DELINCUENCIA JUVENIL

La delincuencia juvenil es un problema que está afectando a la sociedad seriamente. A diario podemos observar como
adolescentes, y hasta niños de muy poca edad delinquen, dando alardes de violencia, aparentemente gratuita e
injustificada, hacia los demás. Las estadísticas indican cifras en progresión constante, sin contar que muchos casos de
delincuencia juvenil no figuran en las estadísticas. La edad de los jóvenes delincuentes tiende a descender. Cada vez
más, el índice porcentual (20%) se incrementa hacia las adolescentes; algunos piensan que los jóvenes se revelan como
una forma de llamar la atención o sentirse importante ante la sociedad; pero la realidad, es que existen muchos factores
que llevan a la juventud a cometer actos vandálicos. Es por eso que en mi opinión la sociedad debe de conocer
detalladamente estos factores para que juntos con los especialistas tratar de solucionar este problema, especialmente
los padres deben de ayudarnos en esta tarea ya que ellos deben de educar bien a sus hijos desde pequeños y apoyarlos
en todo momento para evitar a que en un futuro lleguen a tener este problema.

CAUSAS

Hay factores de gran peso que llevan a un joven a delinquir como:

 La comunicación entre los padres e hijos importa, puesto que es donde se inculcan los principales valores, como
ejemplo el respeto hacia los demás.
 Los medios de comunicación influyen directamente en la sociedad (programas con contenido violento, prensa
sensacionalista, etc.
 La desintegración familiar influye directamente en el comportamiento del delincuente juvenil.
 La causa esencial de la delincuencia juvenil radica en los errores de la educación.
 Falta de recursos económicos.
 Pertenecer a familias desestructuradas o entornos donde resulta difícil conciliar la vida familiar y laboral, puede
generar una falta de atención en el menor y, cuando se descuida el control de los hijos.
 La marginación socioeconómica y la pobreza dificultan el adecuado proceso de socialización del menor; lo que se
agudiza entre aquéllos que pertenecen a familias inmigrantes (en especial, los menores inmigrantes no
acompañados) o vivan en ciertos guetos de las grandes urbes.
 El absentismo y el fracaso escolar.
 El consumo de drogas y sustancias tóxicas que, en muchos casos, da lugar a que el adicto acabe delinquiendo
por el mero hecho de lograr el dinero que le permita sufragar su adicción.
 Los trastornos de la personalidad y del comportamiento.
 la carencia a la hora de transmitir valores cívicos se ve sustituida por otra escala de “valores” lo que puede
provocar cierta “anomia social que se enseña a los menores.

Puede brindarse apoyo institucional a través de centros de rehabilitación estatales y que apliquen un reglamento basado
normas de conducta, control de sus actos, y motivación. De igual manera, el trabajo comunitario brindaría apoyo social y
económico a los jóvenes que más lo necesitan, ya que, muchas veces, la necesidad es un factor de la delincuencia.

Una manera saludable de rehabilitación es el deporte, ya que brinda un desarrollo físico y emocional. Por ejemplo, el
fútbol puede brindar apoyo a través de la creación de semillero y participación de jóvenes con problemas de conducta
que puedan desarrollar una vocación y que encuentren ,en este deporte, una manera de subsistencia, naturalmente,
fomentando un nacionalismo deportivo que ayude a prevenir situaciones conflictivas futuras.

La sociedad está en la capacidad de ayudar a estos jóvenes, solo nos falta ganas de intentarlo, si logramos formar una
unicidad entre sociedad y conducta moral, la juventud estará orientada en buen camino y deparará un buen futuro para
la urbe.