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Un satélite es un objeto natural o artificial que orbita alrededor de otro más

grande, en nuestro caso la luna es un satélite natural y es el único objeto


natural que gira alrededor de la Tierra.
Desde hace mucho tiempo, el espacio de alguna manera u otra le ha
impactado a la humanidad y lo ha utilizado para su propio beneficio. Tal es el
caso de las puestas lunares para identificar cuando cosechar y cuando cazar,
aprovechando la migración de animales en dichas puestas para las prácticas
mencionadas y hasta cuando cortarse el cabello.
En este orden de ideas, si la luna es el único satélite natural que posee
nuestro planeta y existen alternativas para la construcción de satélites
artificiales que intensifiquen las telecomunicaciones, los cuales no son más
que cualquier objeto no natural que orbita alrededor de un cuerpo celeste,
cumpliendo una intención específica, pero todos persiguen el mismo fin:
entender mejor el universo ¿Por qué no idear uno con el fin biotecnológico
en nuestro país?
A diferencia de los satélites naturales como la luna, los satélites artificiales
son construidos por los seres humanos y se mueven en torno al objeto que es
más grande que ellos. Generalmente son máquinas muy sofisticadas que se
envían al espacio exterior por medio de cohetes. Algunos son útiles para
elaborar mapas, otros para obtener información específica de la Tierra u
otros planetas y unos más para recopilar datos que ayuden a prever las
condiciones del tiempo en el planeta. El famoso Sistema de Posicionamiento
Global (GPS, por sus siglas en inglés), que determina la ubicación/posición de
un objeto en el planeta, funciona a partir de una red de satélites artificiales, y
de hecho, los sistemas de telecomunicaciones actuales que incluyen la
televisión y los teléfonos celulares, funcionan gracias a satélites artificiales.
El uso de los satélites en ecología para estudiar los factores que influyen en
las epidemias abrió la puerta a una nueva especialidad, la epidemiología
satelital.
En definitiva, la epidemiología satelital también llamada epidemiología de
paisajes, tiene como objeto estudiar el impacto de las alteraciones del
ambiente, incluyendo los seres vivos que lo habitan, sobre la salud de los
mismos, de ahí que se estudien las interacciones entre los aspectos
temporales y espaciales del paisaje y sus componentes. El entender que los
cambios e interacciones del medio ambiente tienen una fuerte influencia
sobre las diversas enfermedades ha generado la necesidad de estudiar dichos
factores ambientales puesto que están condicionando enfermedades
humanas.
Por consiguiente el estudio de ese entorno puede implicar distintos puntos
de vista, componentes, factores y disciplinas para evaluarlos dado que estos
problemas son multifactoriales; por ejemplo, la vegetación, la fauna, el suelo,
la hidrografía, los elementos climáticos o meteorológicos, entre otros,
estudiados por ciencias como la biología, fitología, zoología, geología,
ingeniería de suelos, hidrología, ingeniería hidráulica, climatología,
meteorología o la ecología, y es ésta última la que presenta una visión
integradora de ese medio en el que los seres vivos interactúan y del cual el
hombre forma parte.
Algo semejante sucede con el uso de información capturada desde satélites
para aplicaciones en salud pública. Este es a su vez parte de la epidemiología
panorámica, en la cual esta variante da la visión de entorno macroglobal con
información generada desde el espacio por sensores remotos. La información
que puede ser usada en aplicaciones de salud puede ser capturada o
recolectada por diferentes sistemas sensores gracias a la existencia de
satélites artificiales.
De esta manera, los datos obtenidos pueden ser correlacionados, como
sucede con ciertas variables meteorológicas para predecir y asociarlos con
variaciones en los patrones de ciertas enfermedades que afectan a los seres
vivos en la corteza terrestre.
Ahora bien, si imaginamos que existiera la posibilidad de crear un nuevo
satélite artificial en el ámbito de la salud le titularía “ESTUPOR” ya que es
sinónimo de maravilla el cual cumpliría funciones específicas en el entorno
humano.
En Primer lugar, descubrir el agente, el huésped y los factores ambientales
que afectan la salud con el objeto de aportar una base científica para
prevenir enfermedades y traumatismos y fomentar la salud a través de
análisis climáticos y meteorológicos por medio de satélites. Seguidamente,
determinar la importancia relativa de las causas de enfermedad,
discapacidad y muerte con el objeto de prioridades de investigación y acción.
Al mismo tiempo, Identificar aquellos sectores de la población que presenten
el mayor riesgo de causas específicas de mala salud para poder dirigir la
acción indicada en forma apropiada a través de bases de datos diagramadas
por GPS y en último lugar, Evaluar la efectividad de programas y servicios de
salud en el mejoramiento de la salud de la población a través de campañas
publicitarias establecidas mediante medios efectivos y eficaces como lo son
las telecomunicaciones.
Finalmente, puede acotarse que lo más importante es mantener informada a
toda la población al instante y poder interactuar con el mundo y
organizaciones de la salud; sin dejar de un lado que a través de este mismo
satélite es que podría utilizarse como fuente de energía solar que usaría
transmisión de energía por microondas o láser. Con el propósito de enviar
energía solar a una antena muy grande en la Tierra donde podría usarse en
lugar de fuentes de energía convencionales las cuales serían casi que
indispensables en nuestro país para el sector de la salud.

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