Información mapa conceptual: Variaciones individuales

Personalidad y temperamento
➢ Es importante comprender las variaciones individuales de las diferentes personalidades
y temperamentos.

Personalidad:
➢ La personalidad se refiere a pensamientos, emociones y comportamientos distintivos
que caracterizan la forma en que un individuo se adapta al mundo.
➢ Algunos investigadores han descubierto que la personalidad es menos estable en la
adolescencia que en la vida adulta (Roberts, Wood y Caspi, 2008).
➢ El mayor grado de cambio en la adolescencia podría estar relacionado con la
exploración de nuevas identidades.

Los cinco grandes factores de la personalidad:

➢ Apertura:
➔ Imaginativo o práctico.
➔ Interesado en la variedad o la rutina.
➔ Independiente o conformista.

➢ Escrupulosidad:
➔ Organizado o desorganizado.
➔ Cuidadoso o descuidado.
➔ Disciplinado o impulsivo.

➢ Extraversión:
➔ Sociable o aislado.
➔ Divertido o sombrío.
➔ Afectuoso o reservado.

➢ Afabilidad:
➔ Sensible o cruel.
➔ Confiado o suspicaz.
➔ Servicial o poco cooperativo.

➢ Neuroticismo (estabilidad emocional):

➔ Calmado o ansioso.
➔ Seguro o inseguro.
➔ Satisfecho consigo mismo o autocompasivo.

➢ Las evidencias sobre la importancia de los cinco grandes factores indican que se
relacionan con aspectos fundamentales de la vida de niños, adolescentes y adultos,
como la salud, la inteligencia, el funcionamiento cognoscitivo, los logros y el trabajo, y
las relaciones (Hill y Roberts, 2016).
 ➢ El principal descubrimiento de los cinco grandes factores de la niñez y la adolescencia
es el surgimiento de la escrupulosidad como principal predictor de la adaptabilidad y la
competencia (Hill y Roberts, 2016).
➢ El segundo factor de pronóstico del éxito escolar es la apertura a la experiencia
(Poropat, 2016).

Interacción persona situación:

➢ Perspectiva que plantea que la mejor forma de conceptualizar la personalidad no es en
términos de rasgos o características personales por sí solos, sino también en términos
de la situación particular.
➢ Las características de la personalidad pueden variar dependiendo de cómo el individuo
conciba y perciba la situación en la que se encuentra.
➢ De acuerdo con esta teoría, en un contexto académico, no se puede predecir quién
demostrará la mejor adaptación, a menos que se considere la situación en la que se
encuentra.
➢ Los rasgos de la personalidad no condenan a un individuo o a un estudiante a
comportarse de cierto modo en cualquier situación, pues el contexto o la situación
también son importantes (Friedman y Schstack, 2016).
➢ Es importante observar las situaciones en las que los estudiantes con diversas
características de personalidad se sienten más a gusto, para de esta forma brindarles la
oportunidad de aprender en estas situaciones. Por el contrario, si se observa que un
rasgo de la personalidad afecta negativamente el rendimiento de un estudiante se debe
pensar en las formas en las que se puede ayudar al estudiante a cambiar.

Temperamento:
➢ Se encuentra estrechamente relacionado con la personalidad y los estilos de
aprendizaje y pensamiento.
➢ Es un estilo de comportamiento de una persona y sus formas características de
reaccionar.
➢ Otra forma de describir el temperamento es poniéndolo en términos de predisposiciones
a la reactividad o a la autorregulación (Bates y Pettit, 2015).
➢ La reactividad es la velocidad y la intensidad a la que un individuo responde a
situaciones con emociones positivas o negativas.
➢ La autorregulación es el grado en que un individuo controla sus emociones.

Clasificaciones del temperamento:

➢ La clasificación más conocida es la propuesta por Alexander Chess y Stella Thomas,
quienes concluyeron que el temperamento se puede clasificar de la siguiente manera:

➔ El niño fácil: Generalmente, tiene un estado de ánimo positivo, establece

rápidamente rutinas regulares durante la infancia y se adapta con facilidad a las
nuevas experiencias.
 ➔ El niño difícil: Tiende a reaccionar negativamente y llora con frecuencia, tiene
rutinas irregulares y se le dificulta aceptar el cambio.

➔ El niño lento para responder: Denota un nivel bajo de actividad, tiende a ser
negativo y presenta una baja intensidad en su estado de ánimo.

➢ Los investigadores demostraron que estos tres grupos son moderadamente estables
durante los años de la infancia.
➢ Otra manera de clasificar el temperamento, se centra en las diferencias que surgen
entre niños retraídos, callados y tímidos, y aquellos que son sociables, extrovertidos y
audaces.
➢ Mary Rothvart y John Bates (2006) afirman que la mejor representación para
caracterizar la estructura del temperamento son tres dimensiones amplias, presentadas
de la siguiente manera:

➔ Extraversión/surgencia: Involucra acercamiento, placer, actividad, sonrisas y

risas. En esta categoría se ubica el niño desinhibido.
➔ Negatividad afectiva: Involucra temor, frustración, tristeza e incomodidad. Los
niños suelen alterarse fácilmente, pueden inquietarse y llorar frecuentemente. En
esta categoría se ubica el niño inhibido.
➔ Control voluntario (autorregulación): Se refiere a niños con mucho control
voluntario, demuestran mucha habilidad para mantener a raya su excitabilidad y
cuentan con estrategias para calmarse a sí mismos.

➢ Las diferencias individuales se originan durante el surgimiento y consolidación de los

estilos de temperamento del niño, como el control voluntario (Bates, 2012).
➢ Las diferencias individuales entre los niños se encuentran en el núcleo de lo que
caracteriza el temperamento.
➢ Los niños no deben ser encasillados en una sola dimensión. Una buena estrategia para
clasificar a un niño consiste en pensar que el temperamento consta de varias
dimensiones (Bates, 2012).

Precisión de ajuste:
➢ Se conoce como precisión de ajuste a aquella correlación de una persona y las
exigencias del entorno con las que el individuo debe lidiar, la cual, puede ser importante
para la adaptación de un niño.
➢ Las características temperamentales de control voluntario, manejabilidad y afabilidad
reducen los efectos de los entornos adversos, mientras que la emocionalidad negativa
aumenta sus defectos (Bates y Petit, 2015)