Médicos en Colombia, ¿héroes o víctimas?

Hace aproximadamente 19 meses se vive una situación que aqueja a la población mundial,

la denominada pandemia por el SARS-COV2, o comúnmente llamada COVID-19, ha

puesto en descubierto, además de la vulnerabilidad del hombre, las malas condiciones de

vida y las falencias que se tiene como sociedad, teniendo en cuenta que a nivel de sociedad

nos aquejan muchos otros elementos incluidos en el término de corrupción.

Tristemente vemos que los que hace unos meses eran aplaudidos desde las calles,

homenajeados desde los balcones, y también llamados héroes, son humanos como nosotros,

tienen necesidades personales, una familia, deudas por pagar, situaciones que atender, y no

se les favorece en ningún sentido, siendo personal profesional, especializado, no se le da ni

siquiera la remuneración que merece, teniendo así que trabajar de manera simultanea en 3 y

4 lugares, para poder recibir por lo menos un salario al mes, inmersos en la condición de

sistema de salud que desde el año 1993, con la ley 100, va en decadencia, ya que desde

entonces la salud pública se convirtió en un negocio privado, privilegiando a los mas

adinerados, que en Colombia estos sujetos son exclusivamente los que tienen el control del

país, y los enfermos que en ese entonces eran pacientes, ahora son clientes, cuyos sujetos si

se catalogan en estratos bajos, el acceso a servicio de salud es limitado, y los médicos que

se consideraban profesionales, pasan indudablemente a ser obreros, ´´sin desmeritar la labor

de ellos´´.

A pesar de las constantes quejas y solicitudes ante la Asociación Colombiana de

Sociedades Científicas, y muchas otras asociaciones y gremios, no se ha logrado obtener

una respuesta satisfactoria, las deudas de sus salarios continúan, hay médicos y

especialistas a los cuales desde que inició la pandemia, clínicas y hospitales para los que

trabajan aun no les realizan pagos, viéndolos obligados a adquirir créditos bancarios, con la

esperanza de que en algún momento les realicen el pago, para poder suplir los créditos, y en

cuanto llega el momento en que la clínica u hospital realiza pagos, no hacen cancelación de

la deuda total, sino uno, dos, máximo tres meses de salario, siendo insuficiente su

economía para vivir a corde a su profesión, lo que nos lleva a pensar; ¿Qué tan favorable o

rentable resulta ser medico en Colombia? Indagando un poco actualmente en Colombia el

semestre de medicina más económico ofertado, es el de la universidad de Pasto, con un

costo aproximado de 7.760.000 pesos, que a lo largo de la carrera siendo 12 semestres

tendría un costo de 93.120.000 pesos, eso sin contar gastos de manutención, y herramientas

educativas, en comparación con la universidad de los Andes, que oferta uno de los

semestres más caros en cuanto a medicina, con un valor de 26.290.000 pesos que a lo largo

de los 12 semestres tendría un costo de 315.480.000 pesos, también sin incluir costos de

manutención ni herramientas educativas, en contraste con las universidades publicas que

ofertan esta carrera, como la universidad nacional, se tiene en cuenta que el proceso de

admisión e ingreso, es bastante complejo.

Pensando básicamente en la población colombiana, las personas que deciden ser médicos y

ejercer su carrera como tal, esta basado en el criterio de vocación y no por el criterio

económico, ya que en el momento de ejercer, se evidencia que el salario de un médico

recién egresado es de aproximadamente 3.651.367 pesos mensuales, ciertamente esto es lo

que los lleva a laborar en más de una entidad a la vez, para recuperar su inversión
económica educativa, y a partir de allí pensar en si se quiere realizar una especialización, ya

que nuevamente toma tiempo, y recurso económico para realizarla.

Surge también la normativa de los contratos por prestación de servicios, en los cuales las

garantías de buena remuneración hacia el personal médico y sector salud son insuficientes,

en donde terceros o intermediarios llamados sindicatos, son los que se lucran y benefician

directamente mediante las ordenes de servicio, que legalmente evita a los empleadores el

reconocimiento de prestaciones laborales, primas, vacaciones remuneradas, cesantías, e

irónicamente, prestaciones de salud.

El médico colombiano, está sujeto también a horarios laborales extensos, en zonas rurales

debe estar dispuesto a disponibilidad al servicio las 24 horas, las condiciones laborales no

son favorables ya que las herramientas para el servicio también son escasas o ineficientes, y

la presión social ante su ejercicio profesional siempre esta en juego, ya que pueden ser

catalogados como el mejor cuando el servicio al paciente fue oportuno, de calidad y

afortunadamente el paciente pueda salir del impase que lo aqueja, pero cuando el caso sea

contrario, y el médico no pueda dar la mejor solución clínica al paciente, generalmente es

estigmatizado, duramente juzgado, y hasta agredido física o verbalmente por familiares del

paciente o la sociedad.

De allí parte la idea que a los médicos en Colombia de apariencia los estamos tratando

como héroes, pero realmente en cuanto a retribución económica, garantías, condiciones

laborales y otros, no se les esta dando la importancia que merecen.