Encuentro de lideresas para el fortalecimiento del trabajo articulado - Vicegobernadoras del

Bicentenario
Declaración conjunta

Siendo 2 de diciembre del año 2021, en las instalaciones de la Universidad Nacional de Trujillo,
nos reunimos en el marco del 16º GORE Ejecutivo, las Vicegobernadoras de las regiones de
Ayacucho, San Martín y Cusco; así como las Consejeras Regionales de Trujillo, Sánchez Carrión,
Virú y Gran Chimú.

Como producto del primer Encuentro de lideresas para el fortalecimiento del trabajo
articulado - Vicegobernadoras del Bicentenario, declaramos lo siguiente:

Luego de un trabajo consensuado, identificamos las siguientes barreras para el pleno ejercicio
de nuestras funciones de representación y de nuestros derechos políticos:

En el ámbito normativo

- Como vicegobernadoras identificamos la necesidad de evaluar la modificación del marco

normativo, con la finalidad de tener claridad respecto de nuestras funciones de
representación y en lo referente a los salarios.

- Como consejeras señalamos la importancia de reforzar la normativa para asegurar que los
funcionarios y funcionarias acudan a las citaciones para dar cuenta del trabajo que realizan
a favor de la comunidad, y evitar sesgos políticos y de género.

En el ámbito administrativo

- Las vicegobernadoras consideramos que existen dificultades de coordinación,

comunicación y logística para realizar nuestras funciones y ejercer eficientemente las
responsabilidades que se nos delegan, lo cual trae como consecuencia que critiquen los
resultados de nuestra actuación.

- Asimismo, las vicegobernadoras señalamos que se nos dificulta el trabajo, por la falta de
autonomía e insuficiente confianza en el rol que ejercemos, por parte de los gobernadores,
lo que se traduce en un excesivo control de nuestras actividades.

- Las consejeras manifestamos que, al no darse prioridad a nuestros requerimientos de

presupuesto para nuestra función de fiscalización, no podemos ejercer adecuadamente
nuestras actividades.

Acoso político

- Las vicegobernadoras y las consejeras identificamos que hay una desvaloración del trabajo
de las mujeres en el ámbito político, lo que se traduce en una escasa visibilidad, críticas
constantes a nuestro trabajo, la minimización de nuestras opiniones, la imposibilidad de
participar en espacios de representación y la dificultad para que nuestras perspectivas
sean reflejadas en las decisiones que se toman.
- Queremos manifestar que, en muchas ocasiones, en los espacios de representación
política, somos verbalmente agredidas al defender nuestras ideas y trabajo; lo que se ve
agravado pues el manejo de la información por parte de los medios de comunicación
presentan un sesgo de género, lo que vulnera nuestro derecho a la libre expresión y a un
trato digno.

En ese sentido, proponemos como alternativas de solución a nuestra problemática lo

siguiente:

- Revisar la normativa referida a las funciones de las vicegobernadoras y evaluar su

modificación, para dar claridad a nuestras funciones y garantizar nuestra participación
activa y efectiva en los espacios de toma de decisión.

- Promover el diálogo entre las lideresas políticas para construir una agenda común, a partir
de la institucionalización de espacios en los que se compartan experiencias, se generen
propuestas y se realicen acciones de incidencia sobre las barreras que impactan en el
ejercicio de nuestras funciones y derechos políticos; como el encuentro de
Vicegobernadoras y Consejeras en el marco de los GORES Ejecutivos.

- Fortalecer las capacidades de las lideresas políticas en gestión pública con enfoque de
género y promover la réplica de dichos conocimientos en nuestros espacios de toma de
decisión y en nuestras comunidades, con la finalidad de empoderar a otras mujeres
lideresas e incentivar su participación.

- Sensibilizar a los/las servidores/as públicos/as encargados/as de atender y procesar casos

de acoso político, para que ello se realice con enfoque de género.

- Trabajar para garantizar la aplicación de las normas que tienen como finalidad promover la
participación efectiva de las mujeres en espacios de toma de decisión y de diálogo, sobre
todo de aquellas que pertenecen a comunidades indígenas.

Por último, para lograr una democracia real es preciso que la perspectiva y aportes de las
mujeres sean visibilizados, reconocidos y tomados en cuenta. Para ello es crucial que más
mujeres participemos en política y ocupemos cargos de toma de decisión, lo que se logrará si
reducimos las barreras como los estereotipos de género, en particular el acoso político, que
causa una grave afectación psicológica, impacta en nuestro entorno y desincentiva la
participación y ejercicio de nuestros derechos políticos.

Por la construcción de un país más democrático, igualitario y justo, libre de toda forma de
violencia y discriminación.