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1.

El tercer Sector
1.1 Características de las asociaciones del tercer sector
el Tercer Sector puede ser definido, residualmente, como aquellas actividades en que el principio dominante no
es ni la coerción formal ni el intercambio lucrativo de bienes y servicios, sino que se basa en actividades
voluntarias en el doble sentido de estar libres de coerción y de los constreñimientos económicos de la
ganancia1.

en un documento-informe elaborado por el Observatorio del Tercer Sector, y que reúne las opiniones de los
miembros de sus Consejos Asesores, se afirma que los principales retos del Tercer Sector son los cinco
siguientes: identificar los rasgos comunes y los valores compartidos para la elaboración de un discurso
colectivo, recoger la diversidad del sector, reforzar su estructuración, potenciar el trabajo en red y promover el
intercambio de conocimiento entre las entidades que lo integran 2.

1.2 Tipos de organizaciones del tercer sector


1. 3 Asociaciones sociales
2. Tercer Sector y el Estado de Bienestar en España
La concepción del tercer sector que plantea que es un espacio formal, no lucrativo y que puede ser
privado social o privado público, permite captar la existencia de interrelaciones y amplias zonas de
contacto y solapamiento entre éste y los sectores próximos. De esta forma, comparte fronteras con los
hogares, el mercado o sector lucrativo y el Estado o sector público, por lo que se relaciona y mantiene
vínculos de dependencia a nivel estructural, que en su interacción establecen límites y ejercen
presiones unos sobre otros. Este enfoque permite estudiarlo a partir de las formas históricas concretas
que adoptan dichas relaciones intersectoriales y que dan lugar a regímenes de bienestar.
Un régimen de bienestar se identifica en función de la contribución que la familia (basada en la
reciprocidad), el mercado (basado en el intercambio lucrativo) y el Estado (basado en la
redistribución), efectúan a la suma total del bienestar social.
En el caso español, el autor Rodríguez Cabrero citado por Ariño indica que, el contexto real del Tercer
Sector de Acción Social está conformado por un marco institucional que no está ajustado a la realidad
del país, un modelo de Estado de Bienestar limitado, un mercado competitivo en la producción del
bienestar y en la de valores y una estructura social proclive a la excusión social y el utilitarismo moral.
No obstante, los diversos autores que han profundizado en el tema en España, han coincidido en tres
aspectos fundamentales para la descripción del tercer sector, los cuales se mencionan a continuación 3:
1. La heterogeneidad interna
Este punto se refiere a la diversidad que tiene el sector, porque es una realidad plural en lo relativo a
la lógica institucional de las entidades como a su tamaño, al ámbito territorial y su orientación al

1 Ariño, A. (2008). Articulación del Tercer Sector en España. Revista española del tercer sector, N.° 10,
págs. 107-132.
https://www.researchgate.net/publication/28245414_Articulacion_del_Tercer_Sector_en_Espana/citation/download
consultado el 12 de junio 2020. página 111.
2 Idem página 114-115
3 Ariño, op.cit., 2008. págs. 112-115.
servicio, en tanto que abarca la totalidad del mundo asociativo no lucrativo y de los movimientos
sociales, por lo que mantienen objetivos heterogéneos y grados muy variables de implicación social y
política.
2. Reducida autonomía
Sobre este aspecto, el tercer sector en España mantiene un alto grado de dependencia financiera con
respecto al sector público producto de que trabajan bajo un modelo de cooperación económica. En el
caso concreto de las asociaciones sociales, la mayoría de las entidades dependen para la ejecución de
sus programas de las aportaciones de la Administración. Las entidades sin fines de lucro no sólo tienen
una base económica muy endeble, sino que la creación de cuerpos de profesionales para gestionar la
prestación de servicios específicos les obliga a adoptar posturas políticas de neutralidad ideológica
para no perturbar la captación y regularidad de las subvenciones.
En el ejemplo particular de las Organizaciones No Gubernamentales para el Desarrollo (ONGD)
españolas, el autor Ruiz Olabuénaga citado por Ariño, comenta que éstas iniciaron con un enfoque
religioso y asistencial, desarrollándose en función a un modelo mediático, de base económica y no de
base social, lo que dificulta su relación con el conjunto de la sociedad y genera una fuerte
dependencia de los gobiernos y fuentes públicas de financiación.4.
3. Débil articulación interna de las entidades que lo componen
Esta tercera característica representa una limitación importante porque se refiere a la dificultad que
hay entre las organizaciones que componen el sector para trabajar en conjunto, en gran medida
producto de la diversidad interna en cuanto a capacidad económica, cultura, estilos de trabajo y
dimensión organizativa. Asimismo, esta pluralidad se refleja en la fragmentación como grupo que se
traduce en una escasa capacidad de interlocución política y social, y la más importante que es la
posibilidad de absorción por parte de grandes entidades públicas o privadas (partidos o iglesias, entre
otros).
En definitiva, las características mencionadas con anterioridad son un claro reflejo de las deficiencias
en la articulación entre entidades, que no sólo deja claro la complejidad de cada una producto de la
heterogeneidad presente, sino que esta diversidad lejos de ser una fortaleza, se convierte en una
debilidad que será superada a medida que el sector vaya madurando y modernizándose, a medida
que vayan asumiento la importancia de la integración y cooperación estratégica que deben tener,
mediante la conquista de cuotas de autonomía e independencia en relación con el mercado y el
Estado.
En este contexto, las organizaciones del tercer sector en la actualidad deben llevar a cabo un ejercicio
de reflexión estratégica sobre los cambios globales que se presentarán desde la perspectiva de los
financiadores y de los usuarios, de allí que se puedan mencionar 4 grandes retos que deberán afrontar
para estar preparados en relación a las oportunidades de crecimiento y desarrollo que se le presenten.
El primer reto que encontramos es el estratégico, que abarca las exigencias que tendrá el tercer sector
ante los cambios de la demanda social, dado que deberá anticiparse por medio de la planificación

4 Idem página 114.


estratégica, a los cambios en las tendencias mundiales para definir el rol que quiere jugar en la
provisión de servicios sociales a futuro.
El segundo reto es el económico, puesto que la estabilidad y la sostenibilidad de las organizaciones del
tercer sector, dependen en su mayoría de los aportes públicos, esta dependencia genera
incertidumbre presupuestaria y limita la capacidad de planificación y ejecución, por ello es necesario
la diversificación de las fuentes de financiación.
El tercer reto es el relacional, esto debido a que es vital incrementar la colaboración entre las
entidades que lo conforman, así como con otras entidades públicas y privadas para potenciar las
relaciones y las alianzas temporales. Este reto también abarca el buen gobierno y la transparencia, y la
potenciación de la reputación del sector, ya que es imperante adoptar formas de control y dirección
del ámbito empresarial para implementarlas dentro de las organizaciones con la finalidad de mejorar
la gestión, a partir de la producción y comunicación de información que se proporciona a los
diferentes grupos de interés, contribuyendo de esta forma con la transparencia en la información, por
último, las organizaciones del tercer sector deben desprenderse de la comunicación reactiva y
enfocarse en transmitir a la población, mensajes publicitando la labor social que realizan, enfocándose
siempre en potenciar la reputación del sector.
El último reto es el interno, que abarca la dificultad de atracción y retención de talento motivado a la
especificidad de perfiles que se requieren para atender áreas dentro de la organización, por lo que
deben enfocarse en mejorar el proceso de captación de talento, así como fomentar el desarrollo del
personal que se encuentre más capacitado. Asimismo, se encuentra el bajo cumplimiento de la
normativa y los controles internos, que las organizaciones deben esforzarse en generar nuevas
herramientas que permitan garantizar el cumplimiento de las normas y las sanciones en caso de que
ocurra lo contrario5.
2.1 Relación institucional de las asociaciones sociales y del Estado español
En función a lo descrito anteriormente, trataremos a las asociaciones como agrupaciones de personas
constituidas voluntariamente para realizar una actividad colectiva estable, con organización formal
democrática, sin ánimo de lucro e independientes, al menos formalmente, del Estado, los partidos
políticos y las empresas6.

En el área mediterránea, el desarrollo de este tipo de organización ha sido más tardío que en otras
áreas de Europa, como consecuencia de una escasa secularización y la presencia de regímenes
autoritarios que han dado lugar a una desconfianza generalizada en las asociaciones civiles. Por ello,
en España a pesar de que han existido potencialidades para su expansión, también ha habido
obstáculos en su desarrollo, de allí que muestran un significativo crecimiento a mediados de los años

5 Radiografía del Tercer Sector Social en España: retos y oportunidades en un entorno


cambiante. Fundación PwC. Páginas 11-12.

6 Alberich, T. Marzo 2007. Revista de estudios de juventud. N.° 76. 71-89. Asociaciones y Movimientos Sociales en
España: Cuatro Décadas de Cambios. Página 75.
noventa del siglo pasado, adoptando diferentes formas jurídicas y expandiéndose en múltiples
campos, como por ejemplo asociaciones de tipo profesional, sindical o cooperativistas.

En lo que respecta a la financiación, este tipo de asociación presenta una significativa dependencia del
Estado, no siendo muy altas las donaciones ni la venta de servicios. La importancia religiosa ha sido
crucial en la formación del asociacionismo, de clara vocación católica y donde apenas ha existido
convivencia con otro tipo de religiones. Sin embargo, existen aún barreras estructurales y culturales
que frenan una auténtica explosión de estas formas sociales7.

En España la principal fuente de ingresos de las asociaciones lo constituyen las cuotas y el cobro por
los servicios prestados, en el caso del porcentaje de ingresos procedentes del sector público o del
Estado es significativamente menor que el proveniente de cuotas privadas, pero supera con creces el
porcentaje de ingresos por donativos privados. En este sentido, en comparación con el resto de países
europeos, el apoyo a las asociaciones sociales por parte del Estado es menor (40,1% en la media global
y 32,1% en España) en comparación con las donaciones que representan una menor cantidad a nivel
global que en España (10,5% globalmente y 18,8% en España), por lo que en los otros países se ha ido
perfilando un modelo diferente de cooperación entre las asociaciones sociales y el Estado, a diferencia
del caso español que ha tenido un desarrollo tardío del estado de bienestar 8.

3. Las asociaciones sociales y la inserción socio laboral


La creación y el desarrollo de las empresas de inserción social han marcado un hito muy relevante en
el desarrollo de la metodología de la inserción laboral de colectivos socialmente excluidos o en riesgo
de serlo. Hemos de tener en cuenta que mucho antes de la aparición de estas empresas, las entidades
sociales venían desarrollando en la práctica formaciones para el empleo y acciones complementarias
con el objetivo de lograr una posterior incorporación en el mundo laboral, entendiendo que era la
mejor manera de asegurar una completa integración social. Es por ello por lo que se ha ido
concretando la metodología de itinerarios de inserción laboral.
De forma paralela estas mismas entidades asumieron el modelo de acompañamiento como un
modelo de intervención social. El acompañamiento implica poner a las personas y su contexto en el
centro de la propia intervención resaltando aspectos mucho más participativos e igualitarios, al ser las
personas implicadas quienes marcan sus logros. Implica, por lo tanto, dar una especial relevancia a las
relaciones y a la comunicación constante.

7 Herrera Gómez, Manuel, y Luis Ayuso Sánchez. «Las asociaciones sociales, una realidad a la búsqueda
de conceptuación y visualización.» Revista Española de Investigaciones Sociológicas, n.º 126 (2009): 51.

8 CODENAF. Módulo I. Tercer Sector. 2018. Formación e intervención social desde la perspectiva del
voluntariado.
Estas entidades sociales han sido las promotoras de la mayoría de las empresas de inserción social,
aportando este bagaje y estas formas de hacer en un contexto de producción empresarial 9.

3.1 Las asociaciones sociales de inserción socio laboral en la CAM


3.2 Asociación Lumbre, Centro de Formación y Atención Socioeducativa
3.2.1 Descripción de la Entidad
3.2.2 Misión, Visión y Valores
3.2.3 Estructura Organizativa
3.2.3.1 Cronograma
3.2.3.2 Proyectos desarrollados
3.2.4 Servicio de apoyo a la búsqueda de Empleo en asociación Lumbre
3.2.4.1 Proyectos del área de empleo.
3.2.4.2 Barreras que tienen que hacer frente los usuarios en el acceso de empleo
Sumadas al género, la clase social y la procedencia étnica (sobre todo no comunitaria) se configuran
como elementos estructurantes de la identidad personal que pueden dificultar la empleabilidad de las
personas. A ellos se adhieren otros factores como la edad y la pertenencia a grupos de especial
vulnerabilidad (personas drogodependientes, con discapacidad funcional, exreclusas...). Elementos
que pueden ocasionar discriminaciones múltiples, disminuyendo las posibilidades de inserción laboral
y, por ende, generando pobreza y exclusión social en las personas que sufren estas situaciones.
Asimismo, estas discriminaciones se ven reforzadas por las propias dinámicas del mercado de trabajo,
tanto más cuando se cruzan con el factor género. Ello origina una demanda de mano de obra para
trabajos precarios y de perfiles ocupacionales estereotipados. Como consecuencia, en la actualidad se
vienen configurando ámbitos de la economía (en muchos casos sumergida) que paulatinamente están
adquiriendo el estatus de guetos laborales. Entre ellos se encuentran por ejemplo la atención a
personas dependientes, el servicio doméstico o la hostelería10.
Objetivo General
- Establecer cuáles son los perfiles de usuarios que atiende la asociación Lumbre desde el área de
empleo.
- Realizar una comparación evolutiva de los aspectos más relevantes en las inserciones laborales
de la asociación Lumbre entre el 2015 y 2019.
- Conocer cuáles son las barreras que los usuarios perciben en su acceso al mercado laboral.
Objetivos específicos

9 Lázaro Blanco, Emilio, y Miguel Angel Martínez Polo. 2013. «El tránsito Al Empleo De Las Personas más
Desfavorecidas a través De Las Empresas De inserción». Cuadernos De Trabajo Social 26 (2), 467-78.
https://doi.org/10.5209/rev_CUTS.2013.v26.n2.40228. Consultado el 13 de junio 2020. Página 460.

10 Mimbero-Mallado, Concepción, Joilson Pereira


da Silva, Ana Guil-Bozal, y Sara Vera-Gil. 2016. Empleabilidad Social Y Género: Opiniones De Personas
Desempleadas Sobre La Inserción Laboral. Revista De Estudios De La Administración Local Y Autonómica, n.º 4
(enero), 95-104. https://doi.org/10.24965/reala.v0i4.10307. Página 98.
- Analizar qué porcentaje representa la población atendida desagregada por sexo y
edad.
- Conocer el país de origen de los usuarios del área socio-laboral de la asociación
Lumbre.
- Analizar el porcentaje de jóvenes que están inscritos en la asociación Lumbre.
- Identificar cuáles son los perfiles laborales que han accedido más fácilmente al
mercado laboral.
- Conocer cuáles son los sectores económicos donde se ha producido mayor
inserción laboral por año.
- Analizar en qué año se han producido más inserciones laborales entre los
usuarios.
- Averiguar cuál es el perfil que ha tenido mayores dificultades a la hora de acceder
a un empleo en cada año.
- Conocer cuál es la barrera principal que dificulta el acceso de empleo percibida
por los usuarios.
.

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