¿Quiénes son los primeros que deben recibir la vacuna del covid-19?

Luis Alfonso Iriarte Chivetta

“La naturaleza de las otras criaturas ya ha sido definida según las prescripciones de las nobles
leyes que la constriñen. Para ti, en cambio, no habrá coerción irremediable, pues será tu propio arbitrio, que he puesto en tus manos, el
que predefinirá lo que serás. Te he puesto en medio del mundo para que desde allí contemples, con comodidad, todo cuanto éste
contiene. No te he hecho ni celestial ni terrenal, ni mortal ni inmortal, para que seas tú mismo, como árbitro y honorable escultor y
modelador, quien puedas darte la mejor forma que elijas.”

Oratio de hominis dignitate

Giovanni Pico della Mirandola

Comparto al lector un pequeño fragmento del “Discurso sobre la Dignidad del Hombre”
escrita por el florentino Giovanni Pico della Mirandola, en donde explica desde un
enfoque antropocéntrico la naturaleza intrínseca del ser humano para que sea el
espectador, artífice y moldeador de su vida por medio del ejercicio libre de su voluntad.
Resalto este punto pues este pequeño fragmento de su obra logra captar varios de los
elementos importantes que desarrollan todas estas teorías sobre la justica como lo es la
libertad, la dignidad y el ejercicio de la voluntad. Sin embargo, necesitaremos algo más
que estos elementos para poder resolver el dilema moral aquí presente, sobre ¿quiénes
deben ser los primeros en recibir la vacuna contra el Covid-19?. Para ello centrare mis
argumentos en dos teorías de la justicia desarrolladas en el libro de Michael Sandel (el
utilitarismo y los Imperativos Categóricos). Estas dos teorías Antagónicas y contrarias la
una con la otra nos ayudaran a aproximarnos a una posible solución justa para este
dilema.

Alguien podría decir que dentro de estas dos posturas el Utilitarismo propuesto por el
Ingles Jeremy Bentham tiene la salida más fácil al dilema, recordando mucho al ejemplo
de los precios altos de alimentos, agua y reparación por el huracán, la respuesta seria El
país que produzca y patente la vacuna primero será el primero en recibir la vacuna o los
que puedan costear el precio fijado por el mercado serán los primeros en recibir la
vacuna. El Utilitarismo según Bentham busca solo una cosa maximizar el bienestar y elegir
los placeres más elevados, “Según Bentham, debe hacerse aquello que maximice la
utilidad. Por «utilidad» entendía cualquier cosa que produjese placer o felicidad y
cualquiera que evitase el dolor o sufrimiento” (Sandel. Pag 59, 2008), esta respuesta se
pudiera adecuar si hubiera un determinado sector afectado en particular, pero siendo
objetivos, la situación con el Covid – 19 es una crisis sanitaria a nivel global sin
precedentes, no existe país o lugar en el mundo que no padezca de los devastadores
efectos de esta catástrofe sanitaria, nos afecta a todos, incluso al mismo mercado. Sin
embargo, dentro de la dinámica misma de la pandemia se evidencio mucho este enfoque
utilitarista y es por esta razón que he escogido referenciar esta teoría. Y es que nuestro
comportamiento Individual dentro de la crisis es plenamente Utilitarista, el mismo sistema
capitalista en que nos desarrollamos del “laissez faire, laissez passer” ha revelado esa
fuerza invisible y salvaje del ser humano por sobrevivir y más allá de eso acaparar
cualquier situación contingente, un claro ejemplo es la excesiva y desenfrenada compra
de suministros de uso cotidiano, historias como que se agotaban en los supermercados los
papeles para baño, o el recurrir a la violencia para obtener cualquier artículo en particular.
Es ese germen Utilitarista que se percibe en el individuo lo me ha llamado la atención. Por
citar otro ejemplo es el de sacarle provecho a los artículos de prevención en la emergencia
sanitaria, como los son la venta de tapabocas, guantes, desinfectantes, jabones, artículos
de limpieza. Que incluso venían de donaciones de otros países y estos fueron interceptado
por otro grupo de personas que se aprovecharon de la coyuntura. Pudiera continuar
haciendo un listado de situación que se han presentado durante la pandemia y que
reflejan el enfoque utilitarista, pero no es sobre lo que nos compete en este ejercicio
reflexivo.Hay algo que rescato del pensamiento utilitarista de Bentham y lo encuentro
oportuno para hablar sobre la pandemia es la parte de “cualquiera que evitase el dolor o
el sufrimiento” es algo de mi plena interpretación, pero creo que aporta bastante al
momento de hablar de las situaciones en la pandemia la noción de evitar cualquier cosa
que genere dolor o el sufrimiento es precisamente como individuos debemos aprender en
estas circunstancias, y no hablo del dolor o el sufrimiento ajeno, sino del propio, muchas
veces durante la pandemia no había respeto ni conciencia del individuo frente a la
situación que enfrentaba, violando muchas veces procedimientos tan básicos como no
salir de su casa o no usar tapa bocas ya sea por comodidad o por simple escepticismo
frente a la contexto. Preferir ir a una fiesta o de una reunión con amigos ante semejante
adversidad no es una evaluación utilitarista que persiga maximizar el bienestar.

Pasemos ahora con el filósofo alemán Emmanuel Kant, sería muy ambicioso de mi parte
poder desarrollar teóricamente toda la lógica de los imperativos categóricos en Kant en lo
que me resta de espacio para este ensayo. Por ende, me ceñiré solo a lo referente en el
libro de sandel. Kant es un mundo entero, marco toda la lógica del pensamiento moderno,
el desarrollo de un mundo globalizado y las relaciones entre los sujetos del derecho
internacional, verdaderamente un ilustrado. Para Kant se toman decisiones acertadas bajo
la razón, cuando el sujeto llega a su mayoría de edad, esto es cuando se encuentra
emancipado de todo lo que lo domina, lo describe como una revolución del espíritu,
haciendo referencia a la época histórica en que se desarrolla el individuo. Y solo se puede
alcanzar este estado cuando el individuo este sujeto a la moral, la libertad y la razón. Los
imperativos categóricos parten de estos tres contrastes, la moral como deber e
inclinación, la libertad como autonomía y heteronomía y la razón que lleva a los
imperativos categóricos. Como imperativos categóricos se entienden por una ley moral
que el individuo decide autónomamente imponerse y solo bajo esta ley podrá obrar bien.
Esta ley moral la escogemos como seres racionales cito a continuación en sus propias
palabras “Un ser racional [...] tiene dos puntos de vista desde los que puede contemplarse
a sí mismo y conocer las leyes [...] de todas sus acciones. Puede verse primero a sí mismo,
en cuanto pertenece al mundo sensible, sujeto a las leyes de la naturaleza (heteronomía);
y en segundo lugar, en cuanto pertenece al mundo inteligible, sujeto a leyes que, al ser
independiente de la naturaleza, no son empíricas, sino que se fundamentan solo en la
razón” (Sandel, 2008, pag. 200) por lo anteriormente establecido cualquier decisión que
tomemos tiene que estar a acorde a un fin superior, y este fin no es utilitarista pues el
utilitarismo instrumentaliza a las personas despojándole de su dignidad como ser racional
y pensante. Por ende, la solución que aportaría los imperativos categóricos al dilema
moral vendría a resolverse cuando verdaderamente le otorguemos las primeras vacunas a
los más necesitados, aquellas personas que poseen pobreza multidimensional y que se
encuentran en una situación de desventaja frente a los otros países por su simple
condición de seres humanos y respetando lo establecido en el orden convencional de
protección de los Derechos humanos, puesto que respetaríamos no solo su condición de
seres racionales, sino que haríamos valer lo pactado por los Organismos internacionales
de protección de los derechos humanos tanto regionales como universales, ese es el fin
superior que se persigue esta decisión.