciones de humedad.
Los suelos de tamaño limo tienen partículas minerales muy pequeñas y sus poros
también son muy pequeños. Los suelos arenosos y/o conglomerádicos se componen de
partículas minerales más grandes y, por tanto, tienen un espacio poroso más grande.
Aunque parece contrario a la intuición, (Figura 26) los espacios porosos más pequeños
de un suelo arcilloso contienen una cantidad total de espacio mayor que los espacios
porosos de un volumen equivalente de suelo arenoso (University Corporation of
Atmospheric Research, 2006). Dicho esto, la capacidad de infiltración del suelo no será
la misma en todos los niveles, de esta forma la velocidad de infiltración del flujo de agua
va a depender del tamaño del poro, es así como en sedimentos finos donde el tamaño de

58



poro es pequeño el flujo fluye lentamente, mientras que en el caso de tamaño de poro
grande este fluirá rápidamente. Esto dependerá de la estratigrafía en profundidad del
lecho de la zona de estudio, en caso de encontrarse con gravas, la infiltración será más
rápida, ya que un flujo cualquiera siempre busca la zona de más fácil acceso y tardará
más en infiltrarse si es que se encuentra con capas de grano fino aunque tengan mayor
cantidad de poros, al ser de menor volumen se oponen al paso del agua y otorga mayor
resistencia a fluir. Estas relaciones entre espacio poroso y velocidad de infiltración,
permiten anticipar los efectos de las inundaciones en donde zonas caracterizadas por
sedimentos finos, se relacionarían a mayores volúmenes de agua en el tiempo, mientras
que zonas caracterizadas por sedimentos gruesos, se asociarían a menores volúmenes de
agua a igual intervalo de tiempo. En este caso la distribución del tipo de sedimento
evidencia una disminución del tamaño del grano hacia la parte norte centro lo que nos
permite relacionar estas zonas con un mayor grado de inundación.


Figura 26. Ilustración comparativa entre suelos arenosos, y arcillosos y el volumen entre poros según tamaño
de grano.

59
7.2 Variación extensional de la Llanura de inundación
En el Capítulo 6.1, se describen 6 perfiles topográficos, los cuales evidencian la
variación de la extensión de los dominios de la zona oriente y occidente (estos dominios
son respecto del cauce del río) de la llanura de inundación del Río Aconcagua. A
continuación se presentan algunas hipótesis o explicaciones del por qué de estas
variaciones en el ancho de llanura aluvial:

7.2.1 Control Litológico

El río viene con dirección E-W desde la comuna de Panquehue, San Felipe (a 32 km de
la zona de estudio), al encontrarse con Formación Cerro Calera, desvía su cauce hacia el
Norte de la Comuna de la Calera, esto se atribuye a que la Fm Cerro Calera compuesta
por areniscas, tobas y calizas subordinadas (Piracés, 1976) es de una composición
litológica de mayor competencia, es decir mayor resistencia a la erosión del agua,
generando el desvío del flujo superficial, evidenciando un control litológico, puesto que,
la disposición natural de un cuerpo fluvial es incidir donde el sustrato es menos
competente. Notar que parte del valle del Río Aconcagua coincide con el contacto entre
rocas sedimentarias de edad jurásica hacia el oeste (Fm. Cerro Calera) y rocas
volcánicas de edad cretácica hacia el este (Fm. Lo Prado). A partir de estas
observaciones es posible asociar también que el río en el área fluye siguiendo el contacto
entre ambas formaciones, las cuales presentan manteos regionales que podrían explicar
la variación en el ancho de la llanura de inundación a cada lado del cauce (Rivano et
al.,1996). En efecto al este del cauce los manteos son ligeramente mayores que los del
lado oeste, lo que explicaría el gran desarrollo de la llanura de inundación al este del
cauce.

7.2.2 Control Estructural

Los lineamientos estructurales, se asocian al desvío en la zona SW del cauce, los cuales
corresponden a manteos regionales con orientación NE descritos por Rivano et; al. en
efecto la orientación de las estructuras coinciden con el área erosionada de la Fm. Ajial
compuesta por flujos piroclásticos.

60



Los resultados de las características morfológicas de la llanura de inundación, en


particular su ancho a lo largo del cauce, permiten identificar que la mayor densidad de
población se encuentra asentada en las zonas más estrechas de la llanura, mientras que
terrenos destinados al cultivo y agricultura coinciden con las zonas más extensas de la
llanura de inundación. Los efectos de una eventual inundación se verían magnificados en
las zonas estrechas, debido a que un mayor volumen de agua se concentraría en una zona
más pequeña, por el contrario en la zona extensa el volumen de agua tendería a
propagarse disminuyendo sus efectos.

7.3 Impacto de la urbanización en zonas suceptibles de Inundación

Existe una secuencia de procesos e intervención humana, los cuales son los principales
responsables de que un proceso natural, como precipitaciones extremas, se vuelva un
evento peligroso. En la Figura 26 se muestra como en un inicio, antes de que de la zona
sea habitada, el entorno o el sistema se encuentra en equilibrio, es decir, el volumen de
agua ocupa las áreas inundables, sin generar ningún problema en caso de desbordes
(producto de precipitaciones), sino no hay población a la cual afectar, seguido de esto,
llegan los poblados, las construcciones y asentamientos humanos, poco a poco hay un
aumento en la cantidad de habitantes y en periodos de intensas lluvias, el río desborda en
la zona que le corresponde. En efecto la construcción antrópica genera procesos de
deforestación y esto conlleva a una mayor tasa de erosión de los suelos, ya que no están
protegidos o cubiertos por la flora de la zona, la capacidad de infiltración de los suelos
disminuye debido a la ausencia de la vegetación y además las zonas urbanas son
susceptibles de experimentar inundaciones, puesto que un elevado porcentaje del área de
la superficie está compuesto de tejados impermeables, calles y estacionamientos, donde
la escorrentía es muy rápida debido a la nula infiltración del agua a través del pavimento
(Edward J. Tarbuck, 2005).

61



Figura 27. Evolución de un sistema fluvial con la llegada del asentamiento humano y las respectivas
consecuencias en caso de inundación.

En la Figura 27 a se presenta una inundación (hidrograma de entrada) en una cuenca no


urbanizada (rural) y el hidrograma a la salida de dicha cuenca. Se observa que el gasto o
caudal máximo de entrada es, aproximadamente, de 740 m3/s, mientras que el de salida
es de 380 m3/s y se presenta 2 horas después del gasto o caudal máximo de entrada. En
la Figura 27 b se muestra la misma inundación, pero en una cuenca urbana. En este caso
el gasto máximo a la salida es de 660 m3/s y se presenta aproximadamente 35 minutos
después de la entrada. Lo anterior pone de manifiesto que en la cuenca urbanizada del
ejemplo, se tendría un caudal casi dos veces mayor que en la cuenca no urbanizada,
además de contar con menos tiempo (35 minutos contra 2 horas) para alertar a la
población, de la llegada de la creciente (CENAPRED, 2004). Esto se debe a que en una
cuenca urbanizada las obras de infraestructura (como pavimentos, techos, calles de
infraestructuras) hacen disminuir la impermeabilización del suelo contribuyendo a la
disminución de la infiltración, consecuentemente esto hace aumentar el volumen y
velocidad de la escorrentía superficial dentro de la cuenca, lo cual explica la diferencia
en tiempo de 35 minutos de la respuesta hidrológica del caudal para cuenca urbanizada y
2 horas para cuenca no urbanizada. En el caso de la cuenca sin intervención antrópica

62



(no urbanizada) la infiltración sería mayor, pues la impermeabilización del suelo no se


ve afectada, por ende gran parte de la escorrentía se infiltra disminuyendo el volumen y
la velocidad del flujo respecto de la zona urbanizada, de esta forma el agua logra
infiltrarse, tardando más tiempo en escurrir, mientras que en la zona urbanizada, el agua
no logra infiltrarse como debiese ser naturalmente, por el pavimento, de esta forma la
escorrentía aumenta y en consecuencia la velocidad del flujo también.


Figura 28. Hidrograma de respuesta hidrológica de una cuenca no urbanizada y una cuenca urbanizada.

7.4 Asociación de las predicciones de ENOS con la estimación de precipitaciones


futuras
Existe una predicción del fenómeno climático ENOS, conocido como El Niño -
Oscilación Sur, el cual corresponde a un patrón climático recurrente que implica
cambios en la temperatura de las aguas en la parte central y oriental del Pacífico. Esta
predicción ha demostrado que la frecuencia extrema de ENOS aumenta linealmente con
la temperatura media global (GMT por sus siglas en inglés) hacia un aumento de 1,5°C.
Los resultados del estudio indican que esta frecuencia creciente de eventos extremos de
El Niño continúa hasta un siglo después de que la GMT se haya estabilizado, respaldada
por una profundización de la termoclina oceánica (capa dentro de un cuerpo de agua
donde la temperatura cambia rápidamente con la profundidad), la cual sostiene un

63



calentamiento más rápido en el Pacífico ecuatorial oriental que en la región no


ecuatorial. En última instancia, esto implica un mayor riesgo de El Niño extremo para
las generaciones futuras después de que el aumento de GMT se haya detenido o
estabilizado.
La Figura 28 (indicada con la letra b) muestra que los valores cerca del círculo púrpura
indican el promedio durante los 31 años centrado en 1.5ºC de calentamiento (zona de
color verde claro).
La Figura 28 (indicada con la letra d) muestra las tendencias lineales y sus intervalos de
confianza del 90% durante el período 2050–2150 y el período 2151–2250 indican que
aunque el GMT disminuye, el gradiente de temperatura meridional continúa
debilitándose y la frecuencia extrema de El Niño continúa aumentando antes de que se
invierta. (Wang, 2017).


Figura 29. Proyecciones del fenómeno ENOS para el año 2050 y 2250.

Bajo estas predicciones de incremento del fenómeno de El Niño, según el GMT, es


posible garantizar que durante los próximos años 2028, 2043, 2068 y 2118, será
altamente lluvioso, por lo tanto en caso, de cumplirse estos pronósticos es plausible un
aumento en las precipitaciones futuras y por ende el valor de los caudales máximos para
años venideros sean incluso mayores que los estimados en el Capítulo 6.

64



7.5 Vinculación de Mapa de Peligro con Plan Regulador Municipal

La Calera tiene en su base de datos (Ilustre Municipalidad de La Calera) dos planos de la


ciudad, el primero elaborado en 1922 y el segundo en 1937 con la numeración oficial de
las manzanas de la Asociación Chilena de Aseguradores Contra Incendio. Finalmente en
1991 se realizó el Plano de Zonificación perteneciente al Plan Regulador Comunal de La
Calera, el cual no es vinculante con el Mapa de Susceptibilidad por Remociones en
Masa en Inundaciones de la Región de Valparaíso, dispuesto por SERNAGEOMIN en
2004.
Esto puede atribuirse a múltiples razones, una de ellas evidentemente es la realización
del Mapa de Peligro 13 años después del desarrollo del primer Plan Regulador de la
zona, pero aún así el tiempo ha transcurrido y no existe una actualización teniendo esta
información disponible dispuesta por SERNAGEOMIN. Dicho esto el plan regulador
indica zonas ZR4 (Figura 30) como zona de restricción de protección de recursos de
agua, lugar en el cual hay al menos 11 cuadras de viviendas. En esta área el Mapa de
Peligro (Figura 30) indica fenómenos de inundación por desborde de cauces y
susceptibilidad de moderada a baja, lo cual se describe como: Abanicos y llanuras
aluviales que pueden ser afectadas por inundaciones provocadas por algunas actividades
antrópicas como desbordes de canales de regadío, colapso de tranques o embalses de
agua. Por consiguiente no es menor la cantidad de personas que se verían afectadas en
caso de precipitaciones extremas (causa que no es mencionada por SERNAGEOMIN,
aun cuando la zona tiene antecedentes), dicho esto ni el plan regulador ni el mapa de
peligrosidad están enlazados en sus propuestas, la ubicación de los barrios residenciales
(y en efecto las zonas impermeables), los antecedentes del lugar, ni mucho menos hacer
un estudio más elaborado, el cual combine y unifique la cantidad de habitantes viviendo
en zonas de peligro y los peligros mismos.
Cabe mencionar que la Municipalidad de La Calera realizó hace aproximadamente 10
años, un hecho favorecedor en el área que aparece como ZE1 y ZE2 en el Plan
Regulador denominado, zona especial 1, áreas deportivas y zona especial 2,
equipamiento, llamado Complejo Deportivo Nueva Esperanza de La Calera, lo que
durante años fue un campamento que llevaba el mismo nombre, esto manifiesta que una

65



construcción deportiva, es un establecimiento ideal para mitigar las zonas inundables, ya


que, son zonas donde la concentración alta de personas es relativa y en caso de
temporales o sistemas frontales de alta intensidad este tipo de lugares se cierran durante
estos eventos, no así los hogares los cuales no son fáciles de abandonar para ir a
albergues o zonas de refugio en caso de emergencia.
Otro punto importante es descrito por el Artículo (Guzmán, 2016) “Construcción en
zonas inundables: los vacíos legales que favorecen al negocio inmobiliario”. En él se
menciona que en caso de que los dueños de una posesión inmueble quieran edificar o
realizar una ampliación deben someterse a procesos en la Ordenanza General de la Ley
General de Urbanismo y Construcción (OGUC), dicho esto, una vez iniciado los
trámites las personas suelen encontrarse con un problema, el cual se define como
emplazamiento en zonas de riesgo, afectando principalmente a los propietarios, cuyos
inmuebles se ubican en el borde de ríos, esteros o quebradas. La respuesta es negar la
ampliación por motivos de encontrarse en zonas de riesgo , por lo que, surgen
contradicciones por parte de la (OGUC) contra el Ministerio de Obras Públicas (MOP),
el cual en su sitio web menciona que la DOH (Dirección de Obras Públicas) es “la
entidad a cargo de revisar estudios técnicos y autorizar la definición o disminución de
las Franjas de Restricción, asociadas a crecidas de los cauces de ríos, esteros y
quebradas que afectan a una propiedad, de acuerdo al Plan Regulador comunal”, pero
la Ley Orgánica del MOP dice: “Se prohíbe construir casas para viviendas y con mayor
razón formar poblaciones en suelos periódicamente inundables, aun cuando la
inundación se presente en períodos de hasta diez años”. Esta prohibición sencillamente
anula la supuesta facultad de la DOH para definir o disminuir las franjas de restricción
cuando se trata de autorizar proyectos de viviendas. Finalmente luego de esta serie de
conflictos de autoridad y contradicciones, quien tiene el problema es quien quiere
ampliar su vivienda, por lo que, para ser revertida la negación de volver construir se
requiere de que el dueño de la propiedad contrate a un especialista en obras civiles, el
cual le diga cómo mitigar el riesgo de inundación de su vivienda, por ende el conflicto
está en que ninguna entidad pública se relaciona con otra para otorgar permisos de
construcción y ordenación urbana.

66




Figura 30. Mapa de Peligro de Inundaciones y Remociones en Masa, junto al Plan Regulador de la Comuna de
La Calera.

7.6 Asociación de Caudales


Para poder tener una visualización clara y dimensionar qué significan los caudales
máximos expuestos en el Capítulo 6, se tiene el registro del año 2000 en la Región
Metropolitana, en Junio de ese año, las precipitaciones de dicho año dejaron a 16.706
personas damnificadas y a 1.158 albergadas. El reporte indica que la red hídrica de ese
entonces para los ríos Maipo y Mapocho tenían un caudal de 700 (m3/s) y de 500 (m3/s)
respectivamente, dejaron como consecuencia una total capacidad en el Puente Bulnes y
riesgo para las provincias de talagante y Melipilla. El Zanjón de de la Aguda se había
desbordado en San Joaquín, Pob. Oscar Bonilla y sectores Vicuña Mackenna, Santa
Isabel, Puente Las Flores. El Canal San Carlos y las Perdices: tuvieron importante
aumento de caudal, con peligro de desborde, llegando a su cota máxima (Panamerican
Health Organization, 2000). Dicho esto, el cuadro de pronóstico para La Calera podría
ser altamente más grave que lo sucedido en Santiago, ya que, los caudales resultantes de
este estudio muestran valores muy por encima de los valores de los ríos Maipo y
Mapocho, siendo esta una real comparación y visualización de lo que podría ocurrir en
caso de inundación.
En el Capítulo 6, se obtuvieron caudales de verificación, lo cual implica estimar cuanto
caudal se necesita para que sobrepase ciertas estructuras, en este caso los Puentes de

67



Camino Internacional y el Puente 19 de Junio equivalentes a la Transecta 1 y 2


respectivamente. Para la Transecta 1 se requiere de 12.944 (m3/s) lo cual se compara con
el caudal del Método Racional en la Tabla 11, con una valor de 1700 (m3/s), con estos
resultados del caudal de verificación se tiene que no existirá desborde del cauce en la
Transecta 1 para un periodo de retorno de 100 años. Sin embargo para la Transecta 2 se
obtuvo un caudal de verificación de 1.890 (m3/s), lo cual se acerca bastante al caudal
obtenido con el Método Racional, indicando de esta forma que para un periodo de
retorno de 100 años, esta zona podría desbrodarse como ocurrio en el invierno de 1987
en la misma transeca.
Tabla 11. Comparación de Caudales

CAUDAL DE VERIFICACIÓN CAUDAL DE VERIFICACIÓN CAUDAL DEL MÉTODO


(m3/s). TRANSECTA 1 (m3/s). TRANSECTA 2 RACIONAL (m3/s) CON PERIODO
DE RETORNO DE 100 AÑOS

12.944 1.890 1.700

8. CONCLUSIONES

El análisis sedimentológico y estratigráfico de la zona ha permitido asociar los


depósitos tamaño grava a periodos de máxima capacidad del río, mientras que los
depósitos de tamaño limo estarían relacionados a períodos de sequía, condición que ha
perdurado por más de 8 años, de esta forma el sistema ha evolucionado (bajo caudal,
inexistencia de múltiples brazos del río) formando suelos con abundante vegetación.
El análisis estratigráfico permite determinar relaciones del tamaño del grano con la
infiltración del flujo vertical, el cual es de mayor velocidad en las zonas sur del cauce
del río, donde predomina el tamaño grava, mientras que esta es de menor velocidad en la
zona norte-centro del cauce del río, donde el tamaño es del tipo limo. Esto,
consecuentemente condiciona el comportamiento del flujo superficial, debido a que, al
infiltrarse el agua más rápido hacia el subsuelo, el flujo en superficie es de menor
velocidad y al infiltrarse a través de granulometría fina como limo, la velocidad del flujo
superficial es mayor. Esta información es relevante, puesto que permite zonificar

68



sectores donde los efectos de eventuales inundaciones pueden ser magnificados según el
tamaño granulométrico del suelo.

Los análisis geomorfológicos indican que la variación extensional de la llanura de


inundación se explica gracias a un control litológico, debido a la existencia de erosión
diferencial que presentan las Formaciones Lo Prado, Cerro Calera y Ajial. El flujo del
agua se ve obligado a desviar su recorrido en zonas donde el material es más competente
(Fm Cerro Calera). Por otra la asimetría del ancho de la llanura de inundación estaría
asociada a la incisión del cauce siguiendo el contacto entre formaciones, cuyos manteos
regionales varían en varios grados, en efecto en las zonas donde la llanura es más
extensa, los manteos son mayores favoreciendo de este modo el mayor desarrollo de la
llanura. Es importante subrayar que la variación del ancho de la llanura de inundación
aguas abajo, constituye un factor que condiciona una eventual inundación, puesto que
zonas con menor desarrollo de llanura de inundaciones serían más afectadas que
aquellas zonas donde su desarrollo es mayor.

La urbanización en zonas susceptibles de inundación se logra comprender con una


secuencia de eventos que implican la deforestación de zonas inundables, el aumento de
la población y por ende la impermeabilización de los suelos y viviendas. Dicho esto la
respuesta hidrológica que tiene una cuenca no urbanizada y una urbanizada es muy
diferente frente a eventos de intensas lluvias, ya que, en una no urbanizada, la
infiltración del flujo superficial se hace de manera natural y no abrupta, debido a la
vegetación y la permeabilidad natural del suelo, lo que significa un menor caudal,
mientras que en una cuenca urbanizada la infiltración es casi nula por materiales
impermeables de origen antrópico, aumentando el caudal muy por encima de lo natural
provocando catástrofes. Adicionalmente es reconocible una correspondencia entre los
factores sedimentológicos y geomorfológicos con la zona más urbanizada (zona urbana
de Artificio por el norte del cauce y zona urbana de La Calera por el sur de este), lo que
agregaría al sector mayores efectos ante una eventual inundación. Pues estos factores
condicionantes se potenciarían, al incluir impermeabilidad, estrechez en la llanura y alto

69
grado de urbanización, favoreciendo que el volumen de agua por inundación desborde
hacia las áreas urbanas.

Las predicciones del Fenómeno Climático ENOS (El Niño-Oscilación Sur), indican que
durante los períodos de 2050–2250, la frecuencia extrema de El Niño, continuará
aumentando antes de su inversión. Este pronóstico hace posible garantizar las
predicciones hechas de las precipitaciones futuras para periodos de retorno de 10, 25, 50
y 100 años.

El Plan regulador no es vinculante con el Mapa de Peligros asociado a Remociones en


Masa e Inundaciones de la Región de Valparaíso, ya que no existe participación
conjunta ni mucho menos una convocatoria de parte de la entidades y autoridades para
una actualización del Plan Regulador y de esta forma tener informada a la población
acerca de dónde es que se ubican sus viviendas y por ende sus propias familias.

La asociación de caudales indica que para el puente de Camino Internacional no


existirían desbordes respecto del caudal obtenido con el Método Racional con periodo
de retorno de 100 años, ya que se requieren de 12.944 m3/s para poder desbordar dicho
puente, esto se debe a sus grandes dimensiones. Para el puente 19 de Junio el pronóstico
es diferente, pues se requieren de 1890 m3/s de caudal para que este puente esté bajo
peligro de desborde, lo cual se acerca bastante al caudal obtenido con el Método
Racional con periodo de retorno de 100 años. Si a todo esto le sumanos las
características antrópicas, geomorfológicas y sedimentológicas antes descritas, los
efectos de desborde por inundación podrían ser magnificados.

En síntesis durante esta investigación se ha logrado cumplir con evaluar y zonificar


determinadas áreas con peligro de inundación en la cuenca del río Aconcagua, sector La
Calera, consiguiendo así los caudales de retorno para los próximos 10, 25, 50 y 100
años.

70
REFERENCIAS

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Gobernación. Inundaciones, México.

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2004. Diagnóstico y Clasificación de los cursos y cuerpos de agua según objetivos de
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https://www.aventurasgeologicas.com/2011/12/clastos-imbricados-pero-que-demonios-
es.html

72



ANEXOS

Anexo 1. Columna Estratigráfica N°1 de los depósitos fluviales del Río Aconcagua.

73



Anexo 2. Columna Estratigráfica N°2 de los depósitos fluviales del Río Aconcagua

74
Anexo 3. Columna Estratigráfica N°3 de los depósitos fluviales del Río Aconcagua

75



Anexo 4. Base de datos de Precipitaciones Máximas en 24 horas de las estaciones


meteorológicas. Disponible en la Dirección General de Aguas.

AÑO ESTERO RÍO ACONCAGUA SAN RÍO ACONCAGUA VILCUYA RIECILLOS CATEMU
RABUCO EN SAN FELIPE FELIPE EN CHACABUQUITO

1980 73 S/R S/R S/R S/R S/R 38

1981 106 S/R S/R S/R S/R S/R 46

1982 99 S/R 51 S/R 75 164 51

1983 54 S/R 43 S/R 50 75 33

1984 102 S/R 85 S/R 59 53 60

1985 39 S/R 23 S/R 41 39 19

1986 91 S/R 78 S/R 50 140 130

1987 90 S/R 74 S/R 107 47 49

1988 38 S/R 10 S/R 22 27 12

1989 50 S/R 30 S/R 52 117 39

1990 28 S/R 23 S/R 45 75 25

1991 74 S/R 42 S/R 71 98 60

1992 81 S/R 43 S/R 62 68 68

1993 48 S/R 29 S/R 45 90 32

1994 48 S/R 24 S/R 50 62 32

76



1995 13 S/R 29 S/R 29 42 34

1996 S/R S/R 25 S/R 25 22 34

1997 80 S/R 56 S/R 66 121 65

1998 28 S/R 8 S/R 23 15 9

1999 59 23 40 S/R 48 75 46

2000 89 67 66 70 68 88 52

AÑO ESTERO RÍO ACONCAGUA SAN RÍO ACONCAGUA VILCUYA RIECILLOS CATEMU
RABUCO EN SAN FELIPE FELIPE EN CHACABUQUITO

2001 80 0 52 56 80 129 56

2002 150 89 93 61 78 134 65

2003 46 36 42 45 52 70 40

2004 57 39 42 54 55 55 33

2005 52 24 32 35 56 111 32

2006 71 43 48 58 58 123 58

2007 43 30 39 54 59 100 30

2008 78 37 36 48 58 73 62

2009 70 26 35 45 49 63 31

2010 48 26 35 42 43 48 32

77



2011 39 25 27 27 35 37 31

2012 97 27 35 31 46 70 62

2013 47 28 32 37 48 61 41

2014 51 23 30 26 30 30 30

2015 64 49 50 51 75 92 55

2016 50 26 33 42 64 78 63

2017 41 33 37 43 47 55 38

78



Anexo 5. Mapa de Isoyetas para periodo de retorno de 10 años.

79



Anexo 6. Mapa de isoyetas con periodo de retorno de 25 años.

80



Anexo 7. Mapa de isoyestas para periodo de retorno de 50 años

81
Anexo 8. Mapa de Isoyetas para periodo de retorno de 100 años.

82

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