UNA IDEA POR CARTAGENA…. ¿PEAJES SE VAN O SE QUEDAN?

Estamos en el hipotético año 2.021, después de

mucho tiempo se cumplió la TIR necesaria y se
acabó una de las concesiones de peajes en
Cartagena, por esas mismas fechas y después
de muchos ires y venires jurídicos, la propuesta
para una segunda concesión no se dio y los
peajes retornaron al fin para la Alcaldía de
Cartagena. Muchos exclamarán: “¡Por fin ya se
acaban los peajes!”, pero créanme lo mejor es
dejarlos, algunos me tildarán de loco, por lo que acabo de escribir, pero no, aquí les explicaré
porque es la mejor decisión que puede tomar la actual administración.

¿POR QUÉ?

Cartagena es una ciudad con una malla vial precaria, con muy pocas vías que se puedan considerar
avenidas y con un recaudo muy bajo en temas impositivos propios. Para que la ciudad sea más
competitiva, necesita si o si de un corredor de carga que le permita tanto a sus empresas como a
su puerto ser competitivos frente a otras ciudades del país. Dicha vía, una vez se acabe la actual
concesión, difícilmente va a poder ser mantenida con estándares mínimos con los escasos recursos
que maneja la Secretaría de Infraestructura, por lo tanto, se deben generar recursos adicionales
para su mantenimiento, de ello dependerá
la competitividad de muchas empresas y
finalmente la estabilidad de muchos
empleos. Concluimos que como primer
punto: COMPETITIVIDAD Y EMPLEO.

Hablemos ahora de otra dimensión a tener

en cuenta: los excedentes o utilidades. Si ya
no va a existir una empresa de capital
privado o concesión que necesite gran parte
de las utilidades para repartirla entre las
personas socias de la concesión, significa
que dichos excedentes serán para el distrito
de Cartagena de Indias y la idea es que dichos excedentes sean reinvertidos única y
exclusivamente en la construcción de nuevas vías principales, avenidas y puentes para mejorar la
movilidad, por ejemplo: en puentes, para cambiar aquellos que tienen aproximadamente 100 años
y en obras de infraestructura viales capaces de cambiar la precaria y caótica movilidad cada vez
peor que vivimos en la ciudad. Estas nuevas avenidas son costosas, puesto que en su gran
mayoría significan la compra de predios que cortan los tramos de muchas calles en la ciudad.
Unos ingresos por peajes le representarían a la Secretaría de Infraestructura unos nuevos recursos
propios para desarrollar un verdadero plan vial ambicioso, que le de la caja suficiente para
desarrollar obras que desembotellen a la ciudad y que permita la construcción de avenidas,
transversales y longitudinales, y también de terminar vías primordiales como la perimetral y la
conexión de esta con otras vías costeras como la marginal de Juan Angola, la marginal del Lago, la
Avenida del Lago, y otros proyectos como la circunvalar de la popa, que en este momento son
inexistentes. Los recursos ordinarios de la Secretaria de Infraestructura se pueden seguir
utilizando para la pavimentación de vías menores internas, aquí podemos definir como segundo
punto: MOVILIDAD y DESARROLLO.

Pero muchos dirán: “El Alcalde William Dau prometió

quitar los peajes en su discurso de candidato”. Y si la
idea es que los peajes le sean cobrados de manera
unánime a los camiones y vehículos comerciales, pero
también a los vehículos livianos con placas de otras
ciudades, en definitiva, el premio es para los habitantes
de la ciudad que tengan matriculados sus vehículos
automóviles, camperos, camionetas y livianos en general
en Cartagena, ellos no tendrían que pagar peajes y a su
ves sería conveniente articular una campaña agresiva por parte del DATT para que los habitantes
de Cartagena con vehículos con placas de municipios vecinos u otras ciudades trasladen y
radiquen en la ciudad el pago de sus impuestos.
He aquí entonces una doble salvación, el DATT que
afronta una dura realidad financiera tendría la
posibilidad de trasladar y recaudar el pago de
impuestos vehiculares de muchísimos vehículos
que, con placas de municipios como Turbaco,
Arjona, Clemencia, Sincelejo, Barranquilla o incluso
Bogotá, que se movilizan un 100% en Cartagena y
actualmente ese recaudo se diluye a otros
municipios. En definitiva, el alcalde Dau puede
escribir sobre mármol que le quitó el peaje a los
Cartageneros, al mismo tiempo salvar al DATT con
mayores ingresos y que Cartagena no siga siendo la
caja de los tránsitos de municipios vecinos. A este tercer punto podríamos designarle:
CUMPLIMIENTO Y SALVACION.
En conclusión, si queremos ver el desarrollo vial de la ciudad, mantener la competitividad de la
misma, fomentar la creación de nuevos empleos y que la actual administración cumpla con sus
promesas de campaña, lo mejor es: ¡DEJAR LOS PEAJES!

Fuentes de fotos: Caracol, Consejo Gremial de Bolívar, Cámara de comercio de Cartagena, Placas
Colombia, DATT

Búscanos en YouTube como: Una Idea Por Cartagena

Cecil Alfonso Botero Ballestas