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Quevedo vs.

Góngora

Aguja de navegar cultos con la receta para hacer


¿Qué captas, noturnal, en tus canciones, “Soledades” en un día, y es probada. Yo te untaré mis obras con tocino
Góngora bobo, con crepusculallas, Quien quisiere ser Góngora en un día porque no me las muerdas, Gongorilla,
si cuando anhelas más garcivolallas, la jeri (aprenderá) gonza siguiente: perro de los ingenios de Castilla,
las reptilizas más y subterpones? fulgores, arrogar, joven, presiente, docto en pullas, cual mozo de camino;

candor, construye, métrica, armonía;


Microcósmote Dios de inquiridiones, apenas hombre, sacerdote indino,
y quieres te investiguen por medallas poco, mucho, si, no, purpuracía, que aprendiste sin cristus la cartilla;
como priscos, estigmas o antiguallas, neutralidad, conculca, erige, mente, chocarrero de Córdoba y Sevilla,
por desitinerar vates tirones. pulsa, ostenta, librar, adolescente, y en la Corte bufón a lo divino.

señas, traslada, pira, frustra, harpía.


Tu forasteridad es tan eximia, ¿Por qué censuras tú la lengua griega
que te ha de detractar el que te rumia, Cede, impide, cisuras, petulante, siendo sólo rabí de la judía,
pues ructas viscerable cacoquimia, palestra, liba, meta, argento, alterna, cosa que tu nariz aun no lo niega?

si bien, disuelve, émulo, canoro.


farmacofolorando como numia, No escribas versos más, por vida mía;
si estomacabundancia das tan nimia, Use mucho de líquido y de errante, aunque aquesto de escribas se te pega,
metamorfoseando el arcadumia. su poco de nocturno y de caverna, por tener de sayón la rebeldía.

anden listos livor, adunco y poro;

que ya toda Castilla con sola esta cartilla


se abrasa de poetas babilones,
escribiendo sonetos confusiones;
y en la Mancha pastores y gañanes,
atestadas de ajos las barrigas,
hacen ya soledades como migas.
Érase un hombre a una nariz pegado, Contra Don Luis de Gongora
érase una nariz superlativa, Este cíclope, no siciliano,
érase una nariz sayón y escriba, del microcosmo sí, orbe postrero;
érase un peje espada muy barbado. esta antípoda faz, cuyo hemisferio
zona divide en término italiano;
Era un reloj de sol mal encarado, este círculo vivo en todo plano;
érase una alquitara pensativa, este que, siendo solamente cero,
érase un elefante boca arriba, le multiplica y parte por entero
era Ovidio Nasón más narizado. todo buen abaquista veneciano;
el minoculo sí, mas ciego vulto;
Érase un espolón de una galera, el resquicio barbado de melenas;
érase una pirámide de Egipto, esta cima del vicio y del insulto;
las doce Tribus de narices era. éste, en quien hoy los pedos son sirenas,
éste es el culo, en Góngora y en culto,
Érase un naricísimo infinito, que un bujarrón le conociera apenas.
muchísimo nariz, nariz tan fiera
que en la cara de Anás fuera delito.
Góngora vs. Quevedo

Anacreonte español, no hay quien os tope, Cierto poeta, en forma peregrina


Que no diga con mucha cortesía, cuanto devota, se metió a romero,
Que ya que vuestros pies son de elegía, con quien pudiera bien todo barbero
Que vuestras suavidades son de arrope. lavar la más llagada disciplina.

¿No imitaréis al terenciano Lope, Era su benditísima esclavina,


Que al de Belerofonte cada día en cuanto suya, de un hermoso cuero,
Sobre zuecos de cómica poesía su báculo timón del más zorrero
Se calza espuelas, y le da un galope? bajel, que desde el Faro de Cecina

Con cuidado especial vuestros antojos a Brindis, sin hacer agua, navega.
Dicen que quieren traducir al griego, Este sin landre claudicante Roque,
No habiéndolo mirado vuestros ojos. de una venera justamente vano,

Prestádselos un rato a mi ojo ciego, que en oro engasta, santa insignia,


Porque a luz saque ciertos versos flojos, a lo que, a San Trago camina, donde llega:
Y entenderéis cualquier gregüesco luego. que tanto anda el cojo como el sano.

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