Enfermedades como anemia, leucopenia y trombocitopenia pueden estar presentes.
Otras consecuencias biológicas son la osteopenia y la osteoporosis, que pueden llegar a ser graves si el trastorno se mantiene durante años. Otra de las manifestaciones y que se evidencia en la usuaria, es la aparición de amenorrea, lo cual se debe a una involución del eje hipotálamo-hipófiso- gonadal que se produce en las pacientes con anorexia nerviosa tras la pérdida de los depósitos grasos, como consecuencia de la restricción voluntaria de la ingesta de nutrientes. La amenorrea se da por una alteración endocrinológica más frecuente y se da una disminución de hormonas gonadotróficas. La característica del eje hipotálamo- hipófisis-ovario en la anorexia nerviosa, se encuentra en un hipogonadismo hipogonadotrófico. El hipogonadismo es una afección en la cual los ovarios en las mujeres producen pocas o ninguna hormona sexual. El hipogonadismo hipogonadotrópico (HH) es una forma de hipogonadismo que se debe a un problema en el hipotálamo.). Esto significa que desde la hipófisis no se están mandando las órdenes adecuadas para el funcionamiento del ovario y el ciclo, además se ha evidenciado una disminución en la secreción de LH y FSH, y, por consecuencia, disminuyen los niveles de estradiol plasmático; y cuando se hace un test de LH-RH, que es un test funcional para ver respuesta hipofisiaria a la inyección de un análogo del LH-RH, en las mujeres con anorexia nerviosa muchas veces se encuentra que hay una hiporrespuesta o una respuesta plana. Sin embargo, la amenorrea no sólo depende de esta hipofunción del eje, sino que también depende de la pérdida de peso; es así como, por ejemplo, la amenorrea se puede presentar con disminuciones del peso entre 10% y 15% del original y también depende de la velocidad de esta pérdida de peso. Mientras más rápido sea, más rápido se tiende a producir el cese de los ciclos menstruales. En general, la menstruación se reinicia cuando se alcanza una relación peso/talla del orden de 90% del peso ideal, pero se necesita que también haya una recuperación de la masa grasa (de 17%) y una recuperación de la grasa corporal con respecto al nivel en que se había llegado con la anorexia nerviosa. Ante lo expuesto anteriormente, podemos concluir con el diagnósticos de Desequilibrio nutricional por defecto r/c trastorno alimentario: anorexia nerviosa, conceptos alimentarios erróneos, e/p IMC 14,67 Kg/m2 Estreñimiento r/c malos hábitos alimentarios con deficiencia de fibra y líquidos e/p cambio en el patrón de eliminación intestinal: deposición una vez o dos veces a la semana. Las características que mayormente definen a la anorexia nerviosa son mentales; pues es un padecimiento psiquiátrico y todas las repercusiones físicas que se presenten son secundarias al estado mental del paciente. Este estado mental se caracteriza por el rechazo a mantener un peso corporal mínimo normal, ya sea a través de una restricción intensa en la ingesta calórica o de un gasto de energía realizando ejercicio excesivo. En las personas anoréxicas existe la alteración de la percepción del peso y la silueta corporal, pareciéndose a ellas estar obesas a pesar de estar delgadas, también se preocupan por algunas partes de su cuerpo que les parecen demasiado gruesas, es decir hay una alteración de la imagen corporal. La imagen corporal es la representación mental que cada persona tiene sobre su propio aspecto físico. Es cómo la persona se ve a sí misma y cómo se percibe cuando se mira al espejo, es decir, cómo la persona cree que es. También tiene que ver con los sentimientos y emociones que experimenta la persona respecto a cómo percibe su físico, cómo se siente con su cuerpo y dentro de su propio cuerpo. La persona que tiene una imagen corporal positiva tiene una percepción clara y real sobre cómo es su cuerpo. Es capaz de valorar y apreciar su cuerpo, siendo consciente de que sólo es una parte de su conjunto como persona y que otros aspectos, como la personalidad, tienen un valor más importante a la hora de definir su identidad. Asimismo, se siente segura y cómoda dentro de su propio cuerpo. Sin embargo, pues esto no pasa en el caso de paciente, ella manifiesta que no se ve delgada como dice la gente, piensa que solo siendo delgada va a tener éxito como dice la sociedad, por lo que esta insatisfecha al observar su cuerpo, experimenta una alteración en la percepción de su propia imagen mental del yo físico, una percepción negativa o distorsionada de su propio cuerpo. Y en sí estas percepciones distorsionadas de su cuerpo favorecen el mantenimiento del cuadro anoréxico. Esta alteración de su imagen, le genera miedo a incrementar su peso y ansiedad, por lo que es común la sintomatología ansiosa y depresiva. El rechazo a su propio cuerpo provoca en ellos sentimientos de tristeza, irritabilidad y aislamiento social generando así un círculo vicioso que dificulta la culminación del trastorno alimenticio. La ansiedad puede describirse como un sentimiento de inquietud, nerviosismo, preocupación, temor o pánico por lo que está a punto de ocurrir o puede ocurrir. Como en el caso de la paciente que manifiesta preocupación al comer debido a que piensa que va a engordar. (4)