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Del relato de las historias del menor se deriva que la representación que Javier tiene de sí mismo
es al de una persona triste, insegura, preocupada. Tono emocional deprimido y desalentado.
Débil magnitud de la fuerza del yo. . El dolor por la separación de sus padres, con al
consiguiente desestructuración familiar se hace evidente en varias láminas de la prueba. Se
perciben deseos inconscientes en el menor de mantenimiento de la unión de sus padres.
Conflicto de lealtades.
Miedo ante la pérdida o debilitamiento de su vinculación con la figura materna. Se
evidencia la necesidad de cercanía con la madre, de la cual demanda apoyo, protección,
atención y afecto. Temor a la soledad.
Interpretación del medio como hostil. Mecanismos de defensa o estrategias de
afrontamiento inadecuadas en lo referente a la protección del individuo ante situaciones
ansiógenas o amenazantes de origen interno o externo.
Conflicto de sentimientos ante la figura paterna, ambivalente, le siente como un poder
benévolo y peligroso al mismo tiempo. Identifica el poder con la figura paterna, y la
consecución del poder con la agresividad.
IGNACIO
Con base en los resultados obtenidos en la prueba, puede derivarse que la representación
que Ignacio tiene de sí mismo es la de una persona temerosa, insegura. Destaca una baja
autoestima, dependencia, frustración por no alcanzar la imagen que le han inculcado que debe
ser. Interpreta el ambiente como amenazador frente a sus necesidades de apoyo y protección.
Débil vinculación paterno-filial, no apreciendo la figura del padre como fuente de
seguridad y protección. No obstante, se aprecia en el menor una fuerte necesidad de
reconocimiento por parte del padre, se siente dominado por él y actúa con sometimiento y
reacciones pasivas y conformistas. Adecuada vinculación materno-filial, siendo su
principal referente en cuanto a preferencias afectivas y figuras de identificación y referencia.
Demanda de atención y afecto materno. Rivalidad y celos fraternos. La representación de la
figura paterna que se percibe a lo largo del relato de las láminas, es la de una figura poderosa,
agresiva; elaboración de defensa frente a dicha figura, deseando convertirlo en un ser indefenso
o herido al cual no hay que temer. Miedo a la agresión; escasos mecanismos de defensa ante
ésta, la reacción ante láminas que asocia con estimulación aversiva no es escapar o enfrentarse,
sino ampararse en los demás , demandar ayuda, generalmente de la figura materna.
Dificultades en el establecimiento y mantenimiento de relaciones con iguales.
MARTA
Del relato de las historias de esta prueba se infiere que Marta tiene una inteligencia ligeramente
superior a la media y que está dotada verbalmente. Se observa una adecuada vinculación
parento-filial, siendo ambos progenitores quienes cubren sus necesidades básicas, de juego y de
protección, estableciendo así un apego seguro. Se aprecia cierta dependencia materna. Presenta
mecanismos de defensa y racionalización que le posibilitan llegar a una resolución de sus
conflictos de manera sana e independiente. Se aprecian ciertos deseos en la menor relacionados
con el cese de conflictos y deseos de convertir a la figura paterna en un ser más débil. Facilidad
en el establecimiento y mantenimiento de relaciones con el grupo de iguales.
MARIA
En relación al nivel de madurez y desarrollo de María, cabe precisar que ésta funciona por
encima de lo que puede esperarse en su edad cronológica. Del relato de las historias de esta
prueba se infiere que la menor tiene una inteligencia ligeramente superior a la media y que está
dotada verbalmente.
Del relato de las historias de María se deriva que la representación que tiene de sí
misma es la de una persona segura, activa, con un fácil control de la situación y elevados niveles
de autoestima. No se revela la presencia de problemas emocionales.
Presencia mecanismos de defensa o estrategias de afrontamiento suficientes en lo
referente a las amenazas o estímulos aversivos de origen externo, no posicionándose a merced
de los sucesos, sino ejerciendo acciones o conductas encaminadas a modificar el desarrollo de
éstos.
No se perfila problemática en las relaciones parento-filiales. Se observa una adecuada
vinculación paterno-filial, apareciendo el soporte emocional que otorga seguridad, protección y
apego. Valoración de la figura paterna como sostén de las cargas familiares, plasmando una
comprensión de la estructura familiar, en lo que al reparto de los roles se refiere, tradicional.
Con claridad otorga al padre la potestad de solucionar los problemas que pudiera sufrir ella
misma, o los miedos que pudiera padecer.
Aparición de miedos evolutivos correspondientes a la etapa de desarrollo de la menor.
Se perciben deseos inconscientes en María de mantenimiento de la unión de sus padres,
reflejándose deseos recurrentes de volver a situaciones anteriores, haciéndose evidente en varias
láminas de la prueba; esto lleva a pensar que la menor, posiblemente, no llegó a superar la
interiorización de la separación parental.
Destacan la búsqueda activa de gratificación instantánea y las fantasías recurrentes de
normalización en la unidad y estructura familiar. Extremos ambos usuales y acordes a la edad
normativa de la menor, regida por el principio del placer.
AMANDA