Juárez Flores Alfonso Isaac

Reporte de Lectura

Karl Marx – El Capital

Capítulo XXIII – La ley general de la acumulación capitalista

El capítulo es un breve repaso de los conceptos más importantes abordados a

lo largo del tomo I. Principalmente aquellos que hacen referencia a la
acumulación capitalista. El primer concepto que debemos recordar es el de
composición orgánica del capital, el cual consiste en la relación entre la
composición técnica de capital que se compone por la fuerza de trabajo, y la
composición de valor del capital, compuesta por los medios de producción.
Esta relación da como resultado la composición orgánica del capital.

La composición orgánica del capital es la composición pura del capital y nos

permite diferenciar entre los diversos capitales invertidos por capitalistas
independientes en una misma rama de producción. Del promedio de la
composición de cada capital obtenemos la composición global de esa rama de
producción. Mientras que el promedio de todas las composiciones medias de
todas las ramas de producción se conoce como composición del capital social
del país en cuestión.

En cuanto al incremento de capital, depende del incremento de la inversión en

fuerza de trabajo, de la plusvalía obtenida y convertida en nuevo capital una
parte debe invertirse en capital variable. En el caso de que la composición del
capital se mantenga sin cambios en la relación C/V, es decir que para una
determinada cantidad de medios de producción se necesita la misma cantidad
de fuerza de trabajo, la demanda de mano de obra crece en proporción al
capital y con la misma rapidez. La escala de la acumulación puede crecer
simplemente con una variación en la distribución de la plusvalía, o la
distribución del producto en capital y renta, las razones son la búsqueda de
incrementar la riqueza al abrirse nuevos mercados y esferas de inversión de
capitales. Estas necesidades de acumulación del capital generan un aumento
en la demanda de fuerza de trabajo incrementando los salarios, por lo tanto, la
reproducción ampliada genera capitalistas más poderosos de un lado y más
obreros asalariados de otro.

El aumento del salario significa una reducción del trabajo no retribuido, pero no
significa ninguna amenaza al sistema, en los conflictos relacionados siempre
saldrá vencedor el patrón. Adam Smith especificó que, aunque la ganancia
disminuya los capitales pueden seguir creciendo, los capitales grandes con
ganancias pequeñas crecen más rápido que los capitales pequeños con
grandes ganancias. Así que el aumento del salario, no impide la expansión del
imperio del capital. La ley de la acumulación capitalista excluye cualquier
aumento de salarios que pueda poner en peligro la reproducción del
capitalismo.

En la segunda sección se analiza la acumulación y la concentración del capital.

Lo que determina el alza de los salarios es el incremento constante de la

acumulación y su grado de desarrollo. La acumulación alcanza un punto en que
el incremento de la productividad del trabajo se convierte en su principal fuente.
Este incremento de capital impulsa las capacidades del trabajo, lo cual
aumenta la cantidad producida, así como el volumen relativo de los medios de
producción, pues a mayor productividad del trabajo del obrero, mayor será el
volumen de medios de producción.

En el momento en que aumenta la magnitud del capital así lo hace la demanda

de trabajo, apareciendo nuevos trabajadores asalariados. La división y
combinación del trabajo forman parte del desarrollo de las fuerzas productivas
del trabajo social.

Ahora bien, en cuanto a la acumulación del capital se realiza de dos maneras:

1) Concentración del capital: los capitales individuales aumentan por medio de

la capitalización de la plusvalía.
2) Centralización del capital: el monto de los capitales individuales aumenta
mediante la fusión de capitales individuales.

Estos dos factores fungen un papel muy importante para con el desarrollo de la
producción. Se puede observar su funcionamiento en el aceleramiento de la
acumulación y el aumento de la composición orgánica del capital.

El siguiente tema es sobre el conocido concepto marxista de “ejército industrial

de reserva” resultado de una superpoblación y su desarrollo. Cuando se da la
acumulación de capital también incrementa la población desocupada la cual es
rechazada por el proceso del capital. Este grupo de personas se conoce como
ejercito industrial de reserva, lo cual beneficia al capitalista pues puede fijar un
salario y en caso de ser rechazado, siempre habrá una masa de fuerza de
trabajo dispuesta a aceptarlo a cambio de un trabajo. Por lo tanto, se empeoran
las condiciones de la clase social obrera y se vuelven dependientes del capital.

La Superpoblación relativa tiene 3 formas básicas:

1) superpoblación relativa flotante: se forma en los centros industriales como

resultado de la atracción y repulsión de la fuerza de trabajo por el capital donde
se forman obreros desocupados. Esta forma de superpoblación se da en zonas
agrícolas, pues es en esta rama donde hay más labradores semiarruinados que
en búsqueda de la libertad se convierten en proletariado cuando migran a las
ciudades.

2) superpoblación relativa intermitente: es parte del ejercito obrero inactivo, se

encuentran en una situación laboral y forman parte de los desocupados
víctimas de la gran industria y agricultura, principalmente aquellos de las ramas
de producción en declive.

El último tema importante que debe recordarse es que, a mayor riqueza social,
mayor es la magnitud absoluta del proletariado y la capacidad productiva de su
trabajo, es decir, mayor es el ejército industrial de reserva. Cuanto más crece la
miseria de la clase obrera, más crece la pobreza.