Está en la página 1de 1

1. Escuche lo que dice la otra parte.

2. Comparta de verdad. No es conveniente dar o recibir en exclusiva; lo mejor es


hacer ambas cosas por partes iguales.

3. De incondicionalmente. Dar esperando una recompensa o determinados resultados


es igual que pagar por algo.

4. La bondad, la comprensión, la confianza y la consideración valen más que el placer


egoísta. Si usted actúa solo por interés, olvídese de entablar relaciones significativas.

5. No permita que nadie lo trate mal. Exija respeto.

6. Si se niega a tomar decisiones, expresar desaprobación o asumir una postura, de


hecho estará eludiendo la responsabilidad por sus propias acciones. Esta fachada
complaciente a menudo oculta miedo al rechazo.

7. Evite ser posesivo. Toda persona es un ser autónomo, que nunca debe tratarse como
un objeto o una posesión.

8. No permita que lo manipulen. Un buen truco es armarse de recursos para que la


manipulación no sea tarea fácil.

9. La autobservación puede ser muy instructiva. En mitad de una discusión, procure


tomar distancia y observarse a si mismo. Al adoptar la doble posición de observador y
observado, llegará a conocerse mejor.

10. Controle su faceta agresiva o violenta. Al mismo tiempo, busque una válvula de
escape para sus sentimientos y no los reprima. Una discusión serena es la mejor
manera de resolver las diferencias entre dos personas.

11. Aprenda a posponer las gratificaciones adoptando una actitud paciente, confiada y
comprensiva.

12. Es importante aceptar al otro, pero eso no significa que siempre deba estar de
acuerdo con él. Dense permiso para discrepar. No pretenda una coincidencia absoluta.

13. Trate de distinguir entre necesidades y deseos. En muchos casos, lo que usted
quiere no es lo que necesita.

14. Tenga en cuenta el kairos: el momento oportuno para cada acción. Lo que es
positivo en ciertas circunstancias puede no serlo en otras.

15. Respete el espacio de la otra persona.

También podría gustarte