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El fenómeno del caudillismo

 
El caudillismo es un fenómeno político y social surgido durante el siglo XIX en
Latinoamérica. Consiste en la llegada de líderes carismáticos a cada país cuya
forma de acceder al poder y llegar al gobierno estaba basada en mecanismos
informales y difusos de reconocimiento del liderazgo por parte de las multitudes, que
depositaban en «el caudillo» la expresión de los intereses del conjunto y la
capacidad para resolver los problemas comunes. El caudillismo fue clave para la
dictadura y para las luchas entre los partidos políticos decimonónicos.
 
El poder de los caudillos se basaba en el apoyo de fracciones importantes de las
masas populares. Este apoyo popular se tornaba en su contra cuando las
esperanzas puestas en el poder entregado al caudillo se veían frustradas, y se
decidía seguir a otro caudillo que lograra convencer de su capacidad de mejorar el
país o la provincia.
Este fenómeno se dio en América Latina durante prolongados períodos de su
historia republicana; en algunos casos desembocó en fuertes dictaduras,
represiones a la oposición y estancamiento económico y político, pero en otros
canalizó las primeras modalidades democráticas y federales en las repúblicas
latinoamericanas, así como proyectos de desarrollo autónomo, frente a las
expresiones políticas neocoloniales.

Los caudillistas latinoamericanos se formaron a partir de experimentar la


desigualdad que estaba ocurriendo en el momento de que los españoles llegaron al
Nuevo Mundo imponiendo sus reglas de conquista, explotación, evangelizacióny
cachar sin parar
 
Los caudillos expresaron intereses regionales combinados con sus ambiciones
personales. Agustín Gamarra, por ejemplo, representó los intereses del sur andino,
especialmente del Cuzco, mientras que Andrés de Santa Cruz, los de Bolivia y
Arequipa. Para tener una mejor comunicación en un país mal comunicado
establecieron alianzas con hacendados.

En la actualidad la presencia de caudillos en la política de algunos países


latinoamericanos se da a través de los partidos políticos populistas, donde el líder
político o presidente del partido actúa como agente mesiánico, quien es visto como
único líder natural, quien tiene el derecho de regir las riendas de un partido así como
el único capacitado para gobernar el país y salvarlo, mas no permitiendo que otros
agentes o líderes asciendan a la palestra, generándose así disputas internas,
inclusive con violencia por lograr tener el poder de mando, es por ello que se
concibe a la política como una actividad pública y violenta, dado que los que se
afilian a un partido político entran con la firme idea de lograr ser un caudillo en
potencia en un futuro más cercano , para lo cual sabe que debe enfrentase a otros
caudillos en potencia para el logro de su fin, que significa liderar y ser dirigente
distrital, provincial, regional o nacional.
La principal diferencia con el pasado radicaba en que los caudillos coloniales se
desarrollaron en una sociedad escasamente militarizada, lo contrario de lo ocurrido
tras el estallido de las guerras de independencia y de las guerras civiles

Al mismo tiempo, la inestabilidad política y el debilitamiento del poder central


revalorizaron la figura de los caudillos, convertidos por las circunstancias en los
principales garantes del orden y de la cohesión social a escala local o regional,
orden y cohesión que en numerosas ocasiones debían defenderse con las armas.
La figura del caudillo se manifestaba al margen de las opciones políticas o
ideológicas de la época, los había federalistas o centralistas, y liberales o
conservadores, pero también había quienes cambiaban de bando a medida que
cambiaban sus lealtades personales o que las circunstancias concretas lo
aconsejaban. Dada la debilidad del poder central, los jefes armados se volvieron
autónomos de las autoridades que habían organizado los ejércitos, siendo la figura
de Facundo Quiroga arquetípica del caudillo rural decimonónico.

La emancipación prácticamente no había provocado transformaciones sociales en el


mundo rural, aunque sí revalorizó el papel de los propietarios rurales en
comparación con la posición más subordinada que solían tener en la colonia. Esto
respondía, en parte, al mayor empobrecimiento de las élites urbanas, mucho más
afectadas por la política de los gobiernos que buscaban fondos (confiscaciones) con
los que financiar las guerras.

La entrega de tierras a los oficiales que pelearon en las guerras de independencia,


notable en el caso venezolano, provocó una cierta renovación entre los
terratenientes.A consecuencia de las guerras, la violencia se convirtió en algo
cotidiano y la movilización bélica tuvo su parte de movilización política.

La larga duración de los enfrentamientos llevó a los dos bandos en pugna a sumar
al es fuerzo bélico a amplios grupos sociales, no pertenecientes exclusivamente a
las oligarquías y para ello fue necesario otorgar contrapartidas.
Los ejércitos que sobrevivieron a las guerras de independencia eran muy nutridos y
las autoridades no siempre quisieron, o pudieron, desmovilizarlos, ya que su favor
podía ser vital para la estabilidad del propio gobierno.

Por ello era necesario dedicar a los gastos militares las mejores y más saneadas

partidas presupuestarias, que por lo


general superaban el 50 por ciento de los gastos del Estado. El presupuesto de
defensa se dedicaba a pagar los salarios a la tropa y a la oficialidad y también a la
adquisición de armas y municiones, de modo de evitar cualquier conflicto de tipo
gremial o reivindicativo por parte de los militares y que pudiera terminar en una
asonada.

A veces los recursos sólo se conseguían mediante el saqueo, es decir, recurriendo


a una mayor cuota de violencia.En México y Perú, buena parte de la oficialidad
provenía de los ejércitos realistas, lo que otorgó a los militares profesionales un
peso mayor que en otros países del continente. En aquellos países cuyos ejércitos
habían estado peleando fuera de sus fronteras (argentinos, chilenos, venezolanos o
colombianos), las milicias locales, más vinculadas a las estructuras locales de poder
que las fuerzas regulares, fueron claves para garantizar el orden.

El costo de mantenimiento de las milicias era menor que el de los ejércitos, y


muchas veces sirvieron como correa de transmisión para expresar el agobio de las
poblaciones frente a las exacciones gubernamentales.

Pero a medida que las milicias extendieron su actuación, requirieron una mayor
cantidad de dinero, única manera de competir eficazmente con los ejércitos
regulares.Esto explica la recurrencia de las guerras civiles durante gran parte de la
centuria, pero el recurso sistemático a la guerra no se debe sólo al peso de lo
militar, sino también a la falta de una política o de un sector social que fueran
hegemónicos y pudieran imponerse claramente sobre el resto de la sociedad. La
naturaleza y el alcance de los enfrentamientos fueron exagerados por los viajeros
extranjeros y por algunos testigos locales, que centraban sus descripciones en la
ferocidad de los contendientes y en la destrucción generalizada.

En Venezuela estuvieron José Antonio Páez, Antonio Guzmán Blanco, Juan


Crisóstomo Falcón, José Tadeo Monagas, Cipriano Castro, y Juan Vicente Gómez.
Eran una posición de estado cuasi Feudal. El caudillismo venezolano fue una
manera de organizar la sociedad y de restablecer la estructura de poder durante el
siglo XIX al no poder centralizar esa estructura de poder. Los caudillos fueron los
que mantuvieron cierto orden de convivencia dentro de una sociedad dispersa y
disgregada. Pero los caudillos no tenían un proyecto social transformador; eran
como figuras pasajeras dentro de ese proceso histórico en casi todo el mundo.

LA REFORMA;

La Reforma se estructuró en base a dos leyes fundamentales: la ley Juárez que


abolió el fuero eclesiástico y la ley Lerdo que prohibía la propiedad comunal de la
tierra, lo que afectaba tanto a la Iglesia y a las órdenes religiosas como a las
comunidades indígenas. De este modo se llegó a la abolición de los fueros
eclesiásticos, a la desamortización de las propiedades de la Iglesia y a la
secularización del registro de nacimientos, defunciones y matrimonios.

Los liberales contaban con un enemigo implacable, Porfirio Díaz, que se había
levantado en 1871 contra la reelección de Juárez y en 1875 contra Lerdo, ocasión
en la que tuvo éxito.
invasión francesa.
 
Tipos de caudillos:
En épocas del siglo XIX se manifestaron diferentes caudillos. Desde Boves a Bolívar
y desde Páez a Gómez, se puede decir que existieron varios tipos, entre ellos se
pueden mencionar:
 
El romántico 
Está lleno de ambiciones honestas y nobles propósitos, que solo quiere el bienestar
de la patria como fue caso de Bolívar. El despótico que únicamente busca el interés
personal, con el respaldo democrático por un partido político.
 
El despótico 

Es el que solo se interesa de un interés personal.


 
El independentista 

Son los que aparecieron entre los años de 1810 y 1824.


 
El intelectual 
Se trata de un político que tiene una buena formación para gobernar, organizar y
crear otros estados como Bolívar, el cual tenía grandes proyecciones históricas o
también ser un localista como lo fue Guzmán Blanco.
 
El político 

Posee una base popular, que luego se transformó en caudillo político de Páez.
 
El democrático 

Se encuentra respaldado totalmente por un partido político.


 
Causas 

Para acceder al poder,los caudillos se rebelaban aliándose con militares, deponían


al gobernante actual, disolvían el Congreso y se auto proclamaban presidentes
provisionales. Después de un corto plazo se elegía un nuevo congreso y se
convocaba a elecciones presidenciales. En las elecciones salía elegido el caudillo
que había presidido anteriormente la revolución y deposición del antiguo gobernante
o diputados.
 
Los principales partidarios de los caudillos, aparte de sus hombres de armas de
confianza, fueron los miembros de las clases -enriquecidas. Así, estos aseguraban
Un flujo de dinero para el Estado del caudillo de turno y este se comprometía a
darles beneficios.
 
El caudillismo se desarrolló principalmente en México, pero no completamente, ya
que sufrió ciertos detalles a partir de su desarrollo que no fueron siempre positivos
(donde hubo una gran cantidad de presidentes militares en 50 años); en Chile con el
gobierno de José Miguel Carrera a comienzos de la república; en Perú, donde hubo
tres grandes «periodos de militarismo a los inicios de la república, durante la
reconstrucción nacional después de la guerra con Chile, y tras el oncenio de Leguía;
en Argentina con el gobierno de Juan Manuel de Rosas; en Colombia con el
gobierno de Pedro Alcántara Herrán que promovió a la vez la constitución de 1843;
y también en Bolivia, Paraguay, Ecuador y Venezuela.

Caudillos:
 
Algunos de los caudillos de mayor influencia fueron: José Gervasio Artigas en
Uruguay (la zona que correspondió a la Unión de los Pueblos Libres); Juan Manuel
de Rosas en la Confederación Argentina; José Gaspar Rodríguez de Francia en
Paraguay; Miguel Hidalgo y Costilla, José María Morelos, Vicente Guerrero, Antonio
López de Santa Anna, Emiliano Zapata y Francisco Villa (José Doroteo Arango
Arámbula) en México; José Antonio Páez, Antonio Guzmán Blanco y José Tadeo
Monagas en Venezuela; Getulio Vargas en Brasil, Francisco Franco en España; y
Salazar en Portugal.
 
Características:
 
Entre las características más relevantes de este régimen político, se pueden
mencionar las siguientes:
 
El comportamiento del caudillo es arbitraria y autoritaria, además tiende a
sobrevalorar su valor personal y siempre desprecia a los demás.
Particularmente se deja influenciar por avaricia y la ambición.
La forma de llevar su administración, su conducta y su moralidad dejan mucho de
qué hablar.

Las amistades y allegados, le formulan estrategias para que se pueda perpetuar en


el poder.
Mayormente su labor es negativa, promociona el egoísmo y origina
desestabilización patrimonial.

Logra llegar al poder a la fuerza o a través de promesas democráticas.

 
¿Cómo llega el caudillismo al poder?

Gracias a su astucia, llegaba al poder por medio de un golpe político o militar,


apareciendo como un salvador necesario para ese momento. Generalmente ese
poder logrado, lo perdía por otro golpe, por lo tanto, así como alcanzaba el poder, ya
hoy en día se encuentra desaparecido.
 
Pero si llegara de nuevo al poder, nuevamente disfrutaría de gran popularidad, esto
se debe a que el caudillo tiene la particularidad de violar la ley con la excusa de
hacerla cumplir. Durante la llegada del modernismo y sobre todo en el mundo
Republicano de la América hispana, se frecuentaron mucho los caudillos.
 
Fueron hombres que lograron imponer una dictadura inflexible e implacable,
además de gobernar una nación con el apoyo incondicional de una gran masa.
 
Consecuencias:
 
La inestabilidad política que se vive hoy en día, se debe a la organización que
organizó el estado al aparecer la vida republicana, carente de una base nacional y
debido a los continuos años de diferentes enfrentamientos políticos dirigidos por
diversos perfiles que se peleaban por tener el poder para ese momento.

De esa manera, las repúblicas se llegaron a constituir de forma inestable, sobre una
nación desorganizada en el sistema económico y orden político, además de la falta
de planificación y disciplina en los proyectos de gobierno. A causa de esto, la
democracia no es efectiva totalmente, lo que permite el uso inadecuado de las
conquistas del liberalismo.`
La imposición del orden forzado dentro del caudillismo, solo quedó para la historia,
sin embargo, algunas características de esta índole se han mantenido en la
actualidad. El caudillo que buscaba el poder y la gloria, intentaba por medio de sus
obras ganarse la simpatía del pueblo y buscaba a toda costa desprestigiar al
gobierno anterior.

De esa manera, lograba reorganizar a su antojo su sistema de gobierno y mantenía


todo lo malo que había hecho el gobernante anterior. En la actualidad, existen
muchos gobernantes capaces de desprestigiar a sus antecesores, con el fin de
encontrar su propio beneficio o quizás la utilizan como una estrategia para su
participación impuesta en las siguientes elecciones.

Es muy importante resaltar que hablar de caudillismo, se trata de la consolidación


de fuertes regionalismos, que disminuyeron la inexistencia de la nación.

Actualmente todavía existen ciertos fuertes regionalismos, sobre todo en el sur


andino, que, aun no siendo una consecuencia directa del caudillismo, ayudó a
solidificar algunos de ellos. Por tal razón, muchas veces estos planes pueden
resultar insostenibles para el bienestar de un estado.

En Venezuela estuvieron José Antonio Páez, Antonio Guzmán Blanco, Juan


Crisóstomo Falcón, José Tadeo Monagas, Cipriano Castro, y Juan Vicente Gómez.
Eran una posición de estado cuasi Feudal. El caudillismo venezolano fue una
manera de organizar la sociedad y de restablecer la estructura de poder durante el
siglo XIX al no poder centralizar esa estructura de poder. Los caudillos fueron los
que mantuvieron cierto orden de convivencia dentro de una sociedad dispersa y

disgregada. Pero los caudillos no tenían un proyecto social transformador; eran


como figuras pasajeras dentro de ese proceso histórico en casi todo el mundo.

Como consecuencia de las guerras de independencia, la sociedad que emergía del


mundo colonial sufrió, según señala correctamente Halperín, un proceso de
ruralización y militarización que favorecería el surgimiento del caudillismo.

En Venezuela estuvieron José Antonio Páez, Antonio Guzmán Blanco, Juan


Crisóstomo Falcón, José Tadeo Monagas, Cipriano Castro, y Juan Vicente Gómez.
Eran una posición de estado cuasi Feudal. El caudillismo venezolano fue una
manera de organizar la sociedad y de restablecer la estructura de poder durante el
siglo XIX al no poder centralizar esa estructura de poder..
Conclusión:
Este trabajo encierra todo sobre el caudillismo, desde su definición hasta las causas
y consecuencia.

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