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El español en la época medieval:

siglos XII a XV
(primera parte: siglos XII y XIII)

Elena Azofra

Curso El español en su historia. Textos y contextos


Formación Permanente
Lengua oral y lengua escrita
- Ver últimas diapositivas de “ESPAH-Breve historia de los
inicios del español”, sobre los primeros textos y el
origen de la literatura española:
- Cartularios de Valpuesta o Becerros (desde s. IX)
- Nodicia de kesos (s. X)
- Glosas Emilianenses y Silenses, todavía muy latinizantes (s. X)
- Son testimonios de una lengua que está en evolución,
en los que se advierte un intento de reflejar la
pronunciación a través de nuevos signos gráficos
(Menéndez Pidal: “ortografía de orígenes”).
- En el siglo XI, clara conciencia de la diferencia entre la
lengua oral (romance) y la lengua escrita (latín), pero el
romance tardará en desarrollarse por escrito.
- Los textos escritos seguirán empleando
mayoritariamente el latín hasta principios del s. XIII,
aunque el romance se desarrolla cada vez más desde el
s. XII. Los textos legales emplean regularmente el
romance ya en el XIII.
La expansión del castellano

• Romance castellano: expansión geográfica, paralela a la


expansión política (la “cuña” castellana de Mdez. Pidal).
• Pero el castellano tiene influencias dialectales o
características comunes con otros dialectos (leonés,
riojano, aragonés, navarro…): es una época de continuum
dialectal en la Península Ibérica.
• Para relativizar la idea pidalina de la “cuña” castellana,
conviene leer Fernández Ordóñez, discurso de entrada en
la RAE (“La lengua de Castilla y la formación del español”,
2011), que defiende la variedad lingüística dentro de la
lengua de Castilla (p. 22).
• Insiste la filóloga en demostrar “la coincidencia del
castellano con otras áreas lingüísticas, y no precisamente
el carácter exclusivo de sus opciones” (p. 27)
Continuum dialectal en la Península Ibérica

• Fragmentos discurso Fernández-Ordóñez:


• muchos de los rasgos fonéticos atribuidos en exclusividad al
castellano fueron también compartidos por los territorios
vecinos del reino de León o de Navarra, al menos, y mucho
antes de su unión política con Castilla; o viceversa, que los
rasgos supuestamente no castellanos se dieron o se dan
también en Castilla. Cuando el castellano coincide con el
asturleonés o el navarroaragonés al norte, no cabe hablar, por
lo general, de leonesismos o aragonesismos adoptados en
castellano, o de castellanización en leonés o aragonés, sino
simplemente de origen coincidente (p. 37)
• ninguno de los reinos medievales dispuso de una variedad
lingüística homogénea y [que] todos los territorios, de
fronteras móviles y permeables, compartieron rasgos
lingüísticos. Castilla no fue una excepción. La extensión hacia
el sur produjo la mezcla de repobladores de esos variados
orígenes y favoreció la adopción en el centro y el sur de
soluciones lingüísticas tan variadas como su población. (p. 90)
Continuum dialectal en la Península Ibérica

• Fragmentos discurso Fernández-Ordóñez (cont.):


• Frente a la uniformidad del castellano […], se constata que los
territorios que pertenecieron jurisdiccionalmente al antiguo reino
de Castilla poseen, al menos, dos importantes escisiones
dialectales. Una que divide Castilla de norte a sur y que deslinda
dos tipos de castellano: uno de tipo occidental, con rasgos comunes
con el asturleonés, y otro de tipo oriental, con rasgos comunes con
el área navarra (y aragonesa). Desde un punto de vista político, el
reino de Castilla comprendía las dos variedades, pero, desde un
punto de vista lingüístico, por lo general no puede defenderse que
esas variedades fueran exclusivas del reino de Castilla. En
ocasiones, es el castellano de tipo occidental el extendido por el
centro y sur de la península y en la lengua culta; otras veces, es el
de tipo oriental. (p. 32)
• La nota diferencial castellana no consiste tanto en haber dispuesto
de rasgos lingüísticos exclusivos o uniformes, sino en la temprana
conciencia de la identidad lingüística que prueba el uso
metalingüístico de castellano para referirse al vernáculo hablado en
Castilla en los textos de Alfonso el Sabio. (p. 89, n. 123)
• Hay que revisar los supuestos leonesismos, aragonesismos…
del castellano medieval.
s. XII-primera mitad s. XIII
• Siglos XII y XIII: progresiva fijación como lengua escrita,
con fluctuaciones y vacilaciones.
• Textos literarios: teatro (Auto Reyes Magos), épica (Poema de
Mio Cid), lírica (primitiva lírica popular; Razón de Amor)
• Textos jurídicos: Paces de Cabreros (1206, primer documento
cancilleresco que conocemos escrito en romance hispánico),
Fuero de Madrid (1141 – 1235), Fuero de Zorita de los Canes
(1218)
• Abundantes textos notariales (documentos de compraventa,
donaciones, etc.)
• Primeras traducciones bíblicas: Fazienda de Ultramar (¿princ.
S. XIII?)
• Obras del Mester de Clerecía: Libro de Alexandre, Libro de
Apolonio, Poema de Fernán González, obras de Berceo
(mediados s. XIII)
s. XII-principios s. XIII
• En los textos primitivos vemos que ya se han consumado los
cambios fonéticos que caracterizan al castellano medieval
(diptongación de vocales tónicas abiertas, evolución de oclusivas
intervocálicas, palatalizaciones de consonantes y grupos
consonánticos), pero hay muchas vacilaciones gráficas (dificultad
especialmente para representar las nuevas consonantes
palatales).
• Rasgo de influencia francesa, importante en esta época: la
apócope extrema de -e final.
• Presencia de rasgos latinizantes y grafías difíciles de interpretar
(grafía nn, por ejemplo: ¿esconde ya la palatal?)
• Escritura: escisión entre la escritura latina y el romance
(características de la escritura de esta época: Torrens, 206-210;
ver pdf aparte, “Torrens escritura castellano medieval”).
• También se reflejan en los textos los principales cambios
gramaticales (morfosintácticos: creación del artículo, nuevos
pronombres y adverbios, reestructuración del sistema verbal)
Segunda mitad del s. XIII
• S. XIII (segunda mitad): época alfonsí. Importancia de la
figura de Alfonso X el Sabio (218-221).
• Alfonso X convierte el castellano en lengua de la
administración y la cultura, lo que supone un impulso
extraordinario para la normalización de la lengua. Se
desarrolla especialmente en el scriptorium alfonsí la prosa
historiográfica (Estoria de España, General Estoria) y
científica (Lapidario, Libros del saber de Astrología, etc.).
• Lengua poco homogénea, con rasgos de otras variedades
dialectales de la época (colaboradores diversos).
• Mayor fijación ortográfica, pero todavía vacilaciones.
• Otras obras de la época: colecciones de exempla
(narraciones breves destinadas a los sermones religiosos:
Sendebar, Calila e Dimna); literatura sapiencial (Poridat de
poridades, Castigos e documentos del rey don Sancho).

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