La enseñanza y el aprendizaje en tiempos de pandemia
Cátedra de “Introducción a la Física” para la carrera de “Ingeniería electricista”
Mg. Matías E. Scorsetti Dr. Juan M. Alemany
Docente colaborador de la asignatura Docente responsable de la asignatura Autor del escrito Aval del escrito
Este escrito tiene como propósito reflexionar en torno al proceso de enseñanza y
aprendizaje, durante el desarrollo de las clases virtuales del primer cuatrimestre de 2020, en el contexto de la pandemia. En este marco, como equipo de trabajo, nos hemos propuesto socializar a la comunidad educativa, una vez finalizado el dictado de “Introducción a la Física” para los estudiantes de Ingeniería Electricista. Deseamos destacar nuestro compromiso con la educación de los estudiantes que recién llegan a la universidad… Y por estos motivos, desde el primer momento, nos replanteamos cómo enseñar y evaluar en este nuevo contexto. ¿Qué hacemos ahora? ¿Cómo lo hacemos? Fueron algunas de las preguntas que nos hicimos al iniciar la cuarentena. Como primera y rápida alternativa, nos propusimos mantener la misma modalidad adoptada desde el principio, teórica y práctica, pero con algunos ajustes. Obviamente, la virtualidad jugó un rol protagónico. Tanto para las clases teóricas, como para las prácticas, usamos la app “Google Meet” desde el servidor de la UNRC. Para las clases teóricas, diseñamos ppt que, además de contar con los elementos teóricos de la disciplina, tenían imágenes, ejemplos concretos, cotidianos y preguntas para “pensar” la Física. De esta manera, la clase teórica no se trató de una presentación meramente expositiva del docente sino más bien de clases interactivas con los estudiantes. En las clases prácticas de resolución de problemas, organizamos las mismas en dos instancias: una obligatoria, en donde se debían resolver los problemas indispensables; y otra optativa, en donde se debían discutir y consultar los ejercicios propuestos. Todas las clases obligatorias fueron grabadas y compartidas por mail a los estudiantes y en algunas oportunidades, se hizo lo mismo con las clases de consulta. Además, en todas ellas, empleamos un pizarrón para realizar y explicar los ejercicios. Este recurso, sirvió como un soporte indispensable para el desarrollo de estrategias físico-matemáticas asociadas al cálculo y operaciones. ¿Por qué fue imprescindible el pizarrón? Porque recordemos que los alumnos de Introducción a la Física, en su gran mayoría, son jóvenes ingresantes y provenientes de la escuela secundaria, con escasa autonomía y experiencia universitaria. Entonces, para poder ayudarlos a adquirir cierta independencia, consideramos necesario contar con algún recurso/soporte que les facilite el desarrollo de competencias básicas, como alumnos de primer año, y futuros ingenieros. Desde estas perspectivas, en las clases prácticas, pusimos en discusión la lectura, la interpretación, la modelización, el planteamiento y la resolución de los problemas, entendiéndolos como desafíos propios y posibles de resolver. Y en algunas ocasiones, empleamos videos y simulaciones para modelizar y “ver en concreto” las magnitudes calculadas. Sin embargo, a medida que avanzamos con los temas –en la primera parte del cuatrimestre–, pocos jóvenes participaron activamente en la discusión y socialización de las actividades, es decir, sólo algunos hablaron (encendieron sus micrófonos) y se visualizaron (encendieron sus cámaras). Esto no fue un dato menor, porque en el momento del primer examen parcial –oportunidad en la que los jóvenes encendieron sus cámaras–, notamos cierto distanciamiento (además del físico) de los estudiantes para con nosotros. Además, se los observó inseguros, nerviosos, incómodos. Muchos de ellos, después nos manifestaron, que se debió al hecho de rendir su primer parcial de la universidad y bajo el contexto de la pandemia. En este marco, los resultados obtenidos en la primera evaluación, reflejaron la falta de experiencia, autonomía e inseguridad que tanto observamos. Entonces, ¿qué hicimos para ayudarlos y prepararlos para el segundo parcial? Aquí jugó un rol protagónico la confianza y la interacción de todos. Es decir, luego del primer examen, se les pidió que en todas las clases de práctico (obligatorias y de consulta) enciendan sus cámaras y algunos micrófonos para poder verlos y escucharlos, pero también, para conocerlos e interactuar más fluidamente. Fue muy importante para nosotros poder ver y reconocer sus caras, sus gestos, sus voces, y poder acudir a sus inquietudes e incertidumbres que fueron surgiendo durante las restantes clases. De a poco, la confianza se fue ganando, y muchas cámaras y micrófonos se fueron encendiendo. Inicialmente eran dos o tres y luego comenzaron a ser cinco, seis y a veces hasta diez (aunque no en simultáneo, por cuestiones de interferencia y saturación). La foto en la página siguiente muestra precisamente a estudiantes y docente en la clase de cierre de la materia. Foto: Captura de pantalla de la clase. Se observan los estudiantes en la clase de cierre.
Además, en fechas cercanas al segundo parcial, se brindó la posibilidad de consultar vía
WhatsApp, y de esta manera, muchos alumnos acudieron a este medio para preguntar algunas inquietudes. Con todas estas nuevas herramientas, observamos que se fueron apropiando de las estrategias y habilidades necesarias, lo cual se tradujo en una mayor autonomía. ¿Y se evidenciaron cambios en el segundo parcial respecto al primero? Afortunadamente, los resultados del segundo examen fueron sorprendentes. Más de la mitad aumentó su rendimiento académico, y efectivamente, la gran mayoría obtuvo su regularidad. ¡Incluso algunos obtuvieron su merecida promoción! Entonces, ¿cómo hemos contribuido al aprendizaje de los estudiantes en estas instancias poco habituales? Creemos que, más allá de las circunstancias, hemos apostado a su educación, compromiso y confianza. No es fácil estar en el lugar de los jóvenes primerizos, que, con tantas ganas y expectativas, comenzaron sus estudios universitarios. Y luego de una semana de clases, debieron encerrarte y privarse de muchas experiencias nuevas y hermosas que la vida universitaria les brinda. Aún nos espera un segundo cuatrimestre lleno de incertezas, incertidumbres y ¿cuarentena? Confiamos en nuestros alumnos, en su confianza y capacidad de aprendizaje; y no tenemos certezas, pero sí esperanzas de que unidos, vamos a seguir adelante y lograr nuestros propósitos, porque “creemos” que podemos enseñarles, “creando” las herramientas para llevarlo a cabo y brindando las oportunidades para ellos, nuestros estudiantes, “crezcan” como profesionales y ciudadanos responsables. Para terminar, les compartimos el testimonio de nuestros estudiantes. Cuadro. Algunos testimonios de los estudiantes