UNIVERSIDAD COLEGIO MAYOR DE NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO

FACULTADES DE CIENCIA POLÍTICA Y GOBIERNO Y DE RELACIONES INTERNACIONALES

MATERIA: ÉTICA
PROFESOR: JULIÁN CUBILLOS
ESTUDIANTE: JUAN FELIPE CHARRY DURÁN
AGOSTO 22 DE 2016

EXPLICACIÓN AL UTILITARISMO
(Informe de lectura sobre “El utilitarismo”, de John Stuart Mill)

El autor inicia su texto mencionando que hay pocos factores que permiten que el desarrollo del
conocimiento no vaya en la dirección que se espera; esto ocurre desde los principios de la
filosofía, donde el principal problema del pensamiento especulativo ha sido la cuestión relativa
de los fundamentos de la moral. El problema ha tenido una magnitud tan grande que
históricamente se ha encargado de separar las mentes consideradas más sabias, o bien sea,
privilegiadas en grupos cómo sectas y escuelas generando enfrentamientos entre estas. Pero los
enfrentamientos por la cuestión relativa de los fundamentos no se queda en el pasado aún, Mill
menciona que pasados más de dos mil años siguen existiendo los enfrentamientos entre las
escuelas de pensamiento.

El escritor británico prosigue y escribe que su intención en el texto no es otra más que tratar de
aportar, en el tamaño posible, al entendimiento de la teoría utilitarista, o bien sea, de la felicidad.
Mill menciona que “Para demostrar que algo es bueno debe mostrarse que constituye un medio
para conseguir algo que se admite que es bueno sin recurrir a prueba”, poniendo como ejemplo
que la medicina es buena para llegar a la salud y luego plantea esta pregunta: ¿en qué manera se
puede exponer que la salud es buena? A la anterior pregunta le añade otra incógnita,
mencionando primero que la música es buena porque genera placer, pero ¿existe prueba alguna
de que el placer es bueno? Con ese par de preguntas el autor llega a la conclusión de que si
existiera una fórmula que demuestre que lo bueno por naturaleza es bueno y que el resto de cosas
buenas no lo son, puede ser aprobada o rechazada sin depender de lo que comúnmente se da a
entender como prueba.

Mill hace una crítica a la masa común, específicamente a los escritores, tanto de periódicos como
de libros de peso, cómo él lo denomina. La crítica que hace el británico es que le dan un mal uso
al término utilitarista y que se apoderan de esta palabra sin tener idea de la palabra a excepción de
la manera en que suena esta, donde le han dado el significado de pérdida de placer en cualquiera
de sus formas. El autor dice que los autores que sí han utilizado correctamente el término no lo
tratan de explicar cómo algo ligado al placer, sino, como el placer mismo.

El autor abre el final del texto preguntando si el utilitarismo es un credo que permite timar a
nuestra conciencia y que da argumentos para obrar mal, a la que responde que estas son simples
excusas que con frecuencia exponen diferentes doctrinas que dan como hecho en la moral que
haya consideraciones enfrentadas. Mill concluye el texto diciendo que ningún credo tiene la culpa
de que las normas de conducta no puedan ser hechas sin permitir excepciones y que ningún hecho
pueda ser siempre juzgado cómo condenable, sino que es culpa de la misma naturaleza.