FACULTAD DE DERECHO Y HUMANIDADES

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

Título del ensayo

Facultades de la jurisdicción administrativa - Competencia

AUTORES:
Alvitres Aguilar, Jireh Sinai (ORCID: 0000-0002-0709-2687)
Córdova Urteaga, Robert (ORCID: 0000-0001-6539-5902)
Díaz Cancino, Nayra Mirelly (ORCID: 0000-0003-1378-8960)
Malca Chavez, Ricardo Emmanuel (ORCID: 0000-0002-3485-6419)
Sánchez Tello, Jennifer Magdalena (ORCID: 0000-0001-8915-1013)

ASESORA:
Dra. Aguirre Caballero, Marina del Pilar

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN
Gestión Pública

CHEPÉN – PERÚ

2021

1
 Índice

Índice.........................................................................................................................2

I. INTRODUCCIÓN...................................................................................................3

II. ARGUMENTACIÓN..............................................................................................5

III. CONCLUSIONES..............................................................................................13

REFERENCIAS.......................................................................................................14

2
 I. INTRODUCCIÓN

La jurisdicción y competencia son dos expresiones y términos más comunes

desarrollados en base al ordenamiento del Civil Law; y por ende del Common
Law, al tener una palabra casi en común, hace que sea muy fácil el poder
confundirlas. Por ejemplo, en las series o películas norteamericanas, alguna
persona con autoridad tal un policía, comisario o miembro del FBI, señala tener
o no, jurisdicción en una área dada o espacio determinado, cuando lo que en
verdad debe tener, es la competencia (territorial) para poder abarcar el asunto.
Este ejemplo nos hace comprender como una palabra, y desde ya, un enfoque
que no estamos enfocados de conocimiento en el tema, gracias al saber
empírico que observamos y creemos tener basados en términos que son
mucho más que ello.

La competencia, se afirma, durante un instituto procesal relativo, en la medida

para poder comprenderla o entenderla, se recurre a las normas especiales, de
cada ordenamiento y paso jurídico que se ha establecido.

Además, saber que la jurisdicción se resume en la potestad de juzgar y

ejecutar, lo juzgado en todo tipo de procesos, que corresponde a los jueces, y
tribunales que se determinan en base a procesos dictaminados por la Ley,
según las normas de competencia y procedimientos que están establecen en la
norma.

Basado en el control judicial sobre la Administración, se supeditan las

decisiones que ordinariamente le corresponden y deberían estar para entender
al poder ejecutivo. En este sentido, resulta pertinente comprender si el poder
judicial está legitimado para interferir en las decisiones de la Administración,
toda vez, que un cuerpo no representativo del Estado, termina definiendo si las
decisiones adoptadas por los cuerpos representativos del pueblo son o no son
legales y si son o no razonables a luz de la Constitución.

Como objetivo principal buscamos dar a conocer con profundidad, y desde una
visión eminentemente práctica, la tramitación del procedimiento administrativo y
de la competencia desde la jurisdicción administrativa. Desarrollar y ampliar
conocimientos basados en estudios que nos generen una opinión completa
sobre el manejo de información en el tema.

3
Como la razón fundamental de la lentitud en la administración de justicia
contenciosa es la congestión de los asuntos sometidos a su consideración, se
puede responder con una estrategia de expansión: más presupuesto, más
magistrados de tribunal, más magistrados en el Consejo de Estado. La justicia
contenciosa posiblemente verá, temporalmente, frenadas las posibilidades
presupuestales para expandirse en atención a la contracción del gasto público
durante los próximos años. Sin embargo, puede asegurarse que la expansión
no es, por sí misma, garantía suficiente para descongestionar adecuadamente
la justicia contenciosa. Podría ser una solución coyuntural, pero de ninguna
manera definitiva.

El aumento en el número de conflictos entre los particulares y el Estado que

deviene de factores como la ilegalidad o la falta de claridad de la normatividad
administrativa; el crecimiento de la estructura estatal a nivel central, regional e
inclusive local; la expansión de la actividad estatal y la creciente colaboración
de los particulares en los cometidos estatales.

Podemos comprender que este tema se llevó a cabo para poder aclarar a
mayores rasgos, para poder lograr desarrollar las discrepancias que se
presenten en el tema del sector a manera legal que representa el sistema al
servicio de la Ley. Además, es el procedimiento que se sigue ante un tribunal u
organismo jurisdiccional dentro del Poder Ejecutivo o del
ámbito administrativo para resolver las controversias que pueden existir entre
los particulares y la administración pública y así, usar los parámetros del
Estado para dar un adecuado énfasis en el proceso regido bajo la Ley.

El proceso de la facultad administrativa está a la disposición de velar y hacer

cumplir las leyes que requieren ser seguidas y, por ende, acatadas en el orden
jurisdiccional que se han propuesto, o dictaminado

4
 II. ARGUMENTACIÓN

Nos referiremos a las facultades del procedimiento administrativo general,

entendido como hemos lo que expondremos a continuación piensa en aspectos
prácticos que se presentan en el procedimiento administrativo clásico, sin
perjuicio de que algunas de las consideraciones que haremos sirvan también
para procedimientos especiales.

Por regla general, es la Rama Judicial a través de sus distintos órganos

jurisdiccionales la encargada de cumplir a cabalidad dicha función, sin
embargo, el legislador ha otorgado competencia sobre determinadas materias
a autoridades administrativa. Aún más, los detractores de esta visión del
contencioso administrativo afirman que la falta de un previo planteamiento en la
vía administrativa provoca indefensión de la administración, sin embargo, la
indefensión se afirma cuando se priva al interesado de la posibilidad de
impetrar la protección jurisdiccional de sus derechos o intereses mediante la
apertura del adecuado proceso o de realizar dentro de dicho proceso las
adecuadas alegaciones y acceso a la jurisdicción contencioso administrativa
Revista Oficial del Poder Judicial: Año 3, Nº 5 /2009 pruebas o, finalmente,
cuando se crea un obstáculo que dificulta gravemente las actividades
antedichas. No hay indefensión para quien voluntariamente, por sus propios
actos, se coloca en dicha posición, como normalmente hace la administración
al incumplir el ordenamiento jurídico infringiendo los deberes legalmente
establecidos, cual es el de resolver las peticiones que le dirijan los
administrados o comunicar los recursos que contra sus resoluciones puedan
darse.

La jurisprudencia ha previsto mecanismos para superar los obstáculos que el

mantenimiento de esta regla pudiera suponer al pleno ejercicio del derecho
constitucional a la tutela judicial efectiva, como la que aparece en el siguiente
caso de remisión de lo actuado a la vía contencioso administrativa, frente a la
omisión de la administración en expedir la licencia de funcionamiento solicitada.

Uno de los rasgos más importantes dentro de las facultades del procedimiento
administrativo, es la competencia, puesto que, con la inexistencia de esta, no
se llevaría una adecuado función o actos jurídicos por medio de un órgano

5
administrativo. La competencia es la aptitud legal expresa que tiene un órgano
para actuar en razón del lugar (territorio), la materia, el grado, la cuantía y el
tiempo lo cual se refiere a la idoneidad atribuida a un órgano de autoridad para
conocer o llevar a cabo determinadas funciones o actos jurídicos, y obedece a
razones prácticas de distribución de la tarea de juzgar entre los diversos
organismos jurisdiccionales.

Según el artículo 3 inciso 1 Ser emitido por el órgano facultado en razón de la

materia, territorio, grado, tiempo o cuantía, a través de la autoridad
regularmente nominada al momento del dictado y en caso de órganos
colegiados, cumpliendo los requisitos de sesión, quórum y deliberación
indispensables para su emisión.

La competencia es un requisito de validez del acto jurídico administrativo por lo

cual contiene cinco tipos de competencia, las cuales mencionamos a
continuación:

La competencia por razón de territorio, están encargados de impartir justicia,

acercándolos de esta manera a las partes o al lugar donde se producen los
hechos o se encuentran intereses en conflicto dentro del país.

La competencia por razón de la materia son las actividades que legítimamente

puede desempeñar el órgano en función de la relación jurídica ya que subyace
al conflicto de intereses o a la incertidumbre jurídica que sirven de sustrato al
proceso y, en especial, por la pretensión respecto al conflicto.

La competencia por razón del grado se puede realizar por los órganos
administrativos colocados en diversos niveles jerárquicos.

La competencia por razón de tiempo se refiere que pueden quedar de acuerdo

para poder sobre llevar los turnos en la hora de la sala de los tribunales
administrativos.

La competencia por razón de la cuantía es aquella donde los procesos de

selección cuyo valor referencial no supere las Seiscientas Unidades Impositivas
Tributarias (600 UIT) el recurso de apelación se presenta ante la Entidad que
convocó el proceso de selección que se impugna, y será conocido y resuelto
por el Titular de la Entidad en lo cual se establece el monto.

6
COMPETENCIA DE LA AUTORIDAD ADMINISTRATIVA

Se entiende por Autoridad Administrativa como el agente de las entidades que,

bajo cualquier régimen jurídico, y ejerciendo potestades públicas conducen el
inicio, la instrucción, la sustanciación, la resolución, la ejecución, o que de otro
modo participan en la gestión de los procedimientos administrativos.

La competencia administrativa viene a ser la aptitud legal expresa que tiene un

órgano para actuar, en razón del lugar (o territorio), la materia, el grado, la
cuantía y/o el tiempo.

Se entiende por competencia, entonces, el conjunto de atribuciones de los

órganos y entes que componen el Estado, las mismas que son precisadas por
el ordenamiento jurídico, entonces la importancia de la competencia es tal, que
sin ella el acto administrativo deviene en nulo.

a) FUENTE DE COMPETENCIA ADMINISTRATIVA

La competencia de las entidades tiene su fuente en la Constitución y en
la ley, y es reglamentada por las normas administrativas que de aquéllas
se derivan.

Toda entidad es competente para realizar las tareas materiales internas

necesarias para el eficiente cumplimiento de su misión y objetivos, así
como para la distribución de las atribuciones que se encuentren
comprendidas dentro de su competencia.

A diferencia de las personas que se rigen conforme al principio de

autonomía de la voluntad, las entidades públicas definen su margen de
actuación de acuerdo a los parámetros que les señala la Ley. En tal
sentido, por regla general, solo podrán actuar en los casos en los que
exista una ley que los faculte para ello. En concordancia con lo anterior,
el Artículo 61º de la Ley Nº 27444, Ley del Procedimiento Administrativo
General, señala que “…la competencia de las entidades tiene fuente en
la Constitución y en la ley...” (Opinión Jurídica)

7
b) PRESUNCIÓN DE COMPETENCIA DESCONCENTRADA
Cuando una norma atribuya a una entidad alguna competencia o
facultad sin especificar qué órgano a su interior debe ejercerla, debe
entenderse que corresponde al órgano de inferior jerarquía de función
más similar vinculada a ella en razón de la materia y de territorio, y, en
caso de existir varios órganos posibles, al superior jerárquico común.

Particularmente compete a estos órganos resolver los asuntos que

consistan en la simple confrontación de hechos con normas expresas o
asuntos tales como: certificaciones, inscripciones, remisiones al archivo,
notificaciones, expedición de copias certificadas de documentos,
comunicaciones o la devolución de documentos.

Cada entidad es competente para realizar tareas materiales internas

necesarias para el eficiente cumplimiento de su misión y objetivos.
“Al respecto, cabe resaltar que esta presunción tiene varias
consecuencias directas, pero las más importantes son dos: (i) importa
una desconcentración automática dispuesta a partir de la propia ley, que
no queda librada a ninguna decisión específica; e, (ii) imprime mayor
celeridad a la gestión, pues el órgano inferior en que radique
competencia en función de las reglas establecidas es responsable de
actuar inmediatamente”. (MORON URBINA, 2011)

c) CARÁCTER INALIENABLE DE LA COMPETENCIA ADMINISTRATIVA

Es nulo todo acto administrativo o contrato que contemple la renuncia a
la titularidad, o la abstención del ejercicio de las atribuciones conferidas
a algún órgano administrativo.
 Solo por ley o mediante mandato judicial expreso, en un caso
concreto, puede ser exigible a una autoridad no ejercer alguna
atribución administrativa de su competencia.
 La demora o negligencia en el ejercicio de la competencia o su no
ejercicio cuando ello corresponda, constituye falta disciplinaria
imputable a la autoridad respectiva.
8
  Las entidades o sus funcionarios no pueden dejar de cumplir con
la tramitación de procedimientos administrativos, conforme a lo
normado en la presente Ley. Todo acto en contra es nulo de
pleno derecho.

d) CONFLICTO CON LA FUNCIÓN JURISDICCIONAL

Cuando, durante la tramitación de un procedimiento, la autoridad
administrativa adquiere conocimiento que se está tramitando en sede
jurisdiccional una cuestión litigiosa entre dos administrados sobre
determinadas relaciones de derecho privado que precisen ser
esclarecidas previamente al pronunciamiento administrativo, solicitará al
órgano jurisdiccional comunicación sobre las actuaciones realizadas.

Recibida la comunicación, y sólo si estima que existe estricta identidad

de sujetos, hechos y fundamentos, la autoridad competente para la
resolución del procedimiento podrá determinar su inhibición hasta que el
órgano jurisdiccional resuelva el litigio.

La resolución inhibitoria es elevada en consulta al superior jerárquico, si

lo hubiere, aun cuando no medie apelación. Si es confirmada la
resolución inhibitoria es comunicada al Procurador Público
correspondiente para que, de ser el caso y convenir a los intereses del
Estado, se apersone al proceso.

Después de toda lo explicado anteriormente sobre la competencia, siendo una

facultad de la jurisdicción administrativa. A continuación, amplificamos un poco
mas sobre lo que es el ejercicio de la competencia en este ámbito jurídico, las
cuales se dividen en su delegación, avocación, control y conflictos de la
competencia:

DELEGACIÓN DE COMPETENCIA. En el caso de la delegación, estamos

aludiendo directamente al ámbito de la competencia de las entidades de la
administración Pública. La competencia es en términos sencillos un deber
facultad de la autoridad administrativa, cuyas características según
CASSGANE son las siguientes:

9
 a) Objetiva, pues surge de una norma que determina la aptitud legal del
órgano sobre la base de un principio de especialidad.
b) Obligatoria, pues el órgano se ve obligado a actuar sobre la base de un
mandato legal encomendado, salvo tenga un margen de libertad para
decidir.
c) improrrogable, puesto que su fundamento se encuentra en el interés
público.
d) irrenunciable, pues pertenece al órgano y no a la persona física que lo
representa.

A partir de estas características de la competencia es posible en determinadas

circunstancias admitir supuestos de delegación, encargo de gestión, avocación
y desconcentración, supuestos que se encuentran regulados en la LPAG. de
acuerdo con el artículo 67° de la LPAG, la delegación es una facultad de las
entidades de la administración Pública, por la cual se admite delegar el
ejercicio de la competencia conferida a sus órganos en otras entidades cuando
existan circunstancias de índole técnica, económica, social o territorial que lo
hagan conveniente.

Una de las características de la delegación es que mediante esta figura no se

podría delegar atribuciones esenciales del órgano delegante, entendiendo por
tales a las siguientes:

a) Las que justifican su existencia,

b) Las atribuciones para emitir normas legales,
c) Las atribuciones para resolver recursos administrativos,
d) Las que fueron a su vez recibidas en delegación

Asimismo, la citada norma precisa que la delegación es temporal, dado que se

extingue por revocación o avocación y por el cumplimiento del plazo o la
condición prevista en el acto de delegación.

Tal como puede advertirse este es un caso donde lo que se delega, bajo
ciertas reglas es la competencia de la autoridad administrativa a una entidad
que, temporalmente, será competente para ejercer la función administrativa
delegada. Por tanto, coincidimos con ABRUÑA con que esta sería una técnica
válida para considerar a una persona jurídica bajo el régimen privado como

10
entidad de la administración Pública. sin embargo, resulta oportuno también
estudiar los demás supuestos regulados en la LPAG, donde la autoridad
administrativa puede disponer de su competencia.

AVOCACIÓN.

Según CASSAGNE, la avocación es una técnica opuesta a la delegación que

dinamiza toda organización administrativa; por tanto, tiene carácter transitorio
para el conocimiento de determinadas actuaciones. en sus palabras, la
avocación consiste:

En la asunción por parte del órgano superior de la competencia para conocer y

decidir en un acto o asunto que correspondía a las facultades atribuidas al
órgano inferior.

En nuestro ordenamiento jurídico, la avocación de competencia está regulada

en el artículo 69º de la LPAG como un supuesto excepcional por el cual la Ley
admite que los “superiores” puedan avocarse conocimiento en razón de materia
o de la particular estructura de cada entidad.

Tal como se puede advertir, este no sería un supuesto válido para que una
persona jurídica del régimen público pueda asumir funciones administrativas,
en la medida que se establece en nuestro ordenamiento jurídico que dicha
atribución sería privativa de las entidades de la administración Pública, cuyas
funciones, la Ley haya dispuesto que pueden ser materia de avocación

CONTROL DE COMPETENCIA.

El artículo 80° de la LPAG contiene el deber de oficio de toda autoridad

administrativa de apreciar la competencia que le corresponde sobre cada caso
en particular • analizar la aptitud personal existente sobre el tema, a fi n de
descartar o afirmar el grado de imparcialidad con el cual puede apreciarse el
asunto, y en su caso, proceder a la abstención correspondiente. • debe ser la
primera actuación de la autoridad, para asegurar su propia competencia. Su
función es sanear desde el inicio, la validez del procedimiento conforme al
criterio de competencia • el objetivo de esta norma es evitar los supuestos de
declinatoria de incompetencia extemporánea o inoportuna.

11
CONFLICTOS DE COMPETENCIA.

El artículo 81° de la LPAG nos dice que los conflictos de competencia resultan
cuando dos órganos administrativos se atribuyen, positiva o negativamente
competencia para conocer un mismo asunto.

La incompetencia de un organismo puede ser declarada de la siguiente

manera:

a. Por la autoridad superior, de oficio.

b. Por la propia autoridad que efectuando el control de su competencia
llega al convencimiento • que carece de ella.
c. A pedido de alguno de los administrados, quien activa algunos de los
dos supuestos anteriores.

12
 III. CONCLUSIONES

Las facultades del procedimiento administrativo general dan un resultado

facultativo en lo que concierne a procedimientos clásicos como especiales
brindando la eficacia dentro de un acto administrativo tanto los elementos que
lo representas como es el ente administrativo como los administrados. La
competencia es manifestada como uno de los rasgos más importantes dentro
de las facultades del procedimiento administrativo dado que se basa en poder
organizar y llevar a cabo una adecuada función en el órgano administrativo que
se adecue en el acto.

Una autoridad administrativa da ese rol importante en poder realizar su función

pública ejerciendo potestades en aspecto administrativos las cuales dan esa
secuencia en la gestión de los procedimientos tanto en la instrucción, la
sustanciación, resolución y la ejecución respectivamente en conjunto de actuar
con la razón del lugar llegando tanto en la materia como el grado y el tiempo.

Es competente para poder realizar las actividades internas en nuestra sociedad

y además que tiene esa potestad en poder velar por el cumplimento de estas
tanto en los objetivos esclarecidos como también en las funciones que la ley
ordena y adecua dependiendo al interés de la sociedad transcrito en nuestra
ley LPAG (Ley de Procedimiento Administrativo General).

Finalizar que, manifestado el carácter inalienable de la competencia

administrativa se fundamente en la nulidad del acto administrativo si presenta
la renuncia al a titularidad o también en la abstención del ejercicio en sus
atribuciones que se puede conferir en una autoridad administrativa de cualquier
órgano administrativo que realice y ejecuta en específico con ciertas
modalidades de la nulidad del acto y/o contrato celebrado y manifestado.

13
REFERENCIAS
 ALSINA, Hugo (1957): Tratado teórico práctico de Derecho Procesal
Civil y Comercial, T. II. Organización judicial, jurisdicción y
competencia. Buenos Aires
 ARMIENTA CALDERÓN, Gonzalo (2003): Teoría general del
proceso. Ciudad de México: Editorial Porrúa
 González Pérez, J. (2011). Comentarios a la Ley de la Jurisdicción
Contencioso-Administrativa.
 CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS, 30 de mayo
de 1999. "Castillo Petruzziy otros vs. Perú".
 SENTENCIA CORTE SUPREMA. 30 de enero de 2014. Rol: 669-2013.
Recurso de casación en la forma y en el fondo en causa "Paredes
Ortega, María con Merino Paredes, Daniela Patricia".
 Revista del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (2018).
JUSTICIA Y DERECHOS HUMANOS. Recuperado de
https://static.legis.pe/wp-content/uploads/2018/11/Revista-Justicia-y-
Derechos-Humanos-del-Minjus-Legis.pe_.pdf
 SÁNCHEZ H. (2015). LA NOCIÓN DE AUTORIDAD ADMINISTRATIVA.
Recuperado de https://es.scribd.com/document/449026692/COMPETENCIA-
ADMINISTRATIVA

14