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María de los Ángeles Rodríguez Espinoza

Problemas contemporáneos de México

“La Autosuficiencia Alimentaria”

Frente al avance del neoliberalismo en las economías mundiales, la Autosuficiencia

Alimentaria se configuró como una propuesta para garantizar el abasto de alimentos y

asegurar el acceso a ellos por parte de la población. El término surgió como Seguridad

Alimentaria y nace en la década de los 70´s, como respuesta a las hambrunas que azotaban

principalmente África; así mismo, al correcto abastecimiento de insumos durante los

conflictos bélicos y a las condiciones óptimas de sanidad que permitan una adecuada

producción y consumo de los alimentos.

Los beneficios

Los países que cuentan con los suficientes recursos tanto naturales como materiales para

garantizar la diversificación de los cultivos, pueden ahorrarse el pago de los costos que

representa la importación de alimentos provenientes de otras naciones. Esto les permitiría al

mismo tiempo apoyar a los pequeños y medianos productores, mientras que fortalecen al

mercado local.

En la actualidad, frente a las grandes ciudades que devoran ávidamente al medio rural,

resultaría ventajoso para el Estado proporcionar las condiciones adecuadas para logar el

desarrollo y crecimiento económico de estas localidades y de este modo, la distribución

poblacional se balancearía, puesto que los campesinos no se verían en la necesidad de emigrar

hacia las metrópolis.

Ante la inestabilidad económica que prevalece en los países en vías de desarrollo, es

común que los precios en los alimentos se encarezcan, por tanto, algunos sectores de la
sociedad, los más pobres que viven ó incluso sobreviven en estado de miseria, les es mucho

más dificultoso adquirir los productos (sobre todo los importados), trayendo como

consecuencia hambrunas y desnutrición. Si dichas naciones pudieran producir lo que su gente

necesita, sería factible garantizar una mejor salud alimentaria al ofrecer el mercado los

productos a un precio mucho más accesible, sin el correspondiente pago de los costos extra

por importación.

Aunque es cierto que muchos países no cuentan con los suficientes recursos naturales

para asegurar la diversificación de los cultivos en sus territorios, también es cierto que

muchos de ellos producen un excedente en algunos de sus productos. Una medida adecuada

podría ser consumir lo que se produce localmente, mientras que se exporta el excedente y las

divisas ahorradas podrían ser empleadas en la adquisición de insumos que les son difíciles de

producir.

Para el caso de México, las cifras son alarmantes. En 10 años, la autosuficiencia

alimentaria ha disminuido de un 80% a menos del 70%, mientras que las importaciones

siguen a la alza. El campo, el gran olvido del gobierno mexicano vive una situación que

amenaza con convertirse en emergencia nacional. Mientras que el TLC parecía la gran

salvación para la economía, su entrada en vigor ha provocado estragos en materia alimentaria.

Aunque es cierto que en algunos puntos el acuerdo le ha resultado favorecedor al país,

también es verdad que la enorme lista de restricciones en materia de exportación e

importación de alimentos le han acarreado serios problemas a los productores mexicanos. El

vecino del norte, una fuerte economía con el respaldo internacional que presta grandes

apoyos al sector agrícola. México, país del tercer mundo con un ingreso pér capita menor a un

tercio del estadounidense, sin credibilidad económica y con un campo en agonía…¿Hay

condiciones de equidad en ésta dura competencia?.


Las contradicciones

Los planes y medidas tomadas para la autosuficiencia alimentaria beneficiarían

enormemente a los países con acceso a todos los recursos naturales necesarios para la

producción local de sus demandas de insumos, pero… ¿qué pasa con las naciones cuyos

territorios áridos les imposibilitan subsistir de lo propio?... países del medio oriente y gran

parte de África, donde el agua se configura como un precioso tesoro, ¿sería posible usarla

mayoritariamente para la agricultura, escaseándola para el resto de los requerimientos

poblacionales e industriales?... La realidad es que sus economías dependen de la exportación

de otros productos y/ ó de bienes y servicios, por tanto, sería casi imposible que cambiaran

drásticamente su estrategia de mercado en aras de producir lo necesario para sus habitantes.

La importación de alimentos es un pilar básico para garantizar la salud poblacional y

alejar de ellos al fantasma de la hambruna. Al ser estos países dependientes de la producción

alimentaria extranjera, los países exportadores se benefician al trenviar sus excedentes, que de

no hacerlo, serían bienes improductivos, meros desperdicios que representarían un desajuste a

su base económica.

Del mismo modo, se puede hablar de materia laboral. Mientras que las economías

emergentes aún cuentan con una parte considerable de agricultores, en los países

desarrollados cada vez es menor el número de las personas dedicadas a este sector. Si se

adoptaran las medidas de autosuficiencia alimentaria…¿a quién le agradaría abandonar sus

aspiraciones profesionales para verter sus conocimientos en el campo?, ó mejor dicho, ¿quién

estaría dispuesto a prepararse en agricultura y tecnologías de la producción?....¿Una

computadora frente a un tractor?…no lo creo.


Opinión personal:

Considero que la Autosufiencia alimentaria es una medida favorable para muchas

naciones en vías de desarrollo, puesto que el capitalismo y el neoliberalismo, así como la

globalización, están causando estragos en estos países por no contar con los suficientes

medios para competir frente a economías supradesarrolladas.

Frente a las condiciones de pobreza y atraso en los países tercermundistas, el abasto

local aseguraría que su población tenga mayor acceso a alimentos con menor costo,

mejorando su nutrición y salud. Los excedentes pueden ser empleados para la adquisición de

nuevos bienes de consumo.

En el caso de México, al ser un país de tercer mundo, debería poner mayor atención al

campo. Desde hace años que la cuestión agraria es tema de urgencia nacional, sin embargo,

los gobiernos parecen poco interesados en rescatar y revivir al campo mexicano. Frente a la

firma de tratados internacionales como el TLC, el campesinado vive a la expectativa del

último golpe que le puedan asestar…

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