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Global Environmental Operations, Inc.
Lilburn, Georgia

Barcelona · Bogotá · Buenos Aires · Caracas · México


ÍNDICE DE
CONTENIDOS

PREFACIO XIII

INTRODUCCIÓN 1
Introducción 2
Composición del agua 2
Agua dulce 2
Iones y sales presentes en el agua 7
Principales contaminantes e iones presentes en el agua y métodos de
medida 7
Recursos hídricos 8
Calidad del agua 11
Reglamentos de la calidad del agua – estructura legal 12
Normas y regulaciones para el control de la calidad del agua 12
Aplicaciones 26
Problema ejemplo 28
Solución 28
Estándares de calidad del agua potable: estándares en EE.UU. e
internacionales 28

EFECTOS DE LA CONTAMINACIÓN 37
Ensayos de toxicidad del efluente 38
Agotamiento del oxígeno – demanda bioquímica de oxígeno 40
Consumo de oxígeno en una corriente de agua – ecuación del balance neto
de oxígeno 42
Biología del agua contaminada 43
VIII ÍNDICE DE CONTENIDOS

MEDIDA DEL CAUDAL 47


Revisión de la hidráulica de canales abiertos 48
Determinación de caudales normales y gradualmente variables 52
Tipos de medidores de caudal 54
Placas de azud 56

MUESTREO Y CONSIDERACIONES
ESTADÍSTICAS 59
Errores en las medidas de proceso 60
Distribuciones estadísticas 62
Distribuciones logarítmicas normales 62
Distribuciones de Weibull 63
Error probable 65
Repetición de medidas 66
Muestreo 67

CONCEPTOS IMPORTANTES DE
LA QUÍMICA ACUÁTICA 69
Especies iónicas comunes 70
Compuestos químicos más importantes en el medio acuático 70
Química de los carbonatos 71
Ablandamiento químico del agua 77
Tratamiento con exceso de cal 78
Eliminación de metales por precipitación 80
Metales pesados 80
Reducción del cromo y precipitación de metales 83
Silicatos en los sistemas de tratamiento 84
Nitrógeno 85
Azufre 85
Fósforo 85

ELEMENTOS DEL TRATAMIENTO


BIOLÓGICO 87
Introducción 88
Sólidos DBO y DQO 88
Sólidos en suspensión 89
Ecuación de crecimiento biológico 90
ÍNDICE DE CONTENIDOS IX

Crecimiento biológico y la ecuación de Monod 92


Principios de los sistemas de tratamiento biológico 95
Fangos activos y sus variaciones 98
Tratamiento biológico de residuos difíciles 106
Modelización de los procesos biológicos 107
STEADY 108
JASS 108
SCILAB/SeTS 110
Herramientas de modelización disponibles comercialmente 110
Guía para la modelización 114
Los modelos IWA para fangos activos 117

PRECIPITACIÓN Y SEDIMENTACIÓN 121


Teoría de la sedimentación 122
Los clarificadores y su diseño 123
Los decantadores lamelares y aparatos especializados 127

TEORÍA Y PRÁCTICA DE LA FILTRACIÓN 133


Diseño de filtros de profundidad:
teoría y práctica 134
Hidráulica de la filtración 135
Hidráulica del lavado de filtros 137
Filtros de membrana 138
Elementos de los filtros y diseño 141

DESINFECCIÓN 147
General 148
Velocidad de muerte – parámetros de desinfección 148
Situación del agua potable en EE.UU. 151
Cloro 154
Ozono 160
Luz ultravioleta 161
Otros compuestos desinfectantes 163

ELIMINACIÓN DEL NITRÓGENO 169


La química del nitrógeno y de los compuestos nitrogenados 170
Toxicidad del amoníaco y concentración de nitrógeno 171
X ÍNDICE DE CONTENIDOS

Nitrato 172
Eliminación del nitrógeno 172
Medios mezclados y sus correspondientes sistemas de crecimiento 185
Conclusiones 185

ELIMINACIÓN DEL FÓSFORO 187


Generalidades 188
Eliminación biológica del fósforo 189
Eliminación química del fósforo 194

TRATAMIENTO ANAERÓBICO 199


Procesos anaeróbicos básicos 200
Pretratamiento anaeróbico 202
Digestión de fangos 204
Tratamiento de fangos 206
Modelo de digestión anaeróbico ADM1 206

MICRO/ULTRAFILTRACIÓN 209
Introducción a la separación con membranas y microfiltración 210
Valores de diseño 213
Selección del proceso 214

ÓSMOSIS INVERSA 219


Introducción 220
Teoría de transferencia de masa 220
Selección de la membrana 221
Materiales de la membrana 221
Configuraciones de la membrana 222
Consideraciones en el diseño de la OI 222
Parámetros de diseño 223

ADSORCIÓN CON CARBONO 229


Curvas de ruptura 230
Las ecuaciones de Freundlich y de Langmuir 230
Economía y coeficientes de adsorción física con carbono 231
Proceso PACTTM 232
ÍNDICE DE CONTENIDOS XI

INTERCAMBIO IÓNICO 235


Introducción 236
Resinas 236
Selectividad 237
Coeficiente de selectividad 237
Consideraciones de diseño 238

FLOTACIÓN CON AIRE DISUELTO


Y TÉCNICAS 241
Diseños básicos para la flotación con aire disuelto 242
Parámetros de funcionamiento 243
Electroflotación 245
Electrocoagulación 248

COAGULACIÓN, FLOCULACIÓN Y
TRATAMIENTO QUÍMICO 251
Introducción 252
Floculación y mezcla 254
Práctica 254
Modelado 255

CASOS SOBRE RESIDUOS 257


Aguas residuales oleosas 258
Sangre y proteínas 258
Residuos lácteos 259
Residuos de refinerías 259
Residuos de recubrimientos metálicos 260
Residuos de almidón 260
Fenoles y residuos de plantas químicas 260
Corrientes residuales menores 260
Consideraciones finales 260

ÍNDICE 263
PREFACIO

A lo largo de los años, he tenido la suerte de conocer gente muy interesante y de


tener algunas experiencias fantásticas en el campo ambiental. En 1998, Nina
Webber, entonces Directora de Educación en el Instituto Americano de Ingenie-
ros Químicos (AIChE) me propuso dar un curso de tratamiento de aguas residua-
les, debido a que el profesor responsable de dicha enseñanza se marchaba a
enseñar a México. Este libro se desarrolló a partir de aquel encargo lectivo.
Por ello, esta obra constituye una herramienta de aprendizaje para los profe-
sionales de la ingeniería química y ambiental. No está diseñada para ser un libro
de texto ni un libro de introducción para aquellos que empiezan en la profesión,
ya que carece del desarrollo adecuado de la correspondiente teoría y se basa en la
experiencia en planta y en un dominio de los fundamentos de la ingeniería, que
resultan esenciales para muchos de los temas. Este libro es más bien un cruce
entre un manual de ingeniería química y un libro de repaso para el ingeniero de
planta que, en un momento dado, necesita aprender de forma autodidacta sobre el
agua y el tratamiento de las aguas residuales y no sabe por dónde empezar. Espero
que sirva para esta finalidad.
El desarrollo teórico tiende generalmente a ser escaso excepto en el área del
tratamiento biológico de aguas residuales y en algunos temas de hidráulica. He
puesto además mucho énfasis en el desarrollo del modelado de las plantas de tra-
tamiento biológico de aguas residuales, debido a que creo firmemente que es la
mejor manera de diseñar instalaciones, y es a lo que se tiende en el futuro. Me he
dado cuenta, a través de mi propio trabajo, que la mayoría de las plantas de trata-
miento de aguas residuales diseñadas en base a códigos municipales están sobre-
dimensionadas entre un 30% y un 50%, y entonces cuando el consultor aplica una
estimación estándar de ampliación, con frecuencia resulta una planta que está
sobredimensionada un 100% o más, y se han derrochado recursos y dinero muni-
cipales. El diseño de un sistema con tanta capacidad adicional da lugar a que el
funcionamiento sea tosco y el control pobre. También conduce a la percepción de
que los operadores de la planta de aguas residuales no necesitan comprender los
procesos biológicos, y que son meramente mecánicos de planta.
XIV

Finalmente, he incluido algunas sugerencias de diseño y experiencias prácticas


donde pueden resultar útiles. El objetivo ha sido proporcionar un marco de trabajo
con sugerencias y herramientas útiles, incluyendo direcciones de páginas web y refe-
rencias de diversos libros de texto que tratan temas específicos.
He reunido en un disco compacto diversas fuentes y referencias de Internet, que
incluyen artículos y publicaciones útiles, e incluso programas de ordenador, que se
suministraron como suplemento del curso. El disco lo tengo disponible a un precio
muy asequible.
Las preguntas, comentarios, críticas y otras cuestiones se deberán enviar a mi
atención vía mi dirección de correo electrónico: dlr@mindspring.com

DAVE RUSSELL
Marzo 2006
1
INTRODUCCIÓN

Introducción ........................................................................................................ 2
Composición del agua........................................................................................... 2
Agua dulce .......................................................................................................... 2
Iones y sales presentes en el agua ........................................................................... 7
Principales contaminantes e iones presentes en el agua y métodos de medida ............ 7
Recursos hídricos.................................................................................................. 8
Calidad del agua ................................................................................................ 11
Reglamentos de la calidad del agua – estructura legal ........................................... 12
Normas y regulaciones para el control de la calidad del agua .................................. 12
Aplicaciones....................................................................................................... 26
Problema ejemplo .............................................................................................. 28
Solución ............................................................................................................ 28
Estándares de calidad del agua potable: estándares en EE.UU. e internacionales...... 28
2 Introducción

INTRODUCCIÓN
Este curso está dedicado casi en su totalidad al agua y su tratamiento. En él vamos a
tratar todos los aspectos relacionados con el agua: tipos, características y contami-
nantes. Así mismo, se aportan algunas nociones de hidrología e hidráulica, pero ana-
lizando sólo los aspectos necesarios para permitir familiarizarse con cada tema e
identificar algunas dificultades y errores comunes que los ingenieros químicos come-
ten en aspectos relacionados con el agua.
Vamos a estudiar también diversos aspectos del tratamiento biológico con cierta
profundidad debido a que es importante conocer cuáles son los límites de los sistemas
biológicos y, principalmente, dónde se pueden aplicar y dónde no. Por último, se abor-
dan algunas dificultades inherentes a los sistemas de medida más habituales e incluso
se dan algunas pinceladas sobre la precisión de las medidas con la finalidad de poder
caracterizar adecuadamente los desechos de acuerdo con la legislación vigente.

COMPOSICIÓN DEL AGUA


El agua se compone de dos partes de hidrógeno y una de oxígeno. Pero más impor-
tante que sus componentes son los contaminantes que contiene. En una reacción quí-
mica, estaríamos satisfechos con un rendimiento que nos asegure un 99,95% de
pureza. Sin embargo, en el caso del agua este nivel de impurezas es inaceptable. Para
esta sustancia, niveles de contaminantes que normalmente se consideran insignifican-
tes pueden echar a perder la calidad del producto y su posible uso.
Ejemplos de este rechazo son aspectos como la salinidad o NaCl disuelto, ya que si se
hallan presentes a una concentración de 500 ppm o superior, el agua no será potable. Otro
ejemplo claro: la presencia de cantidades tan pequeñas como 1 ppm de plomo, 10 ppm de
nitrato, 10 ppm de sólidos residuales, ó 5 ppm de detergentes harían el agua inservible.

AGUA DULCE
Características:
Fórmula: H2O
Gases disueltos: el más importante es el oxígeno seguido del nitrógeno.
Solubilidad de los gases en el agua: véase Tabla 1.1.
La concentración de oxígeno en agua a cualquier presión viene dada por:
Ln C = – 139,34411 + 1,575701 u 10 5 /T – 6,642308 u 10 7 /T 2
+ 1,243800 u 10 10 /T – 8,621949 u 10 11 /T 4
– Chl > ^ 3,1929 u 10 2 ` – ^ 1,9428 u 10 1 /T ` + ^ 3,8673 u 10 3 /T 2 ` @
donde Chl es la clorinidad en gramos/kilogramo y se define como:
Clorinidad = Salinidad / 1,80655
La salinidad es aproximadamente igual a los sólidos totales en el agua después de
que los carbonatos se hayan convertido en óxidos, y los bromuros y los ioduros hayan
sido sustituidos por cloruros.1

1. Véase Standard Methods Oxygen Disolved Method 4500-O/Azide Modification.


INTRODUCCIÓN 3

Tabla 1.1 Solubilidad del oxígeno en el agua en contacto con aire saturado de
humedad a presión atmosférica (101,3 kPa)1
Solubilidad del oxígeno en mg/l
Temperatura
Clorinidad 0 5 10 15 20 25
0 14,621 13,728 12,888 12,097 11,355 10,657
1 14,216 13,356 12,545 11,783 11,066 10,392
2 13,829 13,000 12,218 11,483 10,790 10,139
3 13,460 12,660 11,906 11,195 10,526 9,897
4 13,107 12,335 11,607 10,920 10,273 9,664
5 12,770 12,024 11,320 10,656 10,031 9,441
6 12,447 11,727 11,046 10,404 9,799 9,228
7 12,139 11,442 10,783 10,162 9,576 9,023
8 11,843 11,169 10,531 9,930 9,362 8,826
9 11,559 10,907 10,290 9,707 9,156 8,636
10 11,288 10,656 10,058 9,493 8,959 8,454
11 11,027 10,415 9,835 9,287 8,769 8,279
12 10,777 10,183 9,621 9,089 8,586 8,111
13 10,537 9,961 9,416 8,899 8,411 7,949
14 10,306 9,747 9,218 8,716 8,242 7,792
15 10,084 9,541 9,027 8,540 8,079 7,642
16 9,870 9,344 8,844 8,370 7,922 7,496
17 9,665 9,153 8,667 8,207 7,770 7,356
18 9,467 8,969 8,497 8,049 7,624 7,221
19 9,276 8,792 8,333 7,896 7,483 7,090
20 9,092 8,621 8,174 7,749 7,346 6,964
21 8,915 8,456 8,021 7,607 7,214 6,842
22 8,743 8,297 7,873 7,470 7,087 6,723
23 8,578 8,143 7,730 7,337 6,963 6,609
24 8,418 7,994 7,591 7,208 6,844 6,498
25 8,263 7,850 7,457 7,083 6,728 6,390
26 8,113 7,711 7,327 6,962 6,615 6,285
27 7,968 7,575 7,201 6,845 6,506 6,184
28 7,827 7,444 7,079 6,731 6,400 6,085
29 7,691 7,317 6,961 6,621 6,297 5,990
30 7,559 7,194 6,845 6,513 6,197 5,896
31 7,430 7,073 6,733 6,409 6,100 5,806
32 7,305 6,957 6,624 6,307 6,005 5,717
33 7,183 6,843 6,518 6,208 5,912 5,631
34 7,065 6,732 6,415 6,111 5,822 5,546
35 6,950 6,624 6,314 6,017 5,734 5,464
36 6,837 6,519 6,215 5,925 5,648 5,384
37 6,727 6,416 6,119 5,835 5,564 5,305
38 6,620 6,316 6,025 5,747 5,481 5,228
39 6,515 6,217 5,932 5,660 5,400 5,152
40 6,412 6,121 5,842 5,576 5,321 5,078
41 6,312 6,026 5,753 5,493 5,243 5,005
42 6,213 5,934 5,667 5,411 5,167 4,933
4 Agua dulce

Tabla 1.1 (Continuación)


Solubilidad del oxígeno en mg/l
Temperatura
Clorinidad 0 5 10 15 20 25
43 6,116 5,843 5,581 5,331 5,091 4,862
44 6,021 5,753 5,497 5,252 5,017 4,793
45 5,927 5,665 5,414 5,174 4,944 4,724
46 5,835 5,578 5,333 5,097 4,872 4,656
47 5,744 5,493 5,252 5,021 4,801 4,589
48 5,654 5,408 5,172 4,947 4,730 4,523
49 5,565 5,324 5,094 4,872 4,660 4,457
50 5,477 5,242 5,016 4,799 4,591 4,392

El nitrógeno también es soluble en agua, pero la presencia de nitrógeno en forma


gaseosa o N2 disuelto es esencialmente inerte. Las principales formas de nitrógeno en
el agua son amoníaco, nitratos y nitritos. Sólo hay que preocuparse por la solubilidad
del nitrógeno u otros gases en el agua cuando se está diseñando un sistema de flota-
ción a presión.
La ley de Henry da una idea de la solubilidad de otros gases.
Presentando la razón presión–concentración como una ecuación y usando el sím-
bolo moderno habitual para la constante de la ley de Henry en función de la concen-
tración, se obtiene la ley de Henry en la siguiente forma:

p = Kccc

En esta ecuación p es la presión parcial del gas, c es la concentración molar y K’c


es la constante de la ley de Henry en concentración molar. Cuando las concentracio-
nes y presiones parciales son relativamente bajas, la ley de Henry describe con exac-
titud el comportamiento de los gases disueltos en líquidos. A medida que las
concentraciones y las presiones parciales aumentan, las desviaciones a la ley de
Henry se acentúan. Este comportamiento es muy similar al comportamiento de los
gases, los cuales se desvían de la ley de los gases ideales a medida que la presión
aumenta y la temperatura disminuye. Por esta razón, las disoluciones que cumplen la
ley de Henry se llaman a veces disoluciones diluidas ideales.
Ya se dispone de valores experimentales de la constante de la ley de Henry para un
elevado numero de gases en diferentes disolventes. La Tabla 1.2 ofrece una pequeña
selección de los valores de esta constante para algunos gases disueltos en agua.
Los valores de dicha tabla se han calculado a partir de tablas de propiedades ter-
modinámicas molares de sustancias puras y solutos acuosos.
La inversa de la constante de la ley de Henry, multiplicada por la presión parcial del
gas en contacto con la disolución, es igual a la solubilidad molar del gas. Por consi-
guiente, el oxígeno a una atmósfera tendría una solubilidad molar de (1/756,7) mol/dm3
ó 1,32 mmol/dm3.
INTRODUCCIÓN 5

Tabla 1.2 Constantes de la ley de Henry


molar para disoluciones acuosas a 25 ºC
Gas Constante Constante
(Pa/(mol/dm3)) (atm/(mol/dm3))
He 282,7 u106 2865,0
O2 74,68 u106 756,7
N2 155 u106 1600,0
H2 121,2 u106 1228,0
CO2 2,937 u106 29,76
NH2 5,69 u106 56,9

Los siguientes ejemplos ayudarán a comprender mejor este concepto.

■ Ejemplo 1
La cantidad disuelta de oxígeno en agua saturada de aire a condiciones atmosféricas normales de
25 ºC se puede calcular de la siguiente forma. Normalmente, la atmósfera contiene un 20,948%
de moléculas de oxígeno, lo que corresponde a una presión parcial de oxígeno de 0,20948 atm ó
20,67 kPa. Usando la constante de ley de Henry (Tabla 1.2), se calcula que la concentración de
oxígeno es de 0,20948 atm/(756,7 atm/(mol/dm3)), que es igual a 2,768 u 10-4 mol/dm3 ó 0,2768
mmol/dm3, que con la masa molecular del oxígeno de 32 g/mol equivale a 0,0088587 g/dm3 ó
alrededor de 8,86 mg/l, valor similar a los 10,657 mg/l de la Tabla 1.1. ■

■ Ejemplo 2
Si se quiere trabajar con un sistema de flotación mediante aire disuelto a 50 psig (115,23 ft de
presión de agua ó 3,4473785 bar) de presión, ¿qué cantidad de nitrógeno y oxígeno disueltos se
liberará del agua cuando la presión vuelva a ser la atmosférica?
La densidad del agua es de alrededor de 1 kg/dm3 ó 1000 kg/m3. La presión es aproxima-
damente igual a una columna de agua de 35,15344 m de altura. Una columna de agua de
35,15344 m de altura y 1 m2 de base, corresponde a un volumen de agua que, de acuerdo con
su densidad de 1000 kg/m3, ejercería una presión de 35153,44 kg/m2 sobre su base, lo que se
traduce en 344,7375 kPa de presión. La presión total del sistema es la presión atmosférica
más la compresión, o sea, 101,325 kPa + 344,7375 kPa, lo que suma 446,0625 kPa. (Esto
equivale a 446,0625/101,325 = 4,4023 atm). La descompresión de 3,4023 atm (4,4023 atm –
1 atm) producirá un cambio de concentración de nitrógeno de 3,4023/1600 = 0,002126375
mol/dm3. (Utilizando la constante de la ley de Henry en Pa/(mol/dm3) de la Tabla 1.2, calcu-
lamos que el cambio de presión de 344,738 kPa producirá un cambio de concentración de
2,12644 mmol/dm3) 2. Por cada galón de agua, la cantidad de nitrógeno generado es de 3,785
dm3/gal u 2,12644 mmol/dm3 = 8,418 mmol/gal ó 0,00666 ft3/gal, lo que equivale a unos 189
ml/ft3. Resolviendo para el oxígeno de forma análoga, calculamos que el oxígeno liberado es
alrededor de 4,496 mmol/dm3 ó 100,7 ml/l ó 382 ml/ft3. Por tanto, el volumen total de gas
liberado es de alrededor de 571 ml/ft3. ■

2. Obsérvese que las diferencias entre los valores de las constantes de la Tabla 1.2 (no se correlacionan
exactamente con la conversión de 101325 Pa = 1 atm) causa discrepancias, a partir de la segunda o ter-
cera cifra significativa, en los valores de volumen y concentración obtenidos.
6 Agua dulce

El valor de la constante de la ley de Henry depende de la temperatura. Dicho valor


generalmente aumenta con la temperatura. Como consecuencia, la solubilidad de los
gases generalmente disminuye con el aumento de la temperatura. Un ejemplo de este
hecho se observa al calentar agua en la cocina. Las burbujas de gas que aparecen en
las paredes de la cacerola estando aún a temperaturas claramente inferiores al punto
de ebullición del agua son burbujas de aire, que se forman debido a su menor solubi-
lidad en agua caliente. Un pez moriría por asfixia en una pecera llena de agua previa-
mente hervida o destilada, debido a la falta de oxígeno disuelto, a menos que el agua
se haya aireado antes de introducir el pez.
Se puede obtener un listado muy completo de constantes de la ley de Henry en
http://www.henrys-law.org, Compilation of Henry's Law Constants for Inorganic
and Organic Species of Potential Importance in Environmental Chemistry, Version 3.
(R. Sander, 1999). El archivo está en formato PDF y en formato PostScript, ambos en
formato comprimido ZIP. Por otro lado, diversas bases de datos de propiedades físi-
cas incluyen las constantes de la ley de Henry; por ejemplo, se puede acceder al pro-
grama de cálculo de la PHYSPROP, desarrollado por SCR, en la siguiente dirección
web: http://www.syrres.com/what-we-do/product.aspx?id=133. En cualquier caso,
los valores del coeficiente de Henry determinados experimentalmente por diferentes
investigadores pueden diferir en un orden de magnitud.
Si se dispone de un valor para el coeficiente de Henry a unas condiciones deter-
minadas (atm m3/mol), puede obtenerse el valor del coeficiente para otras condicio-
nes mediante la siguiente ecuación:

H TS = H R u exp > – 'H V TS /R c 1/T S – 1/T R @

donde HTS es el coeficiente a la temperatura TS, y TR es la temperatura de referencia en


grados kelvin. El término 'HV,TS es la entalpía de vaporización a TS en unidades de
cal/mol, y Rc es la constante de los gases ideales, que para las unidades utilizadas es
1,9872 cal/mol K. Existen tablas que recogen el valor de la entalpía de vaporización
para el vapor del agua y para cualquier fluido en diversos manuales de ingeniería quí-
mica (p.ej., Perry's chemical engineers' handbook). Como alternativa se pueden
encontrar en Internet, por ejemplo en la web de USEPA: http://www.epa.gov/air/
oaqps/eog/bces/module4/enthalpy/enthalpy.htm#table2
El estudio de la ley de Henry ha interesado a los ingenieros químicos desde
hace mucho tiempo. Sin embargo, cuando se detectó la preocupante presencia de
benceno, tolueno y MTBE en las aguas subterráneas, el tema fue recuperado con
renovado interés por los especialistas en medio ambiente, dada la importancia de
la ley de Henry en los separadores diseñados para eliminar el benceno, tolueno,
etilbenceno, xileno y MTBE resultantes de derrames o escapes de depósitos de
gasolina. El MTBE no se puede eliminar de forma efectiva sólo con un separador.
Los coeficientes de Henry en realidad no son constantes, ya que dependen de la
temperatura y la presión.
INTRODUCCIÓN 7

IONES Y SALES PRESENTES EN EL AGUA


Existe una gran variedad de sales solubles en agua. La sal más común en el agua es el
cloruro de sodio (NaCl). La Tabla 1.3 muestra la concentración aproximada de los
principales elementos disueltos en el agua de mar.

Tabla 1.3 Concentración aproximada de los principales elementos disueltos en el


agua de mar.
Elemento Coeficiente de Exponente Elemento Coeficiente de Exponente
concentración (10) concentración (10)
(mg/l) (mg/l)
Oxígeno 8,57 5 Potasio 3,8 2
Hidrógeno 1,08 5 Bromo 2,8 1
Cloro 1,9 4 Estroncio 8,1 0
Sodio 1,05 4 Boro 4,6 0
Magnesio 1,35 3 Silicio 3 0
Azufre 8,85 2 Flúor 3 0
Calcio 4 2 Argón 6 –1
Fuente: Handbook of Chemistry and Physics - 66 ed.

En los capítulos siguientes, se constatará que las sales de sodio son las sales más
importantes en el agua de mar, mientras que las sales de calcio y magnesio son las
más abundantes en agua dulce; también veremos que las interacciones entre el dióxi-
do de carbono y la piedra caliza (formaciones de carbonato de calcio y carbonato de
magnesio) juegan un papel significativo en el agua y en su tratamiento.

PRINCIPALES CONTAMINANTES E IONES


PRESENTES EN EL AGUA Y MÉTODOS DE MEDIDA
Antes de poder valorar las concentraciones de los productos químicos en agua, debe-
mos conocer cómo se miden. No pretendemos abordarlo con la profundidad de un
tratado en química analítica sino simplemente mencionar algunos métodos para
detectar los compuestos que se hallan comúnmente disueltos en el agua.
En la industria analítica existen dos referencias fundamentales que recogen los
métodos de medida. La primera y más antigua es Standard Methods for the Examina-
tion of Water and Wastewater publicada por la Asociación Americana del Estudio del
Agua, la Federación Medioambiental del Agua, y la Asociación Americana de la Salud
Pública. La segunda es SW-846, Test Methods for Evaluating Solid Waste, Physical/
Chemical Methods, cuya importancia radica no sólo en el prestigio de quien la publicó,
la Agencia para la Protección Medioambiental de los Estados Unidos (USEPA) en la
Oficina de Investigación sobre Residuos Sólidos, sino también en su contenido, ya que,
además de centrarse en residuos peligrosos, incluye muchos de los métodos aplicables
en acuíferos y aguas residuales. Este último se ha convertido en el principal manual de
8 Recursos hídricos

Tabla 1.4 Métodos analíticos utilizados para los compuestos presentes en el agua
Elemento Método de medida Elemento n Método de medida
Aluminio Cromatografía de gases Carbonato (CO3) Cálculo
Antimonio Cromatografía de gases Cloro (Cl) Gravimétrico
Arsénico Cromatografía de gases Cianuro (CN) Colorimétrico
Calcio Cromatografía de gases Flúor (F) Gravimétrico
Cromo Cromatografía de gases Hidroxilo (OH) pH
Cobre Cromatografía de gases Hipoclorito (HClO2) pH
Hidrógeno pH Hipocloroso (ClO2) pH
Hierro Cromatografía de gases Nitrato (NO3) Colorimétrico
Plomo Cromatografía de gases Nitrito (NO2) Colorimétrico
Magnesio Cromatografía de gases Sulfato (SO4) Colorimétrico
Manganeso Cromatografía de gases Sulfito (S) Colorimétrico
Mercurio Cromatografía de gases OTROS
Potasio Cromatografía de gases Alcalinidad Colorimétrico
Silicio Cromatografía de gases Carbono org. total Gravimétrico
Plata Cromatografía de gases O2 disuelto Valoracion con azida
o test
Sodio Cromatografía de gases Nitrógeno orgánico Kjelldahl
Zinc Cromatografía de gases DQO Digestión/valoración
Amoniaco Kjelldahl o DBO Diferencia en la
Nesslerización cantidad consumida
de oxígeno
Bicarbonato (HCO3) Cálculo

referencia en los Estados Unidos y en el resto del mundo debido a las numerosas citas
del manual en los permisos publicados por la EPA. Dicho manual puede ser consultado
y descargado de http://www.epa.gov/epaoswer/hazwaste/test/main.htm. Sin embargo,
en muchos casos este manual carece de una explicación detallada y precisa de los méto-
dos y procedimientos, a diferencia de los Standard Methods, por lo que un laboratorio
bien equipado dispondrá de ambas obras de referencia. Los métodos de ensayo son
ligeramente diferentes, y muchas veces el SW-846 no los nombra, especialmente
cuando se trabaja con los parámetros más convencionales.

RECURSOS HÍDRICOS
Acuíferos
Existen diferentes tipos de recursos hídricos. Los acuíferos abastecen a la mayoría de
las pequeñas comunidades de los Estados Unidos, y del resto del mundo, proporcio-
nando agua potable. Los acuíferos se caracterizan por contener minerales naturales a
concentraciones de moderadas a bajas. Vamos a estudiar los acuíferos en primer
lugar debido a que son habitualmente ignorados (al no estar a la vista) y porque fre-
cuentemente se olvida la necesidad de protegerlos.
Los regímenes de circulación del agua subterránea son lineares, y el flujo a través
de un medio poroso es análogo a la transferencia de calor a través de un medio sólido.
INTRODUCCIÓN 9

Arcilla
h ha

hw
Arena b rw

rw = Radio del pozo

K = Coeficiente de permeabilidad

hw = Altura del agua en el pozo siendo bien bombeada

b = Grosor del acuífero

ha = Cabeza hidráulica en condiciones de no bombeo

Q = Caudal de bombeo
dh
Q = ZSrbK
dr
Q In r Q
h – hw = o h – hw = In r
2SKb rw 2ST rw

Figura 1.1 Ecuaciones básicas de circulación de las aguas subterráneas.

Las ecuaciones globales utilizadas en el cálculo de dichos regímenes de circulación


son las ecuaciones de Darcy, las cuales asumen que el flujo es laminar.
A continuación, se presenta la ecuación básica del flujo de agua en un acuífero.
La ecuación se expresa en unidades del SI.

Q flow = S*K > H 2 + h 2 @/log e ^ D/2 ` / ^ d/2 `

donde la nomenclatura se muestra en el esquema de la Figura 1.1.


La constante K se conoce como el coeficiente de permeabilidad y viene dado en
unidades de velocidad, en galones por día por pie cuadrado o en unidades m3/día/m2.
El modelo que hemos explicado anteriormente es el más sencillo posible entre los
muchos que se podrían utilizar, debido a que el suelo no es un medio homogéneo. Es
importante hacer hincapié en este punto porque una vez contaminado el acuífero, es
muy difícil, si no casi imposible, descontaminarlo. Por ello, la protección de los acuí-
feros debería ser considerada una prioridad.
10 Recursos hídricos

Aguas superficiales
Las aguas superficiales se originan en los acuíferos y manan directamente del suelo.
Su cuantificación no está entre los objetivos de este curso, ya que implica estudiar
toda una disciplina. Sin embargo, hay un par de aspectos de las aguas superficiales en
relación con los vertidos que conviene mencionar ahora. El primero es que las aguas
superficiales pueden contener cualquier cosa, desde sólidos en suspensión hasta bac-
terias o desde nutrientes hasta troncos y partes de automóvil.
El segundo es que se requiere un estudio en detalle de las aguas superficiales
cuando se está planificando un vertido. Hay muchas posibilidades de que se vierta en
un suministro del que, quizás, alguien esté bebiendo agua.
Los permisos para las instalaciones de vertido a las aguas superficiales a menudo
se registran en base a un vertido «neto» o en base a un promedio, que representa un
peligro potencial para la planta de tratamiento. Los ingenieros sólo utilizan un tipo de
distribución: la distribución regular o normal. Los eventos hidrológicos tales como
las lluvias y las emanaciones no están distribuidos normalmente. Esto también es
válido para las cargas contaminantes. Existen abundantes pruebas de que los even-
tos hidrológicos, que influyen en el caudal de los ríos y la calidad de sus aguas, se
pueden modelar mediante una distribución logarítmica normal o una distribución tipo
Weibull III. Se analizarán algunas de estas distribuciones en capítulos posteriores.
Sin embargo, el punto a remarcar es que los permisos se registran en base a prome-
dios estadísticos, los cuales no se ajustan a la realidad, por lo que si no se tiene cui-
dado esto puede acarrear muchos problemas.

Aguas pluviales
El agua pluvial se compone de lluvia, nieve fundida, granizo, y otros tipos de precipi-
taciones atmosféricas. Limpia la atmósfera y transfiere los contaminantes del aire a la
lluvia. Por ello, las aguas pluviales a menudo contienen carbonatos y sulfatos si se
recogen en un área industrial de aire poluto. La lluvia ácida es realmente nociva, y
puede afectar al funcionamiento de la planta de tratamiento.
Hace algunos años, en Louisiana, una empresa, en la que el autor estuvo traba-
jando, trató de obtener el reglamento comunitario para obtener un permiso comple-
mentario para la lluvia ácida en el permiso de vertidos de la planta. La compañía
había documentado que el pH del agua disminuía siempre de forma sustancial con las
precipitaciones atmosféricas. Datos similares se habían obtenido en los Estados Uni-
dos en el Debate de la Lluvia Ácida, ya que las calderas alimentadas con carbón en el
mediooeste de los Estados Unidos emiten bastante dióxido de azufre –el cual se con-
vierte en ácido sulfuroso y, a continuación, en ácido sulfúrico– capaz de modificar el
pH de las precipitaciones atmosféricas y, por consiguiente, el pH de los lagos dando
lugar a cambios en sus ecosistemas. En aquellos tiempos, la solicitud era razonable,
pero fue rechazada.
En el entorno de la planta, se debe de considerar el diseño del sistema de alcanta-
rillado y el tiempo de respuesta a eventualidades pluviales. En general, si se monito-
riza el sistema de alcantarillado de la planta, se detecta un aumento espectacular de la
contaminación en la planta de tratamiento debido al fenómeno de «primer-lavado».
INTRODUCCIÓN 11

Mientras prosigue la tormenta, se pueden detectar vertidos inusuales debido a que


alguien en la planta ha decidido «deshacerse de» aquella cisterna de producto quími-
co X durante la tormenta, esperando que nadie lo notará.
En ese momento también son potencialmente problemáticos los incidentes en opera-
ciones de carga. Esto es debido tanto a que el equipo puede tener mayores dificultades
físicas durante la lluvia, como debido a que al operario no le apetece demasiado salir o
estar bajo la lluvia para supervisar el equipo de la misma manera que lo haría en clima
seco. Siempre que sea posible, sería aconsejable disponer de áreas de carga cubiertas, de
modo que no se tenga que tratar el volumen de los derrames más el volumen del agua de
la tormenta en caso de que se produzca un derrame cuando hace mal tiempo.

CALIDAD DEL AGUA


A menudo el agua se clasifica por su calidad. Sin embargo, existen muchas medidas dife-
rentes de la calidad del agua, y la calidad del agua frecuentemente depende de su uso. El
agua utilizada para beber tiene un gusto soso si no contiene pequeñas cantidades de mine-
rales y oxígeno disueltos en ella. Sin embargo, la misma agua que es buena para beber es
malísima para una caldera. Así mismo, cantidades moderadas de sulfato en el agua pota-
ble provocarían diarrea osmótica en individuos sensibles así como corrosión en una cal-
dera.3 El oxígeno disuelto corroe los tubos de las calderas, y las sales de calcio se
depositarán en los tubos, reduciendo el rendimiento de la transferencia de calor.
Generalmente, el agua potable contiene una concentración total de sales de sodio
por debajo de 200 mg/l. Concentraciones de sal mayores de 70 mg/l confieren al agua
sabor salado, y por encima de 5000 mg/l de sodio, se considera que el agua es salobre y
puede provocar problemas en los seres humanos debido a la presión osmótica.4 Cuando
la concentración de sodio supera los 100 mg/l hay un ligero riesgo para aquellas perso-
nas más sensibles al sodio, por lo que varias agencias reguladoras han sugerido una
concentración máxima de sodio para el agua potable de entre 100 y 160 mg/l.
La calidad del agua, especialmente la calidad del agua dulce, a menudo se clasi-
fica de acuerdo con sus uso: recreativo, para beber, para pescar, y de vertido. Es
importante conocer el uso que se hace del agua corriente arriba y corriente abajo
debido a que el uso del agua corriente abajo dictamina con frecuencia la calidad glo-
bal del agua, lo que a su vez afectará a la gestión del vertido del agua.

■ Ejemplo
Se cuenta una vieja broma sobre la manera más rápida para eliminar la contaminación del agua:
construir las entradas de agua potable de los municipios corriente abajo del efluente de la planta de
tratamiento de aguas residuales. El aspecto más irónico de esta broma es que hay comunidades en
las que realmente cuando el agua corriente escasea, la necesidad de reciclar aumenta hasta el punto
de que efluentes altamente tratados son devueltos al depósito de agua potable. Dichos efluentes
devueltos poseen una mayor calidad que la del depósito, y la broma se convierte así en realidad. ■

3. La EPA sugiere que unos niveles de sulfato mayores a 650 mg/l en niños y mayores de 1400 mg/l en adul-
tos pueden desencadenar diarrea. Para más detalles véase: http://epa.gov/safewater/standard/sfstudy.pdf.
4. Se clasifica el agua como salobre cuando la concentración de sal se halla entre 0,5% y alrededor de
1,8% (500 – 18.000 partes por mil).
12 Reglamentos de la calidad del agua – estructura legal

De acuerdo con los actuales esquemas de control de la calidad del agua vigentes
en los Estados Unidos, el uso más «noble» del agua es para consumo humano. El
agua para consumo humano debe cumplir dos conjuntos de estándares: los estándares
en su origen (río o corriente) y los Estándares de Calidad del Agua Primaria y Secun-
daria publicados por USEPA y por los diferentes Estados.

REGLAMENTOS DE LA CALIDAD DEL AGUA –


ESTRUCTURA LEGAL
Los estándares de calidad del agua dependen del uso al que se destine.
■ Ejemplo
En el caso del agua de refrigeración, lo más importante es su temperatura y, en menor medida,
que no sea corrosiva. ■
Los Estados Unidos, las Naciones Unidas y la mayoría de los países disponen de sus
propios estándares de calidad para el agua potable. Un gran número de países disponen de
estándares de calidad del agua para la pesca y la natación en función de sus usos.
Cuando se trata con los Estados Unidos, es importante recordar que el objetivo de
USEPA es que todas las aguas de EE.UU. sean aptas para la pesca y la natación (para la
pesca y usos recreativos). Este objetivo está en vigor desde 1972, pero todavía no se ha
logrado.
Cabe destacar que los estándares de calidad del agua superficial difieren amplia-
mente de un lugar a otro y dependen del uso del agua.
Las siguientes páginas contienen extractos de los Estándares de Calidad del Agua
del Estado de Georgia para el agua superficial. Se incluyen anotaciones clarificato-
rias debido a que es importante comprender cómo están estructurados los reglamen-
tos para proporcionar una base adecuada sobre las funciones de los entes reguladores,
y sobre sus prioridades. Su lectura permite entender con facilidad la filosofía que
marca los objetivos acerca de la calidad del agua y las limitaciones de los efluentes.

NORMAS Y REGULACIONES PARA EL CONTROL


DE LA CALIDAD DEL AGUA
Capítulo 391-3-6 Revisado – julio 2000
Aportamos aquí algunos fragmentos con el fin de que el lector se pueda hacer una
idea del tema y de su complejidad. Conviene tener en cuenta que el texto fue escrito
por abogados, y normalmente somos nosotros los que lo interpretamos (el preámbulo
se ha omitido por carecer de importancia).
(4) Clasificaciones del uso del agua. Las clasificaciones del uso del agua según los
criterios seguidos en este apartado se aplican como sigue:
(a) Suministro de agua potable
(b) Recreativa
(c) Pesca, piscicultura, crustáceos, pesca extractiva y demás vida acuática
(d) Río salvaje
INTRODUCCIÓN 13

(e) Río pintoresco


(f) Pesca costera
(5) Criterios generales para todo tipo de aguas. Los siguientes criterios se consideran
necesarios y aplicables a todo tipo de aguas del Estado:
Obsérvese que los siguientes temas se hallan ordenados según su prioridad.
Disposiciones y reglamentos generales
(a) Todas las aguas deben estar libres de las materias que se asocian a residuos
municipales o domésticos, residuos industriales o de cualquier otra índole que
sedimenten formando deposiciones de fangos que se convierten en putrefactos,
antiestéticos o, en cualquier caso, inapropiados.
(b) Todas las aguas tienen que estar libres de aceites, espumas y materia en sus-
pensión que se asocien a residuos municipales o domésticos, residuos industria-
les u otros vertidos en cantidades suficientes para ser antiestéticos o interferir con
los usos legítimos del agua.
(c) Todas las aguas deben estar libres de materiales relacionados con vertidos
municipales, industriales o de otro tipo que produzcan turbidez, color, olor u
otras condiciones inapropiadas que interfieran con los usos legítimos del agua.
(d) Turbidez. El siguiente estándar es adjunto a la descripción del estándar de la tur-
bidez en el apartado 391-3-6-.03(5)(c) de arriba:
Todas las aguas deben estar libres de la turbidez que se traduce en un aprecia-
ble contraste visual en un volumen de agua como consecuencia de cierta activi-
dad humana. El aspecto aguas arriba de cierto volumen de agua analizado debe
observarse en un punto situado aguas arriba adyacente a la actividad humana que
causa la turbidez. La apariencia de la muestra tomada aguas arriba debe compa-
rarse con una muestra localizada suficientemente aguas abajo de la actividad en
consideración a fin de disponer de una zona de mezcla suficiente. Para las activi-
dades que afectan al terreno, el correcto diseño, instalación, y mantenimiento de
acuerdo con las mejores prácticas de gestión y el cumplimiento de los permisos
expedidos deben estar conformes con el apartado 391-3-6-.03(5)(d).
(e) Todas las aguas deben estar libres de sustancias tóxicas, corrosivas, ácidas y
cáusticas vertidas por municipios, industrias u otra fuentes, como focos disper-
sos, en cantidades, concentraciones o combinaciones perjudiciales para personas,
animales o vida acuática.
De los diferentes puntos mencionados se debe remarcar: el uso de las disposiciones
generales, véase el material subrayado en las Secciones b, c, y d, y el uso de una
zona de mezcla en el párrafo d.
La zona de mezcla es un concepto muy interesante porque es una zona ficticia
donde se permite específicamente la dilución del efluente. Generalmente, las zonas
de mezcla abarcan más de un tercio del volumen de la corriente lo que implica una
longitud indeterminada. El objetivo regulador de una zona de mezcla es garantizar
que los estándares de calidad de la corriente no sean aplicados al efluente en su
punto de vertido. Sin embargo, para una corriente pequeña, que sea discontinua, se
aplican criterios más estrictos al efluente.
14 Normas y regulaciones para el control de la calidad del agua

Limitaciones químicas específicas (aplicables en general)


(i) Las concentraciones en un curso de agua de los siguientes compuestos químicos conside-
rados como algunos de los contaminantes tóxicos que preocupan en el Estado de Georgia
no deben exceder los criterios indicados más abajo en las condiciones correspondientes al
menor caudal que ha transcurrido durante 7 días consecutivos en un periodo de 10 años
(7Q10) o con un caudal mayor excepto cuando se establezcan zonas de mezcla:
El término «7Q10» tiene una definición extremadamente conservadora – es el menor
caudal que transcurre durante 7 días consecutivos en un periodo de 10 años. Por defi-
nición, esto ocurre durante el ciclo de sequía (verano), cuando la temperatura del agua
es mayor y la cantidad de oxígeno disuelto menor. Este también es el valor de referen-
cia para todos los estándares de calidad en corrientes de agua dulce y ríos.
Productos químicos específicos con sus concentraciones indicadas
(1) Ácido 2,4-diclorofenoxiacético (2,4-D) 70 μg/l
(2) Metoxicloro 0,03 μg/l*
(3) Ácido 2,4,5-triclorofenoxipropiónico (TP Silbex) 50 μg/l
(ii) Las concentraciones en los cursos de agua de los siguientes compuestos químicos
catalogados por la Agencia de Protección Medioambiental de EE.UU. como conta-
minantes tóxicos prioritarios según lo acordado en la Sección 307(a)(1) de la Ley
Federal del Agua Limpia (estipulada) no deben exceder el criterio de agudo según
se estipula a continuación en las condiciones correspondientes al menor caudal que
ha transcurrido a lo largo de todo un día en un periodo de 10 años (1Q10) o condi-
ciones de caudal mayores y no debe exceder el criterio de crónico según se estipula
a continuación en las condiciones correspondientes al menor caudal que ha trans-
currido a lo largo de toda una semana en un periodo de 10 años (7Q10) o condicio-
nes de caudal superior excepto cuando se establecen zonas de mezclas o de
acuerdo con limitaciones de efluente especificas de un sitio desarrolladas de
acuerdo con los procedimientos presentados en 391-3-6-.06. Salvo que se indique
lo contrario, los criterios indicados a continuación se enumeran de acuerdo a una
recuperación total de contaminante. Debido a que la mayoría de los criterios numé-
ricos para los metales catalogados se expresan considerando que los metales se
hallan disueltos, las concentraciones totales recuperables de los metales medidas en
los cursos de agua requieren que se expresen también en su forma disuelta para
poder comparar los datos obtenidos del curso de agua con los criterios numéricos.
Esta transformación de metales medidos a disueltos se puede realizar usando la
guía documentada en: Guidance Document of Dynamic Modeling and Translators
August 1993 que se encuentra en el Apéndice J de la EPA.
Water Quality Standards Handbook: Segunda Edición, EPA-823-B-94-005a o
usando otra guía apropiada de la EPA.
Agudo crónico
1. Arsénico
(a) Agua dulce 50 μg/l 50 μg/l 1 1
(b) Aguas de los estuarios costeros y marinos 69 μg/l 36 μg/l 1 1
INTRODUCCIÓN 15

2. Cadmio
(a) Agua dulce 1,7 μg/l 0,62 μg/l 1,2,3 1,2,3
(b) Aguas de los estuarios costeros y marinos 43 μg/l 9,2 μg/l 1 1,2
3. Cromo III
(a) Agua dulce 310 μg/l 100 μg/l 1,3 1,3
(b) Aguas de los estuarios costeros y marinos - -
4. Cromo VI
(a) Agua dulce 16 μg/l 11 μg/l 1 1
(b) Aguas de los estuarios costeros y marinos 1100 μg/l 50 μg/l 1 1
5. Cobre
(a) Agua dulce 8,8 μg/l 6,2 μg/l 1,2,3 1,2,3
(b) Agua de los estuarios costeros y marinos 2,4 μg/l 2,4 μg/l 1,2 1,2
6. Plomo
(a) Agua dulce 30 μg/l 1,2 μg/l 1,3 1,2,3
(b) Agua de los estuarios costeros y marinos 130 μg/l 5,3 μg/l 1 1,2
7. Mercurio
(a) Agua dulce 0,012 μg/l – 2
(b) Agua de los estuarios costeros y marinos 0,025 μg/l – 2
8. Níquel
(a) Agua dulce 790 μg/l 88 μg/l 1,3 1,3
(b) Agua de los estuarios costeros y marinos 74 μg/l 8,2 μg/l 1 1,2
9. Selenio
(a) Agua dulce – 5,0 μg/l 2
(b) Agua de los estuarios costeros y marinos – 71 μg/l 1
10. Plata – 4 4
11. Cinc
(a) Agua dulce 64 μg/l 58 μg/l 1,3 1,3
(b) Agua de los estuarios costeros y marinos 90 μg/l 81 μg/l 1 1
El criterio en cauce viene expresado en función de la fracción disuelta en la
columna de agua. Los factores de conversión usados para calcular los criterios de diso-
lución se encuentran en 40 CFR 131.36 y el Registro Federal, Volumen 60, No. 86, jue-
ves, 4 de Mayo, 1995. El criterio en cauce es menor que los límites de detección en el
laboratorio EPD. Los criterios de la vida acuática para estos metales se expresan en fun-
ción de la dureza total (mg/l) en el volumen de agua. Para los valores de la tabla ante-
rior se asume una dureza de 50 mg/l de CaCO3. Para otros valores de dureza, deben
utilizarse las siguientes ecuaciones de 40 CFR 131.36. Los límites de dureza entre los
que son aplicables estas ecuaciones son 25 y 400 mg/l de carbonato de calcio.
Cadmio
criterios de agudo = (e)(1,136672 – [(ln dureza)(0,041838)] μg/l (1,128
[ln(dureza)] – 3,828)
criterios de crónico = (e)(1,101672 – [(ln dureza)(0,041838)] μg/l (0,7852
[ln(dureza)] – 3,490)

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