Salmos 32

¿Sabe que la Biblia no niega que los cristianos pueden volver a pecar? Y que uno puede poner
en peligro su condición de salvación.

 Recuerde el ejemplo de Simón el mago en el libro de Hechos 8: 13, 18-24. Él creyó (fue
bautizado), pero luego peco al querer comprar el ministerio apostólico. La respuesta
de Pedro fue: Arrepiéntete.
 Pedro mismo, con todo y ser apóstol. Hubo un momento en donde necesito ser
reprendido. Gálatas 2: 11-21. Pablo le exhorto a no “Desechar la gracia”.
 Santiago 5: 19-20. Habla de hacer volver a un pecador, pero cuando usted lee en el
texto anterior ese pecador no es nada más y nada menos que un hermano.

Solo con estos tres ejemplos, de diferentes autores como Lucas, Pablo y Santiago podemos
mirar como pensaban los primeros cristianos en cuanto al pecado.

Un hombre del que vamos a hablar que siempre estuvo acompañado de la presencia de Dios,
pero que en algunos episodios de su vida llego a pecar, y gozo de la dicha del perdón divino fue
David.

¿Qué nos enseña la Biblia, con la vida del rey David? Para ello vamos al SALMO 32. Pero antes
de leerlo quiero que recuerde que David fue ungido como rey en lugar de Saúl, y que él tenia
que cumplir las mismas reglas que todos los reyes debían guardar según la orden de Moisés en
Deuteronomio 17:6. “Pero él no aumentará para sí caballos, ni hará volver al pueblo a Egipto
con el fin de aumentar caballos; porque Jehová os ha dicho: No volváis nunca por este camino.
Ni tomará para sí muchas mujeres, para que su corazón no se desvíe; ni plata ni oro
amontonará para sí en abundancia”

David llego a ser rey, gozaba de un privilegio que Dios le había permitido. En toda su vida tomo
por lo menos en lo registrado 10 esposas y 10 diez concubinas. Y por lo que sabemos una no
estaba disponible, pero él en su concupiscencia la tomo para sí. Betsabé.

El la tomo por mujer, estando su esposo vivó (Urias). Y cuando supo que ella estaba
embarazada, quizo tapar su pecado enviando a Urias a su casa, pero como él no obedeció,
entonces planifico su asesinato.

El hijo de David con Betzabé, no nacería vivo (2 de Samuel 12: 15). Porque Dios asi lo quizó. La
muerte no es algo malo cuando se esta con Dios. En esta agonía de David, y por la culpa de su
pecado. El dice en el Samlos 32

Primero, “Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado.”

¿Hemos pecado después de ser cristiano? El pecado de un cristiano puede ser perdonado,
pero para ser perdonado, hay algo que uno necesita hacer. Y esto es el numero dos que
aprendemos de este capítulo.

La Biblia enseña los distintos pecados que hay, y que solo se necesita uno de ellos para ganarse
el infierno. Uno puede pecar, con deseos carnales, vanagloria, egoísmo.
También, necesitamos pensar que David y Betsabé no murieron apedreados como manda la
ley de Moisés, porque no había testigos que los acusaran. Pero sí hay alguien en los cielos que
vio lo que David ya estaba planeando hacer con la esposa de su prójimo.

Entonces no necesitamos, testigos físicos para ser hallados culpables ante Dios.

Segundo, “necesitamos confesarlo”(ver 5). Es reconocer que estamos manchados de suciedad

delante de Dios. Cuando uno no confiesa su pecado, dice el versículo 3 y 4 “Cuando yo no
quería confesar mis pecados, me debilitaba cada día más…”

El único que puede perdonar pecados es solo Dios. No hay ningún otro santo en la tierra que
tenga esta autoridad, ni hay oración que pueda limpiar de pecado a una persona.

A veces nosotros cosechamos lo que sembramos (Gálatas 6:7). Si sembramos para alimentar
nuestra concupiscencia es imposible que cosechemos una vida digna delante de Dios. Si
siembro para el pecado, pues eso es lo que voy a cosechar. Pero después no puedo creer que
Dios me va a librar.

Entonces el arrepentimiento, tampoco es un Az bajo la manga para encubrir mis faltas. El

verdadero arrepentimiento es que me duele y dejar de hacerlo. Eso es estar arrepentido.

Finalmente quiero que juntos veamos el verso 2 y con este terminamos, “Afortunados los que
no mienten en cuanto a su pecado” Ha hablado de esto con Dios, le ha dicho cuales son sus
debilidades, y que desea abandonar esa vida. Porque quiere mantenerse limpio delante de él.