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INVESTIGACION

¿Qué es un tabú?

Materia: Metodología de la Investigación

Docente: José Luis Laguna

Alumno:

Marzo de 2017 Santa Cruz de la Sierra

¿Qué es un tabú?
La palabra tabú designa a una conducta moralmente inaceptable por una sociedad, grupo
humano o religión. Es la prohibición de algo supuestamente extraño (en algunas sociedades),
de contenido religioso, económico, político, social o cultural por una razón no justificada
basada en prejuicios. Romper un tabú es considerado como una falta grave por la sociedad
que lo impone. Algunos tabúes son, en efecto, delitos castigados por la ley, en este sentido, los
tabúes son antecedentes directos del derecho. Hay tabúes fuertemente incorporados a las
tradiciones de ciertas culturas, mientras otros responden a intereses políticos.

La palabra tabú procede del hawaiano y/o del tahitiano (tapú, en ambos casos), lenguas de la
misma familia, y pasó a los idiomas occidentales a través del francés y/o del inglés.

Orígenes
En las agrupaciones primitivas los comportamientos causativos de una reacción tribal eran
aquellos que ofendían el tabú mágico, esto es, las prohibiciones vigentes en la tribu oriundas
de supersticiones, hechicerías y costumbres ancestrales, en las que los magos o sacerdotes
-siempre al servicio de los poderosos- eran sus veladores. No hay en estas agrupaciones
humanas primitivas un concepto destacado de lo que hoy estimamos como delito, pues las
violaciones de los tabúes mágicos tenían más bien la naturaleza de lo que las religiones
positivas han considerado pecado.
Las sanciones que seguían a la violación del tabú tenían también carácter religioso, ya que
consistían en la privación de los poderes protectores de los dioses de la comunidad. Empero,
en aquellos primitivos tiempos, se observa ya que lo que hoy denominamos delito era un
hecho efectuado individualmente y que por implicar una violación de las costumbres lesionaba
las normas prohibitivas de la comunidad tribal constitutivas del tabú. El comportamiento
punible era oriundo de hábitos y supersticiones, usanzas y ritos; estaba considerado como una
ruptura de la paz interna o externa del clan; e imperaba en su concepción un acusado de
carácter religioso sacerdotal de colectiva defensa física, objetiva y ciega de los principios
ancestrales en que se fundaba la propia existencia de cada tribu o colectividad.

El hombre primitivo pensaba que si cometía ciertos actos debía sufrir, inevitablemente, ciertas
consecuencias. Las aceptaba sin exigir que la relación de causa a efecto tuviera un contenido
lógico, ni tampoco una base ética y moral. La tradición y la costumbre le habían enseñado que
si hacía esto o aquello (ya que los tabúes tenían vigencia en relación a acciones, no omisiones),
sufriría tales y cuales castigos. No porque los mismos fueran inevitables, porque hubiera
infringido un precepto legal, o porque hubiese causado daño sino, simplemente, porque había
violado un tabú, vale decir, una prohibición atávica.

En la mayoría de las sociedades primitivas los tabúes estaban representados por una serie de
reglas negativas, cada una de las cuales preveía, y sancionaba, una forma de conducta
prohibida, cuya concreción debía determinar, inevitablemente, un daño al culpable o, en
algunos casos, a todo el grupo al que pertenecía. Sirvieron para acostumbrar al hombre a la
obediencia, y prepararon su ánimo para que en estadios posteriores de la civilización aceptara
los castigos derivados de la violación de las leyes humanas.
Ayudaron a mantener el imperio de las normas de moralidad corrientes dentro de cada grupo
social, las que podían aplicarse no sólo a una relación arbitraria del hombre con la divinidad,
sino también a la conducta cotidiana y corriente. El peso de los tabúes se hizo sentir en forma
efectiva en los pueblos primitivos, extinguidos o actuales, porque el grado de conocimiento de
sus miembros no les permitía entender la naturaleza. Los pueblos que forman el "mundo
civilizado actual" hicieron una selección inteligente dentro del dominio de los tabúes. En
consecuencia permitieron que subsistieran únicamente aquellos que, de acuerdo con la
experiencia, mostraban tener una utilidad social. Los mismos sobreviven bajo el aspecto de
reglas de etiqueta o preceptos morales, o adoptaron la forma más solemne de leyes civiles o
penales. El pasaje del tabú mágico al concepto de la prohibición o sanción motivada y
razonable siguió un camino paralelo y equivalente al recorrido por el progreso de la mente
humana. Así, el temor a lo sobrenatural fue reemplazado por el temor concreto a las sanciones
de las leyes humanas.

Los tabúes pueden incluir:


Restricciones alimentarias (como la dieta halal y kosher o el vegetarianismo).
Restricciones sobre actividades y relaciones sexuales (masturbación, sexo prematrimonial o
extramatrimonial, etc.)
Restricciones en el uso del lenguaje (palabrotas, juramentos). Un ejemplo histórico de este
tipo de tabú es el tabú sobre los nombres que estuvo muy extendido en la cultura china.
Para evitar algunas palabras consideradas o tabú, se utilizan eufemismos. En otros casos, se
utilizan disfemismos.

Ejemplos de tabúes
De tipo sexual:
Circuncisión (en algunas religiones)
Castración (en algunas religiones)
Violación
Masturbación (en algunas religiones)
Incesto
Necrofilia
Pedofilia
Zoofilia
Diversas parafilias

Del tipo Rituales prohibidos:


Canibalismo
Tortura
Satanismo
Sacrificios humanos
Ocultismo
Del tipo de alimentos:
Humano (canibalismo)
Cerdo (en algunas culturas principalmente por motivos religiosos)

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