Está en la página 1de 3

Antecedentes históricos del baloncesto.

El baloncesto no continuamente se jugó en la cancha de baloncesto de tamaño completo que vemos


hoy, ni tampoco los jugadores saltaban alturas increíbles para hacer clavadas. Este cambió mucho a
partir de sus inicios. La historia del juego muestra uno conceptualmente semejante a la versión
presente, sin embargo, con un estilo bastante distinto, menos normas, ritmo desacelerado y reducida
a nula organización de los jugadores.

Orígenes del baloncesto


El juego de baloncesto fue creado por el Médico James Naismith en 1891 una vez que quiso desarrollar
un entretenimiento de interior a lo largo de los meses de invierno para los alumnos de la School for
Christian Workers. La iniciativa era usar la destreza del jugador para destacar. El partido se jugó
originalmente con un balón de fútbol que ha sido arrojado a una canasta de duraznos, y de esta forma
fue desarrollado la designación popular como "baloncesto".

Diseño original de la cancha


Las primeras canchas de baloncesto eran únicamente medio tamaño de las canchas actual. No
obstante, las mediciones de la meta han cambiado poco. Naismith originalmente clavó una canasta
de duraznos en el borde de una cancha cubierta, y su elevación perteneció a 10 pies (tres metros) en
el aire. Esta elevación jamás cambió a partir de entonces, y los jugadores de baloncesto en la
actualidad aún usan el aro de 10 pies (tres metros) como meta regulada. Tampoco había línea de 3
puntos de vista, y el tiro de una distancia destacable solamente contaba como un solo punto, debido
a que no había tiro de 2 puntos de vista en este instante.

Reglas originales
Naismith poseía solamente trece normas que los jugadores tenían que continuar al jugarlo. En este
instante no había regate, y únicamente se podía arrojar la pelota de un jugador a otro en un paso o 2
para un jugador corriendo a rapidez notable al mantener el control de el balón. Los pases podían ser
hechos y desviados con una o 2 manos, y no se permitía usar el puño para desviar un pase. No estaba
autorizado tener contacto intenso con el cuerpo humano con un jugador opuesto, y se mandaba a la
banca o se expulsaba al jugador después de su segunda violación de esta regla. Varias de ellas
todavía mantienen vigencia en la actualidad incluyendo la de los 5 segundos en la cancha, que una
pelota que pasa por la red cuenta como tanto y que los accesorios con más puntos de vista finalmente
del juego ganan.
Jugabilidad del baloncesto histórico
El baloncesto original era de forma considerable más retardado que la versión de hoy. Muchas
adaptaciones del juego hicieron que este se vuelva más veloz. Naismith solicitó que los fondos de las
cestas fueran acabados en un rato temprano para que no hubiera pausa en el juego a medida que se
esperaba que la pelota fuera recuperada. Los juegos en sí duraban 30 min en general, con 2 mitades
de 15 min, y eran generalmente con baja puntuación ya que los jugadores no podían salivar y tenían
que pasar parados. Además, era difícil desplazarse en las canchas tan pequeñas, ya que hasta 1900
no había ni una regulación de la proporción de jugadores que se permitían en la cancha. No se
admitían tampoco sustituciones hasta aquel instante, y hasta 1921 cuando un jugador era
reemplazado no podía volver a jugar. Finalmente, no había reloj de tiro, lo que además desaceleraba
el ritmo del juego. Parecería que la exclusiva cosa que era emocionante para los espectadores en un
inicio eran las luchas que se desarrollaban de manera reiterada.

Fuentes.
• Antecedentes históricos de los juegos de baloncesto. (2013, septiembre 15). Muyfitness.com.
https://www.muyfitness.com/antecedentes-historicos-juegos-info_8070/
• Real Academia Española y Asociación de Academias de la Lengua Española (2005).
«básquet». Diccionario panhispánico de dudas. Madrid: Santillana. ISBN 978-8-429-40623-8.
• «James Naismith». Encyclopedia Britannica (en inglés).
• Arceri, Mario; Bianchini, Valerio (2004), La leggenda del basket (en italiano), Milán: Baldini
Castoldi Dalai, ISBN 9788884906267..

También podría gustarte