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ANÁLISIS LITERARIO DEL ZORO

Es un libro que consta de 104 páginas, y cuenta la conmovedora historia del Zoro de Jairo
Aníbal Niño realmente resulta ilustrativa sobre sobre una época marcada por la ocupación
extranjera en los países latinoamericanos, pese a ser una obra infantil ficticia. Se encarga de
relatar la odisea y vivencias de un niño indígena quien después de la agresión de hombres
armados a su aldea de candela se adentra a la selva río abajo.
De este modo, el pequeño emprende su aventura forzada con el firme objetivo de
reencontrarse nuevamente con su familia, se encuentra solo, salvo un ave llamada tente, y
en camino se consigue con el tigre de cristal, quienes lo animan para que busque la gente de
su aldea.
Mientras el Zoro de Jairo Anibal Niño, se desplaza en el monte es raptado por un grupo de
terratenientes mineros y es esclavizado; allí conoce a un anciano de nombre Amadeo, y más
tarde escapan juntos con un magnífico diamante azul. En su transitar recibe la ayuda de las
criaturas mágicas, además del tigre de cristal, están uno enanitos, los seres del aire y el
águila de hielo

LUGARES
CASA: era grande, con una sala que tenía tapete rojo y adornado de flores
OASIS: claro y llamativo
VALLE: extenso y con un largo rio
BOSQUE: frondoso
RÍO: extenso y caudaloso
DESIERTO: extenso, caluroso
SELVA: extensa con árboles frondosos, con animales fantásticos
CIÉNAGA: con aguas irisad
TIEMPO
La obra Zoro de Jairo Aníbal Niño se desarrolla generalmente en la selva con un tiempo
atmosférico caliente, seco y calmado. El tiempo es presente pero basado en la fantasía
O la de su gente que minutos antes navegaba con él en busca del país de los pastos verdes y
de las bestias apacibles.
Esta es una historia que cuenta como Zoro al regresar al pueblo en la mañana de un viaje
con su familia en una canoa fueron atacados y al parecer que Zoro había muerto lo dejaron
a la deriva en la canoa. Cuando Zoro despertó en la noche estaba solo y se propuso
encontrar de nuevo a su familia junto al pájaro que su abuelo le había regalado que era fiel
su fiel acompañante.
Luego de pasar varias aventuras en la selva Zoro y el pájaro lograron encontrar el pueblo y
se pudo encontrar de nuevo con su familia pero había pasado mucho tiempo.

La historia relata el paseo que tenían el personaje de “Zoro” y sus amados padres en una
canoa, surcando estos en dicha embarcación el río que corría por aquella selva, en la que
ellos convivían con su tribu en comunión con el medio ambiente y las criaturas que en ella
residían formando estas parte del hermoso ciclo vital de aquel bioma natural.

Sin embargo “Zoro” y sus padres empezaron a notar que en la selva que les rodeaba algo
extraño estaba pasando, ya que los animales se habían ido y el ambiente se sentía incómodo
como agitado.

Por desgracia estos son atacados por uno de los antagonistas que forman parte de tan bella
historia infantil, aquellas personas eran unos mineros, los cuales atacaron ferozmente a
aquella familia hundiéndose la canoa y siendo llevados por el río a diferentes partes
separando a “Zoro” de sus padres.

Los padres del personaje anteriormente mencionado al no ver a su hijo con ellos y recordar
que fueron llevados por las corrientes del río, creen y dan por hecho de que su hijo falleció
ahogado en aquel río lleno de diferentes caudales y con fuertes corrientes.

Mientras tanto en otra parte de la selva a la orilla del río despierta “Zoro” recobrando el
conocimiento, ya que al sufrir aquel atentado que le separo de sus padres, sufre este un
desmallo mientras era llevado por las fuertes corrientes del río selvático.

Algo bueno para “Zoro” es que había sido encontrado por su ave “Tente” quien le protege y
le acompaña fielmente mientras este se recuperaba, al percatarse de que se encontraba solo
y desamparado en aquel hostil ambiente decide ir en busca de su tribu como de sus padres,
para así poder reencontrarse con ellos cambiando sus plan original que era el disfrute de un
día en familia a una gran aventura afrontando muchos peligros.Al cabo de un tiempo
“Zoro” procede a adentrarse en la selva en compañía de su ave compañera “Tente”,
mientras este buscaba alimento entre los árboles, es avistado por las mismas personas que
le separaron de sus padres y los cuales le generaron aquellos daños a su persona.

A pesar de que “Zoro” se intenta ocultar lo más que puede, este es capturado por esas
personas mal intencionadas, además es llevado con ellos al campamento en el que vivían y
trabajan, de la misma manera es atrapada su ave “Tente” la cual queda atrapada en una
trampa que estos habían colocado entre unas hojas secas con frutas de la localidad.

Ya estos estando en aquel campamento el personaje de “Zoro”, es esclavizado y siendo


obligado a trabajar en la minería ilegal de minerales y piedras preciosas que sus captores
realizaban, este suceso era muy fuerte para “Zoro” pero de la misma manera lo que había
pasado, no le quitaba la esperanza de encontrar nuevamente a sus padres y estar juntos
felizmente una vez más. En dicho campamento conoce a un anciano muy agradable y
servicial que le cuida recurando siempre su bienestar, esa persona lleva el nombre de
“Amadeo”  además de entablar con este una excelente amistad.

El luego de haber conocido a “Amadeo” son llevados ambos a unas de las áreas de minería
y mientras iban caminando a su destino, le preguntaba a los demás que allí se encontraban
contra su voluntad que a donde iban y que iban a hacer, para no obtener ninguna respuesta
de los que allí se encontraban esclavizados, además de ser mandado a callar por el hombre
que les escoltaba a su destino.

Ya en el área minera “Zoro” se percata de que los métodos que estaban utilizando dañaban
el medio ambiente y decide preguntar a todos que debía hacer, dado que había sido llevado
contra su voluntad a ese lugar, al escuchar eso uno de sus captores le azota y lo manda a
callar.

Luego de que le habían azotado de forma tan cruel es llevado al río, donde lo empujan a
dicho cuerpo de agua para que con ayuda de un tamiz saque de la tierra del río oro y piedras
preciosas, que se encuentre en la arena como en el barro en la orilla y en la corriente del río.

Mientras “Zoro” y “Amadeo” no eran vistos estos traman un plan de escape para llevarlo a
cabo cuanto antes y poder estar lejos de esas feas personas, en el momento menos esperado
para los mineros, “Zoro” y “Amadeo” escapan de sus captores sanos y salvos, además de
que este último sustrae sin mucho problema de lo que ha minado, una joya muy hermosa la
cual era más y nada menos que un diamante azul.

Dicho suceso no fue de agrado para los mineros quienes se dividen sus actividades y envían
a un grupo en la búsqueda de los esclavos que se habían escapado, sin embargo estos no
encontraron rastro de estos fácilmente ya que “Zoro” y “Amadeo” iban ocultando sus
huellas en su paso por la selva en su exitosa huida.

Seguido a ello pasan por varios ambientes fantásticos llenos de seres y criaturas de fábula
que los ayudan en su travesía a la libertad, en uno de esos encuentros fantásticos “Zoro” se
topa con el “Tigre de Cristal”, quien le menciona que sus padres seguían con vida y alienta
al joven a buscar a sus padres para que vuelvan a ser una familia unida como antes solían
ser.

Así mismo tuvo “Zoro” y “Amadeo” un encuentro con unas criaturas de un tamaño muy
reducido, a los cuales bautizaron como “Los seres Diminutos”, aquellas criaturas que
poseían el don del habla al igual que las otras bestias y animales fantásticos que habitaban
esa sección del bosque, les advierten de que vayan con cuidado ya estaban siendo
perseguidos por personas de mal corazón, como así mismo tener cuidado con los espejos de
agua en los cuales siempre criaturas extrañas secuestraban a los niños y no seles volvía ver
jamás, a lo que ambos atienden al consejo de aquellos seres de tamaño reducido, además de
ser acompañado por estos y por el “Tigre de Cristal”.

Así mismo en su proceder conoce otros animales y criaturas fantásticas que le ayudan a
rencontrarse con sus padres, como así mismo estos le alientan a defenderse de aquellas
criaturas malignas que vivían en los espejos de agua.

Mientras este se dirigía con la ayuda de aquellos seres mágicos que le estaban guiando a su
hogar, se percata de estaban en peligro y estaban por ser llevados por los monstruos que
vivían en los espejos de agua, esas criaturas sin darse cuenta de la presencia de “Zoro” y
“Amadeo” son emboscados y vencidos por estos sin muchas complicaciones, recibiendo así
el agradecimiento de aquellos infantes que para la sorpresa de “Zoro” eran parte de su tribu.

Dichos niños no reconocían a “Zoro” ya que este tenía un buen tiempo perdido y había sido
pasado por muerto en tribu natal, los mismos en agradecimiento les ofrecen a ellos y a las
criaturas de fantasía llevarlos a su aldea, para que así sus padres y las demás personas de la
aldea les recompensen.

Mientras estos hablaban fueron avistados por el grupo de mineros que los estaban
buscando, pero esta vez no estaban solos y le ganan a estos con la ayuda de los animales y
criaturas fantásticas, quienes no dudaron ni un minuto en salir en la ayuda de sus amigos y
estos también se dispusieron a ayudar a las personas que estaban bajo la esclavitud de esa
horrible personas.

Terminada la disputa y la liberación de los esclavos dichas personas se pierden en la selva


para no ser vistos nunca más, nuestros protagonistas continúan su camino con el objetivo de
reunir a “Zoro” con su familia, pero en esta ocasión rodeados de buena compañía como
personas que supuestamente vivían en aquel lugar.

Al paso del tiempo de caminar un largo trecho de la selva estos ven una aldea y los niños
corren adelantándose, para así llegar y avisar a todos que unas personas rodeadas de seres
de fábula que eran mencionados en sus historias, mitos y leyendas les habían salvado de ser
llevados por las criaturas malignas de los espejos de agua.

Pero lamentable estos no les creen y continúan haciendo lo que un principio ya estaban
haciendo, ignorando así lo que aquellos niños imaginativos y creativos les contaban.
Mientras eso sucedía en aquella aldea “Tente” se separa de “Zoro” alzándose en vuelo en
dirección a la aldea, lo que hizo llenar de energía a “Zoro” yendo tras su amado amigo y
compañero, a su vez “Amadeo” le siguió para evitar que este se lastimase o se resbalase al
correr detrás de “Tente”, dicha ave culmina su vuelo posándose en un asta de gran tamaño
que se encontraba en el centro de la aldea, y emite un ruido fuerte llamando la atención de
todos los pobladores quienes acuden a ver cuál era aquel raro sonido.

Los pobladores quedan perplejos a ver que era más y nada menos que “Tente” el ave fiel
que custodiaba a “Zoro”, enseguida son llamados los padres y familiares de este último, los
cuales no creían sobre el regreso de “Tente” ante ellos, acuden a ver la veracidad de los
hechos quedando sorprendidos ya que era una esperanza del regreso de su amado hijo.

Sin dudar y al ver a los padres de “Zoro” dicha ave vuela bajo guiando a los pobladores a
donde “Zoro” se encontraba, pero en lo que no contaba el ave era que dicho niño le estaba
siguiendo y estaba a las afueras de la aldea, donde muy pronto se produciría el encuentro
entre “Zoro” y sus padres.

Al llegar “Tente” y posarse encima de la cabeza de “Zoro” este es avistado por sus padres,
quienes reconocen a su hijo y lo abrazan, preguntándole sobre que le había pasado.
Escuchando todas esas preguntas que le inundaban de felicidad, “Zoro” les cuenta a sus
padres con todo detalle lo vivido por en el tiempo que se separaron y les presenta a
“Amadeo” con mucho cariño.

Para finalizar las criaturas fantásticas hacen acto de presencia, siendo presenciadas por
todos, bendiciendo el poblado y prometiendo siempre cuidar de ellos, ante cualquier mal
que quisiese acercarse con malas intenciones a ellos, todo el poblado agradece a dichas
criaturas y a “Amadeo” por cuidar de “Zoro”. Tristemente al paso de un par de días, “Zoro”
y “Amadeo” se encuentran en la entrada del pueblo donde se despide este último y se
marcha en busca de su tribu.

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