125 Aniversario de Fundación de la Congregación

Monición de Entrada
Con inmensa alegría nuevamente nos reunimos la gran familia eucarística
de Siervas del Santísimo Sacramento, para celebrar esta Santa Eucaristía
en acción de gracias por el 125 aniversario de fundación de nuestra
Congregación, el cual estuvo marcado por la cruz y la acción de Dios que
trasforma todas las circunstancias.

Hemos realizado al inicio de esta Eucaristía una Procesión con un ramo de

flores que representa a todos los miembros de nuestra Congregación que
hoy no pueden estar presentes, allí se encuentra el ramillete espiritual que
cada comunidad ha realizado como ofrenda a Dios en acción de gracias
por este 125 aniversario, están también un recipiente con los restos
mortales de nuestras fundadoras que por circunstancias que en un
principio parecieron adversas y dolorosas tuvieron que ser exhumadas
(profanación de las tumbas de las hermanas en 2019) y, hoy podemos
realizar esta Santa Eucaristía en presencia de sus restos mortales: Bendito
sea Dios que en todos los acontecimientos del mundo siempre logra
hacernos el bien. Otra circunstancia dolorosa, como la Pandemia del
Covid 19 ha hecho posible, gracias a este nuevo contexto de virtualidad,
que en esta Eucaristía estén presentes muchas más personas que nos son
tan queridas y forman parte de esta gran familia.

Hoy, 7 de Septiembre, es un día grande para nosotras, cumplimos 125 años

de fundadas. Y realizamos esta celebración en este templo que fue el
primero en construirse con el esfuerzo y sacrificio de nuestras primeras
hermanas, realmente que les costó mucho, tuvieron que salir de casa en
casa pidiendo y no sólo aquí en Caracas, sino también Guarenas, Guatire,
Barquisimeto, Valencia… todo realizado con aquellos largos y calurosos
trajes a pie y otras veces en tren, pero todo lo hicieron con el único
objetivo de ofrecer al Rey Sacramentado una morada digna a su
majestad; por su parte Mons. Castro quería que este Santuario fuera la
primera ofrenda de acción de gracias a Dios por el centenario de la
Independencia de la Patria decía “Vamos a levantar un Santuario donde
se eleve constantemente hacia el cielo la oración por la Patria, por la
conservación de nuestra soberanía, por el engrandecimiento de nuestra
nacionalidad” (P. 460 Mons. Castro.) En este lugar tan significativo
elevamos nuestra acción de gracias a Dios por bendecirnos con este
carisma adorador y reparador, nunca podremos agradecer el excelso don

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con que Dios se dignó bendecirnos: ser las custodias de su presencia

Eucarística, hacer como decían nuestras fundadoras el oficio de los
ángeles en la tierra alabándole y bendiciéndole cada día cara a cara,
aunque oculto tras el velo de las especies Eucarísticas. Hoy renovamos
nuestro compromiso de orar no sólo por nuestra Patria sino por todas las
naciones para que puedan entender como lo decía nuestro Padre que
sólo bajo el impulso de la práctica de las virtudes cristianas se pueden
restaurar todos los pueblos.

Con gratitud y alegría participamos en esta Eucaristía de acción de

gracias por los 125 años de fundación de la Congregación.

Liturgia de la Palabra
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses 2, 6-15

Hermanos: Ya que habéis aceptado a Cristo Jesús, el Señor, proceded

unidos a él, arraigados y edificados en él, afianzados en la fe que os
enseñaron, y rebosando agradecimiento.
Cuidado con que nadie os envuelva con teorías y con vanas seducciones
de tradición humana, fundadas en los elementos del mundo y no en Cristo.
Porque en él habita la plenitud de la divinidad corporalmente, y por él, que
es cabeza de todo Principado y Potestad, habéis obtenido vuestra
plenitud.

En él habéis sido también circuncidados con una circuncisión no hecha

por manos humanas mediante el despojo del cuerpo de carne, con la
circuncisión de Cristo.

Por el bautismo fuisteis sepultados con Cristo y habéis resucitado con él, por
la fe en la fuerza de Dios que lo resucitó de los muertos. Y a vosotros, que
estabais muertos por vuestros pecados, y la incircuncisión de vuestra carne,
os vivificó con él, y nos perdono todos los pecados.

Canceló la nota de cargo que nos condenaba con sus cláusulas

contrarias a nosotros; la quitó de en medio, clavándola en la cruz, y,
destituyendo por medio de Cristo a las Potestades y los Principados, los
exhibió en público espectáculo, y los llevó cautivos en su cortejo. Palabra
de Dios

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Salmo
Sal 144, 1-2. 8-9. 10-11 R/. El Señor es bueno con todos.

Te ensalzaré, Dios mío, mi rey;

bendeciré tu nombre por siempre jamás.
Día tras día, te bendeciré
y alabaré tu nombre por siempre jamás.

El Señor es clemente y misericordioso,

lento a la cólera y rico en piedad;
el Señor es bueno con todos,
es cariñoso con todas sus criaturas. R.

Que todas tus criaturas te den gracias, Señor,

que te bendigan tus fieles.
Que proclamen la gloria de tu reinado,
que hablen de tus hazañas. R.

Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Lucas 6, 12-19

En aquellos días, Jesús salió al monte a orar y pasó la noche orando a Dios.

Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, escogió de entre ellos a

doce, a los que también nombró apóstoles: Simón, al que puso de nombre
Pedro, y Andrés, su hermano, Santiago, Juan, Felipe, Bartolomé, Mateo,
Tomás, Santiago el de Alfeo, Simón, llamado el Zelote; Judas el de Santiago
y Judas Iscariote, que fue el traidor.

Después de bajar con ellos, se paró en una llanura con un grupo grande
de discípulos y una gran muchedumbre del pueblo, procedente de toda
Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón.

Venían a oírlo y a que los curara de sus enfermedades; los atormentados

por espíritus inmundos quedaban curados, y toda la gente trataba de
tocarlo, porque salía de él una fuerza que los curaba a todos.

Palabra del Señor

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Fundación de la Congregación - Reflexión

Ayer en la Eucaristía celebrada en la Basílica Menor de Santa Capilla les
contamos los inicios de nuestra Congregación, el momento en el cual el
Padre Juan Bautista Castro después de formar a las futuras fundadoras,
pautó el 7 de Septiembre 1896, día de San Tarsicio, para que luego de una
hermosa celebración, las jóvenes fueran a casa de las hermanas de San
José de Tarbes, en la Parroquia San Juan, para iniciar su preparación a la
Vida Consagrada.

Hoy queremos hacer llegar nuestro profundo agradecimiento a las

Hermanas de San José de Tarbes quienes en aquel momento crucial se
comprometieron fraternalmente con la fundación nuestra Obra hasta sus
últimas consecuencias ya que, a los pocos días se desató una violenta
persecución con el propósito de desanimar a las fundadoras de su
piadoso deseo. Sin embargo, las Hermanas San José de Tarbes, a tal punto
estaban comprometidas con la fundación de las Siervas del Santísimo
Sacramento que estaban dispuestas incluso a dejar que le cerraran el
internado con tal de defendernos. ¿Y de la querida Madre Saint Simón,
qué decir?, ella nos defendió como una verdadera Madre, haciendo todo
lo que estaba a su alcance para evitar la salida de las fundadoras de su
casa, conferenció, replicó, escribió cartas, incluso viajó hasta La Guaira
para hablar personalmente con el presidente de la República General
Joaquín Crespo, hasta que finalmente el Padre Castro después de fuertes
amenazas recibidas por el Ministro de Relaciones Interiores Francisco
Castillo, y temiendo la profanación de aquella santa casa ordenó que
salieran a toda prisa la noche del 14 de septiembre de 1896, día de la
Santa Cruz. Ya los policías se encontraban afuera y custodiaron los autos
en que se fueron como si se tratara de verdaderas delincuentes.

Así que tan sólo 7 días después el grupo fue dispersado y parecía que el
sueño de entregarse por completo a Nuestro Señor había quedado por
tierra, no obstante, nuestra valiente Madre Juliana junto a otras 6 lograron
perseverar y resistir frente a la feroz persecución. Muchas cosas pasaron,
hubo otros intentos de disolver el grupo, pero nuestras valientes
fundadoras permanecieron firmes en la fe. Un mes después lograron
reunirse las 7 elegidas en una casita en la Pastora donde iniciaron vida de
comunidad y comenzaron a practicar el segundo Reglamento; Madre
Saint Simón por su parte nunca las desamparó, siempre continuó
orientando con caridad fraterna los primeros pasos de la naciente Obra.

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En marzo de 1899, (2 años y medio después) obtuvieron por intercesión de

San José una casita más adecuada en la Merced, coincidió con este
acontecimiento el permiso del presidente, General Ignacio Andrade, para
proceder con libertad como Congregación Religiosa. Sólo faltaba una
cosa y la más importante: el permiso de la Santa Sede para tener el
Santísimo Sacramento en su casa, sueño que por fin vieron realizado el 24
de diciembre de ese mismo año, recibiéndolo en adoración toda esa
noche y corrido hasta el día siguiente a las 9 de la noche, no cabían de la
alegría, por fin tenían en su recinto la razón y el imán de sus vidas como
ellas le decían.

Nuestra Congregación es hija de un insigne e irreprochable sacerdote con

una profunda experiencia de amor centrado en Jesús Eucaristía: Juan
Bautista Castro y de 7 mujeres valientes que no dieron nunca un paso atrás
hasta dejar bien cimentada esta Obra.

1. María del Carmen Rodríguez Díaz (Carmelita): Madre Juliana del

Santísimo Sacramento.

2. Lucrecia María Antonia del Carmen Figueredo Rodríguez: Madre

Ángela.

3. María Teresa Martina de Jesús Figueredo Rodríguez: Madre Sacramento

4. María del Carmen Mendoza Solar.

5. Rosa Paula Macías Incháuspe.

6. María Luisa Martina de Jesús Landáez Amitisarobe.

7. Carolina Altagracia Gil Domínguez.

Somos pues hijas de la lucha, persecución, perseverancia, fe, por tanto no

debemos tener miedo frente a los retos que la sociedad de hoy nos
presenta. Nuestra fe en el Santísimo Sacramento nos alienta y sostiene y
este amor que recibimos de Él en la Eucaristía es el que queremos seguir
llevando a todas partes.

Igual que hace 125 años, nuestros pueblos están viviendo una situación
complicada, la tierra toda está envuelta en la incertidumbre de una
pandemia que parece no acabar, y que ha hecho evidente nuestra
vulnerabilidad, desastres naturales como consecuencia de nuestros

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descuidos, guerras, injusticias, sistemas de gobierno que intentan borrar a

Dios de las conciencias de sus ciudadanos. Y hoy como ayer la solución
sigue siendo la misma que inspiraste a nuestros queridos fundadores: “Sólo
el conocimiento y amor de Jesucristo en el Santísimo Sacramento,
públicamente reconocido y adorado puede traer la paz y la justicia a
nuestros pueblos”. Esta es la misión que se nos ha encomendado: instaurar
el Reinado de Jesús Eucaristía en todos los lugares en los que tenemos
presencia. Hoy renovamos con vehemencia este compromiso: Queremos
decirte: sí Señor, tus Siervas seguiremos a tus pies para adorarte y llevarte a
todos los rincones de la tierra, hacer conocer al mundo que la
restauración de la humanidad únicamente nos viene de Ti.

Gracias Señor por tantos beneficios recibidos de tu bondad a lo largo de

estos 125 años de historia.

• Homilía de Mons. Raúl Bior Castillo.sdb, Obispo de La Guaira

Después de la Homilía

Renovación de Votos
CELEBRANTE:

▪ Oremos, hermanas y hermanos, a Dios, fuente de toda perseverancia,

en favor de ésta hija suya que hoy va a renovar ante la Iglesia su
Profesión Religiosa.

(Todos oran en silencio durante unos instantes; continúa el Celebrante):

▪ Mira, Señor, a ésta hija tuya, que en tu providencia has llamado a la

perfección evangélica, y concédele misericordioso, que, perseverando
siempre en tu amor, llegue a la meta del camino que con alegría
comenzó. Por Jesucristo Nuestro Señor.

Amén.

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Renovación de Votos Temporales

Yo, Hermana María Cristina Palacios Vilera, en presencia de Dios
Omnipotente, invocando la protección de la Santísima Virgen María y de
San José, libremente renuevo por un año a Dios Uno y Trino, los Votos de
Castidad, Pobreza y Obediencia, conforme a las Constituciones de las
Siervas del Santísimo Sacramento.

Prometo consagrar mi vida a la Adoración Perpetua de la Divina

Eucaristía, trabajar por hacerla conocer y amar, dedicarme a la
evangelización de los pueblos y las sociedades para extender su culto en
el mundo entero.

(Dando un paso adelante concluye):

Renuevo estos Votos confiando en la gracia de Jesucristo Nuestro Señor.

Amén.

Seguidamente se procede a la Renovación de Votos por parte de todas

las Hermanas Siervas del Santísimo Sacramento

Fórmula de la Renovación de Votos

Yo, Hermana N.N. (cada una dice su nombre por separado y continúan
juntamente), en presencia de Dios Omnipotente, invocando la protección
de la Santísima Virgen María y de San José, libremente hago voto a Dios
Uno y Trino, de observar por toda la vida Castidad, Pobreza y Obediencia,
conforme a las Constituciones de las Siervas del Santísimo Sacramento a
cuyo servicio quiero vivir hasta la muerte.

Prometo consagrar mi vida a la Adoración Perpetua de la Divina

Eucaristía, trabajar por hacerla conocer y amar, dedicarme a la
evangelización de los pueblos y las sociedades para extender su culto en
el mundo entero.

(Dando un paso adelante cada una concluye):

Renuevo estos Votos confiando en la gracia de Jesucristo Nuestro Señor.

Amén.

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Oración de los fieles

▪ Por el Papa Francisco, y todos los Obispos de la Iglesia, para que
Dios les dé la sabiduría y la valentía que necesitan para guiar al
pueblo de Dios. Roguemos al Señor.

▪ Por todos los sacerdotes, ministros de Cristo, para que fieles a su

ministerio, reflejen en su manera de vivir lo que celebran en el
sacramento Eucarístico. Roguemos al Señor.

▪ A nuestros Fundadores les pedimos la gracia de ser fieles al carisma

que nos legaron y desde el cielo alcancen la gracia de despertar en
muchos jóvenes el deseo de Consagrar sus vidas al servicio de la
Divina Eucaristía en el Sacerdocio y en nuestra Congregación de
Siervas del Santísimo Sacramento. Roguemos al Señor.

▪ Por nuestra Hermana María Cristina Palacios Vilera, para que el

Señor le conceda la gracia de ser fiel a su vocación e irradiar en el
mundo la alegría de Jesús presente en la Eucaristía. Roguemos al
Señor.

▪ Por Madre María Fátima Vieira, y la Hna. María Clara Vieira, que en
tu providencia hoy celebran un año más de vida, para que sigan
fieles en tu servicio todos los días de su vida, aumenten en sabiduría
y les concedas un día pleno de gozo y bendiciones. Roguemos al
Señor.

▪ Por todos los religiosos y religiosas del mundo entero. Por las
Hermanas de San José de Tarbes y por las Congregaciones religiosas
fundadas en Venezuela y Colombia para que Dios nos conceda, ser
reflejos de su Amor en el mundo entero. Roguemos al Señor.

▪ Por los líderes del mundo, para que al gobernar reconozcan en Dios
la fuente de sus derechos y sus deberes, trabajen unidos para
promover la justicia y el cuidado, especialmente de los más pobres y
vulnerables. Roguemos al Señor.

▪ Por todos los integrantes de nuestros grupos de apostolado:

Adoradoras y adoradores, movimientos infantiles, Tarsicios, Centros
Eucarísticos Educativos, las casas hogar que llevamos en alianza con

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ASOPROGAR. Por nuestros familiares, amigos bienhechores, los que

trabajan en alianza con nosotras y todos cuanto se nutren de
nuestro carisma, para que siempre puedan reconocer en la Divina
Eucaristía la presencia amorosa de Dios en sus vidas. Roguemos al
Señor.

▪ Por toda la comunidad aquí reunida para que la fuerza de la

Palabra que escuchamos y la gracia del Sacramento que
celebramos, nos aliente para dar una respuesta más intensa al
compromiso de extender el Reino de Dios en el mundo. Roguemos
al Señor.

▪ Por los enfermos, especialmente los más vulnerables, para que

experimenten el poder sanador de Dios en su cuerpo, mente y
espíritu. Roguemos al Señor.

▪ Por todos los que anhelamos el Sacramento de la Eucaristía durante

este tiempo, para que Dios bendiga nuestra hambre con una
devoción y amor a Cristo cada vez mayores, que nos impulsen a
compartir ese amor con los demás. Roguemos al Señor.