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Materiales para implantes quirúrgicos.

Pedreira, Lucia.
Quintans, Maria Paz.
Gomez de Rosa, Tomas.

En el mundo de los implantes quirúrgicos existe una gran variedad de materiales que son aptos
para este uso, como polímeros, cerámicos y aleaciones metálicas. Nuestro trabajo se va a centrar
en estas últimas, principalmente las de titanio, cromo-cobalto y los aceros inoxidables ya que son
las mas relevantes en este rubro y cumplen con las características necesarias. Estas son: tener una
composición biocompatible, ser resistente a la corrosión, tener gran resistencia mecánica y tener
un módulo elástico similar al del hueso.[1]
La biocompatibilidad es la característica más importante al elegir un material para dichos
implantes, consiste en no interferir ni degradar el medio biológico en el que se encuentran. Por
otro lado, si la resistencia a la corrosión no es buena, se produce la oxidación del metal
produciendo un debilitamiento del implante y una liberación de óxidos nocivos al medio
biológico. Además, la resistencia mecánica debe ser alta para soportar la carga que el cuerpo
genera y el módulo elástico debe ser bastante similar al del hueso, como se mencionó
previamente, ya que si no provocaría una alta carga fisiológica sobre este generando una perdida
ósea.[1][2]
Los materiales metálicos que más cumplen los requisitos mencionados y que por lo tanto son
los más utilizados son: Acero inoxidable austenítico AISI 316 y AISI 316 LVM, aleaciones Cr-
Co, titanio comercialmente puro y aleaciones de titanio.

Tabla 1: Composición de las aleaciones metálicas típicas en implantes. [2]

Aceros inoxidables: entre estos, los de microestructura austenítica son los más ampliamente
utilizados debido a su alta resistencia a la corrosión y costo relativamente bajo. El cromo forma
el óxido (Cr2O3) que protege al acero de la corrosión y el níquel le da tenacidad. Solo se pueden
endurecer por trabajo en frio. [3]
Los más utilizados son el 316 y el 316 L, este último posee una composición de carbono menor
al 0.05%. Dentro de sus aplicaciones, además de prótesis para cadera y rodilla, tienen uso
temporal como placas de osteosíntesis, tornillos, clavos y fijadores. [4]
Grupo 7 CDM Tp 6

Una desventaja de estos metales es que no se pueden combinar con implantes de titanio, ya
que generaría una diferencia de potenciales lo cual favorece la corrosión por picadura. Por otro
lado, la falla más común se produce cuando se aprieta demasiado un tornillo contra la placa, que
genera un desprendimiento de las capas de óxido (Cr2O3) de ambos (tornillo y placa). Este
desprendimiento podría provocar una hendidura en el tornillo o la placa dando lugar a una rotura
por corrosión-fatiga. Con este ultimo termino hacemos referencia a que la aplicación repetida de
un esfuerzo sobre el metal puede desencadenar una fisura. [5]
Aleaciones Cromo-Cobalto: las aleaciones de base cobalto se pueden dividir en dos tipos,
por un lado, las aleaciones moldeables (Co-Cr-Mo) y por el otro las forjadas (Co-Ni-Cr-Mo). En
ambas el Co y el Cr constituyen los aleantes principales mientras que el Mo es agregado para
aumentar la resistencia.
Sus usos más comunes son acetábulos (porción articular cóncava de la superficie de la pelvis)
de prótesis total de cadera (moldeables) y vástagos de prótesis de cadera, rodilla, hombro y mano
(forjadas), además de uso odontológico. [2][3]
Las mejores propiedades se obtienen por trabajo en frio, sin embargo, en las piezas grandes
puede ser un problema ya que el excesivo endurecimiento puede conducir a un aumento de la
fragilidad. Este problema se puede solucionar regulando la temperatura y el tiempo del trabajo.
En comparación con las aleaciones de titanio y los aceros inoxidables, poseen el mayor módulo
de elasticidad (entre 220 y 234 GPa) lo cual permite que el implante sea más rígido, pero al ser
muy diferente al del hueso (20 GPa) afecta al proceso de transferencia de carga entre este último
y el implante. Otra desventaja es que deben evitarse las soldaduras ya que las uniones son
favorables para la aparición de corrosión. [2][5]
Titanio puro: El titanio comercialmente puro posee cuatro grados normalizados para
implantes quirúrgicos. El grado depende del contenido de elementos intersticiales, a mayor grado
mayor cantidad de impurezas y consecuentemente mayor resistencia mecánica. (Ver figura 2).
Este elemento presenta una gran capacidad de osteointegración, definida como la conexión
directa, estructural y funcional entre el hueso y la superficie del implante. Esta característica se
debe a que el titanio en particular tiene una facilidad de integración al tejido óseo vivo.
También cuenta con una buena biocompatibilidad y la máxima resistencia a la corrosión en
comparación de aceros inoxidables y aleaciones de Cobalto. Además de, un módulo de
elasticidad de 110 GPa por lo que es más compatible elásticamente con el hueso. Sus principales
usos son para implantes dentales.[2]
Aleaciones de Titanio: estas aleaciones presentan la mejor resistencia específica (resistencia
a tensión /densidad), una gran resistencia a la corrosión y excelentes propiedades mecánicas las
cuales se pueden modificar por tratamientos térmicos. Es el mejor material bioinerte para
aplicaciones en implantes porque presenta una capa pasiva de TiO2 que se forma
espontáneamente a diferencia de los aceros inoxidables que la capa pasiva es de Cr2O3.

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Grupo 7 CDM Tp 6

Los principales aleantes son Al, V, Ni, Nb. La más utilizada es Ti-6Al-4V (tipo α-β), debido a
su buen balance entre sus propiedades mecánicas y su resistencia a la corrosión. Sin embargo,
no presenta una buena resistencia al degaste.
Sus principales usos son para prótesis articulares, ortopédicas, dentales y fijación de
osteosíntesis.
Sus desventajas son su elevado costo, su dificultad para mecanizar y que su función debe ser
en una atmósfera inerte o de alto vacío. [5][7]

Referencias:
[1] Aleaciones metálicas usadas en implantes quirúrgicos- J.E. Grau, R.W. Gregorutti1,
C.I. Elsner - año 2013
[2] Conceptos básicos en biomecánica, metales y aleaciones para la sustitución de tejidos
duros- F.J. GIL, M.P. GINEBRA, J.A. PLANELL – año 1999
[3] Handbook of materials for medical devices, J.R Davis - año 2013 - cap 3 y 5
[4] Caracterización del acero inoxidable Dúplex para su posible uso como biomaterial- R.
Gregoruttia, J.E. Graua, J. Desimonib, C.I. Elsnerc – año 2011
[5] Una perspectiva de los biomateriales vista desde un diseño especifico: la prótesis total
de cadera – Revista facultad de ingeniería n°30 Echavarria, Alejandro – año 2003
[6] Oseointegración: serendepia o razonamiento científico- Revista mexicana de
odontología clinica – Agustin Zeron y Gutierrez De Velasco – 4ta edición - año 2006
P. 4.
[7] Aplicaciones biomédicas del titanio y sus aleaciones- departamento de Ciencia de los
Materiales e Ingeniería Metalúrgica, Universidad Politécnica de Cataluña - F.J. GIL Y
J.A. PLANELL- año 1993

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