Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Traducción de
Jesús Sánchez Navarro
Diseño de
Mario Eskenazi
©
1998 by lan Hacking
©
2001 de la traducción, Jesús Sánchez
Navarro
©
2001 de todas las ediciones en castellano,
Ediciones Paidós Ibérica, S.A.
Mariano CUbl, 92 - 08021 Barcelona
y Editorial Paldós, SAICF,
Defensa, 599 - Buenos Aires
http://www.paidos.com
ISBN: 84-493-1040-7
Depósito legal: B. 10.665/2001
11 Prefacio
363 Bibliografía
393 Índice analítico y de nombres
CAPÍTULO 7
Rocas
...e gris. más ordinario que puede imaginarse. Empieza con la dolo-
-'
<1: mita, una sustancia parecida a la piedra caliza (que es básica-
uo
'"z mente carbonato de calcio), excepto que es fundamentalmente
-o
u
u carbonato de magnesio.
::J
'"
ii; Primero vamos a resumir la ciencia (hasta acabar en la fan-
z
o
<.>
<1:
tasía científica) y luego haremos un comentario filosófico. La
ciencia. a su vez, se divide en dos partes: ciencia antigua y cien-
cia nueva. La ciencia antigua es la sedimentología, para la cual
me apoyo en McKenzie (1991), que a su vez usó a Von Morlot
(1847). Ésta es una vieja historia. Pero también tenemos una
nueva. La ciencia nueva envuelve nanobacteriología. el estudio
de bacterias mil veces más pequeñas que las bacterias que nor-
malmente estudian los bacteriólogos -muchos de los cuales
sospechan que las nanobacterias no existen-o (Nano significa
10-9 o mil millones, del mismo modo que micro significa 10-6, o
un millón. y mili significa 10-3• o un millar.) Las bacterias estu-
diadas h.abitualmente tienen un micrómetro de diámetro,
mientras que las nanobacterias tienen un nanómetro de diá-
metro.1
El problema de la dolomita
...
-w
La aseveración de que en el período geológico actual no se está
=>
a
formando dolomita en la superficie de la Tierra acaba convir-
'"o-'
:'l tiéndose en otro mito, aunque en este caso un mito más cerca-
u
o
en
Z
no a la verdad. La verdad es que no se está formando en sitios
<>
Ü
U
::J
donde sea agradable estar.2 Se está formando en regiones hosti-
'"t; les para casi todas las formas de vida. Las regiones costeras cu-
z
o
<J
biertas de sal de arenas áridas y mares poco profundos de las
costas del golfo Pérsico. Los lagos de sal, las marismas y los fon-
dos marinos con medios carentes de oxígeno que exploran los
Modelos
'"
o
C>
¿y qué pasa con la formación de la dolomita en el agua de mar? l>
U')
Nanobacterias
Las bacterias han sido desde hace fÍempo uno de los actores de
la sedimentología. Hay muchos papeles para los agentes micro-
bianos. Supongamos, por ejemplo, que un ión inhibe una detE'x-
minada reacción química. Las bacterias que eliminan este ión
podrían, pues, estimular la reacción. Hace unos setenta años,
G.D. Nadson realizó experimentos con bacterias anaeróbicas re-
ductoras de sulfato recogidas de sedimentos carentes de oxíge-
no de un lago de sal en Rusia. Consiguió precipitar carbonatos,
algunos de los cuales eran carbonatos de magnesio. Quizá los 315
«
--'
como se pudo, en tomo a poco más de 1 m. La sustancia adheri-
Ü
o
'"z da al extremo se secó por congelación al vacío para su estudio
-o
Ü
'-' posterior. En efecto, allí había dolomita y, en efecto, también ha-
:::>
'"'"z
f- bía bacterias reductoras de sulfato.
o
'-' El siguiente paso era cultivar el sedimento. En primer lu-
gar esto se hizo en los ldaho National Engineering Laborato-
ries, un centro mundial para el cultivo de bacterias. Después
de que las pruebas sobre la presencia en el barro de agentes re-
ductores de sulfato dieran resultados positivos, se añadieron
al cultivo cristales de cuarzo medianos y limpios. Se mantuvo
durante un año a -4 oC en un refrigerador y fmalmente se de-
volvió a Zurich para su estudio. Cuando se abrieron, los reci-
pientes despidieron un fétido olor a huevos podridos (ácido
sulfídrico). Algo había estado extrayendo los iones de sulfato.
Resultados: a) una imagen secundaria de un microscopio
electrónico de barrido mostró los granos de cuarzo cubiertos
con tma envoltura nudosa «que parece estar colonizada por na-
nobacterias subesféricas)} (Vasconcelos y otros, 1995, pág. 221);
b) un espectro de dispersión de energía por rayos X mostró pi-
"COS de alta intensidad para el calcio y el magnesio y la difrac-
Pequeña ciencia
Inducción
'"
1-
<n Cuando llegamos al momento presente, McKenzie y Vas-
z
o
u
q;
concelos se guían ante todo por la analogía. Md(enzie sospecha
que hay una explicación muy simple de por qué nadie encon-
traba dolomita en formación: nadie estaba buscando en lugares
suficientemente desagradables. Vasconcelos tenía un medio
hostil cerca de su casa en Brasil. Por analogía, entonces, lo exa-
minarnos. Mediante experimento, se descubren nuevos hechos.
Efectivanlente, a partir del cultivo del fango pantanoso, se en-
cuentra que contiene agentes que reducen el sulfato. Entra en
juego toda una red de analogías, la analogía con el viejo trabajo
de Nadson sobre un lago de sal ruso. También la analogía con
las recientes conjeturas de Folle y las nanobacterias. Se nos con-
duce a un nuevo experimento. ¿Precipitaríamos dolomita, si
dejáramos las bacterias en cierto medio durante un año? Sí, pre-
cipitariarnos dolomita, aunque debemos contrastar el precipi-
tado de muchas maneras.
¿Han llegado a ser las analogías de Md(enzie y Vasconcelos
una verdad científica (para seguir usando el lenguaje de Hum-
phry Davy)? En el mejor de los casos, sólo la primera de las
analogías mencionadas. Hay un cierto tono retórico cuando
nuestros autores escriben que tienen evidencia concluyente de
que se puede conseguir la producción bacteriana de dolomita
en un lapso relativamente breve en condiciones de falta de
oxígeno a bajas temperaturas. 327
única».
Redes
"U de la investigación.
o
<J)
2:
Hay que señalar que McKenzie y Vasconcelos extendieron
(J
(J
:::>
su red hacia el pasado. Md(enzie escribió un artículo repasan-
'"
1-
U) do el estado del problema de la dolomita. Al hacerlo, mencio-
2:
o
(J
nó un cierto número de figuras, tales como Von Morlot (que
":-!,
escribió en 1847), que parecían haber desaparecido de las des-
cripciones de] problema desde comienzos del siglo xx. Von
Morlot se convirtió en un aliado a la hora de reformular cómo
pensamos sobre el problema, un aliado contra algunos sedi-
mentólogos más reconocidos. Su recuperación del olvidado
Arduino contra el admirado Dolomieu es parte de una estrate-
gia para reforzar su programa -y el de él también-o Encuentra,
incluso, un aliado utilísimo que estaba fuera de circulación,
Nadson, con su lago de sal ruso y sus bacterias devoradoras de
azufre de 1924.
McKenzie tiene un gran aliado potencial en FoIl<, que está
promocionando las nanobacterias. ¡Si hay algo de lo que los
bacteriólogos de primera línea no quieren ni oír hablar es de
petrología sedimentaria! A McKenzie le va a costar algo más
que lUlas Olantas palabras conseguir que la eSOlchen. El siguien-
te paso es convencer a alguien de que haga una secuenciación