Los signos gráficos que se hacen en la escritura para
indicar las pausas y el sentido de lo escrito, de forma que su significado quede claro, se llaman signos de puntuación. Son pocas las reglas fijas que se pueden dar para el uso correcto de estos signos. Son los siguientes: SIGNOS DE PUNTUACIÓN coma (,) punto y coma (;) dos puntos (:) punto (.) puntos suspensivos (…) interrogación (¿?) admiración (¡!) paréntesis ( ) diéresis (¨) comillas (“”) guión (-) raya (_) LA COMA La coma indica una breve pausa en la lectura. Se emplea: 1) Para separar dos o más partes consecutivas de la oración y que sean de la misma clase, siempre que entre ellas no figuren las conjunciones y, ni, o: había manzanos, ciruelos, naranjos y cerezos; alegre, amable, así era mi amigo; estudia, trabaja, atiende la casa y se divierte. LA COMA 2) Para separar dos miembros independientes de una oración, exista o no conjunción entre ellos: unos cantaban, otros bailaban, algunos reían, y todos parecían contentos: al anochecer las flores se cierra, los pájaros buscan su nido, las sombras cubren el campo, y el hombre busca el descanso en su hogar.
3) Antes y después de las oraciones explicativas que aclaran o
amplían la oración principal: no vayas, me dijeron, ya está todo arreglado; la gran sabana, que se extendía ante su vista, le atemorizó; aquellos días, que esperábamos con ansia, se presentaron tristes. LA COMA 4) Detrás del nombre seguido de palabras en aposición: en San Juan, capital de Puerto Rico, hicimos escala; mis amigos, gente despreocupada, no le dieron importancia.
5) Las expresiones adverbiales, sea cual sea su
posición, van precedidas y seguidas de coma; tales como: LA COMA en efecto: en efecto, iremos por carretera; es decir: todos le obsequiaron, es decir, los que le apreciaban; de acuerdo: de acuerdo, se hará como tú digas; en fin: en fin, paciencia; por último: por último, se repartieron los premios; por tanto: te lo advierto, por tanto, procura evitarlo; efectivamente: efectivamente, fuiste tú el culpable; sin embargo: todo salió bien, sin embargo, no le agradó EL PUNTO Y COMA Indica una interrupción más larga que la de la coma. Se emplea:
1) Para separar las diferentes proposiciones de una oración larga en
la que ya hay una o más comas: La lluvia arreciaba, el viento soplaba con fuerza, la marejada iba en aumento; pero el barco se mantenía a flote. Había estudiado toda la noche, tenía que aprender aquello; se levantó, fue a la cocina y tomó café. EL PUNTO Y COMA 2) Antes de las conjunciones adversativas mas, pero, aunque, cuando van en proposiciones largas, ya que, cuando son cortas, basta con la coma: Salió a la calle; mas no sabía a qué Pensó en hablar con él, en hacerle frente aclarar la situación; pero cuando se encontró ante él, no se atrevió. Pensaba en ella día y noche, le escribía diariamente; aunque ella nunca contestaba. EL PUNTO El punto separa oraciones autónomas. La oración siguiente puede empezar en el mismo renglón (punto y seguido), o en el siguiente (punto y aparte), según la fuerza de relación que exista entre una y otra oración. El punto final indica la terminación de un escrito (capítulo, lección, parte).
También se emplea punto después de las abreviaturas: Sr.
(señor), Kg. (kilogramos), pág. (página), cap. (capítulo) y otras. DOS PUNTOS Los dos puntos se diferencia del punto en que están precedidos de algún verbo como: decir, afirmar, asegurar, pensar, replicar, contestar, añadir y otros, usados para introducir frases literalmente exactas a como las dijo el hablante a quién nos referimos; si es un diálogo, cada intervención del interlocutor irá precedida de punto y aparte. DOS PUNTOS Así mismo se usan los dos puntos después de palabras que indican una aclaración: por ejemplo, son los siguientes, son los que sigue. Los dos puntos siguen también a los encabezamientos de las cartas y solicitudes: Distinguido Sr.: Querido amigo: PUNTOS SUSPENSIVOS Se emplean cuando se quiere dejar incompleta la idea de lo que el hablante quiere expresar, con matices de duda, temor, ironía. También se emplean cuando se interrumpe lo que se está diciendo por creer innecesaria su continuación: Sí, pero… Es que yo… No, si ya te decía yo que… SIGNOS DE INTERROGACIÓN Estos signos se escriben al principio y al final de la oración interrogativa: ¿qué pasa? Si hay varias oraciones interrogativas seguidas y cortas, no deben empezar cada una de ellas con mayúsculas, sino sólo la primera: ¿Qué tiempo hace? ¿lloverá? ¿llevaré paraguas? SIGNOS DE INTERROGACIÓN Interrogación directa: ¿Cómo se llama? - ¿A qué hora llego? Interrogación indirecta: Dígame cómo se llama. No sé a qué hora llegó. El uso de estos signos puede ofrecer alguna dificultad cuando la pregunta no empieza con la oración; en ese caso, el signo se escribe sólo en la parte de la oración que tiene sentido interrogativo: En aquellos momentos, ¿qué esperaban? - Cuando llegaron, ¿qué hiciste? USO DE PARÉNTESIS Estos signos escritos sirven para introducir una aclaración que podría sustituirse formando una oración aparte: En Puerto Rico (estado asociado a Estados Unidos) se habla español e inglés. Los presidentes de algunos países hispanoamericanos (Venezuela, Chile y Perú) se reunieron en Punta del Este. USO DE LA RAYA Además de poder sustituir al paréntesis, tiene usos exclusivos: Introduce oraciones con expresiones como: dijo, contestó, aseguró, repusieron, afirmé, argumentó… y él dijo: _como usted quiera; yo _contestó ella_, no iré; no habrá otra guerra _aseguró el presidente_; ¿qué desean? _pregunté_; eso no tiene validez _argumentó. USO DE COMILLAS Se emplean para: 1) Citar algo literalmente: recuerda lo que dijiste: “volveré pronto”, y el protagonista dice: “Esmeralda y yo somos así, señora”. 2) Para encerrar en ellas los títulos de las obras literarias, de programas de televisión, de películas, los nombres de cines, teatros, barcos, trenes, bares: ¿has visto el “Expolio” de El Greco? ¿entrevistaste al autor de “Cien años de soledad”? estudia en el “Liceo Bolívar”. USO DE COMILLAS 3) Se escriben entre ellas las palabras que se inventan al escribir y que tienen un sentido especial sólo para el momento; para introducir palabras extranjeras en el idioma del que escribe; palabras que se dicen con doble sentido con la intención de hacer resaltar algo que parece contradecir lo que está expresando: Una casa de un piso, cuatro árboles alrededor y un pozo seco, ésa era su “hermosa finca”; estudiaba “marketing” para entrar en la “Ford”.