A pesar de ciertos problemas económicos, no hay que olvidar que Francia ocupa la
primera fila(rango) europea en agricultura (sector primario) y la segunda fila(rango)
mundial. En Europa, la puesta en ejecución de la nueva política agrícola común (PAC) animó la reducción de los excedentes de producción y abrió el mercado europeo en países terceros. Solamente el mercado europeo presenta riesgos, y muchos productores temen la vuelta a discutir de las protecciones y de las subvenciones de las que gozaban. No obstante los nuevos instrumentos(utensilios) financieros se forman en Europa, pero pocos agricultores creen en la complementariedad de estos instrumentos(utensilios) con las protecciones de las que gozaban. Además, las rentas más bajas se sitúan en las regiones principalmente rurales. Existe en efecto un problema agrícola: la productividad media agricultores es mucho inferior a la de los agentes de otros sectores de la economía (industria y servicios). Resulta inevitablemente una mediocridad relativa de las rentas, que no satisface los interesados, y por consiguiente, la proporción de activos familiares disminuye. Sin embargo, la parte del sector agroalimentario se volvió más o menos estable desde una decena de años gracias a una tasa de crecimiento vecina de la del conjunto de la economía.
A. Las culturas agrícolas.
Según el Ministerio de la Agricultura y del Melocotón(Pesca), la agricultura cubre 33 millones de hectáreas sobre los 55 millones del territorio metropolitano francés, y 7 millones de hectáreas representan el territorio no agrícola (suelos edificados, espacios naturalezas, ríos, lagos, etc.). Sin embargo, la superficie agrícola utilizada disminuye desde el 1950. También, la reforma del PAC modificó el uso del suelo y acentuó la regresión cultivada de las superficies, compensada por una progresión de las superficies yermas (yermas). La mecanización y la motorización permitieron aumentar las producciones, y el Estado animó la concentración parcelaria de las tierras (intercambio de terrenos entre propietarios, lo que permite reunir campos dispersos). En nuestros días, las grandes explotaciones (de más de 50 hectáreas) cultivan más del cuarto de la superficie agrícola. Francia pues redujo sus pequeñas explotaciones, y el éxodo rural animó la concentración de las explotaciones. Las culturas en Francia conocen un auge, sobre todo en el dominio de las culturas destinadas a alimentar el ganado. La producción de los cereales constituye una renta que importa para Francia: La principal cultura cerealista es el trigo (Francia está en la primera fila(rango) europea en la producción dublé), luego la cebada y la avena. Las culturas industriales que dominan son las de la manzana de tierra, de la remolacha azucarera, de oleaginoso (plantas y es tirado(sacado) su aceite) así como los de tejidos(textiles) (lino, cáñamo). La vid(viña) permanece una de las culturas más grandes tradicionales de Francia. Los vinos de consumo corriente principalmente son producidos en Languedoc mediterráneo. Los vinos de calidades vienen sobre todo del Bordelés, de Borgoña, del valle del Loira, de Alsacia y de Champaña.