Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La economía venezolana cayó a partir del endeudamiento que generó el país después del "boom" petrolero
en los 70. A partir de ese momento, comenzó una caída paulatina a medida que el Estado venezolano
aumentaba su recaudación y gastos. Esto causó una devaluación de la moneda en 1983. A partir de
entonces las políticas económicas de los gobiernos de Luís Herrera Campíns y Jaime Lusinchi no fueron
capaces de frenar las espirales inflacionarias, generando desconfianza en las inversiones y pérdida de
credibilidad en la moneda nacional. Algunas de las políticas que emplearon estos gobernantes fueron
controles de cambio a través de RECADI (Luis Herrera Campins) y un control de precios (Jaime Lusinchi),
medidas que devinieron en corrupción administrativa y mercados negros de divisas y bienes. Estas
situaciones incrementaron la desinversión privada, generando una escasez gradual. En 1988 resulta
electo Carlos Andrés Pérez en los comicios del 4 de diciembre con 3.879.024 votos (52, 91% de los
sufragantes), hasta esa fecha, el mayor número de votos en términos absolutos.
Con este gran respaldo popular el gobierno de Pérez buscó dar un cambio al liberar la economía, a través
de un programa de ajustes macroeconómicos promovido por elFondo Monetario Internacional (FMI), al que
se le llamó "Paquete Económico", concebido para generar cambios sustanciales en la economía del país. Se
anunciaron medidas de aplicación inmediata y otras de aplicación gradual en plazos breves. El paquete
comprendía decisiones sobre política cambiaria, deuda externa, comercio exterior, sistema
financiero, política fiscal, servicios públicos y política social. Sin embargo, la liberación de precios y la
eliminación del control de cambio generó un reajuste sumamente brusco para las personas de menores
ingresos.
Las principales medidas anunciadas fueron:
Someterse a un programa bajo supervisión del Fondo Monetario Internacional con el fin de
obtener aproximadamente 4500 millones de dólares en los 3 años siguientes.
Liberación de las tasas de interés activas y pasivas en todo el sistema financiero hasta un
tope temporal fijado en alrededor del 30%.
Unificación cambiaria con la eliminación de la tasa de cambio preferencial.
Determinación de la tasa de cambio en el mercado libre de divisas y realización de todas las
transacciones con el exterior a la nueva tasa flotante.
Liberación de los precios de todos los productos a excepción de 18 renglones de la cesta
básica.
Anuncio del incremento no inmediato, sino gradual de las tarifas de servicios públicos como
teléfono, agua potable, electricidad y gas doméstico.
Aumento anual en el mercado nacional durante 3 años de los precios de productos
derivados del petróleo, con un primer aumento promedio del 100% en el precio de lagasolina.
Aumento inicial de las tarifas del transporte público en un 30%.
Aumento de sueldos en la administración pública central entre el 5 y el 30% e incremento
del salario mínimo.
Eliminación progresiva de los aranceles a la importación.
Reducción del déficit fiscal a no más del 4% del producto territorial bruto.
Congelación de cargos en la administración pública.
A solo pocas semanas de asumir el gobierno el entonces presidente Pérez, se decide poner en práctica de
manera inmediata el paquete de ajuste y de medidas económicas, financieras y fiscales. El 26 de febrero el
ministerio de Energía y Minas anuncia el alza en 30% de los precios de la gasolina y el incremento de las
tarifas del transporte público urbano e inter-urbano también en un 30% a partir del 27 de febrero, válido para
los 3 meses siguientes, después de los cuales podrían aumentarse hasta el 100%.
Las medidas económicas y sociales impuestas por el gobierno y la creciente tasa de pobreza, originaron la
masacre y la ola de violencia llamada como el "Caracazo".
Protestas y saqueos
La consecuencia evidente del Caracazo fue la inestabilidad política. El programa de gobierno fue modificado
durante ese mismo año tras los hechos. El 7 de marzo se decreta la liberación de precios. Se acelera el
proceso de descentralización con la primera elección directa de Gobernadores y Alcaldes celebrada en
diciembre de 1989. En1992 se producen dos intentos de golpe de estado, uno en febrero y otro
en noviembre. La creciente desaprobación de la gestión del Presidente Pérez, la ruptura con el
partido Acción Democrática, la falta de nuevos liderazgos, tuvo como consecuencia que el paquete de
medidas aplicado en forma atenuada fuera rechazado. En marzo de1993 el Presidente Carlos Andrés
Pérez es acusado de corrupción y apartado del cargo, asumiendo la Presidencia por decisión del Congreso
Nacional (Actual Asamblea Nacional) Ramón J. Velásquez, quien es sucedido por Rafael Caldera tras la
convocatoria electoral de 1994. Hugo Chávez, uno de los organizadores de la primera intentona golpista
de 1992, es declarado culpable de dirigir la rebelión militar, siendo encarcelado y luego Sobreseído por el
Presidente Rafael Caldera, tras lo cual gana las elecciones presidenciales celebradas en 1998.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó la actuación del gobierno. El Estado se
comprometió a indemnizar a las víctimas, hecho cumplido parcialmente en el año 2004 con aquellas
víctimas representadas por la organización de derechos humanos Cofavic. 3 Sin embargo, a finales de 2006
el gobierno del Presidente Hugo Chávez, a través del Ministerio del Interior y Justicia, anunció mecanismos
para indemnizar también a las víctimas que no tuvieron acceso a la Corte Interamericana.4
En 2005 se estrenó en los cines venezolanos "El Caracazo", una película dirigida por Román Chalbaud,
cuyo argumento está basado en los sucesos del mismo.
Cifras
Muertes: Según la cifra oficial emanada por el gobierno de CAP, los sucesos de febrero y
marzo de 1989 dejaron un saldo de 276 muertos, numerosos lesionados, varios desaparecidos y cuantiosas
pérdidas materiales. Sin embargo, estos números de víctimas quedaron desvirtuados por la posterior
aparición de fosas comunes como La Peste, en el Cementerio General del Sur, donde aparecieron otros 68
cuerpos sin identificar, fuera de la lista oficial. “Nunca pudo conocerse la cifra exacta de civiles muertos en
estos sucesos”, según se cita en el portal del Comité de Familiares de las Víctimas (Cofavic), de los sucesos
ocurridos entre el 27 de febrero y los primeros días de marzo de 1989. En esta organización no
gubernamental sólo se reunieron 42 familiares de fallecidos y desaparecidos y otras tres víctimas que
quedaron incapacitadas, no obstante, la cantidad de civiles masacrados el 27 de febrero de hace 24 años y
los días que siguieron es incalculable. De hecho, se habla de entre 2.000 y 3.000 personas asesinadas,
aunque el entonces ministro Ítalo del Valle Alliegro contaba poco más de 300. En el libro Desaparición
Forzada, sus autores, Yahvé Álvarez y Oscar Battaglini, señalan que las acciones por parte del gobierno de
CAP el 27 de febrero alcanzan proporciones que las acercan al más brutal genocidio de la historia
venezolana. Un fallo de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, 10 años después de la masacre
al pueblo venezolano, ordenó al Estado venezolano indemnizar a los familiares de 45 personas asesinadas
durante la revuelta social, todas representadas por Cofavic.
Todavía no se conoce el número exacto de muertos, heridos y desaparecidos en esos día de febrero y
marzo de 1989. Aunque los hechos ocurrieron mucho antes de su mandato, el Gobierno del presidente
Hugo Chávez reconoció la responsabilidad del Estado venezolano y en el año 2006, a través de su
Ministerio de Interior y Justicia, anunció mecanismos para indemnizar también a las víctimas que no tuvieron
acceso a la Corte Interamericana.