Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Tú no haces el ridículo:
Si por buscarte pleito a alguien le da,
Tú en lugar de un artículo
Que nadie leerá
Le sueltas dos patadas y ya está.
Mi próximo poema
Para ti, será mucho más bonito:
Por hoy, por darme el tema
Para el presente escrito,
¡mil gracias, queridísimo burrito!"
Trina
Todo està en calma, la noche se ilumina
con una luna de marfìl y oro
las ranas y los grillos forman coro
el aire huele a tierra de pimpina.
Admiro tu entereza
De perro orgulloso que no cambia su destino
De modesta pobreza
Por el perro fino,
Casero, impersonal y femenino.
Y en tanto él divierte
-Estúpido bufón- a las visitas,
a ti da gusto verte
con qué gracia ejercitas
tus dotes de Don Juan con las perritas...
La ciudadana escena
Cruzas tras tu dietético recurso,
Libre de la cadena
Del perro de concurso
Que ladra como haciendo algún discurso.
Era estar en el campo y descubrir que hoy amanecieron maduras las cerezas.
Hans solía contarle fantásticas historias del tiempo en que los témpanos eran
Hans tenía una caja de música en el corazón, y una pipa de espuma que Jenny le
diera.
A veces los dos salían de viaje por rumbos distintos.
Y es que cuando Jenny cantaba, era el amor de Hans lo que cantaba en ella.
Una vez hizo Hans un largo viaje y a los cinco años estuvo de vuelta.
Y fue a ver a Jenny y la encontró sentada, juntas las manos, en la actitud tranquila
de una muchacha ciega.
Jenny estaba casada y tenía dos niños sencillamente hermosos como ella.
el Ruiseñor de Suecia.
CREDO
Marilyn en la morgue
En el año ya lejanísimo
Mil novecientos treinta y dos,
Cuando en las últimas pianolas
Rodaba aún el charlestón
Y en las pantallas fulguraba
La mirada de Clara Bow,
Y mi hermana tenía un novio
Que había estado en Nueva York
Y yo tenía doce años
Y era un muchacho soñador
Y me bastaba verlo a él
Con su flagrante traje sport
-saco a rayas, gorra a cuadros,
Pantalón a lo Harold Lloyd-,
Y oí narrar sus aventuras
De fogonero
En un vapor
Y lavaplatos en Maniatan
Y bailarín de un music hall;
En esa época que digo
-¡era en el año treinta y dos!-
Ah me bastaba sólo eso
-¡yo era el tonto que aún soy!-
Para subirme a mis ensueños
Como quien sube a un ascensor.
Desde entonces ando en el mundo
Como anduviera Dreamy-Boy,
Viviendo en sueños la aventura
Que la vida nunca me dio.
Visto harapos de vagabundo,
Mi equipaje es mi corazón,
Viajo en los trenes de noche,
No tengo un diez para un hot dog,
Pero mastico mi esperanza
Como quien masca un chewing-gum
Y si me mata la tristeza
Echo una estrella en el juke box.
Nadie me espera, como nadie
Cuando salí me dijo adiós.
De dónde vengo no me importa
Como tampoco a dónde voy.
Cierto que soy un muerto de hambre,
Un vagabundo, un polizón,
Con el sombrero agujereado
Y los zapatos sin cordón,
Pero quien niega que soy libre,
Que soy tan libre como Ford
Y que a mis pies tengo la tierra
Como un magnífico balón
Para jugar al football-rugby
Y así olvidar de que soy:
De que soy un hombre sin casa,
Un hombre paria, un Dream-Boy,
Un John Smith desamparado
De quien se ha olvidado el amor,
Un prisionero de ciudades
Que a sí mismo se encadenó
Y que se arrastra por los trenes
De una prisión a otra prisión.
Y aquí está América a mis pies
Como un magnífico balón;
Puedo jugar con ella al rugby
O, si prefieren, al béisbol.
Un Rockefeller es el pitcher
Y un Rockefeller es el coach.
Pero juguemos a otra cosa,
Porque soy mal jugador,
Y lo que quiero con América
Es encontrarle el corazón.
Por hallárselo ando rodando de la Florida a Nueva York.
En Alcatraz viví cien años,
Tuve una novia en Oregón,
En Carolina fui John Brown
Y en Alabama fui Jim Crow;
En Chicago fui caletero
Y en Amalfi morí de amor;
Fui bailarín en Nueva Orleáns
Allá en el año treinta y dos,
Y ahora en un tren de madrea
Voy de Pittsburg a Nueva York
Con la esperanza ya perdida
De descubrir en cuál rincón
Dejó la América de Lincoln
Olvidando su corazón.
Qué contaré cuando regrese
A aquel mundo del treinta y dos
Cuando bastaba que mi amigo
Me saludara: -Hello boy-
Para que yo, muchacho tonto
Hiciera igual que Dream Boy
Y me subiera a mis ensueños
Como quien sube a un ascensor,
Para llegar a un mundo mágico
En donde estaba Nueva York
Ah, Marilyn, tu cruel América
Tu desdichada gran nación
Te ha destrozado entre sus manos
Como un paquete de pop corn.
Y allí estás, pálida manzana
Bajo tu luna de neón.
Al levantarse el telón
es San Miguel quien lo sube;
llega Dios en una nube
y así empieza la cuestión.
DIOS
SAN MIGUEL
-¿Terminasteis el Edén?
DIOS
A propósito, Señor,
empeñado en sostener
hoy con vos una entrevista,
por aquí estuvo el nudista
que fabricasteis ayer.
DIOS
SAN MIGUEL
DIOS
(Risueño)
SAN MIGUEL
SAN MIGUEL
-¡Atención, operador!
Conecte con el Vergel,
y avísele al Tercio Aquel
que lo llama el Director.
OPERADOR
ACTO II
EL VIEJO
ADAN
DIOS
tiene animales
de los más finos:
sólo cochinos
hay más de cien.
Y en cuanto a plagas
esto es muy sano:
sólo hay gusano,
chipo y jején.
DIOS
DIOS
-Hágase en un santiamén
la criatura encantadora
que va a coger desde ahora
por el mango la sartén!
ACTO III
Y a la siguiente semana
ya arreglados sus asuntos,
salieron a darle juntos
una vuelta a la manzana.
EVA
ADAN
EVA
-¿Y pimentones?
ADAN
-¡Tampoco son!
EVA
SAN MIGUEL
MANGUERA
EVA
-¡Quiero joyas
y oropeles!
¡Quiero pieles
y champán!
¡Quiero viajes
por Europa!
¡Quiero sopa
de faisán!
¡Quiero un novio
que se vista!
¡No un nudista
como Adán;
EVA
ADAN
EVA
ADAN
(llorando)
Yo soy tu burla, tu guasa,
y en cambio con la serpiente,
te muestras tan complaciente
que ella es quien manda en la casa.
(filosófico)
EVA
ADAN
-¡No quiero!
EVA
ADAN
EVA
ADAN
EVA
ADAN
(Y arrodillándose allí,
como un moderno cristiano,
coge la fruta en la mano
se la come y dice así)
ADAN
(come llorando)
AUTOR:
Y así acaba el astrakán
donde en subidos colores
se les mostró a los lectores
la torta que puso Adán".
Se le esponja el camisón,
y el mozo que la ha floreado
salta: -¡Permiso, cuñado,
que es conmigo la cuestión!
Luego se ajusta el calzón,
la engarza por la cintura
y con tanta donosura
se le mueve y la maneja
que la negra lo festeja
con una nueva figura.
Yo la he visto en Guayabal
y también en San Femando.
Yo vengo el Llano cruzando
de paso para el Yagual,
y aunque decirlo esté mal
por parecer pretensión,
desde Guáchara al Cajón,
de Cazorla a Palo Santo,
¡no hay negra que baile tanto
como mi negra Asunción!
RETABLILLO DE NAVIDAD
De su esposo en compañía,
soñolienta y fatigada,
por ver si les dan posada
toca en las puertas María.
El le dice: -Esposa mía,
ten calma, vamos a ver...
Nos abrirán al saber
que te encuentras en estado
y un lecho busca prestado
tu niño para nacer.
A la casa de un pastor
van por fin José y María;
sólo piden hostería
para que nazca el Señor.
Pero hay allí tanto amor
por los buenos peregrinos,
que la pastora sus linos
abandona en el telar
y al punto les va a buscar
cuajadas, panes y vino.
Mientra se oía
desde una rosa
la deliciosa
marcha nupcial
que con sus notas
creaba un ambiente
completamente matrimonial.
Dos lombricitas
de edad temprana
cierta mañana
del mes de abril
solicitaron
en la pradera
al grillo, que era
jefe civil.
Al punto el grillo
con dos plumazos
ató los lazos
de aquel amor.
Las lombricitas
se apechugaron
y se mudaron
para una flor.
Tras una vida
dulce y risueña,
con la cigueña
las premío Dios.
Y cuando abrieron
las margaritas,
las lombricitas
ya no eran dos.
La primorosa
recien nacida
pasó la vida
sin novedad.
Y al cuarto dia
de primavera
ya casi era
mayor de edad.
Quiso ir entonces
a una visita,
y su mamita
le dijo:-¡No!
Mas de porfiada
salió a la esquina
y una gallina
se la comió