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Ajarei mot - kedoshim

Vayikra 16:1-20:27
Esta semana estaremos estudiando las parashot correspondientes al libro de vayikra
comprendidas desde Vayikra 16:1-20:27, pero en nuestro comentario nos estaremos
refiriendo a la parashá ajare mot y el pasut que estaremos comentando es el siguiente:
Lev 17:10 Si cualquier varón de la casa de Israel, o de los extranjeros que moran
entre ellos, comiere alguna sangre, yo pondré mi rostro contra la persona que
comiere sangre, y la cortaré de entre su pueblo.
Lev 17:11 Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer
expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la
persona.

Uno de los mandamientos de lo tasé que aparece en la Torah y que lleva


implicito el castigo de ser karet cortado del pueblo es la prohibición de comer
sangre, en Deuteronomio también se nos dice:
Deu 12:23 Solamente que te mantengas firme en no comer sangre; porque la sangre es
la vida, y no comerás la vida juntamente con su carne.

Por otro lado vamos a ver de que este es uno de los mandamientos que se les
repite a los gentiles que se están acercando al judaísmo mediante su fe en
Yeshua en el concilio de Jerusalem en el año 50 DM. Ahora aquí surge ya una
pregunta importante:
¿Por qué el Eterno prohíbe tan estrictamente el comer sangre?
Antes de comenzar a responder esta pregunta vamos a notar que lo primero
que vieron los sabios en los versículos anteriores es que la prohibición de
comer sangre no solamente era para el judío, sino también que era para todo
extranjero que habitara en medio del pueblo de Israel e incluso los sabios se
hacen otra pregunta importante:
¿Por qué en este pasuk de vayikra 17:10 y que dice así:

10. Veísh ish mibeyt Israél umin - haguér hagar betojám ashér yojál kol -
dam venatáti fanai banéfesh haojélet et - hadam vehijráti otá mikérev ama.
10. "Si alguna persona de la casa de Israel, o de los extranjeros que habitan
entre vosotros come cualquier sangre, pondré mi rostro contra la persona
que coma la sangre y la excluiré de entre su pueblo.

se repetía 2 veces la palabra ish ‫וְאִיׁש אִיׁש‬


Y los sabios dan la siguiente explicación:
En este pasuk la palabra ‫ ישראל‬se refiere a los israelitas; la palabra ‫ גר‬se refiere
a un prosélito; la letra ‫ ה‬antes de la palabra ‫ גר‬se refiere a la esposa del
prosélito; la palabra ‫ בתוכם‬se refiere a mujeres y esclavos. En vista de esto,
¿por qué la Torá tenía que repetir la palabra ‫ ?איש‬El rabino Eleazar ben Rabbi
Shimon responde que esto está destinado a incluir a un bebé de una madre
judía engendrada por un extraño o un esclavo, de modo que la prohibición del
mandamiento de no comer sangre, abarca a todos por igual, sin hacer
distinción, ni tan siquiera a un prosélito que no nació como judío.

Otro de los grandes rabinos de nuestro pueblo Rashí, sugiere que estas palabras,
aparentemente repetidas, son en realidad un llamado de atención a los mayores de Israel
para hacerlos responsables por los menores, en lo que a este tema se refiere.

Entonces ¿Por qué es tan importante la prohibición de no comer sangre?


Los sabios de nuestro pueblo dan varias explicaciones al respecto:
1- El comer sangre obstruye el desarrollo nefeshico del hombre.

Porque la fuerza vital de toda carne está en su sangre,;de modo que la


persona que come sangre está destruyendo su propia alma y la razón
de ello es porque la sangre contiene el (nefesh)‫נפש‬, la esencia del
animal del que proviene, por lo que consumir esa fuerza vital da como
resultado que el alma, es decir, la fuerza vital de la persona que la
consumió se diluya con esta fuerza vital espiritualmente inferior, de
modo que no se pueden unir 2 fuerzas espirituales de diferentes
dimenciones, porque la superior es debilitada por la inferior,
obstruyendo así el desarrollo nefeshico del hombre.

Pero sin embargo en el texto vemos un detalle interesante y es que dice:

Ki néfesh ha basar badam.


Lo que literalmente diría es: porque la vida, la fuerza vital de la carne está en
la sangre y aquí los sabios se hacen varias preguntas más:

1- ¿por qué la Torá eligió la expresión ‫נפש הבשר‬, " la fuerza vital de la
carne" como si diera la impresión de que en la carne también está esta
fuerza vital , en lugar de escribir " porque la fuerza vital está dentro de la
sangre"?

2- ¿Si la carne también contenía o estaba impregnada de la fuerza vital,


entonces el comerla no causaría también un daño irreparable a un alma
judía?

Para aclarar esta situación la Torá repite que es solo la sangre en la carne la
que contiene la esencia del animal, no la carne misma aunque la carne este
impregnada de la sangre, por tanto la esencia del animal se encuentra en su
sangre y no en la carne. De manera que HaShem nunca había permitido que
se comiera la esencia (alma) de un animal. Solo se había permitido la carne.
Por tanto cuando HaShem le permitió a Noaj el consumo de animales, esto se
debió a que al haber salvado a los animales [las criaturas inferiores], Noaj
había adquirido el derecho a sus cuerpos y también por el hecho de que él
trajo de ellos ofrendas a Di-s que eran aceptables ante Él, pero nunca autorizó
a Noaj a comer su sangre.
Pero en el caso del hombre, la fuerza vital no solo está en la sangre, sino
también en la carne y los huesos. Nuestros sabios se refieren a esta fuerza
vital como ‫הבלה‬, una cierta humedad que sobrevive en los huesos de los
justos durante muchos años después de su muerte. Por eso no se pudren,
un ejemplo de esto está enseñado por los rabinos respecto a Shara nuestra
matriarca en la parashá Jaie Shara. Por otro lado, los malvados que se
comparan con los animales son aquellos que no resucitarán cuando llegue el
momento, ya que todos sus huesos se han secado y se han podrido por
completo, de modo que ni un ápice de su fuerza vital única todavía. existe.

2- El comer sangre entorpece el desarrollo de la nefesh, debilitando el


alma divina de nuestro interior.

No es apropiado mezclar las fuerzas vitales humanas con la esencia


vital animal consumiendo sangre, ya que una nación como el pueblo
judío, destinatario de la sagrada Torá, debe preservar la pureza de sus
cuerpos para que puedan recibir sabiduría y revelaciones de la
inteligencia que emana de las esferas celestiales y el comer sangre
debilita los estados de percepción y recepción de la realidad
superior.

3- El comer sangre desencadena los instintos animales en nosotros


dándole fuerza al alma animal.

Si comiéramos la sangre, asimilaríamos las tendencias animales dentro


de nosotros y nos volveríamos crueles, pareciéndonos en última instancia a
los animales más que a los ángeles, se sabe que la comida que se come se
lleva al cuerpo del que la come y se convierte en una sola carne, de forma tal
que si uno comiera la vida de toda carne, entonces se adheriría a la propia
sangre y se unirían en el corazón de uno, y el resultado sería un
engrosamiento y una tosquedad del alma humana de modo que se
acercaría mucho a la naturaleza del alma animal que residía en lo que comía,
ya que la sangre no requiere digestión como lo hacen otros alimentos, que por
lo tanto cambian, y así el alma del hombre se combinará con la sangre del
animal, por otra parte los elementos instintivos más básicos del alma de un
animal se basa en la comida y el sexo, por tanto de lo anterior aprendemos de
que los rasgos de carácter que poseen los animales saldrán a la luz en las
personas que comen su sangre "porque la personalidad de la carne (en cada
animal respectivo) reside dentro de su sangre".

4- El comer sangre entorpece los procesos propios del alma establecidos


por la Torah.

Ya que las fuerzas vitales destinadas a la destrucción, como el animal


que se sacrificará, no deben mezclarse con las fuerzas vitales
destinadas a permanecer con vida.

5- El comer sangre está relacionado con la idolatría.


Maimónides, escribiendo sobre las razones subyacentes a los diversos
mandamientos, (Moreh Nevuchim 3,46) dice que la prohibición de comer
sangre tiene como objetivo evitar que el hombre se involucre con los
demonios. Cuando los israelitas partieron de Egipto eran expertos en la
disciplina de los demonios, etc. Habían adquirido este conocimiento de
los egipcios que estaban muy preocupados por todo tipo de fenómenos
de este tipo. Siempre que los egipcios sentían la necesidad de consultar
a los demonios, cavaban un hoyo en el suelo y lo llenaban de sangre,
algo que atraería a los demonios. Cuando los egipcios querían
información sobre el futuro, comían de esa sangre, ya que la
consideraban comida de demonio, con la esperanza de adquirir
cualidades demoníacas al ingerir el tipo de comida que comían los
demonios.
Maimonides también escribió en la Guía de los perplejos Moreh
Nebuchim, III, 46. que los caldeos detestaban la sangre, considerándola
impura, y solo aquellos que buscaban establecer contacto con los
demonios y predecir el futuro la comerían.

Por otro lado estaban los zabianos, o adoradores de las huestes


celestiales, quienes practicaban un rito idolátrico en el cual
acostumbraban, al sacrificar animales, a derramar su sangre y comer
parte de la carne en el lugar donde era derramada la sangre, y a veces
comían también la sangre misma, creyendo que así la amistad,
fraternidad y familiaridad se contraerían entre los adoradores y las
deidades. Ellos además creían que la sangre era muy benéfica para
conseguir para ellos una visión del demonio durante el sueño, y una
revelación de acontecimientos futuros.
6- El comer sangre despierta las palabras falsas.

El comer de la sangre de un animal hace que la sangre del que la comió


se contamine dice el Rabi Najman en Likutei Moharan 51: 1: 4. Y la
sangre está contaminada por la falsedad. Es imposible que una persona
hable falsamente a menos que ya haya contaminado su sangre, así
como es imposible hablar con la verdad a menos que primero purifique
la sangre. Esto se debe a que la esencia del habla es el alma, como está
escrito (Cantar de los Cantares 5: 6), "Mi alma se apagaba cuando
hablaba". Y el alma es la sangre, como está escrito (Deuteronomio
12:23), "porque la sangre está [asociada con] el alma". Vemos entonces
que cuando una persona habla en falso, es porque su sangre está
contaminada. Es esto lo que da lugar a la melancolía. Y del exceso de
melancolía se forman lágrimas que hacen que los ojos se oscurezcan.

7- El comer sangre despierta los malos rasgos del carácter que están
determinados a su vez por los cuatro elementos.
Por ejemplo: la ira y arrogancia son determinados por el elemento fuego que
se eleva, los placeres provienen del elemento agua, el apego a la materialidad
del elemento tierra.
8- No se puede comer sangre por que la sangre es usada como
expiación.

“Porque la vida de la carne está en la sangre, y yo os la he dado sobre el


altar para expiar vuestras almas” (Levítico 17:11).

La palabra hebrea que se usa para expiar es:

‫ָּכפַר‬
kafár
raíz primaria; cubrir (específicamente con betún); figurativamente expiar o condonar,
aplacar o cancelar:-anular, apaciguar, aplacar, corregir, evitar, (hacer) expiación,
expiar, limpio, pacto, perdonar, propicio, purificar, reconciliación, reconciliar,
satisfacción.

De modo que la sangre de la víctima lo que hace es expiar la culpa del alma.
¿Por qué ocurre esto?
El poder de la vida reside en la sangre, ella es la encargada de transportar el oxígeno por
el cuerpo. Asimismo, la sangre es la responsable de la naturaleza instintiva del hombre,
la naturaleza sub-racional, y como tal es la responsable de que el hombre cometa actos
sub-racionales (comúnmente llamados “transgresiones”). Por eso la sangre, y sólo la
sangre, sirve como medio de expiación.
La sangre representa la vida. No es que el alma esté en la sangre, sino que la
vida depende de la sangre, Con la muerte de Yeshúa se hizo expiación
por la vida del hombre, al derramar él su sangre. La sangre fue tomada
por HaShem como un medio de expiación por razón de la vida, el alma, que
depende de la sangre.

Pero cómo respondería un judío a la siguiente pregunta ¿Cuál era la base para
la expiación o eliminación del pecado para los Israelitas?

La mayoría de ellos diría que Adonai quitó su pecado basado en los


sacrificios de animales del sistema Levítico. Como prueba, ellos citaran
alguno de los versículos de la parashá Vayikra donde declara que el
adorador sería perdonado si él ofrece el sacrificio prescrito.

Como hemos ya explicado el término más usado en la Escritura asociado con


el efecto del sacrificio es expiación. Por ejemplo: Y pondrá su mano
sobre la cabeza de la ofrenda de expiación, y la degollará por expiación...y
le hará el sacerdote expiación de su pecado que habrá cometido, y será
perdonado. (Levítico 4:33-35) Sin embargo, de acuerdo a Hebreos 10:1-4,
era imposible para la sangre de toros y machos cabríos quitar el
pecado!
Entonces ¿cómo reconciliamos entonces Hebreos 10:1-4 con Escrituras como
Levítico 4:33-35?

.Debemos recordar que al adorador le son prometidas dos cosas en versículos


similares a Levítico 4:33-34;

1) el sacerdote hará expiación,


2) su pecado será perdonado.

Pero notemos que la escritura no dice que el pecado será quitado. Dice que
el pecado será perdonado. El Hebreo para la palabra expiación en estos
versículos deriva de la raíz ‫ ָּכפַר‬, que significa cubrir! Por lo tanto, Adonai
prometió que su pecado sería cubierto y perdonado. Si un Israelita
arrepentido creía esta promesa y hacía su ofrenda en fe entonces sus
pecados eran cubiertos y perdonados. La base para la cobertura y perdón
era mediante la fe en la ofrenda del animal.

Pero. Hebreos 10:4 específicamente declara que la sangre de toros y machos


cabríos ¡no puede quitar pecados!.

Entonces nos preguntamos nuevamente ¿Cómo reconciliamos el testimonio de


Levítico con la declaración en el libro de Hebreos?.

La respuesta yace dentro de los propósitos eternos de Adonai. En 1ra


Pedro 1:20 declara que Yeshua era el Cordero de Dios destinado desde la
fundación de mundo! En Su eterno consejo, Adonai supo siempre que Él
quitaría (expiaría) el pecado basado en el sacrificio de Su Hijo Yeshua. Por
tanto, la base de expiación de pecado es la sangre de Yeshua sea que la
persona pecara antes o después de la muerte de Yeshua.

El Sacrificio de Yeshua Aseguró la Redención Eterna para Todos los Santos de


Todos los Tiempos de una vez y para siempre.

Quisiera terminar con una gematría bella y que sirva de ejemplo para todos
nosotros:
La expresión: ‫הּבָׂשָר ּבַדָּ ם הִוא‬
ַ ‫¨ נֶפֶׁש‬la vida de la carne está en la sangre de
ella¨, tiene un valor de 825 y este es el valor gemátrico de la
expresión ‫¨ ְוהִקְ דַּ ׁשְתִּ י‬y he santificado¨, que aparece a su vez en el
pasuk de 2da Cr 7:16 que dice lo siguiente:

¨ porque ahora he elegido y he santificado esta casa, para que esté en ella mi
nombre para siempre; y mis ojos y mi corazón estarán ahí para siempre. ¨

Por otra parte si nos fijamos en las letras finales de la expresión:


‫¨ נֶ ֶפׁש ַהּבָׂשָ ר ּבַדָּ ם הִוא‬la vida de la carne está en la sangre de ella¨
Vamos a apreciar que se forman 2 palabras, la palabra shem que significa
nombre y la Ra que significa maldad, también la suma de las letras finales
de esta frase es 541 que es a su vez el valor guemátrico de la palabra Israel
en hebreo, y esto nos da una gran enseñanza espiritual ¨ La mayor
maldad que puede cometer un israelita contra el nombre es el comer
sangre¨

Unificando todos estos conceptos y este pasuk tenemos está enseñanza:

Si nos abstenemos de comer sangre, estaremos santificando nuestra vasija


para que habite en ella la presencia y el nombre del Eterno, de esta
manera nos elevaremos espiritualmente, recibiendo así los mas elevados
niveles de revelación y la verdad que emana desde los mundos superiores.

Shalom.

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