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Rod Ops in A
Rod Ops in A
INTRODUCCIÓN
Función ESTRUCTURAL
-Algunas proteínas constituyen estructuras celulares:
Ciertas glucoproteinas forman parte de las membranas celulares y actuan como
receptores o facilitan el transporte de sustancias.
Las histonas, forman parte de los cromosomas que regulan la expresión de los
genes.
-Otras proteínas confieren elasticidad y resistencia a órganos y tejidos:
El colágeno del tejido conjuntivo fibroso.
La elastina del tejido conjuntivo elástico.
La queratina de la epidermis.
-Las arañas y los gusanos de seda segregan fibroina para fabricar las telas de
araña y los capullos de seda, respectivamente.
Función ENZIMATICA
-Las proteínas con función enzimática son las más numerosas y especializadas.
Actúan como biocatalizadores de las reacciones químicas del metabolismo celular.
Función HORMONAL
Función REGULADORA
-Algunas proteínas regulan la expresión de ciertos genes y otras regulan la
división celular (como la ciclina).
Función HOMEOSTATICA
-Algunas mantienen el equilibrio osmótico y actúan junto con otros sistemas
amortiguadores para mantener constante el pH del medio interno.
Función DEFENSIVA
Las inmunoglogulinas actúan como anticuerpos frente a posibles antígenos.
La trombina y el fibrinógeno contribuyen a la formación de coágulos sanguíneos
para evitar hemorragias.
Las mucinas tienen efecto germicida y protegen a las mucosas.
Algunas toxinas bacterianas, como la del botulismo, o venenos de serpientes, son
proteínas fabricadas con funciones defensivas.
Función de TRANSPORTE
Función CONTRACTIL
La actina y la miosina constituyen las miofibrillas responsables de la contracción
muscular.
La dineina está relacionada con el movimiento de cilios y flagelos.
Función DE RESERVA
La ovoalbúmina de la clara de huevo, la gliadina del grano de trigo y la hordeina
de la cebada, constituyen la reserva de aminoácidos para el desarrollo del
embrión.
La lactoalbúmina de la leche.
Las fuentes tradicionales de proteínas para el hombre son: carne, pescado, aves
de corral, leche, productos lácteos, frijoles y guisantes, nueces, semillas y
granos. Casi todos los alimentos proporcionan abundantes proteínas, salvo las
verduras y frutas. Las fuentes de proteínas pueden ser de dos tipos, de buena
calidad y de baja calidad; las proteínas de buena calidad contienen el mayor
número de aminoácidos esenciales, mientras que las proteínas de baja
calidad casi no contienen dichos aminoácidos.
Aminoácidos no
Representación
esenciales
1.- Ácido aspártico Asp
2.- Ácido glutámico Glu
3.- Alanina Ala
4.- Asparagina Asn
5.- Cisteina Cis
6.- Glicina Gli
7.- Glutamina Gln
8.- Prolina Pro
9.- Serina Ser
10.- Tirosina Tir
Los aminoácidos esenciales son aquellos que no pueden ser sintetizados por
el organismo; para el hombre son esenciales ocho y dos son semiesenciales.
ESTRUCTURA PRIMARIA:
La estructura primaria de una proteína, describe la secuencia de aminoácidos
que forma al polipéptido; cada proteína tiene una estructura primaria particular
(Fig. 3).
ESTRUCTURA SECUNDARIA:
ESTRUCTURA TERCIARIA:
ESTRUCTURA CUATERNARIA:
La estructura cuaternaria de una proteína se forma por la unión de dos o más
subunidades globulares, denominadas monómeros; estas subunidades se
mantienen unidas a través de fuerzas electrostáticas. A este tipo de estructura
también se le conoce con el nombre de proteínas oligoméricas (oligo= poco,
meros= partes). Como ejemplo de este tipo de proteínas tenemoss a la
hemoglobina, la cual está formada por cuatro subunidades de mioglobina (Fig. 7).
PROPIEDADES DE PROTEINAS
ESPECIFICIDAD.
DESNATURALIZACIÓN.
MUESTRA PROTEICA-RODOPSINA
ESTUDIOS REALIZADOS
El ambicioso plan de Nathans de aislar los genes que codifican para los tres
colores de proteínas receptoras, dependía de la idea de Wald de que todos los
genes han evolucionado a partir de un ancestro primordial común.
La única proteína receptora visual que había sido estudiada con cierta intensidad
hasta ese momento era la rodopsina bovina, proveniente de las células de tipo
bastón de los ojos de las vacas. Los científicos habían purificado la rodopsina
vacuna y habían deducido la secuencia de un fragmento del ADN que codificaba
para la misma. Nathans usó esa información para construir un cebo—un ADN de
cadena simple—y con el mismo pescó, en un mar de ADN bovino, el gen completo
que codifica para la rodopsina bovina.
Luego, usó parte de este gen bovino como cebo para atrapar, en la mezcla de
ADN de una célula humana, al gen que codifica para la rodopsina humana. Esto le
llevó menos de un año "porque los genes que codifican para las rodopsinas
humanas y bovinas son virtualmente idénticos, a pesar de los 200 millones de
años de distancia evolutiva entre el ganado y los humanos", dice Nathans.
Sin embargo, el intento por descubrir los genes humanos para los receptores del
color, resultó ser más desafiante de lo esperado, dado que estos genes no están
tan íntimamente emparentados con los genes para la rodopsina.
Nathans empezó a escudriñar a través del ADN de sus propias células. "Me di
cuenta que yo podría ser una fuente ilimitada de ADN, mientras me mantuviera
comiendo", dice. Finalmente, pescó algunas piezas de ADN que pertenecían a tres
tipos diferentes de genes, cada uno de los cuales estaba claramente emparentado
con el gen de la rodopsina.
Los primates de Sudamérica, que provinieron del continente africano por aquel
entonces, poseen sólo una única copia funcional de un gen rojo o verde, de
manera muy similar a los hombres ciegos para los colores. Pero en los primates
del viejo mundo, monos de África y ancestros de los humanos, un gen primordial
rojo y verde debe haberse duplicado y, entonces, divergido levemente en la
secuencia, produciendo la separación de los receptores en tipos rojos y verdes.
Y esta fue la explicación sobre la frecuencia de la ceguera para los colores que
realizó. Debido a que las secuencias de ADN de los genes de los receptores rojos
y verdes son muy parecidas y debido a que se alinean desde el principio al fin, es
fácil que ocurran errores durante el desarrollo de los óvulos y de los
espermatozoides, dado que el material genético es replicado e intercambiado
entre los cromosomas.
Más del 95 por ciento de todas las variaciones en la visión de los colores en
humanos, compromete a los receptores rojos y verdes en los ojos de los hombres.
Es muy raro para cualquiera, sea hombre o mujer, ser "ciego" al extremo azul del
espectro. Nathans aportó una explicación genética para este fenómeno. Mostró
que el gen que codifica para el receptor azul se ubica en el cromosoma 7, que se
comparte por igual entre hombres y mujeres, y que este gen no tiene ningún
vecino con una secuencia similar de ADN. La ceguera al color azul es causada por
una mutación simple en este gen.
EL OJO HUMANO
El ojo humano es un órgano que reacciona con la luz visible y que transmite al
cerebro una sensación de visión. Describiremos brevemente algunos elementos
constitutivos del ojo.
Este órgano es esencialmente una bolsa casi esférica con paredes opacas y con
una abertura por donde entran los rayos de luz. Al frente se encuentra la córnea
(Figura 27), que es una cubierta transparente, lisa y casi esférica que está
formada de cinco capas.
Después de pasar por el cristalino, los rayos de luz cruzan el cuerpo vítreo que no
causa ninguna desviación adicional y, finalmente; llegan a la retina.
En un ojo que no tuviese el cristalino el único órgano que causaría refracción sería
la córnea. Para la córnea sola la distancia focal del lado exterior del ojo es, en
promedio, 2.3 cm, mientras que la distancia focal hacia el interior del ojo es de 3.1
cm. Esto significa que la imagen de un objeto que se encuentre a una distancia
muy grande del ojo estará a 3.1 cm de la córnea (Figura 28). Pero dado que en el
ojo humano la distancia entre la córnea y la retina es de 2.4 cm resulta que la
imagen que logra la córnea solamente se forma muy atrás de la retina (a 0.7 cm) y
lo que percibiría la retina en este caso sería una imagen borrada. El papel del
cristalino es darle una desviación adicional a los rayos para que lleguen
justamente a la retina.
LA RETINA
La retina es el órgano que se estimula cuando le llega luz y donde se inicia la
sensación de la visión. La información que llevan los fotones de la luz externa e
llegan a la retina es transformada en señales nerviosas que el cerebro puede
analizar. Esta transformación ocurre en las células fotorreceptoras (células que
reciben la luz) del ojo. Estas células forman un mosaico en el fondo de la
superficie de la retina. Lo que hacen la córnea y el cristalino es formar una imagen
del mundo externo con la luz que llega al ojo, justamente en la capa de células
fotorreceptoras. Cada célula absorbe la luz de un punto de la imagen y a su vez
genera una señal eléctrica que lleva, en forma codificada, la información de cuánta
luz ha sido absorbida y de las características del color de la luz. Las señales que
produce cada célula se transmiten a través de un conjunto muy complejo de
sinapsis (uniones nerviosas). En estas uniones se juntan las señales que vienen
de diferentes células fotorreceptoras, se combinan y se comparan. Este proceso
permite al sistema visual obtener información acerca de las formas, movimientos y
colores de los objetos externos. Finalmente, se envían por medio del nervio óptico
hasta llegar al cerebro. Nos damos cuenta que las células fotorreceptoras juegan
un papel crucial en la sensación de la visión.
En el ojo humano, así como en el de muchos animales vertebrados, las células
fotorreceptoras son de dos tipos (Figura 3O): a) los bastones y b) los conos. Las
células reciben estos nombres debido a la forma que tienen.
Los bastones son las células que operan cuando el nivel de iluminación es muy
bajo, mientras que los conos son los que operan cuando hay luz de día ordinaria.
Gracias a los bastones es que podemos ver cuando el ambiente está oscuro, pero
solamente nos dan una visión en blanco y negro. En la oscuridad no podemos
distinguir los colores de los objetos. Los bastones son células extremadamente
sensibles que al recibir mucha luz se saturan y de hecho dejan de funcionar,
mientras que los conos solamente empiezan a funcionar a partir de cierto nivel de
iluminación. Es precisamente a través de los conos que se realiza la percepción
de detalles espaciales y de movimiento así como la sensación de los colores. Los
bastones y los conos están distribuidos de manera no uniforme en la retina. En la
retina humana hay alrededor de tres millones de conos y cien millones de
bastones.
Los bastones y los conos tienen formas diferentes pero también tienen ciertas
similitudes. La parte superior (Figura 30) de las células se llama el segmento
exterior que contiene las moléculas que absorben la luz. Al ser absorbida la luz,
las moléculas se modifican y envían una señal a través de la membrana de
plasma, que a su vez la transmite a través del segmento interior hasta la terminal
sináptica, desde donde se envía a otras células de la retina.
En el segmento exterior de cada bastón hay unos dos mil discos, ordenados uno
encima del otro, formando un cilindro. La membrana del disco contiene un
pigmento rojizo (Figura 31), formado de moléculas, llamadas rodopsina, que son
justamente las moléculas que absorben la luz e inician el proceso de visión.
Veamos con un poco de detalle lo que ocurre cuando un fotón de luz llega a la
rodopsina.
Ahora bien, hemos de mencionar que ocurre una situación muy interesante.
Cuando una molécula de retinal está en la forma 11-cis hay una probabilidad de
que en forma espontánea se isomerice a la forma trans, es decir, que en ausencia
de factores externos sola cambie de forma. Sin embargo, esta probabilidad es
extremadamente pequeña; de hecho ocurre una vez cada mil años. Esto tiene
como consecuencia que cuando un fotón llega a la retina, la molécula de
rodopsina que lo absorbe reporta el hecho, mientras que los otros millones de
moléculas de rodopsina no reaccionan para nada. Esto significa que la rodopsina
responde con mucha eficiencia, ya que no hay ninguna perturbación de las otras
moléculas de rodopsina que no reciben luz. De hecho, el bastón es, por tanto,
capaz de registrar un solo fotón de luz con la consecuencia de que el ojo es
extraordinariamente sensible a la oscuridad.
Nos damos cuenta que es una misma molécula, el retinal, la que absorbe luz, pero
como se encuentra acoplada a cuatro proteínas distintas, se "sintoniza" a
diferentes regiones de longitudes de onda de la región visible.
Como ya se vio, se ha encontrado que existen tres tipos de conos que tienen un
máximo de sensibilidad a distintas longitudes de onda. Un tipo de conos tiene su
máximo en 4 600 A, que corresponde a luz azul; otro tipo de conos lo tiene en 5
400 A, que corresponde a la verde, y finalmente, un tercer tipo que tiene su
máximo a una longitud de onda de 6 300 A, que corresponde al color rojo. A estos
conos se les llama conos azules, verdes y rojos, respectivamente.
La existencia de tres tipos de conos, cada uno de ellos con máxima sensibilidad
para un color, da lugar a lo que se llama, y se conoce desde hace mucho tiempo,
la teoría tricromática de la visión humana.
A. DIÁLISIS Y ULTRAFILTRACIÓN.
A. PRECIPITACIÓN ISOELÉCTRICA.
B. MÉTODOS ELECTROFORÉTICOS.
A. CROMATOGRAFÍA DE AFINIDAD.
BIBLIOGRAFÍA
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