Está en la página 1de 38

En

La Zona de Dios

Descubriendo la voluntad de Dios para tu vida



Por

Pedro Luis Adames Valdez


Derechos reservados 2017 Ministerios Pedro Luis internacional
En la Zona de Dios
Descubriendo la voluntad de Dios para tu vida
Impreso en los Estados Unidos de Norte América
Diseño de Portada Por: Zainab Amin

Todos los derechos reservados. Este libro está protegido por las leyes de derechos de autor de la Republica
Dominicana y todo el mundo.
Este libro no puede ser copiado o reimpreso para fines lucrativos. El uso de frases y párrafos puede ser
usado con la previa autorización de su autor.
Los permisos serán otorgados por solicitud. El autor garantiza que todo el contenido es original y no
infringe la ley contra ninguna otra literatura escrita.
Todas las citas bíblicas fuero extraídas de la Nueva Versión internacional.


Para contactar al autor:

Web: https://ministeriospedroluis.com
E-mail: info@ministeriospedroluis.com
Celular: 8492208034


Otros libros por Pedro Luis Adames Valdez:
Tiempos de Victoria
Orando con Poder
Oraciones que abren los cielos

El Poder de Un Sueño
El Poder del Rechazo
Onesima
Semillas de Poder
Desiertos y Camellos
Cómo usar tu dinero sabiamente
Las Palabras de mi Padre


Descargue algunas de las apps de nuestros
ministerios:
Radio Voz de esperanza HD:

Para Itunes https://apps.apple.com/us/app/radio-voz-de-esperanza-
hd/id1502431817?l=es


Para Google Play https://play.google.com/store/apps/details?
id=com.stream305.radiovozdeesperanzahd

Ministerios Pedro Luis Internacional:

Descarga la app de Ministerios Pedro Luis en Google Play


https://play.google.com/store/apps/details?id=com.ministeriospedroluis.app
Índice

Dedicatoria
Agradecimientos
Prefacio
Introducción
Capítulo 1 En el mismo centro de su voluntad
Capítulo 2 En busca del sueño americano
Capítulo 3 Tocando fondo
Capítulo 4 Oraciones sin respuesta
Capítulo 5 Activando el cumplimiento de la palabra de Dios


La voluntad de Dios no nos llevará
donde la gracia de Dios no nos pueda
sostener

Billy Graham
Dedicatoria

D edico este libro a todos los creyentes que están en búsqueda de la voluntad de Dios para sus vidas.
Pese a que muchos duermen y nunca descubrieron la voluntad de Dios para sus vidas, quiero que usted sepa
que Dios te ha escogido para cosas grandes.

Alberga la esperanza en tu pecho y sigue enfocado en tu propósito.


Agradecimientos

Quiero agradecer a cada persona que ha creído en lo que Dios me ha dado.


Mis dones no son nada sin los recursos que confían y creen en mí.
A mi esposa Alba y mis hijos Abi, Amiel y Abiel. Gracias por ser mis hijos.
Gracias a cada hermano de la Comunidad de Fe en Puerto Plata, trabajar con
ustedes me hace muy honrado.

Gracias a mi increíble editora quien hace posible que mis escritos sean más
legibles.
A cada persona que colabora con nuestro ministerio, muchas gracias. No puedo
dejar mencionar a la hermana Gladis Ruiz, quien siempre nos ayuda a llevar la
palabra de Dios por medio de la televisión.

Prefacio

Escribí este libro para ayudar a millones de personas a encontrar y entender la


voluntad de Dios para sus vidas.
Aunque he pasado la mayor parte de mi vida sirviendo a Dios y ocupando
grandes posiciones a nivel local e internacional, fue una gran necesidad
descubrir la voluntad de Dios para mi vida. Sabía que Dios me amaba, y me
sentía feliz al servir y ayudar, pero en lo profundo de mi ser quería saber lo que
Dios tenía para mí y dónde quiere Dios que esté en este mismo momento.
Crecí en un hogar disfuncional, mi padre se fue de casa siendo yo muy joven,
pero gracias a Dios mi padrastro, siendo un gran hombre de Dios me ayudó en
mi fe. Sé que esa fue la voluntad de Dios para mi vida porque pude conocer a un
padre real como nuestro rey de reyes.
Me expulsaron de la casa de mis padres y pasé mucho tiempo divagando
buscando cómo estabilizarme, aun en ese pasado de penurias creo que era parte
de la voluntad de Dios para mi vida y todo esto me ayudó a fortalecer mi espíritu
y a formar mi carácter.
Siempre me molestó el hecho de no tener conmigo a mi padre verdadero, pero
aun así sé que la voluntad de Dios estaba controlando toda mi vida, aunque a
veces me desviaba de la fe cayendo en depresiones y preocupaciones extremas.
Aprendí a ver a Dios obrar aun cuando las situaciones adversas no me
agradaban, ¿a quién le gusta acaso pasar momentos difíciles?
Dios ha tenido misericordia de mí y espero que este pequeño testimonio y mi
perspectiva de la voluntad de Dios y cómo descubrirla puedan alumbrar tu
entendimiento y entres en la zona de Dios y hagas su voluntad. Amen.
Introducción

Hacer la voluntad de Dios es una acción compleja.


Como seres humanos, nuestra tendencia es caminar bajo nuestros propios
instintos.
Adán caminaba bajo la voluntad de Dios hasta que el pecado interrumpió su
santidad e inocencia. Todo cambió en el mismo momento que Adán y Eva
pecaron. La amargura y la dificultad almática comenzó a traumatizar sus vidas y
a limitar su libertad.
Desde entonces, los seres humanos son direccionados sin rumbo, como barco a
la deriva.

Dios siempre con su amor y ternura de Padre eterno y siempre compasivo busca
hombres y mujeres que le sirvan y caminen con él sin reservas ni medidas.
Usted podrá pasar toda la vida buscando la felicidad, pero no la encontrará si no
recibe a Jesús como su salvador y señor.
Solo Jesús puede darnos la paz y la verdadera felicidad.

Juan 14:27 (v NBL)


La paz les dejo, mi paz les doy; no se la doy a ustedes como el mundo la da.
Dios nos da su paz abundante y el descanso espiritual que necesita nuestra alma.
No camines sin rumbo, aférrate a los senderos de la luz.
La luz de Jesús disipa las tinieblas, alumbra nuestro camino y afirma nuestros
pasos.
Juan 8:12
Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no
andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.
En las siguientes páginas, usted aprenderá a conocer la voluntad de Dios para su
vida por medio de cada problema, dificultad y dolor que atraviesa.

No hay desperdicios en las temporadas que cada uno de nosotros


experimentamos.
Si yo pude ver la voluntad de Dios en cada una de nuestras experiencias, usted
también verá a Dios en su propia experiencia.
Dios usa cada uno de los desafíos que enfrentamos para sacar propósito eterno.
En la zona de Dios nos adapta a cambios divinos que nos catapultan a destinos
que están reservados para nosotros desde antes de la fundación del mundo.

Lo más importante es la voluntad de Dios para tu vida, la voluntad de Dios es su


zona, la zona de Dios es su voluntad para nosotros y allí debemos estar.
Dios ha preparado cosas para usted, y quizás no te gusten, pero son aquellas que
están diseñadas para dimensionarte en los propósitos eternos de tu creador.
Solo abrazando los planes de Dios y su voluntad seremos bendecidos a largo
plazo.

Puede que algunas experiencias puedan parecer te vayan a hacer bien y en el


futuro te puedan herir, y por eso es que Dios trae cambios de repente y no
entendemos por qué hasta que al final vemos como Dios nos libró de un final
funesto.
Dios usará este libro para darte dirección, fortaleza y frescura espiritual.




Capítulo 1
En el mismo centro de su voluntad

Un pastor de la hermosa isla de Bahamas me propuso iniciar una obra en la Isla
Turcas y Caicos. Su oferta para mí fue una gran oportunidad y pensé que Dios
mismo me estaba llamando a trabajar fuera de mi país.
En ese momento yo no estaba trabajando y mi familia estaba sufriendo las
consecuencias de mis errores.
Le entregué el pasaporte al obispo de Bahamas y esperé hasta que pude pedir mi
visado en las oficinas de migración de Provideciales.
Dios me había hablado de un tiempo específico donde estaría en un país
diferente plantado una iglesia, y qué mejor manera hay de experimentar qué se
siente hacer la obra de Dios como ser pastor en el extranjero.

Después de algún tiempo, pude viajar a las Islas Turcas y caicos y cogimos un
vuelo hacia una de las islas más hermosas del caribe: “Las Islas Turcas Y
Caicos”, destino de muchas estrellas del cine americano, y comencé mi trabajo
como pastor hispano en la iglesia Cornerstone healing centre.
No conocía la complejidad de ser pastor, pero el Obispo Darville Williams me
instruía cada día con paciencia sobre cómo ayudar a la gente
Una ciudad con una población de 23 mil habitantes y con una extensión de 98
km2 no era el lugar de mi preferencia, especialmente cuando en menos de un día
cualquier persona puede conocer la isla conduciendo su auto.
Ya había visitado países más grandes y fue difícil para mí acostumbrarme a un
lugar tan pequeño.
Algo que no olvido de la gente de las Islas Turcas Y Caicos es la generosidad y
su reverencia a los asuntos espirituales.
Es una cultura visitar la iglesia cada Domingo, hasta el más perverso de la
ciudad puede ser visto adorando el Domingo en la mañana.

Fue de mucho provecho para mí trabajar en una isla donde el idioma inglés era
oficial, ya que pude practicar y ampliar mis conocimientos en este idioma.
Para mucha gente, llegar a esta isla hermosa por naturaleza sería llegar al
paraíso, pero no para mí, que venía de una las playas más hermosas en La
Ciudad de Puerto Plata.
Yo estaba tratando de escapar de mi realidad, quería un cambio y todo lo que
llegaba a mi camino con la apariencia de ofrecerme un mejor cambio venía de
Dios.
Lo más difícil de mi situación era tener que ver el rostro de cada miembro de mi
familia, un rostro de insatisfacción y cualquier salida a esta realidad quise
aprovecharla.

Por eso acepté la oferta de viajar lejos de mi familia para ofrecerle un mejor
futuro.
Yo estaba seguro de mi llamado, pero no de si era mi tiempo para aceptar un
trabajo conforme a mi llamado.
“Si aprendes a discernir el tiempo de obedecer tu llamado, podrás evitar
grandes dolores y podrás avanzar”.
Por muchos años había viajado por América del Sur y América Central llevando
un mensaje de esperanza, pero eso no me calificaba para ser pastor principal del
nuevo ministerio hispano en la región caribeña.
El Obispo Darville fue muy paciente y me ayudó a aprender cosas que no
aprendí en el seminario teológico .
Aprendí muchas cosas, pero las mejores para mi fueron las siguientes:
Escuchar a las personas, dedicar tiempo a la oración, hacer ejercicios, y llevar
una dieta saludable y balanceada.

Ya me había enamorado de mi nuevo empleo y cada día disfrutaba ayudando a la


gente y expandiendo la obra de Dios.
Llegar a las Islas Turcas y Caicos se había convertido para mí en la zona de
Dios, ya para mí esta era la voluntad de Dios.
La voluntad de Dios para mí era salir de dificultad, viajar, brillar y prosperar. No
deja de ser cierto que Dios quiere lo mejor para nosotros, pero eso no significa
que no pasaremos por temporadas de luchas y tribulaciones.
Muchos confundimos estar en la voluntad de Dios con estar bien, en bienestar.
Aprendí que estar en bienestar no es sinónimo de estar haciendo la voluntad de
Dios.
Estar ocupado, ejerciendo algún tipo de ministerio, no significa que estamos en
la voluntad de Dios. Se puede estar ocupado en el Reino de Dios y perder una
relación de comunión con el Rey del Reino.
A veces confundimos nuestra zona de confort con la voluntad de Dios y
convertimos esa desobediencia en la zona de Dios para nuestras vidas.

Yo había tratado de huir de mi realidad y me escondí en mi zona de confort y la


convertí en la zona de Dios para mí, ya que en mi equivocada opinión ese era el
centro de la voluntad de Dios para mi vida.
Huir de los procesos de dificultad no evita que seas probado. Cuando tu prueba
no ha expirado, te seguirá donde quiera que vayas.
Aunque estés en dificultades, eso no significa que morirás en dificultades, ya que
tu prueba tiene fecha de anulación y Dios te ha llamado a cumplir tu cometido.
A veces nos sentimos inútiles y sin propósito, pero todos nacemos para hacer
algo grande.
“Nadie nace sin talento. Usted nació con un talento grande de parte de Dios
“.

Uno de los desafíos más fuertes de toda persona que tiene llamado es discernir
cuál es el momento de empezar a ejercer su propósito.
Jesús nació con un propósito único, sobrenatural y relevante pero no fue sino
hasta que cumplió 30 años de edad que pudo empezar a ejercer su llamado .
El crecimiento de Jesús fue integral. Lucas 2:52 dice: Jesús crecía en sabiduría,
en estatura y en gracia para con Dios y los hombres.
Creo firmemente que necesitamos crecer en cada una de esas áreas antes de
ejercer nuestros ministerios.
Es importante comprender que los talentos y dones no determinan tu tiempo de
acción.
Dios es el único que puede establecer cuándo es la hora de que ejerzas tu
llamado.
Yo tenía llamado, pero todavía no era mi tiempo. Una cosa es ser llamado de
Dios y otra es saber el tiempo para llevar a cabo nuestro ministerio. El Espíritu
Santo nos dirige y, si queremos obedecer, sabremos cuál es el camino .

Mucha gente tiene llamados poderosos, pero se encuentran paralizados y


enfermos porque comenzaron a operar fuera de su tiempo.
El cumplimiento de nuestro llamado se dilata, pero eso no significa que no
tengas que llevar a cabo tu llamado. Dios nos prepara en medio de la dilatación.
Muchas veces la falta de preparación nos dilata, pero así conseguimos tiempo de
prepararnos. Dios es un Dios de excelencia.
En Medio del proceso de dilatación experimentamos crisis diferentes y nos
preguntamos cómo puede esto ser la voluntad de Dios.
La teología de la prosperidad nos ha enseñado por mucho tiempo que no es
necesario sufrir y que tener dificultades no es la voluntad de Dios. Esto es solo la
mitad de la verdad lo que significa que es mentira.
Es cierto que no somos llamados a pasar la vida entera en problemas, pero Dios
usa las dificultades para forjar nuestro carácter.
Las dificultades nos hacen creer que estamos en la dirección incorrecta, pero la
realidad es que Dios las usa para ayudarnos a llegar a su voluntad, a la zona de
Dios .
Si estás en crisis, quiero que sepas:
Que Dios nuca nos deja confundidos ,Dios siempre tiene algo diferente para
demostrar sus misericordias con nosotros .
Puede que aún no lo entiendas, pero tu llamado es obedecer, no entender, ya que
el tiempo en el que lo entenderás llegará pronto.

Tu llamado es llegar a la zona de Dios, el mismo centro de su voluntad .


La voluntad de Dios para nosotros no siempre nos agrada, pero sí nos bendice.
En el mismo centro de su voluntad, podrás cantar, adorar y ver su voluntad para
tu vida

La dificultad que estás pasando hoy es una señal de que vas en el camino
correcto,Dios permite que pisemos caminos de espinas porque quiere que
valoremos los caminos de oro y cristal que nos tocaran pronto.
.

Capítulo 2
En busca del sueño americano

He vivido la mayor parte de mi vida en uno de los países más pobres de Latino
América. Mi pasaporte es uno de los documentos con más países restringidos
para viajar sin visa.
Cada vez que viajaba a la nación Haitiana, me parecía injusto tener que comprar
una visa y también pienso lo mismo en la situación contraria, ya que ambas
naciones deberíamos de tener un tratado de comercio donde todos, Haitianos y
Domincanos, visitemos los dos países sin necesidad de un visado.
Me impresiona el poder de los pasaportes mexicanos, peruanos y ecuatorianos,
ya que dichas nacionalidades no necesitan un visado para viajar a una gran parte
del mundo. Los ciudadanos de estos países mencionados solo necesitan su
pasaporte para viajar a algunas naciones.
Si hubiera tenido la oportunidad de intercambiar mi pasaporte por otro
pasaporte, lo habría hecho con orgullo.

Me avergonzaba portar un pasaporte Dominicano por todas las dificultades que


se pasan a la hora de viajar fuera de nuestra nación.
Me sentía estancado y, aun así, Dios me ayudó a cruzar muchas fronteras por
aire y por tierra .
“Nuestras limitaciones le permiten a Dios cumplir su propósito en nuestras
vidas, por lo que debemos estar dispuestos a caminar en su voluntad, entrar
en su zona y rendirnos por completo a sus pies”
Siempre existirá la tentación de ser atraídos por nuestra propia voluntad que es
seducida por la vana gloria de la vida donde nuestros ojos se distraen con los
placeres temporales de este mundo.
Muy a menudo confundimos la voluntad de Dios con nuestra propia voluntad
egoísta, que es nuestra tendencia a decidir y elegir el camino fácil.

Nuestros sentidos se oscurecen, perdemos la dirección correcta y solo


trabajamos para cumplir nuestras metas y terminamos sacando a Jesús de la
ecuación.
Mi meta en ese tiempo era llegar a un lugar donde pudiera tener más
oportunidades, y pensaba que esa hermosa isla era mi oasis ante el desierto que
estaba viviendo.
Cuando una nación ofrece mejores oportunidades a sus habitantes, el flujo
migratorio se ve muy reducido, ya que nadie quiere abandonar un territorio
donde se le valora.
La gente sale huyendo de sus países, buscando un mejor futuro, un lugar donde
sean retribuidos en lo económico y puedan ayudar a sus seres queridos.

Yo estaba estudiando la posibilidad de cruzar las costas de las Islas Caicos para
llegar a los Estados Unidos, me habían contado de pequeñas embarcaciones que
organizaban viajes ilegales con un costo de 2,500 dólares americanos. Nunca me
decidí y preferí esperar un tiempo y poder viajar a Bahamas y desde allí aplicar
legalmente y legítimamente por la visa americana.
Era sorprendente como una pequeña isla como Providenciales ofrecía mejores
salarios y compensaciones a sus ciudadanos de mayor importancia que en países
más grandes . Desafortunadamente, aunque nuestros países son más grandes,
también son más corruptos y protegen mucho menos a su gente.
En Latino América se trabaja para hacer crecer a los más ricos y mantener
oprimida a la masa pobre.
En este capítulo, no estoy hablando de fe, aquí estoy conversando con usted
sobre la realidad de la mayoría de países de Latino América.
La fe no nos libera de los momentos difíciles, más bien nos empodera para vivir
en triunfo por encima de la crisis.

Mi fe en ese tiempo era salir de mi país y llegar a otra nación desde donde
pudiera salir a otra mejor nación y así lograr mi sueño americano.
Las crisis son para todos, para los ricos y los pobres, los blancos y negros, los
ateos y los creyentes, los buenos y malos.
Yo no quería sol, playa ni piña colada, sino vivir en un país donde obtuviera
igualad de oportunidades, prosperar económicamente y no hacerle daño a nadie.
Vivia en un pueblo que se llama Q town, una zona en providenciales habitada
por mayoría de haitianos, donde conocí haitianos muy generosos y gente que
solo quería buscar a Dios y prosperar, gente que compartía mi misma historia. Y
allí estaba yo, junto a ellos.

Recuerdo cuando los días se tornaron más duros. Allí no comía por días, y yo
solo quería llegar a los Estados Unidos, pero en ese momento sentía que Dios se
había olvidado de mí. En esa Isla solo disfrute de abundancia las primeras dos
semanas, como creo que son las dos primeras semanas de todo inmigrante,
aunque me han contado algunos que existen países donde solo por la primera
semana todo es fácil.
“Dios tiene el poder de rescatarte de tu dificultad, pero nunca te forzará a
abandonar el destino que elegiste con tu propia voluntad”
Cuando tomamos decisiones a la ligera, el camino se pone más difícil y nuestro
futuro de dilata.

La zona de Dios puede que no sea el lugar más placentero, pero sí el lugar de la
voluntad de Dios donde su reino se hará real por medio de usted.
Pasaron algunos meses y todavía no había cumplido con la mayoría de mis metas. Cuando mis documentos
fueron sometidos para recibir mi residencia, ya mi sangre había sido examinada para asegurar que no tenía
ninguna enfermedad que pusiera en riesgo los isleños locales. Aquí es donde surge un problema para
completar la solicitud, ya que me faltaba otro documento que debía buscar en mi país. Llamé a mi esposa
por varias semanas con la esperanza de que ella me ayudara, pero no tuve éxito. Mis esperanzas se habían
esfumado y el desánimo era doloroso. El equipo de diáconos y líderes ya se notaban preocupado, pues ya no
había más maneras de poder adquirir más visados dentro de la Isla. La solución era regresar a mi país y
dentro de no más de tres meses reaplicar otra visa de paso o negocios. Recuerdo haberme molestado tanto
que decidí salir un domingo después del primer culto en la mañana. Tenía solo unos 20 dólares y la tesorera
de la organización había pagado mi boleto de regreso. Había llegado a las Islas Turcas y Caicos con más
dinero que con el dinero con el que había salido. Llegué al aeropuerto.

Gregorio Luperón de Puerto Plata y algunos agentes en migración me solicitaron que les diera alguna
propina para así evitar revisar mis maletas las cuales solo tenían algunas prendas, ropa y zapatos. No lo
pensé dos veces y de inmediato regalé mis únicos 20 dólares . Para llegar a mi casa, mi esposa pagó el taxi.
Mi sueño americano se había frustrado. Las lágrimas recorrían todo mi rostro. Lo más difícil para mí fue
ver el rostro de aquellas personas que me habían visto salir de mi país lleno de sueños, esa misma gente me
vieron llegar fracasado, desanimado y cansado de un viaje que había sido mi esperanza, pero que ese día se
había convertido en mi dolor. Un viaje que fue mi sueño, pero ahora era mi peor pesadilla. No quería ver a
nadie y me oculté por varios meses, no quería vivir mi realidad en frente de mis amigos y enemigos. Lo que
se siente cuando has sido expuesto al fracaso delante de las personas que te conocen es un sentimiento
abrumador. Asumir la responsabilidad con mi familia era mi prioridad, por lo que me intenté renovarme y
reiniciar mi jornada otra vez para descubrir lo próximo para mi vida. ¿Por qué tanta confusión? ¿Por qué
otros con fines corruptos conseguían sus objetivos? ¿Por qué la dificultad del justo es mayor que la
dificultad del impío? Solo quería vivir y poder ser un sostén digno para mi familia, no tenía opciones, esta
era mi oportunidad de hacer algo diferente y ayudar mi gente, a mi familia. Desde el momento en que mi
pasaporte llegó a manos de los agentes de migración hasta que el apóstol Danville Williams lo trajo de
regreso después de muchos meses de espera; desde el dinero de pagar el boleto, lo cual le fue muy difícil de
conseguir, hasta el dolor de abandonar mi familia, mi esposa, la cual recientemente había tenido mi segundo
hijo. Todos esos detalles hacían el comienzo de este viaje más difícil para terminar de la manera que había
terminado. Aun así agradezco todo lo que aprendí en el proceso sin el cual no habría llegado donde estoy.
“No subestimes ningún momento difícil ya que Dios lo usara para potencializar grandes oportunidades que
cambiaran tu vida para siempre”. Hay tiempos en los que Dios te enviará, otros tiempos en los que usted se
irá por su cuenta, pero la soberanía y misericordia de Dios te cubrirán cualquiera que sean las situaciones, y
los momentos de confusión interpretados como fracasos no pueden afligirte ni detenerte. Ese es el momento
de avanzar, levantar las manos y renovar tus fuerzas, pues Dios quiere bendecirte. Dios nunca abandona sus
mejores soldados. Los mejores soldados de Dios no son los que nunca fallan, sino aquellos que a pesar de
fallar se renuevan y siguen adelante reconociendo que el poder es de Dios y, si el poder es de Dios, él tiene
los medios y los recursos para cumplir sus planes en nuestras vidas. “Dios quiere viajar contigo, olvida tus
planes y aférrate a los planes de Dios”. Cuando viajamos de la mano de nuestro creador siempre será una
aventura excitante, segura y divertida y lo mejor de todo es que los resultados los trae Dios.


Capítulo 3
Tocando fondo

La soledad era cruel y nadie quería apoyarme. La gente no sigue a personas fracasadas, la gente sigue a
personas exitosas. En ese momento humanamente estaba nadando en un río de fracasos con aguas sucias y
turbulentas y el éxito en ese momento no era mi destino, solo el fracaso me oscurecía. Todo el sacrificio
parecía en vano, ver el rostro de mi esposa todos los días y respirar los aires de desánimo. Todo parecía mal
y nada me funcionaba. La depresión me visitó y me encerré en mi habitación por largos meses. Las deudas
ascendían a miles de dólares a bancos locales y cuentas internacionales. En medio de tantos problemas solo
tenía una sola esperanza: Jesús. A Jesús acudía día y noche buscando una salida. No quería salir fuera de mi
habitación porque me sentía perseguido, abrumado y enloquecido, lo mejor en ese momento para mí era no
enfrentar mi realidad. Esa es la problemática de la gente en general: no quieren enfrentar sus demonios y se
dejan llevar por la depresión.

No importa cuán difícil sea tu situación, es importante salir, moverse y exponerse a nuevas oportunidades.
Cuando salgas a probar nuevos aires, la depresión empezará a ceder y podrás sentirte relajado.

En ese momento los amigos se van, pero no te lo tomes de manera personal, esta temporada te ayuda a
discernir los que son fieles y los que son falsos.

La familia se pone en riesgo y puede que también te abandonen.

En mi caso, solo unos pocos de mi familia quedaron a mi lado.

Permanecí en mi habitación por más de 6 meses, mi pelo crecía, no me bañaba, no me afeitaba, y padecía
depresión crónica.

Cuando estás en medio de una gran desesperación, la depresión tiene una oportunidad de oro de atraparte,
es importante buscar ayuda profesional. Si no puedes o no tienes acceso a profesionales de la salud mental,
le sugiero que busque ayuda en los amigos, esos que son maduros y han pasado momentos difíciles
similares a los tuyos y han superado esos momentos.

Nunca decidas quedarte escondido cuando estas en desesperación.

La depresión no solo afecta a personas no cristianas, sino a cualquier persona sin importar credo o religión.

No permitas que los momentos duros te abatan, porque necesitamos tener expectativas de que algo bueno
saldrá de cada situación difícil.

El año 2007 fue mi peor año. Ese año Dios me hizo grandes promesas y allí sufrí y lloré.
Las promesas de Dios no nos hacen inmunes a las dificultades y presiones de la vida, pero sí nos dan la
garantía y el confort de que todo estará mejor en el futuro.

La biblia no nos promete que no pasaremos por las aflicciones, pero sí dice:

Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas lo librará jehová

Salmos 34:19

La biblia no dice que no pasaremos por el fuego, pero sí dice:

Cuando pases por el fuego no te quemarás

Isaias 43:2

En ese año del 2007 perdí mis negocios, mis conexiones y mis ahorros. Solo Dios y mi esposa quedaron
conmigo. No sé cómo mi esposa pudo resistir tanta presión.

La familia de mi esposa la acusaban de que ella había tomado una muy mala decisión al casarse con un
hombre muy joven, me criticaban, me avergonzaban y me rechazaban, pero mi esposa seguía a mi lado.

Nunca olvides las personas que se quedaron contigo cuando todos se fueron,esa gente es la que merece
sentarse contigo cuando hayas ganado la batalla.

En mi proceso de dificultad, me tocó vivir lo que más temía.

Si bien fue difícil estar abandonado por todos y bajo depresión aguda, lo peor que me pasó fue mudarme a
la casa de mis suegros. Cuánta vergüenza, cuánto dolor y cuánta indignación.

Tener que vivir con los padres de mi esposa que tanto se burlaron de mí, vivir con ellos y soportar todo el
rechazo.

Luché tanto para no llegar a ese punto, busqué en empleos, pedí ayuda, intenté salir a tantos lugares, pero
nada había funcionado.

Mi reputación ya no importaba, ya todos sabían que había perdido y que ni mi familia podía sostener.

Un amigo me había dicho: guarda tu auto y siempre paga tu renta, eso hará creer a la gente que estás bien y
nunca notarán tu caída. En mi país, un auto representa estabilidad económica.

Cuando perdí mi carro porque un banco local lo embargó, eso fue una pesadilla de lo peor.

Mi plan era entonces no perder mi derecho de vivir en mi apartamento y lo sostuve por un tiempo.

En lugares anteriores me había atrasado con el alquiler de la casa, pero nunca había atrasado 4 meses el
pago de la casa.

Eso era real, 4 meses sin producir y sin poder pagar el alquiler.
Un día regresábamos mi esposa y yo de un evento y nos encontramos con la no muy grata sorpresa de que
la cerradura de la puerta había sido cambiada, llamé a la dueña del apartamento y me dijo que era tiempo de
que abandonara la casa porque ya ella no podía esperarme.

Normalmente cada alquiler tiene depósitos de garantía y hay leyes que protegen al inquilino, pero esa
propietaria ya no estaba dispuesta a aguantarme tampoco mientras aplicaba la ley a mi favor.

Ese día fue que me di cuenta que la única salida era irme a vivir en la casa de los suegros, y no había nada
peor para mí.

Esa semana sentía que el mundo entero caía sobre mí, pero algo importante ocurrió:

Ya no me importaba lo que la gente dijera de mí y comencé a depender totalmente de Dios.

Todo el esfuerzo que había invertido hasta ese momento, la razón de luchar contra la corriente, manteniendo
un estilo de vida que ya no podía sostener, todo eso lo hacía porque no quería que la gente me viera tocando
fondo.

Había perdido mi dignidad, ya no tenía auto porque el banco se lo había llevado y ya no vivía en un
apartamento porque la propietaria me había sacado a la fuerza, y esa realidad dolía mucho.

Un día escuché la voz de Dios que me decía:

Te voy a levantar y te voy a bendecir, ahora no con tus fuerzas, sino con mi poder.

Esa voz me infundía fe, me llenaba de energía y me daba esperanza.

Esa voz me hablaba cada día, pero nada ocurría.

Dios tiene un tiempo para hablar y otro tiempo para ejecutar y cumplir su palabra.

A veces esperamos el cumplimiento de la palabra de Dios en lo inmediato, pero la realidad es que a veces se
toma años para cumplir sus promesas.

Dios me había prometido que viajaría a diferentes países, y saqué de nuevo el pasaporte, pero nada ocurría,
incluso saqué un segundo pasaporte y el primero no lo había usado.

A veces Dios te hace una promesa para que vayas preparándote hasta llegar la materialización de esa
promesa.

La preparación precede el cumplimiento.

Muy a menudo lo que impide que se cumpla la palabra de Dios en nuestras vidas es la falta de preparación,
la que nos detiene y nos estanca.

Yo había recibido muchas promesas de parte de Dios, pero aún no estaba preparado para verlas hecha
realidad.

En ese momento entendí la importancia de estar en la voluntad de Dios y depender de él.

Lo que sucede es que a veces nos aferramos a nuestros bienes terrenales y nos olvidamos que el dueño de
todas las cosas es el Señor.

Aunque hayas trabajado por mucho, Dios es quien nos da las fuerzas. Si te has esforzado y eres grande,
famoso y rico, Dios es quien nos bendice.

Siempre debemos depender de Dios, no importa dónde estés o quién seas, dependes de tu creador, somos
simples administradores y lo necesitamos siempre.

Cuando dejamos de depender de Dios, pecamos al creernos que ya no lo necesitamos y perdemos su


comunión.

Es peligroso cuando nos entretenemos en las vanidades temporales de la vida, las cuales nos roban la paz y
la verdadera bendición que solo viene de Dios.

Dios nunca planeó que el hombre cambiara su bendición por las cosas materiales.

Yo perdí el sentido y propósito de mi vida, solo me importaba que la gente creyera que yo estaba bien,
aunque podrido por dentro.

Me aferre de lo material, me perdí dentro de la iglesia, me convertí en huérfano teniendo padre, por eso
toqué fondo.


Capítulo 4
Oraciones sin respuesta

Habían pasado dos años en los que casi cada día lloraba por mi realidad.
Un hombre que había sido muy prospero económicamente y ahora estaba
viviendo en la casa de sus suegros.
Ya me dolían las rodillas de tanto orar, ya la voz no me salía de tanto rogar a
Dios por un cambio radical donde pudiese ver su mano obrar.
Quiero decirte que Dios estaba obrando, pero yo no lo veía, Dios estaba
proveyendo, pero yo no sabía de dónde.

Las cosas no estaban ocurriendo a mi manera, pero Dios estaba obrando.


Dios no estaba contestando a mis oraciones a la manera que yo lo quería, pero sí
había respuestas que estaban llegando, aunque no en la forma que yo la estaba
esperando.
Tus oraciones, esas que al parecer no tienen respuesta, no representan el carácter
de Dios, un Dios que nos ama y cuida de nosotros. Esa frustración que
aparentemente viene porque Dios a nuestro parecer está ausente, que no está con
nosotros, esa impotencia de no ser capaz de obligar a Dios a obrar en ese
momento que lo necesitamos, eso enfría nuestro corazón.

A mí me paso, yo era ateo aunque era miembro activo de una iglesia.


Ya llevaba más de dos años orando a Dios por nuevas posibilidades, pero mis
oraciones yo creo que estaban alejando a Dios de mí.
Era como desear la lluvia porque la sequía es tan intensa que ya la tierra está
arruinada.
Era como cuando deseas que pare la lluvia porque debes estar en esa reunión,
pero la lluvia aumenta inundando las calles y cancela no solo tu reunión, sino
todos tus planes.

Esa era mi realidad, Uno vive pero se siente muerto, es como si el cielo cerrara
sus ventanas porque el dueño del cielo las cerró.
Un día entendí que aun el silencio de Dios es importante, porque su silencio
representa nuestro momento más triunfante, su silencio es nuestro avance. No
exagero al decir que Dios obra más poderosamente cuando hace silencio que
cuando habla.
Cuando Dios calla, se ocupa de detalles inimaginables, Dios conoce nuestro
futuro y eso lo hace ser un Dios sobrenatural en medidas excesivas.
Romanos 8:26

De la misma manera, también el Espíritu nos ayuda a nuestra debilidad.


No sabemos orar como deberíamos, pero el espíritu nos ayuda en nuestra
debilidad. Dios obra aun cuando no lo sentimos y tampoco lo vemos.
Cuando oramos y no vemos los resultados, aun allí Dios se está moviendo.

Si no recibes respuestas inmediatas del cielo, aun así Dios se está moviendo.
Dios está preparando bendiciones mayores cuando se dilata su respuesta o a lo
mejor desea enseñarnos el don de la paciencia.
El cielo acumula respuestas a nuestro favor, y por eso no debemos desistir y
sigamos clamando.
Probablemente tus bendiciones serán tan grandes que necesitarás ayuda de otras
personas que te ayuden a orarla.

Toda dilatación nos quiere enseñar algo. Toma lápiz y papel porque el tiempo es
un gran maestro. Cuando el tiempo parezca detenerse y le duela la espera,
aprenda algo nuevo porque le servirá para el futuro.
Las oraciones sin respuesta son otro proceso de los difíciles que me tocó pasar,
pero aprendí las lecciones intencionales del Padre celestial.

Cuando aprendas a apreciar las oraciones sin respuesta, entonces serás


interrumpido con la sorprendente respuesta del Padre celestial.
La predicación moderna y liberal enseña que Dios es nuestro esclavo a quien le
podemos dar órdenes y que debe hacer lo que le pidamos. Solo hablan de
bendiciones materiales que llegan cuando la pedimos y se les olvida que Dios
nos permite el sufrimiento y hace silencio para enfocarse en terminar la obra que
ha empezado en nosotros.
Toda persona pasa por esa temporada de oraciones sin respuesta, es inevitable, y
tendrás que pasarla si no la estás pasando ahora.
El propósito de Dios al dilatar su respuesta, al callar y no hablar, es prepararte
para su propósito.

Es cierto que sufrimos al no ver lo que pedimos, pero Dios usa ese proceso
porque a veces es la única forma de que podamos darle la atención que él se
merece.
A veces el único recurso que Dios tiene para que la humanidad lo escuche es
permitiendo las situaciones de dolor.
Dios quiere nuestro corazón y ese corazón es quebrantado cuando no tenemos
respuesta a nuestras oraciones.
Dios quiere que dependas de él, de su propósito y de su unción.
Dios quiere que le honremos, que vivamos para él y que solo él reciba la gloria
de nosotros.
Al experimentar esta temporada de oraciones sin respuesta, llegamos al punto de
valorar cada bendición espiritual que llega de parte de Dios.
Aprende mientras Dios no responda tus oraciones, hay más sabiduría en el
silencio de Dios en la abundancia de bendiciones de sus palabras.

Tome lápiz y papel y deje que las oraciones sin respuesta le enseñen sobre los
recursos espirituales que están reservados para nosotros.
Las oraciones sin respuesta anteceden grandes tiempos de cosecha .400 años sin
respuesta vivió el pueblo de Israel, tiempo en el que nació y murió mucha gente,
pero lo que venía era muy grande como para que Dios lo respondiera de
inmediato.

Capítulo 5
Activando el cumplimiento de la palabra de Dios

Dios quiere que vivamos disfrutando de la plenitud de su bendición. Dicha
bendición es la que nos hace ricos y no produce tristeza.
Proverbios 10:22
La bendición de Dios es la que enriquece y no añade tristeza…
Al principio, Dios creó todo con su palabra y a mi parecer la lucha y la tentación
de Adán y Eva inicio por una lucha de palabras.
Era la palabra de Dios dada a Adán y Eva y la Palabra de Satanás. Lo dicho
antes indica que Dios usa su palabra, es decir, las sagradas escrituras, las cuales
son la palabra profética más segura .
2 Pedro 1:19-21
Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar
atentos como a una antorcha que alumbra ….
Dios también usa el don de la profecía, y ese don, si es genuino real y legítimo,
siempre se somete a la verdad de las sagradas escrituras.
Para que la palabra de Dios se cumpla en nuestras vidas y las palabras de
profecías se hagan real en nosotros, primero debemos atravesar algunos procesos
de los cuales quiero enseñar.
Lucha de palabras :
El enemigo siempre busca que dudemos de la palabra de Dios y de cualquier
palabra traída por los recursos del Reino de Dios.
Por eso es tan real la lucha de todo creyente en leer poco o nada de la palabra de
Dios.
Si fuésemos fieles a la lectura y la meditación de la palabra de Dios, tendríamos
vidas más exitosas.

Yo entendía que si tenía la palabra de Dios siempre ganaría y nunca perdería, ya


que lo real es que tengas la palabra de Dios escrita o alguna palabra profética a
tu favor, siendo eso una razón más para que tu lucha sea más agresiva de lo
normal.
Dios te da una palabra por medio de uno de sus recursos, y esa palabra
transforma tu presente, pero debes pelear haciendo de la palabra de Dios tu
antorcha para que esa palabra te sirva en el futuro.
Es una lucha de palabras y tres esferas participan en esa lucha a saber: La
palabra humana negativa sembrada en tu mente por las diferentes circunstancias
que has vivido, la palabra de la gente a tu alrededor y la palabra del enemigo, el
adversario, el diablo.
Las palabras humanas:

La gente siempre duda de tu futuro, de tu presente y minimiza lo que haces por


más extraordinario que sea,
Luchas con esas palabras de la gente antes de emprender cualquier proyecto y,
después de emprender y cuando has triunfado, la gente nunca está conforme.
Por eso es importante no dejarte manipular de las palabras de los humanos,
especialmente si esas palabras vienen de gente que nunca han logrado nada en la
vida.

Proverbis 12:18
Hay hombres cuya palabras son como golpes de espada, mas la lengua de los
sabios es medicina.
Esas palabras negativas, amargas y seductoras que nos alejan de la voluntad de
Dios tienen un solo objetivo y es convertir nuestras vidas en un robot sin esencia
y propósito.
La personas sabias con palabras edificantes son difíciles de encontrar en un
mundo caído en el caos del pecado y juicio .
Por eso la palabra de Dios debe siempre estar por encima de las palabras del
hombre, incluso por encima de la palabra de cualquier profeta, porque es la
misma palabra de Dios la autoridad final de donde todos y todas debemos
regirnos.
Las palabras producidas por las situaciones difíciles
Para nadie es un secreto que hay más palabras ocultas de cada situación que la
mayoría extrae la esencia de cada experiencia.
Luchamos a diario con esas experiencias y algunos viven de esa realidad, la cual
no es bendita.

Nuestra realidad actual no determina la realidad del cielo y los planes de Dios
para nuestras vidas.
Toda situación aquí en la tierra es temporal, nada es para siempre y la realidad de
la palabra de Dios prevalecerá para siempre.
Isaias 40:8-10

Séquese la hierba, marchítese la flor; más la palabra de Dios permanece para


siempre.
Las palabras del enemigo o diablo

Jesús no fue exento de ser golpeado como hijo de Dios. Su vida en la tierra fue marcada con insultos,
amenazas y muchas falsas calumnias.

Las palabras negativas de los hombres en contra de Jesús nunca lo detuvieron, y tampoco se dejó moldear
por ninguna situación adversa.

Creo que la tentación más terrible la enfrentó Jesús en el desierto, donde literalmente hubo una guerra de
palabras, lucha de ideas y conceptos entre satanás y Jesús.

Jesús fue tentado en 4 áreas a saber:

1-Comida

2-Seguridad

3-Finanzas

4- Religión

Hoy día, la misma tentación nos persigue a todos. Somos tentados con la comida, aquellos que tenemos
recursos para comer bien, algunos caen en glotonería cayendo en la tentación y enfermando su cuerpo.

Somos tentados en la seguridad al desconfiar del cuidado que Dios tiene de nosotros siempre
protegiéndonos.

La tentación de las finanzas es la más común porque dejamos al Dios verdadero y nos arrodillamos al Dios
del dinero.

La tentación de la religión es muy amplia porque las religiones son miles en el mundo y cada uno elige su
propia religión.

La tentación de la religión consiste en crear nuestro propio dios y ahí caemos en idolatría.

La humanidad ha caído en idolatría cayendo en la tentación de las religiones.

Jesús confrontó las palabras del enemigo con gran sabiduría, y los detalles de la tentación de Jesús los
menciono a continuación:

Cada una de las áreas donde Jesús fue tentado abarca todo tipo de luchas de palabras. Satanás pudo haber
tentado a Jesús en otras áreas, pero él sabe muy bien el poder de las palabras. El evangelista Mateo primero
presenta la tentación relacionada con la alimentación: Si eres hijo de Dios haz, di que estas piedras se
conviertan en pan. Él respondió y dijo: Escrito está, no solo de pan vivirá el hombre sino de toda palabra
que sale de la boca de Dios.

Cuando Satanás le propone a Jesús que convierta esas palabras en pan, está apelando a poner desconfianza
en los planes del padre celestial.

Sembrar duda, dejar la semilla de la desconfianza en el corazón de Jesús.

Jesús pudo haber convertido cada piedra del desierto en pan, pero el propósito por el cual había sido llevado
por el Espíritu al desierto no era hacer una demostración de su poder creativo, sino de resistir y terminar su
tiempo en ese desierto.

El plan del enemigo estaba siendo desacreditado porque Jesús sabía que su plan era distraerlo de la voluntad
de su padre.

Esa lucha no era una lucha de demostraciones y exhibición de poder, sino una lucha de palabras, y la
palabra de Jesús estaba ganando.
Las palabras que usamos en medio de la tentación deben ser palabras alineadas con la palabra de Dios, no
con las palabras del diablo, la gente y las circunstancias.

El enemigo entró en la zona de Dios para Jesús, lo cual era el desierto, para sacarlo de allí, porque él sabía
que en ese lugar era el lugar de Dios para Jesús, esa era la zona de Dios, el centro de la voluntad del Padre
en ese momento.

Si Jesús hubiese aceptado la sugerencia de Satanás de convertir la piedra en pan, allí mismo se habría
exterminado la importancia de salvación para el hombre.

El enemigo quiso corromper el plan original de Dios. El propósito del Poder de Dios no es demostrarle a
nuestros enemigos cuán ungidos somos, y tampoco para mostrarle al diablo que somos los verdades
escogidos, el poder de Dios es para servir en el reino de Dios, edificar y glorificar a Dios por medio de
nuestro servicio para complacer a nuestro creador.

NO era el momento para hacer una demostración de poder y demostrarle al diablo cuán sobrenaturalmente
creativo era el hijo de Dios, sino el momento de permanecer enfocado en la palabra de Dios.

Jesús respondió con la misma palabra de Dios, escrito está que no solo de pan vivirá el hombre, sino de
cada palabra que sale de la boca de Dios.

No es posible activar el cumplimiento de la palabra de Dios en tu vida estando fuera de la verdad infalible
de las sagradas escrituras.

No podrá vivir el futuro que Dios tiene para usted olvidando en el presente la palabra de Dios.


Si te gustó este libro:
Ve a twitter y escribe “Les recomiendo que lean #enlazonadeDios por @pedroluisadamez”

Ve a Facebook y comparte la portada de este libro y qué le gustó más del mismo.

Por favor, deje una reseña en amazon.com

Esto me ayudará a mejorar

Para contactar el autor de este libro:

Visite www.ministeriospedroluis.com

Escriba a info@ministeriospedroluis.com

Sígalo en Twitter :

@pedroluisadamez

Facebook: Ministerios Pedro Luis

Si necesita invitar a un evento al autor de este libro escriba a

eventos@ministeriospedroluis.com

También podría gustarte