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ARMADOS HASTA LOS DIENTES

TEXTO: 2 CORINTIOS 10:3-5

Es importante reconocer que nosotros pertenecemos al ejército de Dios, en las escrituras encontramos muy a menudo
las palabras como, ejército, armas, espada, coraza, yelmo, milicias, guerras, etc… Y todo esto tiene que ver con ejércitos
y guerras, si yo comenzara hablar de armas ¿a qué me estoy refiriendo?, a una guerra lógicamente, el cristiano debe de
entender que estamos en guerra espiritual con el enemigo de nuestras almas que es el Diablo y Satanás. Y que llevamos
la de ganar ya que peleamos contra un enemigo derrotado y vencido.

En los tiempos antiguos cuando iban a la guerra: Los soldados: iban armados de ARCOS, flechas, lanzas, espadas, hondas,
escudos, yelmos, protectores de los muslos y otras armaduras. Pero también es Importante reconocer que no estamos
solos, que Dios está con nosotros como un poderoso gigante, (Jeremías 20:11).

El Enemigo; es cierto que está Armado, pero Cristo tampoco dejó a su pueblo desarmado, dice este pasaje de Corintios
“que las armas de nuestra milicia no son carnales, sino que son poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas” así
que si dice que son poderosas, es que son poderosas, ¡bendito sea el Señor!

Fortalezas: (muro, torre, vallado, ciudad amurallada) estas ciudades variaban considerablemente en espesor, altura, y
forma. Los muros sólidos eran de un promedio de 3 m de espesor, pero en su base podían llegar a tener dos a tres veces
más de espesor. Los muros tenían un promedio de 1, 5 m cada uno. En altura los muros variaban de unos 6 m hasta por
lo menos 9 m.

Generalmente los cimientos eran de piedra y los muros mismos de piedra, ladrillo de barro, o ladrillo sobre varias
hiladas de piedra. Podía lograrse una mayor capacidad defensiva agregando un muro exterior distante un tiro de flecha
del muro principal.

Esto es en lo natural, pero en lo espiritual tiene que ver con fortalezas espirituales, que nuestro enemigo el diablo
levanta contra nosotros, para no dejarnos avanzar en nuestro caminar con Dios ya que él sabe que somos un peligro
para el reino de las tinieblas y el infierno, las fortalezas que el Apóstol Pablo menciona en Corintios tiene que ver con
argumentos, pensamientos, tiene que ver con una guerra espiritual que se libra en la mente.

Las Fortalezas pueden ser: Orgullo, tristeza, depresión, temor, incredulidad, división, falta de amor, incomprensión,
infelicidad, baja auto-estima, murmuración, chisme, Fornicación, adulterio, mentira, celo ministerial, duda, falta de
perdón. Y muchas otras cosas más.

Tácticas e Instrumentos Bélicos: En la antigüedad se utilizaban estrategias como la emboscada, las batallas cámpales y
la guerrilla; y los vencedores se repartían los DESPOJOS (Botín de guerra, sea de bienes materiales o prisioneros
humanos, tomado después de una batalla victoriosa). (1 Samuel 17:53).

En Marcos 3:13-15 dice que Jesús llamo a los que él quiso y vinieron a él ¿a cuántos ha llamado el Señor? y ¿cuántos
vinieron a él? Dice más: “…y estableció a doce…”, esta palabra “Estableció” significa: instalar, iniciar, colocar, asentar,
fundar, instaurar, y los estableció para que estuvieran con él, ¿para qué?

Para enseñarles, en otras palabras para prepararlos, ya que no tan solo se iban a enfrentar a sus problemas personales
solamente, sino que también a fuerzas espirituales de maldad en las regiones celestes; el Señor preparó a sus apóstoles
para lo espiritual y lo sobrenatural, después de prepararlos dice que los enviaría a predicar. El versículo 15 dice: “…y les
dio autoridad para sanar enfermedades y echar fuera a los demonios…” Quiero establecer la primera arma poderosa
que Dios ha puesto sobre cada uno de nosotros y esa arma se llama:
1. LA AUTORIDAD

La palabra autoridad significa: Mando, poder, dominio, potestad, prestigio, crédito, legitimidad, influencia.  Autoridad
también tiene que ver con tu testimonio. Tu Testimonio representa tu autoridad, cuanto mejor testimonio tengas mayor
autoridad tendrás.

En Marcos 3:11-12 dice: que los espíritus inmundos al ver al Señor Jesucristo, salían estos dando grandes voces, ¡qué
autoridad, que poder¡ que tan solo ver al Señor salían, bendito sea el Señor; por eso una de nuestras armas en Dios debe
de ser la autoridad.  Un cristiano sin autoridad es un cristiano sin protección, ya que la autoridad que tenemos en Dios
nos protege.

Un cristiano que no tiene testimonio de ser un hombre o una mujer de Dios, ¿Qué autoridad puede tener? Ninguna.
¿Cómo se obtiene la autoridad? Dios da la autoridad, pero cuando te llama, te establece y tomas tiempo para estar
con él. Un cristiano que no ora, ¿cree usted que puede tener autoridad de Dios? La respuesta es NO. Nadie que no
tenga una relación personal con nuestro Señor puede tener autoridad de Dios.

Una persona que no busca de Dios es débil, más bien es presa fácil del enemigo. Pero cuando tienes la autoridad de Dios
reprendes toda tentación, ya que un cristiano que no se somete a Dios es carnal; vamos al libro de los Hechos 19:13. En
este pasaje notamos literalmente como personas que no tenían una relación con Dios, ni tampoco tenían autoridad del
Señor, tampoco tenían testimonio de ser siervos de Dios, ¿Por qué los demonios no les obedecieron? Aunque eran hijos
de un tal Eseva, Jefe de sacerdotes, eran hijos de Ministros, pero ser hijo de alguien importante no te da autoridad.

Venir a la Iglesia no te da autoridad, cantar en el coro no te da autoridad, estar en las danzas no te da autoridad, tocar
algún instrumento no te da autoridad, estar en algún ministerio no te da autoridad. Lo que realmente te da autoridad,
es tener una vida de oración, de devoción, vivir una vida de santidad, sometido a Dios, teniendo un buen testimonio,
eso es lo que te da autoridad para echar fuera demonios.

2. LA ORACIÓN (Hechos 1:14)

Una de las características de una Iglesia poderosa es que esta sea una iglesia que se somete a Dios, que busca al Señor
en oración, no es una Iglesia perezosa, es una Iglesia que tiene una arma poderosa la cual se llama Oración y ayuno.

La combinación del ayuno con la oración puede resultar en una bomba atómica espiritual que echa abajo “las
Fortalezas” espirituales y libera el poder de Dios en su vida y en la iglesia. No hay espíritu que se le pueda oponer a la
Iglesia que ora.

La oración es la base para todo cristiano, el apóstol Pablo dijo en I Tesalonicenses 5: 17 “…Orad sin cesar…” y el Señor
Jesucristo dijo en Mateo 26:41 “…Velad Y Orad…” Nuestro Señor Jesucristo era un hombre de oración, se levantaba de
madrugada a orar (Marcos 1: 35). Hubo momentos en la que el Señor pasaba toda una noche orando a Dios (Lucas 6:
12), por eso lo vemos sanando, liberando a los cautivos con poder, echando a los demonios fuera solo con una palabra y
eso era asombroso hasta la naturaleza le obedecía (Marcos 4:40-41). La oración te da Poder de Dios, te da autoridad, te
da unción, te hace ser sensible al Espíritu Santo para operar bajo su voluntad. La Oración tiene el poder para derribar
fortalezas. ¡Aleluya!

3. ALABANZA Y ADORACIÓN:

Como cristianos debemos de entender y conocer la Importancia de alabanza y adoración, debemos de estar claros que
Dios habita en medio de las alabanzas de su pueblo, la alabanza trae Su presencia, hay plenitud de gozo, hay paz, hay
prosperidad, hay sanidad, hay liberación, hay poder en la alabanza a Dios.
En la alabanza hay milagros; cuando el pueblo alaba a Dios suceden cosas maravillosas, la unción de Dios se derrama y la
unción rompe el yugo. Pablo y Silas fueron libres de la cárcel cuando empezaron a alabar a Dios (Hechos 16:25) y el rey
Josafat también fue libre de un gran ejercito cuando comenzó alabar a Dios, (2 Crónicas 20:1-30) también Gedeón
derrota a los amalecitas cuando toca el shofar o el cuerno del carnero (Jueces 7: 1-25) también Josué cuando toma a
Jericó las trompetas el sonido de los instrumentos trajo liberación, (Josué 6:1-27).

Dios es merecedor de alabanza, Él es Dios grande y poderoso; Salmo 100:1-4, ¡pueblo alaba a Dios! Glorifícalo, porque
cuando tú alabas a Dios el diablo tiembla y huye ante la presencia del Señor.

4. EL NOMBRE DE JESÚS

La cuarta arma poderosa que tenemos los cristianos es el nombre de Jesús, el nombre de una persona representa su
autoridad y poder, y este uso del nombre de Jesús ha sido delegado únicamente y exclusivamente a todos los que creen
en él y viven para él (Lucas 10:17; Marcos 16: 17), cualquier persona puede decir que cree en Jesús, eso no le da derecho
de hacer uso de su nombre.

Creer en él de corazón significa: Obedecer 100% a él; someterse bajo Su voluntad perfecta, esto a la vez implica un
compromiso. Mientras vivas, lo amaras le obedecerás en todo tiempo (1 Juan 2: 4). La palabra de Dios dice que “…por
sus frutos los conoceréis…”, y si usted está haciendo cosas que no van conforme la palabra Dios, no puedes hacer uso del
nombre de Jesús, o no te daría los resultados que corresponden a esa autoridad, ya que estarías deshonrando el nombre
de nuestro Señor Jesucristo, ya que el nombre de Jesús es poder, ¡Aleluya gloria a Dios!

Su nombre tiene autoridad y poder: En 1 Samuel 17:45-47, por ejemplo si yo mando alguno de ustedes a mi casa a pedir
algo a mi esposa en mi nombre ¿creen ustedes que ella se los daría?

Es muy posible que sí, ya que lo están haciendo usando mi nombre, ya que mi nombre representa mi autoridad en mi
casa, así que nos damos cuenta que no todos podemos hacer uso del nombre de Jesús, como lo vimos en el pasaje
de Hechos 19:13-16.

En Hechos 3:6, Pedro dijo: “…En el nombre de Jesús levántate y anda y el cojo se  levantó  y anduvo…” En Hechos 8:4-
7 también Felipe usó el nombre de Jesús para sanar a los enfermos, también el apóstol Pablo en Hechos 14: 8, ya que el
nombre de Jesús tiene poder. ¡Aleluya!

5. LA PALABRA DE DIOS:

Jesús usaba la palabra como un arma contra el enemigo; por ejemplo cuando ayunaba en el desierto llegó el diablo para
tentarle, Lucas 4:1-12:3 “…Entonces el diablo le dijo: Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan. 4
Jesús, respondiéndole, dijo: Escrito está…” (Deuteronomio 8:3) (Respondió con la palabra): “…No sólo de pan vivirá el
hombre, a sino de toda palabra de Dios…”

¿Qué crees? El Señor podía no solo convertir las piedras en pan sino que también al diablo convertirlo en jamón, sin
problema. “…5 Y le llevó el diablo a un alto monte, y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra. 6 Y le dijo el
diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien quiero la doy. 7
Si tú postrado me adorares, todos serán tuyos. 8 Respondiendo Jesús, le dijo: Vete de mí, Satanás, porque escrito está…”
(Deuteronomio 6:8): “…Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás…”

En este tiempo diríamos la Biblia dice: “…b 9 Y le llevó a Jerusalén, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres
Hijo de Dios, échate de aquí abajo; 10 porque escrito está: a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden; c 11 y, En
las manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra. d 12 Respondiendo Jesús, le dijo: Escrito esta
también…” (Salmo 91: 11- 12): “…No tentarás al Señor tu Dios…”
En Santiago 4: 7 dice: “…Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros…” ¿Con qué vamos a resistir al
enemigo?, con la palabra de Dios la cual es viva y eficaz (Hebreos 4:12) la palabra de Dios es una Arma poderosa contra
el enemigo, léela, estúdiala, y vívela, porque de ella también depende tu protección.

6. La sexta y última Arma que quiero enseñarles es la SANGRE DE CRISTO.

Hay más armas, pero con estas tienes una mayor comprensión sobre tu vida espiritual, y puedes notar que no estas
desarmado contra el enemigo, ya que Dios te ha dejado poderosas armas para la destrucción de fortalezas.

Murallas pueden ser reventadas por el poder de Dios en la vida tuya, y a través tuyo en otras personas que están y viven
atadas por el poder y la mentira del enemigo, ya que la sangre de Jesucristo y su sacrificio en la cruz del calvario venció
al Diablo (Colosenses 2: 15) “…y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando
sobre ellos en la cruz del calvario…” (Contar testimonio sobre la chica que iba al concierto de Rock).

Dice Efesios 1: 7 que la sangre de Cristo nos redimió; Apocalipsis 12:11 que hemos vencido por la sangre de Cristo (1
Pedro 1: 18- 19, 1 Juan 1: 7, Apocalipsis 1:5).

Hay poder en la sangre de Cristo, usa tus armas que poderosas son en Dios. Dios te Bendiga.

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