Una aventura tecnológica

Introducción

Alicia en el mundo de las maravillas, es la historia de una niña que recorre

un mundo nuevo para ella, imaginativo, extrovertido, lleno de retos, aventuras,
ilusiones, alegría, comparativo y lleno de sueños. Así podemos asemejar el mundo
tecnológico, lleno de redes que ayudan a comunicar nuestros intereses, aventuras,
sueños, y muchas cosas más. Alicia en este mundo, somos cada uno de nosotros,
que nos adentramos a un mundo desconocido, pero intrigante, lleno de retos,
curiosidades, y entre más nos adentramos, más cosas nuevas conocemos.
Esa es la tecnología, un universo nuevo, atractivo e imaginativo. Nos lleva a
comunicarnos con aquellos que están lejos, pero que nos acerca, nos posibilita el
deseo de encontrarnos. Una experiencia fascinante, de conocimiento, de
divulgación, apreciación, incluso de sentimientos que se expresan por este mundo
tecnológico.

Desarrollo

Una aventura tecnológica tiene, fuera de muchas ventajas, también

desventajas y algunos peligros que nos pueden hacer tropezar, caer, cometer
imprudencias e incluso divulgar nuestra intimidad. Una aventura que en sí tiene
riesgos, pero, ¿qué sería de una aventura sin riesgos? Al hombre siempre le ha
gustado la adrenalina, lo prohibido, lo que implica un esfuerzo más grande, incluso
picante.
En esta aventura tecnológica es importante que, ante los riesgos, los niños
y menores de edad estén acompañados de sus padres o de un adulto mayor
responsable, respetuoso, disciplinado, curioso, pero al mismo tiempo que
sospeche de cualquiera que quiera interrumpir la inocencia infantil.
Ahora bien, ¿quién no tiene curiosidad de conocer un mundo desconocido,
lleno de aventura? Esta curiosidad arranca con tener acceso a una red de internet,
que lleva al usuario a navegar por múltiples redes cibernéticas, conectadas a
diferentes dispositivos electrónicos y tecnológicos.
Entre estos dispositivos esta el celular, una herramienta muy provechosa, si
se sabe utilizar responsablemente. Este dispositivo móvil, ayuda a acortar
distancias, acercar personas, comunicar y compartir experiencias, sueños,
sentimientos y anhelos. Por medio de este, y con ayuda de algunas aplicaciones,
se convierte en algo multifuncional, donde se puede investigar, comunicar, hablar,
trabajar e interactuar.
Pero, es necesario estar alerta, por los peligros, que sin supervisión y
cuidado se tiene, puede acarrear muchos dolores de cabeza. Alerta también a no
caer en el vicio excesivo de consumismo, de solo estar en redes sociales, en el
sexting, el bullying, abusos y otros peligros cibernéticos.
Desde este dispositivo u otros, también podemos entrar a formar parte de
los amigos cibernéticos, que solo conocemos por redes sociales, por ejemplo, el
Facebook, el Instagram, el Twitter, entre otros. Se crean relaciones a veces
imaginativas, fantasiosas, incluyentes y peligrosas en algunos casos. Pero todo
con un ideal, tener amigos.
¿Cuál será el mayor colmo de estas redes sociales? Querer buscar amigos,
cuando los que tenemos no los valoramos ni buscamos. Tener seguidores, fans,
improvisar y querer mostrar una simple belleza retocada por los filtros, son los
atractivos que muchos quieren mostrar y presumir. Por eso, es una aventura
tecnológica, que se debe asumir los riesgos, pero también las alegrías de
compartir con aquellos que están al otro lado del sistema virtual.

Se puede decir que esos son algunos riesgos que se tiene ante las redes
sociales y la tecnología. Pero son muchas las ventajas y enseñanzas que se
pueden observar y referenciar.
La tecnología, poco a poco nos ha dado una cara atractiva de los avances
que ayudan a mejorar el desempeño y desarrollo humano. Una aventura que está
unido a la ciencia, la técnica, la medicina, lo académico, lo físico, biológico, entre
otras ramas del saber.
Cuanto bien se ha dado, cuando se ha utilizado la tecnología para defender
la vida del ser humano, para crear nuevas herramientas que ayudan a mejorar la
salud, cuantos medios de transporte que nos impulsan a llegar más lejos, cuantos
descubrimientos que en este mundo cibernético y tecnológico han rompido las
barreras del no puedo, del es imposible, del no soy capaz, al llegar a todo es
posible para el hombre cuando pone su conocimiento al servicio de la humanidad.

Todavía hay muchos retos y un mundo por conocer, explorar y

experimentar, solo es necesario el deseo de conocer, de buscar, de ir más allá de
nuestras propias capacidades. Como Alicia en el mundo de las Maravillas,
debemos aventurarnos a ser de este mundo la mejor maravilla de la creación.
Sin la tecnología no sería posible el avance científico en busca de la cura a
muchas enfermedades, en ver la vida de otra manera, en poner los conocimientos
al servicio de todos, en avanzar en crear puentes que acerquen a los más
lejanos… Pero sin duda, también la tecnología, crea una barrera entre los ricos y
los cada vez más pobres.
Se habla de avances, de inclusión, de respeto, de tecnología, de redes
satelitales, del uso de las redes sociales, pero no todos tiene el mismo acceso con
facilidad. Poca cobertura es lo que se encuentra en la mayoría de los territorios de
la tierra, y si decimos de Colombia, solo palabras quedan en las supuestas
mejoras al avance tecnológico y virtual.

Conclusión

No es fácil buscar que todos hablen un mismo lenguaje, pero si, expresarlo
de muchas maneras y por medio del uso tecnológico. La aventura tecnológica, es
un sueño por conquistar, una cruzada por seguir, un sendero por recorrer, y un
mundo por descubrir.
Del buen uso de los dispositivos electrónicos, tecnológicos, cibernéticos, se
pueden sacar mayor provecho para todos. Sigamos en esta aventura, no
tengamos miedo en descubrir cosas nuevas, no nos aferremos al pasado, sino
que, con cautela y decisión, avancemos en hacer de este mundo mejor.
Que nuestro reto sea ser parte de muchas soluciones a la carencia de
oportunidad, de cobertura, de acceso a los medios tecnológicos y científicos; que
seamos los primeros en crear estrategias de conexión, cobertura y ampliación.
Aventurémonos, soñemos, busquemos y utilicemos responsablemente lo
que tenemos a nuestro alcance, y hacer de estar herramientas, las bases para
algo nuevo y sorprendente. Que no solo sea una ilusión, sino una oportunidad de
dar lo mejor a los nuevos descubrimientos del saber.
¿Qué te impide sonar y crear nuevas cosas? Naveguemos por el mar del
conocimiento y saquemos de nuestra realidad todo aquello que no nos aporta y
nos aleja hasta de nosotros mismo. Arriésgate a vivir una aventura tecnológica.