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Introducción

En siglo XXI está destinado a hacer el impacto más grande en la siembra de iglesias en la
historia del cristianismo. Esto se debe principalmente a dos factores: un sentido profundo de
hambre espiritual en todo el mundo y un compromiso sin precedentes con la siembra de las
iglesias.

La declinación del ateísmo y la transición significativa de un concepto del mundo secular a


uno posmoderno, han llevado a líderes clave de la iglesia a concluir que ha comenzado una
nueva era apostólica.

El interés espiritual, sin embargo no significa necesariamente un interés en el cristianismo o


en la iglesia. Muchos están buscando una experiencia con Dios y se está uniendo a
congregaciones espiritualmente vibrantes, mientras otros están buscando saciar su sed
espiritual en activadas tales como el movimiento de la nueva era en la introspección, la
astrología y los poderes sobrenaturales.

Esta hambre espiritual intensa es una buena noticia para la iglesia porque la enfrenta con una
oportunidad sin precedentes con una oportunidad para alcanzar a millones con el evangelio
de Jesucristo, y luego discipular los en congregaciones que cultiven un sentido genuino de
espiritualidad,

Los sembradores de iglesias del XXI en las sociedades enfrentan el desafío urgente de
comprender a alcanzar y discipular a agente hambrienta espiritualmente pero que puede ser
resistente, indiferente o ignorante en cuanto al cristianismo.

Otros sembradores de iglesias enfrentan el desafío de alcanzar a grupos que tienen


diferentes trasfondos religiosos o ideológicos. Muchos sembradores de iglesias
contemporáneas se enfrentan con los obstáculos de buscar a alcanzar a gente en sociedades.

La iglesia del siglo XXI necesita tener en forma urgente el paradigma apostólico de la iglesia
primero ese paradigma como uno en el cual la iglesia primitiva era consistente de si misma
como un pueblo fiel rodeado por un ambiente hostil al cual cada miembro estaba llamado a
testificar del amor de Dios en Cristo. Para ser efectivo la iglesia del Siglo XXI necesita tener el
poder y los valores de Jesus que tenía la iglesia del siglo primero también necesita tener la
sabiduría que demuestro la iglesia del siglo primero para comunicar el evangelio.
¿Cuál es el objetivo principal de sembrar una iglesia?
Cumplir con la Gran Comisión, llevando el evangelio a toda criatura. Que es un mandato que
Jesús nos dejó establecer el reino de Dios en todo el mundo, dando testimonio de lo que
Jesús hace en cada vida y predicando su palabra. La finalidad es rescatar vidas y discipular a
otros obreros en el espíritu, para que estos a su vez, puedan sembrar la visión en otras
naciones.

Esta actitud dista mucho del propósito original de Dios direccionado a alcanzar las naciones, y
por tal motivo, a todas las personas sin distingo de raza, credo, convicción política o cultural.
Todo cristiano, y permítame por favor hacer énfasis en este aspecto, absolutamente todo
creyente en el Señor Jesús tiene el compromiso ineludible de ayudar en la extensión del
Reino de Dios.

No podemos olvidar que el plan de Dios es la salvación de todo el género humano, como lo
describe el apóstol Pablo en la carta que dirigió a su fiel discípulo Timoteo: «Porque... Dios...
quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad» (1 Timoteo
2:3-4. Juan 17:20-23).

¿Cómo se va a tratar?
Un trabajo donde participan todos Cuando un pastor, obrero, líder o cristiano comprometido se
echa al hombro la tarea de plantar nuevas Iglesias en sus propias fuerzas, lo más probable es
que termine frustrado y con la sensación de que Dios lo dejó solo. Tremendo equívoco. No es
Dios el culpable sino nuestra propia tozudez que se alimenta por la autosuficiencia.

Para la siembra de nuevas congregaciones es esencial que haya un esquema bien definido
de trabajo en equipo. ¿Recuerda lo que dice el Evangelio de Lucas? "Por aquellos días, Jesús
se fue al monte a orar, y se pasó toda la noche orando a Dios. Cuando se hizo de día, reunió
a sus discípulos y escogió de entre ellos a doce, a quienes constituyó apóstoles." (Lucas 6:
12, 13. Versión La Palabra, Lucas 17: 6b.)

En todo ese proceso, se debe tener dos ingredientes ineludibles: el primero, capacidad de
liderazgo y, el segundo, desarrollo de madurez espiritual. Insistimos: no es trabajo de una sola
persona sino que involucra a todo el liderazgo y a cristianos comprometidos con la extensión
del Reino de Dios.

La siembra de nuevas iglesias amerita que ese profundo deseo de extender el Reino de Dios
se aloje en el corazón de quien está al frente de la congregación

Recursos

La siembra de nuevas iglesias es una carrera de largo aliento. El compromiso no es nada


fácil, de ahí que usted solo, no podrá cumplir las tareas. Es esencial que se rodee de un buen
grupo de colaboradores. Tenga siempre presente que nuestro amoroso Dios es quien da la
visión, la provisión y la bendición y si Él lo guía, prosperará el trabajo de evangelizar y
sembrar nuevas iglesias.

Metas

Fijar Metas
Puede parecer extraño fijar metas antes de examinar nuestra situación actual. Un
razonamiento superficial sugiere que así es. Seguramente tenemos que conocer nuestra
situación actual antes de fijar alguna meta, ¿no? Pero las metas que están basadas
solamente en nuestra situación actual con frecuencia serán demasiadas pequeñas, o serán
una respuesta a un problema de corta duración, o serán limitadas por nuestros logros
pasados. A veces las metas de corto plazo nos pueden desviar de las metas de largo plazo.
También las metas pueden ser basadas en lo que se ha hecho antes, en vez de lo que se
puede hacer en el futuro. Les falta la visión de lo que es posible. Si primero determinas una
solución ideal de largo plazo y después fijas pasos realistas hacia ese ideal, tus metas serán
mucho más inspiradoras y creativas.

Las distinciones entre diferentes tipos de metas Al pensar en las metas es importante hacer
una distinción entre metas finales y metas estratégicas. Toma por ejemplo la siguiente
declaración de visión: "Convertir a gente pecadora en seguidores comprometidos de Cristo".
Uno podría decir esto de diferentes maneras para describir lo que queremos hacer en una
iglesia de la Viña. Sin embargo ¿cómo convertimos esa visión en una realidad? ¿Cómo puede
uno tomar pasos concretos que llevará esta visión a la acción? Empiezas por establecer
pasos que son objetivos y cuantificables, que al llevarlos a cabo te llevan a tu visión.
Utilizando esta declaración de visión, una meta final podría ser: que el 30% del crecimiento
dela iglesia el año que entra sea por conversiones. (En otras palabras, si la iglesia crece por
100miembros el año que entra, la meta final es que 30 de ellos sean nuevos convertidos.)Sin
embargo, es importante notar aquí que una meta final (un objetivo final que concuerda con la
declaración de visión) pocas veces está dentro de tu control .Así que también necesitamos
metas estratégicas. Tenemos más control sobre una meta estratégica, y nos ayuda a
identificar objetivos específicos que, si los logramos, nos dan una buena probabilidad de
alcanzar nuestra meta final. Por ejemplo:

Meta final: que el 30% de los nuevos miembros de la iglesia sean nuevos creyentes.

Metas estratégicas:

1. Antes de terminar el año, queremos entrenar a 50% de la iglesia en evangelismo personal.

2. Anunciar tres diferentes series de predicaciones diseñadas especialmente para la gente


inconversa.

3. Que cada miembro del liderazgo desarrolle por lo menos una amistad con una persona
inconversa para poder invitarle a eventos especiales, y también para dar un ejemplo a la
iglesia de un estilo de vida evangelística.

Las metas estratégicas están en gran parte dentro de nuestro control, y nos proporcionan una
manera de medir nuestro progreso. ¿Cumplir con estas metas estratégicas garantizará que
lograremos que el 30% de los nuevos miembros sean nuevos creyentes? No. Pero es
probable que estemos más cerca porque hemos establecido ciertas metas estratégicas.

Otras características de las metas

Específicas No: "quiero que los miembros sean mejores en el evangelismo",

Sino: "mi meta es conducir tres diferentes clases para entrenar a la iglesia

a compartir su fe".

Cuantificables No: "necesitamos que un buen número de personas tome este curso", sino:
quiero entrenar a 50% de la iglesia por medio de estas clases
Acerca del evangelismo personal”. Compartidas No: "esta es mi meta",

Sino: "los líderes respaldan esta meta como equipo”. Realistas "Deseamos que el 75% de la
iglesia tome este curso, pero es más realista esperar un 50% de participación. Esto es
suficientemente difícil para ser una meta que motiva".

Medidas por No: "No sé cuánto tiempo durará esto”, tiempo sino: para el fin de Mayo, de aquí
a 11 meses, quiero que 50% de la iglesia haya tomado este curso de evangelismo".

Una buena meta...

x Es una respuesta directa a una necesidad verdadera.

x Motiva y requiere nueva fe.

x Es realista y alcanzable.

x Proporciona una imagen clara de lo que el futuro puede ser.

x Es cuantificable. Sabremos cuando la hayamos logrado.

x Tiene una fecha para terminarla.

x Es compartida por la mayoría de la gente responsable en cumplirla.

Una buena estrategia es una secuencia de actividades...

x Puesta por escrito

x Sencilla

x Posible

x Que te ayuda a llegar de donde estás ahora hasta dónde quieres terminar.

La responsabilidad del fundador de sembrar iglesias

1.- siempre debe tener una visión por lo cual va empezar a trabajar

2.- tener en claro las metas a cumplir

3.- tener un buen equipo de trabajo para empezar la obra

El fundador siempre tiene que dar el ejemplo ante todo para que sus colaboradores lo sigan
es la principal razón por lo cual el equipo se impulsa a trabajar y los motiva con sus acciones y
actos de trabajo.
Por qué debe haber una iglesia

Estudios han demostrado que plantar iglesias es la manera más efectiva de ver frutos
perdurables del evangelismo, al crear discípulos del Señor Jesucristo de por vida. La
motivación bíblica para sembrar iglesias saludables reside en la misión del Dios trino
amoroso y misericordioso, que desea que hombres y mujeres sean discípulos de Jesucristo y
miembros responsables de la iglesia, el cuerpo de Cristo, cuyas congregaciones son señales
de la venida del reino de Dios para alabanza de su gloria”.
Como se va a trabajar
Primero Proveer un perfil básico de algunas de las características que debe poseer el
sembrador de iglesias exitoso

Las experiencias de muchos sembradores, tanto de los que tuvieron éxito como de los que
fracasaron, nos permiten definir mejor en el presente alguno de las características que Dios
usa para sembrar iglesias saludables.

Pablo dijo: “Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento”
(1 Co. 3:7). La iglesia sólo será plantada si colaboramos con Dios. Él edificará su iglesia.

Los objetivos básicos para un fundador de iglesias son

Cultivar bien la visión: el sembrador tiene que tener la capacidad de dar forma a una imagen
mental de lo que será el producto final de la iglesia que Dios quiere que inicie también debe
tener la importancia de un objetivo

Los ministros básicos en la nueva congregación deben estar preparados y aptos para el
trabajo se necesita gente con compromiso y de tiempo para la tarea a signada ya que este
trabajo no es de un solo rato nada más si no es de permanecía. Todos podemos trabajar pero
solo unos cuantos o unos solo era el que ministre y dirija la nueva congragación.
El tiempo lo definirá la asamblea o el grupo de organización del de sembrar iglesias y sea a
largo o corto plazo según la visión y el objetivo del sembrador de iglesias.

Las finanzas
¿De dónde se obtendrán los recursos financieros para la siembra de la obra?

En algunas o casaciones la iglesia madre es la que solventa todo el gasto cuando se inicia la
obra en cualquier lugar ella lleva esa responsabilidad pero se puede trabajar juntamente con
el equipo de asignado en varias áreas requerida. También se puede buscar patrocinadores de
lo cual nos pueden ayudar económicamente en la obra siempre y cuando se le hable y se les
del proyecto o el objetivo por el cual se está pidiendo apoyo.

Hay muchas manera de solventar económicamente el trabajo de la obra no solo es esperar a


que la iglesia madre nos de todo tenemos que trabajar en equipo. Y Dios abrirá las puertas
para que la obra y la siembra de iglesias siempre crezcan.
Conclusión
Sembrar iglesias que pueden producirse y que, de hecho, lo hagan empezando otras
congregaciones, constituye una estrategia misionera que sigue el patrón básico para un
avance cristiano eficaz en cualquier época desde la expectativa bíblica, es obvio que
empezar iglesias que se reproducen ocupa un lugar principal en la evangelización mundial.

A fin de que un esfuerzo por sembrar iglesias reproducibles sea eficaz, la visión y estrategia
tiene que convertirse en partes de la composición genética desde el principio.

Una de las mejores maneras de comunicar e implementar la estrategia para sembrar iglesias
reproducibles es que el sembrador de iglesias guie al equipo al grupo núcleo y a ala
congregación.

Si el mundo necesito nuevas iglesias nuevas esta es la hora ha llegado el momento de


levantarse y sembrar iglesias a lo largo y ancho de nuestro continente, nadie puede cuestionar
los resultados de los designios de Dios. Nadie puede cuestionar se eficacia en alcanzar todos
los estratos de la sociedad. No hay más humildes y en las comunidades más influyentes.

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