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En el transcurso de lo que podríamos llamar historia del pensamiento teórico, las líneas de trayectoria
pueden considerarse bastas, tanto así como sus contrapuntos y conflictos. Dentro de la producción
académica y no académica que da cuerpo al inmenso arsenal epistemológico existente es fácil encontrar
tanto tradiciones consolidadas y extendidas en el tiempo-espacio como así también pensamientos
ignotos, dejados de lado, desvalorados o destruidos en las trincheras en las que la producción y difusión
de conocimiento válido juegan sus criterios de legitimidad.
En el marco de este perpetuo desarrollo dialéctico de la epistemología, en el que nos vemos inmersos
en la cotidianidad, puede encontrarse también una gama muy amplia de preguntas a plantearse y
responderse: la pregunta sobre la virtud, sobre el Estado, sobre la providencia, sobre la naturaleza,
sobre el hombre, sobre el Ser o sobre la Nada. No obstante esta amplitud y heterogeneidad hay un rasgo
común que las recorre casi transversalmente a todas: su cualidad fundamentalmente humana. Su sesgo
netamente antropocéntrico. Tanto las preguntas planteadas como el ensayo de sus respuestas están
rodeadas por lo humano en el sentido de que están diseñadas para responder a las necesidades del ser
humano, a las (in)seguridades del ser humano, a sus miedos, sus certezas y sus aspiraciones. Aún
cuando las preguntas puedan ser de índole escatológica o teológica, la necesidad de la compresión y
traducción de la trascendencia está permeada por las necesidades humanas.
No obstante esto, desde hace unos años la pregunta ha surgido con fuerza, tal vez impuesta por fuerza
de realidad histórica: la catástrofe climática de la cual no podemos estar seguros de que haya
reversibilidad, la pervivencia del capitalismo neoliberal más allá de su creciente descrédito ideológico y
la evaporación continua de las expectativas de algún tipo de redención o liberación material o
Es en este marco en el que el seminario está planteado. No como una manera de trazar una cartografía
exacta de los autores y problemas que caracterizan al Realismo Especulativo (RE) como corriente de
pensamiento, esto sería una labor en demasía temeraria debido al grado de heterogeneidad y dispersión
de sus integrantes y temáticas, pero sí como un esfuerzo de introducirse en sus discusiones principales
y en la tarea de rastrear algunas de sus propuestas y trayectorias actuales.