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Familia con propósito

P2 – El amor como fuente de poder para los padres

todos sabemos en el fondo de nuestros corazones que el amor es el poder que perdura. El amor es la fortaleza que
necesitamos.

Este mensaje no es sobre algo que no sepas. Es un mensaje sobre cómo te conectas. Cuáles son las cosas que podemos
aprender de Jesús, sobre cómo te conectas al poder de su amor diariamente.

Ahora, cuando pensamos en qué potencia nuestra paternidad.


debemos aceptar que la dura realidad de que somos imperfectos, fuera de Dios no existe el padre perfecto o una familia
perfecta.

Mis padres no son perfectos. y Te aseguro que los tuyos tampoco. Te aseguro que no eres o serás un padre perfecto con
la familia perfecta.
Y Estamos de acuerdo en que no existe el hijo perfecto.

Todos los que son padres, en algún punto se han sentido un fracaso como padres.
Y pareciera que todos tienen algo que opinar sobre la crianza. y escucharás muchas opiniones de, tíos, hermanos,
padres, suegros, abuelos, amigos.

Y a veces las opiniones pueden ser útiles, a veces pueden darte buenos consejos. pero otras veces será difícil también.

necesitamos una dosis de la verdad de Dios. Y lo que sabemos sobre la verdad sobre las relaciones, es que nada es más
importante que el amor.
Dios nos dice eso una y otra vez en su Palabra.
Es la verdad que debes recordar siempre que estés luchando con lo que sientes como padre, o como cuidador de tus
padres ancianos.
en un mundo que a veces valora más las tareas que las relaciones, Debemos volver a la verdad que nos enseñó Jesús.
que las relaciones son lo más importante en la vida.

Mateo 19:14 NTV “Pero Jesús les dijo: «Dejen que los niños vengan a mí. ¡No los detengan! Pues el reino del cielo
pertenece a los que son como estos niños».”

Ese es el corazón de Jesús hacia las familias, el corazón de Jesús hacia los niños. A eso me refiero cuando hablo sobre el
amor.
Comienza con Cristo Jesús. Nos dijo qué hacer, y cómo hacerlo, y cómo funciona.

Juan 13:34-35 NTV “Así que ahora les doy un nuevo mandamiento: ámense unos a otros. Tal como yo los he amado,
ustedes deben amarse unos a otros. El amor que tengan unos por otros será la prueba ante el mundo de que son mis
discípulos».”

¿Y como podemos cumplir este mandamiento que nos dejó Jesús?.

Lo que quiero hacer esta tarde es caminar a través de lo que Jesús dijo.
Vamos a dividir en cuatro partes este verso que acabamos de leer, y hablar sobre el amor de Jesucristo revelado en
nuestras familias.

¿Cómo puedo amar a los demás?.

I.- Necesito un mejor ejemplo.


Cuando Jesús nos enseña, dice Quiero que ames como yo te amo. Dice: mira mi ejemplo. Él es el ejemplo. Él es el
modelo de amor. Él es el principio. Y no solo es cierto en la crianza de los hijos y en las familias. es cierto en el
matrimonio, en los negocios, en la escuela, en la amistad.
Y Este es el principio: Yo seguiré el ejemplo en el que me enfoco. Tendemos a seguir el ejemplo que hemos tenido. Nos
enfocamos en cualquier ejemplo. Tendemos a tener el tipo de matrimonio que nuestros padres tenían. Las cosas que se
dejaban sin atención tienden a desviarse por el camino.

Si creciste en un hogar que mostraba afecto, donde siempre hubo abrazos, entonces eso sucede en tu hogar. Si creciste
en un hogar donde los abrazos eran como el evento de la década, solo había un abrazo cada 10 años y era un gran
momento. Entonces así tiende a ser la naturaleza de tu hogar. Por cierto, cuando nos casamos, tendemos a ser atraídos
por personas diferentes. Si tuviste muchos abrazos en tu casa, y alguien aparece, y es más tranquilo, y es interesante y
te atrae, te casas con esa persona. pero luego las mismas cosas que te atrajeron te irritan después de casarte, porque es
como. por qué haces eso de esa manera, así no se hace, en mi casa se hacía así.

El hecho simple es que Dios nos hizo diferentes. Dios nos hizo para aprender el uno del otro. Tuvimos ejemplos mientras
crecíamos. Es realmente difícil romper el patrón del ejemplo que se estableció para nosotros, pero no es imposible.
Ya sea que estés huyendo de un mal ejemplo o corriendo hacia uno bueno, los ejemplos tienden a impulsar tu vida y no
son un impulso suficiente. Necesitas más impulso que ese, necesitas un ejemplo de amor.
Y Este principio implica secuelas en nuestras familias porque tendemos a criar a nuestros hijos como lo hicieron con
nosotros.

Tendemos a imitar. Las expresiones, el tono de voz, Las costumbres de la casa.


es el poder del ejemplo.

Ahora, la gran pregunta es.


¿Y si tuvieras un mal ejemplo?.

todos lo tuvimos de alguna manera. Por qué no teníamos padres perfectos.


Pero si tuvieras sólo un ejemplo horrible.
¿cómo superas eso?. ¿Cómo empiezas a vivir de una manera nueva?.

No es suficiente sólo querer romper un mal patrón. De hecho, querer romper la realidad Puede llevarte de vuelta a él, a
un ciclo.

para cambiar Debes tener un nuevo patrón. Jesús te ofrece eso cuando dice, Así como yo te amé, dice Te estoy
ofreciendo un nuevo patrón. Él dice Te estoy dando un nuevo mandamiento. Jesús nos dio un nuevo mandamiento,
porque no es suficiente solo tener un nuevo comportamiento para amar de manera diferente. Necesitamos un modelo
nuevo. Necesitamos un mandamiento nuevo.

debes dejar de intentar, y comenzar a confiar.

1 corintios 11:1 NTV “Y ustedes deberían imitarme a mí, así como yo imito a Cristo.”

Suena un poco orgulloso al principio. pero él no dice que esté imitando perfectamente a Cristo. Si ves el contexto, Él dice
Al menos intento imitar a Cristo. Y mientras yo intento imitar, tu imítame a mí. Es un juego de seguir al líder, pero
Jesucristo es el líder.

Y Nunca vas a poder borrar el ejemplo del hogar en el que creciste. Eso es imposible, pero puedes cambiar tu respuesta
a las circunstancias de tu familia con esa idea de la decisión de seguir a Cristo, permitiéndole ser quien esté al frente.

Jesús nos enseñó lo que se supone que debemos hacer. Así es como vives una vida de amor, una familia impulsada por
el amor.
Juan 13:15 NTV “Les di mi ejemplo para que lo sigan. Hagan lo mismo que yo he hecho con ustedes”

Él dice: Hago esto para que puedas verlo y puedas hacerlo por otros. Esto sucede la noche antes de que Jesús muriera. Él
estaba en la habitación con sus discípulos. Todos entraron a la habitación y nadie había lavado los pies de nadie. Ese día,
cuando entraron a la habitación, alguien lavó sus pies porque estaban sucios. Acaban de llegar de las calles polvorientas.
Jesús entró en una habitación llena de corazones orgullosos y pies sucios. Nadie estaba dispuesto a lavar los pies de
nadie. Así que lava sus pies. Luego, cuando termina, dice. quiero que sepan que he hecho esto como un ejemplo de lo
que pueden hacer el uno por el otro.

En la actualidad, algunos probablemente han visto que a veces en las iglesias de hoy tienen ceremonias de lavado de
pies. Son como cosas santas y realmente sagradas. Pero no fue lo que sucedió ese día. La razón por la que lavaron sus
pies ese día. fue porque estaban sucios. Esa es la razón.

cuando piensas en por qué lo hizo ese día. Y piensas en lo que Jesús nos está diciendo, el dice cuando ves a alguien que
tiene una necesidad que puedes satisfacer, que no pueden satisfacer por sí mismos y tú la satisfaces, amas como yo
amo.

Entonces, cuando pensamos en este modelo y seguimos el modelo de Cristo y lo que significa, queremos ser prácticos
Con esto. y lo más práctico que puedes hacer cuando se trata de seguir el modelo de Cristo, es ver cómo lo hace Cristo.
La única forma de seguir un modelo es ver ese modelo. ¿y donde ves cómo lo ha hecho Cristo?,
lo ves en la Biblia, lo ves en las Escrituras.

II.- Necesito un cimiento más sólido

Jesús tan sólo dijo: Yo te he amado. La mejor experiencia de toda tu vida es cuando realmente entiendes, aceptas y
tomas en tu corazón que Jesús te ama.

De hecho, a diario, lo más importante, lo más significativo de cada día de tu vida es cuando te paras y te das cuenta que
Jesús te ama.

Una vez que veas. Y realmente experimentes ese amor. Todo cambia. Cambia cada relación que tienes.

¿Porque?. Porque es una base sólida.

Daré amor porque he recibido amor

No puedes dar el amor que no has recibido. especialmente el tipo de amor de Dios, el amor incondicional, ese amor.
No cometas el error de tratar de amar desde una cuenta que está totalmente vacía.
Nada es peor que tratar de evocar el amor cuando no lo sientes. En esos días, cuando piensas.
no tengo nada de amor que dar a mi cónyuge, a mis hijos, a mis padres, o a esa tía o tío.

Entonces en nuestras familias con propósito. Tenemos que volver a llenar nuestros tanques con el amor de Dios. Ese es
el único fundamento que Nos dejará salir adelante en toda relación. Tenemos que recordar que Dios nunca amará a
nadie, más o menos de lo que hace ahora.

Y En cuanto el amor de Dios por mí, el amor de Dios por ti. Muchos sentimos que de alguna manera. Está enojado con
nosotros, nos condena porque sabemos que no somos perfectos y sabemos que él sí lo es. Pero la verdad del asunto es
que cuando Dios te ve, ve a Cristo. Y cuando Dios te ve, no te condena. Si crees que te ama en tus días buenos y no en
los malos, no entiendes el poder del amor de Jesucristo.

Romanos 8:1 NTV “Por lo tanto, ya no hay condenación para los que pertenecen a Cristo Jesús;”.
Si conoces a Cristo y te sientes condenado, eso no es Dios. Eres tú que te sientes condenado. Sentirse condenado es una
señal que construyes en el fundamento equivocado. Usualmente el fundamento de lo que haces te sientes mejor
contigo porque has hecho cosas buenas, cristianas, amorosas, de familia. Me siento bien conmigo mismo. Luego haces
cosas malas y sientes. Hoy estoy condenado. Ese no es el fundamento. El fundamento es, no hay condenación. No
importa lo que hagas en el amor de Cristo, no hay condenación para los que pertenecen a Jesucristo. Las opiniones de
otros nos pueden condenar y aun tu propia opinión de ti mismo a veces. Pero Dios, Dios nunca lo hará. No condenará. Es
el fundamento en el que te basas.

Juan 15:9 NTV “»Yo los he amado a ustedes tanto como el Padre me ha amado a mí. Permanezcan en mi amor”

Permanezcan en mi amor es:


relájate, ponte cómodo, siéntete seguro.

Efesios 5:1-2 NVI “Por tanto, imiten a Dios, como hijos muy amados, y lleven una vida de amor, así como Cristo nos amó
y se entregó por nosotros como ofrenda y sacrificio fragante para Dios.”

Lo mejor que puedes hacer para amar a tu hijo es darte cuenta que tú mismo eres un hijo muy amado. Nunca olvides
eso. Comprométete a una relación con Cristo y luego deja que te ame cada día y vive en ese amor.

III. Necesito un propósito más elevado.

Jesús dice, Su amor probará al mundo que son mis discípulos.


El amor no es el propósito más elevado. El amor va a durar más que nada. El amor es lo más importante. Pero en
realidad existe un propósito superior.
El propósito superior del amor es mostrar a Dios como quien es en verdad. Su amor probará al mundo que son mis
discípulos.
No es así en nuestra cultura. en canciones de amor, en el cine, el propósito más elevado es que obtengas algún tipo de
amor en tu vida. Pero, La Biblia enseña que Dios te hizo para más que eso. te hizo para más que solo amar, te hizo con
un propósito en tu amor.

Si el propósito superior del amor es amor, básicamente es egoísta, pero no es solo amor. Escriban esto.

El propósito que Jesús nos dio para toda la vida es que el mundo vea quién eres, que el mundo vea que eres discípulo de
Cristo, que lo sigues a Él.

Salmos 115:1 NTV “No a nosotros, oh Señor, no a nosotros, sino a tu nombre le corresponde toda la gloria, por tu amor
inagotable y tu fidelidad.“

Es una frase grande.


Y la cantamos mucho. pero, ¿qué significa dar gloria a Dios?.
Es el propósito más elevado. ¿Qué significa dar gloria a Dios?.

Das gloria a Dios cuando muestras al mundo un cuadro de cómo es Dios cuando me ama, y expresas ese amor a alguien
más, eso trae gloria a Dios, trae propósito a tu familia. Eso es lo que dice aquí. Una de las claves para obtener una familia
fuerte es reconocer que Dios no solo quiere obrar en tu familia, quiere obrar por medio de ella para realmente traer la
gloria a Dios.

Uno de los grandes versos en toda la Biblia acerca de la crianza y de las familias es

Salmos 127:3a NTV “Los hijos son un regalo del Señor.”

O sea, ¿quien te dio ese hijo?, ¿de donde vino?, ¿para quien fue creado?. fue para el Señor.
Cuando reconoces que es un regalo de Dios, eso es parte de un propósito superior a ser padres.

tener hijos es la relación perfecta del discipulado. Es La primera oportunidad perfecta de desarrollar a un hijo y
enseñarle de Dios y cuánto lo ama.

Gálatas 4:19 NTV “¡Oh mis hijos queridos! Siento como si volviera a sufrir dolores de parto por ustedes, y seguirán hasta
que Cristo se forme por completo en sus vidas.”

y seguro estarán de acuerdo que a veces el proceso de que se desarrolle Cristo en las vidas de sus hijos, es peor que
muchos dolores estando en la labor de parto. Es doloroso, pero es una bendición.

Los hijos son un regalo del Señor, y hay que dedicarles de nuevo al Señor para ser usados para sus propósitos. Ser padres
no se trata de mí, no se trata de ti. Ni siquiera se trata de los hijos. Se trata de la gloria de Dios y de cómo obra su
propósito en las vidas de cada uno de nuestros hijos.

IV.- Necesito un poder mayor.

es realmente lo básico de cómo empezamos a amar en nuestras familias, a amar como padres. Realmente lo básico de lo
que decía Jesús en este nuevo mandamiento, y es necesitas un poder mayor. Si esto va a funcionar, necesito un poder
mayor. Si voy a hacer lo que Jesús dijo, amar a otros, lo dijo dos veces en este mandamiento, Necesito un poder mayor.

Ahora, ¿cómo se ve el amor real?.


¿cómo se ve en una casa, en un hogar?.
¿Cómo llegar a esta realidad?.

El amor genuino se adapta a la realidad de tu vida.


Es como por ejemplo.

si tu le gritaste a tus hijos en la mañana, y cuando regresan en la tarde, o en la noche cuando vienes del trabajo, les
dices. La regué, lo siento mucho, ¿me perdonas por regañarte así esta mañana?.

Aprenden más del perdón, más que en una clase o un seminario.

o si das a alguien con necesidad, eso dice mucho. Les enseña como es el amor real.

cuando cargas a un bebé, solo para cargarlo. Ese bebé aprende más de la seguridad que hay en el amor de Dios. Él
aprenderá demasiado de ese amor. Él lo hará porque es el amor de Dios, el amor verdadero.

Y ¿cómo consigues este amor mayor para un propósito superior?.

1 Juan 4:19 NTV “Nos amamos unos a otros, porque él nos amó primero.”

Empiezas con su amor. No estás solo. Esta es la noticia más grande en el mundo. no estás solo, no estás sola.
puedes buscar su poder.

Tienes el poder de Dios. Pero también tenemos una familia. una familia de fe. Aquí, que trabajan juntos.

Filipenses 4:13 NTV “Pues todo lo puedo hacer por medio de Cristo, quien me da las fuerzas”

Talvez y dices. Lo sé. Dios puede hacer todo.


pero mi familia es un desastre.
Bueno. bienvenido al club.

¿Han leído sobre las familias que están en la Biblia?.


No es nada bonito.
la mejor familia en la Biblia. Sé que es la mejor familia porque una vez Dios destruyó a todo el mundo, excepto una
familia.

la familia de Noé.
Bien, la familia de Noé es la mejor familia, y son un desastre.

Termina el diluvio, noé se emborracha, lo encuentran desnudo en la carpa. ahí esta la historia en Génesis.

Y esa es la mejor familia en el planeta.

Si tu familia es un desastre, bienvenido al club.

Noé era muy bueno comparado a otras familias.

Están Jacob y Esaú, de Isaac y todas esas familias. Esos hermanos se peleaban, peleaban aún a la hora de nacer, pelearon
toda su vida, querían matarse entre ellos. Y de esta familia viene la línea de Jesucristo.

Todos son un desastre de familia. La familia de David era un desastre, la familia de Abram era un desastre, la familia de
Jesús era un desastre, excepto Jesús, que fue perfecto. Todos sus hermanos y hermanas estaban enojados con él todo el
tiempo porque ministraba.

Una familia es un desastre. Bienvenidos al club. Deja de pensar que todos los demás por ahí tienen familias perfectas.
No. solo callan más que tú. Es un desastre. Todos tenemos familias desastre, y Dios puede revelar su amor en tu familia.
Puede revelar su amor en familias que son un desastre.

pero la diferencia es que nos empodera para amar en esa familia. Esa es la diferencia. Con el amor tienes esperanza. Sin
él no hay nada, absolutamente nada.

1 corintios 13:1-3 NVI “Si hablo en lenguas humanas y angelicales, pero no tengo amor, no soy más que un metal que
resuena o un platillo que hace ruido. Si tengo el don de profecía y entiendo todos los misterios y poseo todo
conocimiento, y si tengo una fe que logra trasladar montañas, pero me falta el amor, no soy nada. Si reparto entre los
pobres todo lo que poseo, y si entrego mi cuerpo para que lo consuman las llamas, pero no tengo amor, nada gano con
eso.”

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